Relato: La Gu�a





Relato: La Gu�a

La Gu�a



El siguiente relato es una fantas�a y est� destinado a fantas�as, si ud puede
llegar a cometer un acto por el estilo, le recomiendo no leer este texto ni esta
secci�n, y consultar un profesional.


La violaci�n es un crimen que debe ser castigado, y mas all�
de que tengamos fantas�as de este tipo debemos colaborar entre todos para que no
sucedan nunca mas.


Paola era gu�a de turismo y la industria tur�stica iba mal,
igualmente no era su principal fuente de ingresos, trabajaba de lunes a viernes
en un supermercado local mientras que s�bados y domingos organizaba caminatas
por la monta�a, algunas veces sal�a el viernes a la tarde y pasaban la noche en
las caba�as del camino, volviendo los domingos por la noche. Los contratos los
organizaba telef�nicamente o por mail y la forma de hacerse conocida era por
Internet y folletos.




Paola era separada y tenia un amigovio
con el cual compart�a aventuras, y si daba lo hacia con alg�n turista.

Un jueves es llamada a la casa por una
mujer para organizar una caminata el fin de semana largo con su esposo y dos
hombres m�s.




Era de costumbre de Paola organizar
todo con documentos, agencia y anticipaci�n, especialmente cuando hab�a hombres
(por obvias razones), pero debido a que la mujer llamaba de larga distancia,
parec�a amigable y que llegar�a al pueblo el viernes al momento de la salida
hicieron el arreglo.




Paola sali� al encuentro del grupo en
el punto de reuni�n (una plaza), llegaba 15 minutos tarde, all� se encontr� con
dos hombres, uno de ellos la reconoci� debido a la foto en los folletos y le
pregunto �t� eres Paola?- a lo que ella respondi� que si.




Se presentaron Roberto,(rubio) y Mat�as
(morocho alto), le dijeron que Ricardo estar�a esperando con la esposa a la
salida del pueblo por donde pasar�an caminando. Por lo que salieron equipados
con las mochilas.




All� estaba Ricardo (morocho) sin la
esposa, se presento educadamente, y dijo que la esposa estar�a en el arroyo que
se encontraba a un Km.




Pao estuvo a punto de renunciar en ese
momento ya que sent�a que la situaci�n era peligrosa, pero no, record� la voz de
la mujer, los tipos parec�an buenos, y no llevaba nada de valor, no se iban a
tomar tanto trabajo para violar a una gu�a de esa manera, pod�an hacerlo en el
pueblo.




Llegaron al arroyo, los turistas
encendieron la radio y la esposa que no aparec�a, Mat�as empez� a observar a
Paola, de forma que ella empezo a incomodarse. Ricardo sosten�a que ya
aparecer�a su mujer, que este era el punto de reuni�n, y as� que aprovecharon
para descansar.




En la radio pasaban varias noticias,
que Paola no daba importancia, estaba nerviosa por una situaci�n y un
presentimiento que empezaba a crecer dentro de ella, de pronto los muchachos
empezaron a prestar mas atenci�n a una de las noticias en la radio que dec�a
acerca de tres delincuentes peligrosos que hab�an escapado en un traslado, por
suerte no hac�an alusi�n a una violaci�n, sino a robos a bancos y camiones
blindados.




Paola dud� si serian o no, pero el
riesgo parec�a alto y ella lo present�a con su sexto sentido, su coraz�n lat�a
con fuerza, as� que fue caminando hacia los �rboles disimuladamente, una vez
entre los mismos, empezar�a a escapar sean ellos o no los delincuentes, cuando
le faltaban dos metros escucho tras ella -Paaao- se dio vuelta y estaba Ricardo
apunt�ndole con una terrible pistola, Ricardo sigui� diciendo �ven ac� que, no
te vamos a morder. Ya sabes quienes somos, no te vamos a lastimar, sigamos la
marcha y no trates de escapar, te necesitamos de reh�n y por si nos perdemos,
por ac� el camino es mas seguro que la ruta-




Continuaron la marcha en silencio, todo
parec�a mal pero manejable, salvo Mat�as que segu�a mir�ndola con cara de
degenerado, caminaron dos horas, hasta que llegaron a un descanso, todos sacaron
sus provisiones y empezaron a comer, Pao tomaba agua y com�a poco por los
nervios, hasta que Ricardo rompi� el silencio mientras sacaba una jeringa y una
caja met�lica �remangate el brazo que te voy a sacar sangre-




Paola (con voz temerosa)-Para qu�?-




Ricardo contest� -Para analizarla con
este analizador que tenemos en la caja, ahora pondremos los reactivos, habr�
hecho efecto cuando lleguemos a la caba�a y tendremos el resultado enseguida.


