Fing� no darme cuenta de que me pisaba, lo salud� e invite a
una cerveza. Aprovech� para mirar para mi bota y ver una deportiva nike
inmaculadamente blanca con la marca en amarillo, me encantaba y mi polla debi�
llegar aL l�mite de sus 17 cm. K empez� con su ritual de ahumarme, fing�a
interesarse por charlar conmigo para echarme todo el humo que pod�a en los ojos
la nariz y la boca. Tos� y me frot� los ojos en un par de ocasiones.

Notaba que le excitaba que no le mandase parar, le hacia
sentir que pod�a manejarme. K estaba inquieto, no paraba de mover su zapa dcha.
encima de mi bota dcha. El movimiento afectaba no s�lo a mi bota sino tambi�n a
mi pierna; y con ella se mov�a mi polla no era un movimiento fuerte pero
constitu�a una caricia sumamente agradable. K me pidi� una cajetilla de tabaco.
Por provocarle yo me negu�. �l me dijo no seas cerdo y yo le contest� que hay
que ser inteligente para poder pagarte tus vicios. Sab�a que eso lo picar�a.
Estuvo dando vueltas nervioso por el local y sali� afuera. Yo no pensaba dejarle
repetir lo de la vez anterior si ven�a con barro en la suela me apartar�a antes
de que me manchara y le diria que era un guarro por haber pisado barro,
devolvi�ndole la humillaci�n del dia anterior.

Pero entro caminando normalmente, incluso yo dir�a que con
mucha chuleria. Venia hac�a m� con su media sonrisita ir�nica. Parec�a que
llevaba algo como un papel en la mano derecha y en los ojos tra�a un brillo de
maldad que me hac�a presagiar que iba a ser victima (no inocente) de una putada
mayor que la del barro. Se situ� a mi derecha y se agach� para ajustarse el
pantal�n al playero y as� maquear m�s como hacen los de su edad. Cuando se
levant� observ� que en el suelo quedaba un papel, el que tra�a cuando entr�. Yo
a�n no sab�a que tramaba pero no tardar�a en averiguarlo. K me pas� el brazo por
encima del hombro, con un gesto demasiado cari�oso para como me trataba. Me dijo
no te cabrees conmigo. Mientr�s su brazo me desequilibraba haciendo que
levantara la bota dcha.

Cuando la apoye not� algo blando que en mi ciudad se pisa
demasiadas veces, el hijo de puta me hab�a puesto una cagada de perro en el
suelo y fingiendo amistad me empuj� hasta que la pis�. Al notar lo que pisaba
iba a levantar la bota pero inmediatamente K me pis� manteniendo mi bota
fuertemente pegada al suelo. Unos segundos despu�s mov�a su zapa haciendome
mover la bota y manchando a�n m�s las baldosas del bar. K dijo que mal huele
aqu� levant� su zapa dcha. de mi bota y mir� su suela luego hizo lo mismo con la
izda.

Me mir� desafiante como diciendo que no era �l el que olia
tan mal. Levante mi suela izda. y sonre� como de alivio de no ser yo, as� cuando
levantara la otra mi humillaci�n ser�a mayor, al levantar la dcha. nos lleg� a
los dos un olor asquerosamente intenso. K se apart� y me dijo lo tuyo es mucho
cerdita, primero barro y ahora mierda. Eres una cerdita de primera. Yo fing�a
estar destrozado fu� al wc apoyando la bota dcha. en el tal�n y all� me limpi�
la suela. Sal� con un rollo de papel higi�nico y me agach� para limpiar las
baldosas.

K comodamente sentado con los pies encima de una mesa se
part�a de risa . No pod�a estar m�s chulo disfrutaba con mis tareas de limpieza.
Sab�a por charlas de bar que yo no limpiaba nunca pu�s en casa y en el despacho
contrataba gente para esas tareas. Fu� a por la fregona y me puse a limpiar,
disimul� limpiando desde la barra hasta la puerta como si hubiera dejado
pisadas. K se di� cuenta que eso limpiaba la prueba de que yo no habia entrado
con la suela manchada y se qued� muy satisfecho al quedar libre de toda culpa.
Sonriendo me dijo pero si eres una fregona de primera, cuando viva s�lo te voy a
llevar a mi casa para que hagas las faenas, te comprar� un uniforme y con las
medias y los zapatos de tac�n estar�s perfecta. Yo callaba poniendo cara de
apesadumbrado y consintiendo tanto puteo. Lo que m�s me excitaba es que me
tratara en femenino.

