Me llamo Ana y esta es la historia de mi inicio en el sexo.
Tengo que reconocer que siempre he sido muy t�mida con la
gente y sobre todo con los hombres. Ante todo viv�a sola con mis hermanos, Angel
el mayor que nos lleva cinco a�os y el otro Roberto que es mellizo m�o, ya que
mis padres murieron siendo yo peque�a. Cuando ten�a 20 a�os, tuve un accidente
de coche con unos amigos y me romp� una pierna. Despu�s de pasar por el hospital
me mandaron a casa. Una tarde, estando sola, lleg� mi hermano �ngel. Hac�a poco
hab�a roto con su novia y ese d�a no ten�a plan. Le dije que as� me har�a
compa��a y empezamos a hablar, de su ex novia, si ten�a novio, etc. Le dije que
no lo ten�a y que nunca hab�a hecho nada por el estilo. Siempre hab�a sido muy
cari�oso conmigo, me abrazaba muchas veces y alguna vez hab�a notado su mano en
mis pechos como por casualidad, pero no le hab�a dado importancia hasta
entonces. Me abraz� con fuerza y me dijo a ver si quer�a probar, que �l me
ense�ar�a.
Al principio me qued� cortada, pero me calm� con besos suaves
por la cara y caricias por la espalda y acept�. Me bes� en la boca y me gust� el
sabor de su lengua jugando con la m�a mientras sus manos acariciaban suavemente
mi cuerpo. Ten�a puesto solamente un camis�n y ni siquiera llevaba las
braguitas. A la vez me iba diciendo palabras cari�osas y cuando not� su manos en
mi sexo, pegu� un bote. Me pregunt� a ver si me hac�a da�o y si me gustaba y me
pidi� que yo tambi�n le acariciara. Me quit� el camis�n y yo le ayud� a
desnudarse. Estaba totalmente empinado. Volvimos a besarnos y mientras le besaba
como �l lo hab�a hecho conmigo mis manos bajaron hasta su pene. Estaba
tremendamente grande, muy caliente y dura. Mientras �l me besaba los pechos y
notaba mi sexo h�medo. Su mano, baj� hasta mi cl�toris y empez� a acariciarme el
botoncito con destreza. Yo gritaba y gem�a su nombre. Luego baj� su boca y cre�a
explotar, me dec�a que ten�a unos jugos riqu�simos Cuando ya no pod�a m�s, me
penetr�. Al principio grit� de dolor, pero empez� a moverse suavemente y se me
pas� el dolor. Sigui� embistiendo cada vez con m�s fuerza y al poco nos
corrimos. Nos quedamos dormidos abrazados fuertemente. En eso lleg� Roberto y
nos vio en la cama desnudos. Al d�a siguiente, durante la comida me pregunt�
delante de �ngel si le hab�a hecho una buena mamada. Yo me puse roja, pero �ngel
contest� que para ser la primera vez, no me hab�a ense�ado nada de eso, pero que
si quer�a pod�a ense��rmelo �l.
Dicho y hecho, nos fuimos a la cama Roberto y yo, y empezamos
a "jugar". Me met� su pene que ya estaba bastante hinchado a la boca, y le chup�
y le lam� hasta que se corri�. Luego me foll� tranquilamente.
Pasaron unos tres a�os y la empresa donde trabajaban mis
hermanos los destin� a otra ciudad muy alejada de la nuestra o si no se quedaban
en paro. Los tres segu�amos con nuestros juegos er�ticos a veces con uno, a
veces con el otro e incluso alguna vez, con los dos juntos. Son maravillosos.
Al poco de ir a la otra ciudad, not� que se me retrasaba el
periodo. Nunca he sido regular, y entre la tensi�n del traslado y eso, al
principio no le di importancia. Pero al poco me hice por si acaso una prueba de
embarazo y dio positivo. Les dije a mis hermanos y se pusieron muy contentos,
aunque no sab�amos de qui�n era.
En esa ciudad, Roberto conoci� a una compa�era de trabajo y
empez� a salir con ella. Yo segu�a con mi embarazo y al poco mi mellizo se cas�
y se fue a vivir con su pareja. �ngel y yo seguimos haciendo vida de pareja y no
dijimos a nadie que �ramos hermanos. En ese parto tuvimos gemelos.
Posteriormente, tuvimos otros dos hijos. Seguimos juntos despu�s de treinta y
dos a�os haciendo vida marital. Hace poco, al regresar a casa, nos encontramos a
dos de mis hijos Alejandro y Laura, haciendo el amor. Al principio se sintieron
culpables, pero les confesamos que nosotros dos tambi�n lo �ramos. Toda la
familia lo sabe e incluso Roberto ha seguido viniendo de vez en cuando para
follar conmigo.
A ver qu� os parece mi historia. Espero que alguien me
escriba dici�ndomelo.