Mi Pap� era un directivo importante de una cadena de TV de mi
pa�s, y muchas veces, en los programas de entrevistas de la cadena, Pap� se
ocupaba de conseguir a gente famosa, a alg�n showman � actor yanqui. Debido al
mundillo en el que estaba, muchas veces viajaba con �l muy lejos por asuntos de
trabajo, lo cierto es que siendo ni�a ya hab�a conocido medio mundo y parte del
otro medio. Siendo tan chiquita, yo no entend�a aquellas largas reuniones y me
limitaba a jugar y divertirme conociendo lugares ex�ticos y divertidos. Mi Pap�,
que me quer�a mucho, se ocupaba de m� tanto como pod�a para que no me sintiera
sola y siempre ten�a un poco de tiempo para estar conmigo. Conforme los a�os
fueron pasando, aquello se me hizo algo natural, y en cierto modo familiar, pues
la gente del estudio ya me conoc�a de sobra y me mov�a a mis anchas por �l, como
si estuviera en mi propia casa.

Un d�a hubo mucha agitaci�n. Pap� estaba realmente
alborotado. Me fui a preguntarle porqu�, y amablemente me dijo que fuera a otra
parte, que ten�a asuntos que tratar. Debido a mi curiosidad, me acerqu� a un
cameraman, que estaba algo lejos del tumulto, y le pregunt� a que se deb�a tanta
confusi�n. �l me mir� con cierta extra�eza, quiz� por interesarme por cosas de
mayores, pero amablemente me respondi�.

-Tu Pap� ha perdido al invitado principal de esta tarde para
el programa. En el �ltimo momento recibi� una oferta mejor para otro programa y
ahora est�n como locos buscando alguien para suplir el espacio en blanco que se
ha producido. Sinceramente espero que lo arreglen de alg�n modo � si no habr�
muchos problemas.

De repente me preocup� mucho por Pap�, y dese� desde el fondo
de mi coraz�n que alguien viniera, que se solucionara. Me fui de all� para no
ver las discusiones y me encerr�, como siempre hac�a, en el despacho de Pap�,
que casi siempre estaba vac�o dado que �l iba de un lado a otro. Me puse a jugar
un tiempo hasta que, mirando por el cristal que daba al estudio(un espejo de
doble cara, de los que se ve por un lado pero no por el otro) y vi que todo
estaba en calma. Supuse que todo estaba arreglado y baj� a ver. Hab�a un grupo
alrededor de alguien y me acerqu� a mirar. Fue cuando lo vi.

Alto y arrebatador, Tiziano Ferro estaba en el estudio, dando
apretones de manos y saludando como toda una estrella que era, con una sonrisa
bell�sima que me cautiv�. Tiziano Ferro era mi cantante favorito y no pod�a
creer que realmente lo tuviera ante mis narices. Una fuerte sacudida me recorri�
de lado a lado, lo mismo que a �l cuando me mir�, aunque no comprend�a porqu�.

-Tiziano-anunci� mi Pap�-, te presento a mi hija, Mary Beth.
Mary Beth, �ste es Tiziano Ferro, aunque supongo que ya lo conoces por la prensa
y la TV. Tiziano es un viejo conocido m�o y le ped� un favor para que viniera
con nosotros y fuera nuestro gran invitado esta tarde.

Se dieron una palmada en la espalda y un apret�n de manos
como lo m�s natural del mundo. Yo casi quer�a matar a Pap� de la rabia, �porqu�
�l no me hab�a contado que conoc�a al hombre de mis fantas�as, a mi cantante
favorito?. Yo salud� con algo de timidez y �l tambi�n, como si estuviera
cohibido. �C�mo pod�a �l cohibirse por verme?, �acaso yo le hab�a impresionado?.
Me apart� de all� y me alej� cuando vi a Marco, uno de los altos cargos amigo de
la familia de toda la vida, que me mir� divertido.

-�Que te pasa, bambalina?, �es que acaso te gusta Tiziano?.

