Mi vecinita
Hola a todos, a continuaci�n les voy a contar la primera vez
que cumpl� mi sue�o de comerme a mi vecinita de 14 a�os.
Ver�nica tiene 14 a�os, es una ni�ita con una cara
espectacular, de 1.60 de alto, piel blanca, pelo casta�o, un cuerpito delicioso,
delgado, con un culito totalmente parado, duro como una piedra y una par de
teticas que apenas llenan su brasiere. Yo tengo 24 a�os y la nena vive desde que
puedo acordarme en el apartamento que queda frente a mi ventana, solamente fue
hasta unos meses que una noche mientras estudiaba para los ex�menes de la
universidad pude ver a esa ni�a desde mi cuarto. Yo estaba concentrado en mis
libros cuando levant� mi mirada y vi algo que me dej� congelado, era Ver�nica,
con una pijama que dejaba ver toda su silueta a trav�s de la luz de su cuarto,
sus piernas y su culito se ve�an incre�bles, pude verla mientras frente a su
tocador se peinaba antes de dormir, estaba divina, yo solo pod�a pensar en
comerme esa cuquita y lamer cada cent�metro de su cuerpo, obviamente esos cinco
minutos que pude verla me pusieron la verga a mil, lo cual tuve que terminar con
una paja que alejara de mi mente de esa ni�a mientras terminaba de estudiar.
Durante los siguientes d�as me pasee en boxers con las
cortinas abiertas cuando me despertaba y antes de dormir, asegur�ndome antes que
Ver�nica pudiera verme, durante unos d�as no vi reacci�n alguna, hasta que
finalmente una noche mientras me desvest�a para dormir, la vi de reojo
espi�ndome desde su ventana, no lo pod�a creer, all� estaba ella con su pijamita
semitransparente medio oculta tras una cortina, decid� que lo mejor era
aprovechar es oportunidad y me desnud�, acto seguido, me acost� en mi cama y me
di un pajaso como nunca, saber que Ver�nica estaba vi�ndome me pon�a aun mas
caliente, pude verla de reojo y darme cuenta de la expresi�n de su cara, ten�a
una mirada de lujuria que me dejaba totalmente claro lo que esa ni�a quer�a,
cuando me finalmente me vine, apagu� la luz y simul� dormir, entonces me asom�
por la ventana y trat� de espiar por su ventana. No pude verla claramente, pero
pude ver su silueta sobre la cama, la luz de la luna iluminaba su figura desnuda
y aunque no pude ver con mayor detalle supe que ella se estaba masturbando
mientras pensaba en lo que acababa de ver.
Al d�a siguiente, convencido de que ten�a que aprovechar el
estado de las cosas me fui a tocar a la puerta de su departamento cuando me di
cuenta que hab�a llegado del colegio, como era relativamente temprano supuse que
solo estar�a ella. Cuando abri� la puerta sus ojos se fijaron en mi e
inmediatamente se ruboriz�, sin preguntarle segu� a su departamento y le dije
que mi computador se hab�a da�ado y que como ellos eran los �nicos vecinos que
ten�a cerca en ese momento necesitar�a que me prestara el suyo, ella simplemente
asinti� con la cabeza mientras yo segu�, una vez adentro me fij� en ella, estaba
preciosa, tenia su faldita de colegiala a cuadros que me dejaban ver esas
piernas largas y delgadas, se hab�a quitado su saco y solo tenia una camisa que
dejaba ver un poco sus teticas y el brasiere, le pregunt� que como estaba, que
como le iba en el colegio otra clase de estupideces para iniciar la conversaci�n
y romper el hielo.
Una media hora mas tarde, cuando ella ya estaba mas relajada
y cuando hab�a mas confianza entre los dos, le pregunt� si ten�a novio, se
volvi� a ruborizar y t�midamente me dijo que no, al yo preguntarle como era
posible, si ella era una ni�a muy linda que deb�a tener a todos los compa�eros
del colegio muertos por ella, solamente se ri� y en una voz muy baja me dijo, -
en serio crees que soy linda?- , en seguida vi mi oportunidad y me le acerqu�,
en voz baja le dije:
-obvio Verito, si tu eres preciosa, si yo tuviera tu edad
seguramente que serias mi novia-
mientras le pasaba lentamente mi mano por su pelo y le
acariciaba su cara, alcanc� a notar su nerviosismo y su coraz�n que lat�a a toda
marcha, en ese instante me decid� y le di un beso en la boca, muy suave para ver
como reaccionaba, ella solamente cerr� los ojos y se dej� llevar, con mucha
suavidad, para no asustarla, fui bes�ndola mas fuerte con la lengua y en su
cuello mientras o�a sus jadeos incrementarse a medida que se excitaba mas,
mientras mis manos rodeaban su cintura y lentamente fueron bajando hacia su
culito, era incre�ble, es el culo mas parado y mas duro que he podido sentir en
toda mi vida, por encima de la falda sent�a los calzones que bordeaban sus
nalguitas. Mi otra mano fue subiendo hacia sus pechos, los fui palpando y
comenc� a desabotonarle la camisa, ella mientras tanto estaba como totalmente
quieta y no se mov�a, cuando le met� mi mano entre su camisa para sentir sus
senos, dej� de besarme y me dijo bastante nerviosa:
�no sigas, esto est� mal, para ya!-
mientras se alejaba un poco, yo me detuve y la mire a los
ojos, acerqu� mi cara y mientras le mas daba besos le dije:
- tranquila Verito, mira que tu a mi me fascinas, yo no voy a
hacerte da�o y no va a pasar nada que tu no quieras-
d�ndome cuenta que deb�a excitarla aun mas.
