Como cada ma�ana, vi al maestro Federico caminando por el
corredor, con esa elegancia y sensualidad que lo caracteriza...
Federico, nos imparte la clase de Historia, es uno de esos
hombres, que sin ser guapo en el sentido cl�sico, resulta un hombre
tremendamente atractivo, con m�s de metro ochenta de estatura, esbelto, de
hombros anchos, cintura estrecha, piernas largas y poderosas, un trasero firme y
abultado y bajo sus pantalones, un buen paquete, de esos que se te antojan con
s�lo echar una mirada. Es uno de esos maestros estrictos y duros con los
alumnos; es imposible sobornarlo y venadearte alguna de sus clases,, sin meterte
en un buen l�o.
La cuesti�n, es que, �se no fue uno de mis mejores periodos,
por lo que mis calificaciones no eran precisamente como para presumir, as� que
me vi bajo la estricta lupa del profesor.
Casi al terminar las clases, Federico me mand� a llamar a su
despecho y mientras me sermoneaba y me daba detalles sobre c�mo salvar el
semestre, empec� a fijarme con atenci�n en �l; el pantal�n vaquero se ajustaba a
sus muslos y mis ojos fueron directamente a su paquete; mi calentura se dispar�
de inmediato, al imaginar esos labios en mis tetas, mordiendo mis pezones o
chup�ndome el co�o; Federico pareci� advertir mi lascivo inter�s, por lo que
bruscamente dio por terminada la reuni�n, no sin que antes yo advirtiera c�mo su
paquete crec�a visiblemente bajo sus pantalones.
A partir de �se d�a, no me perd�a su clase, me sentada
adelante, frente a su escritorio, me las arregl� para hacer que mi falda del
colegio fuera lo m�s corta posible, apenas cubri�ndome a medio muslo y la blusa
blanca una talla m�s chica, debajo me pon�a sujetadores de media copa, para que
mis tetas quedaron visibles y a�n m�s... no llevaba bragas... Constantemente,
abr�a mis piernas, dejando expuesto mi co�o... Disimuladamente, Federico no
evitaba mirarme; muchas veces lo pesqu� con la vista fija en mis tetas y yo s�lo
sonre�a y en cuanto �l se daba cuenta, se apartaba con brusquedad; As� pas� m�s
de una semana, en las que pude observar c�mo Federico se pon�a cada vez m�s
nervioso y c�mo su rica polla se endurec�a; yo hac�a todo lo posible por
provocarlo; en una ocasi�n, me acerqu� a su escritorio y me inclin� sobre �l,
regal�ndome una magn�fica vista sobre mis tetas; casi se qued� vizco y se puso
tan rojo, que cre� que en �se momento me echar�a; un poco harta de este
jueguecito, decid� hacer algo dr�stico, as� que cuando el colegio casi estaba
desierto, me dirig� a su oficina; yo sab�a que �l siempre era uno de los �ltimos
en abandonar la escuela, as� que cuando llegu�, �l estaba arreglando unos
papeles, de espaldas a la puerta; con suavidad entr� y cerr� la puerta tras de
m�; cuando me vio, se sonroj� y not� su inquietud. Me pregunt� con sequedad qu�
quer�a; sonriendo me sent� en una silla y le respond�, que era precisamente lo
mismo que yo iba a preguntarle; me mir� sin comprender.
-Te he visto c�mo miras mis tetas...
Federico se qued� mudo de asombro.
-Eso no es ....
-Oh, vamos, no finjas, s� que est�s deseando mamarme las
tetas...
�l apret� los pu�os, molesto por mi comentario descarado.
-Ser� mejor que salgas de aqu�.
Yo sonre� y empec� a desabotonar mi blusa ante tu mirada
perpleja; �l ni siquiera pod�a hablar, as� que cuando mis senos quedaron
expuestos, no pudo dejar de mirar... empec� a acariciarme las tetas, pellizcando
mis pezones y poniendo cara de vicio...
-Apuesto a que se te antojan, �eh, profesor?
Lo vi tartamudear y perder al color; con total descaro, abr�
mis piernas, coloc�ndolas sobre los reposabrazos, dejando a su vista mi co�o que
ya estaba h�medo; me inclin� y tom� un gis largo y grueso que estaba sobre el
escritorio; y antes sus asombrados ojos, comenc� a masturbarme; Federico no
pod�a salir de su estupor.
