Primero quiero aclarar que mi historia ha sido publicada en
este mismo sitio hace algunos meses, pero en otra secci�n. Pensandolo un poco
creo que esta historia va mejor en esta secci�n de relatos, aparte me parece una
buena oportunidad para compartir mi historia personal con mas personas y ademas
darle la oportunidad de que la lean los que no pudieron hacerlo tiempo atr�s.
Ahora si, el relato...
Esta historia es tan absolutamente real como inesperada: Les
cuento que me Llamo Alejandro, soy de Buenos Aires, Argentina y hoy quiero
relatarles algo que me sucedi� ya hace un poco mas de tres a�os atras. No les
pido que compartan mi forma de pensar y de proceder, solo quiero compartir este
momento que marco a fuego mi vida para siempre, esa noche de Enero en la que
sup� lo que era sentir el deseo mas carnal que pueda exisitir junto con el amor
mas puro y sincero que haya experimentado alguna vez, espero que disfruten de
esta, que al fin y al cabo es una historia de amor real.
Corr�a Enero del 2001 y estabamos de vacaciones con los dem�s miembros de la
familia en la costa Argentina, ese verano por una cosa o por otra se dio que no
pudiera irme de vacaciones con mis amigos como lo hacia casi todos los a�os y
tampoco fui con Vanesa (mi novia de aquel entonces) porque la pareja no estaba
pasando un buen momento y habiamos tomado algo de distancia para aclarar algunas
cositas, es por eso que finalmente y no demasiado feliz me uni a mi familia para
pasar unos dias en la costa, mi familia esta compuesta por mis viejos, mi
hermanito walter en ese entonces de 9 a�itos de edad, mi hermana Agustina de 18
y yo que en ese entonces tenia 20 a�os de edad.
Apenas llegados a la costa el Sabado 7 de Enero estabamos bastante embolados
tanto Agustina como yo, ya que ninguno de los dos realmente deseaba estar
pasando las vacaciones con la flia. en verdad hubiesemos querido estar pasandola
bomba con nuestros respectivos amigos o yo particularmente estar mucho mejor con
mi novia, pero ese a�o no se dio y andabamos bastante malhumorados por eso.
Esa noche mi hermana Agustina quer�a salir a bailar. Sinceramente, despu�s de un
viaje bastante accidentando y denso, con el cansancio que tenia lo ultimo que
quer�a hacer era salir a bailar, sin embargo, Agustina era mi hermana menor y
siempre fue mi debilidad, extra�anamente no eramos de pelearnos casi nunca como
es casi habitual entre hermanos, teniamos una muy linda relaci�n, siempre que
podiamos nos ayudabamos en todo y cuando uno estaba mal el otro lo apoyaba a
muerte, digamos que aparte de ser hermanos eramos grandes amigos, en fin para no
irme por las ramas a agus no le podia decir que no, ella se queria desenchufar
un poco y queria pasar un buen rato en algun boliche, asi que como no tenia a
nadie me pidio que fuera con ella, y como no podia ser de otra manera finalmente
accedi, a pesar de que llevaba mucho tiempo sin salir a ninugn lado con ella
porque cada vez que ibamos a bailar yo terminaba peleandome con algun chabon que
queria zarparse con ella, era inevitable ya que Agustina siempre fue una chica
muy linda y de apariencia sexy para cualquier hombre, mis amigos por ejemplo no
me dejaban en paz preguntando todo el tiempo por mi hermana, llego un momento
que no lo soportaba ya que era como se dice, un hermano muy cuida.
Finalmente llegamos al boliche y Agus quer�a bailar y tomar cerveza, algo que a
m� tambi�n me gusta mucho. Fuimos a un boliche de onda, con la intenci�n de
pasar un buen rato y divertirnos lo mas que pudieramos.
Debido a que estabamos de vacaciones, no nos encontr�bamos en nuestra ciudad,
as� que nadie nos conoc�a.
