Relato: Soldado americano (05: Rostro de esclavo)





Relato: Soldado americano (05: Rostro de esclavo)

From: MINDMASTER (capricornio viernes)


Material: "SOLDADO AMERICANO" MM/t True Rape NC Humil B/D
Anal, Oral. HYPNO MC


Date: 18 de NOVIEMBRE 2004


Capitulo V "ROSTRO DE ESCLAVO"


Esta historia contiene situaciones que podr�an resultar
ofensivas para menores de edad o personas que les disgusta leer acerca de
violaciones, sadomasoquismo, bondagge, sexo no consentido. Si eres menor de 18
a�os o te incomodan las situaciones antes descritas. NO sigas leyendo esta
historia


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Capitulo V "ROSTRO DE ESCLAVO"


Los ojos de Steve se cierran ante la mirada burlona de Abdul
quien ve nuevamente humillado al rebelde macho, ahora de forma definitiva. Las
marca que le han hecho en su piel quedaran definitivamente en el, record�ndole
lo que es de ahora en adelante. El dolor la humillaci�n y la impotencia f�sica
de poder evitar tales humillaciones hunden a Steve en la oscuridad de la
inconciencia. Despu�s de que esta sin sentido, con la marcad e Abdul en la
nalga, verga y pecho, y la palabra puto en la frente, su varonil rostro clava su
barbilla en el amplio y musculoso pecho del rebelde soldado.


- probablemente, presente algo de fiebre.- le dice Farrel-
por su condici�n f�sica es muy probable que las marcas hagan que su temperatura
aumente y quiz� dure algunos d�as, en unas cuantas horas sabremos si, presento
temperatura o no.


-es bastante fuerte, pero creo que ya esta d�bil, pero aunque
tenga temperatura, lo quiero en mi cama esta noche. �Entendido?- voltea a ver a
los guardias que est�n ah�.


- si, se�or- responden al un�oslo.


Abdul se retira mientras el musculoso cuerpo de Steve es
removido y lo llevan a asear, para tenerlo listo cuando este con Abdul. Steve
sigue sin recuperar el sentido mientras es aseado, rasurado y ba�ado para que
cuando este compartiendo la cama con Abdul este lo m�s limpio posible.


A pesar de que Steve es ba�ando con agua fr�a, no recupera el
sentido, el agotamiento f�sico por la tortura sexual y f�sica, le han gastado
todas las energ�as de su atl�tico f�sico. Pero como Farrel lo predijera, en unas
cuantas horas despu�s, cuando Steve aun sin recuperar el conocimiento empieza a
sudar por la fiebre que empieza a darle. Empieza a delirar.


-mhm. Mggmhmmmm. Aghhhhhh. Agua. Ahhhhhhhh, agua-
inconscientemente empieza a hablar sin estar enter�ndose de lo que sucede a su
alrededor abre los ojos de ves en cuando, pero no capta su realidad, la
habitaci�n le parece extra�a, no recuerda completamente en donde se
encuentra.-mhm- agua. Agua. Aaaahhhh- ni siquiera comprende quien esta con el,
no reconoce por instantes el rostro de Abdul que lo ve sonriendo.


Abdul ha ordenado que Steve sea puesto sobre su amplia cama,
aunque sigue esposado, con las manos a la espalda, sus fuertes y musculosos
brazos est�n ba�ados en sudor as� como el resto de su atl�tico cuerpo, debido a
la temperatura de su cuerpo que esta alt�sima, incluso Farrel ha tenido que
inyectarlo para hacerle bajar la temperatura. Para Abdul el ver como el
musculoso macho delira, por la alta fiebre, acostado boca arriba. El amplio
t�rax de Steve se expande por lo profundo de sus respiraciones. Los pezones
color caf� oscuro se marcan mas cada vez que los m�sculos pectorales se expanden
haciendo que las gotas de sudor resbalen a los costados de ese perfecto
esp�cimen. La marca de Abdul que esta en el pecho de Steve se define
perfectamente cuando Steve respira es como si de manera natural estuviera
mostrando al resto del mundo la marca de su amo, de su due�o, sin que Steve se
de cuenta de eso. El miembro de Steve esta aun ligado, oblig�ndolo a permanecer
erecto, as� como sus bolas ligadas para que no pueda tener posibilidad de
eyacular hasta que Abdul lo decida, y las marcas de propiedad que Abdul le hizo.
En la nalga, el pene y la palabra puto en la cara, el varonil rostro de Steve
jam�s ser� el mismo. Que dir�an en su pa�s si pudieran verlo as�, jadeando,
desnudo sobre la cama. Las piernas musculosas ligeramente separadas. Dejando ver
parte de su culo que esta vac�o, esperando ser llenado, sin cambiar de posici�n,
permaneciendo quieto solo con la respiraci�n agitada. Los ojos entreabiertos a
intervalos sin darse cuenta de lo que sucede.


Abdul avanza lentamente hacia la cama hasta llegar al borde
para tener un mejor espect�culo del perfecto H�rcules. Estira su mano y toma la
argolla que le puso en el pene y tom�ndola entre sus dedos, empieza a mover el
duro miembro del delirante soldado, de un lado a otro y de derecha a izquierda,
con movimientos firmes que hacen que el duro miembro de Steve y sus sensitivas
bolas, respondan ante el estimulo aun en ese estado de debilidad.


-aaghhhhhhhhh. Hmmmmmmmmmhhhhmm. Ahhhhhhh- Steve entreabre
los ojos ve el sonriente rostro de Abdul, el brazo de este que tiene su miembro
por la argolla lo mueve, el dolor es m�nimo, ahora, es mas el placer que le
provoca. Steve no atina a que puede hacer, como resistirse, esta ajeno a lo que
pasa, a la cruel realidad sexual que esta viviendo. �nghhhhhhhh.- se niega a
seguir viendo el rostro de Abdul, recuerda que es su enemigo y parte de lo que
ha sufrido, pero todo parece flotar en la mente del americano, despu�s abre los
ojos nuevamente y la imagen del rostro burl�n de Abdul se va transformando en un
rostro familiar y querido, Sandra su mujer, su mente divaga y recrea la imagen
de su amada y deseada esposa que tiene entre sus manos el duro miembro, sin
aceptar su realidad, que es su pero enemigo el que lo tiene dominado.


