DIA 1

Como todos los a�os manela, los ni�os y yo nos dirigimos a la
zona costera de alicante para pasar nuestras vacaciones veraniegas en el
complejo tur�stico de punta azahar.

Este es un lugar apartado rodeado de monta�as y preservado,
con zonas arboladas junto a la playa y largas dunas arenosas q confer�a un
paisaje agreste y casi virgen, el entorno se parec�a a las playas antillanas con
arena blanca y fina y debido a su configuraci�n y a su longitud s� tenia una
sensaci�n de playa privada, pues debido a la orograf�a de la zona solo s� tenia
acceso a ella por las instalaciones del complejo tur�stico, y este solo admit�a
el paso a los residentes del mismo.

Debido a esta configuraci�n particular, los promotores del
complejo lo dedicaron al naturismo. Este estaba formado por un edificio
residencial destinado a hotel y servicios comunes y bungalow desperdigados por
todo el terreno del complejo, estos �ltimos, independientemente de su mayor o
menos amplitud, eran de planta baja y dispon�an de jard�n propio y estaban
agrupados en grupos de 6 dando el aire de un peque�o poblado en medio de la
naturaleza.

Los veraneantes del mismo eran de diversas nacionalidades,
preferentemente alemanes y holandeses, la colonia nacional era minor�a, pero en
los �ltimos a�os esta hab�a crecido suficiente para poder hacer amistades sin
ser un pol�glota avanzado. La configuraci�n estaba formada en su gran mayor�a
por grupos familiares, parejas sin hijos y en menor medida por personas solas,
tambi�n hab�a grupos de j�venes.

Al ser clientes asiduos desde la inauguraci�n del complejo,
establecimos una relaci�n de amistad con el equipo directivo y con el personal q
a�o tras a�o atend�a a los veraneantes, esto nos daba una prioridad en la
reserva del mejor bungalow y como casi a escoger los vecinos, la direcci�n del
mismo procuraba distribuir a los clientes de forma variada, es decir, no
concentraba a usuarios de la misma nacionalidad ni a solo parejas o grupos
familiares, esto configuraba a cada grupo de bungalow de una vida interesante.

Este a�o al llegar nos comentaron q en nuestro grupo hab�a un
grupo alem�n de seis chicas, unos reci�n casados italianos, una familia
americana de viaje por Europa con tres hijos sobre la veintena, tres parejas
francesas, una pareja espa�ola y nosotros, como siempre nuestro bungalow es el q
estaba encima del acantilado con vistas a la playa en direcci�n sur-este con
jard�n en su parte delantera y trasera, este era el �nico con doble jard�n y con
vistas.

Una vez formalizados los tr�mites de admisi�n nos dirigimos
hacia nuestra residencia de las pr�ximas tres semanas.

Como suele ser habitual el perfil de los nudistas suele ser
abierto y en todos los a�os nunca he vistos enfrentamientos ni discusiones y si
muchas barbacoas compartidas con el resto del poblado y amistades incipientes.

Despu�s de conocer a nuestros vecinos q no estaban en la
playa nos dirigimos hacia nuestra caba�a para acomodarnos y preparar la comida,
el resto del DIA transcurri� en guardar el resto de equipaje conocer al resto de
vecinos y retornar el veh�culo al exterior del complejo, pues este es peatonal.

Al ser los �nicos de habla hispana estuvimos conversando con
nuestros vecinos que resultaron ser de Madrid, eran de nuestra misma edad y
congeniamos mas q con el resto, julia y carlos eran una pareja muy amable y
educada y quedamos para ir a la playa el d�a siguiente.

DIA 2

Corr�an las 10 de la ma�ana cuando son� la campana de nuestro
bungalow, era julia q venia para ver si nos faltaba mucho para bajar, nosotros
est�bamos terminando de dar el desayuno a los ni�os y preparar las bolsas, como
ellos lo ten�an todo preparado se ofreci� para dar el resto de desayuno a los
ni�os mientras nosotros prepar�bamos las toallas, cremas y los cacharros de
juegos de los ni�os.

