Relato: Veronica La historia de Ver�nica
Ver�nica era, ( o aun ser�?), una chica desprejuiciada,
bastante, lanzada, para decirlo de una forma que se entienda, era de esas que
viv�a diciendo en el colegio secundario, " !! A coger que se acaba el mundo!!
" o " Evite el aborto, coja por el orto", siempre bromeando ( o no) con el
mismo tema, tanto as� ,que todos estaban bastante cansado con sus dichos, sobre
todos los muchachos de quinto a�o.
Ver�nica , como les dec�a, era, (como se dice en la
Argentina) , una hist�rica calienta pitos, pues solo hablaba, pero de ir a los
papeles NADA, los chicos de tercero a quinto a�o quer�an cog�rsela de
cualquier forma, ya que la muy guacha estaba muy fuerte, sus piernas eran
espectaculares, (pues practicaba el jockey sobre c�sped y por eso estaba muy
bien formada), con sus 16 a�os tenia lo que hay que tener para ser considerada
una mujer, cola pechos y piernas en la proporci�n exacta , y una carita de
�ngel, que resaltaba con sus ojos color miel.
Pero yo siempre digo, no hay que jugar con los sentimientos (
o calentura), una vez te puede salir bien ( o barato), pero cuando manipulas
durante mucho tiempo las hormonas de muchachos de entre 15 y 18 a�os, en alg�n
momento la situaci�n se te va a escapar de las manos, y eso fue lo que le paso a
Ver�nica, los chicos de quinto a�o ( 9 de ellos) encabezados por Pedro ,
planificaron una venganza, quer�an tenerla de cualquier forma.
Pensaron que el mejor momento seria en el fin de curso.
Organizaron todo para la fiesta de graduaci�n, la misma se har�a en una casa
quinta en las afuera de la ciudad, ( el colegio era de clase media alta y
permit�a algunas cosas mientras los alumnos se hicieran responsables) alquilada
con los fondos recaudados en festivales y quermeses realizados durante el a�o,
todo estaba bien planificado, la casa tenia una piscina bastante grande y abr�a
una banda de m�sica ( aficionados pero muy buenos), muchas bebidas y danza,
inclusive se sortear�an un par de pasajes para Bariloche, todo estaba pensado
para atraer a la mayor cantidad de chicas.
En pleno mes de diciembre, con un clima muy agradable se
llevo a cabo la tan anunciada fiesta, no falto nadie ,fue realmente un suceso,
inclusive vinieron gente de otros colegios, todo muy animado.
Ver�nica ( ella vest�a una mini falda color negra, no
ajustada , mas bien amplia pero que dejaba ver su bien formado cuerpo, por
encima tenia una remera de algod�n ajustada al cuerpo, todo muy sexy), fue con
dos amigas, Juliana y Marcela, un poco mas grande que ella, que ese d�a estaban
dispuestas a pasarla de lo mejor, y no importaba con quien, es decir que si
Ver�nica no se pon�a a la par, la ignorar�an toda la noche.
Y eso fue lo que paso, cuando las dos chicas empezaron a
beber y poco a poco a embriagarse, su pudor se perdi�, ya estaban mentalizadas
en tener una noche de juerga y las hormonas estaban al mando de sus
sentimientos, cualquier chico, ( mas o menos pasable) que las encaraba consegu�a
de ellas lo que quer�an, al principio fue solo besos y toqueteo, mas entrada la
noche hasta llegaron a chupar alg�n miembro, y al amanecer se perdieron en
alguno de los cuartos con un par de chicos, as� Ver�nica las perdi� de vista y
quedo sola.
En ese momento los confabulados pusieron en marcha su
venganza.
Mandaron a una amiga de ellos para que le haga beber licor,
para que la integre sin darse cuenta al ritmo fren�tico de la fiesta, que a esa
altura y sin ning�n mayor responsable se hab�a convertido en una festichola, los
chicos tocaban los senos y colas de todas las presentes sin pedir permiso, y
ellas los dejaban, era mucho el alcohol y el frenes� que estaban totalmente
descontroladas.
Aunque un poco alegre, Ver�nica aun tenia conciencia de sus
actos, por eso no permit�a el toqueteo o manoseo, bromeaba de palabras pero
hasta ah�, nada de sobrepasarse.
