Relato: Pisa el acelerador (08)

Eran las 8:30 de la ma�ana de un viernes de agosto ( muchas
veces me gustar�a ser m�s concreto pero pienso que ya proporciono demasiados
datos, alguno de mis comportamientos rozan lo ilegal y algunos lo son
totalmente), y ya estaba en mi despacho. Me gustaba madrugar y aunque mis
negocios iban bien, siempre me hab�an gustado los refranes "El ojo del amo
engorda al caballo" "�l que tenga tienda que la atienda y sino que la venda".




Pero hoy no ten�a inter�s en comprobar el estado de mis inversiones. Hab�a ido
al despacho a preparar el plan para gozar del espect�culo de tener a K currando
todo el fin de semana en mi finca. Junto a la piscina ten�a una peque�a
construcci�n con una sala, un cuarto de ba�o completo y un peque�o almac�n.
Llam� a una empresa de reformas de un conocido y les ped� que fueran a mi casa
de las afueras e hicieran unas peque�as obras.



Los he contratado en varias ocasiones y saben que no me importa pagar una buena
cuenta si cumplen mis deseos al pie de la letra. El encargo pod�a sonar raro
pero era sencillo de realizar. Ten�an que desmontar el espejo del cuarto de ba�o
del pabell�n de la piscina y hacer un agujero de 30 X 40 (los acompa�ar�a un
empleado m�o para abrirles). La pared sobre la que estaba ese espejo daba a un
cuarto almac�n.



Al jefe le expliqu� que iba a instalar una caja fuerte oculta tras el espejo del
cuarto de ba�o y prefer�a que el boquete me lo hicieran ellos que sab�a lo bien
que trabajaban (me gusta regalar a los o�dos, un piropo dicho por una persona
importante, es mucho m�s agradecido). Adem�s le ped� que desmontaran la mampara
del ba�o, para instalar m�s adelante una mejor. En realidad lo que quer�a es que
la mampara no estuviera all� cuando K fuera a ducharse (lo iba a hacer trabajar
de forma que necesitara ducharse y as� poder grabarlo desnudo). Encargu� a una
tienda de seguridad tres c�maras de v�deo digital con mando a distancia, una de
ellas con tr�pode.



Las otras dos les ped� que las instalaran esa misma ma�ana. Les mand� un croquis
por fax, detallando la situaci�n de las mismas. (Dicha situaci�n era,
disimuladas, sobre la zona en la que K iba a trabajar y cubrir�a tambi�n una
mesa de terraza en la que yo me sentar�a). Luego encargu� un espejo especial que
fuera transparente por un lado. Se basan en la refracci�n de la luz y si al otro
lado est� totalmente oscuro no se diferencian de otro espejo. Ped� que me
mandaran el espejo bien embalado y con un sistema adhesivo de seguridad en la
parte posterior de forma que yo mismo pudiera instalarlo f�cilmente.



Llam� a la tienda d�nde hab�a comprado la ropa a K y les encargu� dos slips y
dos pares de calcetines iguales a los que le hab�a regalado (quer�a tenerlos
iguales por si le pod�a dar el cambiazo, K no se cambiaba mucho y lo normal era
que los llevara). Tambi�n ped� dos ba�adores speedo de la talla de K. Luego
encargu� a una empresa de calefacci�n que le colocara un termostato que pudiera
regular la temperatura del calentador del agua del pabell�n, entre los 18 y 48
grados.



Deseaba poder bajar el agua caliente para que no se empa�ase el espejo cuando K
se duchara,( el vaho puede ser muy er�tico al difuminar los contornos de un
cuerpo, pero yo no quer�a erotismo quer�a pornograf�a). Es m�s estaba dispuesto
a obtener una grabaci�n de K masturb�ndose. Tener un v�deo donde se pajeara
hasta correrse me acompa�ar�a en mis propias pajas.



A las 14 me acerqu� por all� fij� el espejo fuertemente, tapando el agujero, al
otro lado en el almac�n coloqu� la c�mara sobre el tr�pode e hice una prueba de
imagen. Grababa toda la zona de la ducha y la taza del water, si K orinaba
tambi�n quedar�a grabado. Incluso no era necesario encender la luz, la claridad
que pasaba a trav�s del vidrio esmerilado (trasl�cido pero no transparente, como
es com�n en los cuartos de ba�o) era suficiente para una buena calidad de
imagen. Luego comprob� que tal grababan las otras dos c�maras. Qued� muy
contento con todo lo que hab�a encargado y me fui para el bar.



Al llegar vi que estaba s�lo el due�o. Ped� mi cubata y me dispuse a esperar. Al
poco lleg� K me salud� y se puso a m� lado. Le ped� una cerveza, el me pis�
despacio y me dijo: p�llame tabaco, que no tengo. Se lo ped� encendi� un pitillo
y me ech� un poco el humo.



