Ella trabaja en la misma empresa que mi primo, pero en
diferente secci�n. Y yo estoy haciendo ah� mi servicio social, as� que la puedo
ver a diario y masturbarme pensando en ella, y por lo que he visto, no soy el
�nico que se masturba pensando en la conta, ya que he o�do comentarios acerca de
su cuerpo y de sus nalgas.

Lo malo es que si bien no soy el �nico que se masturba
pensando en su cuerpo, no soy de los que pueden conseguir algo m�s que
satisfacerse con mi propia mano, como estar�a por averiguar.

Resulta que una tarde mi prima estaba en la oficina de su
jefe inmediato, un se�or bastante chaparro y flaco, de aspecto p�lido, y con un
aire infantil, ella, como siempre, una mujerzota, con una minifalda que mostraba
sus gruesas piernas y una blusa de botones con los dos primeros botones abiertos
por el calor, por donde asomaban sus pechos amenazando con salirse, un peque�o
jaloncito bastar�a para dejar salir a ese par de melones redonditos y firmes.

Cuando entr� en la oficina, ya que yo soy el mensajero, el
se�or estaba notablemente nervioso, sin quitar la mirada del escote de mi prima
y mucho menos de sus piernas. Ella se sab�a deseada y jugueteaba con su jefe,
provoc�ndolo, excit�ndolo, ya que a cada oportunidad se agachaba mostrando sus
pechos o incluso se rascaba la pierna levantando su falda o abri�ndola por la
ranura. Yo estaba igual o m�s caliente que su jefe, por lo que me molest� que me
pidieran que saliera, me met� en la oficina de junto desde donde pod�a espiar.
Ve�a muy poco pero escuchaba perfectamente.

As� que escuche cuando �l le dijo que quer�a que se quedara
en la tarde a trabajar en unas cotizaciones. A lo que ella accedi�. La tom� de
la mano dici�ndole que era su mejor empleada, y ambos sonrieron. Despu�s el
se�or pareci� agarrar m�s confianza, y empez� a soltarse, se le acercaba cada
vez m�s y la miraba con deseo, ella se sinti� inc�moda, presa de su propio juego
pero ya era tarde, el jefe estaba ahora al mando.

Se levant� y ella permaneci� sentada, se pas� atr�s de ella y
se inclino por su espalda, asom�ndose por su escote, mi prima estaba congelada,
as� que el pudo observar de cerca esos pechos. La tom� de la mano y la invit� a
levantarse, accedi� como zombi, y el la abraz�, ella se zaf� pero el la jal� de
nueva cuenta y la abraz� por la cintura. Ella se quiso zafar de nueva cuenta y
el se enoj� much�simo, le dijo que si quer�a conservar su trabajo no dificultara
las cosas. Yo no pod�a ver y mi imaginaci�n volaba a mil por hora, escuch� que
accedi� y busqu� un lugar mejor, cuando encontr� una ranura para ver, el se�or
la besaba con deseo, la lam�a en la cara y en los brazos como gato, y acariciaba
su cuerpo con fuerza.

De un tir�n se abri� la blusa dejando escapar los pechos de
mi prima, y enseguida empez� a chuparlos hasta dejarlos rojos e inflamados, le
trat� de jalar la falda, pero como era muy ajustada no pudo, la jal� con fuerza
y se rompi� toda, al jefe le vali� madres y la recarg� en el escritorio, de un
tir�n le baj� la tanga, y le acarici� las nalgas con las dos manos, mi prima no
reaccionaba, no lloraba ni se quejaba, simplemente ah� estaba, como mu�eca, el
se�or se baj� el calz�n y sac� un miembro bastante corto pero muy grueso, raro
porque el era muy flaco. La tom� de la cintura y la penetr� suavemente,
disfrut�ndolo al m�ximo, se qued� unos instantes inm�vil para despu�s empezar
con el mete saca. Los senos de mi prima de balanceaban y ella apretaba los
labios pero no emit�a ning�n sonido. El verla ah� resignada mientras la embest�a
su patr�n me excit� much�simo. Sus piernotas se contra�an y se o�a el cuerpo del
se�or chocar contra las nalgas de mi prima. Despu�s la hinc� en el piso y sigui�
penetr�ndola por atr�s, lo que continu� hasta que se vino adentro de ella. Se
par� y le dijo que tendr�a un mejor empleo, siempre y cuando esa fuera la
primera vez de muchas por venir.

Mi prima sali� de la oficina, con un rostro sin expresi�n,
sali� r�pido para que no vieran su falda rota y que no ten�a tanga porque no se
la hab�a regresado, se fue en su camioneta lo m�s r�pido que pudo.

Ahora se viste un poquito m�s conservador, pero en m�s de una
ocasi�n he visto su camioneta en el estacionamiento y la de su jefe, cuando no
hay nadie m�s en las oficinas. Ojal� alg�n d�a pueda volver a ver su show.