-�Gustarme?...yo no�no�es que�bueno, yo�no sab�a que �l�

Marco ri� con todas fuerzas con expresi�n jocosa.

-Ay que ni�a �sta-dijo-, tan chiquita y ya pensando en
machos.

-����Qu�ee-exclam� sorprendida-!!??.

-No disimules Mary Beth. Se te ve a la legua que te gustar�a
montar a lomos de �l-me gui�� un ojo-. No tienes de que avergonzarte ni�a. Es
normal que sientas eso.

-Yo no siento eso-dije enfadada queriendo convencerle, y de
paso convencerme a m� tambi�n-. Es que me ha impresionado verlo cara a cara.

-Ya-dijo airado-, claro�

Se fue y me dej� all�, con aquellas palabras grabadas en mi
mente: "te gustar�a montar a lomos de �l". �Ser�a verdad que deseaba hacer con
�l esas cosas que se supone hacen los adultos?. A mis 15 a�os, a�n nunca hab�a
hecho "eso", que algunos amigos y amigas dec�an era lo m�s rico del mundo, pero
al verle algo despert� dentro de m� y no pude negar la evidencia. De lejos lo
mir� y me sent� muy azorada, acalorada como si estuviera en una sauna a toda
presi�n. Me fui a remojarme un poco y luego, desde el despacho de Pap�(�l estaba
justo detr�s de las c�maras), vi como grababan el programa y una actuaci�n suya,
que sent� como si me cantara a m�. Cuando acab� el rodaje, hubo muchos aplausos
y abrazos, alg�n apret�n de manos y Pap� y Tiziano hablaron algo durante unos
minutos. Luego Pap� fue hacia un rinc�n del estudio y Tiziano desapareci� del
plat�. "Por lo menos lo he visto", suspir�. De golpe alguien quiso abrir la
puerta del despacho, pero estando cerrado no pudo entrar. Entonces la persona
del otro lado habl� y vi que era Tiziano. �Por qu� quer�a entrar?. R�pidamente
quit� el cierre y �l entr�, quedando sorprendido de verme dentro.

-Hola Mary Beth. Tu padre me ha dicho que subiera, que �l
ir�a a su coche a recoger unos papeles y luego charlar�amos aqu� un rato. �Qu�
haces aqu�?.

-Yo-dije bajando la cabeza-�ver�s, me gusta venir mucho aqu�.
Pap� casi nunca est� en el despacho y el cristal es de doble cara. Desde aqu� lo
veo todo pero nadie me ve. Adem�s, a �l le gusta que yo est� aqu� porqu� as�, si
pasa algo, sabe donde estoy.

-Si no te importa, me gustar�a que te quedaras haci�ndome
compa��a. Me parece algo raro quedarme aqu� solo.

-Claro-dije por instinto-. Me quedar�, pero solo hasta que
Pap� venga. Por cierto, �c�mo le conociste?.

-�A Martin?, hace un tiempo, en mis inicios, �l me ayud� con
mis contactos y me procur� ayuda. Le debo tanto como a mi manager.

Sent� un fuerte arrebato de orgullo al saber que gracias a mi
Pap�, Tiziano se hab�a convertido en la estrella que era. Nos pusimos a hablar
durante mucho rato, y me extra�� que Pap� tardara tanto en volver de coger unos
papeles, fue en ese momento cuando uno de los muchachos del catering se acerc� y
nos dijo: "El se�or York me ha dicho que ha de ir a su casa, que volver� dentro
de una hora porqu� los papeles los dej� all�". Se fue y me qued� mirando a
Tiziano. Sola con �l, Pap� lejos�Era la ocasi�n perfecta. Fue cuando comenc� a
desviar la conversaci�n.

-�Por qu� al verme por primera vez te quedaste tan
sorprendido?.

Aquello lo cogi� de sorpresa, se le ve�a en la cara.

