Relato: El lecherito de Gaby

EL LECHERITO DE GABY



Hoy quiero contarles lo que me sucedi� con mi amigo Gaby y su Lecherito.





No es un repartidor de leche, en lo estricto de la palabra pero al leerlo
comprender�n por qu� Gaby lo llama as�.



A Gaby lo conoc� hace muchos a�os, contest� un anuncio en una revista
especializada en contactos gay, me dio por escribirle, me contest� y as�
mantuvimos una amistad por correspondencia bastante prolongada, hasta que hace
un par de a�os empezamos a mandarnos E-mails y la correspondencia por correo
desapareci� de nuestras vidas, supongo que desapareci� de la vida de muchas
personas.



E-mail va E-mail viene, me fui enterando de la vida de Gaby, hasta que un d�a me
mand� una fotograf�a suya en la cual pude ver su aspecto de oso bastante peludo,
un tipo de cerca de treinta a�os con una barba y un bigote bastante cuidados, su
cuerpo rosado casi blanco en el que predominaba su abultada barriga, su pija se
pod�a ver poco en esa foto porque se asomaba de un calzoncillos blanco, pero
pude imaginarme que no era muy larga m�s bien gordita.



Voy a copiar aqu� dos de los mail de Gaby en los que me habla de que conoci� a
un Lecherito y como me lo descibi�.



10 May 2003 14:53:23 -0300 (ART)



De: "gabriel costa galana <>



Asunto: gaby



A: POR CUESTIONES DE PRIVACIDAD ESTE EMAIL FUE REMOVIDO



Hola Omar:



Estuve releyendo todos tus mails y no tengo ninguno como el que me pedis.



En Rosario vivo cerca del Parque Independencia hacia el centro de la ciudad.



Te cuento que consegu� novio.



Mi novio, 27 a�os, 1,70, 70 kg, pelo negro, juega al basquet, morochito, 18 x
5.5,y bien lecherito.



un abrazo enorme, besos,



Gaby



Fecha: Mon, 30 June 2003 13:45:10 -0300 (ART)



De: "gabriel costa galana <>



Asunto: gaby



A: POR CUESTIONES DE PRIVACIDAD ESTE EMAIL FUE REMOVIDO



Hola Omar: Como va? Espero que super bien.



Por aqu� esta haciendo fr�o pero no tanto, la semana pasada llego a hacer tres
bajo cero, pero tenemos la ventaja que de dia sale el sol y la temperatura sube
bastante.



A mi novio lo que mas le gusta es que le chupe la pija, si por el fuera estar�a
chup�ndosela hasta que se me acalambren las mand�bulas, mientras el se dedica a
chuparme el culo y a jugar con sus deditos en �l.



Te digo que es lecherito por las dos cosas, por que acaba siempre como si fuera
la primera vez, y por se aguanta tres y hasta cuatro por vez.



A m� lo que mas me gusta es cuando me pone en cuatro patas, me la apoya en la
entrada, me puertea con su cabezota, me agarra de las caderas y me la va
poniendo hasta los huevos, se prende de mis tetas y comienza a culearme sin
parar, puede estar 10 minutos, media hora, y hasta una hora.



Una noche me la tuvo puesta casi tres horas sin sac�rmela, �l guacho no quer�a
acabarme y yo ya ten�a el culo un infierno, le termin� rogando que me acabara, y
el disfrutaba dici�ndome al o�do lo puta que era y que le rogara por su leche.




Un abrazote.



Gaby Con semejantes mails describiendo lo que hac�a su lecherito, se me hizo
agua la boca y todo mi cuerpo con semejante ejemplar!! Le mand� un mail a Gaby
dici�ndole si no quer�a compartirlo una noche conmigo.



Medio en broma medio en serio me contest� que el lecherito era muy t�mido, que
no se animaba a hacerlo frente a otros y menos si eran extra�os.



Nunca me mand� fotos de �l, supongo que no tendr�a, porque si era tan t�mido no
querr�a tomarse fotos desnudo.



En Julio nosotros en Uruguay tenemos las vacaciones en la primera quincena y en
cambio en Argentina son las dos �ltimas semanas que se dan vacaciones a los
estudiantes.



La primera semana de las vacaciones me toc� tomar esx�menes, por ese motivo mis
vacaciones comenzaron en la segunda semana.