Realmente habia muchas chicas hermosas esa noche caliente de verano en aquel
boliche y Desde que llegue al boliche me la hab�a pasado mirando chicas y
pensaba en que mi hermana se consiguiera rapido alg�n "amiguito" para yo poder
intentar rescatar una alegria de ese boliche. Pero el tiempo pasaba y mi hermana
rebotaba candidatos uno atras de otro, entonces en un momento le dije: "che agus
porque los rebotas a todos?" a lo que ella me contesto: No los viste ale son
todos unos alzados de mierda y encima hasta ahora no vi uno que me guste"... yo
estaba bastante ansioso porque ella consiguiera una pareja para tener libertad
de acci�n y no tener que dejarla sola ahi, pero eso que me dijo me causo mucha
gracia y nos cagamos de risa un rato largo.
La noche avanzaba, y despu�s de tomarnos varias cervezas, todos estabamos
completamente deshinibidos en el boliche y el ambiente empezaba a ponerse muy
bueno!, la m�sica incre�ble y todos bailando y cantando fuerte. La verdad, la
cosa se estaba poniendo muy bien...
Eso si, evidentemente esa no estaba siendo mi mejor noche en cuanto a levante y
es por eso que al final para no dejarla solita ahi y para no quedarme parado
mirando como los demas bailaban y se divertian la agarre agus de la mano y la
lleve a la pista, "dale vamos a la pista que esto se puso buenisimo", le dije y
ella acepto, seguramente en ese momento no era lo que hubiese imaginado como una
noche de gran diversion, pensaba: uh!, ahora tengo que bailar con mi hermana,
que "divertido", pero bueno en ese instante no habia opci�n y no iba a quedarme
sentado, asi que estuve toda la noche bailando con mi hermana, que tampoco habia
encontrado hasta ah� a algun pibe que realmente le gustara para salir a bailar,
con el correr de la noche a agus ya se le iba notando el alcohol. Nosotros lejos
de hacernos drama por no haber encontrado a alguien interesante, bailabamos y
nos divert�amos como nunca. Eramos una gran pareja en la pista. Finalmente
Estabamos disfrutando de la compa��a del otro.
Como a las tres de la ma�ana, mientras bail�bamos, algo cambi� en mi, de repente
empec� a mirar a Agustina como nunca antes lo hab�a hecho. Si bien varias veces
habiamos salido a bailar siempre ibamos con amigos y como es logico yo no iba a
los boliches para bailar con mi hermana. Si a lo largo del tiempo habiamos
bailado algun que otro temas juntos alguna vez, pero no era costumbre, y mucho
menos estar toda una noche bailando juntos lo que conlleva logicamente a tener
cierto contacto fisico. El hecho es que no estaba mirando a Agustina como mi
hermana de sangre que era, sino como la hermosura de mujer que es. Su hermoso
pelo casta�o, sus labios insinuantes, su piel trigue�a, su alegr�a, su frescura,
su dulzura y su hermoso cuerpo. Pero ella estaba tan entregada al baile y la
diversion que no lo not�.
Estuve algo as� como tres canciones bailando y mirandola como si fuese cualquier
otra chica en plan de levante, pero al mismo tiempo sentia muchisimo
remordimiento por lo que me estaba sucediendo, estaba bailando con una de las
chicas mas hermosas que se encontraban en el boliche, era la envidia de muchos
de los chabones que ahi se encontraban, claro que nunca imaginaron que yo era su
hermano, el hecho es que esa chica de movimientos tan sexys en la pista a la que
cada vez deseaba mas, era precisamente mi hermana menor, esa por la que daria mi
vida y a la cual quiero tanto, entonces decidi hacerme el boludo y excusarme
conmigo mismo en que ya habia tomado mucho alcohol y estaba desvariando en mis
pensamientos. Pero luego la m�sica cambi� y de m�sica movida, extra�amente
pusieron un par de temas lentos, muy rom�nticos. En ese momento logicamente
dejamos de bailar y nos fuimos a la barra a tomarnos unos tragos, sin embargo,
me sent�a tan extra�amente bien esa noche que aunque nunca hab�a bailado m�sica
lenta con ella, y aprovechando que justo estaban pasando un tema que a ella le
encantaba, me decid� a decirle si no queria bailar ese tema conmigo, ella dudo
un poco y luego me dijo: desde cuando te gusta bailar tanto conmigo a vos?,
pregunta que fue seguida de una risita inocente que ni se imaginaba las cosas
que a esa altura yo estaba sintiendo. Finalmente agus acepto y me dijo: bueno
dale vamos, nunca me hubiese imaginado que quisieras bailar un lento conmigo,
pero no le veo nada de malo, aparte este tema me encanta, asi que dale vamos...
