En ese mismo momento que note que hab�a girado me incorpor�
para ver si estaba dormida, me incorpor� apoy�ndome en la cama con mi codo y mi
cabeza en mi mano. As� me qued� un rato mir�ndola. La verdad es que estaba
realmente hermosa, dormidita, y con una cara de ni�a buena que no ha roto nunca
un plato. Llevaba puesta una camiseta blanca, y unos pantalones de ch�ndal
grises, de esos ajustaditos. De pronto me fij� en su mano, la ten�a apoyada en
el estomago, y este estaba un poco descubierto dejando ver su ombligo.

Mentir�a si no dijese que en ese momento se me pasaron por la
cabeza un mont�n de cosas, una chica hermosa as�, durmiendo a mi lado, nadie es
de piedra!, pero consegu� calmarme pensando en lo bien que nos llev�bamos y la
confianza que ten�amos. Pero los problemas reales vinieron cuando su mano empez�
a introducirse por debajo de sus pantalones, lentamente, pero a paso seguro. Mi
coraz�n empez� a latir m�s fuerte, eso estaba siendo una prueba de fuego? Estaba
dormida y no era consciente de lo que hacia o me estaba probando? No pod�a
pensar tantas cosas a la vez, mi mente viajaba demasiado r�pido, y en un momento
de calma pens� que quiz�s su mano parar�a antes de llegar al que parec�a su
destino.

Craso error, en cuanto pude volver a centrarme en su mano, ya
puede ver el bulto que formaban sus dedos acariciando su sexo a trav�s del
pantal�n . No sab�a que pensar, que hacer, que no hacer, tantas cosas pasaban
por mi cabeza, si se me ocurr�a tocarla y se despertaba cual ser�a su reacci�n?,
el hombre y el amigo se peleaban dentro de mi. Un gesto de Lucia me hizo volver
a centrarme en ella, hab�a arqueado su espalda, ten�a los labios entreabiertos y
mov�a lentamente su cadera en peque�os c�rculos. Si mientras dorm�a estaba
hermosa ahora se la ve�a como una autentica diosa, los colores asomaban
lentamente en su cara, y eso mezclado con su cara de placer la hac�an una
belleza inigualable. Aquello estaba siendo demasiado duro para mi, cuanto tiempo
pod�a aguantar observ�ndola sin llegar a rozarla con mis manos? En un momento de
lucidez como amigo decid� cerrar los ojos, ya que de mantenerlos abiertos
hubiera cometido una locura. Aunque con los ojos cerrados solo hac�an que
repetirse las mismas im�genes una y otra vez. Me venci� la curiosidad y abr� los
ojos, cuando me encontr� con su ojos entreabiertos.

Se hab�a despertado, y segu�a con su mano en sus pantalones
acarici�ndose, me mir�, sonri� y volvi� a cerrar los ojos. Pens� que me mor�a,
me hab�a visto despierto, y no se sinti� incomoda por mi presencia, sigui�
moviendo su mano dentro de los pantalones y suspir� suavemente. Abri� sus labios
y asom� t�midamente su lengua, humedeciendo esos labios tan hermosos que tiene.
Eso fue demasiado para mi, ella sab�a que estaba ah�, observ�ndola, posiblemente
pens� en darme ese regalo, sab�a que mi vida sexual no hab�a sido precisamente
activa desde hac�a tiempo, y tal vez esa era su forma de ayudarme. Pasaron por
mi cabeza tantas ideas como esta que no supe distinguir las reales de las
ficticias ni las cuerdas de las est�pidas. Yo no pod�a m�s, ella estaba hermosa,
tan hermosa...que su cuerpo parec�a llamarme, estaba como hipnotizado por ella,
no pod�a pensar en nada m�s, ver nada m�s, ella era el centro del mundo. Comenc�
a acariciar t�midamente su pelo con mi mano, para luego llegar hasta su frente y
seguir acariciando su pelo, no pod�a resistirme a acariciarla, y no me atrev�a a
ir m�s all�.