Me fu� a Buenos Aires a la casa de mi hermana, disparando del fr�o de
Montevideo, pero all� estaba igual.



Desde all� le mand� un mail a Gaby, dici�ndole donde estaba y pidi�ndole que
convenciera a su lecherito, que si aceptaba hacer un tr�o y me recib�a en su
casa, me ir�a hasta all�.



Despu�s de dos intentos y un rato de chateo finalmente lleg� la tan ansiada
respuesta positiva.



Adolfo que as� se llama el lecherito, hab�a aceptado a rega�adientes ya que
nunca se hab�a acostado con un extranjero.



Gaby me dijo que ten�a poco tiempo, porque el domingo siguiente que empezaban
sus vacaciones se ir�a al norte de la provinica de Santa Fe a la casa de sus
padres.



Claro, para �l empezaban sus vaciones en cambio para mi finalizaban, porque ese
domingo yo ten�a que regresar a Montevideo porque al otro d�a ten�a que
trabajar.



Arreglamos, de que ir�a el s�abado y pasar�a con ellos hasta el domingo en que
Gaby se ir�a a su pueblo y yo regresar�a a Buenos Aires para tomarme el Bus de
la Carrera que me traer�a nuevamente a Montevideo.



Le dije a mi hermana que me ir�a un d�a antes porque quer�a conocer a un amigo
que viv�a en Rosario y me iba para all� a pasar el fin de semana.



Sal� de la terminal de Retiro con todo mi equipaje, como a las 6 de la ma�ana,
para llegar a la Terminal de Rosario pasadas las 9.



All� me esperaba Gaby, nos reconoc�mos inmediatamente y nos dimos un abrazo muy
fuerte.



Tomamos un taxi y a los pocos minutos est�bamos cruzando la puerta de su
departamento, lo abrac� nuevamente y le di un beso en los labios.



-Al fin te conozco!! Vamos al dormitorio...



No me dejo� terminar la frase.



-Ya habr� tiempo para eso esta noche cuando venga Adolfo. Ahora te voy a llevar
a conocer la ciudad.



Su departamento tiene dos ambientes, o sea dormitorio y estar.



Dej� mi valija en el dormitorio y sal�mos con una ma�ana mu fr�a a recorrer lo
m�s interesante que ten�a su ciudad.



Su depto. queda cerca de las calles R�o Bamba y Espa�a unas tres cuadras del
Parque Independencia hacia donde me llev�.



Al pasar por un caf� entramos a tomar algo caliente, porque ninguno de los dos
hab�a desayunado y all� me explic� que ese Parque es uno de los m�s grandes e
importantes no s�lo de la Ciudad de Rosario sino de la Argentina.



Me mostr� el Hip�dromo, la Sociedad Rural, el Estadio Municipal, el Rosedal, el
zool�gico y las fuentes de Lola Mora.



En fin en ese parque hab�a de todo hasta un almanaque floral!! Le coment� a Gaby
que en mi excursi�n a Salta hab�a visto estatuas de Lola Mora y de su sobrina.




-S�, es muy famosa en Argentina, hasta en Buenos Aires hay fuentes hechas por
ella.



Pasamos casi hasta la una de la tarde metidos en ese parque interminable, el
fr�o y el hambre se hac�an sentir y por eso decid�mos salir de all� y buscar en
las inmediaciones un restaurant donde poder saciar nuestro apetito y cobijarnos
por un rato del inh�spito invierno austral que deb�amos soportar unos meses
ma�...



En el restaurant Gaby me cont� de las maravillas que hac�a su lecherito dentro
de su cuerpo.



A pesar del fr�o la verga se me empez� a mover con solo oir los placeres
inigualables que ese ser le daba a mi amigo.



Terminamos de comer y Gaby me llev� por una calle que atraviesa el parque dijo
que ese era el Bulevard Oro�o, muy famoso por las gradnes residencias y
jard�nes. Las residencias las vimos, pero los jard�nes con la heladas del
invierno estaban hechos una calamidad.



-S� Omar ten�s raz�n est�n espantosos, pero si ven�s en octubre vas a ver que
maravillosos y coloridos son.



Ya se hac�a la noche, porque a las cinco y media de la tarde en invierno en
estas latitudes empieza a oscurecer, as� que nos fu�mos para su casa donde
tomamos m�s caf� caliente y nos dispusimos a esperar al lecherito.



