Todo sucedi� cuando la hija de mi vecina, una chica de 20
a�os, vino a casa a preguntar por mi esposa, a fin de que le ayudara a hacerse
la cera en las piernas, y yo le dije que no volver�a hasta las 10 de la noche, a
lo que ante su decepci�n me ofrec� a realizarla yo a lo que ella con un poco de
remilgo acept�.
Ella se pas� a mi casa con todos los utensilios para la
depilaci�n, cera, pinzas, esp�tulas y toallas h�medas; pas� solo con una bata
blanca pr�cticamente transparente y ya de entrada me puso un poco a 150. Me
pregunt� donde se pod�a poner y le respond� que para mayor comodidad lo hiciera
en la mesa del sal�n ya que es alta y para mi ser�a mas c�modo, le puse una
s�bana sobre el cristal de la mesa y la ayud� a colocarse sobre la mesa.
Ella me dijo que le interesaba que le hiciera la cera en la
piernas desde los tobillos hasta las rodillas, as� que me puse manos a la obra y
con mucho tacto se lo hice, le pon�a la cera tibia sobre la piel con una
esp�tula y posteriormente de un tir�n la retiraba a lo que ella respond�a con un
leve gritito de dolor.
Una vez terminado ella me dijo que si me importaba, ya que
estaba, el hacerle el contorno del pubis a fin de ponerse un bikini, as� que le
respond� que adelante, y eso fue el disloque para mi ya que le dije que tendr�a
que quedarse en ropa interior y ella, sin pudor ni corte ninguno, se deshizo de
la bata y se qued� solo en sujetador y un tanga realmente min�sculo.
La mir� y ella con la mirada me dijo que empezara con la
tarea, as� que tuve que perder mi cortedad y me lanc� y apart� el tanga hacia un
lado, as� que ante mi apareci� su co�o de bello negro, me dej� totalmente
excitado pero me tuve que cortar y solo me dediqu� poner cera y perfeccionar el
tri�ngulo, entre tanto ella cerr� los ojos como haci�ndome ver que me dejar�a
hacer a mi antojo, as� que una vez terminada la operaci�n de la cera le dije que
los pelillos que quedaban se los pod�a quitar con las pinzas, as� que tendr�a
que colocarme en una silla entre sus piernas para tener facilidad con las
pinzas, ella no dijo nada por lo cual entend� que acced�a.
Puse una silla y me sent� entre sus piernas que poco a poco
coloqu� en mis hombros y ante mi se dej� ver todo su co�o h�medo, lo ten�a a
escasos 20 cent�metros de mi boca, as� que por mi mente se pasaba de todo, pero
me dediqu� a quitarle los pocos pelillos que restaban despu�s de la cera, entre
tanto pude observar que ella se relajaba y cerraba los ojos y que cada vez que
pasaba mis dedos por el pubis y su bulba apretaba los muslos y me daba a
entender que le gustaba, as� que pens� en atreverme a mas, dej� las pinzas y muy
suavemente con dos dedos abr� sus labios y me dej� ver toda sus bulba rosada y
h�meda.
Pas� un dedo desde la parte superior a la inferior pasando
por su cl�toris que estaba rojo e hinchado as� que supe que estaba tambi�n
excitada y sin pensarlo lo hund� poco a poco en su co�o, ella gimi� cuando
sinti� mi dedo dentro de su co�o, as� que de inmediato hund� un segundo dedo que
mov�a cada vez mas fuerte dentro de ella, a que respond�a con movimientos
acordes a los mios, como buscando algo mas.
Despu�s de un rato ella estaba muy excitada, as� que saqu�
los dedos, tir� de ella hacia mi y coloqu� su co�o ante mi boca y de un golpe me
dej� caer sobre �l chupando y lami�ndolo todo con fuerza y control hasta que
ella no pudo mas y se corri� en mi boca gimiendo cada vez mas fuerte.
Una vez recuperada del orgasmo, ante mi, se deshizo de la
poca ropa que le quedaba encima, me abri� la bragueta y sac� mi polla que estaba
a punto de reventar y de un golpe se dej� caer sobre ella meti�ndosela
totalmente y comenz� a cabalgar como una loca acarici�ndose sus pezones y
d�ndomelos a chupar, yo creo que perdi� el control hasta que de nuevo se corri�
dando gritos de placer y pidiendo que le metiera cada vez mas, as� que la cog�,
la coloqu� boca abajo en la mesa con los pies el suelo y su pecho sobre la mesa
dejando todo su trasero a mi vista, as� que no pens�, con dos dedos le abr� el
co�o y de un golpe le met� mi polla hasta el fondo y comenc� a culear y follarla
a tope, ella de nuevo se corri� por tercera vez y esta vez yo no pude mas y la
acompa�� y me corr� dentro de su co�o, y segu�a follando cuando su co�o comenz�
a chorrear mi leche por sus piernas. Los dos terminamos rendidos despu�s de casi
una hora completa follando, as� que ella pas� a ducharse y despu�s se fue a su
casa no sin antes darme un beso en la boca como para despertar a un muerto y yo
le respond�.
Esta situaci�n se repiti� en varias ocasiones hasta que ella
se cas� y se fue del edificio a otro mas lejano, pero de vez en cuando viene a
ver a su madre y cuando nos hemos cruzado por la escalera su mirada me dice que
de nuevo le gustar�a repetir aquella haza�a, as� que cualquier d�a me llama y
repetiremos aquella locura.