Ella no tenia ningun problema en bailar un lento conmigo, que problema podia
haber, ninguno, yo era su hermano del alma, teniamos mucha confianza entre
nosotros, nos queriamos muchisimo y la noche daba como para hacer eso que al
principio sonaba extra�o pero que al final no tenia nada de malo en si mismo.
Hacia la pista nos fuimos otra vez y comenzamos a bailar el lento juntos, no se,
pero en ese momento sent� algo muy fuerte, como que me estaba poniendo rom�ntico
;si, con mi hermana!!, me daba miedo lo que me estaba pasando pero al mismo
tiempo me sent�a como pocas veces me habia sentido con una chica, entonces la
agarre de la cintura y bailamos. De repente mi cabeza se convirtio en un
torbellino de sentimientos encontrados, a esa altura comenzaba a perder control
sobre mis actos y mis sensaciones de temor por la situaci�n le dejaba paso al
impulso del momento. Mi pensamiento definitivamente empez� a girar en torno a mi
hermana y a lo exitante que seria poder hacer el amor con ella. Ya se me hacia
imposible dejar de desearla y de observar disimuladamente cada centimetro de su
cuerpo. Estaba que volaba!... por un lado, en ese momento sentia una atracci�n
fisica por ella que jamas hubiese imaginado y por otro la amaba como no amaba a
nadie mas sobre la faz de la tierra, agustina siempre lo fue todo para mi y
siempre hubo un lazo muy fuerte entre nosotros, pero nunca antes se me habia
cruzado por la cabeza el hecho de amarla de otra forma que como simples
hermanos, algo inquietante estaba ocurriendo en mi.
Las canciones pasaban y al tenerla agarrada de la cintura, estando abrazados
junto con otras parejas en el centro de la pista, empezamos a hablar un poco de
todo, boludeces, pero los rostros muy cerca uno del otro ya que la musica sonaba
bien fuerte. cada vez que acercabamos nuestros rostros sent�a su aliento,
excitante, tibio, y sus labios atrayentes cada vez mas cerca de los mios. Cada
segundo que transcurr�a hacia que nuestros rostros se acercaran mas y m�s. Al
mismo tiempo, el abrazo cambi� y yo cada vez la acercaba m�s y me la acomodaba
entre el nicho que formaban mis brazos y mis piernas. Ella parecia estar muy a
gusto, en si no era raro el hecho de que seamos cari�osos entre nosotros,
siempre fuimos muy afectusos el uno con el otro, Pero evidentemente para mi en
ese momento las cosas estaban siendo algo distintas. Luego mientras bailabamos
yo le acerque mi rostro y le pregunte: "La estas pasando bien agus?" a lo que
ella respondi�: "la estoy pasando muy bien ale, hace mucho que no la pasaba tan
bien", la mire fijo y le dije: "sabes que te quiero mucho hermanita?" "si, y yo
a vos hermanito", dijo ella.
La situaci�n era muy rara, a la vista ajena pareciamos una preja proxima a
consumarse en ves de hermanos.
Mi exitaci�n crecia a cada instante y lo que mas loco me ponia era que ella
parecia no darse cuenta de lo que ocurria, para ella todo era normal e inocente,
eramos dos hermanos muy afectusos demostrandonos cari�o mutuo y nada mas mas que
eso. Mientras que desde el centro de la pista, yo ve�a la puerta y me imaginaba
saliendo a traves ella con mi hermana rumbo a alguna playa desierta, caminando y
besandola como si fuera mi novia mas amada!.