Al rato apareci�, ven�a del gimnasio muy limpito porque despu�s de las pr�cticas
de basquet se hab�a duchado en el club.



Efectivamente era como me lo hab�a descipto Gaby en sus mail.



Su altura era igual a la m�a, su peso unos 10 kilos m�s que yo, pero su piel
oscura y ese pelo renegrido lo diferenciaban mucho de mi aspecto exterior.



Gaby nos present�, nos dimos la mano, seguimos tomando caf� y tratando de
entablar una conversaci�n.



-Vamos a dar una vuelta, porque todav�a no viste los comercios iluminados del
centro.



Fue la propuesta de Gaby y sal�mos nuevamente a las g�lidas E invernales calles
de Rosario.



Anduvimos como una hora, dando vueltas por calles iluminadas, con gente para
todos lados hasta que se hicieron las nueve de la noche.



El lecherito dijo que ten�a ganas de come pizza con muzzarella y nos met�mos en
un restaurant que seg�n dijo �l, all� hac�an las mejores pizzas de Rosario.



Nos ofrecieron cerveza, pero hac�a mucho fr�o por lo tanto preferimos tomar vino
tinto.



Com�mos bastantes pizzas y tomamos entre los tres dos litros de un vino tinto
muy rojo, que era una delicia.



Sal�mos de ese restaurant y nos tomamos un colectivo para volver nuevamente a la
casa de Gaby.



Yo estaba helado, pero quer�a ansiosamente ver con mis popios ojos las dotes del
lecherito.



Gaby encendi� la calefacci�n porque su depto, estaba muy fr�o y no daba ganas de
quitarse ni una prenda de ropa.



Nos tomamos un par de whiskeys para entrar en calor y para que el lecherito se
deshinibiera porque a pesar de que hac�a una buen rato que nos est�bamos
tratando ten�a sus reparos.



El whisky, la calefacci�n y los relatos que les hice de las m�s ins�litas
aventuras que me ha tocado vivir hicieron que Adolfo se soltara un poquito m�s y
cont� algo de su vida.



Gaby se sent� sobre sus piernas, lo empez� a besar y a darle peque�os mordisco
en los labios ante su resistencia.



Cuando sus labios empezaron a responderle, Gaby se levant�, lo tom� de la mano y
lo condujo al dormitorio que por supuesto yo aprovech� la ocasi�n y los segu�.




Gaby empez� a besarlo muy apasionadamente hasta que terminaron uno sobre el otro
encima de la cama, mientras yo me sent� en una silla esperando que me invitaran
a unirme a ellos.



El lecherito se resist�a un poco a las manos de Gaby que intentaban quitarle la
ropa hasta que finalmente una a una fueron desapareciendo de sus cuerpos todas
las prendas que los cubr�an.



Pude admirar en total plenitud sus dos cuerpos, el de Gaby en parte ya lo
conoc�a por la fotograf�a env�ada por Internet, pero el cuerpo de Adolfo me
pareci� normal, sobresal�a como me hab�a adelantado Gaby una gruesa verga con
dos monumentales bolas que colgaban hacia abajo en la plenitud de sus 27 a�os.




Ni que decir que ver a esos ds hombres j�venes en esa actitud tan apasionada
hizo que mi verga se pusiera a tope palpitando tanto dentro de mis vestimentas
hasta que tuve que liberarla de su prisi�n de tela.



Gaby aprovech� y se puso a mamar la pija de su novio lecherito con total
dedicaci�n, mientras mis manos iban y ven�a a lo largo de mi verga que empezaba
a humedecerse con su pre-cum.



Desde mi silla pod�a apreciar perfectamente la posici�n de 69 en que estaban
ellos, ve�a a Gaby chupando la pija de Adolfo la cual se notaba gruesa pero no
muy larga pero no se endurec�a por m�s que este tratase de succionarla y de
apretarle los huevos.



El lecherito se dedic� de lleno a lamerle el ano a Gaby y a meterle dedos tal
como me hab�a dicho en un mail que esas eran sus preferencias en la cama.



Estuvieron como diez minutos en esa posici�n hasta que Gaby se cans� de chupar
pija y le pidi� a Adolfo que se la metiese de una buena vez.



