Relato: Noche de carnaval.

Esto que les voy a narrar,me ocurri� en los finales de la d�cada del 60,con 15 a�os de edad,en una noche de Carnaval,ac� en Uruguay,en una ciudad del interior,que es en la que actualmente vivo.
En esa �poca se estilaba levantar escenarios en los barrios,a los que le llam�bamos "tablados",a los que concurr�an murgas,c�micos,magos,etc.,a presentar sus n�meros para entretener a la gente,celebrando as�,la fiesta del dios Momo.
Frente al tablado se colcaban varias filas de sillas para mirar el espect�culo,las que por lo general no alcanzaban,por lo que el p�blico se ubicaba parado detr�s de ellas,en forma muy numerosa,ya que no se cobraba entrada.
Con mis 15 a�os,recientemente cumplidos,sol�a andar solo recorriendo los tablados,tratando de encontrar "algo",pues ya conoc�a mi inclinaci�n sexual:me gustaban los chicos,o sea,era gay o "puto",como se dec�a en esa �poca,mas a�n no me hab�a iniciado,tal vez por temor al "que dir�n",aunque s� hab�a tenido unos primeros contactos con chicos de mi barrio,donde nos toc�bamos,nos d�bamos algunos apretones y nos dec�amos cosas,pero nada m�s.
As� fue que una noche,estando en uno de esos tablados,lejos de mi barrio,y aprovechando que hab�a mucha gente,comenc� a buscar entre tantos chicos,alguno que me llamara la atenci�n e intentar alguna cosa,pues ya estaba decidido a tener mi primera experiencia en serio,de una buena vez por todas.
De pronto,veo que un hombre un poco m�s alto que los dem�s,ten�a sus ojos fijos en m�.Desvi� mi mirada y segu� mirando a aquella peque�a multitud,y cuando volv� a mirar para donde estaba �l,not� que desde la penumbra del lugar donde se encontraba,me segu�a mirando.
Tomando coraje,y con un cosquilleo de nervios en mi est�mago,sintiendo que me temblaban las piernas,resolv� ir hasta donde �l estaba.
Fui pasando entre la gente,que estaba bastante apretujada,hasta que llegu� a donde yo quer�a;al llegar frente a �l,lo mir� a los ojos y �l tambi�n hizo lo mismo,con una leve sonrisa en sus labios,por lo que disimuladamente me par� delante suyo,d�ndole la espalda y par�ndome casi pegado a su cuerpo.
Era un hombre moreno,de unos treinta a�os,bien afeitado,como de 1,90 m de altura,robusto,de muy buen f�sico,boca de labios algo gruesos y ojos negros brillantes.
Por mi parte,yo ten�a una estatura de 1,70 m m�s o menos,cutis blanco,ojos claros,pelo lacio algo largo,llenito de cuerpo,con una cola redondita y bien paradita,la que era muy apetecida para las caricias de mis amigos del barrio y del liceo,cosa que me gustaba mucho,pero yo me hac�a el enojado cuando me tocaban.
Y all� estaba,casi pegado a aquel moreno,hasta que cuando pas� alguien por delante m�o,disimuladamente empuj� mi cola para atr�s,quedando as� apretado contra su pelvis,y ya no sal� de ese lugar.Muy pronto sent� su verga que crec�a casi entre mis nalgas,por lo que comenc� a moverme sobre ella suavemente.
El moreno empujaba despacio hacia adelante haci�ndomela sentir m�s a�n;aquello era un sue�o...Con sus manos comenz� a acariciarme las nalgas,hasta que me tom� de las caderas para apretarme m�s fuerte.
Yo lo dejaba hacer y colaboraba moviendo mi culo contra �l.
As� estuvimos como unos 10 minutos,hasta que se inclin� y me habl� al o�do: - Nene,�vamos para otro lado?�Qu� te parece?
- Bueno,vamos - le contest�. Salimos de entre la gente y tomamos por una calle bastante oscura.All� me abraz� fuertemente y comenz� a besar mi cuello,mi cara y mi boca.Nunca me hab�a pasado esto,as� que temblaba entero entre los fuertes brazos de aquel hombre,el que hac�a correr sus manos por todo mi cuerpo,apretando mis nalgas con sus dos manos.Yo,sencillamente,no pod�a creer que me estuviera pasando esto.
