Mi inicio en la zoofilia con Carlos
Ac�, les va mi primer relato. Me llamo Ver�nica, vivo en San
Luis Potos�, M�xico, tengo 24 a�os y esto sucedi� cuando tenia 19 a�os.
Hasta ese d�a, mi experiencia sexual, se limitaba, al sexo
convencional, besos y caricias con mi novio, al que conoc�a desde los 14 a�os y
nuestras relaciones sexuales, no me llevaban al orgasmo y tenia que fingirlo
Lo �nico que me produc�a placer y me excitaba mucho era
cuando regresaba del colegio, con mi pollera cortita, sub�a al autob�s mas
repleto y pegaba mi cola contra hombres viejos de rostros curtidos por la edad,
me produc�a placer ver los esfuerzos que hac�an, para rozarme con su pene y ver
la mancha de semen en sus pantalones, me calentaba tanto, que cuando llegaba a
casa, me masturbaba pensando que les chupaba esos miembros grandes y alcanzaba
los orgasmos mas fuertes de mi vida
A los 18 a�os, mis gustos sexuales se ampliaron, y compraba
videos de zoofilia y de doble penetraci�n y me dispuse a ponerlos en practica,
con mi viejo perro, cuando lo ba�aba le acariciaba su pene y me lo pon�a en la
boca y lo chupaba hasta tragarme todo su esperma, aunque no lo dejaba penetrarme
Cierto d�a fui a pasar unos d�as a la granja de mi abuela,
que hab�a vuelto a casarse, con un hombre de unos 65 a�os, llamado Carlos. Como
mi abuela estaba enferma y pasaba casi todo el d�a en cama yo sal�a sola a
recorrer la granja, al llegar al establo vi un burro con una enorme erecci�n,
aunque el tama�o de su miembro era inferior a los que hab�a visto en las
pel�culas de zoofilia.
Mire hacia todos lados y como estaba sola me acerque y tome
su largo pene entre mis manos, el burro dio un respingo y se calmo, me agache y
me baje la bombacha, para masturbarme con una mano, mientras que con la otra
acercaba su pene hacia mis labios, para saborear su esperma, la voz de Carlos me
trajo a la realidad, la verg�enza me dominaba, pero al girar vi a Carlos con su
enorme pene apuntando a mi cara, me dijo que me quedara tranquila, que todo
quedar�a entre nosotros pero quer�a participar de la acci�n.
Puso tranca a la puerta del establo y nos desnudamos
completamente, para estar mas c�modos, me puse en de rodillas, me incline hacia
delante y comenc� a chupar el miembro de ese magnifico animal, Carlos me chupaba
la vagina, mientras introduc�a sus dedos untados con vaselina en mi ano, que se
dilataba mas y mas, en un momento cambio sus dedos por su enorme pene y comenz�
a follarme de una manera r�tmica y descomunal, para su edad, al rato acab� en mi
interior mientras que el burro acababa en mi boca y su r�o de esperma, me dejaba
mojada por todas partes Carlos remplazo su pene por un enorme consolador.
Mi ano estaba dilatado como nunca lo hab�a tenido, pero
faltaba lo mejor, el burro hab�a recuperado su erecci�n Carlos me unto el ano
con los restos de esperma del burro y me puso en posici�n y gu�o el pene del
burro en mi ano, el burro al sentir el calor de mi ano, dio un paso hacia
delante e introdujo su miembro hasta la mitad y empez� a moverse
desenfrenadamente, mis gritos de dolor cambiaron a gritos de placer y cuando el
burro eyaculo su semen en mi interior, me sent� desfallecer, su miembro sali� de
mi interior y r�os de semen ca�an de entre mis piernas, me sent�a plena,
satisfecha, me sent�a la mas puta cubierta de leche humana y animal, Carlos me
pregunto si tenia sed, le dije que si y acto seguido empez� a orinarme en la
cara yo beb�a su or�n de macho r�stico y el re�a y me dec�a que har�amos grandes
cosas juntos, me prometio ir a la granja de su amigo Andr�s, que criaba perros
de raza, pero esa es otra historia.