- Arreglaste algo de lo del coche.



- S� habl� con el due�o (era mentira la polic�a no hab�a visto las fotos de K
robando en el coche) para que retire la denuncia. Pero quiere 1000 euros.



- Que cabr�n y porqu� pide tanto.



- Para pagar la cerradura que forzaste y el radiocasete que le robaste.



Adem�s dice que le llevaste unas gafas de sol y un walkman.



- Eso es mentira, s�lo le cog� el radiocasete.



- Ya pero mejor no llamarle mentiroso, para que te quite la denuncia.



- Y le vas a pagar.



- Tendr� que hacerlo, sino encerraran a mi gitano favorito.



Hice que sonara como una broma, pero a K le pareci� mal. Intent� sonreir pero
cuando estaba incomodado se le notaba y la sonrisa era un dibujo de mueca.



- Ma�ana vas a tener que currar mucho y pasado tambi�n, dije.



- El domingo no, dijiste el s�bado.



- Vas a tener que currar todos los fines de semana durante mucho tiempo ahora me
debes 2.500 euros. 1500 de la multa del hachis y 1000 para el due�o del coche.




- Pero dos d�as seguidos cavando y en agosto, voy a quedar agotado.



- Hombre, mejor agotado que encerrado. Si quieres llamo al del coche y le digo
que no le pago.



- No, no. Es que si es trabajo muy duro me voy a cansar.



- Las mulas de carga han nacido para eso.



Me fui a la tragaperras y vi como k manipulaba mi vaso. Lo deje un rato largo
para que le diera tiempo a sacar su saliva. Volv� a la barra y cog� mi cubata,
discretamente vi que aparte de la baba blanca hab�a dos mocadas. Me beb� el
cubata casi de un trago y puse sonrisa de bobito, esa cara de felicidad que
simboliza la estupidez.



Me frot� el paquete con la mano y cog� el tel�fono m�vil fing� que llamaba a la
puta de la otra vez. Estuve un rato discutiendo y colgu� incomodado. Fui al
servicio y tard� unos minutos. Cuando sal� K estaba escamado. Ped� un cubata y
una cerveza y K me pregunt� �Porqu� no vas con la puta?. Ha tenido clientes y no
quiere hacerme los extras y me apetec�a hacerle tragar mi leche a una putita. �Y
no llamas a otra?. No, no aguantaba la excitaci�n me hice una paja en el wc (era
mentira pero me gustaba que lo creyera). Acab� de beber y qued� con K en que lo
recoger�a cerca de all� a las 12 que estuviera un poco antes que no quer�a tener
que esperarlo.



Me desped� y me fui a casa, el portero me entreg� una bolsa con los ba�adores,
slips y calcetines de la tienda de al lado. Me desnud� y empec� a hacerme una
paja con las tres zapas de chavales ( P, X y K). Me corr� tres veces, sobre las
seis suelas y segu� mi costumbre de lamerlas hasta limpiarlas. Vencido por los
orgasmos y el sue�o me dorm�. Horas m�s tarde se me ocurri� algo y no quise
esperar, me levant� y fui al botiqu�n. Cog� las pastillas que me hab�a recetado
un m�dico amigo para potenciar mi vida sexual. No era viagra eran tres f�rmacos
que hac�an afluir la sangre al bajo vientre y eso produc�a una erecci�n
continuada. (El pene est� formado por cuerpos cavernosos y al afluir la sangre
se llenan, proporcion�ndole el tama�o y la dureza que caracterizan a una
erecci�n).



Las pastillas daban mejor resultado si te excitabas (yo pod�a ser un buen
testigo de eso, consegu�a estar cuatro o cinco horas sin perder la erecci�n y la
recuperaba enseguida de correrme), pero aunque no te excitara nada al rato de
tomarlas notabas poco a poco como te ibas empalmando. Cog� un molinillo peque�o
de caf�, que mi asistenta utilizaba para el az�car glass de los postres y le
eche la dosis de tres d�as.



Qued� un polvo blanco muy fino que f�cilmente se disolver�a en la bebida que le
preparara a K para que se refrescara. Aunque yo sab�a que el efecto que iba a
lograr era estar muy caliente y que yo me pusiera m�s caliente a�n. Con esa
erecci�n grabarlo en la ducha o meando ten�a que ser maravilloso.



Se me ocurri� un �ltimo detalle. Agarr� la bolsa de ropa que hab�a encargado y
cog� los speedo (ba�adores de competici�n, muy peque�os ) escog� el que m�s me
gustaba para v�rselo a K y le cort� en cuatro puntos el el�stico de las perneras
. Eran unos cortes peque�os pero que imped�an que se ci�eran a las piernas. Eso
unido a los movimientos que tendr�a que hacer K y lo abultado de su entrepierna
me iban a proporcionar un bonito espect�culo. Dentro de unas horas empezar�a a
ejecutar mi plan.