Hola, este relato que voy a desarrollar se basa en una
situaci�n que nunca me imagin� que iba a suceder.
Siempre fui considerado por mi familia como un conocedor de
temas sobre las pc y fue esto lo que me llev� a este suceso.
Soy de Argentina y vivo en la capital federal. Tengo 42 a�os
y soy muy deportista por lo cual tengo un buen cuerpo, muy fibroso y muy
marcado. Estoy en buena forma.
Estando un d�a en casa de mi cu�ada con mi esposa, esta me
cuenta que mi sobrina Corina tiene problemas con el uso de la computadora y me
pide si yo puedo darle una mano con esto. Obviamente me ofrezco de muy buen
grado ante la solicitud de mi cu�ada y de mi esposa.
Quedamos en que mi sobrina vendria a casa el martes de la
pr�xima semana ya que ese d�a es el cual yo llego m�s temprano de la oficina.
El martes llegu� aproximadamente a las 18 hs, me di una ducha
y me vest� con una remera y un pantal�n corto de tela muy liviana y no me puse
boxer para estar m�s c�modo. Mi sobrina tal lo acordado lleg� a las 18:30 hs
directamente del colegio. Ella est� estudiando su ciclo polimodal.
Llegado a este punto les debo contar como es Corina. Es una
hermosa criatura de cabellos casta�os claros, unos inmensos ojos marrones muy
vivaces y carita angelical. Tiene 16 a�os pero parece muchos menos debido a que
es muy menudita. Mide un poco menos de 1.5 mts. y es muy delgadita. Tiene un
f�sico espectacular a pesar de su tama�o producto de su deporte favorito: el
patinaje. Esto hizo que se le desarrollaran unas hermosas piernas, muy bien
contorneadas as� como una cola peque�a pero muy paradita. En resumen es un
bocado delicioso para cualquier jovencito de su edad.
Al entrar en casa la recibi� Patricia que es mi esposa y se
pusieron a conversar un rato. Yo entr� al living y al verla me encant�. Llevaba
puesto el unifome escolar: una blusa blanca de tela muy suave y una pollera
corta tableada de cuadros verdes y blancos. Preciosa.
Nos dimos un beso y le ped� que subi�ramos al escritorio para
comenzar a trabajar. Hacia all� nos dirigimos. Nos sentamos en el escritorio de
la pc y le ped� que se sentara frente a la misma.
Comenzamos por las explicaciones b�sicas y fue avanzando muy
r�pidamente. Solamente le costaba escribir. No se manejaba bien con el teclado.
Entonces me pidi� ayuda con esto. Yo la miraba mientras escrib�a y realmente me
gustaba mucho lo que ve�a. El aroma de su cabello y sus muslos al descubierto
estaban haciendo estragos en mi. El tono dulce que utilizaba para dirigirse
haciendo las preguntas dentro de el marco que describ� completaba el resto. Me
estaba excitando.
Hicimos una pausa y nos pusimos a conversar de diversos temas
y yo le pregunt� c�mo le iba con los chicos. Ella me coment� que los que hab�a
conocido hasta ahora le parec�an muy pavos y que no le atra�an. En realidad
avanzando la conversaci�n me dijo que le gustaban los hombres mas grandes. Yo
estaba empezando a ponerme al palo y se me notaba. El pantaloncito que vest�a no
permit�a disimular nada, la tela delgada y la falta de boxers hac�a que se me
notara la erecci�n.
Le pregunt� si ya hab�a tenido relaciones con alguien para lo
cual me dijo que no y que cuando tuviera relaci�n con alguien quer�a disfrutar y
que la hicieran disfrutar ense��ndole todo lo que necesitaba y eso no podr�a
d�rselo ning�n nene de su edad. Esto me puso a mil. Ya mi erecci�n era
indisimulable y ella se dio cuenta. P�caramente me dijo que volvi�ramos al
estudio y nos pusimos a trabajar.
Como su dificultad con el teclado subsist�a me sugiri� que la
mejor manera de aprender era si yo la iba guiando con el teclado. Yo le dije que
si y comenc� a ayudarla con las manos pero ella me dijo:
T�o, no ser�a mejor si me siento en tus piernas y me vas
ayudando desde una posici�n m�s c�moda tanto para vos como para m�?
Esto fue el colmo, cre� que me reventaba el pantal�n. Se
acomod� sobre mis piernas y yo le fui guiando las manos tratando de que su
hermosa cola no se corriera para atr�s y sintiera la enorme erecci�n que ten�a.
Claro esto no era el plan de ella que comenz� a moverse hacia atr�s con el
pretexto de que le molestaba la pollera y al arreglarse se la levant� y qued�
con sus nalgas sobre mi enorme erecci�n. Sent�a sus carnes calientes debido a
que su tanguita estaba muy metida en su cola. Era imposible que no lo sintiera.
Le dije que por el d�a de hoy era suficiente y que el s�bado
con m�s tiempo si quer�a le iba a seguir ense�ando.
Me dijo: Espero que el s�bado tengamos mas tiempo.......