Relato: Feromonas (3)



Relato: Feromonas (3)

Feromonas 3


Llego a la factoria, bajo del taxi despues de abonar la
carrera y se dirigio a la barrera donde dos vigilantes jurados "acumulaban
horas".


- Hola, buenas tardes.


- Buenas tardes Luis. �que haces por aqui a estas horas?


- Tengo que darle un sobre al Mister, se que no esta, pero si
no vengo el Tirano despues me pule.


- Vaya que si....... �te has caido en un charco de mierda?.
hueles mal y todo....... �que te ha pasado?


- Que me han intentado robar....... - La pelicula que le
conto Luis al Rambo de la puerta lo dejo con los ojos abiertos, su compa�era,
una rubia de pelo ondulado y ojos azules que habia tirado de casa al manta del
marido, a golpe de porra, hacia unos meses, tenia mas tablas y con cara de poker
opto por callarse.


- Pues menuda historia..., puedes decir que has tenido
suerte. �Porque no acompa�as a Luis hasta las oficinas y me quedo yo un ratito
en la barrera y de paso te tomas un cafe?


Vilma sabia que "Rambo" queria quedarse solo un buen rato, se
estaba acercando la hora en que las trabajadoras de una empresa textil cercana
salian y habia una morenita que le encantaba el que le contaran batallitas y
otras cosas. De Luis hasta la fecha sabia que era una persona educada y
responsable de su trabajo, pero esos cabellos de tres tonos de color diferentes
que habia pegados a su chaqueta le decian que igual tenia algo que ocultar.


- Vale, quizas lo mejor es que se diera una ducha, �tienes
ropa en tu oficina?.


- Si, si que tengo, muchas gracias.


- Pues vamos para alla.


Se dirigieron a la puerta que daba acceso al bloque de
oficinas. A Vilma el trayecto se le hizo largo, el insoportable olor que emanaba
de Luis podia con ella, a Luis se le hizo mas largo por culpa del uniforme de
Vilma, una o quizas dos tallas mas peque�o...... no, no era eso, es que la mujer
estaba maciza, la ropa era de su talla, pero intentar ocultar ese par de tetas
dentro de la camisa del uniforme sin que se rompieran los ojales de los botones
era poco menos que imposible, Luis llego a la conclusion de que el pantalon se
lo ponia con un calzador pues el par de soberbios muslos, perfectamente
torneados, que soportaban las amplias caderas a juego con el respingon trasero
le producian calambres en sus inflamados testiculos. Su pene parecia tener vida
propia y cabeceaba como el de un burro en celo.


Despues de dejar el sobre encima de la mesa del Mister se
fueron hacia la oficina de Luis.


Un par de puertas antes de llegar Vilma se metio en la sala
de espera donde una maquina que decia ser cafetera y otras cosas ronroneaba.


- Aqui te espero..... y ponte guapo. - Por fin pudo respirar,
se sirvio un cafe y se dedico a ojear alguna revista.


Luis entro en su despacho y cerro por dentro con llave, sabia
que Vilma no le iba a molestar pero..., se quito la ropa y la introdujo dentro
de una bolsa de plastico pensando en tirarla a la basura, estaba irrecuperable,
se metio en el peque�o cuarto de ba�o con ducha, al que tenia derecho por su
cargo y abrio los grifos, mas por hacer ruido que por otra cosa, una vez el agua
empezo a correr por su cuerpo sus manos de forma automatica cogieron el tremendo
garrote que tenia entre las piernas y como si tuvieran vida propia masajearon el
pene en toda su longitud, cogio una pastilla de jabon y dandole la espalda al
chorro de agua enjabono concienzudamente el vastago que le martirizaba, la
lubricacion del jabon le permitia una mayor friccion sin riesgo de lastimarse,
se sentia bien, su mente le recordaba todo lo vivido esa tarde y antes de que se
diera cuenta, sin parar de masturbarse, espesos borbotones de semen salieron
despedidos contra la pared mientras que un orgasmo le hacia flaquear las piernas
y caer de rodillas en el angosto plato de la ducha, ante sus ojos el agua de la
ducha barrio el semen de la pared haciendolo caer al plato y de ahi al desag�e.