-��� �Sandra?!!! ahhhhhhhhhh- incr�dulo pregunta tratando de
enfocar su mirada le parece ver su mujer sonriendole seductoramente, quiz� es lo
que le mas desea en ese momento que estuviera sucediendo. cuantas veces hab�an
hecho el amor, el sexo con su mujer era apasionado sin limites as� que, lo que
mas le gustar�a es no haber tenido que experimentar ese tipo de tortura sexual
la que Abdul lo ha sometido los �ltimos d�as, como quisiera, poder tocarla, pero
sus manos est�n fijas a su espalda. Ahhhhh- un gemido de placer al sentir como
unas manos juguetean con su dura verga, tom�ndola por la argolla y movi�ndola a
uno y otro lado, una diminuta gota de liquido seminal escapa por el duro miembro
de Steve sin poder descargar todas sus ansias sexuales, sin poder liberarse,
pero pensando �eque es su mujer, y no Abdul, el que juega con su verga, continua
disfrutando el escarceo er�tico.


Abdul comprende perfectamente que Steve esta desvariando, la
temperatura de su cuerpo, debido al reciente manejo, de marcas en el musculoso
cuerpo del soldado, han hecho efecto logrando que la mente del atl�tico macho
divague, sin dejar de ver a Steve como el soldado levanta la cabeza, para poder
ver detalladamente lo que hace con su miembro, Abdul abre su delgada boca e
introduce el glande de la enorme verga del americano.


-aaghhhhhhhhhhh, Sandra, ahhhhhhhhhh- Steve siente la calida
lengua de Abdul, sobre su reci�n circuncidado pene, siente como la saliva de
Abdul cubre la mucosa de su miembro, y como la lengua del pervertido juguetea
con la cabeza de su verga, como la diestra lengua del Abdul, juguetea con la
argolla esta e el glande-ahhhhhhhh- Steve vuelve a dejar caer su cabeza en la
suave cama, cierra los ojos, creyendo en su delirio que Sandra esta
succion�ndole el duro y jugoso trozo de carne, es tan perfecta la succi�n que se
olvida del dolor de la circuncisi�n, de la marca en su prepucio y del piercing.
Solo para dejarse llevar por las sensaciones, mantiene sus ojos cerrados,
fuertemente mientras su cuerpo sudoroso empieza a agitarse, su musculoso y
amplio t�rax se expande, a toda la dimensi�n de su di�metro, marcando la
perfecci�n del masculino y definido pecho de Steve, sus pezones se endurecen y
sobresalen mas, hay enrojecimiento alrededor de su pecho denotando el placer que
siente, como su delirio y su placer nublan su raciocinio y lo dejan en un estado
de semiinconsciencia , y placer sexual, que lo coloca en manos de su captor,
indefenso de oponer siquiera resistencia mental y sexual contra lo que Abdul
trata de hacerle.


-mhm,- Abdul gime al tener entre su labios el duro largo y
ancho miembro y de ver como el cuerpo de Steve se retuerce sobre la cama de
placer, de o�rlo gemir y llamar a Sandra, su esposa, debe aprovechar el delirio
del H�rcules americano, para hacerlo gozar el sexo, hombre-hombre.


Steve siente que pierde la raz�n por el placer, hace tanto
tiempo que no "ve�a" a Sandra, que esta ansioso por ser tocado por ella, por
tener sexo intenso con su mujer, por pensar que todo lo que ha pasado ha sido
una pesadilla y que ahora es cuando la realidad se hace presente. Las manos d
Abdul, recorren el firme vientre de Steve mientras su boca sigue succion�ndole,
las manos van subiendo por el vientre, y abdomen hasta llegar a la parte de los
pezones, que debido a las sustancias que les han estado aplicando se han vuelto
zonas er�genas de explosiones sexuales al ser tocadas.


-aaahhhhhhhhhhhhh, mggghhhhhh, aahhhhhhhhhhhhhhhh, sandhhhh,
ahhhhhhhh-gime intensamente la habitaci�n se llena de la grave voz del excitado
macho, que disfruta de esa relaci�n.


Los dedos �ndice de Abdul pasan por los piercing que le
pusieron a Steve anteriormente uno en cada pez�n, y empiezan manipularlos, al
mimos tiempo que la lengua d Abdul, somete el rebelde miembro de Steve a una
intensa excitaci�n, inconscientemente las musculosas piernas de Steve se separan
mas, para permitir el acceso de la boca de Abdul a su miembro, sintiendo que en
cualquier momento eyaculara, las molestias que le provocan las fuertes ligas que
someten su verga y su sus bolas, son casi imperceptibles, as� que Abdul tiene el
control de la situaci�n, el tim�n de la relaci�n, manejando al delirante macho
como quiere, sabiendo que mientras Steve piense que esta con "Sandra" su esposa,
lo podr� hacer disfrutar. Abdul disfruta de controlar a Steve de manejarlo de
hacer que goce y que se convierta en un cuerpo ardiendo de deseo y pasi�n.


Los dedos de Abdul manipulan fuertemente los pezones que
parecen ponerse m�s duros cada vez, haciendo que l piercing se levante y la
manipulaci�n pueda ser mejor.


-ahhhhhhhhhhhh, Sandra, ahhhhhhhhhh, as�, as�, ahhhhhhhhhhh-
los gemidos del caliente macho se hacen mas intensos, en la cerrada habitaci�n
solo se escuchan los cada vez mas fuertes gritos del macho americano. Abdul
suelta el duro miembro para empezar a subir ahora usando su h�meda lengua por el
firme vientre de Steve, repasando cada uno de los m�sculos del soldado,
llen�ndolos de saliva que se mezcla con el sudor, ya que la fiebre y la
excitaci�n hacen que el cuerpo de Steve este ba�ado en sudor, marcando el brillo
en cada una de las curvaturas de su musculoso cuerpo, que ha sido depilado
definitivamente. No existiendo ning�n obst�culo entre la lengua de Abdul y la
bronceada y sensible piel de Steve. La lengua de Abdul avanza por entre la
dureza de esos m�sculos de acero, para llegar hasta el ombligo del Steve en
donde la lengua de Abdul lo recorre lenta y profundamente, mientas las manos
siguen intensificando la manipulaci�n de los duros pezones.