Yo segu� contemplando el espect�culo pero ni me tocaba la verga porque no quer�a
eyacular sin antes haber disfrutado de mis nuevos amigos y si Adolfo ten�a
eyaculaciones tan lentas no iba a disfrutar nada.



Puso a Gaby en cuatro patas, le levant� las nalgas, Gaby las separ� con sus
manos y vi como acercaba su gruesa pija al agujero que la estaba pidiendo
desesperadamente. La apoy� en esa entrada y empuj� un poco hasta que entr� la
mitad de su cabezota acompa�ada por un profundo suspiro emitido por la garganta
de Gaby, empuj� otro poco y mas de media pija fue para adentro mientras Gaby se
quejaba de dolor y de placer.



No pude ver m�s porque el cuerpo del lecherito me tapaba la imagen que antes
pod�a apreciar, por lo que tuve que levantarme y acercarme a la cama.



De costado vi la uni�n de la verga de Adolfo con su cuerpo, bueno la uni�n no la
vi porque la tapabn infinidad de pelos negros muy brillantes. Vi las nalgas
gordas y rosadas de Gaby que apretaban esa vara de carne de una forma icnre�ble,
tendr�a miedo de que se escapase de dentro de su cuerpo y no volviese?? Adolfo
dio el empuj�n final y su pija desapareci� totalmente, lo �nico que se ve�a eran
sus pelos negros pegados a las nalgas de Gaby.



Gaby me dijo que me acercara. Levant� la cabeza y me la empez� a chupar, as� yo
pod�a ver la cara de Adolfo, una cara de gozo, se notaba que le encantaba tener
su verga metida all� dentro del culo de Gaby, yo no pod�a verla porque las
nalgas levantadas de Gaby me lo imped�an, pero en el momento que sus cuerpos se
separaban y la pija iba saliendo de su placentera prisi�n s� la pod�a ver!!! El
Lecherito se las ingeniaba y la sacaba totalmente la pon�a entre las nalgas y yo
pod�a disfrutar de la visi�n de una pija colorada y chorreante que se asomaba
entre las nalgas de Gaby.



Me excit� tanto esa visi�n que casi acab� en la boca de mi amigo Gaby, pero este
al darse cuenta de que mi verga lat�a mucho y por la intensidad de mis gemidos,
la sac� de su boca y descans�.



No pude contener mi agitaci�n, ver esa verga gruesa toda enterrada en la entrada
posterior de mi amigo Gaby y ver como era sacada, toda empapada por sus jugos
naturales y vuelta a enterrar ante los gemidos de agotamiento y de dolor, s�
porque los intestinos de Gaby no aguantaban m�s tanta fricci�n hasta que
finalmente con la ayuda de mi mano acab� una buena cantidad de leche blanquecina
que fue a parar a la cabeza de Gaby.



Gaby al sentir su cabello mojado alarg� su mano y mi semen se desparram� por
gran parte de su cabeza.



Gimi� m�s fuerte y ante sus protestas Adolfo se la sac�, esa verga segu�a dura a
pesar de que llevaba como media hora en acci�n primero dentro de la boca de Gaby
y luego en su recto.



Gaby estaba cansado de estar boca abajo, se dio vuelta y se acost� sobre su
espalda con su pija dura apuntando hacia su voluminoso est�mago.



Adolfo la agarr� con una mano y le frot� su verga sobre la cabeza hasta que Gaby
empez� a eyacular sobre la cabeza de la pija de su amigo.



Yo miraba extasiado la verga de Adolfo, todav�a dura y mojada, se me hac�a agua
la boca, me dieron unas ganas tremendas de chuparla, pero no me anim�.



Adolfo se dio cuenta de mi mirada y me dijo.



-Quer�s probarla? -S���......



Sin decirme nada m�s me dio un forro y me hizo se�as de que se la metiese a Gaby
que el me la meter�a a mi.



Tanto la verga de Gaby como la m�a estaban muertas, si reci�n hab�amos
desagotado nuestras ves�culas seminales.!!! El Lecherito me puso sobre Gaby, yo
pod�a sentir su cuerpo macizo y por qu� no decirlo bastante entrado en carnes,
debajo m�o, sentir el calor de ese cuerpo y los masajes que le daba Adolfo a mi
ano con sus dedos untados con una crema lubricante fue lo que hizo que mi pija
se pusiese tiesa nuevamente.



