De como perteneci a lo mejor de ambos mundos.

Hola. Mi nombre actual es Monique, y les contare mi historia.
Actualmente tengo 28 a�itos y lo que les voy a contar, me sucedio hace seis
a�os.

Yo era un hombre infelizmente casado. Mi pareja y yo no nos
llevabamos muy bien que digamos, hasta el punto que cada quien cojia por su
lado, aunque solamente un papel decia que estabamos casados. Soy de piel blanca,
contextura normal, ojos negros, cabello negro, simpatico y agradable. Siempre me
llamo la atencion las travestis, aunque nunca me decidia por estar con alguna.
Practicamente todas las noches despues de salir del trabajo me montaba en el
carro y me disponia a ir a la avenida Libertador, lugar donde se reunen las
travestis a prestar sus servicios. Las observaba y a veces me paraba al lado de
ellas para preguntarles el costo y mirarlas mejor, por supuesto, pero de ahi
nada pasaba. Siempre sentia un temor por dentro mio de montar a alguna de ellas,
ya que me habian comentado que alguna de ellas robaba a sus clientes, cosa que
es verdad, pero con un porcentaje muy bajo de chicas que se prestan a eso, pero
ese no es el tema.

Una noche luego de haber tomado unos tragos con mis amigos,
me dirigi a la avenida en busca de alguna travesti bella, solo para ver, pero
sentia mucha curiosidad por estar con alguna de ellas. Di varias vueltas y de
pronto vi a una travesti bellisima. Me pare al lado de ella, le pregunte el
precio. Para aquella epoca eran 5000 Bs por una mamada en el carro y 20000 por
el hotel. Debieron ser los tragos pero la subi al carro. Tenia un cierto miedo
pero habia algo de mi que decia que siguiera. Mientras ibamos al hotel le
pregunte su nombre:

- Mira y como te llamas?

- No te acuerdas de mi?

Me dejo confundido con su respuesta.

- No. Es mi primera vez que monto a una chica tan bella como
tu.

- Tu no eres el se�or pizza?

- No vale. Jaja. Yo no vendo pizzas.

- Entonces estoy confundida. Mi nombre es Anais y el tuyo?

- Jose.

- Mira y como es eso que es primera vez?

- Pues si, siempre me daban curiosidad pero tu sabes, me han
contado que tienen mala fama por los robos.

- Ay si. Siempre hay algunas con malas ma�as, pero yo no soy
de esas. Sabes? Me pareces un chico muy lindo.

Mi pene se iba endureciendo dentro del pantalon y cuando
Anais coloco su mano encima del pantalon se puso aun mas duro, como si se
quisiera reventar. Nunca habia tenido una ereccion tan grande.

Antes de seguir. Anais es de cabello color casta�o largo,
ojos marrones, delgada, bellas piernas y senos medianos no muy grandes. Es una
morena bellisima. Llevaba puesto un mini vestido negro con sandalias negras de
tacon alto. Sus u�as de manos y pies perfectamente pintadas con un rojo fuerte.

- Si tu crees?

- Vamos a hacer cositas ricas que van a ser inolvidables para
ti. Ummm

- Que bueno. Y que hace una chica tan linda como tu por aca.

- Te voy a decir la verdad. Aqui la mayoria de los hombres
vienen a satisfacerse y luego te botan como algo que no sirve, no digo que no me
guste esto, pero estoy buscando algo mas. Busco cierta estabilidad con un hombre
y que no me sigan tratando como puta.

- Debe ser malo sentirse asi.

- No te imaginas amor.

- Bueno pero algun dia conseguiras alguien que compagine
contigo y te respete como te lo mereces.

- Sabes? Me caes muy bien, espero que no sea la ultima vez
que nos veamos.

- Veremos. Sabes que es mi primera vez y no quiero crear
falsas expectativas, aunque tu tambien me caes muy bien y por lo menos tener una
bonita amistad.

- Que lindas son tus palabras.

Llegamos al hotel. Era un hotel de esos baratos que hay por
el rosal. Yo apenado le dije que ella pidiera la habitacion. Le di el dinero y
fue y la reservo. Al rato vino al carro y nos dirigimos los dos a la habitacion.
El parquero me vio y senti verguenza al sentir su mirada sobre mi. No le pare y
segui hacia la habitacion. El hotel en si era un tiradero. El ba�o estaba limpio
y la habitacion tambien, aunque sin decoracion. Solo una cama, la mesita de
noche y un televisor peque�o enrejado para que no se lo robaran.