Steve sigue sin poder abrir los ojos, incluso los parpados
los cierra fuertemente para poder, no aullar por el placer que siente, las
sustancias que le han estado inyectando alrededor de los pezones, esta haciendo
un efecto perfecto y eficaz. La boca se Steve esta abierta por lo agitada de su
respiraci�n la fuerte hesitaci�n hace que su cuerpo le exija mas oxigeno as� que
sus pulmones se expanden a toda su capacidad al igual que su t�rax, si tan solo
pudiera darse cuanta de que es Abdul con quien esta teniendo la relaci�n sexual,
y no con su mujer, otra seria su respuesta, pero Abdul trata de avanzar los mas
r�pido posible antes de que Steve pueda reaccionar. La lengua de Abdul avanza
velozmente por entre la l�nea media del musculoso macho hasta llegar a la mitad
del pecho donde esta la marca de la "A" de Abdul la humedece con saliva,
haci�ndola mas notoria, para despu�s pasar su lengua por el pez�n de lado
izquierdo, haciendo que el coraz�n de Steve lata mas fuertemente, mientras la
lengua juguetea con el piercing en el pez�n, y lo endurece mas.


-ahhhhhhhhhhhhhh- agghhhhhhhhhhhhh ahhhhhhhhhhhhhhhh- Steve
siente como las fuerzas lo abandonan no puede siguiera dejar de gemir por esa
traviesa lengua que hace de sus pezones una dureza sexual que se torna roja en
el centro el pecho, justo donde tiene la marca de su due�o, donde esta de forma
definitiva la "A" de su amo, de su macho, de su penetrador.


Abdul pasa r�pidamente de uno a otro pez�n sin despegar su
lengua, mientras con sus manos aprieta el expone que queda libre, y frota su
cuerpo con el duro miembro de Steve, despu�s de estar un largo rato calentando y
sometiendo el fuerte t�rax del soldado, como si fuese vampiro se apodera del
fuerte cuello del americano, una de las partes mas sensible de Steve, as� que la
boca de Abdul se pega como fuerte ventosa a uno de los lados del cuello, justo
por donde pasa la yugular, as� succionando, chup�ndole el cuello, como si
quisiera hacerlo desangrar por la fuerte succi�n, mientras las manos mantiene n
los pezones en constante estimulaci�n, Abdul sabe que el efecto de la sustancia
en el t�rax de Steve hace que si los pezones son estimulados fuertemente
mantendr�n en ese estado de excitaci�n al rebelde macho, y mas aun en esa
confusi�n metal en la que se encuentra Steve, de laque Abdul esta sacando le
mayor provecho al tener ese perfecto cuerpo viril y atl�tico en su manos,
ardiendo y gimiendo como hembra en celo, dominado reducido a se solo un juguete
sexual bajo sus expertas manos y su perversa boca.


Steve al sentir la humedad de esa lengua en su cuello,
inconscientemente arquea el cuello, para exponerlo mas y dejarlo indefenso ante
la h�meda y rugosa lengua del Abdul que lo recorre a todo lo largo el grueso
cuello del soldado, los ojos de Steve se aprietan mas para mantenerlos cerrados
recordando lo placentero que era el sexo heterosexual, pensando que es Sandra su
esposa la que recorre su cuerpo, la lengua se acerca hasta el fuerte ment�n de
Steve para avanzar hasta los carnosos y varoniles labios del americano que
permanecen entreabiertos jadeando, Abdul posa sus delgados y largos labios sobre
los de Steve, en un apasionado beso, en el que ambas bocas parecen sedientas de
saborearse la una a la otra.


-mhm.- gemidos de ansiedad escapan de las gargantas de ambos
hombres. Steve nota en su delirio algo extra�o, el vello de la barba de Abdul
raspa, el lampi�o rostro del americano. Entreabre los ojos, sin dejar de dar ese
apasionado beso solo para darse cuanta que esta besando a Abdul, a otro hombre,
al hombre que lo desfloro y lo mantiene esclavizado f�sica mental y sexualmente,
aun en su delirio comprende su situaron recuerda lo que ha sucedido.- ngmhhm-.
Trata de terminar con ese profundo beso, pero Abdul lo mantiene firme, siente
que Steve ha recuperado la conciencia, que trata ahora de defenderse, pero,
sabiendo que se encuentra d�bil y aprovechando el peso de su cuerpo Abdul lo
mantiene quieto, mientras su lengua sigue explorando la h�meda cavidad, virgen
de besos masculinos, la lengua de Abdul recorre a�n en contra de su voluntad
toda la boca del americano, sin permitirle terminar con el beso, Steve trata de
oponerse de liberar su boca, el asco que siente al estar siendo besado por su
enemigo, por su violador, y mas aun el tener que soportarlo, amas imagino que
alg�n d�a otro hombre profanar�a su boca, pero �qu� puede esperar, despu�s de
haber sido violado, marcado y circuncidado?.


-nghhhhhhhhh. Gmhmmmmmmmm- Steve casi trata de morder a Abdul
para que termine con ese asqueroso beso, pero ni siquiera puede hacerlo, el
saber que todo lo que haga puede hacerle Abdul, el no podr� impedirlo, la
experta lengua de Abdul recorre lentamente la boca de Steve hasta llegar a la
parte de su garganta, recorri�ndolo lentamente, Abdul es experto en besar, por
lo que Steve tiene que terminar someti�ndose a los deseos de ese pervertido, por
momentos siente que su cuerpo pierde la conciencia, por la alta temperatura que
tiene, pero su mente se mantiene alerta, -ghhhhhh- por fin termina la tortura
del apasionado beso, la saliva de Abdul esta aun alrededor de los viriles labios
de Steve.-bastando,- lo insulta, sin que Abdul se inmute mas bien sonriendo.


