To�o y Lalo eran 2 hombres j�venes, acostumbrados al trabajo
duro, se conc�an desde mucho antes, por lo que se llevaban algo pesado entre
ellos, y bromeaban mucho de su sexualidad. Ya a mitad de la madrugada un poco
bajo los influjos del alcohol empezaron a comentar en broma que a Lalo le
apodaban el Cristo porque una ves lo atraparon infraganti con "julian" un
chiquillo de 19 a�os muy delicado y muy afeminado y dicen que estaba acostado en
el piso de la gr�a viajera con los brazos abiertos en posici�n de cristo y
Juliancito le estaba dando una mamada.

Lalo le contest� que si el hab�a hecho eso, todo mundo sab�a
que to�o se hab�a llevado a juliancito a la playa un s�bado despu�s de trabajar.
Todo esto to pense que era broma, pero cuando to�o tuvo que ir a atender un
pendiente y me qued� con Lalo solos este me dijo que si era verdad lo del
Cristo, y tambien era verdad lo de que To�o hab�a pasado un fin de semana
rom�ntico con Juliancito en la playa. Y me dijo --�qu�? No tiene nada de malo
que un maricon te mame la verga, mientras tu no te dejes hacer nada por el culo�
(la mente humana definitivamente es un enigma) le contest� que no, que la verdad
eso no ten�a nada de malo.

Yo la verdad ya estaba un poco... emocionado, imagin�ndome
aquel macho en la posici�n de cruz antes descrita, me imaginaba su verga, me
imaginaba yo haci�ndola de Juliancito me lo imaginaba jadeando y pidi�ndome que
le chupara mas. El me pregunt� -- �apoco tu nunca te has dejado mamar la verga
por un mariquita?� cuando me dijo esto supe que de verdad hablaba enserio. Yo ya
muy excitado y deseando todo con �l le contest� � no, pero si se la he mamado
muchas veces a mi novio y a el le encanta.� Le toque la pierna justo encima de
la rodilla el no dijo nada, y yo comenz� a subir mi mano hasta tocarle el bulto,
ya duro le comenze a acariciar el abdomen y las piernas, me aroddille frente a
�l y le desabroche el pantal�n, saque de su truza su verga era muy bella med�a
unos 18 cm aprox,, el solo se recost� en la silla y me dej� hacer lo m�o,
comenze a recorrerla con mis labios y mi lengua de arriba abajo, despu�s me met�
en la boca la puntita, el comenz� a jadear y a hacer ruidos de satisfacci�n, la
tome con una mano de la base y me la meti toda en la boca,, mmmhhh deliciosa,
que olor... que sabor... yo mov�a la laengua bajo su verga y y contra�a y
expand�a las mejillas para hacerlo chillar de placer, al poco rato me dijo que
me quer�a penetrar.

Yo me pare frente a el y me incline en el escritorio, me baj�
los pantalones y las truzas, yo le dije que no me las quitara porque si
regresaba to�o nos ibamamos a tardar en vestirnos y el iba a sospechar si no
habr�amos la puerta, el me dijo que no hab�a pex, que le deciamos que estabamos
muy pedo y no nos pod�amos parar, acced�. El me empezo a tocar el culo con la
mano u con el dedo medio meti�ndomelo y ensaliv�ndolo, despu�s meti� dos dedos,
los met�a y los mov�a dentro de mi, yo disfrutaba como nunca, gem�a y
chillaba,le dije:--Ya� por favor ya metemela�-- me di la vuelta y le di las
�ltimas lamidas para dejarlo bien ensalivarlo. Me volv� a inclinar en el
escritorio, me tomo una pierna y me hizo subirla en el escritorio, apoy� su
glande en mi culo, lo sent� caliente, y comenso a empujarlo, al principio fue
dif�cil y doloroso, pero fue movi�ndolo hacia adentro y hacia fuera hasta que
sent� su melena pegada en mis nalgas, eso fue el cielo, me sent�a mas arriba de
las nubes, un poco adolorido, pero... sin dolor no hay ganancia. Comenz�
metiendomela y sac�ndomela despacio y suavemente, pero de repente la saco casi
hasta el glande, e hizo una pausa, enseguida me la meti� toda de un solo golpe,
hasta chocar su pubis con mi nalgas, despu�s sigui� con el mete saca, pero ahora
mas en�rgico y fuerte, agarrandome y levant�ndome una pierna para poder
metermela mejor, yo sent�a que se me quemaba el culo, pero estaba muy excitado y
la sensaci�n de estar siendo utilizado de puta me fascinaba, yo estaba aferrado
a las orillas del escritorio, pero a�n as� el escritorio se mov�a y rechinaba
por la tremenda cojida que me estaba poniendo aquel super-macho, yo me sent�a
inutilizado, sin voluntad, era completamente suyo.

