Siempre he querido hacer un tr�o para experimentar nuevos
campos en el sexo, se lo propuse a mi mujer y me dijo que de momento no, que m�s
adelante quiz�s, as� que me propuse buscar una pareja por mi cuenta para
realizar mi fantas�a.

Despu�s de un par de semanas de navegar por Internet en
paginas swingers pude contactar con una pareja de San Fernando y despu�s de unas
conversaciones por msn, decidimos conocernos, nos citamos en un bar de Ca�os de
Meca a las 18:00. Llegue al bar ped� una copa y me fui a las mesas de fuera, vi
llegar a una pareja, ella rubia, de estatura media con pantalones vaqueros
ajustados y unos pechos de ensue�o, �l era moreno, de estatura media y de cuerpo
cuidado. Se fueron a la barra y pidieron una copa, me reconocieron por la
fotograf�a que les ense�e por Internet, no obstante dudaron un poco y se
acercaron y se presentaron, estuvimos hablando un buen rato y cuando terminamos
las copas decidimos ir al camping donde trabajo y nos quedamos en un bungalow,
una vez dentro nos quedamos un poco paralizados, hasta que ella dio el primer
paso en el sal�n, se puso delante de su marido y lo acerco hacia ella, yo me
acerque y empec� a besarle el cuello y cogerle el pecho, �l le levanto la camisa
y all� aparecieron esos pechos grandiosos y hermosos a la vez, a trav�s del
sujetador se pod�a ver su pez�n marcado y duro de la excitaci�n, le apart� es
sujetador y empec� a lamer sus pechos, Tenia unos pezones perfectos, al mismo
tiempo vi como el marido le bajaba en pantal�n y le met�a la mano por dentro de
las bragas, ella empez� a hacerme una buena paja, estaba excitad�simo por la
situaci�n, y ella nos dijo que nos fu�semos mejor a la cama que estar�amos m�s
c�modos.

Ya en la cama los tres desnudos pude ver su hermoso co�o, lo
tenia arreglado como a mi me gusta con poco pelo, el marido comenz� con una
buena lamida de co�o mientras yo no dejaba de comerme ese hermoso pecho, luego
cambiamos de posici�n y empec� a comerme su co�o, estaba muy mojada y eso aun me
excitaba m�s, no pod�a parar de comer ese preciosa manjar, pasaba mi lengua por
su cl�toris le met�a la lengua dentro de su vajina y ella se retorc�a de placer,
mientras le hacia una buena mamada a su marido, yo segu�a lami�ndole el cl�toris
cuando vi como arqueaba el cuerpo de placer y se corr�a en mi boca, fue una
excitaci�n que nunca hab�a experimentado, se acerc� el marido y me dijo al o�do,
follatela, sin dudarlo cog� el preservativo me lo puse y dirig� mi miembro a su
cl�toris lo restregu� un par de veces y de un golpe se la clav� hasta el fondo,
ella se retorc�a de placer se notaba que estaba excitad�sima, empec� a bombear
con fuerza, notaba como me empapaba con su flujo, el marido nos miraba hasta que
decidi� de metersela en la boca, as� estuvimos un buen rato hasta que no pude
m�s y me corr�, cambiamos de posici�n y ahora la bombeaba el con una fuerza
descomunal, me quite el preservativo y ella me dijo que me acercase para que se
la metiese en la boca, me estaba haciendo una mamada incre�ble, yo no paraba de
cogerle el pecho me encantaba ese pecho grandioso y perfecto, cuando el marido
se cans�, cambiamos de posici�n el marido se echo en la cama y ella empez� a
darle una buena mamada mientras yo le introduc�a dos dedos en su co�o, el marido
se corri� en la boca y ella lo dejo caer sobre su abdomen, me mir� con cara de
viciosa y me dijo, como quieres acabar tu, la puse en la posici�n de perrito me
puse detr�s y empec� a cabalgarla de nuevo, tenia un co�o estupendo, yo estaba
muy excitado ya que su marido nos miraba mientras los dos gem�amos de placer, a
los pocos minutos me volv� a correr y ella se dej� caer en la cama exhausta.

Despu�s nos despedimos y quedamos en vernos en otra ocasi�n,
desde entonces estoy deseando tener otra experiencia de este tipo.

As� que ya sab�is parejas o mujeres si ten�is ganas de pasar
una buena velada en C�diz, no duden en contactar conmigo duende1973zu.es