-�Aquello?...ah�es que�eres muy guapa�y tu belleza me
impresion�para tu edad est�s muy bien�ser�s una mujer bell�sima�

Estuvimos hablando un buen rato, hasta que Pap� volvi� de
casa y nos encontr� charlando. Esboz� una amplia sonrisa.

-Que bien que ya se conocen-dijo al vernos-.

-Pap� te odio-dije son iron�a-. �C�mo no me dijiste que
conoc�as a Tiziano y que le hab�as ayudado tanto a convertirse en cantante?.

-No le di importancia porqu� ya conozco a mucha gente. No
sab�a que �l te afectara tanto-me espet� encogi�ndose de hombros-.

-Tiene una hija muy bella y muy simp�tica-dijo Tiziano,
mientras yo me enrojec�a a m�s no poder de tanto halago-. Creo que seremos
amigos el tiempo que est� aqu�.

-�Te vas a quedar aqu�-pregunt� sorprendida-?.

-Tiziano va a permanecer en la ciudad una temporada-anunci�
Pap�-. Tiene algunos compromisos y estar� por unas semanas, m�s o menos.

Aquello fue una alegr�a que no pude reprimir. Pap� me dijo
que me fuera porqu� ten�an asuntos pendientes. Me fui a casa dando saltitos de
felicidad. No cab�a en s� de gozo. Mi cantante favorito iba a quedarse en la
ciudad, �y �ramos amigos!. Para una ni�a como yo aquello era mejor que si me
hubiera tocado la loter�a.

Cada d�a Tiziano y yo, siempre y cuando tuviera tiempo libre,
sal�amos a pasear, a ir de compras, al cine, a sentarnos en el parque�a ser
buenos amigos. Las dem�s chicas que nos ve�an y nos paraban para que �l firmara
aut�grafos me miraban muertas de envidia, y �l a veces me abrazaba para ver como
ellas reaccionaban. Era muy divertido. Y cada d�a nos conoc�amos m�s, mucho m�s.
Todo fue muy natural, una lenta pero inexorable progresi�n de la uni�n de dos
personas. Yo me sent�a en el cielo a su lado y �l tambi�n estaba muy a gusto
conmigo. Al cabo de dos semanas ya �ramos �ntimos y charl�bamos de temas que
normalmente yo no hubiera hablado. Un d�a que est�bamos en mi casa le vi muy
cabizbajo.

-�Pasa algo-pregunt�-?.

-Me marcho dentro de una semana, � quiz� menos. Mi manager me
lo acaba de decir esta ma�ana, y no s� cuando podr� volver.

Aquello fue una conmoci�n para m�. Mi mundo de perfecci�n se
hizo a�icos con el mazazo que la realidad suele imponer en las ilusiones
humanas. No pude evitar las l�grimas que corr�an en sprint por mis mejillas. �l
se sent� a mi lado y me abraz�.

-No por favor no me llores-dijo enjuag�ndome las l�grimas-.
No quiero irme con este mal trago. T� has sido lo mejor que me ha pasado en
mucho tiempo y no quiero verte as� de mal, �ok?.

-Pero te ir�s, y te echar� mucho de menos-solloc�-.

-Mary Beth-me dijo, en tono vehemente-�Las chicas, por lo
general, me tienen miedo. S� que suena raro, pero es as�. La fama las intimida.
Se acobardan y mucho.

-No puede ser-protest�-. Cuando sal�amos los dos ellas
parec�an muy lanzadas.

-Iban en grupos-me replic�-, y t� ven�as conmigo. Pero cuando
voy solo y una chica viene, es muy cortada, casi son incapaces de hablar. Pero
t� no fuiste as�, y eso me gust� mucho. Por eso quiero verte alegre.