-jeejejej, te estaba gustando, jajaajaj. No lo niegues- le
recuerda como gem�a antes de darse cuanta de lo que paso. Lo que disfrutaba,
como respondi� al apasionado beso.


-perro, sabes que estaba delirando, que no era yo, le dice
mientras trata de incorporarse de la suave cama. La fuerte mano de Abdul lo
empuja por el pecho para obligarlo a quedarse acostado.


-no te muevas, cabr�n.- le ordena mientras lo suejeta
fuertemente, Steve no esta en condiciones de oponer resistencia, as� que despu�s
de un forcejeo tiene que quedarse quieto sabiendo que no tiene fuerzas para
darle pelea a Abdul. Abdul toma algunas cuerdas sujetas a la cama, y procede a
inmovilizar a Steve para tenerlo quieto.


-nghhhhhhhh- Steve trata de rebelarse nuevamente, pero
teniendo las manos esposadas a la espalda es f�cil para Abdul someterlo y
tenerlo en unos cuantos minutos, atado a la cama.


-ejejeej. Es hora de tu medicina. Jejeje. Le dice perverso
mientras toma una hipod�rmica de un malet�n que esta al lado de la cama.


-�qu� vas a hacerme?- pregunta desafiante el rebelde soldado.


-es tu medicina para, para los pezones, la del culo te la
puse antes de que despertaras, jejeejej. Ya falta poco para que seas un hombre
nuevo o debo de decir "UN PUTO NUEVO". Jejejeej.


Abdul toma entre sus manos el pez�n derecho de Steve para
manipularlo, mientras la punta de al aguja es colocada en el borde superior del
oscuro pez�n.


-�listo?- jejejeejje- le pregunta burl�n, como si Steve
pudiera decidir.


-nooghhhhhh, te matare, perro alg�n d�a te voy a matar,
aunque sea lo ultimo que haga en la vida, te lo juro. Le grita furioso Steve. Al
sentir como la punta de la hipod�rmica es presionada justo donde termina el
pez�n y empieza la piel, la delgada y filosa punta de l aguja se empieza a
introducir en el musculoso pecho del americano.


-mhm- Steve aprieta las mand�bulas fuertemente para no gritar
el dolor no es tan intenso, aunque la humillaci�n si lo es.-aghhhhhh- al sentir
como la aguja se va introduciendo lentamente por entre sus s�lidos m�sculos
pectorales, hasta llegar a una profundidad considerable, para despu�s sentir
como el fri� liquido empieza a ser vaciado entre sus fibras
musculares.-nggghhh-.


-jejeejejejej. La risa de Abdul es sarc�stica feliz,
triunfadora, de dominio y control sobre el enemigo, de control sobre le rebelde
macho, Abdul disfruta el ir empujando el embolo de la jeringa hasta vaciar el
contenido infiltr�ndolo entre las fibras musculares del amplio t�rax. La
aplicaci�n le parece eterna, pero no todo termina ah�, falta el lado izquierdo,
as� que tomando la segunda hipod�rmica, Abdul procede a hacer lo mismo, primero
toma entre sus dedos el otro pez�n, para meter lentamente la hipod�rmica
lentamente.


-nghhhhhhhhh. Steve se revuelve en sus atadoras, tratando de
demostrar que aun no esta vencido que puede dar pelea, aunque con eso no evita
que su pez�n izquierdo sea inoculado al igual que el derecho, el experimentar
sustancias que exacerben las zonas er�genas, mas aun en Steve que es un ejemplar
masculino de concurso.


-jajajaaj, liso, solo unos segundos y estar�s listo- le dice
Abdul mientras arroja las hipod�rmicas a la basura.


Steve siente despu�s de lo fri� del contenido infiltrado
entre las fibras musculares de su musculoso t�rax, el ardor que sinti� la
primera vez que le inocularon esa sustancia, su pecho arde aumenta de
temperatura siente una ardor como si sus pezones estuvieran siendo consumidos
por el fuego, aprieta de nuevo las mand�bulas para ahogar el grito por el
intenso ardor que consume su t�rax.-aghhhhhhhh, mghhhhhh-. En unos cuantos
minutos el ardor va disminuyendo dejando sus pezones y su t�rax extremadamente
sensible a la estimulaci�n.


-jejeejejejej. Creo que ya estas listo,- le dice Abdul burl�n
al ver que el ardor en los pezones ha disminuido, estira sus manos para tomar en
cada una de ellas cada pez�n, manipul�ndolo con los dedos.


-no te atrevas, dejamghhhhhhhhh- una descarga el�ctrica le
corta la voz a Steve. El estimulo de la fuerte presi�n de los dedos de Abdul
sobre sus m�sculos pectorales previamente inoculados, le provocan un fuerte
estimulo er�tico que recorre todo su cuerpo, un placer mas intenso que los
anteriores que lo toma de sorpresa y reduce su voz de ira a gemidos de
satisfacci�n y sorpresa.-ahhhhhhhhhhhhh. Nghhhhhhhhh. Ahhhhhh.


-jejeejejejej. �Ves? Te gusta, cabr�n, te gusta PUTO.
Jejejeej- le dice mientras sus manos siguen masajeando m�s rudamente los
m�sculos alrededor de los pezones del inmovilizado esclavo.


-aaahhhhhhhhhh, �qu� me hiciste? Aghhhhhhhhh. Ahhhhhhhhhhhh.-
el estimulo nubla el raciocinio, del rebelde soldado y lo reduce aun cuerpo
temblando por la excitaci�n sin poder oponerse, ni bloquear el placer que le
provoca, la fuerte estimulaci�n.