En ese momento volv� a su cuello, pasando mi lengua por los
l�bulos de sus orejas, su nuca y su boca; la mano que antes tenia en sus senos,
la puse encima de su falda sobre su vagina haciendo movimientos cortos y presi�n
sobre su cl�toris, entonces Ver�nica aument� la cadencia de sus jadeos y elev�
su voz considerablemente, ah� supe que era m�a, comenc� a bajar suavemente sus
calzones, eran blanquitos y estaban muy mojados por sus flujos, cuando los ten�a
a la altura de las rodillas, la tumb� en el sill�n y sin quitarle la falda hund�
mi cabeza en su vagina, comenc� d�ndole largos lenguetazos de un extremo al otro
y haciendo presi�n sobre su cl�toris cada vez que sub�a, mientras tanto con mis
manos fui desabotonando su camisa y su brasiere; el sabor de su vagina virgen
era exquisito, al tiempo que me com�a sus abundantes flujos le presionaba sus
pezones rosaditos que para ese momento estaban totalmente parados, mi lengua no
paraba de moverse sobre y al interior de su vagina, pronto solt� uno de sus
pezones y dirig� mi dedo hacia sus nalgas acarici�ndole la entrada de su ano y
d�ndole peque�os empujones mientras lograba que su esf�nter se dilatara.
Fue en ese preciso instante cuando los gritos de Ver�nica se
hicieron mas fuertes, estaba teniendo un Orgasmo enorme, sus dedos se clavaron
en mi pelo y mi espalda mientras gritaba como una loca, cuando termin� de
venirse sobre mi cara yo ya me hab�a quitado toda mi ropa, me par� frente a ella
con mi verga completamente parada y le arranqu� la falda dej�ndola desnuda, esa
ni�a era un sue�o, sus senos estaban a medio formar, con unos pezones rosaditos
muy parados, el abdomen plano y bronceadito y una cuquita con poqu�simo pelo.
Inmediatamente gire su cuerpo para que quedara tendida sobre su pecho, dejando
ante mi el culo mas maravilloso que ustedes puedan imaginarse me tumb� encima
suyo y fui besando su nuca y su espalada mientras con un dedo segu�a presionando
su ano que se cerraba fuertemente cada vez que yo lo empujaba, con mi otra mano
volv� a sus tetas apret�ndole los pezones, mientras bajaba, lami�ndole su
espalda, llegu� a sus nalgas y las pude besar por fin, eran las nalgas mas
paradas y mas duras que hab�a sentido en mi vida, no fui capaz de aguantar mas y
enterr� mi lengua en su ano arranc�ndole un grito que me dejo ver cuanto lo
disfrutaba, as� continu� por varios minutos metiendo mi lengua por su culo y
chup�ndole su esf�nter.
All� estaba yo meti�ndole mi lengua por su culo y
masturb�ndola con mi mano libre, cuando sent� que no aguantar�a mucho mas,
Ver�nica tuvo su segundo orgasmo r�pidamente y aprovech� que estaba de espaldas
hacia mi, para levantar su cuerpo un poco y apuntar mi verga hacia su vagina, la
acomod� r�pidamente y se la met� de un solo envi�n hasta el fondo, ella emiti�
un peque�o gemido de dolor, pero como estaba tan mojada no fue muy fuerte,
empec� a bombearla con todas mis fuerzas mientras le met�a un dedo por el culo y
le segu�a apretando los pezones con mi otra mano. Pude ver su cara, estaba como
en un trance, sudando y con una expresi�n de lujuria que me mostraba que esa
ni�a se convertir�a en mi juguete favorito por los pr�ximos meses, despu�s de
unos minutos sent� que me iba a correr y saque mi verga y me le vine sobre todo
el culo, derrame varias oleadas en el que creo ha sido el orgasmo mas fuerte que
he sentido.
Nos quedamos tendidos en el sof� por un tiempo, callados
mientras volv�amos a recuperarnos, en ese instante vi el reloj, y vi que eran
las tres de la tarde, supuse que su madre no demorar�a en llegar, as� que me
vest� r�pidamente, antes de irme la bese nuevamente y le dije:
- amor, esto apenas comienza, ma�ana volver� a la misma hora
y seguiremos lo nuestro-
Ella solo pudo asentir con su cabeza y me sigui� con su
mirada mientras sal�a de su apartamento.