En eso, �Knock knock!, la puerta, yo intente levantarme, pero
Lalo me puso la mano en la nuca y no me dej� hacerlo, --�qui�n es?�pregunt�
Lalo, --yo g�ey, To�o--, Lalo, sin dejr que me levantara, y sin sacarme la verga
abri� la puerta, yo solo voltee la cara de pena, �no manches!, no pod�a creer lo
que hab�a hecho Lalo, To�o parec�a un poco asombrado al principio, --oye que
buena se puso la fiesta, con 20 minutos que los dejo solos, y arman una muy
buena peda�dijo. � ahorita sigo yo g�ey�le dijo a Lalo, a�n no se porque no me
pregunt� a mi si tambien con �l quer�a, osea, �por qu� le pregunt� a Lalo?, pero
igual y me hizo sentir como una puta y eso me encantaba. �nombre g�ey, ahorita
acomodo este cabr�n y le damos los dos--, me tomo de las caderas y me subi� a la
mesa boca abajo, me abri� las piernas y se acost� atr�s de mi, metiendome otra
vez aquel tremendo pedazo de carne, To�o se puso delante de mi, me tomo de la
nuca y me meti� la verga en la boca, yo me dej� ir, me solt�, deje que me usaran
como quisieran, to�� me met�a la verga hasta la garganta, y Lalo me daba
tremendas cojidas por mi culito. Se levantaba y se dejaba ca�r, golpeando mis
nalgas con su pubis haciendolas sonar como una palmada, de repente sus
movimientos se volvieron menos en�rgicos pero mas r�pidos, tens� su abdomen y
sus piernas y con un grito sent� come me dio una metida super fuerte acompa�ada
por un calor que me inundaba por dentro, me la met�a y me la sacaba, su semen
escurr�a por mis ingles.

--Ya qu�tate g�ey, yo tambi�n me lo quiero cojer--, segu�an
sin consultarme sus planes, Lalo me la sac� sin miramientos, me dio una fuerte
palmada en una nalga y sali� de la oficina. To�o me hizo darme vuelta hasta
ponerme boca arriba, me tom� por los tobillos, me abri� y levant� las piernas
hasta sus hombros y me penetro, me tom� de las caderas y comenz� a moverse de la
manera mas deliciosa, se mov�a hacia atr�s y adelante, suave, pero desde atr�s
hasta tocarme con sus caderas mis nalgas, To�o era mas tierno, mas suave, mas
amante, no como Lalo que era un bruto pero magn�fico animal, -- quiero que me
montes�dijo To�o, se sento en una silla, yo me pare frente a el d�ndole la
espalda, abr� las piernas y me monte en el, puse su glande en mi culo y dej�
caer mi peso, su verga se abri� paso en mi recto resbalando y haci�ndome gritar,
yo me mov�a hacia arriba y hacia abajo, rosando su abdomen velludo con mis
nalgas, con una mano tom� mi pene y empez� a recorrerlo y pu�etearlo, con la
otra me abrazaba y me acariciaba el abdomen, el pecho y el cuello, yo estaba en
el cielo de los homosexuales, me besaba la espalda y me la lam�a, era delicioso,
me abraz� de la cintura y sin sacarme su pene me hizo ponerme de pi�, caminamos
unidos hasta la pared, y me oprimi� contra ella, me abrazaba y me acariciaba con
las manos, me besaba la nuca y las orejas me coj�a, suavemente, pero hasta el
fondo y de regreso, yo estaba mas alto que las nubes. Lalo volvi� a entrar,
--Oye g�ey voltealo para que me la mame otra vez--, me voltee y me inclin� a
chuparsela el se sent� en la orilla del escirorio y yo me met� su verga en la
boca .To�o segu�a movi�ndose como los mism�simos �ngeles, de pronto me tomo los
hombros por atr�s, y me atrajo hacia �l metiendomela mas fuerte y se vino, �l
grito y gimi�, como un ni�o, de lo mas tierno, movi�ndose suave, y poso su
cabeza en mi espalda, resoplaba y gem�a de placer.

Dejalo que se suba, para que me monte�Lalo otra vez orden�,
me saque su verga de la boca, To�o me saco su verga del culo, a mi se me
doblaban las rodillas, Lalo se subi� al escritorio. Y se acost� boca arriba, me
tomo las manos y me jal� sobre �l, yo lo mont� en cuclillas y me sente sobre su
verga mi culito ya estaba muy abierto, por lo que la penetraci�n fue f�cil y muy
placentera, comenz� a mover mi culo sobre �l, hacia arriba y hacia abajo, el me
hizo bajar las rodilas, me tom� las nalgas y me las apret� contra �lapretandome
y sambutiendomela toda en el culo as� me aferr� y se comenz� a mover muy fuerte,
haciendome saltar, resbalando en su verga como si fuera un valero, me dijo que
quer�a venirse en mi cara, as� que me baje de �l y del escritorio y me incline
para que me cojiera de perrito, me subi� una pierna en una silla, y me la metio
otra ves, me agarro de los brazos y me la met�a y me la sacaba muy fuerte, otra
ves se vino con las misma fuerza e intensidad de antes, me la sac�, yo me
desplom� en una silla, y el se tiro en el piso jadeando y resoplando . Yo,
salpicado, cojido, usado, casi violado, pero feliz de ver a dos machos
plenamente satisfechos gracias a mi.

Nunca volv� a estar con los 2 juntos, pero, esa semana que
rest� To�o se qued� conmigo en mi hotel todos los d�as, y Lalo espor�dicamente
me mandaba llamar a la Oficina de Mantenimiento y me coj�a como un animal.
Cuando termino esa semana, mi jefe recibi� un correo de el jefe de mantenimiento
de la planta en Tijuana, el Sr. Antonio Luna ("To�o" para sus amigos y "papito",
"mi amor", "cosita rica", "chiquito", para mi) donde le dec�a que necesitaba que
yo me quedara otro mes a capacitar a los supervisores, le concedieron solo 2
semanas, pero fueron 2 semanas de ensue�o.