-jejeejejej. Te lo dije. Puto. Convertir�, tu cuerpo en un
juguete sexual, ser�s mi mascota sexual privada. Mi puto. Jejeeje no podr�s
resistirte. Jaajajajaj. �Que no sientes como cada vez te gusta mas que te toque?


Steve no responde, solo se queda pensando en las palabras de
Abdul, es cierto esa vez el placer que siete es mas intenso que las veces
anteriores, sus pezones se endurecen hasta casi causarle dolor por la necesidad
que tienen de ser tocados y estimulados, de ser sometidos a l placer, sin
importarle que es lo que lo este causando, su cuerpo solo siente, solo disfruta,
aunque su mente permanece heterosexual, su cuerpo no siente igual.-ahhhhhhhhhh.
Ahhhh ngghhhhhhh- trata de ahogar los gemidos que le provocan las anos de Abdul
sobre su pecho, no puede evitarlo, estando inmovilizado.-nnnnnnnnnnnghhhh.
Bastardo, aghhhhhhhhh. Ngghh- la furia no lo abandona, es una mezcla de furia y
placer formando una simbiosis perfecta que crea el mas grande conflicto mental y
sexual en el musculoso macho, que estando imposibilitado de oponerse, por estar
reducido f�sicamente. No puede defender su cuerpo de los er�ticos experimentos a
lo que esta siendo sometido. Debe de soportar de resistir, pero su cuerpo se
esta poniendo en contra de el, esta ahora de parte de Abdul, esta disfrutando lo
que Abdul le hace y dej�ndose manipular por el, solo su mente, sus pensamientos
est�n aun oponiendo toda la fuerza mental que tiene para no permitir hundirse en
ese mar de sensaciones placenteras que su cuerpo experimenta ahora con una
intensidad nunca antes experimentada pero que de ahora en adelante ser� la �nica
v�a que le podr� dar la satisfacci�n total


La mirada de Abdul es triunfante sabe que tiene el cuerpo de
Steve en sus manos aunque su mente siempre tendr� resistencia, pero su cuerpo su
perfectos cuerpo ser� dominado.


-creo que ya estas listo- le dice Abdul mientras observa como
cada m�sculos de Steve esta ba�ado en sudor y como los gemidos del americano son
cada vez mas dif�ciles de controlar.


Aun en medo del �xtasis sexual e que se encuentra Steve se
pregunta �listo? �Para que? No tiene que esperar mucho, cuando Abdul levanta sus
piernas para colocarlas sobre sus hombros. Manteni�ndolas separadas firmemente
por una gruesa cuerda as� Steve no puede cerrar las piernas, Abdul pone sobre
sus hombros los duros muslos del americano para, sin dejar de mirarlo, ir
dirigiendo su verga al aun herm�tico culo de Steve.


-nghhhhhhh. Ahhhhhhhhhh, dios, m�o, nooooghhhhh- entre la
desesperaci�n de no poder evitar la nueva violaci�n y el placer que las manos de
Abdul le proporcionan al seguir masaje�ndole fuertemente el t�rax, su mente se
debate entre la rebeld�a y el placer, entre su hombr�a y su virilidad que est�n
siendo esclavizadas y tomadas como rehenes entre los deseos del pervertido
sujeto, que sabe como ir conduciendo el atl�ticamente perfecto cuerpo del
soldado americano hasta donde desea, ya tiene de su parte los pezones y el culo
del soldado, el experimento de ir transformando la respuesta sexual a la
estimulaci�n esta dando perfectos resultados en el viril ejemplar, manteniendo
intacta su mente. Su raciocino, pero siendo debilitado y quebrantado. Steve
trata de apretar su culo contrayendo su esf�nter anal al sentir como la dura y
jugosa cabeza de la verga de Abdul esta "tocando" las puertas de su culo,
tratando de abrirse paso de una forma violenta, la resistencia del herm�tico
culo, no es lo suficientemente fuerte para poder detener la dureza de un miembro
de dureza f�rrea, que esta acostumbrado a tomar lo que desea, mas aun sabiendo
el, efecto que le provocar en esta ocasi�n al odiado enemigo, Steve sudando mas
profusamente que antes cierra los ojos y aprieta mas las mand�bulas para tratara
de aumentar s fuerza en su trasero y poder impedir que una vez mas ese duro
miembro entre en sus entra�as y le demuestra una vez mas que, el no es nadie, la
palabra "puto" resalta e su frente as� como su duro miembros sometido juntos con
sus bolas por las fuertes ligas, la molestia en sus bolas es cada vez mayor al
no haber podido lograr una relaci�n eyaculando, las ataduras los piercing, las
marcas. Las sensaciones que distinto es el Steve de ahora al que fue capturado
apenas unos d�as antes, su cuerpo viril y musculoso se mantiene al igual que su
mente, pero algo en el ha cambiado, los centros de placer, sus zonas er�genas,
est�n hipersensibilizadas, ejerciendo un control y nulific�ndolo mentalmente,
por el intenso placer que se apodera de cu cuerpo cuando lo estimulan.


-aghhhhhhhhh, ngghhhhhh ,. Bastardo, noooghhhhhhhhhh.
Agggggghhhhhhhh-los gritos de Steve son mezcla de ira e impotencia de no poder
evitar que Abdul lo penetre una vez mas, al menos ahora est�n solos, los bordes
de los pliegues anales empiezan a ceder ante la fuerte presi�n.-nghhhhhhhh-Steve
casi muerde sus labios por la impotencia por lo inminente por no dejarse
someter, por ofrecer algo de resistencia, es un soldado un hombre entrenado
perfectamente f�sica y mentalmente, pero esto sobrepasa sus limites viriles y
emocionales.


-as�, as�, puto, as� cabr�n. Ahhhhhhhh- la �ltima estocada
abre de golpe el fuerte esf�nter para acceder a las viriles entra�as americanas.