Ella segu�a con su mano...y los suspiros pasaron t�midamente
a ser leves gemidos, o�r a Luc�a gemir, creo que ese fue el det�nate que revent�
mi ultimo muro de resistencia. No pude reaccionar cuando me di cuenta de que mi
mano se col� entre sus pantalones en busca de la suya. Cog� su mano y la saqu�
de entre sus pantalones...y por un momento me asust�, pues ella gir� su cabeza y
me mir� entreabriendo los ojos, pero una leve sonrisa disip� todo mi miedo. Me
incorpor� un poco m�s y me acerqu� a su o�do...estaba actuando por inercia, me
encontraba fuera de mi. Y al momento me escuch� susurr�ndole al o�do: Me dejas
que te ayude? Not� una leve sonrisa en su cara, d�ndome permiso para ayudarla. Y
de verdad que quer�a ayudarla, no deseaba nada m�s en ese momento! Me puse
encima suyo de rodillas, y deshice el nudo de su ch�ndal con mis manos. Empec� a
besar la zona de alrededor de su ombligo...suavemente, notando cada cent�metro
de su piel con mis labios, y fui bajando lentamente, al mismo ritmo que iba
bajando sus pantalones. Llegu� a la zona de sus bragas y las cog� con mis dedos
y continu� bajando, besando cada cent�metro de piel que iba quedando
descubierta, aprovechando cada segundo observando cada zona de su cuerpo.

Al llegar a su monte de venus decid� quitarle los pantalones,
lo hice lentamente. Una vez fuera la mir�, ella sonre�a t�midamente con los ojos
cerrados, separ� un poco sus piernas, lo justo para besar suavemente el interior
de su muslo, ir subiendo lentamente y conforme iba subiendo al ritmo de mis
besos ella arqueaba su espalda e iba abriendo lentamente las piernas. Hasta que
llegu� a su sexo, el cual se encontraba bastante h�medo debido a las caricias
que ella se hab�a dado hac�a un momento.

El momento de la verdad se acercaba, ten�a ganas de besarlo,
recorrerlo con mi lengua, pero no quer�a prisas, quer�a que disfrutara de ese
momento, quer�a que disfrutara de verdad. Por fin llegu� entr� sus piernas, par�
un segundo tomando conciencia de lo que iba a hacer, lo que quer�a hacer, y lo
que quer�a conseguir, quer�a chuparselo, quer�a disfrutar mientras lo hac�a, y
quer�a que ella disfrutara como nunca lo hab�a hecho. Saqu� mi lengua lentamente
y con la punta roc� la parte baja de su sexo, luego lo recorr� hac�a arriba,
solo con mi punta, para que notar� el primer contacto, volv� a bajar, era el
momento de recorrer su sexo con toda mi lengua, y as� lo hice abarcando todo
cuanto encontraba a mi paso, de abajo a arriba y de arriba abajo. Su sexo ya se
encontraba del todo h�medo , me encantaba su sabor, el sabor del n�ctar de esa
mujer tan hermosa.

Decid� ir un poco m�s lejos, gir� un poco mi cabeza como pude
y bes� sus labios como si fuera su boca, rozando con mi lengua sus labios al
mismo tiempo que los m�os se abr�an y cerraban. Estuve un rato as� cuando volv�
a pasar mi lengua por todo su sexo, apret� un poco mi cara y empec� a introducir
la punta de mi lengua en su interior, entrando y saliendo lentamente,
recorriendo de arriba abajo su sexo. Ella cada vez se contorneaba m�s y yo le
imped�a gemir tapando levemente su boca con mi mano, con la cual aprovechaba
para acariciarle la cara cuando parec�a que el riesgo de que nos oyeran pasaba.
Llevaba un rato as� cuando note que cada vez se contorneaba m�s y cada vez m�s
r�pido, sus gemidos nuevamente se elevaron y con mi mano tap� su boca. Era el
momento de atacar el punto d�bil, sub� mi lengua en busca de su cl�toris, con la
mano que me quedaba libre apoyada en su cima empuje levemente para descubrir ese
bot�n m�gico. Lo acarici� con la punta de mi lengua, primero suavemente , luego
con toda mi lengua, por ultimo con mis labios, as� una y otra vez.