En la playa nos situamos en una zona entre dos dunas de arena
q nos daba un aire de privacidad y con vista al resto de la playa y al mar all�
los del servicio de playa nos trajeron 4 tumbonas y dos paraguas para
protegernos del sol, a nuestra derecha a unos 30 metros hab�a el grupo de
alemanas y a la izquierda el grupo de matrimonios franceses, estos estaban casi
en treintena y las alemanas por los veintitantos.

El d�a transcurri� placidamente jugando con los ni�os tomando
ba�os y charlando de todos los temas imaginables, en una de estas conversaciones
manela y julia descubrieron q una de sus principales aficiones era el footing y
todo tipo de deportes, las dos asist�an al gimnasio a diario y estaban en buena
forma.

En uno de los ba�os nosotros nos quedamos en las tumbonas
mientras ellas jugaban en la arena con los ni�os, la conversaci�n transcurr�a de
forma trascendental hasta q paso por delante nuestro el grupo de alemanas, y
claro, comentamos sus f�sicos y lo macizas q estaban, a partir de este momento
la conversaci�n derivo en mirar a todos los transe�ntes...femeninos q pasaban
delante de nuestra duna particular....y casi sin darnos cuenta est�bamos
hablando del f�sico de nuestras respectivas parejas .....

Comparando sus figuras, primero de una forma prosaica pero la
conversaci�n nos llevo a temas mas particulares, como los pechos de una y otra
los hombros el culo y claro.....al final comparamos la zona pubica de una y
otra....... casi sin darnos cuenta nos quedamos callados analizando el tipo de
conversaci�n q hab�amos sostenido con una persona totalmente desconocida ....
Pero rompimos el hielo y nos quedamos riendo a gusto y dici�ndonos lo brutos q
�ramos.

Parec�a q el nivel de entendimiento al menos con enrique era
bueno y q julia y manela tambi�n lo ten�an....

Quedamos citados para cenar en el restaurante del edificio de
servicios a las 9 de la noche, nosotros contratamos a una canguro para vigilar a
los ni�os, la chica era una antigua conocida de otros a�os q trabajaba en la
nurseria del complejo tur�stico y q por las noches cuidaba ni�os de veraneantes,
as� de este modo hacia un sobresueldo y al vivir en el mismo lugar posibilitaba
q estuviera hasta altas horas de la noche.

La cena transcurri� en un ambiente muy agradable, la
conversaci�n fue continua y muy amena, pues se trataba de conocernos ampliamente
y la cosa funcionaba,..... julia tenia el mismo desparpajo q enrique y al poco
ya habl�bamos de temas picantes, todo hay q decirlo la bebida ayudaba a ello....

A la salida nos fuimos a un bar de copas al aire libre junto
a la playa en la q tambi�n hab�a una pista de baile, en aquella zona la playa
estaba iluminada y en la arena se organizaban diversas actividades, estas
estaban colgadas en la entrada del bar y eran de todo tipo: individuales,
grupales y tambi�n por parejas.

Nos sentamos en una esquina con vistas a la pista de baile y
a las actividades de la playa, en aquellos momentos se jugaba peque�o torneo
entre cuatro equipos de volley playa, mientras mir�bamos el juego bebimos
diversos combinados y salimos a bailar en diferentes ocasiones, mientras enrique
y julia bailaban manela me comento la conversaci�n de la tarde de julia y ella
en la playa.

Me comentaba q se sorprendi� cuando de golpe empez� a hablar
de su vida con enrique sus gustos en la cama y todo lo q a el le gustaba, y me
dec�a lo q seguramente en aquel momento nosotros dos, enrique y yo, est�bamos
hablando de las chicas de la playa, dec�a q enrique no deja a ninguna sin
repasar de arriba abajo y evaluar su cuerpo respecto a ella.

La sinton�a entre nosotros crec�a ya que en casi todas
nuestras afirmaciones y comentarios est�bamos de acuerdo casi al 100%, al final
de aquel d�a de playa las dos parejas est�bamos mas pr�ximas q cualquier otras
parejas de conocidos q ten�amos en nuestra vida.