-NGHHHHHHHHHHHHHHH. AGHHHHHHHHHHHHHHHH.
AHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH- el intenso grito de Steve se torna primeramente de furia
para despu�s ser de sorpresa y al final de placer, �qu� le han hecho en su culo?
�Por qu� ahora siente de es amanera cuando es penetrado?. Steve siente que su
cuerpo esta siendo partido en dos mitades perfectamente iguales, las sensaciones
hierven en sus entra�as, una descarga de placer desconocido y repugnante para su
heterosexualidad, lo sorprende, en la anterior violaci�n, no sinti� ning�n tipo
de placer cuando tenia sus entra�as llenas de dura carne , pero
ahora..-ahhhhhhhhhhhh. AGHHHHHHHHHH. NGHHHHHHHHHHHH, DIOS, NOGHHHHHHH- por mas
esfuerzos que hace Steve por mantener el control mental y la resistencia, es
intu�s el placer se va a diseminando r�pidamente con la lenta pero firme
penetraci�n de Abdul, Steve siente como sus entra�as disfrutan al ser llenadas,
al convertir su culo en "carn�voro" de ahora en adelante.


-jajaajaja. �Te gusta, puto?- jajaajajajajaj- la risa de
Abdul revela que sabe perfectamente las sensaciones que Steve esta sintiendo,
muy as su pesar, la mirada de Abdul esta en el rostro de Steve que ahora hace
honor ala palabra que lo marca definitivamente en la frente, que lo coloca en un
lugar de sexualidad especial, en el que Steve, jam�s pens� estar.


El placer anal que el culo de Steve experimente es
independiente de su capacidad de raciocinio y deseos, solo es placer que crece y
se expande en todo el musculoso cuerpo, una vez que la verga de Abdul esta
totalmente dentro de las entra�as del rebelde y musculoso macho, la sonrisa
triunfante de Abdul se encuentra con el rostro desesperado del americano, se ven
fijamente, Abdul sabe que esta ganando mas y mas terreno en el control y en la
sexualidad de Steve mientras que Steve trata de no darse por vencido de no
permitir que su cuerpo sea dominado por su culo, aunque es casi imposible, todo
su cuerpo tiembla por el extremo placer que tiene y que se genera en sus
entra�as por la dura carne que le proporciona las placenteras estocadas que lo
controlan lo inmovilizan casi del placer que le provocan. La dura verga de Abdul
empieza a deslizarse, para empezar con fuertes embestidas, es con una pasmosa
lentitud lo movimientos que Abdul hace con su miembro dentro del culo de Steve
sin dejar de verlo, manipul�ndole los pezones, la dura verga de Steve esta
escurriendo una constante gota de liquido seminal escapa por la verga que del
esclavo que ha permanecido ligada por varios d�as, las bolas de Steve son
friccionadas por el vientre velludo de Abdul cada vez que lo embiste. Lentamente
Abdul retrae su miembro para poder embestir el indefenso culo del americano.


-ahhhhhhhhhhh. Aghhhhhhhhhhhhh. AHHHHHA- el placer aumenta
cada vez que Abdul saca y mete su dura verga, lo empieza a hacer lentamente para
despu�s empezar a hacerlo r�tmicamente, mas r�pido, as� que somete el esf�nter
de Steve que esta estrangulando la dura verga, la presi�n del esf�nter anal de
Steve esta apenas cubriendo el di�metro de la verga de Abdul, como si fuera la
funda perfecta para la dura espada del iraqui.


-jajaajajajaj,- la risa triunfante de Abdul sabiendo que
existe en la mente del americano la m�s cruda batalla de su mente rechazando las
sensaciones de su culo.


-NGGHHH, DIOS MIO, NO LO PERMITAS, AGHHHHHHHH, AGHHHHHHH,
AGHHHHHHHH, AHHHHHH- las estocadas de la dura "banderilla" de Abdul se clavan
sin piedad una y otra vez en el profundo canal rectal del americano. Neg�ndole
la victoria a su mente, haciendo que el musculoso cuerpo de Steve disfrute aun
contra su voluntad. El temblor en cada m�sculo del inmovilizado H�rcules es
intenso constante. Los pezones de Steve est�n enrojecidos por lo excitado que
esta el americano as� como su culo que se esta tornando en un depredador
insaciable de carne masculina. Culo y mente de Steve pelean una dura batalla
para liberarse o ser dominado, para ser libre o esclavo, para ser hombre o puto,
aunque Abdul sabe como darle ventaja al puto al esclavo, al cuerpo, al culo, del
rebelde e ir ganando terreno en la mente del soldado sin llegar a nulificarlo
totalmente, para Abdul es placentero saber que Steve es humillado cada vez que
se lo coge y mas aun cada vez que siente placer al ser cogido, el verlo as�
utilizando sus mejores armas sexuales contra el odiado enemigo.


Steve siente como su bolas se endurecen tratando de liberarse
de obtener la ansiada relajaci�n, sin que le este permitido, todo parece formar
parte de un perfecto plan maestro, para hacer prisionero no solo el cuerpo de
Steve sino tambi�n su sexualidad. Mantenerla cautiva de las duras vergas
iraqu�es.


-puto, puto, puto,- con voz ronca Abdul le repite la palabra
que Steve tiene tatuada definitivamente en su frente para recordarle como esta
disfrutando su verga como su cuerpo se rinde definitivamente ante la dureza de
la carne.


-ahhhhhhhhhhh. Nghhhhhhhhh. Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh. Te voy
a matar, aahghhhhhhh- las in�tiles amenazas al saber que su cuerpo esta
derrotado y que su mente mientras su cuerpo este siendo sometido a ese tipo de
tratamientos, no podr� hacer gran cosa para poder oponerse para poder nulificar
el placer, el deseo, la respiraci�n de Steve se torna mas y mas agitada cada
vez, llevando su cuerpo a que su temperatura aumente mas de lo que estaba por la
fiebre, su mente se rebela, siente como sus entra�as arden una vez mas, y no
pueden evitar nada como ese duro miembro entra y sale cuando se le antoje de su
culo, provoc�ndole placer, por mas que Steve trata de no sentir es in�til su
culo piensa distinto, desea mas, la fricci�n de la dureza viril en sus entra�as
lo hace gemir, jadear y esta conduciendo su mente hasta los limites de la
resistencia, la fuerza f�sica lo ha abandonado y la sexual se ha puesto de parte
del enemigo.