Ella se contorneaba cada vez m�s, as� que cre� que llegaba el
final, baj� mi mano, e introduje dos dedos lentamente movi�ndolos en c�rculos
mientras con mi lengua no dejaba descansar su cl�toris, acarici� su rostro,
cuando la o� gemir e inmediatamente reaccion�, se estaba corriendo, introduje
los dedos hasta el fondo, y con mi lengua repas� su cl�toris, para luego dar
paso a recorrer todo su sexo, apreciando cada gota de n�ctar que Lucia me
ofrec�a. Mov� mis dedos lentamente en su interior mientras la o�a respirar
profundamente, y los comenc� a sacar lentamente, mientras con mi lengua iba
acariciando la zona que entraba en contacto entre mis dedos y la piel de su
sexo.

Lentamente me incorpor�, le di un beso en la mejilla y me
dorm�.

No se cuanto tiempo pas�...ni si ella tambi�n se durmi�
despu�s de besar su mejilla, me despert� lentamente...estaba en esos momentos en
los que no distingues si sigues so�ando o estas realmente despierto. Una
sensaci�n de calor recorr�a mi cuerpo, notaba una sensaci�n calurosa en mi
polla...algo suave la estaba acariciando, notaba como iba de abajo a arriba
suave y lentamente. No sab�a si estaba so�ando o aquella sensaci�n era
real...pero la verdad es que deseaba que no terminara nunca. Poco a poco fui
despert�ndome y siendo consciente de que aquella sensaci�n era real. Me
incorpor� un poco, y cuando abr� los ojos me quede realmente sorprendido. Ten�a
mi pantal�n desabrochado y mi polla estaba fuera, lo que realmente me impact�
fue ver la cabeza de Luc�a a esa altura! Lo que estaba recorriendo mi pene de
arriba a abajo era su lengua! En un momento not� como su lengua fue de abajo a
arriba, y al llegar a la punta note como sus labios rozaban con mi piel, se la
hab�a metido en la boca. Notaba una sensaci�n de calor, y ella mov�a su lengua
suavemente, a un lado y al otro. Tuve que hacer verdaderos esfuerzos por no
gemir, y por que no decirlo tambi�n...para que ella no notara que me hab�a
despertado, no quer�a que eso acabara y si se daba cuenta de que me hab�a
despertado...quien sabe como podr�a reaccionar?

Aquello me estaba matando, no pod�a aguantar, no pod�a m�s,
sentir sus labios, su lengua, era la mejor mamada que me hab�an hecho en mi
vida. Tuve que reaccionar r�pido, pues me iba a correr y instintivamente quise
avisarla, tampoco quer�a asustarla, as� que lentamente alargu� mi mano y
acarici� su pelo, ella se qued� quieta, pens� que hab�a fastidiado todo, pero
ten�a que avisarla. De pronto levanto lentamente la cabeza y me mir� a los ojos,
nunca podr� olvidar esa mirada, una mirada que emanaba fuego...emanaba pasi�n,
era algo indescriptible. Puede sonar muy ego�sta, pero se la ve�a realmente
hermosa, y m�s con mi polla a escasos mil�metros de sus labios.

Me sigui� mirando a los ojos durante unos instantes que a mi
se me hicieron eternos, no sab�a que estaba pensando, si se iba a dar la vuelta
y dejarme ah�, si se sent�a intimidada por estar mir�ndola, o si ella no quer�a
que me despertara...durante esos instantes maldije el momento en que acarici� su
pelo con mi mano, si no lo hubiera hecho quiz�s no hubiera parado. Cuanto m�s
tiempo pasaba ella mir�ndome m�s seguro estaba de que hab�a metido la pata,
cuando de pronto sac� la puntita de su lengua y acarici� la parte superior de mi
polla, sin apartar su mirada de mis ojos. Realmente me ten�a hipnotizado, su
mirada, su lengua, sus labios...creaban un influjo en mi que me imped�an moverme
ni reaccionar. Mentir�a si no dijera que al notar el contacto de su lengua en mi
piel sent� una gran alegr�a, aquello no iba a acabar ya mismo, al menos no por
el hecho de que yo me hubiera despertado. Sigui� mir�ndome un buen rato a los
ojos. No apartaba su mirada de mi, y yo no pod�a ni quer�a hacer nada por
evitarlo.