Dia 3

Al atardecer de ese d�a y antes de ir a preparar la cena nos
dirigimos al edificio central de servicios para ver el programa de actividades
del d�a siguiente, era norma de la direcci�n de preparar actividades de diversos
tipos para el disfrute de todos los usuarios de las instalaciones tanto del
hotel como de los bungalow, estas actividades consist�an tanto de tipo
recreativo como competitivo.

En el tabl�n de anuncios se nos indicaba q al d�a siguiente
se desarrollar�an unas competiciones por equipos y de forma individual en el
cual primaban la rapidez y la fuerza de los participantes, as� mismo se
organizaba para ultima hora de la tarde un partido de rugby femenino en la
playa.

Estas actividades eran, de momento las habituales de cada a�o
y siempre resultaban entretenidas, como novedad de este a�o hab�an introducido
unas competiciones de lucha, tanto competitiva como de recreo.

Una de las pruebas consist�a en derribar a la contraria,
ambas contendientes estaban subidas encima de una tabla de unos 40 cent�metros
de anchura, esta tabla esta suspendida a una altura de unos dos metros y la
ca�da se produce en una Cienaga de barro liquido, como arma se usa una barra de
madera de 150 cm. de largo en que sus dos extremos est�n forrados de espuma
haciendo la forma de una pelota de b�squet, para derribar a la contraria se le
puede golpear en cualquier parte del cuerpo, la competici�n se organiza por
parejas y la ganadora o ganador pasa a la siguiente ronda.

Otra de las novedades es que una vez desmontada la pasarela
se organizan luchas en la Cienaga de barro liquido tanto para mujeres como para
hombres, tambi�n pod�an ser mixtas y se pod�an formar equipos, como la ci�naga
era de dimensiones considerables se pod�a dar cabida a mas de una pareja de
competidores para la lucha por equipos.

As� mismo se anunciaba, en caso de suficientes participantes
unas veladas de boxeo en la playa.

Mientras est�n leyendo la programaci�n, Jaume ve como Enrique
se para en el cartel anunciador de las luchas en barro, por lo que, acerc�ndose
le comenta que si le gustan las luchas

Enrique le contesta que es un aut�ntico apasionado y que como
en casi todos los lugares de naturismo suelen organizar eventos similares, Julia
suele participar, ya que no son para nada violentos, aunque si muy competitivos
y calientes.

Jaume le comenta que a ellos les ocurre igual y que Manela es
toda una campeona, habiendo quedado bastante bien situada en algunos de los
campeonatos en los que hab�a participado.

Ambas mujeres se acercaron a ver que estaban comentando sus
maridos tan euf�ricamente.

Ambas mujeres se miraron, conscientes de que sus maridos ya
estar�an planeando un encuentro entre ellas, por lo que se valoraban y valoraban
a la casi segura rival, que parec�a prometer un caliente y excitante, a la vez
que re�ido combate.

- �por qu� no os apunt�is al concurso de lucha?, coment�
Enrique

- si, a lo mejor hay suerte y os toca emparejaros y podemos
disfrutar de un buen espect�culo

- yo s� me voy a apuntar, y tu Manela, inquirio julia

- por supuesto, le respondio

Ambas mujeres fueron a la mesa donde hab�a una lista para
apuntarse y comprobaron que muchas mujeres del recinto se hab�an apuntado, lo
cual era normal, ya que sol�a ser un espect�culo bastante excitante.

Cuando ya se hab�an apuntado, Enrique propuso que, teniendo
en cuenta el n�mero de participantes, era posible que no se enfrentaran, por lo
que pod�an realizar una lucha m�s privada, esa misma noche, en la cala donde
sol�an bajar, ya que habr�a luna llena y la visibilidad ser�a suficiente para un
excitante combate.

Ambas mujeres acertaron encantadas y se fueron a buscar a la
canguro para que esa noche se hiciera cargo de los hijos de ambas familias.

Mientras ambas mujeres acomodaban a los ni�os en la casa de
enrique i julia y daban las ultimas recomendaciones a la canguro, enrique y yo
nos dirigimos a nuestro bungalow para llenar una cesta con algo de bebida y unas
toallas para un ba�o posterior.