Gaby levant� las piernas, su culo estaba impresionantemente dilatado, por lo que
mi verga entr� con mucha facilidad, encontr� un poco de resistencia en su
interior porque como ya dije Adolfo la tiene gruesa pero la m�a es m�s larga.




Una vez que entr� toda ca� sobre el est�mago de Gaby y me qued� all� quieto
esperando que se produjese el dolor que me dar�a Adolfo al met�rmela.



Sent� un poco de dolor, pero una vez que pas� el esf�nter y este se acostumbr� a
su visitante todo fue m�s f�cil.



Al Lecherito le gusta coger poni�ndose sobre sus vict�mas o sea que le gusta
ponerlas boca abajo y darle con fuerza. Yo ni me mov�a, sent�a los huevos de
Gaby muy calientes contra mi vejiga y la a verga de Gaby apretada entre nuestros
dos cuerpos se iba despertando otra vez.



El Lecherito empez� un mete y saca con toda la fuerza de que era capaz, me
gustaba pero me hac�a doler, mi verga trataba de hacer lo mismo dentro del recto
de Gaby pero este tipo ni me dejaba moverme. Me pellizcaba las nalgas mientras
yo trataba de hacer lo mismo con las tetillas de Gaby.



Para no seguir detallando tanto placer y suplicio al mismo tiempo dir� que
estuvimos un buen rato en esos menesteres hasta que le dije que no aguantaba
m�s.



Adolfo me la sac�, descanzamos un poco hasta que nuevamente quiso met�rsela a
Gaby, �ste no acept� porque dijo que estaba muy dolorido y se la empez� a chupar
yo mir� el culo peludo de Adolfo y empec� a tocarlo con mis dedos hasta que
agarr� la crema puse un poco sobre mi pija forrada y otro poco se lo puse a su
ano.



Mientras ellos segu�an con su 69 yo se la met� y acab� nuevamente pero dentro
del culo muy apretado del Lecherito. Se notaba que lo hab�a usado poco para esas
cosas.



O� unos gemidos tremendos que proven�an de la garganta de Adolfo, no los pudo
exteriorizar mucho porque la verga de Gaby ocupaba su garganta, pero pude sentir
como su ano palpitaba mucho y me di cuenta de que estaba teniendo un gran
orgasmo dentro de la garganta de Gaby.



Gaby tambi�n tuvo su segunda eyaculaci�n en el interior de su novio hasta que
nos calmamos permanec�mos sin movernos los tres uno arriba del otro.



El olor a semen era impresionante!!! Mi semen en el pelo de Gaby estaba seco, el
cond�n que hab�a usado Adolfo conmigo estaba sin leche porque no hab�a acabado,
pero el que sali� de su culo largaba un olor bastante fuerte a semen y a
materias fecales, de su bocas sal� un aliento a leche de hombre muy concentrada.




Fue una l�stima que Adolfo eyaculase dentro de la boca de Gaby, porque me perd�
de ver la gran cantidad que dec�a Gaby que sal�a de su interior en sus
prolongadas sesiones de sexo.



Ni que decir que tuvimos que ba�arnos como a las 3 de la madrugada, cambiar las
s�banas e irnos a dormir los tres juntos.



A la madrugada me despertaron los gemidos de Gaby, estaba siendo penetrado otra
vez por su novio, pero simplemente fui espectador, con dos sesiones hac�a un par
de horas mi organismo no quer�a m�s por esa noche.



Las tetilas de Gaby estaban rojas por los apretones que recib�an, sus nalgas
estaban igual, el culo de Gaby era visitado violentamente por el arma implacable
de Adolfo que quer�a m�s y m�s.



Gaby se cans� de tanto que entraba y sal�a de su ser hasta que finalmente el
Lecherito la sac� y la empez� a fregar entre sus nalgas hasta que unos largos
chorros de leche saltaron de su verga y fueron a caer sobre la espalda de Gaby.




Se durmieron otra vez muy abrazados hasta cerca de las nueve de la ma�ana, hora
en la que me despert� Gaby para desayunar y para decirme que antes de irme ten�a
que conocer la costa y el famoso Monumento a la Bandera.