-�Qu� lindo que est�s,chiquito!�Qu� cola hermosa!�Qu� lindo cuerpo ten�s!-me dec�a.
Yo participaba lo mejor que pod�a,brind�ndome para todo lo que aquel moreno quisiera.
Sent�a su dura verga sobre mi est�mago y hasta all� llev� mi mano y se la agarr�.-�Madre m�a!-pens�-�Qu� verga!Llegu� a tener miedo del tama�o de lo que ten�a entre mis manos,pero estaba muy caliente y resolv� seguir hasta el final.
-�C�mo te llam�s?-me pregunt� entre besos.
- Me llamo Julio-le contest�-�Y vos?
- Yo soy Miguel.�Cu�ntos a�os ten�s?
- Tengo 15 a�os.�Alg�n problema por eso?-le pregunt�.
- Ninguno,si vos no cont�s nada.Yo tengo 28.�Soy muy grande para vos?
- No,para nada.Me gust�s mucho y no pienso contar nada de todo esto-le respond�.
- Muy bien,entonces vamos para una pieza que tengo aqu� cerca-me dijo.Acept� y salimos casi corriendo para all�.
Llegamos,entramos,tranc� la puerta,encendi� una port�til que ten�a en una mesita y me tom� entre sus brazos;me devor� por completo mientras me iba desnudando:me acarici� por todos lados,me bes� todo el cuerpo,me hac�a girar y me tocaba,me besaba y me mord�a suavemente.
Yo solamente me quedaba quieto,pues no sab�a qu� ten�a que hacer,me entregaba por completo a Miguel,disfrutando como loco todo lo que me hac�a,tanto que mi verga estaba dura y a punto de acabarme solo.
Se apart� de m� un momento y se desnud�,abraz�ndome nuevamente.Ahora pod�a ver su hermosa verga.Era enorme,larga como de unos 25 cm y gruesa,con una cabeza algo m�s gruesa que el tronco;mis dedos no daban para rodearla toda.�Qu� delicioso fue sentir su cuerpo caliente contra el m�o!Me puso otra vez de espaldas y sent� que quer�a ponerme la verga entre las piernas,as� que las separ� un poco permitiendo que la colocara all�,y entonces comenz� a moverse suavemente.�Qu� hermosa sensaci�n!Aquello era como un tronco sedoso y caliente que iba y ven�a entre mis temblorosos muslos.Cuando empujaba,levantaba mis huevos y asomaba un pedazo por adelante m�o,junto con mi erecta verga.
As�,me tom� entre sus brazos,me levant� y me llev� hasta su cama,tendi�ndome boca abajo y �l sobre mi cuerpo.Aquello era impresionante...ten�a miedo,pero tambi�n ten�a muchas ganas,mucha calentura,como Miguel.
Me tom� de las caderas,me levant� y me puso dos almohadas bajo mi cuerpo.Sus manos y su boca recorr�an mi cuerpo,pero ahora m�s,mis nalgas.Las separ� y me pas� sus dedos por mi peque�a raja a�n.De pronto sent� su c�lida lengua que lam�a mi culo,lo que me hizo dar gemidos de placer y moverlo ansiosamente.Muy pronto sent� que uno de sus gruesos dedos entraba en m�,luego sent� otro m�s y por fin un tercer dedo.Me dol�a al principio,pero luego lo disfrutaba.
De un caj�n de su mesita de luz,sac� un recipiente,moj� sus dedos all� y me los volvi� a meter en mi culo,pero ahora entraron f�cilmente gracias a ese lubricante que se hab�a puesto,que era vaselina,seg�n me dijo despu�s.
Se puso a caballo sobre mis caderas,y se unt� vaselina en su dura verga,comenzando a pon�rmela poco a poco.
Mi cuerpo era un fuego pero igual sent� el calor de la cabeza de aquella enorme verga que me estaba por romper el culo,que era lo que yo quer�a.
A cada empuj�n,apretaba los dientes soportando el dolor.
- Aflojate - me dec�a - dej� el cuerpo blandito.Me puse lo m�s flojo que pude,y de pronto sent� que su gruesa cabeza hab�a entrado en mi cuerpo.D� un fuerte grito,por lo que Miguel me tap� la boca y se apret� contra mi espalda para que no me moviera.