Realizadas ambas tareas el grupo se reuni� en la entrada del
camino que descend�a hacia la playa, y una vez all� se dirigi� hacia una zona
apartada para tener mas intimidad, el grupo caminaba en silencio como si no
quisieran ser descubiertos.

Tanto enrique como yo hab�amos tomado de la mano a nuestra
respectiva pareja y las miradas denotaban una ansiedad as� como tambi�n un poco
de miedo a lo desconocido, aunque ambas mujeres hab�an luchado en otros
combates, este parec�a reunir una especial caracter�stica, pues la ganadora
tendr�a una especial influencia sobre su contrincante.

Las normas del combate no hab�an sido acordadas, pero tanto
julia como manela deseaban que la victoria o la derrota fuera incontestable, al
momento enrique indico un peque�o valle rodeado de dunas que hac�an como un
circo romano, el resto del grupo estuvo de acuerdo con el emplazamiento y se
dirigieron hacia el.

En el centro de las dunas ambas mujeres se colocaron una
delante de la otra separadas por unos metros, como si estuvieran en un
hipot�tico ring. Julia nos indico que hab�a hablado con manela sobre una serie
de reglas y las empez� a enumerar.

Evidentemente luchar�an desnudas y ganar�a la que provocara
el abandono de su contrincante mediante la sumisi�n o la imposibilidad de seguir
en la lucha, no se aceptar�a la rendici�n proveniente de su pareja.

No habr�a humillaci�n por parte de la ganadora sobre su
contrincante, todo tipo de golpes y presas estaban permitidas excepto los pu�os
en la cara y la arena en los ojos.

Enrique quedo sorprendido por las reglas acordadas pues julia
era mujer de luchas mas er�ticas, y aquello podr�a transformarse en una peque�a
batalla campal, yo por mi parte quede dubitativo de si manela seria capaz de
ganar a una mujer que la superaba en todos los aspectos, altura, peso, juventud
etc.

Sin tiempo a poder objetar nada a sus reglas ambas mujeres se
desprendieron de las camisetas y pantaloncitos que llevaban sobre su cuerpo se
abrazaron y besaron con sus respectivos compa�eros y se dirigieron una hacia la
otra con �nimo de empezar la lucha.

Juntaron sus manos en lo alto de sus cabezas en busca de una
prueba de fuerza, en esta posici�n dan vueltas a su alrededor en busca de una
fallo de la contraria y as� poder someter a su fuerza y tener un poco de
superioridad.

En un movimiento r�pido manela suelta la mano derecha del
brazo de julia y lo voltea alrededor del cuello de esta, esto se sigue por un
giro del cuerpo de mi esposa d�ndole la espalda a su contrincante y forz�ndole a
pivotar sobre sus pies y quedar sometida a un abrazo de cuello doloroso.

Para dar mas presi�n, manela estira su cuerpo hacia atr�s,
cerrando su abrazo ayudado por sus dos manos, julia esta incomoda e intentar
zafarse del abrazo, andando por la arena del improvisado ring, pero manela es
una experta y le sigue a donde julia quisiera ir, pero sin detener la presi�n en
el cuello de su contrincante.

Manela cambia de posici�n y ahora se vuelca hacia delante,
obligando as� a julia torcer su espalda igualmente hacia el suelo en una
posici�n incomoda, adem�s hace un rato q se ha parado e intenta resistir el
embate de manela de la mejor forma posible.

En esta posici�n manela da peque�os saltitos sobre la arena
para cerrar mas fuerte la llave, la posici�n de julia se complica pues ahora
esta totalmente perpendicular al suelo, con sus tetas y brazo totalmente
colgantes en una postura de sumisi�n total.

Desde hace unos segundos julia implora a manela q cese en su
castigo a sus cervicales, pues adem�s del dolor esta a punto de perder el
conocimiento debido al ahogo, manela le responde que si lo deseas de verdad pues
que se rinda�. a lo que julia constesta que no esta dispuesta a rendirse.