-Apuesto a que est�s deseando cojerme, �eh? Anda, ac�rcate y
c�geme...
�l no se movi�, s�lo me observ�, mientras su paquete crec�a
bajo su pantal�n; yo segu� masajeando mis cl�toris y penetr�ndome con el gis;
era maravilloso sentirme expuesta as� de esa manera...
-Seguro que tu polla est� deseando enterrarse en �ste
chochito.... Anda, no te resistas, c�geme...
Me sent� un poco frustrada, al ver que �l no estaba dispuesto
a participar, por lo que dej� de masturbarme y me puse de pie; lo vi palidecer
a�n m�s y re�... llev� mis dedos a su boca, para que probara mis jugos, luego
tom� su polla sobre el pantal�n.
-Sal de aqu� inmediatamente....
Me dijo, apart�ndose, pero sin poder evitar que su cuerpo
reaccionara y su polla creciera a�n m�s...
-Pi�nsalo, profesor... Puedo acusarte de violaci�n...
Cualquiera me creer�a... �lo vi apretar los labios-, pero prefiero que est�s
dispuesto.... estoy deseando coger tu verga y com�rmela hasta que me des tu
lechita caliente... Apuesto a que tu esposa no te hace eso...
De prisa, mientras hablaba, desabroch� su cintur�n y met� la
mano, cogiendo su polla caliente y dura entre mis manos y empec� a pajearlo; �l
cerr� los ojos... no pod�a evitarlo... estaba ardiendo... Baj� los pantalones y
me arrodill�; ante mi vista apareci� una polla deliciosa, de enormes
proporciones y gorda... le di un besito en la cabeza y lam� el tronco...
-T� ganas, puta...
Me dijo de pronto y tomando su verga la meti� en mi boca de
un golpe, me agarr� de la nuca y empez� a follarme... sus movimientos eran cada
vez m�s r�pidos y hubo un momento en que cre� me ahogar�a...
-Esto es lo que quer�as, �verdad, putita? Anda, ch�pame y
tendr�s tu leche...
Yo segu� comi�ndome su verga que era deliciosa y a momentos
crec�a dentro de mi boca; con los dedos masaje� su huevos; no pas� mucho tiempo
antes de que sintiera el chorro de leche caliente golpeando mi garganta y
escuchara su ronco gemido; me tragu� todo, con verdadero placer; Federico, se
apart� un poco y me mir�, sin poder creer lo que acaba de ocurrir.
Yo sonre�, muy satisfecha.
-Ahora te gustar�a cogerme, �verdad?
Federico abri� los ojos y muy renuente asinti�.
-Pues, para cogerme tendr�s que hacer lo que yo te diga.
-No entiendo...
Acomod� mi ropa y lo mir� con diversi�n.
-Te apuesto a que te dar� la mejor cogida de tu vida; soy una
verdadera puta y podr�s meterme tu polla en todas mis orificios...
Se acerc�, para tocarme, pero me apart�.
-�Qu� debo hacer?
-Ven a mi casa esta tarde ��l sacudi� la cabeza con energ�a-.
No te preocupes, estar� sola. Te espero...
Despu�s de revisar que mi ropa estuviera en su lugar, sal� de
su despacho.
A las siete de la tarde, llamaron a la puerta de mi casa;
sonre�. Mi familia no estaba, por lo que ten�a la casa a mi disposici�n; vi mi
ropa; me hab�a puesto una faldita corta y una blusa color de rosa de tirantes;
recog� mi cabello en dos coletas y no me maquill�; realmente parec�a una
puberta.
Cuando abr� la puerta, vi a Federico, tan nervioso, que ni
siquiera pod�a hablar; en seguida se me lanz�, bes�ndome con ansia; con el pie
cerr� la puerta.
-No he podido pensar en otra cosa... �murmur�-... Me has
calentado como hace mucho tiempo nadie lo hac�a....
En seguida, sus manos fueron a mis tetas y empezaron a
estrujarlas, pellizcando mis pezones que se pusieron duros y otra de sus manos
se perdi� bajo mi falta, enterrando uno de sus dedos en mi vagina �no llevaba
bragas-, que ya estaba h�meda y caliente....
