"Localidades Agotadas" "Taquilla cerrada", "Agotados"....
eran los anuncios que la gente del estadio Tecnol�gico estaba colocando en las
ventanillas, anunciando la inminente terminaci�n de la venta de boletos para la
final del futbol mexicano... Uriel se llevo las manos a la cabeza, lamentandose
haber estado tan cerca de poder adquirir sus tan ansiados boletos, mientras los
ojos de su amigo Andr�, reflejaban la decepci�n que solo se presenta cuando
pierdes algo muy importante para ti..... Era la final de Torneo de Apertura
2004, y los "Rayados" del Monterrey la disputar�an contra los Pumas de la UNAM,
dirigidos por el pentapichichi Hugo S�nchez, y para un par de aficionados de
coraz�n como lo eran Uriel y Andr�, era una oportunidad privilegiada ver
coronarse al equipo de sus amores en su propia casa, de ver a sus �dolos: Jesus
"el cabrito" Arellano, Walter Erviti, Luisito P�rez y por supuesto el "Guille"
Franco. S�lo hab�an quedado como 20 personas delante de ellos en la fila del
estadio, o sea pr�cticamente daban por hecho que conseguir�an los boletos, pero
el destino se encarg� de que no fuera as�... por lo menos hasta el momento.
Hab�an estado acampando en las afueras del estadio por horas, pasando la noche
en la calle, esperando conseguir un boleto. Uriel estaba enojad�simo, y en
cuanto la fila de aficionados decepcionados al no obtener boleto, empezo a
dispersarse, corri� a la ventanilla y la golpe� con sus manos, haciendo una
rabieta, como si de ello dependiera el que consiguiera las entradas. Por su
parte, Andr� resignado, miraba con ojos tristes el espectaculo que estaba dando
su amigo.

Andr� siempre hab�a sentido un aprecio muy especial por
Uriel, eran amigos desde la preparatoria y ahora en sus casi 20 a�os, el cari�o
que sent�a por su amigo se hab�a incrementado. Adem�s compartian la afici�n por
el que, seg�n ellos, era el mejor equipo del pa�s... sus queridos "Rayados" del
Monterrey.... y quer�an comportarse como todo mundo dec�a: "como la mejor
afici�n de M�xico". Muchos aficionados se retiraban de las inmediaciones del
estadio, pero no Uriel y Andr�.... el primero hab�a convencido a Andr� de
esperar a ver si milagrosamente se abria la taquilla y quedaban algunos boletos
por vender, lo cual era imposible, � esperar que los revendedores aparecieran y
tratar de conseguir un par de boletos a un precio mayor... obviamente est�
�ltima opci�n no tard� en darse, un poco mas tarde empezaron a aparecer algunos
sujetos que misteriosamente esperaban que los abordaran y ofrecer de esta
manera, la preciada mercanc�a que traian entre sus manos... Discretamente Uriel
y Andr� tratar�n de negociar un precio justo para los boletos, pero fue
imposible, el valor de �stos se hab�a incrementado hasta 10 veces arriba de su
precio original... por lo que para el par de chicos eran inalcanzables, en su
calidad de estudiante, lo que menos tra�an eran esas cantidades de dinero, as�
que finalmente se desplomaron sobre la banqueta en las afueras del estadio...
Andr� sac� un par de refrescos de su peque�a mochila (con motivos "rayados"
obviamente), le entreg� uno a Uriel y sentados sobre el filo de la banqueta,
consumieron sus bebidas en silencio. Uriel estaba enojado, frustrado, era el
partido decisivo y lo tendr�a que ver por televisi�n, pesadamente se dejo caer
hacia atr�s, recostandose sobre su espalda, con sus piernas abiertas y cruz� sus
brazos para pasarlos por encima de su rostro. Andr� observaba detenidamente el
cuerpo de su amigo... sent�a un cari�o especial por �l... Uriel representaba lo
que �l en su interior admiraba, era el l�der, el desinhibido, el amiguero, el
deportista, en fin... y ahora que lo ve�a enfadado, frustrado, derrotado,
deseaba con todas sus fuerzas hacer algo para ayudarlo y sacarlo de ese
trance... Miraba detenidamente el cuerpo delgado de Uriel, sus brazos marcados,
su pecho amplio que ajustaba perfectamente la camisa azul y blanco de su equipo
favorito, su abdomen plano y cintura estrecha como solo la puede tener un joven
a esa edad, su piel tostada por el sol, que le daba un toque realmente sexy, sus
labios carnosos, su cabello negro despeinado, de un largo de 4 � 5 meses y el
arete plateado en la oreja izquierda .. y a pesar de traer uno jeans flojos, la
mirada de Andr� se detuvo en la entrepierna de Uriel, imaginandose lo que habria
debajo de esa mezclilla deslavada...