- Bueno voy a lavarme. (dijo Anais). Ponte comodo.

Yo comence a quitarme la ropa y me quede solo en interiores.
Escondi la cartera por si acaso. Todavia desconfiaba de ella.Luego que salio
entre al ba�o yo y lave mi pene, me volvi a colocar el interior y sali del ba�o.

Anais estaba acostada boca arriba en la cama solamente con
una panty de hilo color negra. Yo me sente al lado de ella. No sabia que hacer.
Yo era muy penoso.

- Y te vas a quedar ahi sentado toda la noche?

Anais me agarro de la mano y me atrajo hacia ella. Nos
quedamos viendo cara a cara.

- Eres muy lindo y hay algo en ti que me hace sentir en paz.
Tu mirada me encanta.

Anais levanto un poco su cabeza buscando mis labios con los
suyos. No aguante mas y me decidi y la bese. Sus labios se posaron en los mios y
abri la boca para sentir su lengua. De pronto senti su lengua invadir mi boca.
Que rico. Nos fundimos en un beso interminable. Nunca habia sentido a alguien
besar asi como besaba ella. Sentia un cosquilleo recorrer todo mi cuerpo. Una
sensacion nunca antes experimentada. Mientras nos besabamos ella lentamente saco
mi interior y comenzo a acariciarme las bolas. Luego comenzo a masturbarme. Yo
era electricidad total. Todo mi cuerpo estaba en corto. Nos dejamos de besar y
comenzo a mamarme el pene, primero lentamente, luego rapido y volvio a hacerlo
lentamente todo mi pene estaba en su boca. De pronto senti que me venia y le
acaba en la boca. Mi eyaculacion fue abundante y le salia el semen por sus
labios.

- Ummmm. Que rico pene tenias guardado pero sobretodo quiero
sentir tus labios otra vez.

Nos volvimos a besar y probe mi semen. No sabia tan mal. Un
poco acido pero nada malo. Nos fundimos en un fuerte abrazo y ella se quedo
dormida de lado dandome la espalda. Estuve a punto de irme y dejarla ahi, pero
luego pense y me quede abrazandola dormida. La acariciaba suavemente y paso por
mi mente tocar su pene. Queria ver que se sentia. Si ella me habia dado placer
yo se lo tenia que retribuir de alguna forma. Cogerla por el culo siempre me
habia dado asco. Lentamente mi mano se poso en su culo y fui quitandole
lentamente su bella panty. Me costo un poco ya que estaba profundamente dormida.
Me sente viendo hacia su culo y suavemente fui tocandola buscando su pene.Era un
pene peque�o y estaba caido. Lo pense varias veces antes de tocarlo, pero al
final me decidi. Suavemente fui tocandoselo. Se sentia caliente igual que el
mio. Comence a masturbarla lentamente y note como su miembro iba creciendo hasta
obtener un tama�o de aprox. 17 cms. Acerque mi cara y se lo oli. El olor igual
que el mio. Lentamente fui acercando mi boca a su pene. Primero pose mis labios
en su punta, luego le pase la lengua para probar su sabor. Senti como le iba
saliendo liquido y lo probe, su sabor era igual que el mio, abri la boca y poco
a poco lo fui introduciendo. Se sentia rico ese pedazo de carne caliente en mi
boca y comence a mamarselo. Yo estaba excitado, mi pene nuevamente estaba a
punto de explotar. Fue aumentando mi ritmo mientras yo me masturbaba tambien. De
pronto senti que su pene exploto en un mar de semen en mi boca. Al principio me
dio repugnancia, pero su sabor me encanto y lo deje todo en mi boca y me lo
trague todo. Lo que me extra�aba que Anais seguia dormida. La abrace nuevamente
y de pronto me dijo:

- Te gusto papi?

- Ah. Es que estabas despierta

- Claro mi amor. Solo queria ver lo que hacias. Te gusto
mucho?

- Me encanto mi amor.

Nos fundimos en un abrazo y un beso apasionado pero ahora su
pene tocaba el mio. Que rico se sentia el sentir los dos penes besandose
mutuamente. Era una electricidad y un cosquilleo que nunca habia sentido.

- Espero que no sea la ultima que nos veamos. A mi tambien me
encanto mi amor.

- Claro que no mi amor. Toma mi numero de telefono.

