Cuba es un pa�s tropical donde el buen tiempo impera todo el
a�o y donde siempre hay momentos y lugares para el sexo. Esta historia comienza
en uno de mis d�as de vacaciones en Cuba.
Yo estaba en la playa con m� mujer, ella se llama Miriam, es
trigue�a, ojos negros, de mediana estatura, buen cuerpo, senos peque�os y tiene
25 a�os al igual que yo. No es porque sea mi mujer, pero puede llegar a atraer a
cualquier hombre sin necesidad de esforzarse mucho, ella es sin dudas apetitosa
y adem�s a la hora del sexo es bastante abierta, puede parecer a veces ingenua
pero no lo es a la hora de hacer el amor, le gusta probar cosas nuevas pero hay
algo que nunca ha hecho y que me gustar�a verle hacer.
Siempre me ha gustado la idea de verla teniendo sexo con otra
mujer sola o compartiendo conmigo esos momentos pero nunca le hab�a comentado
mis deseos.
Estando en la playa se nos acerca una pareja, un poco mayor
que nosotros, parec�an rondar por los 35 a�os, ellos no parec�an cubanos y no
hablaban nada de espa�ol o eso cre�a yo hasta ese momento.
Ella ten�a el pelo largo, muy bien cuidado, ojos verdes, muy
bonita, tanto que no dej� de mirarla, y adem�s, para completar ten�a una hermosa
cola tan empinada como incitando a ser cogida en cualquier momento y acompa�ada
de un par de tetas grandes que no sab�a como pod�an estar prisioneras en aquel
estrecho bikini.
El parec�a bastante normal, con la piel un poco quemada por
el sol, ten�a un cuerpo atl�tico pero algo en m� dec�a que no era capaz de
satisfacer a ese culito.
Nos preguntaron en ingl�s por un lugar para pasar la noche,
yo les dije que si por mi fuera ella la pasar�a conmigo en mi cama ya que estaba
riqu�sima pero el problema iba a ser con su marido que no cab�a en mi cama, todo
eso se lo dije en espa�ol para que no me entendieran y mi esposa tom� mis
palabras como una broma y se ri� un poco, d�ndome un codazo y dici�ndome que no
me hiciera el listo, en eso aprovecho ella y le dijo que exist�a un motel muy
cerca de la playa donde se pod�a pasar la noche muy agradable.
Empezamos a hablar un rato con ellos, conocimos sus nombres,
Megan y David, y yo no apart� la vista de sus grandes pechos y ella empez� a
darse cuenta, pero para mi sorpresa mis miradas eran correspondidas y eso empez�
a incomodar un poco a mi esposa, la cual empez� a decirle barbaridades en
espa�ol, como, "deja de mirar a mi esposo putica" o "si sigues te voy a golpear
que no te van a conocer en tu pa�s" entres otras cosas que le dec�a pensando en
que ellos no entend�an nada de espa�ol.
En un rato nos despedimos, le di la direcci�n de nuestra
habitaci�n, por si necesitaban algo y para mi sorpresa y la de Miriam ella se
despidi� con una frase que nos dej� paralizados, "Adi�s, nos vemos a la noche".
Siempre me ha gustado ba�arme en la playa al atardecer, gusto
que no comparte mi esposa, por lo que yo fui hasta la playa despu�s de que el
sol se hubo puesto pero todav�a no era de noche.
En la playa estaba Megan, sola, sobre la arena y con unos
bikinis de esos que son casi por gusto pon�rselos.
Comenzamos a hablar, y para mi sorpresa en espa�ol, ah� fue
donde me ester� de que sab�a espa�ol, que lo hab�a aprendido desde muy chiquita,
ya que su padre era argentino, aunque su madre canadiense.
Entonces entendiste todo lo que hablamos � le dije
Y con una sonrisa en su cara, que m�s que contenta parec�a
una puta me dijo
S�, todo
�Hasta lo que yo�?
Si, hasta lo que tu me propusiste, propuesta que no he
dejado de pensar.
S�, t� tienes un solo problema, y es que tienes todo lo
que le puede gustar a un hombre.
�Por ejemplo?
