Humillada en mi boda
De c�mo el d�a mas feliz de mi vida, se convirti� en el mas
humillante de todos, debido al chantanje de mi cu�ado y amigos de mi novio.
Me llamo Vanessa tengo 25 a�os y me cas� el mes pasado con la
�nica persona con la que he mantenido un romance, mi marido Cristobal.
Mi tormentosa historia comenz� con la despedida de solter�
que protagonic� con mi hermana y mis mejores amigas. Fue una noche de cachondeo
puro, bromas, risas y en la que acabamos en un bar nocturno donde no falt� la
m�sica, buena marcha, bebidas y como no, un "boy" que hizo las delicias de casi
todas. El tipo, carne de gimnasio, se nos acercaba para que le tocasemos los
abdominales, los biceps y... hasta el culo. Pero nada mas y eso quiero dejarlo
claro porque es el detonante de una injust�sima vejaci�n.
Tres d�as m�s tarde lleg� el momento m�s esperado, por fin me
cas� tras cuatro a�os de noviazgo con mi chico. Los nervios se apoderaron de mi
durante toda la ma�ana, sobretodo en el momento previo a salir hacia la limusina
que me esperaba en la puerta. En casa de mis padres me puse radiante, un vestido
espectacular blanco se ce��a a mi cuerpo, con un escote generoso que cubr�a mi
exuberante pecho, todo rematado por una larga cola. Mi cabello rubio se
resaltaba en un bonito recogido dejando un poquito de flequillo ondulado
calculado para que no cubriera mis ojos azules.
La ceremonia fue el momento culminante de mi felicidad y tras
m�s de tres horas lleg� el banquete donde no faltaron familiares y amigos por un
tubo. Sent�a que era la aut�ntica estrella del d�a y que era punto de mirada de
casi todos los hombres que no ocultaban su admiraci�n por ver a una chica rubita
y guapa siendo la aut�ntica figura.
Despu�s de comer empez� el alboroto, unos se levantaban,
otros ped�an una copa, casi todos fumando cigarrillos y puros y yo sin saber
como actuar decid� ir al servicio. Fue el principio del fin. Una vez llegu� a
los ba�os del restaurante, se acerc� mi cu�ado (hermano de mi novio) Juan
Carlos, nunca hab�a tenido mucha relaci�n con �l, pues era un poco bocazas y
siempre hab�a pasado de gente con la que no me sent�a a gusto. Ni corto ni
perezoso me dijo:
Que zorra eres, ya me han dicho lo de la fiesta
(refiriendose a la despedida de soltera que tuvimos)
No s� a qu� te refieres! (le contest�)
Joder!! Enga�as a mi hermano y no te acuerdas. Se te
deber�a caer la cara de verg�enza!
Empec� a temblar porque sab�a que era la t�pica persona que
lo cuenta todo y s�lo de pensar que mi pareja se pod�a enterar me hac�a
estremecer de miedo. El prosigui� con su atropello hasta que todo se torci� a�n
m�s.
Mira zorra, esto se va a saber tarde o temprano porque te
lo mereces.
No por favor, no digas nada, adem�s no es cierto, no pas�
nada.
Que no!!! joder, estuviste la puta noche con un t�o y
crees que te vas a ir de rositas!! Creo que lo voy a decir a los colegas
para que sepan lo puta que eres.
Te suplico que no, Juan Carlos, por favor, p�deme lo que
quieras...
Vaya, vaya, ahora ya me empiezas a ofrecer cosas!!??
Quiz� no diga nada si t� tampoco dices nada...
A que te refieres? (contest�) P�deme lo que quieras!
Juan Carlos me agarr� del braz� y me llev� al servicio de
caballeros. En ese momento ya supe lo que quer�a. Estaba temblorosa y con
mucho miedo y tom� la equivocada decisi�n de dejarme llevar.
Me encerr� en uno de los urinarios y me empez� a tocar por
todas partes. la cintura, las piernas, c�mo no, el culo, para despu�s subir
sus manos para sobarme el pecho, entonces exclam�:
Joder que tetones tienes, hija de puta. No me extra�a que
el "boy" se liase contigo.