- Adios...... cabrones. - Musito, mientras una sonrisa se le
dibujaba en le rostro y una mezcla de relajacion y tranquilidad le embargaba por
completo.


Se puso de pie, aunque el hubiera preferido sentarse y
dormirse, y se lavo parsimoniosamente.


- Y ponte guapo - Fue un mazazo, la frase sono en su mente
como una explosion. Era guapa, estaba alli afuera, estaba esperandole y su
compa�ero parecia que tenia ganas de quitarsela de encima, miro en direccion a
su pene y alli estaba el medio morcillon, unas cosquillas le recorrieron el
vientre mientras que la idea se fraguaba en su cabeza, cogio una maquinilla de
afeitar desechable que habia al lado de la jabonera y obro en consecuencia. Ya
todo le daba igual, todo no...... queria follar y el remedio lo tenia en el
cajon de su escritorio, lugar poco seguro despues de lo que habia visto hacer a
Lola.


Cuando salio de la ducha era un hombre nuevo, cogio la ropa
que tenia dentro de un armario y se vistio sin prisa mientras que le daba
vueltas a todo, abrio el cajon y saco la caja que contenia las botellitas y el
sobre...... saco el papel del mismo y empezo a leerlo con tranquilidad.


Cuando acabo su rostro habia cambiado. - Esto es lo que pasa
por no leerse los manuales. - Penso en voz alta. - El sudor se carga el
efecto... vaya, vaya.


Guardo el papel y cojio el frasco que ponia para el,
perfumado, vertio un chorrito en la palma de una mano y se la froto con la otra
pasando a frotarse la cara y el cuello, lo poco que quedaba se lo paso por los
hombros y el pecho, una fragancia suave pero profunda invadio la estancia de su
despacho, repitio otra vez el proceso y guardo el frasco en su caja la cual fue
a parar al fondo de una taquilla, con candado, conecto el aparato de aire
acondicionado, la bolsa con la ropa sucia fue a parar al cuarto de ba�o y paso
las manos por el respaldo y brazos del sofa, dio la vuelta a la llave de la
cerradura para que se pudiera abrir desde el exterior, se sento detras de su
mesa y puso unos documentos delate de el, encendio un cigarrillo y se puso a
esperar.


Sabia que iba a ser suya, quisiera o no, era cuestion de
esperar y de nuevo una sonrisa se dibujo en su rostro acompa�ado de un hormigueo
y una semiereccion que lo decia todo.



No tardo ni diez minutos, una mano llamo a la puerta.
-�Luis?, �Estas bien?.


- Si, si, pasa por favor....... sientate en el sofa, son dos
minutos solo..... esto me lo tenian que haber traido esta ma�ana y me lo
encuentro ahora. Te ruego me disculpes la tardanza.


- No pasa nada hombre, total tengo que estar aqui hasta
ma�ana a las ocho.


- Si que haces horas, si. Por cierto �no te hechara de menos
"rambo"?


- Ja ja ja ja �como que "rambo"?, se llama Javi y no te
preocupes que hasta dentro de una hora por lo menos estara muy ocupado. "Rambo"
ja ja ja ja, mira que llamarle.... ja ja ja ja ja.


- Es que no sabia su nombre y como parece que se come a los
chiquillos crudos......


- Ese lo unico que se come crudo es...... hay lo que iba a
decir. Ja ja ja.


- �Quieres tomarte algo?, mientras acabo esto, o �me vas a
decir que estas de servicio?.


- Venga va, algo que me alegre el cuerpo.


- Chupito de whisky es lo que hay, hielo si que no tengo. -
Se levanto, saco dos vasitos y una botella de un cajon, camino sin prisas hacia
ella y puso los dos vasos sobre la mesa al mismo tiempo que se sentaba en el
sofa y abria la botella, sirvio los dos tragos y le ofrecio uno de ellos a
Vilma, quien cuando lo cogio rozo con sus dedos los de el notando un agradable
cosquilleo, cogio el propio y bebio un sorbo mientras pensaba: - "Vaya que si te
voy a alegrar el cuerpo".


- Por cierto, que te ha sentado bien la ducha, parecia que
venias de la guerra.


- Es que lo de esta tarde no tiene nombre, jamas me habia
pasado algo por el estilo.