Realmente Uriel era un chico atractivo.... sexy, pero adem�s
de su f�sico, su personalidad era atrayente... pero Andr� no se quedaba atr�s,
al contrario,.... su rostro perfecto, sus dientes blancos, su nariz recta, sus
ojos verdes y cabello casta�o, hacian del chico un muchacho realmente bello...
su aspecto inocente, puro, su piel blanca y lampi�a, su cuerpo proporcionado,
nunca habia ido al gimnasio y sin embargo tenia un cuerpo armonioso, su culo
resping�n, abultado, era el toque perfecto para un cuerpo bello, sin embargo la
personalidad de Andr� era m�s introvertida, seria, a veces hasta un poco
ausente. Adem�s al igual que su amigo vest�a la camiseta blanquiazul de su
equipo favorito. Un suspiro sali� del pecho del chico, realmente quer�a a Uriel,
y la cercan�a del cuerpo de su amigo cada d�a lo transtornaba m�s.... Mientras
Uriel, pensaba en como hacer para conseguir los boletos, quien le podr�a prestar
el dinero..?, como podr�a conseguirlo..?... quiz� podr�a checar las promociones
de estaciones de radio, las cuales regalan boletos, quiz� ah� podr�a, aunque
remota, tener una posibilidad de conseguir un boleto, en fin su mente trabajaba
tratando de hallar la forma de estar en el estadio en el partido del proximo
s�bado...

Una camioneta que pasaba cerca de ellos, sac� a Andr� de su
contemplaci�n... dos tipos iban en ella y pasaron despacio, mirando fijamente y
de arriba abajo, al par de chicos que estaban en la banqueta a las afueras del
estadio... Andr� se sinti� incomodo al sentir la mirada que los sujetos les
echaban... la camioneta dio la vuelta al estadio y pas� nuevamente cerca de los
chicos, pero ahora los tipos comentaban algo entre si y sonreian al ver al par
de j�venes desconsolados que estaban en la banqueta.... Una vuelta m�s al
estadio y nuevamente la camioneta pas� al lado de ellos, Andr� se sinti�
nervioso y dio un codazo a su amigo, quien enojado se incorpor� esperando una
explicaci�n de su amigo por haberlo sacado de sus pensamientos. Finalmente, la
camioneta se estacion� cerca de ellos y dos tipos de entre 30 y 35 a�os
descendieron de ella, uno de ellos era corpulento, alto, y de piel morena, el
otro tipo era m�s bien de piel clara, delgado, fibroso y poco m�s bajo que el
primero... ambos iban vestidos con trajes color gris y lentes obscuros, lo cual
les daban un aire de gente importante.... Uriel, sin entender lo que pasaba, se
puso de pie, esperando al par de sujetos que lentamente se acercaban a ellos...
Empezaba a oscurecer, cuando los tipos se plantaron enfrente de ellos..

Uriel, a�n desconcertado volte� nuevamente a ver a Andr�,
quien permanec�a confundido.... acaso era un milagro.... no pod�a
desaprovecharlo... as� que sin pensarlo m�s, se dirigi� a los tipos...

Los tipos voltearon, se sonrieron entre ellos y esperaron que
el chico se acercara a ellos. Uriel lleg� corriendo con ellos y les explic� su
situaci�n, la frustraci�n de ver como cerraban la taquilla, la voracidad de los
revendedores, la espera que habian tenido que hacer para conseguir un par de
boletos, la poca plata con la que contaban, pero que estaban dispuestos a dar,
en fin todo los pesares que estaban viviendo, todo esto esperando de alguna
forma conmover a los sujetos y conseguir que les pudieran vender los boletos a
precio accesible. Andr�, tambien se acerc�, pero permaneci� unos pasos atr�s de
Uriel. Los tipos rieron entre si, ante la mirada desconcertada de Uriel, hasta
que dijeron:

Uriel meti� las manos en sus bolsas y jal� a Andr� junto a
�l, para abrir la mochila que este tra�a en la espalda, reuni� todo el dinero
que traian e ingenuamente dijo la cantidad a los tipos. Los sujetos rieron
nuevamente al ver el dinero que los chicos ofrecian...

Uriel y Andr� se miraron uno a otro confundidos. Hasta que el
tipo corpulento agarr� del brazo al primero y se lo llev� unos metros lejos de
ah�...

Uriel tuv� unos segundos de confusi�n, no le agradaba para
nada la idea pero pod�a m�s el deseo de estar en el estadio, con su equipo, en
la final.... as� que tom� una decisi�n, camino hacia Andr�, lo jal� del brazo y
le expus� la situaci�n. Andr�, sorprendido, dio un rotundo "no" a la petici�n de
los tipos, pero Uriel insisti�... era la �nica opci�n para conseguir los
boletos, pero Andr� no ced�a, entonces Uriel lo tomo de los hombros y le dijo:

Uriel y Andr� subieron a la camioneta junto con los tipos y
arrancaron hacia el departamento de uno de ellos. Ya estando en el lugar, el
tipo m�s delgado y joven los llevo a una habitaci�n, les orden� que se
desnudaran y los dej� solos.....

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origin� en mi imaginacion..., cualquier sugerencia o comentario me vendr�a bien.