Como conoc� a Julieta
Yo era un chico normal, delgado, de buena estatura y
generalmente bien aceptado por las mujeres. Desde peque�o tuve varios deseos
sexuales con mujeres, aunque nunca encontr� una persona con la cual
compartirlos, hasta que una noche conoc� a Julieta.
Julieta es una chica muy linda, no muy alta pero delgada, con
muy buenas medidas, unas lindas tetas, acompa�adas por un culo que tiene tantas
miradas lascivas que creo que no se pueden contar.
Una noche fui a bailar con mis amigos, al mismo lugar de
siempre. Entramos, yo me ped� un trago y me puse a buscar alguna chica con la
que pasar una buena noche, despu�s de un tiempo y de tratar de hablar con alguna
chica sin �xito la veo a ella; llevaba un vestido negro corto y su pelo suelto,
sus tetas sal�an de ese escote que tan bien le quedaba y no pude evitar mirarle
el culo, era tan hermoso que dif�cilmente podr�a olvidarme de �l. Ella supo que
la estaba mirando y se acerco a mi y me dijo:
Te vas a quedar mir�ndome o vas a decirme algo?
Ante una cosa as� solo atin� a invitarla a tomar un trago,
cosa que ella acept�, ya que su amiga se hab�a ido con un chico y ella no quer�a
quedarse sola tampoco.
En cuanto pedimos las primeras copas, no pude resistir y le
bes� la boca apasionadamente, ella correspondi� ese beso de una manera que nunca
en mi vida me hab�a pasado, fue el beso mas apasionado de mi vida hasta
entonces. Ella ten�a 19 a�os, era realmente hermosa y me sent�a dichoso de
pensar que me iba a montar a esa bebita tan linda, se me hacia agua en la boca
de solo pensarlo.
Despu�s de unas copas y besos, la invite a mi casa ya que
conversando ella me hab�a dicho que se tenia que quedar en la casa de su amiga
porque no viv�a en capital, pero considerando que su amiga estaba acompa�ada, no
quer�a molestar.
Al llegar a mi casa, seguimos bes�ndonos, comenc� a tocarle
esas hermosas tetas, ella gem�a de placer. Cuando quise tocarle su raja, me sac�
la mano y me dijo que era virgen, que ven�a de un pueblo del sur argentino, y
que ten�a miedo.
Esto me sorprendi� much�simo, una chica del interior, sola,
acepta venir a mi casa, y encima es virgen. Hab�a algo que no terminaba de
entender pero simplemente decid� seguir con mi juego, y trat� de hacerlo
nuevamente, pero esta vez mas despacio. Ella esta vez se dej� tocar, ahora gem�a
a�n mas, estaba desenfrenada. Le met� un dedo, me costo mucho, parece que
realmente era virgen, eso me calent� mucho mas, y le saque su tanga y le sub� un
poco el vestido que ten�a.
Ella estaba totalmente entregada para ese entonces, y yo
aprovech� mi v�a libre para acostarla en el sof� y sacarle completamente la
ropa. Me tir� encima de ella y le puse la punta de mi pene en su chochita.
Comenc� a empujar hacia adentro pero costaba (digamos que mi verga mide unos 20
cent�metros y es muy gorda), ella se moj� tanto que mi verga se escurri� en su
interior tan de golpe que ella pego un gemido que casi me deja sordo.
Espere un poco quieto a que se acomodara en su interior y
comenc� a subir y bajar, cada minuto las embestidas eran mas profundas y ella
gritaba; "met�melaaaaaaaaa todaaaaaahh!!!!!!!! Asiiiiiii asiiiiii!!!!!!!".
La puse en cuatro patas y se la volv�a a meter hasta el
fondo, ella se estremec�a, gritaba, lloraba, estaba como loca. Comenz� a
clav�rsela ella, empujaba con tantas fuerzas que casi caigo hacia atr�s.
Eso me puso loco, y no pude aguantar mas, acabando adentro
suyo como un perro, sal�a tanto esperma que se desbordaba de su vagina y le
goteaba hasta la rodilla a borbotones mi semen mezclado con su sangre.
Esa noche no pudimos seguir mas porque estaba muy dolorida,
ese fue el comienzo de algo que todav�a contin�a. Tengo muchas an�cdotas mas que
contarles, si es que les gustan.
Espero sus comentarios a
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