Alargu� la limpieza m�s de lo necesario para darle
oportunidad de insistir en la humillaci�n. K no dej� pasar la oportunidad, dijo
l�mpialo bien cerdita que si no eres limpia no te contrato de criada. Me agache
y recog� el papel en el que hab�a traido la mierda y lo llev� para tirarlo por
el wc. Cuando volv� K me ten�a preparada una nueva humillaci�n. Me dijo dejame
ver la suela a ver si est� limpia, s�lo ense��rsela y dejar que fuera �l el que
decidiera si estaba bien ya era rebajarme, pero yo le quer�a dar la satisfacci�n
completa me pon�a muy cachondo que me tratase como una mujer, y quer�a que
aprovechase todas las posibilidades de humillarme que se le ocurrieran, m�s las
que yo le pon�a en bandeja. Me acerqu� y humildemente le ense�e la suela para su
supervisi�n. La hab�a limpiado a conciencia pero ya me imaginaba que mi duro
juez no iba a estar contento.

Est� sucia, vete inmediatamente a limpiarte cerdita. Era
mentira pero hice un gesto de resignaci�n y fu� con la cabeza agachada, quer�a
que su victoria fuera total que sintiera que le obedec�a en todo y deje la
puerta abierta para que se regodeara en su victoria. Me demor� en limpiar para
que viera que le obedec�a y al volver a la barra le dije amablemente si queria
una cerveza. Mientr�s iba al wc me contest�, s� cerdita y p�llame dos paquetes
de tabaco para que no ande corto. Era pasarse, pero sent�a que pod�a
aprovecharse de mi obediencia y la paga que le lograba sacar a su madre nunca le
llegaba para nada. Sin decirle nada ped� cerveza y dos cajetillas. �l vino hacia
la barra sonriendo al ver la cerveza y las dos cajetillas. Me dijo el wc huele
horrible cerdita. Yo le hab�a provocado a ser listo para conseguir sus vicios y
�l me hab�a humillado totalmente. Empez� a pisarme. No paraba de moverse, otra
vez notaba el dulce vayven que mi pierna proporcionaba a mi polla.

Ten�a ganas de masturbarme pero no me apetecia hacerlo en ese
wc peque�o y con olor a mierda de perro. Tampoco queria marcharme a�n, K era una
fuente inagotable de recursos a la hora de humillarme y pens� que se le
ocurririan cosas nuevas. No paraba de pisarme y yo pens� en ayudarle a putearme.
Se me ocurri� una cosa que K no dejar�a escapar. Me apart� un poco de la barra y
cog� una servilleta, escup� en ella y la tir� al suelo. Sab�a que K dir�a algo,
como as� fu�. Cerdita no descansas de hacer guarradas �eh!. Yo me invent� una
historia para ganar su inter�s. Le conte que de crio en la escuela me cogieron
dos matones, me abrieron la boca y me escupieron dentro de la garganta.

Eran unos lapos horribles y tan abajo de la campanilla que
tuve que trag�rmelos. Estuve toda la semana devolviendo y a�n ahora me cuesta
tragar mi propia saliva porque me acuerdo de esos escupitajos y me dan ganas de
vomitar. Not� que la informaci�n (falsa) que le hab�a facilitado le agradaba y
otra vez v� un brillo de maldad en su mirada. Pensando que ya le hab�a dado una
forma m�s de putearme y que K no dejaba pasar esas oportunidades, fu� a jugar a
la m�quina tragaperras, cosa que hago poco pero a veces le echo unos euros.
Gracias a los espejos pude ver que K hab�a cambiado de posici�n y estaba cas�
inclinado sobre mi cubata. Volv� a la barra y cog� el cubata sin apenas mirarlo.
Pero pude ver que adem�s de la espuma que hace la cocacola hab�a un poquito de
baba blanca. El cabronazo de K esperar�a verme devolver sin saber yo, a que era
debido pero yo hice algo que me dejaba en una posici�n peor. Puse cara de
alegr�a y dije hac�a a�os que no tomaba un sorbo tan rico. Hasta me he empalmado
de lo bien que me supo, afirm�.