Como a las 5 de la ma�ana ver�nica fue al ba�o a refrescarse,
pues estuvo bailando largo rato con unos chicos de otro colegio, cuando siente
que alguien la toma por atr�s y le tapa los ojos con un pa�uelo , quiere safarse
pero ahora son dos las personas que la tienen, no puede hacer nada y rendida es
llevada para alg�n lugar que ella no logra identificar.
La tiraron sobre una cama
-Valla, Valla, que hermosa colita tenemos ac�,- escucho
Ver�nica que dec�an a su espalda, -Veremos que sabor tiene, a ver si es tan
rica como parece- estas palabras estremecieron todos y cada uno de sus
nervios, tenia las manos amarradas y vendado los ojos, en su boca tenia una
pelotita de jugar tenis de mesa, que por mas que quer�a expulsarla no pod�a ,
quiso moverse pero lo �nico que logro fue dejar al descubierto sus hermosas
piernas, pues en cada movimiento la falda se levantaba.
Juan, un chico con el cual ella hablo en alguna ocasi�n, fue
el primero en ponerse a su lado, se acost� junto a ella y le hablo al o�do, -
Tranquila, Vero, tranquila , quiero que te relajes y comprendas que lo que aqu�
va a pasar no puedes evitarlo, no quiero decir que es todo culpa tuya, pero gran
parte si, siempre fuiste muy mala con todos, siempre provocando y calentando,
ten�s que comprender que si no te gusta quemarte, no debes jugar con fuego ,
simplemente trata de saber perder, trata de... , no se si la palabra disfrutar
es la correcta, pero bien se ajusta a la circunstancia-
Lo primero que hicieron fue sacarles la peque�a tanga negra,
luego la pusieron arrodillada en al costado de la cama, quedando su cuerpo en un
�ngulo de 90 grados con respecto al piso, la parte superior de su anatom�a
descansaba sobre la cama y de la cintura para abajo apoyado sobre las rodillas,
en esta posici�n se pod�a ver el principio de los cachetes de la cola y parte
del bello pubico.
La dejaron que su cabeza trabaje a mil, pues nadie se le
acerco por el lapso de 40 minutos ( ese fue el tiempo que el mayor de los
muchachos pudo aguantar) , Ver�nica pensaba como poder salir de ah�, pero sus
fuerzas eran pocas, ya que el cansancio la estaba invadiendo, ya llevaba mas de
20 horas sin dormir, y por lo que ve�a seguir�a un rato mas sin poder pegar los
ojos.
El silencio reinante en el cuarto, la oscuridad por tener los
ojos tapados , el efecto del licor y la gran cantidad de horas sin descansar,
vencieron la resistencia de Ver�nica, sin darse cuenta se durmi�, pero muy
profundamente.
Pedro,( el l�der de quinto a�o) al verla tan dormida, le dice
a uno de los chicos que le pase vaselina por el ano, y que la masajee muy
suavemente, este lo hace y ven como el esf�nter de Ver�nica va dilat�ndose y
permitiendo de apoco la penetraci�n de los dedos, primero el anular, luego el
medio y mas tarde el pulgar, paso seguido de a dos, aun dormida el cuerpo de
Ver�nica reacciona favorablemente a los est�mulos, sus cadera se contraen
suavemente con el contacto, de sus labios se desprendes peque�as l�neas de
saliva, su piel se eriza y tiene muy diminutos espasmos musculares, el trabajo
de relajaci�n es de primera calidad, ya no se resiste , ahora esta entregada,
(aun inconscientemente) al placer que su cuerpo adolescente esta necesitando.
Despu�s de 15 minutos de trabajo de masajes y espor�dicos
besos en el virginal ano, el mismo presenta una dilataci�n tal que era notorio a
simple vista .
Pedro ahora si no aguanto mas y con el miembro totalmente
duro se arrodillo detr�s de Ver�nica y empez� a penetrarla, El en un principio
pens� en destrozar ese hermoso culo, sin piedad y con fuerza, pero algo lo hizo
apiadarse de esa inocente mujer y simplemente y con toda la suavidad que su
calentura le permit�a, la penetro, primero el esf�nter se resist�a al paso del
glande pero poco a poco y con ayuda inesperada de una adormecida Ver�nica ,que
comenz� a mover en forma casi imperceptible la cadera, este logro ir enterrando
su miembro palpitante, El era conciente que no durar�a mucho en acabar dentro de
ella por eso solo quer�a que entre aunque mas no sea la mitad para si eyacular
Ver�nica abre los ojos y ve ahora que no esta vendada, gira
su cabeza y observa a tres muchachos con sus miembros totalmente erguidos, uno
de ellos se esta masturbando a dos manos, quiere ver quien es el que esta detr�s
suyo cuando siente algo caliente y palpitante en su trasero, es tanta la
cantidad de semen que Pedro esta largando que queda sorprendida, es para ella
algo totalmente nuevo y desconocido , siempre tubo miedo del "tab�" del sexo
anal, todos les dec�an que era muy doloroso, que no lo podr�a soportar, pero
ahora estaba ah� sintiendo como le llenaban ese orificio y no sent�a ning�n
dolor, todo lo contrario, su cuerpo correspond�a al donador de espermas con
leves movimientos de cadera, como queriendo seguir sintiendo el liquido en su
interior.