Eres una persona agradable, bonita, interesante, un par
de tetas envidiables por cualquier mujer, un culo mejor y sobre todo, una
cara de puta reprimida que me dan deseos de darte mi polla toda la noche,
hasta que digas "vasta".
�Y por que no lo haces?
Es que hay un problema
�Tu mujer?
Y t� marido. � le dije
Por mi marido no te preocupes, el no es mi marido, es mi
hermano.
Y dicho esto me empez� a tocarme el pene, que por cierto, de
imaginarme lo que pod�amos estar haciendo ya estaba a mil. Se acerc� m�s a m� y
me dijo en el o�do:
- de esto no tiene por que enterarse tu mujer, te voy a dar
una cogida tan grande como nunca te la han dado, pero me vas a deber toda una
noche de placer.
Me sac� la polla y empez� a darme una de las mamadas mas
ricas de mi vida, me pasaba la lengua por todo mi miembro, empapado de saliva, y
chupaba como una puta, al mismo tiempo me pajeaba y yo gem�a de placer al como
se la tragaba entera, ella estaba en una posici�n excelente para la vista, le
ve�a todo su culo, ir�nicamente tapado con su diminuto traje de ba�o. Yo empec�
a tocarla y me dijo:
�Te gusta mi culito?
Ya te dije que lo tienes hermoso, que desde que te vi
tengo deseos de cog�rtelo.
�Y qu� esperas?
Sin pensarlo mas la dej� completamente desnuda, ya era
completamente de noche, su silueta era perfecta, empec� a besarle sus pezones,
eran grandes y se retorc�a de placer cada vez que se los mord�a, poco a poco fui
bajando hasta su co�o, completamente mojado, lleno de sus jugos, los cuales me
fui tragando poco a poco, le pasaba mi lengua por su cl�toris hasta que se
empez� a correr en mi cara, de su vajina sal�an chorros de su l�quido, nunca
hab�a visto algo similar, eso me calent� much�simo, hasta que ella me dijo:
�Qu� pas� con mi culito, lo quieres o no?
Entonces ella se puso en cuatro y me ense�� todo su culo,
grande que ten�a el hoyo, entonces le arrim� mi verga y la encul� con todo,
empez� a gemir y gritaba, est�bamos en la playa, la idea de que alguien nos
pod�a sorprender me excitaba mucho. Cada vez ella me abr�a m�s sus piernas, y
quedaba m�s expuesta a mis embestidas.
Mientras la enculaba, le acariciaba sus tetas, excelentes
tetas, que pod�an con tan solo mirarlas provocar una erecci�n. Se corri� otra
vez, esta vez m�s intensa, la sensaci�n que produc�a su orgasmo en mi pene
dentro de su culo me excit� de tal manera que tuve que controlarme para no
llegar y derramar mi semen en su culo. Ella lo not� y me dijo, agu�ntate, quiero
tomarme todos tus jugos. Le saqu� la polla de su culo y r�pidamente empez� a
chup�rmela y me dec�as cosas como "para que veas lo puta que soy me la voy a
tragar toda" y no pude m�s, empec� a descargarle todo mi semen en su cara, ella
se lam�a todo lo que pod�a y el resto se ayudaba con su mano para llev�rselo a
su boca, no qued� rastros de semen.
Hab�a tenido una de mis mejores corridas, con aquella
desconocida.
Ya termin� el trabajo, despu�s paso por tu habitaci�n
A que vas a pasar (yo le pregunt�)
(y con su cara de perra me dijo) Para hacer cumplir una
promesa
Y se fue� mientras caminaba se iba poniendo partes de su
traje de ba�o y su silueta se perd�a en el horizonte.
Fui para la habitaci�n pensando en Megan, en lo que podr�a
hacer cuando esa misma noche fuera a mi habitaci�n, con mi esposa.
Al llegar a la casa me encontr� con Miriam, me pregunto por
qu� me hab�a demorado y le respond�
Estaba so�ando
�Con qui�n?
Contigo
�Y que so�abas?
So�aba que yo me cog�a a la extranjera (Megan) y t� nos
mirabas.
�Y que m�s?
Que a ti te gustaba que me la cogiera
Not� algo de excitaci�n en Miriam, entonces ella me dijo, es
solo un sue�o, y yo le respond�
Pero podr�a hacerse realidad�
Continuar