- �Y quienes eran?, �los habias visto antes?. - Mientras
pensaba: "Es majo este hombre, no se que tiene....", "me lo comeria enterito".
Los ojos de ella empezaron a mirarlo de otra forma.


- Nunca las habia visto, eran cinco ni�atas de unos quince
a�os....... fue en el metro, pero mejor hablemos de otra cosa, lo de esta tarde
a sido muy desagradable. �Que me ibas a decir que se comia crudo Javi?, �es
secreto de estado? o �es algun pecado inconfesable?, venga cuentame.


- Lo que se debe de estar comiendo ahora mismito, una linda
jovencita que esta loquita por el, o por lo menos una parte de ella, se lo pasan
barbaro. - Puso cara de picara.


Luis se arrimo mas a ella poniendo el brazo estirado a lo
largo del respaldo del sofa quedando a escasos centimetros de su rostro y con la
sonrisa de quien sabe que ha ganado le miro a los ojos durante un momento, bajo
la mirada hasta el boton de la camisa de ella que mas peligraba y la volvio a
mirar a los ojos, descubrio la mirada de una hembra en celo esperando que el
macho de el primer paso.


Vilma noto como si unos dedos la acariciaran por donde Luis
pasaba su mirada, sus labios vaginales parecian haber engordado por momentos, de
hecho le molestaba la costura del pantalon.


- �Sabes que ese boton corre peligro?, esta a punto de
saltar. - Apuro su bebida y dejo el vaso encima de la mesa sin quitarle a ella
los ojos de encima, su mirada recorria toda la anatomia de ella. Vilma acabo el
contenido de su vaso y sin apartar la mirada de el, relamiendose los labios,
dejo caer el vaso encima de la mesa sin importarle mucho si se rompia o no, le
gustaba sentirse observada.


- �Te refieres a este?. - Y con un leve esfuerzo de una u�a
el boton salio de su ojal, dejando una peque�a abertura. Sus inflamados pechos
luchaban por romper la tela de la camisa, su corazon latia con fuerza y estos
latidos se transmitian a todas las partes sensibles de su cuerpo, que en ese
momento era toda ella, realmente estaba muy caliente.


Luis le puso la mano derecha en la mejilla acariciandola,
bajo su brazo izquierdo del respaldo del sofa y le paso la mano por la espalda
atrayendola hacia el.


- Creo que corren peligro todos. - Le dio un beso tierno en
la nariz, otro en la barbilla y finalmente poso los labios sobre los de ella que
esperaban anhelantes ese contacto. Luis bajo la mano derecha y fue soltando los
botones de la camisa que aprisionaban las tetas de Vilma, acabado este trabajo
introdujo la mano y torturo los abultados pezones aprisionandolos y
retorciendolos con suavidad pero con firmeza.


Vilma no sabia ni el como ni el porque, tampoco le importaba
mucho, habia llegado a tal grado de excitacion con un hombre al que hacia tan
solo un rato habria tirado a patadas de su lado, lo unico a lo que prestaba
atencion era a las exigencias de su cuerpo, este se encontraba revolucionado,
sus grandes pechos estaban hinchados, parecia que le habian crecido dos tallas,
tiesos, firmes, con los pezones a punto de explotar, casi le dolian, y le
gustaba, se libero del pesado cinturon y poniendose en pie contoneo las caderas
para asi poder quitarse los pantalones que molestaban sus dilatados labios,
labios dilatados y abiertos que dejaban al descubierto un clitoris erecto como
nunca, no entendia bien que le pasaba, nunca se habia sentido asi, se quito las
bragas respirando agitadamente, jamas se habia sentido tan hembra, perdio el
raciocinio y gano su parte animal, necesitaba al macho desesperadamente, sentia
que le faltaba algo, el agradable cosquilleo de anteriores relaciones se habia
convertido en una dolorosa sensacion de vacio en sus entra�as que debia llenar,
no importaba nada, solo importaba su necesidad animal de ser saciada, sin
miramientos, sin caricias, su dilatada vulva le asemejaba mas a una perra en
celo que a una persona, de esto Luis se dio cuenta, se quito la ropa tan
desesperadamente como ella, el asunto urgia.


