Ninf�mana precoz
Hola, soy Tatiana tengo 19 a�os y desde los 13 empec� a tener
relaciones. Todo empez� en mi barrio aqu� mismo en Manizales, Colombia yo era
para esa edad una ni�a con un cuerpo esbelto, cabello largo lacio te�ido de
rubio aunque en la ra�z de mi pelo se me empezaba a notar el color original, mis
ojos color caf�, mis pechitos apenas empezaban a notarse y mi cuerpo todo era
como dicen ac� �graciosudo� pero bien distribuido para resaltar mi figura.
En mi barrio viv�a un chico ocho a�os mayor que yo cuando nos
conocimos hubo atracci�n inmediata su nombre es �lvaro se encontraba ya en la
universidad, �l me visitaba a la casa cuando estaba solita o acompa�ada de mi
hermanita menor yo usaba siempre la ropita propia de estar en casa una camiseta,
tenis rosaditos y calcetines del mismo color y una de mis pantaloncitos de licra
ya sea negro o tambi�n rosado.
Fue al mes cuando nuestros acercamientos pasaron de ser
sonrisitas, besitos en la mejilla y temas banales a tocamientos por parte de �l
ya m�s atrevidos y yo para la �poca por mi edad apenas si les daba importancia.
Fue un domingo estando sola en casa en la tarde cuando �lvaro
se present� yo con mi habitual vestuario de casa lo deje pasar empezamos a
hablar en el sof� muy juntitos cuando me empez� a rozar mis mejillas y hablarme
con voz suave dici�ndome que me piensa mucho, que cada vez la tiene tiesa cuando
fantasea conmigo y que se viene cada noche o en cualquier momento cuando se la
est� cascado (masturbando), yo por supuesto no sabia a que se refer�a a�n as�
perturbada por no saber que hacer el me empez� a acariciar mi piernita izquierda
y su cara muy cerquita de la m�a.
�lvaro me ten�a aprisionada al rinc�n del sof� cuando empez�
a darme besos m�s apasionados en mis mejillas mientras me dec�a lo linda que soy
con ese cuerpo de hembra que ten�s y cosas por el estilo mientras yo me dejaba
hacer sintiendo miedo porque estaba experimentando sensaciones que antes no
sent�a me comenzaba a gustar aquello por lo que yo me dejaba que me tocara y por
primera vez besar a un chico en la boca y su mano ya acariciaba mi vulva por
encima de mi pantaloncito.
Me sent�a extra�a pero a la vez me gustaba, sus besos se
hicieron cada vez m�s intensos y su lengua ya irrump�a en mi boquita mientras su
mano me acariciaba no solo mis muslos de ni�a sino que pasaba sus dedos grandes
por mi vajinita y la entrada de mi culo y yo trataba de mantener mis piernas
cerradas sin saber que hacer pues �lvaro dominaba la situaci�n y yo no quer�a
arruinar este momento.
Despu�s de 20 minutos estando en aquello, �lvaro se
desprendi� de m� se levant� del sof� y se quit� la camisa mientras al fondo
sonaba la radio con la previa al partido de f�tbol que disputar�a el equipo Once
Caldas con otro rival que no recuerdo en el estadio de la ciudad.
Fue entonces cuando �lvaro me dijo que si ya hab�a visto un
pene y yo le conteste que no aunque le dije que una vez en el ba�o de abajo por
accidente alcanc� a ver algo del pene de mi papi cuando estaba orinando y cuando
me vio cerr� la puerta fue lo �nico que hab�a visto hasta ahora.
Pues lleg� la hora que conozcas el pene de un hombre - me
dijo.
Pues mi mami me dijo que los hombres tienen algo que les
cuelgan de entre las piernas llamado pene y que es por ah� que hacen chich�
(orinan) y que se parece a una manguera.
Valla, valla; parece que tu mam� ya te ha dado clases de
anatom�a pero yo quiero que lo conozcas mejor Tatiana.
Y mientras �l abr�a su bragueta y yo mirando con mis ojos
m�s abiertos posibles y mi boca igual le dije que - mi mami me cont� aquello
cuando tuve mi primera mestruaci�n -en aquel momento no repar� que �l era
hombre y cuando le confes� eso me tap� la boca con mis manos sabiendo que le
hab�a contado algo muy �ntimo.
�lvaro visiblemente sorprendido me pregunt� cuando fue
aquello y sin m�s remedio le cont� que apenas dos meses y medio; aquella
revelaci�n parece que produjo su efecto porque vi en sus b�xer un pronunciado
bulto cuando sus pantalones ya estaban en sus pies.
Tatiana, sabes que me gustas tu cuerpo es divino a
pesar que apenas tienes 13 y quiero que ahora que empiezas a hacerte mujer
conozcas realmente para que sirve un pene.
Y sin m�s pre�mbulos se los baj� mostr�ndome una cosa
grande y parada hacia arriba mientras �lvaro se pasaba su mano acarici�ndosela
de arriba abajo mientras yo estaba paralizada viendo aquello con mi cara de
asombro y mi boquita totalmente abierta no dando cr�dito a lo que ve�a.
Se acerc� a mi y con voz firme me dijo que se la tocara y
yo quieta por lo que �l tom� mi mano m�s pr�xima y la llev� a su pija para que
la palmara; en aquel momento me sent�a muy h�meda entre mis piernas y un
hormigueo invad�a mi cuerpo me di cuenta que estaba reaccionando a aquello por
lo que mi mano se restregaba en aquel miembro que me parec�a poderoso.
Despu�s de un rato de hacerlo con la ayuda de �l se puso al
frente m�o mi carita apenas estaba a centrimetos de aquella cosa y �lvaro
empez� a acariciarme mis nacientes pechos mientras me empujaba hacia su cosa
logrando que tocara mi cara, luego con una de sus manosas �l me restriega su
pene en toda mi carita mientras su otra mano me tiene cojida del cabello
impidi�ndome soltarme.
Aproximadamente esto dur� como 10 minutos mal contados para
dar luego un paso hacia atr�s y empezar unas fren�ticas sacudidas teniendo su
pene en su mano en forma de pu�o enroscado alrededor de su cosa mientras
miraba todo aquello y mi cara embadurnada de algo brilloso que me dej� la
restregada de su falo y aquel olor de su pene.
Cuando se vino dio un grito como de gemido y salieron
disparadas gotas de un liquido caliente que impregnaron toda mi cara y parte
de mi pelo y una que otra gotita que entr� a mi boquita mientras me dec�a que
no me moviera.
Despu�s de un largo rato sentados en el sof� de mi casa
reponi�ndonos de lo hecho �lvaro se visti� y me orden� que me lavara la cara y
me quitara los restos que tenia en mi pelo largo y limpiara el sof� y tambi�n
me dijo que no comentara esto con nadie para volver a repetirlo.
Ya eran casi las seis de la tarde el partido de f�tbol ya
hab�a terminado y mis padres y hermanita acababan de llegar de su paseo donde
no quise acompa�arlos.
Espero le les haya gustado, hasta la pr�xima para
contarles como fue mi primera vez.