Con una mano agarr� mi polla y la puso totalmente recta,
haciendo noventa grados con mi cuerpo, entonces pas� su lengua lentamente de
abajo a arriba y al llegar a la punta y sin apartarme la mirada la bes� con sus
labios, entonces lentamente se la fue introduciendo en la boca sin apartar sus
ojos de los m�os. Not� un escalofr�o recorrer mi cuerpo, aquella sensaci�n me
estaba matando, ella me estaba matando, Lucia me estaba matando, de placer,
claro. No aguant� m�s, necesitaba acariciarla, mostrarle alguna muestra de
cari�o, demostrarle lo que me estaba haciendo disfrutar. Alargu� mi mano y
acarici� su pelo, necesitaba gemir, pero ten�a miedo a que alguien nos
escuchase, lo necesitaba...necesitaba respirar...abrir la boca y coger aire. Al
abrir la boca se me escapo un leve gemido, ella lo oy�, y entonces alarg� una
mano igual que yo hab�a hecho antes con ella y me tap� la boca.

Entonces acarici� su mejilla y casi me da algo al notar en su
mejilla el bulto de mi polla, ufff, fue algo que me sac� de control, le volv� a
acariciar el pelo, pero ya no pod�a m�s, no pod�a aguantar, sentir con mi propia
mano acariciando su mejilla como estaba mi polla en su boca, eso ya era algo que
me dej� fuera de control, me iba a correr. Lo primero que se me pas� por la
cabeza fue que la ten�a que avisar...solo sali� de mis labios su
nombre...Lucia...primero como un susurro...Lucia....luego una voz tenue...entre
un gemido...Lucia...ella me mir� y entendi� lo que ocurr�a...instintivamente se
retir� un poco...

Pero no lo suficiente...supongo que no se esperaba lo que
ven�a... l�gico despu�s del tiempo que llevaba sin mantener ning�n tipo de
relaci�n. La verdad es que acab� como nunca hab�a acabado, cerr� los ojos....un
escalofr�o enorme recorri� mi cuerpo, todos los m�sculos de mi cuerpo se
pusieron en tensi�n, y entonces lleg�...el �xtasis...las sacudidas, una detr�s
de otra...note como mi cuerpo liberaba una gran tensi�n, toqu� el cielo por unos
instantes, y luego...poco a poco, lentamente, la calma. Estaba en la gloria,
totalmente extasiado, supongo que en mi cara se tendr�a que reflejar una enorme
relajaci�n. Estuve unos segundos con los ojos cerrados, y cuando los abr� me
qued� helado...lo que vi fue hermoso, pero me sent� al mismo tiempo
avergonzado...le hab�a manchado. Me estaba mirando fijamente con cara de
sorprendida, y tem� que se hubiera enfadado conmigo. Suavemente sali� de mi boca
un lo siento...medio avergonzado medio temeroso de su reacci�n, y no se si fue
por mi cara de susto o por mi forma de decirle que lo sent�a...pero nos quedamos
mirando y nos empezamos a re�r.