Se qued� quieto,por lo que poco a poco se me pas� el dolor,mientras me acariciaba todo y me besaba el cuello,las orejas,la cara, hasta que haciendo girar mi cabeza,me comi� la boca,literalmente,metiendo su lengua bien adentro de ella,hasta que en una de esas metidas de lengua,empuj� sus caderas fuertemente,aunque no violentamente,y me meti� su verga hasta el tronco,de corrido,qued�ndose inm�vil as�,con la verga bien metida.
Yo me qued� sin aire cuando la sent�;mi boca y mis ojos se abrieron de par en par y mi cuerpo se tens� de una manera incre�ble,comenzando a temblar fuertemente.
Miguel me apretaba fuertemente abajo de �l,mientras volv�a a sus caricias y a sus besos nuevamente.
- Ya est� toda adentro Julito-me dec�a-�Qu� culito divino!�Qu� apretadito y calentito que lo ten�s!�Esta es tu primera vez?-me pregunt�.Yo s�lo asent� con mi cabeza,tratando de tomar aire mientras me corr�an las l�grimas.
- Ya va a pasar el dolor,vas a ver,y despu�s te va a gustar.Y as� fue;poco a poco me dol�a menos,entonces mov� mi cola para arriba y para abajo,por lo que Miguel al notarlo,comenz� a moverse suavemente.Me dol�a cuando se mov�a,pero luego sent� correr aquella verga que entraba y sal�a de mi roto culo,y me empez� a gustar.Miguel aceler� sus movimientos,entre los quejidos de los dos.Sent�a que la sacaba casi toda y la volv�a a meter hasta el fondo.Cada vez que lo hac�a,parec�a que empujaba mis intestinos para arriba,hacia mi est�mago.Comenc� a moverme junto con �l;�c�mo lo estaba disfrutando!�Por fin hab�a debutado,y con un macho tremendo,hermoso,bien armado con una buena verga y que coj�a de forma maravillosa!
Nuestros suspiros y quejidos aumentaron;nuestros movimientos se hicieron m�s fren�ticos a�n,hasta que sent� como que su verga saltaba adentro m�o,y comenc� a sentir sus chorros calientes en mis entra�as;sent� cada uno de ellos y fue tan hermoso aquello,que yo me acab� como nunca en la almohada en la que estaba apoyado.
- �Ay Julio,Julito...me acabo en tu culo!...�Qu� divino!...�Tom� mi leche,tom�,tom�,tom�!-jadeaba y gritaba sobre mi espalda.
- �Si dale,papito,dale!...�Ay qu� lindo,mi negrito divino!...
Cada vez que sent�a un chorro,empujaba mi cuerpo para atr�s,haciendo que la verga me entrara m�s a�n,y se descargara bien adentro.
Poco a poco nos fuimos serenando,entre caricias y besos,hasta que sac�ndomela lentamente,qued� acostado al lado m�o,acariciando mi dolorido cuerpo.
- �Qu� cosa m�s linda!-me dec�a-�Nunca hab�a cojido a un guacho como vos!�Sos una locura!
- �Vos tambi�n!,le contest� - Nunca hab�a pensado que fuera tan lindo cojer as�.�No puedo creer todav�a que me haya entrado toda tu verga!
- Sin embargo,te entr� hasta el tronco.Nunca hab�a podido meterla toda,porque es muy larga y gruesa,pero vos pudiste aguantarla sin problemas.Sos divino Julio.Quiero que sigas siendo m�o,nene divino.
- Voy a ser tuyo todas las veces que quieras,mi negro divino,le contest�,besando su boca y meti�ndome entre sus brazos.
As� nos dormimos un rato,y luego volvimos a hacer el amor tres veces m�s esa noche.
Fue la mejor noche de Carnaval que pas�,en la cama con Miguel,olvid�ndome de los tablados,y cada noche que sal�a,me encontraba con Miguel que me esperaba en la pieza,ya desnudo y pronto para cojerme en su cama.
Estos Carnavales,duraron casi cuatro a�os,hasta que tuve que irme a estudiar a la capital,pero cada vez que volv�a a mi ciudad,el negro Miguel me estaba esperando con su "pomo"listo para m�,y hasta que no le escurr�a hasta la �ltima gota,no lo dejaba.
Sin dudas,fueron y seguir�n siendo mis mejores Carnavales.
Espero les haya gustado mi largo relato;por lo menos yo lo disfrut� mucho cuando lo escrib�,al tiempo que iba recordando todo.

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