Paola ya se imaginaba la raz�n, pero dijo �no entiendo-


Mat�as sigui� hablando -Pao, simulamos la voz de mujer por
computadora, te elegimos a vos para que nos gu�es por un camino seguro mientras
escapamos, tenerte de reh�n por las dudas y tener relaciones sexuales, y como no
sabemos si est�s sana, tenemos que hacerte el an�lisis de sangre.


Pao casi rompe a llorar, diciendo que estaba todo bien, salvo
lo del sexo.




Ricardo sosten�a -todo bien, no somos
violadores, un violador busca poder sobre la victima, el sexo es un medio para
mostrar el poder, en nuestro caso ser� distinto, queremos sexo, y el poder ser�
una forma de obtenerlo, necesitamos follar, y lo vamos a hacer hoy a la noche en
la caba�a, estuvimos 6 meses presos y queremos follarte, lo haremos de la forma
menos violenta posible quieras o no. Ahora tenemos que seguir caminando, as� que
estira el brazo para sacarte sangre. Le estaban mintiendo, ellos estaban
interesados en mostrar su poder, especialmente Mat�as que estaba cargado de
sadismo, pero necesitaban que camine.




Paola pidi� que la dejaran ir, y dijo
que no entregar�a el brazo, a lo que Roberto respondi� con un cachetazo, luego
comenz� a hablar suavemente como haci�ndole comprender - Pao, no te quiero
lastimar, si te resist�s te lo hacemos igual, pero mas doloroso- hizo una pausa
y prosigui� -dame tu brazo-


Pao dudando estir� el brazo y Mat�as coloc� la goma alrededor
del mismo, Pao quer�a llorar pero no le sal�an las lagrimas, sin embargo el
coraz�n le lat�a a mil, luego Roberto pas� un algod�n con alcohol y clav� la
jeringa, cuando estuvo llena coloc� el contenido en un tubo de ensayo al cual
agreg� otros reactivos y los guard� en la caja.


-A�n as� podes zafar de la violaci�n si da positivo, es mas,
puede dar positivo incluso si no tienes nada, por lo que habr�a que hacerte otro
an�lisis que no te podemos hacer- Paola sab�a que eso era cierto, y esa era su
esperanza, ella sab�a que no pod�a tener nada, pero, un error en el an�lisis era
posible, mas en esas condiciones.


Antes de proseguir la marcha Mat�as le rompi� los botones de
la camisa y le cort� el corpi�o, mostrando unas tetas enormes, que si bien no
estaban bien paradas, eran encantadoras, luego Ricardo le ayud� a ponerse la
mochila a la espalda y le ato las manos hacia delante de forma que no se pueda
sacar la mochila, y en caso de querer salir corriendo, no pueda sacarles mucha
ventaja.


Empezaron a caminar, Paola trat� de resistirse pero recibi�
un par de cachetadas, luego Mat�as sac� una pinza y le dijo �si te detienes una
vez mas te voy a traer con la pinza apret�ndote los pezones- sin decirle que
tarde o temprano se los iba a apretar igual.


Ante la amenaza sigui� caminando tap�ndose los pechos,
buscando la posibilidad de escapar, cosa que se dio poco antes de llegar a la
caba�a, Mat�as y Roberto estaban adelantados y Ricardo atr�s de ella distra�do,
con lo cual sali� hacia un costado del sendero.




Corri� como 300m a toda adrenalina con
la mochila puesta, perseguida por Ricardo, el cual tard� en sacarse la mochila
propia, y cuando se cre�a a salvo se escondi� detr�s de un �rbol, se agacho y se
tapaba la boca para no llorar y no ser escuchada. Le costaba respirar en
silencio, el coraz�n le lat�a a mil por la corrida y por el terror.




De pronto apareci� Ricardo frente a
ella, Pao trato de luchar y patear pero Ricardo le dio una cachetada, no muy
fuerte como para no lastimarla, pero junto con el peso de la mochila la hizo
caer de espalda, Ricardo se agach� a su lado y le dijo �no me gusta golpearte,
pero tienes que entender cual es tu lugar-




La agarro del brazo, y le dijo -camina
conmigo, no intentes otra boludes o te doy otro cachetazo-




Pao escucho que se acercaban los otros
dos y se dio cuenta que si insist�a en escapar todo seria peor.