Llegados a este punto manela vuelve a cambiar de t�ctica y
lanza una patada hacia atr�s y golpea en el tobillo de julia, esto hace que esta
pierda el equilibrio y caiga de bruces al suelo, manela le sigue en su ca�da
pero suelta la presa en el cuello de su contrincante y se sienta sobre sus
espaldas.

Julia esta totalmente dominada y no ofrece casi resistencia a
los movimientos de manela, esta le recoge los brazo por detr�s de sus hombros y
los fuerza hacia atr�s con una sola mano, mas tarde la voltea por encima de sus
piernas y le aplica una llave con sus muslos sobre la zona abdominal.

Julia vuelve a quejarse del dolor de las tijeras que le
aplica manela y renueva sus peticiones de suplica, manela como respuesta y con
su mano libre agarra el pez�n mas cercano y lo estira mientras con los dos dedos
lo estruja.

Julia a�lla de dolor y lanza insultos hacia mi mujer que como
respuesta le da un bofet�n en la teta derecha de julia, esta se retuerce y le
sigue insultando, el castigo sobre la teta sigue alternando el estiramiento y
compresi�n del pez�n con las palmadas sobre la misma teta.

Al un�sono manela comprime m�s y m�s las tijeras que tiene
cerradas sobre el abdomen de su rival, julia nota como las fuerzas le abandonan
y le cuesta llenar de aire sus pulmones, por lo que la respiraci�n se le vuelve
m�s costosa.

Viendo el abandono de su rival manela afloja la presa de los
brazos dej�ndolos libres mientras sigue apretando con sus piernas el abdomen de
su pobre contrincante, esta moment�nea libertad da un peque�o respiro a julia,
pero de momento no lo aprovecha y decide recuperar la sensibilidad en sus dos
hombros totalmente dormidos por la llave.

Contenta con su dominaci�n y viendo la pobre respuesta a la
libertad de brazos de julia, manela decide cambiar de posici�n, afloja un poco
la presi�n de sus muslos y se dedica a acariciar de forma ostensible las tetas,
esto molesta un poco a julia, pero como ventaja puede recuperar un poco el ritmo
de la respiraci�n, adem�s se da cuenta de que su falta de agresividad hace que
manela se conf�e y afloje el castigo sobre su cuerpo y le de mas libertad de
movimientos.

Esta aparente inactividad de julia hace que manela se dedique
a magrear todo el cuerpo de su rival, pero no se da cuenta de q esta est�
recuperando el control de respiraci�n y la de los m�sculos q estaban
adormilados.

Julia, inteligentemente, deja q manela siga con el repaso
general de su cuerpo aunque algunos movimientos de manela no resulten del todo
agradables, mi mujer se dedica a pellizcar cualquier parte del cuerpo de su
rival, su pechos, pezones, axilas, barriga, cl�toris, labios vaginales, parte
interna de los muslos etc.

Julia intenta no revelar q su estado esta mejorando y aguanta
la masturbaci�n que manela le esta propinando con dos dedos dentro de su co�o,
el movimiento es r�pido y profundo lo que causa q julia lance algunos gritos de
placer�. Pero no esta dispuesta a dejarse ganar de esta forma.

En su confianza manela gira su cuerpo para atender de mejor
manera el co�o de julia, y es en este movimiento que tu mujer ve el inicio de su
venganza.

Pero su situaci�n no es de momento obtima para grandes
ataques, por lo que decide dejarse masturbar y gozar del momento, pero teniendo
muy presente cual es su objetivo final, retornar todo el dolor sufrido en el
ataque de manela

Manela se ha puesto de rodillas con el cuerpo de julia entre
ambas dandole la espalda y apoyada con la mano izquierda mientras que con la
derecha perfora el co�o de tu esposa, para dar mas velocidad de penetraci�n
manela dirije sus dedos a la boca de su rival y le obliga a untarlos con su
propia saliva, para posteriormente seguir con la penetraci�n.

Con esta vaselina natural el ritmo de folleteo es r�pido y
eficaz, esta eficacia queda demostrada por los murmullos de placer que julia
deja escapar de su boca, de vez en cuando manela saca sus dedos y aplica su boca
sobre los labios vaginales de su oponente.