K sonri� viendo un mundo de posibilidades de utilizar eso. Me
hab�a hecho tragar un esgarro y yo me empalmaba, no quedaba en buen lugar. Me
tragaba la saliva de un tio y se me pon�a dura. Todo eso daba mucho juego y yo
s� que K no era bueno en los estudios pero planeando putadas hab�a demostrado
tener mucha iniciativa. Mientr�s me tragaba el esgarro lo paladeaba me excitaba
mucho sentir placer y dar a K m�s poder sobre m�. K me dijo �chale m�s a la
tragaperras, que creo que vas a tener suerte. Le obedec�, para su gozo
comprobando por el espejo sus maniobras sobre mi vaso. Me retras� en la m�quina
y cada vez que echaba m�s monedas el se mov�a hacia mi vaso.

Quise darle tiempo para que hiciera lo que quisiera. Volv� a
mi sitio y comprob� que la gran seguridad que ten�a en si mismo le hab�a hecho
excederse. Se hab�a dejado llevar, y se habia pasado. A pesar de que ya hab�a
dado un trago el cubata estaba casi desbordado. Le habia echado tantos lapos que
la parte de arriba era una mezcla blanca de aspecto casi gelatinoso. Yo pensaba
que no podria beber todo eso sin vomitar. Para disimular le dije, fallaste, la
puta m�quina no me di� nada. �l no dijo nada y se limit� a pisarme. Beb� un
trago largo y puse gesto de placer, cerrando los ojos y mordi�ndome el labio
inferior durante unos segundos. Me lleve la mano hacia el paquete y me lo frot�
como si estuviera s�lo y no me viera nadie, como si gozara tanto que no pudiera
resistirme, simulaba estar en extasis. Cuando abr� los ojos lo vi muy interesado
por el efecto que me caus� su colecci�n de esgarros.

Cog� el tel�fono m�vil y fing� una llamada a una puta. Fing�a
estar muy caliente y le dije que no pod�a esperar que le pagaba doble pero que
ten�a que follar ya. K debi� pensar que el se llevaba los trabajos (no paraba de
dar tragos a su cerveza,le hab�a quedado la garganta seca ech�ndome tantos
esgarros) y la puta se llevaba paga doble por el polvo y conforme a su talante
n�tural decidi� sacar partido.

Me dijo, Cerdita dame dinero para el bus que ando tieso. Yo
nunca daba dinero s�lo invitaba a tomar algo pero no me lo ped�a, lo exig�a
insult�ndome, record�ndome su control. Quise que me sintiera obediente. Saqu� la
billetera y le d� uno de los m�s peque�os 5 euros. No seas taca�a y est�rate
cerdita. Sin mirarle cog� uno de 10 euros se lo d� y al querer recuperar el de 5
me dijo: dejalo as� cerdita.

Era bastante dinero, una cerveza cuesta 1 euro y el tabaco
2,30. Yo lanc� un suspiro como de resignaci�n y el sonriendo me dijo tienes que
ser obediente si quieres que alg�n dia te tenga de criada. Yo no le dije nada
quer�a que sintiera su triunfo total. No qued� con ninguna puta en ese momento
s�lo me apetec�a ponerme una zapa y pisarme mientr�s me pajeaba fuertemente.
Tuve un orgasmo fren�tico y segu� masturb�ndome.

Ten�a el glande todo enrojecido porque desde que lleg� K al
bar hasta que me corr� en casa hab�a estado con una gran erecci�n todo el
tiempo. Pero quer�a correrme m�s. Acab� agotado pensando que estaba en un c�mino
sin retorno, no s�lo respecto al humillante trato que K me iba a dar; Mi forma
de vivir el sexo hab�a cambiado de Hetero Activo Dominante a Gay Pasivo Sumiso.
No era cruzar una acera era cruzar una autopista.