Aquellas palabras me confortaron. Sonre� y me abrac� a �l.
Necesitaba de un abrazo para recuperar la felicidad de los d�as pasados. �l me
sonri� acarici�ndome el pelo y besando mi frente. Puso su mano bajo mi barbilla,
alz� un poco mi cabeza, y entonces, ocurri�.y me bes�. Mi madre que beso. Me
electriz� desde la cabeza hasta los dedos de los pies. Nunca me hab�an besado, y
ni de lejos imagin� que fuera as�, tan intenso, tan v�vido. La dulzura de sus
labios pegados a los m�os me derriti� literalmente en sus brazos. No s� cuanto
dur� ese beso pero se me hizo eterno. Esa tarde recib� un regalo del cielo, que
jam�s olvidar�a, y que me hizo sonre�r varios d�as.

La �ltima semana a su lado fue mucho m�s �ntima desde
entonces. Tiziano y yo nos sent�amos como novios, y nos bes�bamos de vez en
cuando, sin estar pendientes de ello a todas horas. Respetando sus compromisos,
pas�bamos los d�as como uno solo. A un d�a para que se fuera, esa noche,
decidimos estar en su habitaci�n del hotel, sin hacer otra cosa que estar
juntos. Llev�bamos abrazados varios minutos cuando me bes� de nuevo y me ense��
lo que era besar con lengua. Hab�a una atm�sfera muy sensual en la habitaci�n.
Ambos est�bamos embargados por un sentimiento que nos transportaba muy lejos de
all�. Los dos lo dese�bamos, lo quer�amos, y lo �bamos a tener. Tom�ndome de la
mano me llev� a su cuarto. Sonre�amos como colegiales. Volvimos a besarnos pero
esta vez hab�a algo m�s que ternura, hab�a pasi�n, lujuria, cari�o y mucho amor.
Me gust� tanto que r�pidamente cerr� la puerta y me sent� en sus rodillas para
volver a besarme con mi amor. Me dej� hacer por �l y me desvisti� de cintura
para arriba. Se qued� mir�ndome extasiado.

-Tienes los pechitos m�s bellos que he visto en mi vida.

Me sent� orgullosa por sus palabras, orgullosa de mi cuerpo
que le gustaba tanto. Se lanz� a com�rmelos y antes de darme cuenta su boca
pegada a mis pezones me daba un gusto que nunca hab�a sentido. Me encontr� con
las mejillas enrojecidas de placer y mi cuerpo temblando de emoci�n. Tiziano se
apropi� de mis pechos y los acariciaba y tocaba como harina de pan que estuviera
amasando. Yo gem�a y jadeaba mientras perd�a la noci�n de la realidad. Al
mirarle, se quit� la sudadera y me mostr� su torso desnudo, yo me cre� morir de
emoci�n. Se echo sobre m� y sent� la maravilla de su peso sobre mi cuerpo.
Cuando me toc� entre las piernas lo hizo tan delicadamente que ni siquiera pude
pensar en apartarlo por el miedo instintivo que surge por ser la primera vez.
Sus manos hac�an maravillas con mi inmaculada vulva, que rico me hac�a sentir.
De repente se retir� un momento de mi cuerpo y me asust�.

-�No-grit�-!, no te vayas. No me dejes as�

Emiti� un gemido, con el que me dijo claramente que antes
morir�a que dejarme. Al mirarle, se baj� los pantalones hasta los tobillos y vi
su cuerpo desnudo. ��Ay dios m�o que Adonis, que perfecci�n de macho ten�a ante
m�!!. Quer�a que me desgarrara a mordiscos, que me poseyera, que me hiciera
totalmente suya, que me amara como nunca m�s amar�a a nadie en su vida. Quer�a
fundirme, perderme en �l. Lo quer�a todo.

-��sta es tu primera verdad-me pregunt� con una ternura
desbordante-?.

-S�, lo es-respond� ruborizada-.

-No tengas miedo-dijo sonriendo-. Ser� algo maravilloso.