Pero en vez de lamer el co�o se dedica hacer el vacio y a
estirar hasta el limite los labios de julia, ademas se dedica a mortificarla con
peque�os mordiscos, este movimiento se repite durante varios minutos, minutos
que llevan a julia al inicio de un placentero orgasmo.

Para mostrar mas su presunto sometimiento, julia dirije sus
dedos hacia el co�o mojado de su oponente y le aplica unos suaves movimientos
circulatorios por la parte exterior de los labios vaginales, esta acci�n da sus
frutos y manela empieza a lanzar peque�os gemidos de placer y se abandona
totalmente a su propio placer.

Al cabo de unos minutos julia considera que ya est� llista
para su ataque y aprovecha que la posici�n del cuerpo de manela le deja
totalmente expuesto el co�o.

Circunstancia q julia aprovecha, para con un r�pido y feroz
movimiento agarra y tira con fuerza del pelo pubico de manela, manela queda
paralizada ante el profundo dolor que emerge de todos y cada uno de los
capilares de su co�o que est�n siendo estirados, casi arrancados de cuajo por su
rival.

Esto hace que saque los dedos del co�o de julia y dirija sus
dos manos hacia la mu�eca de julia para intentar disipar su intenso dolor, en su
intento desesperado agarra con fuerza la descrita mu�eca pero no consigue que
julia suelte la presa, es mas, estira con mas fuerza los pelos hacia el exterior
del co�o.

Manela grita injurias incalificables hacia su contrincante y
intenta clavar sus u�as en la mu�eca de julia, esta viendo la situaci�n apurada
de su rival le suelta los pelos del co�o y se incorpora de rodillas por detr�s
de la espalda de manuela.

Manela en un acto reflejo tapa con sus dos manos su castigado
co�o, esto es aprovechado por julia para con sus manos agarrar las mu�ecas de
manela y voltearla sobre su espalda, por lo que ahora la cabeza de manela queda
frente al cuerpo de julia.

Manela sigue colapsada y julia se levanta y sit�a sus pies
por junto a la cabeza de manela pis�ndole el pelo, posteriormente se agacha y
agarra con ambas manos sus pezones estir�ndolos al m�ximo obligando a su rival a
arquearse sobre su espalda no pudiendo escapar debido a la presa del pelo.

El dolor en los pechos es hiriente y le deja un calor
insostenible, esta agarra con sus manos las de julia e intenta arrancarlas de
sus maltrechos pechos, pero su rival logra alzarla unas cinco veces mas,
estirando hasta casi el limite las tetas de manela.

Al final le suelta las tetas y da la vuelta alrededor de
manela hacia sus pies, los eleva y le planta el pie izquierdo directamente sobre
el co�o de manela, refreg�ndolo de arriba abajo y presionando el cl�toris con la
planta del su pie.

Manela esta totalmente dominada, solo puede atender a
cuestiones defensivas, y no tiene tiempo ni fuerzas para pensar en como intenta
frenar a julia, lo �nico que puede es insultarla para que deje sus presas y
pueda rehacerse un poco.

Pero julia no parece dispuesta a dejarse intimidar por los
gruesos insultos de manela, adem�s a cada insulto presiona con m�s fuerza su pie
sobre el co�o de su rival. Manela esta que se sale, el dolor de su co�o hace que
se le paralicen los pensamientos y los m�sculos de su cuerpo est�n como sus
pensamientos, solo intenta mediante sus manos retirar el pie de julia, pero su
baja forma f�sica le impide elevarse con sus abdominales.

Julia remueve su pie en la parte pubica de manela, y para
hacer mas presi�n se eleva apoy�ndose en las plantas de los pies de manela que
tiene las piernas alzadas en un �ngulo de 90 grados respecto a su cuerpo,
dejando q todo su peso repose sobre el co�o de mi mujer.

Manela llama vaca gorda a julia, y aun siendo en parte
verdad, esto exaspera a tu mejer que empieza a lanzar improperios contra manela,
dici�ndole q no podr� follar en tiempo y q veremos quien es mas vaca de las dos.