Steve mueve su cabeza de un lado a otro tratando de negar lo
que siente de oponerse de no permitir que el ,placer llegue hasta gritar
pidiendo ser cogido, su mente siente que esta perdiendo la batalla, su
temperatura esta mas y mas alta, su mente a punto de perder la guerra sexual, se
hunde en la oscuridad total, la debilidad, la fiebre y la extensa y dura batalla
han hecho mella en el agotado soldado, que pierde el sentido, pero ni aun as�
Abdul deja de meter y sacar su dura verga hasta llenar esas mam�feras entra�as
americanas de la leche de su enemigo.


-ahhhhhhhhhhh. Aun sabiendo que Steve ha perdido el sentido,
Abdul eyacula dentro de Steve, el semen escurre una parte por los lados del
culo, del inconsciente americano, que ya no se da cuanta de lo que le pasa, su
�nica defensa mental fue hundirse en la oscuridad, y no presenciar como su culo,
acepta ser violado, ser pose�do, como sus entra�as dan el mas grande placer a su
pero enemigo mientras su mente aumenta el odio y el rencor que siente Steve en
contra de Abdul.


Abdul agotado cae sobre el inerte cuerpo de Steve d�ndole un
beso en los labios, mientras Steve esta sin sentido, dejando su verga dentro del
americano mientras termina de ser orde�ada por el sediento y sometido culo de
Steve.


Aun en su inconciencia, Steve siente como su culo tiene ese
duro miembro como se mueve dentro de �l, no esta totalmente fuera de la
realidad, pero poco a poco los movimientos cesan y cae en un sue�o profundo, por
la tortura. La debilidad y la fiebre, no sabe cuantas horas esta sin sentido,
siente como es desatado, sin poder recobrar la conciencia. Vuelve a caer en el
delirio y el sue�o profundo, �cu�nto tiempo podr�a haber pasado?. En algunas
ocasiones entre sue�os siente como algo duro entra en sus entra�as, pero ni
siquiera puede recobrar el sentido.


La conciencia esta volviendo al musculoso americano, abre los
ojos, para darse cuanta que esta, solo ahora, aun sobre la cama, su verga y
bolas est�n aun con la liga. Esta ahora acostado boca abajo. Su cadera queda al
borde de la lujosa y c�moda cama de Abdul, as� que sus rodillas est�n en el
suelo, su redondo y perfecto trasero queda justo para ser penetrado, sus brazos
no est�n encadenados a su espalda, sino a ambos �ngulos de la cama, debajo de su
ment�n hay una suave almohada que lo obliga a tener la cara levantada viendo al
frente.


-�ya despertaste?- la voz de Abdul lo saca de su somnolencia.


-aghhhhhhhhh. Un grito de dolor al sentir como un delgado
objeto es introducido en su adolorido culo, ( una pipeta) por el cual se empieza
a vaciar una sustancia en las entra�as del americano, el fri� de la extra�a pero
efectiva sustancia causa que Steve trate de soltarse, pero esta sujeto
fuertemente, sus brazos abiertos sobre si cara, en forma de "v". sus pernas
tambi�n separadas para que sus nalgas est�n lo mas separadas posibles, y su culo
pueda ser utilizado, el dolor inicial va cediendo y el fri� transform�ndose en
un calor que va aumentando de manera gradual, el calor en su culo, se va
convirtiendo en una hoguera, Steve siente como sus entra�as se consumen por la
alta temperatura que la extra�a sustancia le provoca, pero despu�s de eso el
calor se va convirtiendo en una sensaci�n de vac�o, de irritaci�n de querer que
su culo se a frotado, como si tuviese comez�n en las paredes del recto, y la
fricci�n lo pudiera satisfacer, de tener las manos libre, Steve se hubiera
metido el dedo en su culo para poder rascarse y aliviar ese ardor esa molestia
que le quema las entra�as y las hace sentir vac�as, aprieta su culo una y otra
vez.


-esta listo, se�or.- le dice Farrel a Abdul, mientras sale de
la recamara dej�ndolos solos.


-mgggh, aaahhggh. Ammmggghhhhh- Steve impotente f�sicamente
de poder liberarse o evitar lo que le espera, ahoga los gemido sin dejar de
mantener el in�til forcejeo, la perfecta espalda del soldado esta en todo su
esplendor, la perfecci�n de la ausencia de grasa en ese cuerpo perfecto, para
terminar en esos dos perfectos globos de dura carne que invitan ser pose�dos y
tomados, justo en la mitad de las redondas nalgas el rosado esf�nter del macho,
que esta disponible para ser usado, para ser penetrado, para ser sodomizado una
vez mas. Solo que ahora Abdul tiene planeado algo m�s. Coloca en ambas mejillas
de Steve un artefacto que le levanta la barbilla, y le sujeta las mejillas,
impidi�ndole voltear la cara, o dejar de mirar al frente, como si fuese un
caballo que solo tiene la opci�n de ver al frente.-ngghhhhh. Steve trata de
liberarse pero Abdul sabe como someter macho, m�s aun cuando tiene todas las
ventajas f�sicas.


Despu�s de haberle inmovilizado la cara, Steve queda boca
abajo con una parte de su cuerpo bajo la cama, su trasero en el borde,
perfectamente levantado esperando, invitando vergas. Abdul coloca frente a
Steve, un espejo.


-m�rate, cabr�n. Tu cara es la de un puto- le dice mientras
termina de colocar el espejo frente a Steve.