Finalmente llegaria el momento clave de la noche. En un momento del baile agus
se despega un poco de mi y me dice: "que linda noche estamos pasando ale, nunca
me hubiese imaginado que la iba a pasar tan bien en un boliche sola con vos...
Gracias por hacerme la pata, sos el mejor hermano del mundo, te re quiero" e
inmediatamnte luego de eso se acerco a mi y me dio el habitual besote en la
mejilla, pero este no seria un dato importante de no ser porque detras del beso
en la mejilla ocurri� lo inesperado, ella se volvio hacia mi y esta vez me dio
un pico. Me dej� helado!, no sabia que hacer ni que decir, me habia sorprendido
totalmente, mi acto reflejo fue preguntarle con voz entrecortada: "�que haces
agus?" a lo que ella respondi� sin complejos: "nada, te di un piquito nada mas"
"�que hay de malo? �acaso no se dan piquitos entre amigos hoy en dia?" "no te
enojes ale, lo hice de onda, nos queremos, la estamos pasando re lindo y no hay
nadie que nos conozca aca, no veo cual podria ser el problema"... Yo no sabia
que hacer, por un lado si tenia alguna intenci�n de que pasara algo entre
nosotros ese era el momento para tirarme el lance, pero a la vez me confundia
con su actitud de "no paso nada, es normal"... pasados algunos segundos volvi a
tomar coraje para hablarle y le dije: "tenes raz�n, no hay nada de malo" a lo
que le siguio un abrazo muy tierno, este duro varios segundos pero les juro que
para mi fueron una eternidad porque en esos segundos estaba tomando la desici�n
que podria arruinar mi vida y mi relaci�n con agustina para siempre...
Ya estaba decidido... apenas nos separamos del abrazo y mientras retomabamos el
paso del baile juntos la mire fijo a los ojos y le dije sin demasiadas vueltas:
"Te amo Agustina" (aclaraci�n, siempre acostumbrabamos a decirnos mutuamente que
nos amabamos, pero como hermanos obviamente) y ella como era costumbre me
respondio: "yo tambien te amo hermanito"... y ahi nomas la abarze mas fuerte y
pegue mi cuerpo contra el de ella, sin mas corri apenas un mechon de su pelo que
cubria parte de su rostro y la bese en la boca... el beso llevaria diez segundos
cuando con terror de lo que podria pasar separe mi boca de la de ella, abri mis
ojos y espere por su reacci�n. Ella me mir� como sorprendida y en vos baja para
que nadie oyera lo que estabamos hablando me dijo con vos nerviosa: "�y esto
ale? �que estamos haciendo?" a lo que respondi: "lo que sentimos en este momento
agus", "pero somos hermanos ale, esto no es lo mismo que un piquito"...
evidentemente ella sentia mucho remordimiento, pero habia algo que no la hizo
enojarse por lo que estaba pasando y eso me abrio las puertas para dejarme
llevar por lo que sentia en ese momento. Entonces fue que le pregunte: "vos me
queres agustina?" "mas vale que te quiero alejandro, te amo, te adoro, pero como
hermano", dijo ella. inmediatamente me acerque un poquito mas y le susurre al
oido: "vos sos mi hermana y te quiero mas que a nadie en el mundo, lo ultimo que
quiero en la vida es verte mal sabes", "ya lo se ale y por eso te quiero como te
quiero", respondi� ella... sin mas volvi a tomar la palabra y le dije: "hagamos
lo que sentimos", nos miramos a los ojos con cierto temor y se dio... yo me
acerque decidido y volvi a poner mis labios sobre los de ella, solo que esta vez
nuestras bocas se juntaron decididas y a medida que nos besabamos ambas bocas se
iban abriendo un poco mas para dejar paso a nuestras lenguas. No lo podia
creer!, estaba tranzandome a mi propia hermana en el medio de un boliche, nunca
antes habia sent�do tal excitaci�n. Tenia a mi hermana abrazada, y nos besabamos
adelante de todo el mundo como si fuesemos la pareja mas caliente de todas,
literalmente nos estabamos matando en el medio de la pista, ese beso que parecia
eterno simbolizaba el inmenso amor que yo siento por mi hermana y el que ella
siente por mi, pero tambien, por lo menos esa noche nos deseabamos, era evidente
que sin haberlo buscado llegamos a un punto en el que nuestro amor de hermanos
esa noche se habia convertido en pasion y lujuria.