Fu�mos los tres hasta all� donde el viento era insoportable, muy bonito todo ese
R�o Paran�, el Parque Belgrano, la isla del Espinillo al otro lado pero no era
�poca para andar por all� por lo que les dije: -Mejor lo dejamos para otra vez..
si puedo venir en verano.



Volv�mos al depto. de Gaby cerca del mediod�a ya que antes quiso pasar por la
Catedral que est� cerca del monumento, la visitamos y regresamos.



Yo ten�a que tomar el micro para Buenos Aires alrededor de las cinco de la tarde
pues deb�a estar en Retiro antes de las 9.30 para marcar el pasaje de regreso a
Montevideo y Gaby ten�a que tomar el suyo para su pueblo a las 18 horas.



Despu�s de entrar en su depto a Gaby se le ocurri� tomar un whisky para festejar
nuestro encuentro y nuestra despedida.



Bueno en realidad esa fue la excusa que us� para tomar algo que nos sacase el
fr�o, despu�s de recibir tanto viento en nuestras caras, las cuales estaban
g�lidas.



Gaby se puso mimoso con Adolfo, se sent� en sus piernas y lo empez� a besar y a
abrazar hasta que �ste le dijo: -Te voy a extra�ar... pero antes de irte te la
voy a meter otra vez para que no me olvides en estas vacaciones...



-Imposible olvidarte!!! Ten�a raz�n Gaby, quien se iba a olvidar de esa verga???
Si se tuvo dentro de uno por supuesto!!! Se despojaron de sus ropas, Adolfo ya
la ten�a en acci�n de ataque y Gaby no se hizo rogar se la empez� a chupar con
mucha vehemencia mientras yo los contemplaba quit�ndome la ropa.



Una vez que el Lecherito la tuvo bien dura, Gaby se acost� con la esplada sobre
la cama levant� las piernas bien alto y le ofreci� el culo para que su amante lo
penetrase.



Yo estaba de pie al borde de la cama con la verga en la mano, bastante dura por
lo que pod�a ver una espl�ndida panor�mica de lo ansioso que estaba el culo de
Gaby por recibir pija a cualquier precio.



A Adolfo no le gusta coger de esa manera por eso le dijo que se pusiera en
cuatro patas porque as� no se la iba a meter.



Discutieron un poco hasta que finalmente Gaby me hizo poner a mi en la posici�n
en que el quer�a estar, se acost� arriba m�o, sent� su pesado cuerpo y su
barriga apret�dose contra la m�a, mi verga sobresal�a por atr�s de sus bolas y
se pegaba a las paredes de su ano.



Gaby estaba montado sobre m�, yo no pod�a ver lo que suced�a, pero el Lecherito,
hurgaba con sus dedos en el ano de Gaby que ahora si lo ten�a en la posci�n que
a �l le gustaba penetrarlo.



Sent� que su verga pegaba en la m�a y sus bolas calientes sobre las m�as, hasta
que Gaby dio un grito de dolor y se quej� de que fue muy bruto, se la hab�a
metido toda de golpe.



Mi verga qued� medio aplastada y presa entre los cuerpos, yo no pod�a moverme,
sent�a el movimiento del cuerpo de Adolfo cada vez que sal�a y entraba del orto
de Gaby.



Cuando Gaby dej� de quejarse y empez� a gemir porque esa verga le estaba dando
suficiente placer, dej� de percibir los movimientos de entrar y salir.



Unos instantes pasaron hasta que sent� que mi verga era mojada por la saliva de
Adolfo, la agarr� con una mano y la acerc� al hoyo que �l hab�a abandonado,
sent� como apoyaba la cabeza all�, como pude intent� empujarla y sin dificultad
entr� la cabeza y un poco m�s.



Por supuesto, como la verga del Lecherito es m�s gruesa que la m�a, por eso el
camino estaba muy dilatado y entr� tan facilmente, pero all� no par� la cosa,
sent� que algo tocaba mi verga, y no era precisamente la mano ni la lengua de
Adolfo, era su pija que la hab�a puesto sobre la m�a y recorr�a con su cabeza
parte del tallo de la m�a abri�ndose camino.



Gaby se quej� un poco y grit� bastante cuando sinti� que su ano era embestido
por otra verga!!! S�, Adolfo intentaba meter la suya sobre la m�a hizo tanta
fuerza y Gaby contrajo otras tantas veces su esfinter hasta que esa cabeza
gruesa se abri� paso y logr� su objetivo aloj�ndose dentro suyo sobre mi verga.