Con algo de timidez acerqu� mis manos a �l y movida por la
curiosidad acog� su miembro entre ellas. Fue lo m�s raro y excitante del mundo:
caliente como un hierro al rojo vivo y duro como el m�rmol. No supe como, pero
comenc� a pasar mis dedos por ella, jugueteando con ella y extasi�ndome con su
tacto. Luego, se abalanz� sobre m� para volver a besarme y mojando sus dedos con
su saliva me acarici� en mi rajita para mojarla. Not� sus dedos recorri�ndome mi
cuca de lado a lado, mientras yo gem�a y gem�a interminablemente. Me costaba
creer que estuviera viviendo algo tan precioso y extraordinario. Con firme
determinaci�n, se bebi� todos mis jugos y se puso sobre m�, con su miembro
apuntando a mis entra�as. Me asust� un poco y �l lo percibi�. "No te
preocupes-me dijo-. Doler� un poco, luego s�lo gozar�s". Asent� sin hablar y con
la delicadeza del amante enamorado, perfor� mis entra�as. Fue un shock tremendo,
un dolor como nunca jam�s sent�. All� estaba yo, desnuda junto a Tiziano Ferro,
que me estaba haciendo el amor por primera vez, sintiendo que me part�a en dos.
Nos quedamos un poco all� quietos mientras notaba su verga dentro m�o,
acomod�ndose a estar all� dentro. Me abraz� para tenerme pegada a �l y comenz� a
meter y sacar una y otra vez, una y otra vez dentro de m�. Le aferr� para
tenerle bien cerca y cruc� mis piernas a su alrededor, haciendo sin saberlo que
mi cuca se abriera m�s para �l. Estaba disfrutando como no hab�a disfrutado
nunca y de mi boca sal�an gemidos incontrolados y palabras de amor que me
costaba pronunciar bien. Bes� todos los rincones del cuerpo de mi amado mientras
�ste me hac�a suya. Baj� una mano y not� como su verga entraba y sal�a de mi
cuerpo. Me relam� como quien saborea su dulce favorito y le acarici� por todos
lados. Poco a poco sent� como algo iba creciendo en mi interior, y el rostro de
Tiziano se tens�. Algo iba a pasar, algo muy gordo, pero en aquel momento era
incapaz de formular un pensamiento. Solo pod�a disfrutar y disfrutar de esa
experiencia, la m�s majestuosa de mi vida. Mi amor me dijo "Prep�rate para
gozar" y yo sonre�, aceptando sus palabras. Sus acometidas se hicieron m�s
r�pidas, y tras un frenes� liberador, los dos gozamos como jam�s cre� que se
pudiera gozar en la vida. Sent� todo su fuego ardiendo en mi interior, toda su
esencia dentro de m�. Mi respiraci�n era muy forzosa, mi cuerpo sudaba y
atray�ndole, nos volvimos a besar y quedamos abrazados durante un buen rato.
Nunca he vuelto a sentirme tan dichosa que en ese momento: abrazados tras hacer
el amor, tan �ntimamente unidos. Por una noche, �l hab�a sido m�o, y de nadie
m�s.

A la ma�ana siguiente tuve la desgracia de despertar tarde
para ir a despedirle al aeropuerto, y corr� como una posesa hasta llegar all�.
Por desgracia �l estaba rodeado por esquizofr�nicas fans que le ped�an
aut�grafos y besos. �l se defend�a como pod�a. De lejos intent� llamarle pero no
lo consegu�, � al menos eso cre�. En la puerta de embarque, justo antes de
entrar, se volvi� y me mir� directamente. Me gui�� un ojo, me sonri� y se fue,
con expresi�n complacida y feliz. Lo cierto es que me hab�a dado su tel�fono y a
partir de entonces somos amigos �ntimos, hablamos a menudo, y es una persona
maravillosa. Le quiero much�simo, y aunque nunca volvi� a repetirse lo de
aquella noche en la habitaci�n de su hotel, lo cierto es que con esa vez nos
vali� a los dos. Quedamos como grandes amigos, nos queremos mucho, estamos en
continuo contacto, llam�ndonos � dej�ndonos mensajes, y cada vez que me dice que
pasar� por la ciudad, yo solo le espero como si fuera su novia, sabiendo que el
tiempo que pasaremos juntos ser�, con diferencia, el mejor tiempo de nuestra
vida