Cuando Pedro se retiro, ella sinti� como si le faltara algo,
no sabia bien definir las sensaciones, pero cuando Jos� la penetro en pocos
segundos, ella se dio cuenta que el solo sentir el calor del pene provocaba en
ella gratas y desconocidas sensaciones y todas muy , pero muy placenteras.
Ayudando ahora si directamente con su cadera, la elevo lo suficiente como para
que el muchacho lograra una penetraci�n limpia y sin esfuerzo, los l�quidos
seminales de Pedro lubricaron todo el orificio que ya de por si estaba muy
dilatado, de tal forma que directamente solo apoyo su miembro y esta lo trago
sin casi sentirlo, Jos� duro a penas tres minutos, tambi�n tenia acumulados
grandes reservas de espermas y fueron todo para Ver�nica, la eyaculaci�n duro
casi el mismo tiempo que el bombeo, en grandes espasmos , r�os de leche
inundaban a la peque�a mujer, que ya a esta altura hab�a tenido varios orgasmos.
El tercero y cuarto, entre los dos no tardaron mas de ocho
minutos, era tanta la calentura y el morbo que les despertaba tener a la chica
mas deseada a su merced, que no pod�an reprimir los orgasmos, as� fueron pasando
todos, uno tras otro sin darle descanso, el s�ptimo fue Juan, el chico que a
ella le gustaba un poco, cuando el la penetro, no solo la posey� por el ano,
tambi�n sus manos jugaron con su hinchado cl�toris, esto puso a la otrora casta
y dif�cil Ver�nica en las nubes, su respiraci�n era entrecortada, su lengua
sal�a de su boca como buscando algo que chupar, su ojos lagrimeaban pero no de
dolor, si no de un placer infinito, algo que ella se hab�a negado siempre a
disfrutar por quien sabe que prejuicios o preconceptos, cada movimiento de
caderas de Juan, pon�an a Ver�nica al borde del desmayo, no solo, estaba siendo
" Violada" por el chico mas lindo del colegio , tambi�n estaba gozando como una
loca, su educaci�n casi " Victoriana", estaba en esos momentos en conflicto con
su lujuria y su sexualidad reprimida.
Luego de tomar un poco de aire y antes que el octavo chico la
penetre pidi� que por favor la cambien de posici�n, pues estaba muy acalambrada,
a lo que le contestaron que solo despu�s de que pasen todos, y que se preparara,
pues serian varias rondas.
Ella pens� que morir�a de placer, que nadie puede soportar
tantos orgasmos, su cuerpo temblaba, y estremec�a cuando alguien se acercaba,
cuando sent�a la excitaci�n del que la penetrar�a, el no saber que pasar�a
despu�s, todo y cada uno de los acontecimientos, eran desconocidos para ella, y
eso le gustaba, le gustaba demasiado.
Cuando el ultimo de los nueve le lleno el culo de leche, ya
eran las ocho y media de la ma�ana, la mayor�a se hab�an retirado y solo
quedaban en la casa quinta no mas de 40 chicos, los cuales pasar�an ese domingo
en la piscina, pero eso seria despu�s del medio d�a pues todos, mejor dicho,
casi todos estaban durmiendo. Ver�nica es puesta sobre la cama, e inmediatamente
se duerme, Juan aprovecha y desata sus manos, as� queda libre para poder
descansar a placer, el sabia que ella ahora no ir�a a ning�n lado, ahora era
ella la que estaba disfrutando.