Fue muy placentero sentir como su frenillo frotaba el m�o, en ese lugar tan
estrecho.



Adolfo como enloquecido empuj� m�s su verga contra el interior de Gaby y al
hacer ese movimiento arrastr� mi verga con la suya hacia las profundidades de
las entra�as de su amante.



A pesar de lo inc�modo que estaba yo bajo esos dos cuerpos, goc� much�simo
sentir mi verga frot�ndose contra otra dentro de ese apretado recto.



Gaby tambi�n lo disfrut� mucho, porque su leche empez� a salir a borbotones sin
siquiera agarrarse la pija con sus manos, pude sentir sobre mi vientre la gran
cantidad que expuls�.



Las bolas de Adolfo se pusieron m�s calientes, era insoportable sentir ese calor
sobre mis propias bolas cada vez que empujaba su pija dentro de Gaby sus bolas
se pegaban a las m�as.



Pude sentir su transpiraci�n porque adem�s de quemarme sent� que un l�quido me
las mojaba.



Acab� dentro de Gaby sin forro ni nada, ni tiempo para eso me dieron, en
realidad ni me acord� de los condones.



Como siempre a Adolfo ni se le aparec�an las ganas de terminar esa cogida, Gaby
se quejaba de que no aguantaba m�s, su pija estaba apretada sobre mi cuerpo,
toda pegoteada por su propios jugos, mi verga baj�ndose dentro suyo apretada por
la pija del Lecherito que segu�a embistiendo.



Adolfo despu�s de un buen rato decidi� sacarla ante los ruegos de Gaby, un
tremendo olor a materias fecales inund� la habitaci�n por lo cual Adolfo y yo
corrimos al ba�o a lavarnos.



Nuestras pijas estaban marrones y mi leche entreverada con esa materia marr�n
que hab�amos extra�do de las profundidades del cuerpo de nuestro amigo.



Una vez que pudimos sacarnos ese aroma volv�mos a la habitaci�n donde Gaby
segu�a sobre la cama, o�mos un estruendo que sali� de su ser.



Hab�amos abierto tanto su esf�nter que por all� hab�a entrado aire y su cuerpo
expuls� a ese elemento extra�o que hab�a entrado a �l.



Adolfo segu�a de pija dura, Gaby se quejaba de que le dol�a mucho y no lo dej�
que se la metiese nuevamente.



El Lecherito quer�a acabar y largar toda la leche que ten�a dentro de sus
ves�culas seminales, por lo que Gaby sin ganas se la empez� a chupar nuevamente
ante mi at�nita mirada.



Yo estaba agotado, hab�a gozado much�simo, quer�a ver en que terminar�a eso,
pero el Lecherito como siempre demoraba en eyacular.



Gaby se cans� de chupar, por lo que ocup� su lugar, pero con la condici�n de que
no acabase en mi boca que yo quer�a ver su leche deslizarse por el pecho de
Gaby.



Con mucho esfuerzo, chupadas y metidas de dedos en el culo de Adolfo logr� que
finalemnte este diese un: -Ahhhhhhhhhhhhhhhh................!!!! Sac� la pija de
mi boca, la apunt� al pecho de Gaby que aun permanec�a acostado y pude ver un
imprsionante chorro largo y espeso de leche reci�n hecha que chocaba contra ese
pecho rollizo y rosado.



Adolfo se acost� sobre Gaby lo empez� a besar mentras sus pechos se pegoteaban
con los restos de la leche de Gaby y la reci�n expulsada por el Lecherito.



Con toda esa fiestita, se nos hicieron como las tres de la tarde.



Nos ba�amos los tres juntos muy apresuradamente, despu�s Gaby puso a las
apuradas algunas ropas en un bolso y nos fu�mos para la terminal de �mnibus
donde almorzamos algo r�pido, porque a las cinco sal�a mi micro para Retiro y a
las seis el de Gaby para su pueblo.



Espero que Gaby lea este relato y recuerde los gratos momentos que pasamos los
tres en ese d�a y medio que estuve por ah�.





OMAR



Como siempre espero comentarios en
POR CUESTIONES DE PRIVACIDAD ESTE EMAIL FUE REMOVIDO

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