Ella se arrodillo ante el, su macho, se dejaba llevar por su
instinto, cogio el semierecto pene y lo introdujo en su boca, nunca le habia
gustado hacerlo, esta vez tampoco, pero su cuerpo se lo pedia, su cuerpo sabia
que era la forma mas rapida de conseguir aquello que necesitaba y lo hizo, no lo
lamio, tampoco lo beso, eso eran tonterias, se lo introdujo hasta el final y
provocando el vacio mas profundo chupo a medida que lo sacaba, lo rozaba con su
lengua, su paladar y garganta, no lo mordio, sabia que si lo mordia podia hacer
da�o y su macho asustarse, solo chupo.


Luis noto la succion, le habian hecho alguna felacion en
alguna ocasion que otra, pero jamas habia sentido una verdadera succion como
esta, su pene se ponia tieso, duro, morado, el prepucio se le retraia solo hacia
atras y el glande quedaba al descubierto, indefenso, mientras el pene le crecia
hasta dolerle, no se lo creia, pero le estaba sucediendo.


Cuando la parte irracional de Vilma cosiguio su proposito, el
pene de Luis daba miedo.


Camino de rodillas hasta encontrar un sitio donde poder
agacharse dejando su humeda y abierta vulva completamente expuesta, miro a su
macho desde su posicion, con el culo completamente levantado y la espalda
arqueada, suplicandole con la mirada, moviendo las caderas y palmoteandose el
trasero para llamar su atencion y alli mismo, en el suelo, Luis se arrodillo
detras de ella, la cogio con ambas manos de sus generosas caderas, arrimo el
extremo ardiente de su pene a la entrada de su vagina y le introdujo bruscamente
su grueso glande.


- Aaaaaaaaaaahhhhhhh............ todo, lo quiero todo.......
hasta el fondo. - Suplicaba


El no estaba por la labor de acabar tan rapido y saco la
cabeza de su miembro para volver a metersela de un despiadado golpe de ri�ones.


-Aaaaaaaaaahhhhhhhhhhhhhhh......... metela........ metemela
toda. - Ella intento, con un movimiento brusco, introducirse el resto pero las
manos de el sujetaban sus caderas y se lo impedian. Volvio a sacar el miembro,
la vagina de ella era un manantial de flujos, estos goteaban por la parte
interna de los muslos de ella en una carrera hacia el suelo. La secuencia de
golpes de entrada y salida se repitio una vez mas....... y otra...... y otra,
cada vez mas rapido, haciendo que ella dejara escapar peque�os gritos de
satisfaccion, le daba un caramelo y apenas lo chupaba se lo quitaba. Disfrutaba
torturandola.


Vilma sentia que el ariete golpeaba certeramente en su
entrada vaginal, entraba y salia, vigorosamente, se sentia abierta, poseida,
cada vez que le golpeaba, pero cuando se retiraba la sensacion de desosiego
volvia y un profundo vacio se hacia mas latente. No era ella, definitivamente,
la que mandaba de su cuerpo, lo comprobo cuando sus piernas separaron mas las
rodillas, ella no lo habia decidido, aplasto los pechos en el frio suelo,
levantando mas su trasero, mientras sus brazos quedaron extendidos hacia
delante, clavando las u�as en el zocalo de la pared que tenia enfrente, su
cuerpo se dejaba dominar por los envites de Luis, enmudecio, solo unos gemidos
ahogados salian por su boca, la respiracion se volvio mas ritmica, queria
moverse pero su cuerpo se negaba, la sumision ya era completa.


El dardo entro, se quedo quieto un instante que le pareciero
una eternidad, noto como palpitaba, sentia su calido grosor, ese grosor que iba
penetrando lentamente, llenandola, noto como se abria paso entre las delicadas
mucosas de su vagina, siguio entrando, estirando todos los pliegues internos,
notaba el volumen del deseado invasor de su intimidad mas profunda y un
sentimiento de bienestar en sus entra�as se convirtio en un placentero gru�ido
que escapo de su garganta.


- Huuuuuummmmmmmmmm....... - Sus ojos se cerraron y una
sonrisa de satisfaccion se dibujo en su cara.