Entonces me incorpor�, le dije que lo sent�a mucho, y entre
risas le dije que nos fu�ramos a duchar, que eso lo ten�a que arreglar yo, Lucia
me mir�, se ri� y me dijo... claro...arreglarlo, y me gui�� un ojo. Luc�a se
incorpor� tambi�n y se puso de pie encima de la cama, la pod�a observar de
arriba abajo, la recorr�a una y otra vez con la mirada...y ella segu�a con su
mirada fija y pilla en mi. Me dijo: No te piensas levantar?, A lo que
seguidamente m levant� y m puse en pie en el suelo. Me puse frente a ella...
ella se iba acercando cada poquito un poco m�s... no sab�a bien bien lo que
pretend�a...estaba un poco perdido...no sabia q hacer..si dejarme llevar o q
diese ella el siguiente pas�..Choc� contra m�, sent� su pecho contra el m�o...
empez� a olerme el cuello, de repente sent� algo h�medo, era su lengua. Empez� a
besarme por el cuello durante un rato, lo suficiente para volverme cardiaco y
quererla besar con todas mis fuerzas... Ella no quer�a que ocurriese ya que
sab�a que aquello no pod�a conmigo. Tal era el calent�n que llevaba dentro de m�
que empec� a acariciar sus nalgas y su culo de manera desesperada. Me la
arrimaba hacia a m� dando unos golpes un poco bruscos.

Ella segu�a con sus lametones y roz�ndome cada vez m�s
fuerte. La cog� en brazos, mis manos rodeaban su culo y su pecho lo ten�a mas
cerca que nunca. Nos miramos los dos y Luc�a me puso dos segundos su pecho en mi
cara, ella sonri� y yo le devolv� la sonrisa, mir� hacia el lavabo y comenz� de
nuevo a pasarme su lengua y sus labios por los m�os...M dirig� con ella en
brazos hacia el ba�o...Estaba todo oscuro, la dej� en el suelo, yo me sent� en
la tapa del water y ella no perdi� oportunidad para sentarse encima m�o y volver
a lo que est�bamos haciendo. Ella not� que estaba cada vez m�s excitado, pas� mi
mano por mi sexo...y la verdad, aquello estaba...que no pod�a m�s. Luc�a al
tocarme tambi�n se excitaba, respiraba mas fuerte.

Se quit� la camiseta que llevaba y dej� ver aquel sujetador
negro que cubr�an sus pechos... Me quit� la camiseta despu�s y empez� a
acariciar mis hombros, mi espalda... a chuparla... se incorpor�...y mis manos
comenzaron a manejarse solas...empec� a quitarle el pantal�n poco a poco, ella m
iba ayudando a quitarme los m�os...La cosa iba subiendo de tono a medida que nos
�bamos desnudando. Estaba en ropa interior y no sabia cuando iba a llegar la
hora de poderla ver toda desnudita y goz�ndola como nunca. Poder sentir su
cuerpo junto al m�o. Me llev� hacia la ba�era, no s� como lo hizo pero me meti�
dentro, se empez� a bajar los tirantes del sujetador, yo la acariciaba toda su
espalda, m arm� de valor y le quit� aquel trapito que llevaba como sujetador.

Dios m�o, se puso contra mi, la sent�a completamente, sent�a
sus pezones en mi pecho. La pod�a recorrer sin ning�n obst�culo porque ya se
hab�a quitado sus braguitas, y empez� con los m�os..Est�bamos al descubierto,
tan solo hab�a una luz, la luz de una de las habitaciones del patio al que daba.
Luc�a comenz� a mojarse toda ella, me mojaba a m�, cuando m pude refrescar lo
suficiente, ella dej� el tel�fono colgado, dejando que el agua fuese fluyendo,
como me fluir�a yo si aquello segu�a as�. Me dej� de tonter�as, y supe bien lo
que quer�amos los dos. No paraba de chuparme con su lengua, mientras yo iba
rozando mi sexo contra sus piernas y contra el suyo. Cada vez que esto ocurr�a,
Luc�a hacia una respiraci�n profunda.