Dicho esto levanta el pie del co�o y lo hunde de tal�n en el
centro de la barriga mantecosa de manela, esta lanza un alarido y se levanta
como impulsada con un muelle, mientras se eleva recibe con el mismo pie un
fuerte golpe en el centro de las tetas que la retorna de espaldas al suelo.

Julia esta como ida, no para de insultar a manela mientras le
endosa otra patada en el centro de la barriga, esta a diferencia de la anterior
no tiene fuerzas para levantarse, pero lanza un ag�nico grito de dolor mientras
q con la boca abierta al m�ximo busca el m�ximo de aire para sus pulmones.

Mientras julia mueve el pie por la barriga como si apagara un
cigarro en el suelo, manela sigue con sus improperios hacia su rival, al mismo
tiempo que lanza peque�os lamentos por el trato que recibe, al cabo de unos
segundos retira el pie y con las manos abre mas las piernas de manela al tiempo
que la amenaza:

Al mismo tiempo se deja caer con todo su peso encima de
manela, aterrizando en primer lugar con sus rodillas encima del co�o abierto de
manela, esta solo puede abrir la boca como un pez pero de ella no sale ning�n
sonido, del fuerte impacto manela se ha levantado como impulsada de nuevo por un
muelle, julia a causa de su inercia tambi�n se ha impulsado hacia delante, por
lo que las dos cabeza chocan a mitad de camino con un gran estruendo, como si
dos cocos chocaran a gran velocidad.

En este choque la peor parta de la ha llevado julia pues ha
chocado de bruces con la frente de manela y queda aturdida en el suelo, mientras
manela esta echa un ovillo con sus manos enterradas en su co�o para disipar el
dolor.

Pasa el tiempo y ninguna de las dos se incorpora, julia
parece ausente, tiene sangre que le sale de su nariz, manela ahora se encuentra
sobre sus rodillas con la cara apoyada en el suelo y las manos en su co�o,
parece q el choque no la ha afectado pero tiene suficiente dolor acumulado para
mucho rato.

Pasan los minutos y julia esta sentada sobre su culo con las
manos en su nariz hay peque�o hilos de sangre en sus pechos pero la hemorragia
parece que esa parada, y su nariz esta bien.

Llevamos cinco minutos desde el choque de locomotoras y
parece q las dos van incorpor�ndose al mundo de los vivos, julia es la que se
recupera con m�s r�pidez y se levanta sobre sus piernas, primero se tambalea
pero al final puede mantenerse en pie, su aspecto es feroz.

Tiene todo el pelo revuelto su cara y sus manos est�n
ensangrentadas y su cuerpo parece una croqueta rebozada de arena y su cara esta
como pose�da.

Tambaleante se dirige hacia manela y la intenta alzar
agarrandole el pelo.

Con el pelo en una mano la alza del suelo y la medio
incorpora sobre sus rodillas y se dispone a asestarle un bofet�n en su cara,
pero la rabia es mala consejera y julia no se apercibe de que manela no esta tan
desecha como parece y mientras alza la mano para golpearla mi mujer, sacando
fuerzas de flaqueza, le endosa un pu�etazo en el todo el co�o.

Julia queda sin habla y paralizada por el dolor, con las
piernas abiertas y la mano alzada como una estatua, manela le lanza un segundo
pu�etazo al co�o y esta vez julia grita y se cae en la arena junto a manela.

Las dos est�n una junto a la otra, rendidas y extenuadas,
ambas est�n con sus manos en sus co�os, me parece que estaremos sin follar una
buena temporada.

Viendo que la lucha no ha dado ninguna ganadora clara y que
se ha salido un poco de madre, decidimos intervenir y damos por finalizado el
combate.

Mientras t� atiendes a las mujeres yo voy a buscar agua del
mar para limpiar la sangre y la arena de sus cuerpos.

A mi vuelta enrique esta explicando la situaci�n actual del
combate y les dice a las dos que por hoy ya hay bastante.

Las dos mujeres est�n totalmente de acuerdo en que la cosa se
ha desmandado un poco y est�n igualmente de acuerdo en dejar en tablas la lucha
de esta noche.