Estabamos experimentando el delicioso sabor de lo prohibido y creo que eso
encend�o inmediatamente la lujuria entre los dos. Al termino del beso, nos
miramos el uno al otro buscando complicidad y de hecho la encontramos, esta vez
fue ella la que me abrazo a mi y me susurro al oido: "no se si esta bien lo que
hicimos, pero me gust�".
Luego la m�sica cambi�, y nos dio tiempo para pedir una ultima cerveza para cada
uno la cual nos llevamos al auto despu�s de haber pagado.
Salimos, excitados y sabiendo lo que se siente hacer algo prohibido enfrente de
todo el mundo!! Y que nadie nos diga nada ; ;..un placer que muy pocos se pueden
dar en la vida!!.
Rumbo a la casa donde estabamos parando, aprovechando que la avenida esta a lo
largo de la playa y aprovechando una luna preciosa, bajamos del auto en la
oscuridad despu�s de estacionarlo tras unos arboles y nos fuimos hacia una
playita desierta a tomar el resto de nuestras cervezas.
Nos sentamos e inmediatamente la empec� a besar, esta ves salvajemente, a esa
altura los dos sabiamos muy bien lo que estabamos haciendo y nos exitaba mucho.
Tenia en frente mio a una chica de 18 a�os que partia la tierra, si, era
Agustina mi hermana, pero eso ya no me inquietaba, por el contrario, sabia que
estabamos viviendo algo unico, nos estabamos demostrando el inmenso amor que nos
tenemos de otra forma y eso era muy exitante para ambos...
Ya estabamos a mil cuando baj� ambas manos, acariciando sus nalgas y siguiendo
las curvas de su cuerpo hasta tocar sus hermosas tetas. Le deslic� la mano por
sobre su blusa y las acarici�. En ese mismo momento ella empez� a acariciarme el
pene y mientras trataba de sacarlo del cierre, me susurraba: "nunca pense que
iba a pasar esto, pero te juro que no me arrepiento ale, te amo" "y y a vos
hermanita", le respondi, mientras sentia la mano derecha de agustina tocar mi
pija, que a esa altura ya estaba a mil...
Herv�a de deseos de bajar y meterme en el mismisimo paraiso, esa cueva
prohibida, as� que la acoste en la arena, sin soltarla y suavemente empec� a
recorrer todo su hermoso cuerpo. Su perfume y el olor de su piel me exitaban aun
mas. Luego le saque la remerita que llevaba puesta y el corpi�o, por primera vez
veia a Agustina desnuda frente a mi...
Mientras todo esto ocurria recordaba todos los hermosos momentos que vivimos
juntos durante toda una vida, desde que eramos chiquitos hasta ese momento
increible que estabamos viviendo juntos. Estabamos a punto de hacer el amor,
estabamos muy exitados, pero aunque parezca increible yo la seguia viendo como
mi hermanita del alma, esa con la que jugabamos desde que eramos chiquitos, con
la que comparti gran parte de mi vida, en ese momento mi amor por agustina era
tan o mas grande que la exitaci�n que tenia, no iba a hacerle el amor a una
chica cualquiera, estaba por hacerle el amor a mi propia hermana y queria dar lo
mejor de mi, iba a dar lo mejor de mi para que esa sea la mejor noche de sexo y
amor de nuestras vidas.