Luis quedo quieto unos segundos, con su arma completamente
enterrada en Vilma, ella apenas se movia, era de el, toda ella, saco un poco su
miembro y volvio a perderlo en la humeda cavidad arrancandole otro gru�ido de
satisfaccion, sin prisa, queria disfrutar de ese momento.


Las paredes de la gruta de placer, que antes habia abierto a
base de envites empezaron a cerrarse en torno a su pene y unas contracciones,
como oleadas, de fuera hacia dentro, estiraban de su pene, como si de una mano
se tratara, el cuerpo de Vilma no queria dejar salir al macho que tenia dentro,
esto produjo que el glande aumentara algo mas de tama�o y Luis empezo a sentirse
placenteramente atrapado.


No hacia falta que se moviera, se quedo quieto y comprobo
como era literalmente "tragado".


Las caderas de Vilma se movieron, primero despacio, iniciando
una danza ritmica acompa�ada de movimientos pelvicos que poco a poco fueron
aumentando de velocidad, el la dejo hacer, dejo de aguantarle de las caderas y
acariciandole la espalda enpezo un lento movimiento coital intentando coger el
ritmo de la danza, no tardo mucho, sus movimientos cada vez fueron mas largos,
el roce era deliciosamente camuflado por la gran cantidad de flujo que rodeaba
la perfecta union de ambos.


Las paredes vaginales de Vilma reaccionaron ante este roce
con nuevas, y mas fuertes, contracciones acompa�adas de sonidos incoherentes que
salian por su boca y el suave chapoteo que producian los testiculos de Luis al
golpear los mullidos e hinchados labios de ella.


- Chop..... chop..... chop.....


Luis, sin querer, acelero el ritmo, arremetiendo como un
poseso, habia perdido el control, empujaba con instinto homicida, como si la
quisiera atravesar.


- Te voy ha llenar...... te voy ha llenar......


El vacio interior habia desaparecido en el cuerpo de Vilma
siendo sustituido por una placentera sensacion que iba acumulandose en su
organismo haciendo que generara una involuntaria tension que fue rota por un
repentino orgasmo, acompa�ado de un alarido, que le hizo contraer la vagina
salvajemente.


- Aaaaaaaaaaaaaauuuuuuuuuuhhhhhhhhhhhhhh................
Siiiiiiiiiiiii..............


Atrapado entre espasmos y convulsiones, Luis, descontrolado
por completo, en un ultimo alarde de virilidad, cogio de nuevo a Vilma por las
caderas, fuertemente, y penetro en toda su longitud, hasta el fondo, la
temblorosa vagina para depositar los chorros de calido y espeso semen en una
eyaculacion, acompa�ada de un orgasmo bestial, como nunca antes habia logrado.


- Tomalooooooooo....... te lleno........ te lleno.........
Uuuuuuuuuuffffffffffffhhhhhh


No la solto, permanecio cogido a ella, quieto, hasta que los
espasmos de la eyaculacion fueron remitiendo poco a poco, hasta la ultima gota,
sintiendo como la vagina que momentos antes le atenazaba el pene se relajaba
entre contracciones cada vez menos violentas, hasta que callendo encima de ella
rodaron de lado, sin soltarla, abrazandola, inmovilizandola, su parte animal
decia que asi tenia que ser, su simiente tenia que llegar a su destino, hasta
que poco a poco, perdiendo la ereccion, su pene, resbalando en una mezcla de
flujo y semen salio por si solo de su encierro para dejar al descubierto la
desbocada vagina de ella.


Vilma, recuperando en parte el control de su organismo, logro
soltarse lo suficiente como para darse la vuelta y quedar frente a el, le abrazo
con delicadeza, acariciandole, con mirada de satisfaccion y agradecimiento, una
sonrisa tierna se dibujaba en su rostro. La hembra estaba satisfecha.


- En la vida me habian hecho sentirme asi........, gracias
Luis.


- Gracias a ti Vilma, menudo pedazo de mujer que estas hecha.
Me has "secado".


- Que te crees tu eso... otro dia por la tarde quedate y con
mas tiempo veras como te "seco".


- Me estas dando miedo. No pensaras devorarme �verdad?.


- No tonto, para ti sere siempre una gatita mimosa.




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Relato: Feromonas (3)
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