-Espera, espera...
Lo apart� y lo tom� de la mano, llev�ndolo a la parte de
arriba, a la habitaci�n donde los hombres de mi familia me hab�an iniciado en el
sexo; al entrar, comenc� a desnudarlo y sus manos no dejaban de tocarme por
todas partes... Federico estaba muy ansioso y su polla salt� dura y muy grande
ante mis ojos... yo tambi�n me desnud� y sin pensarlo mucho, lo tir� sobre el
suelo y me enterr� esa tranca en mi gruta h�meda... Oh, qu� buena polla me
estaba cogiendo; era muy grande y gruesa, pero entr� sin ninguna dificultad;
empec� a galoparlo, con locura; hab�a soportado demasiado tiempo que me evitara
y ahora que lo ten�a dispuesto, no iba a desaprovecharlo. Nos movimos con
rapidez y pronto logramos nuestros orgasmos; sent� su leche llen�ndome la
vagina... fue demasiado r�pido... yo quer�a m�s...
Mi abuelo hab�a colorado unos barrotes en la habitaci�n y
ten�a unas cintas de cuero... todo hab�a sido idea de �l, ya que quer�a intentar
cosas nuevas, por lo que aprovech� que Federico estaba dispuesto a todo con tal
de follarme, que no puso pegas cuando lo puse de pie y le amar� las manos y los
tobillos, con las cintas, quedando inmovilizado. Sin saber muy bien qu� era lo
que pensaba hacer, lo amordac�. Empec� a chuparle la verga, que estaba
semierecta; fui chupando sus huevos, hasta la raja del culo; sent� c�mo se
estremeci� cuando chup� su orificio... sus gemidos eran ahogados, mientras yo
segu�a mamando �se pollazo....
-Vaya, vaya, con la putita de mi hermanita...
Al volverme hacia la puerta, descubr� a mi hermano,
mir�ndonos con desparpajo y observando detenidamente al profesor; �ste, al ver a
mi hermano, se puso p�lido y forceje� un poco, para soltarse.
-�Qu� haces aqu�? Cre� que estar�a con la puta de tu novia.
Le respond�, sin dejar de chupar los huevos de Federico; �ste
hab�a perdido de pronto su erecci�n y mi hermano sonri�.
-La muy puta no quiso chuparme al culo, as� que la mand� a
volar. As� que, como me qued� caliente, decid� venir a cogerme a mi dulce
hermanita.
Federico nos miraba a uno y a otro, sin poder comprender.
-Ahora estoy ocupada, as� que largo. Est�s distrayendo a mi
profesor.
Federico no dejaba de sacudir la cabeza e intentaba soltarse,
as� que mir� con fastidio a mi hermano, que ya se hab�a acercado a nosotros...
-Mmm... no seas ego�sta y d�jame participar �estir� la mano
para sacarme de debajo de Federico y en cuando lo hizo, me cogi� las tetas y
comenz� a chuparlas, ante los ojos desorbitados de mi profesor- Qu� buena est�s,
hermanita �murmur� y se desabroch� el pantal�n, dejando saltar su polla erecta
-�Verdad que s�, profesor? �dijo fijando su vista en Federico, que no pod�a
dejar de mirarnos-. Ahora vas a ver lo que le gusta a esta zorra. Levant� una de
mis piernas y se arrodill�; entonces comenzpo a comerme el chocho, yo gem�a como
loca, estaba tan caliente; ah� estaba yo, cogiendo con mi hermano ante de la
vista de mi profesor.... Mi hermano encontr� mi cl�toris y lo chup� con energ�a,
haci�ndome temblar... No tard� en tener un orgasmo y derramarme en el rostro de
mi hermano...
Cuando termin�, mi hermano se puso de pie con agilidad y se
deshizo de su ropa; desnudo se acerc� a Federico, que lo mir� aterrorizado...
-Parece una buena polla...
Dijo mi hermano y tom� la verga de Federico entre sus
manos... �ste en seguida trat� de apartarse y mi hermano ri� con perversidad....
-�Qu� tal sabe �ste poll�n, hermanita?
Yo que permanec�a en el suelo, laxa, por mi reciente orgasmos
le dije en voz baja.