Entonces despues de abrazarnos semi desnudos y darnos unos cuantos besitos mas
la di vuelta y bes� toda su espalda. Larga, con un canal en el medio que me
suger�a que bajara lentamente hasta su culo. Mientras iba bajando no dejaba de
acariciar con una mano una de sus tetas. Ella me dejaba el dominio de la
situaci�n mientras me acariciaba con la ternura con la que solo mi hermana podia
acariciarme en una situaci�n tan caliente como esa.
Al llegar a su cintura, con ambas manos la atraje hacia m� poni�ndola en cuatro
y disfrutando al maximo de cada segundo empec� a sacarle lentamente y al mismo
tiempo, la mini y la tanga que llevaba puesta, muy lentamente, y diciendole que
la amaba y la deseaba...
Poco a poco, empec� a besar entre sus nalgas, el pensar que estaba por besar el
el clitoris de agustina me puso a mil!, estaba exitado como nunca antes en mi
vida lo habia estado y entonces, llegue a ese centro de placer, olia a limpio, a
sexo prohibido y a verdadero amor; al llegar saque mi lengua y empec� a lamerlo
con el amor y la dedicaci�n que solo merecia mi hermana, ella me ayudaba con las
manos separando los cachetes de su cola, el perfume del placer me estaba
volviendo loco, ya quer�a sentirla, sentirla toda, hacerla mia y probar sus
jugos, su saliva, su amor, sus miedos, sus deseos; ya no aguantaba mas.
Transiprabamos, gemiamos, nos sentiamos mas hermanos que nunca, estabamos
disfrutandonos y amandonos como nadie se podia imaginar, ni siquiera nosotros
mismos. ella gem�a de la manera mas tierna y caliente que he visto hasta el dia
de hoy, no era solo sexo, habia algo mas, habia AMOR verdadero.
Ella me decia: "no se como llegamos a esto, pero esta noche soy tuya ale,te
amo", era increible para mi tener a esa dulzura que es mi hermana siendo la mas
puta para mi, entregandose por completo a un amor tan real como prohibido.
"esta noche es toda nuestra hermanito", me decia ella con voz entrecortada por
la exitacion del momento. Entonces sin dejar de lamerla por todos lados, me mov�
a un costado de ella para poder introducirle el dedo pulgar de mi mano en su
sexo que derramaba l�quidos de dioses, y no sin antes acariciar ese precioso par
de piernas que Dios le dio, Le introduje el dedo r�pido ya que tenia apuro de
lubricarlo con sus jugos para retir�rselo lentamente y ahora introducir
lentamente el dedo �ndice y medio en su sexo al mismo tiempo que le acariciaba
el culo con el pulgar lubricado de tal manera que despu�s de algunos minutos
cuando empez� a acercarse su venida y para ayudarla, le met� el dedo pulgar
dentro del culo y al sentirlo, se recarg�, tratando de ayudar, dando cabida a
ese instrumento de placer. Una ves que le introduje todo el dedo, con los otros
dos que todav�a estaban afuera, le acarici� el cl�toris y para mi placer, sent�
como agus se estaba viniendo, gimiendo, tratando de apretar mis dedos con sus
piernas y tratando de recibir mi pulgar en lo mas profundo de su vagina,
apoy�ndose �nicamente con su mano derecha y con la izquierda oblig�ndome a
acercar mi rostro para regalarme el m�s h�medo de los besos de esa noche. No
hace falta aclarar que fue la sensaci�n mas extra�a y exitante de toda mi vida,
estaba tomando los jugos vaginales de mi propia hermana, estaba loco de amor por
ella y estaba dispuesto a estar un a�o seguido en ese lugar haciendole el amor
si hubiese sido posible.
Despues de probar su mas profunda intimidad y con restos de ellos en mi boca
ardiente de deseo, nos abrazamos y nos dimos un beso de lengua tan largo como
humedo y exitante.
