Ustedes deber�an saber c�mo es el proceso de escribir. Uno escribe, reescribe, va hacia delante, vuelve hacia atr�s y as�, paso a paso, palabra a palabra, se lucha, se avanza. Me llev� mucho tiempo escribir todo lo que quer�a trasmitir, ya casi estamos en jueves. Por eso me atrevo (necesito) adicionar algo m�s.
Los dos se atra�an much�simo y necesitaban calmar la calentura de sus cuerpos, les urg�a una oportunidad para quedarse solos ya que nadie pod�a descubrir lo que sent�an el uno por el otro.
Llegados aqu�, debo decirles la verdad. Es cierto que lo anterior fue el final, pero el final previsible. Hubo otro final, impensado e imprevisible, para el cual yo no estaba preparada. Es duro, es horrible, es repugnante, pensar�n algunos y hasta yo misma tal vez lo habr�a pensado si hubiera le�do algo as� d�as atr�s. Los / Las muy susceptibles, tal vez, no deber�an continuar leyendo.
Ahora s� ya estamos en el final previsible. Pido perd�n por haber interrumpido la escritura y haber tenido que subdividirlo en escenas, pero pas� que ya es noche y lleg� de su trabajo mi marido y me encontr� tan mojada que sin pedir permiso, estando tras de m�, me levant� asi�ndome de las caderas, me volc� el cuerpo hacia delante y me la puso de una as�, desde atr�s. Un polvito maravilloso y reconfortante. Por suerte, me dio tiempo a cerrar y evitar que leyera algo del file, porque todav�a no sabe.
Desde que mi hermanita de 18 a�os me masturbara con sus labios no hab�a parado de pensar en ello. Sab�a que no estaba bien, que yo ten�a una novia con la que era feliz... pero aquella joven, con sus ojos negros y su larga melena segu�a siendo objeto de mis masturbaciones nocturnas una y otra vez.
Cuando se conocieron no tardaron en congeniar, todo era perfecto, ten�an una relaci�n magn�fica hasta que un d�a algo en ella le hizo sospechar...