Tanto manela como julia se piden perd�n por los insultos que
se han propiciado y est�n de acuerdo en que esto no tiene q afectar a su
amistad, una cosa es la lucha para ver quien gana y la otra la enemistad para
siempre.

Al final las dos mujeres se unen en un fuerte abrazo y se dan
dos besos en la mejilla.

Julia comenta a manela lo empalmados que estamos tanto tu
como yo, y deciden darnos un alivio con sus manos pues sus co�os est�n un poco
inservibles.

No piden que nos levantemos y cada oveja con su pareja,
manela coge mi polla con su mano y empieza a restregarla por su cara hasta q al
final se la introduce en su boca y empieza un vaiv�n que me hace ver las
estrellas.

Julia no ha sido menos y tiene toda la polla de enrique
dentro de su boca mientras que con una mano le soba los huevos por debajo.

Los cuatro estamos hombro con hombro en un espacio reducido
de playa, y la visi�n de julia con la polla en su boca hace que este mas
trempado que nunca, lo mismo le pasa a enrique con la visi�n de manela q se
traga mi polla hasta el fondo de su garganta.

Las dos mujeres simultanean las mamadas con el frenes� de las
manos, cuando las pollas no est�n en su boca se miran una a otra para ver como
se trabajan los aparatos de sus maridos.

En esto julia se acerca a manela y le da un beso de tornillo
en la boca, beso este que es correspondido por mi mujer, como se�al de gratitud
manela le ofrece una chupada a mi polla cosa que julia reh�sa, pero a cambio
desplaza su mano libre al co�o de manela y lo soba con ternura.

Manela se eriza por el contacto de los dedos de julia y hace
lo mismo con los suyos dirijiendolos hacia el co�o de julia

En un principio, y dado el trato recibido por ambos co�os
(golpes, palmadas pellizcos y rodillazos), las caricias son mas dolorosas que
placenteras, pero cabe recordar que los da�os inflijidos han sido en la parte
externa y no la interna, por lo que los dedos de ambas se dirijen hacia el
interior de sus respectivas cavernas.

Al poco tiempo nuestras pollas est�n listas para correrse el
primero es enrique que derrama su leche por la cara y boca de julia, algunas de
estas gotas caen hasta sus tetas y algunas gotas salpican tambien los pechos de
manela.

Manela aparta la mano de julia y agarra la polla de enrique y
les da unos cuantos tirones para dejarla bien seca mientras dirige los chorros
hacia la cara de julia, mientras me sigue masturbando con su otra mano libre.

Con la visi�n de manela y nuestros respectivos aparatos en
sus manos empiezo a correrme, manela se apresura a no dejar que ninguna gota se
escape de su boca, hasta que al final se le sale por rebosamiento, momento este
en que se gira de nuevo hacia julia y les estampa un beso con toda mi leche en
su boca.

Julia se abraza a manela y no le hace ascos al beso h�medo
que esta le proporciona, enrique esta perplejo de ver como su mujer se da el
lote con la leche de un desconocido, las dos mujeres siguen con sus bocas unidas
mientras se soban por todo su cuerpo.

Las dos siguen de rodillas y sus manos est�n respectivamente
en co�o ajeno, mientras nosotros aprovechamos para magrear las tetas de nuestras
parejas.

Mientras se masturban de forma �gil se giran y vuelven
engullir por poco tiempo nuestras pollas en sus bocas, ahora si que ambas han
realizado un peque�o intercambio y cada boca tiene una polla ajenas en su
interior, esto solo dura un par de chupadas, pues empiezan a tener convulsiones
preorgasmicas.

Las dos siguen de rodillas apoyando su cabeza una sobre el
hombro de la otra mientras sus dedos se encargan de proporcionar un dulce
orgasmo a cada una de ellas, al final caen rendidas a nuestro pies.

Los cuatro quedamos tendidos sobre la arena mientras nos
recuperamos de nuestros respectivos orgasmos.

Al cabo de un rato de estar en silencio sobre la arena a la
luz de la luna decidimos retornar al centro de vacaciones, eso si las dos
mujeres andan un poco espatarradas por el efecto de los golpes en sus co�os.