Despues me tir� en la arena, boca arriba y le pedi que se moviera para que se
hiciera realidad algo que de por si siempre me exito mucho: Sentir la sensacion
de un lindo culito sobre mi cara. Si a esto le agregamos que la que iba a poner
su culo encima de mi cara era mi hermana mis niveles de exitaci�n estaban
desbordados. Bes� sus piernas y ella finalmente se sento encima de mi cara
dejando en frente de mi el espectaculo mas majestuoso que pude haber imaginado
jamas, Tenia a Agus, mi dulce e inseparable hermana menor desnuda y ofreciendome
su culo trigue�o para que hiciera con el lo que desee. Entonces fue que hund� mi
rostro en la concha de agustina, sintiendo el perfume del incesto que no me
dejaba y que hacia que mi pija continuara dura como nunca antes, lamiendo su
cl�toris, volviendo a su culo y terminando en su cl�toris, parando, acariciando
con una mano una de sus tetas y con la otra sus piernas y nalgas. En menos de 5
minutos agus estaba acabando otra vez, disfrutandolo a pleno conmigo, viviendo
un momento magico, cristalizando carnalmente un amor sincero y puro de verdad,
gozando lo prohibido... mientras extend�a su mano para acariciar mi pija que a
esa altura solo queria vivir dentro de ella, estaba llena de vida, completamente
deseosa de romper miedos para siempre.
Apenas acab�, la acoste en la arena, boca abajo y me puse sus piernas una a cada
lado de mis hombros, sintiendo que el momento por fin habia llegado; era hora de
hacerlo, ella lo queria, yo lo deseaba, habia una confianza ciega entre nosotros
y por sobre todo eramos hermanos y nos amabamos en serio, ambos queriamos lo
mejor el uno para el otro... Decidido y ansioso puse mi pija entre las piernas
de agus. Al sentirla, gimi�, y me acerc� para que la besara. Me puse encima,
todav�a sin met�rsela toda, y le dije: "este va a ser nuestro secreto mas
hermoso Agustina" "Te amo hermanito, cojeme...", dijo ella,... entonces comenze
a penetrar a mi hermana, despacio, seguro de controlar la situaci�n, sintiendo
un placer indescriptible, lanzando ambos un gemido hermoso y queriendo estar as�
toda la vida.
Luego baj� sus piernas de mis hombros y r�pidamente la abrac�, pasando mi brazo
izquierdo por encima de su hombro y nos volvimos a besar, no recuerdo haberme
besado con una chica de la manera salvaje y sensual como lo hicimos esa noche
con mi hermana agustina, recuerdo que nos comiamos vivos, ella dejaba escapar
algo de su saliva y yo me la tragaba con un placer inconmensurable y viceversa,
ella me pedia que dejara caer mi saliva por encima de sus labios para que ella
la saborera primero con su lengua y despues nos besaramos salvajemente
pasandonos nuestras salivas, no se, en otro momento y con otra persona me pudo
haber parecido algo grotesco, pero con mi hermana estaba dispuesto a hacer TODO,
e inclusive esto me exitaba mucho al hacerlo con ella.
Al mismo tiempo, con una mano le acariciaba su nalga derecha, estirando la piel
alrededor de su culo y mientras le metia la pija hasta el fondo, cada ves m�s
r�pido y tratando de que mis huevos no se quedaran afuera, apretando mi pubis
junto al suyo, lleno de hermosos pelitos negros, sintiendo lo hermoso que es
hacerle el amor de esa manera a alguien que uno ama con toda el alma, asi esta
sea tu propia hermana de sangre, sintiendo los carnosos labios de su sexo
tragarse una y otra vez con voracidad mi pija a punto de estallar, sintiendo el
calor de mi hermana que estaba a punto de acabar, sabiendo que quizas eso nunca
debi� de ocurrir y sabiendo la envidia que de saber lo que estaba pasando me
tendrian muchos que hubiesen pagado lo que no tenian por estar como yo estaba
con agustina y tambien la de aquellos que nunca van a saber lo que es el
verdadero placer, el que se siente al hacerle el amor a alguien con todos los
sentidos puestos en ella, asi esa personita sea tu hermana, �acaso importa eso
si ambos se atraen fisicamente, si hay consentimiento de ambas partes, si no se
le hace mal a nadie y fundamentalmente si se quieren como nos queremos mi
hermana y yo?, para mi esto fue, es y ser� amor verdadero. el que rompe con
todas las barreras.