Aunque Steve sabia que lo hab�an marcado en la frente con esa
ofensiva palabra, para su pa�s, su familia y su virilidad, jam�s se hab�a visto,
su rostro luce un poco mas delgado, su cabello algo mas largo que cuando fue
capturado, su piel aun conserva el bronceado su varonil rostro de facciones
definidas p�mulos altos, y ment�n cuadrado, definido, con una frente amplia,
ahora luce la palabra "PUTO" a todo lo largo y ancho de su frente, las letras
est�n en un color bastante sobresaliente. Es un shock verse as�, �c�mo podr�a
presentarse ante su familia? Si acaso llegara a salir vivo de esta, no podr�a
volver a verlos, seria la verg�enza de su familia, de su pa�s. Los ojos de Steve
permanecen fijos viendo su rostro reflejado en el espejo, es como si fuera otro
hombre, distinto al que estaba acostumbrado a ver, esa marca cambiaba todas sus
emociones, su seguridad y su vida de ahora en adelante. Aprieta las mand�bulas y
muy a su pesar unas peque�as l�grimas humedecen sus ojos, su varonil rostro
contrasta con la ofensiva palabra, Steve esta absorto viendo su nuevo rostro
marcado ahora.


Sus pensamientos est�n ignorando sus sensaciones anales ese
vac�o, ese calor, solo sale de su estado cuando siente que la verga de Abdul
esta presionando su esf�nter anal para violarlo, mientras, ahora lo comprende,
lo violara mientras lo obligara a estarse viendo en ese espejo, a ver como su
rostro esta marcado mientras su culo esta siendo pose�do de nuevo.


-nghhhhhhhhhhh. Bastardo, te matare, te voy a matar, te voy a
mataghhhhhhhh- el dolor de sentir como la desafiante verga de Abdul lo embiste
de golpe por la posici�n en la que se encuentra es f�cil para Abdul, que una vez
penetr�ndolo, se recuesta sobre Steve, quedando el semivelludo pecho de Abdul
sobre la musculosa espalda del americano, la verga recorre el terreno interno de
Steve un terreno ya conocido y explorado en varias ocasiones.


-cada vez te va a gustar mas , puto, cada vez mas a gritar
mas de placer. Si�nteme, mientras empieza a hacer movimientos de vaiv�n en el
culo de Steve.


-ahhhhg, gnnnhhhhhh, dios, nooooghhhhhhhhh. Mas que el dolor
o l agresi�n es mas preocupante para Steve el que despu�s del dolor inicial, su
culo empieza a disfrutar mas y mas, apretando el duro miembro del enemigo en sus
entra�as, ahora sus ojos est�n fijos en la palabra puto en su frente, el espejo
le devuelve la imagen de su rostro, el perfecto rostro de esclavo, mientras
Abdul esta sobre el, la cara sonriente y agitada del enemigo sobre su espalda, y
sexualmente dentro de el. Steve trata de cerrar los ojos, pero Abdul le jala el
cabello de la nuca, para forzarlo a mantener abiertos los ojos, el placer en el
culo del americano esta intensific�ndose, los gemidos de placer y rabia contra
su propio culo, son cada vez mas frecuentes, Steve hab�a escuchado que la
fricci�n de la pr�stata es placentera pero esa sustancia que le aplican en los
pezones y el culo. Exacerban sus sensaciones. Transform�ndolo en un outo
ninfomano, ansioso de vergas. Su respiraci�n se va tornando m�s y m�s agitada,
mientras su mirada ve su cara su varonil rostro refleja adem�s de la ofensiva
palabra de puto, la excitaci�n la interna lucha de culo y mente en la que el
culo lleva hasta ahora la ventaja. Sus bolas duras por el exceso de leche
acumulado, y su dura verga sometida a la inactividad sexual, mientras que su
culo participa activamente en las pr�cticas sexuales, Steve no sabe como impedir
que su culo, recapacite que su culo reaccione. El placer es m�s y m�s.


-no te resistas- Abdul le habla al o�do mientras continua
penetr�ndolo, mientras sus verga entra y sale del perfecto culo varonil de
Steve- disfr�talo, cabr�n, eres mi puto, quieras so no, aunque te resistas,
tengo tu culo en mis manos, ac�ptalo, disfr�talo.


-nngoooohhhhhhhhh. Aaghhhhh. Mhhhmmmm. Ahhhhhhhhhhh- Steve
sin poder cerrar los ojos, ni evitar la penetraci�n solo esta con la vista fija
en el espejo, las ofensivas palabras de Abdul hacia su virilidad est�n entrando
en sus o�dos as� como su verga en su culo, lo pero de todo es que Abdul tiene
raz�n, esta logrando transformar el culo de Steve en un agujero insaciable.


-as�, as�, ac�ptalo, cabr�n ac�ptalo, te gusta, te gusta,
si�nteme dentro, puto, si�nteme, ahhhhhhhhh- el vaiv�n en el culo de Steve se
torna mas fuerte mas agresivo.- nunca dejaras de ser puto estas marcado, de la
cara y del culo, como puto, aunque tu mente siga siendo biga tu culo y tu cara
jam�s lo ser�n de nuevo, ajjaajajaj, puto, puto, m�rate mira tu cara, mira lo
que dice tu cara, sin que tengas necesidad de hablar, m�rate m�rate, m�rate,
cabron, jejejejejej.


-nggghhhhh, aahhhhhhhh, ahhhhhhhhhhhhhhh, d�jame yaghhhhhhh,
aghhhhhhhhhhh, dios, ahhhhhhhhhhhhh, ahhhhhhhhhhhhhhhh.


Steve siente como su coraz�n late mas fuertemente y su
respiraci�n se agita, mas aun como su culo se ha vuelto loco al sentir esa verga
en su interior, y el control de su mente sobre su cuerpo esta siendo anulado
casi al 100%, su culo esta en manos de Abdul, la mirada de Steve se clava en la
palabra puto sobre su frente mientras, su culo sigue experimentando el placer de
ser sodomizado, su realidad lo hace rebelarse.


-NNNNNNNNNNNNNOOOOOOOOOOOOOOOOOGGHHHHHHHHHHH- in fuerte grito
de desesperaci�n del macho, se escucha en toda la recamara.


-JEJEJEJEEJEJEJEJE- la risa de Abdul no se hace esperar lo
tiene casi donde lo quer�a aunque aun le falta�


CONTINUARA


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Relato: Soldado americano (05: Rostro de esclavo)
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