-Buen�sima. Anda, prueba, no digas que tu hermanita es
ego�sta.
Al escuchar mis palabras, Federico forceje�, tratando de
soltarse y gimiendo con p�nico.
Mi hermano se arrodill� frente a �l y sin m�s palabras se
llev� �se pedazo de carne la boca; Federico segu�a intentando evitar �se
momento.... Yo sonre�. Sab�a lo bien que mi hermanito mamaba, as� que estaba
segura de que en pocos minutos, Federico estar�a disfrutando como un verdadero
puto.... A�n as�, decid� cooperar, as� que me acerqu� a las nalgas de mi
profesor y empec� a chupar la su raja y a rodear el ano con mi lengua...
-Qu� buena verga, hermanita... Que rica polla me estoy
comiendo...
Murmuraba mi hermano, sin dejar de chupar el la polla de
Federico, quien, vencido, hab�a dejado de protestar; por sus gemidos, advert�
que estaba disfrutando... Dej� sus nalgas y vi c�mo su polla se hab�a endurecido
en la boca de mi hermano, que lo mamaba como un verdadero experto; me arrodill�
junto a mi hermano y compartimos esa polla.
Al verlo vencido, mi hermano y yo decidimos desatarlo, para
poder coger a nuestras anchas; me tir� de espaldas en el suelo y lo indiqu� se
acuclillara sobre mi cara y me follara por la boca... abr� mis piernas y en
seguida mi hermano empez� a mamarme el chocho... Federico no pod�a dejar de
gemir, mientras su verga entraba y sal�a de mi boca... Sent� c�mo mi hermano
elev� mis piernas poni�ndolas sobre sus hombros y de un empuj�n me meti� toda su
verga hasta el fondo, haci�ndome gritar de placer.... al percatarse de eso,
Federico arremeti� con m�s rapidez sobre mi boca, cuando sinti� que estaba a
punto de venirse, sac� su polla y me ech� su leche en la cara, a la vez que mi
hermano se corr�a en mi co�o y yo ten�a mi propio orgasmo...
-Venga, que a�n no estoy satisfecha... me falta que me rompan
el culo....
-Ese ser� el honor del profesor....
Federico al escuchar que romper�a el culo, empez� a pajearse,
para levantar su verga, pero mi hermano apart� sus manos y empez� a mamarlo,
hasta que su falo se puso duro otra vez... Mi hermano se acomod� de espaldas en
el suelo y yo me mont� sobre �l, ensart�ndome a su verga... me voltee a mirar a
mi querido profesor y le ped� que se acercara, mientras me abr�a los cachetes
dejando a su vista mi ano... empez� a chuparlo, hasta que �ste cedi�, luego,
acerc� la cabeza de su verga a mi entrada...
-Ah� tienes lo que quer�as, puta....
Me dijo con rabia y de un golpe me ensart� su verga; yo grit�
por el dolor; era una verga muy grande para mi hoyito; mi hermano al notar mi
incomodidad, empez� a masajear mi cl�toris y a moverse dentro de m�.... Pronto
me acostumbr� y logramos acompasar nuestros ritmo;
-Ah... qu� rico culito tienes, perra... �murmuraba Federico
con voz ronca-... Ah.... qu� bien se siente.... voy a romperte, putita....
ah....
Yo me mov�a con agilidad sobre las dos pollas.
-Ah.... qu� bien se siente.... ah..... as�.... as�.... vamos,
cabrones, denme su leche.... ah....
Mi hermano dio un empuj�n m�s y se derram� dentro de m�,
cuando yo grit� al tener mi orgasmo; Federico tard� unos segundos m�s en
correrse, pero cuando lo hizo, su leche sali� ardiendo y abundante, tanto que no
pude retenerla en el culo...
Ca�mos los tres en el suelo, exhaustos...
-Apuesto a que esa buena verga que tiene tu profesor, le
encantar�a al abuelo...
Dijo de pronto mi hermano.
Y los dos soltamos una fuertes carcajadas, mientras Federico
nos miraba at�nito.
Espero que les haya gustado.
A�n tengo mucho que contar de Federico, porque
ciertamente, mi abuelo se lo merend�.
Pueden escribirme a mi correo:
POR CUESTIONES DE PRIVACIDAD ESTE EMAIL FUE REMOVIDO