Comenz� a besarme, era la primera vez que lo hac�amos, sus
labios me lo hac�an todo y su lengua buscaba con desespero la m�a, nos lam�amos
mutuamente. Entre beso y beso, me cogi� mi sexo con su mano de una manera un
poco brusca, empez� a deslizarla suavemente hacia arriba y hacia abajo...yo
sabia que me estaba mirando, pero es que me estaba poniendo a mil, sus pezones
iban rozando al comp�s de su movimiento. Aquello todav�a me pon�a m�s a tono,
cada vez su mano apretaba mas mi sexo, y yo m�s m excitaba. La cog� como la
hab�a llevado desde la cama hasta el ba�o, abrazaba con sus piernas mi cintura,
no paraba de moverse, consiguiendo rozar su sexo contra el m�o, eso la excitaba
tanto que en uno de esos movimientos m la cog� como pude e intent� adentrarla en
su cuerpo de la manera m�s suave posible. Ella se agarraba a m� con tal de
ayudarme. Seguidamente la cog� por su culo y la empec� a elevar una y otra vez.
Estaba en el para�so, cada vez �bamos m�s r�pido, ella se mov�a de tal manera
que me sal�a de mis orbitas. Y con su culo en mis manos, haciendo fuerza para
elevarla y dejarla caer a la vez. Comenc� a darle lametones por sus pechos, no
sab�a ni por donde seguir, sus pechos botaban de tal manera y se rozaban contra
mi, que mi limite estaba llegando a su fin. Empez� a gemir como tambi�n lo hacia
yo. Ya ni nos importaban los dem�s compa�eros. No quer�a que dejase de
galoparme, lo que al final entre tanto gemido y respiraciones agitadas, no pude
m�s porque iba a explotar, me corr�...como ella tambi�n hizo. Sus m�sculos
palpitaban de tal manera que not� que hab�a estado gozando como yo.

Cogida como la ten�a, con mis manos agarrando su culo, me
qued� extasiado mir�ndola, el agua resbalaba por su pelo, su cara, su
piel...estaba realmente hermosa. No lo pod�a aguantar...quer�a besar esos pechos
que tan loco me volv�an as� que acerqu� me boca a sus pechos y los empec� a
besar, primero suavemente...para luego besarlos con verdadera locura. Sus
pezones estaban erectos y eran una autentica preciosidad, rodee uno con mis
labios y con la punta de mi lengua lo empec� a rozar suavemente...ella se arque�
hac�a atr�s y emiti� un leve gemido. Estuve chupando un buen rato sus pechos,
pasando mi lengua por su piel mientras el agua envolv�a nuestros cuerpos.

Decid� que era momento de salir de esa ducha, esa ducha donde
hab�a tenido la mejor experiencia de mi vida. La dej� bajar al suelo y sal� de
la ducha. La cog� de la mano y la saqu� del ba�o, le dije que se esperara un
momento, ella me mir� extra�ada, no sab�a que iba a hacer, fui a mi mochila y
saqu� mi toalla, cuando ella la vio una leve sonrisa apareci� en su rostro.

Me acerque a ella y con la toalla empec� a secarla,
recorriendo todo su cuerpo, aquello no era m�s que un pretexto para poder seguir
tocando aquel cuerpo divino que tantas veces hab�a admirado. La verdad es que
mientras la secaba la temperatura de mi cuerpo volv�a a subir, estaba volviendo
a excitarme sin poder remediarlo, su cuerpo desnudo, el aroma de su piel reci�n
salida de la ducha, poco a poco los roces con la toalla de por medio pasaron a
ser descarados magreos, mmmmm que cuerpo, no pod�a evitarlo, tenerla tan cerca
m�o me estaba excitando de una forma descontrolada, as� que la cog� con mis dos
manos y le hice el gesto de que se sentara al borde de la cama. Volv� a buscar
en mi mochila, me gir� un momento y vi como ella miraba extra�ada, que estar�a
buscando ahora?,aj�, lo encontr�, estaba buscando un pa�uelo que a veces me
pon�a en la cabeza, ten�a un plan que rondaba por mi mente e iba a hacerlo
realidad. Me acerqu� a ella lentamente con el pa�uelo en mi espalda para que no
lo viera. Me puse delante suyo y le pregunte: Te fias de mi? Ella me respondi�
que si y sonri�, le volv� a preguntar y volvi� a sonre�r diciendo que si, que se
fiaba de mi. Entonces le ped� que cerrara los ojos, cosa que ella hizo al
momento, as� que le vend� los ojos con el pa�uelo.