- Bueno mi cielo ya has experimentado una parte de lo mejor
de ambos mundos y te ha gustado mucho. Por eso no te voy a cobrar. Mas bien ha
sido placentero el sentirte como yo te siento a ti. Me haces sentir muy bien.

- Tu tambien me haces sentir bien Anais.

-- Cuentame un poco de ti. Eres casado?

- Si, pero infeliz.

- Y eso?

- No nos llevamos bien. Tenia tiempo que no me sentia tan
bien como lo estoy esta noche a tu lado.

- Que lindo mi amor.

Nos besamos y nos quedamos dormidos abrazados hasta el otro
dia.

Amanecio y me desperte. Vi la hora y desperte a Anais
apurado.

- Mi amor levantate que voy a llegar tarde al trabajo.

- Y que hora es?

- Las seis de la ma�ana. Te dejo en tu casa y voy rapido al
trabajo.

- Ok.

Nos metimos en el carro y la lleve a su casa. Vivia en una
pension en San Martin. me dejo su telefono y yo el mio. Nos dimos un beso y pase
primero por la casa a cambiarme. Alla me esperaba mi esposa.

- Caramba, veo que te fue muy bien anoche.

- Si y que? Ya tu ni te preocupas por mi, me extra�a que
estes molesta.

- Me molesta que me dejes aqui sola.

- Para que? Para pelear? Es mas, no quiero discutir contigo.

- Yo si quiero.

- Tu sabes como es la vaina? Esta misma semana nos
divorciamos. No me la calo mas.

- Mi amor pero no es para tanto.

- No es para tanto? Una esposa que ni siquiera hace el amor
con su hombre? Buscate a otro si es que no lo tienes ya.

Me ba�e, me vesti y fui a la oficina. Alli llame a mi abogado
para hacer los papeles del divorcio, pero sobretodas las cosas no podia dejar de
pensar en Anais. En la tarde me decidi a llamarla y quedamos en encontrarnos en
el mismo lugar.Veia pasar las horas lentamente hasta que al fin sali del trabajo
y fui a buscarla, no sin antes comprarle unos bombones y unas flores. Llegue al
sitio y ella estaba ahi, con un vestido rojo cortico pegadito a su cuerpo,
medias negras con liguero y botas rojas de patente hasta los muslos de tacon
alto. Bellisima

- Hola mi amor, creia que no vendrias a buscarme.

- Eso nunca lo haria de dejarte plantada. Cierra los ojos y
abre las manos.

Le coloque la caja de bombones en sus manos.

- Abrelos.

- Papi que bello, son para mi?

- Claro. Te mereces eso y mucho mas .

- ay pero que flores mas lindas, gracias papi. Nunca nadie me
habia regalado algo tan bello. Estoy hay que celebrarlo, vamos a pasar un rato
juntos en nuestro nidito.

- Claro. Vamos.

- Y como te fue hoy?

- Aparte de pensar todo el dia en ti, al llegar a la casa
tuve un problema con mi esposa y decidi divorciarme, ya no la aguanto.

- Bueno papi, espero que sea lo mejor para ti. No te pregunto
mas del tema. Ahora solo me importa que tu te sientas bien a mi lado. Yo tambien
he estado pensando todo el dia en ti.

Llegamos a nuestro nidito y nos besamos. Luego nos metimos al
ba�o y ella lavo mi pene y yo el suyo. Se quedo solamente con el liguero puesto
y las botas. Nos acostamos e hicimos el 69. Mi boca comenzo a mamar su bello
tronco a la vez que ella lo hacia con el mio. Sentia que uno de sus dedos tocaba
la puerta de mi ano. Sentia un rico cosquilleo y luego poso su lengua en mi ano.
Uffff. El cosquilleo que sentia en mi cuerpo fue tan gratificante que acabe.
Todo mi semen cayo en su cara. Senti a la vez como su pene explotaba en mi boca.
Que rico sus jugos. Me los trague todo. Luego ella mi pidio que le diera por el
ano, pero yo le puse la excusa que no habia traido condom. Estuvimos un buen
rato hablando y al rato la deje en su casa.

- Toma 50000 Bs para que no trabajes hoy.

- Gracias papi. Que bueno eres conmigo.

- Nos vemos ma�ana mi amor. Te paso buscando por aqui.

- Ok. Bye.

ESTA HISTORIA CONTINUARA

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