Pedro fue el primero en despertar, al verla a Ver�nica con la
falda arrollada en su cadera no pudo resiste y se abalanza sobre ella, le toca
la vagina y la siente h�meda, los orgasmo de esta estaban aun saliendo por su
entre pierna, no paso mucho tiempo para estar penetr�ndola ahora por su preciosa
conchita, pero esta era virgen y sinti� el dolor de la penetraci�n, por eso
abri� los ojos y lo ve a Pedro en su interior, quiso quejarse pero este la dio
vuelta y la penetro por el ano, con mucha lujuria entro en su cuerpo y acabo en
su entra�as, cuando acabo el semen de salir de su miembro y antes de sac�rselo,
llamo a otro para que siga, ahora Ver�nica estaba mas descansada y escucho como
seria la pasada, todos penetrar�an la vagina, pero acabar�an en el ano, todos
usar�an su concha, y todos vaciar�an sus test�culos en su culo, as� de simple.
Casi al medio d�a el ultimo retiraba el pene del inundado
culo de Ver�nica, la leche sal�a en forma incre�ble del ano dilatado y ella
tenia una expresi�n de gozo dif�cil de describir, su cuerpo aguanto todos y cada
uno de los miembros de ese " selecto" grupo, y pod�a con mas.
Despu�s del almuerzo, y para no despertar sospechas, se
quedaban con Ver�nica tres chicos, uno la "violaba " el otro vigilaba la puerta
y el tercero se preparaba para la penetraci�n, a veces ayudado por la misma
Ver�nica, que recib�a en su boca el miembro del futuro penetrador, los dem�s
quedaban en la piscina con los otros chicos y chicas invitados , se daban dos
horas para que pasan los tres, despu�s de ese lapso pasaba el siguiente grupo,
as� estuvieron toda la tarde. Al anochecer una de las a miga de Pedro llamo a la
casa de Ver�nica haci�ndose pasar por su amiga y les dijo que pasar�an esa noche
en la quinta, pues ten�an que entregarla por la ma�ana limpia y trabajar�an toda
la noche para hacerlo.
Pedro mando a dos chicas a ba�ar a Ver�nica, luego le dieron
de cenar y como a media noche, empez� la nueva " ronda", la misma consent�a en
una doble penetraci�n, pero siempre acabando en el ano, no quer�an arruinarle la
vida para siempre por un embarazo no deseado, solo humillarla por lo que hab�a
echo con ellos durante mas de dos a�os.
Pedro y Juan comenzaron, caricias ,besos y vaselina eran las
herramientas utilizadas para vencer la escasa resistencia que aun Ver�nica
ofrec�a, Juan con caricias bien dirigidas pon�an a esta mujer en un estado tal
de excitaci�n , que su vagina destilaba grandes cantidades de l�quidos, el paso
su lengua por el cl�toris y esta no pudo reprimir el mayor de los orgasmo de ese
d�a, ah� ella lo agarro de la cabeza a Juan y le grito, �!COGEMEEE!!, -
-Met�mela toda hijo de puta, rompeme la conchaaaa -, este no se hizo mas rogar y
la penetro con ganas, con muchas ganas, lo mismo hizo Pedro, pero desde atr�s,
utilizo los propios l�quidos de Ver�nica para lubricar su pene y as� comenz� una
introducci�n placentera en ese ano tan deseado por tanto tiempo, era fant�stico
ver como ella tomaba cuenta de la situaci�n, su cuerpo se mov�a de forma
maravillosa complaciendo a los dos amantes de turno, Juan tubo que retirarse un
poco antes, pues Ver�nica se mec�a tan bien que estuvo a punto de descargar su
leche dentro de la vagina, este le pidi� por favor a Pedro que acabe, que el ya
no aguantaba mas, Pedro lo hizo y lleno las entra�as de abundante espermas y se
retiro apurado por Juan, enseguida este la penetro y descargo su leche espesa en
ese ano maravilloso, palpitante y ahora experto en sacar lo mejor y lo peor del
hombre, siguieron as� toda la noche, Pedro y Juan se intercalaban entre los
distintos grupos, y gozaban de ese cuerpo ardiente y lujurioso en que se hab�a
convertido Ver�nica.
Desde las 6 de la ma�ana del domingo y hasta las 8 del d�a
lunes, Ver�nica recibi� en su ano, mas de treinta acabadas, todos los penes se
descargaron en su interior, y ella los gozo, los disfruto y desde ese d�a nunca
mas volvi� a jugar con nadie, ahora sale con Juan, ( pero este a veces la
comparte con Pedro y arman una reuni�n para "recordar" viejos tiempos),
Y es feliz.
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Relato: Veronica
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