Prosigui� con sus tocamientos por todo mi cuerpo hasta que me
levant� la larga falda del vestido de novia, quedando mis piernas y mis ligueros
a la vista. Con torpeza mi cu�ado me los quit� y me baj� las bragas hasta los
tobillos. Despu�s me volte� d�ndole yo la espalda para acto despu�s bajarse los
pantalones. Me sujet� mi mano y la llevo a su polla. El cabr�n estaba bastante
bien dotado y me orden� masturbarle para que su verga alcanzase su plenitud. Una
vez que estaba dura como una piedra, la acerc� a mi rajita depilada y empez� a
penetrarme con gran dolor por mi parte ante la nula lubricaci�n.
Venga abre bien el co�o rubia, que te voy a follar a
pelo.
Para evitar el dolor me abr� lo m�ximo posible y a base de
empuje, me la metio por completo, empezando as� un bombeo que le dio gran placer
como as� me lo remalc� una y otra vez.
Pasados cinco minutos y antes de correrse sac� su polla y me
dijo:
Esto ha sido por estar tan buena y ahora viene tu castigo
por lo que has hecho a mi hermano.
El muy cerdo llev� su inmensa verga a mi culito, ante mi
asombr� y estupor. Con voz quebrada le rogu� que no lo hiciera, pero empez� a
reirse e insultarme.
Pero que dices rubia, yo paso de hacerlo por el co�o, a
mi s�lo me pone dar a las t�as por el culo.
Acto seguido y de una terrible embestida me abri� el culo
logrando introducirla hasta la mitad. Empec� a llorar y balbucear mientras a
base de agarrar mis nalgas con sus manazas y empujarme hacia �l, la polla fue
logrando hacerse paso por mi dolorido ano hasta que consigui� meterla hasta los
huevos. Una vez conseguido su prop�sito empez� a disfrutarme mientras me
sujetaba a un W.C. para soportar su empuje. Un dolor insoportable se apoder� de
m�, en el cual un taladro me perforaba el recto una y otra vez, hasta que de
repente mi cu�ado grit� de placer y el desgraciado se corri� dentro.
Juan Carlos sac� por fin su poll�n, mientras yo, con l�grimas
en los ojos, me dispon�a a subirme de nuevo las bragas, cuando �l me par�:
Pero que haces puta! He dicho que esto ha acabado??
El castigo que ten�a preparado para m� no hab�a concluido.
Juan Carlos hizo una llamada perdida y a los 2 minutos entraron cinco de los
mejores amigos de mi marido al servicio. Se me cay� el alma al suelo cuando
comprob� que ya estaban compinchados con �l.
Hola chicos. (les dijo mi cu�ado) Ahora es vuestro turno,
la rubia est� de vicio y encima vestidita de novia para vosotros!
Todos empezaron a re�r y a darle la raz�n a Juan Carlos sobre
lo buena que estaba. Mientras uno de ellos cerraba la puerta con pestillo otro
me desabroch� la tela que cubr�a mis senos, dej�ndo �stos al aire. Todos
exclamaron al verlos por su tama�o (uso una talla 108), y se les puso una cara
de salidos terrible.
Me empezaron a sobar las tetas y todo mi cuerpo, hasta que me
obligaron a agacharme apoyandome las manos en las rodillas y con el trasero "en
pompa". Entonces se acerc� uno de los amigos de mi novio y llev� su pene erecto
a la entrada de mi culo que a�n segu�a algo dilatado y m�s que lo iba a estar.
El cabr�n me la meti� hasta dentro y no par� de sodomizarme a pesar de mis
quejidos. As� hasta que pasado unos minutos se corri� llenandome el recto de su
asqueroso sem�n. Despu�s lo mismo hicieron los dem�s amigos. Uno a uno fueron
pasando por la piedra, revent�ndome el culo, una y otra vez, hasta que no pod�an
soportarlo m�s y acababan eyaculando dentro.
Fui sodomizada por mi cu�ado y los cinco amigos de mi novio,
que me dejaron totalmente roto el culo.
- Ostias! C�mo se lo hemos dejado!, parece una puta boca de
metro!!. (risas de todos)
Mi ano abierto y enrojecido y mi interior estaban totalmente
empapados de semen. Fue la mayor humillaci�n que he sufrido jam�s y encima el
d�a de mi propia boda y vestida de novia. Para ellos s�lo fue la mejor fantas�a
sexual jam�s imaginada.