Me acerqu� al o�do y le susurr� que esperara un segundo, ella
hizo un gesto de conformidad con la cabeza. Sal� corriendo de la habitaci�n
intentando no hacer ruido, fui a la cocina y saqu� un cubito de hielo, volv�
corriendo al cuarto haciendo el menor ruido posible. Cuando entr� cerr� la
puerta detr�s m�o. Volver a verla fue como darme cuenta de que no estaba
so�ando, estaba tumbada en la cama, desnuda y con los ojos vendados, esperando a
que yo volviera, era demasiado para mi, la ten�a ah� delante m�o, lo pensaba y
segu�a sin poder cre�rmelo. Me acerqu� sigilosamente y me sub� a la cama, puse
el cubito en mis labios y apoy�ndome con las manos en la cama empec� a acercarme
a su piel, primero por su cuello.

Al notar ella el contacto del hielo y mis labios en su cuello
se estremeci�, luego sus hombros, fui bajando lentamente, rozando con el hielo y
mis labios su piel, hasta llegar a sus pechos, suavemente, fui hasta sus pezones
y al notar el hielo en esa zona tan sensible dio un peque�o respingo. Recorr�
todo su cuerpo con el hielo en mi boca, hasta que poco a poco se fue deshaciendo
y dejando el paso a mi lengua y mis labios. Me estaba excitando locamente
recorriendo su cuerpo y a juzgar por su piel ella tambi�n, acarici� su sexo y
note que estaba h�medo, as� que decid� que no pod�a aguantar m�s, necesitaba
volverlo a hacer, volverla a tener. Agarre mi sexo con una mano y fui
acerc�ndolo al suyo, lo coloqu� en la entrada de su cuerpo y suavemente me fui
abriendo paso dentro de ella. Dio un peque�o gemido y empez� a suspirar
suavemente, fui entrando y saliendo...poco a poco, estuve as� durante un rato,
disfrutando como nunca hab�a hecho.

Empez� a mover sus caderas al comp�s de mis movimientos, y
empezamos a acelerar el ritmo, me estaba volviendo loco con su forma de mover
las caderas, no se si podr�a resistir mucho m�s, as� que decid� cambiar, que
fuera ella la que marcara el ritmo, me hab�a encantado su forma de galoparme
antes y estaba loco por que me lo volviera a hacer, as� que sal� de su cuerpo y
me tumbe a su lado, le ped� que me volviera a galopar, me hab�a encantado, ella
me dijo que si, pero que con la condici�n de que le quitara la venda porque
quer�a ver mi cara mientras disfrutaba. No hizo falta que me dijera nada, cuando
se dio cuenta ya no ten�a el pa�uelo tap�ndole los ojos, se incorpor� encima m�o
y con una mano fue guiando mi sexo hac�a su entrada.

Se la meti� toda, se sent� literalmente encima m�o, y empez�
a mover sus caderas, diosss, me estaba volviendo loco!! Empec� a acariciar sus
pechos mientras ella bailaba encima mio, estaba llegando al cl�max se mov�a de
una forma descontrolada moviendo sus caderas. Yo empec� a gemir y le ped� por
favor que no parara entre gemidos, sab�a muy bien como moverse, y yo estaba
disfrutando como un condenado. El ambiente cada vez estaba m�s cargado, nuestros
cuerpos empezaron a sudar, ella segu�a movi�ndose, no paraba y yo ya estaba a
punto de correrme, no pod�a aguantar m�s....no pod�a y cuando justo empec� a
correrme note como ella hac�a lo mismo, se abalanz� sobre mi y nos abrazamos,
mientras lentamente fue parando de moverse. Nos hab�amos corrido al mismo
tiempo, y a juzgar por su cuerpo y los colores de su cara creo que disfrut�
igual que yo. Nos besamos tiernamente durante un rato, tumbados y abrazados, y
as� nos dormimos.