Cuando agus empez� a convulsionar con su acabada, puse su cabeza en mi cuello
para poder met�rsela un par de veces m�s hasta el fondo, sintiendo mi pija m�s
exitada que nunca. Cuando senti que se venia aquella fuente de vida, blanca y
espesa, abundante y avanzando r�pidamente, le avise rapidamente a agus que iba a
acabar; a lo que ella se me adelanto y me pidio que acabara en su boca; si
estaba a mil revoluciones por segundo eso me acelero aun mas, ella sin saberlo
estaba cumpliendo una de mis fantasias no cumplidas, acabar en la boca de una
chica, y que mejor, era todo completito, iba a cumplir mi fantasia, la chica era
mas que hermosa y encima era mi propia hermana Agustina... No me tarde mucho mas
y acabe en la hermosa boquita de agus, la sensaci�n creo que sera inigualable,
el placer fue indescriptible, ver a agus llenarse la boca con mi semen fue lo
maximo... y la imagen de ella mirandome directo a los ojos mientras me chupabala
pija llena de semen jamas se borrara de mi mente, fue sublime! Luego la levante
y la bese salvajemente, sin dudas ese ser� el beso mas maravilloso y exitante de
toda mi vida, nos besabamos de manera hambrienta entrelazando nuestras lenguas
llenas de mi semen, y en un peque�o momento de despegue nos volvimos a mirar a
los ojos y con nuestras bocas chorreando semen me dijo: "te amo Alejandro", "Te
amo Agustina" le dije yo, y nos volvimos a besar hasta quedarnos sin aliento...
Sin dudas esa habia sido la noche de amor y lujuria mas maravillosa que habia
vivido en toda mi vida y dudo mucho que algo pueda superalo, es mas, no lo dudo,
nada va a superar la inesperada, prohibida, irrepetible y maravillosa noche de
amor que vivi junto a mi hermana Agustina.
Todo hab�a terminado. Nos acostamos uno al lado del otro, nos besamos
rom�nticamente casi hasta el amanecer y luego comenzamos la vuelta a casa,
satisfechos y decididos a guardar nuestro hermoso secreto.
Hoy mi hermana tiene 21 a�os y yo 23, nunca volvimos a tener sexo, ni siquiera a
besarnos en la boca, porque ambos sabemos que aquella noche irrepetible fue el
sello de un simple amor de hermanos, que comenzo en el mismo momento en el que
ella naci� cuando yo tenia apenas dos a�itos y durar� hasta que no estemos mas
en esta tierra. Lo nuestro no era carnal, solo lo fue esa noche porque asi lo
sentimos los dos, pero inclusive en el momento mas caliente juntos ambos
sabiamos que estabamos amandonos como hermanos que somos y que eso no volveria
repetirse, solo estabamos marcando a fuego para siempre nuestro amor de
hermanos. Aunque suene dificil de entender asi fue. Agustina siempre ser� mi
hermana menor, esa chiquita con la cual creci y comparti mi vida desde que tengo
uso de raz�n, a la que seguire cuidando hasta el dia en que me muera y a la que
seguire amando incondicionalmente como mi hermana de sangre que es.
Nada ha cambiado para mal luego de aquella noche, al contrario nuestra relacion
de hermanos sigue siendo tan fuerte y sana como lo era antes de esa noche y
hasta podria asegurar que nuestro amor inquebrantable de hermanos aun es mas
fuerte ahora.
En fin esta fue mi historia, la historia de Alejandro y Agustina (no doy
nuestros apellidos por cuestiones logicas) , dos hermanos como cualquier otro
par de hermanos que se quieren y se respetan mutuamente, solo que una noche
decidieron demostrarse todo su amor de otra forma, muy mal vista por la
sociedad, si, pero de la misma forma tierna, exitante y maravillosa (al menos lo
fue para mi).