Mat�as cuando la vi�, tenia la excusa perfecta para
torturarla un poco y sac� su pinza, Roberto se puso atr�s y la beso en la cabeza
mientras le tapaba la boca, luego le susurr� �ves lo que te pasa por tratar de
escapar- terminado de decir esto Mat�as le agarro sus manos atadas con su mano
derecha y con la izquierda le apret� el pez�n derecho, haci�ndole ver las
estrellas, Roberto tapaba su grito al tiempo que la segu�a besando con ternura.


Mientras apretaba le dijo -te voy a soltar las manos,
levantalas en se�al de rendici�n, si lo haces te suelto en diez segundos-, dicho
esto Mat�as abri� su mano derecha librando las manos de Paola que aun segu�an
atadas entre si, ella levant� las manos y a los 10 segundos Mat�as la solt� del
dolor.


Continuaron la marcha, Paola lloraba de impotencia, empezaba
a tener fr�o, pero no se animaba a quejarse, solo lloraba.


Mat�as interrumpi� el llanto y dijo �deja de llorar o te
aprieto el otro pez�n- Pao trataba de parar de llorar pero no pod�a, Mat�as sac�
la pinza nuevamente le sujeto ambas manos y le acerc� la pinza al pez�n y con la
herramienta empez� a acariciarlo mientras le preguntaba ��qu� te dije?-, -dame
un minuto por favor- contest� la victima con miedo a la tortura. Mat� le solt�
las manos y ella se sac� las lagrimas con las manos atadas, cuando dej� de
llorar, sent�a dolor debajo de las orejas por la bronca y la impotencia. -As�
esta mejor- dec�a mientras alejaba la pinza. Se agach� ante ella y le beso el
otro pez�n y le susurr� al o�do �ves que cuando obedeces te trato bien-




Paola ten�a mucho fr�o, faltaban 100m
para la caba�a, donde Ricardo dijo -Te vamos a desnudar ac�-




Paola dijo -Pero...-




Roberto comento amablemente -Se te va a
hacer mas dif�cil desnudarte si lo hacemos justo antes de violarte, si te
desnudas ahora, la cosa viene mas despacio-




Pao fue desatada y se saco la mochila
Mat�as le agarro los brazos por detr�s mientras los otros dos la desnudaban, Pao
trataba de no llorar, pero no pod�a y se le cayeron unas lagrimas que Mat�as lo
not� enseguida, y le dio otra cachetada dici�ndole �ya vamos a arreglar esto,
deja de llorar!!!-


-Van a violarme, no les alcanza con eso?, para que me
torturan?-


Rober le explic� con tono amigable �te gustar�a tener
relaciones con un hombre llorando?, seguramente no, a nosotros tampoco, pero
como no entiendes, te tenemos que tratar de esta manera-


Metieron la ropa en una bolsa y la dejaron en el sendero,
como para que mas adelante la pase a buscar y no se vuele con el viento, Paola
con la piel de gallina, sent�a que el fr�o le calaba los huesos y caminaba
delante de ellos tap�ndose con la manos, no le dijeron nada, se ve�a mas sexy si
se tapaba, demostrando que no estaba a gusto, cuando llegaron a la puerta,
Ricardo le pidi� que le entregue sus manos hacia adelante para dejarse atar.




Pao entrego sus manos resignada,
Ricardo proced�a a atarla mientras Mati abr�a la puerta. Al final de hacer el
nudo Ricardo pregunto generosamente -te aprieta?-, no la apretaba pero Paola
dijo que si, con lo cual Ricardo lo desajusto un poco, igualmente parec�a
imposible desatarse, luego Ricardo dijo -Perd�name pero no te puedo desajustar
mas que esto-




Pao se resign� a ser violada, tenia
terror de lo que se venia.

Ricardo dijo hacia Paola mientras
sacaba el analizador de sangre y lo enchufaba para leer el resultado -Ahora
mientras esperamos el resultado de tu an�lisis nos vamos a ba�ar uno por uno,
vamos a tomar un caf� t� o lo que haya, yo me ba�o primero.




Pao cruzo las piernas y se tapaba los
pechos con los brazos, Ricardo se ba�aba, Mat�as calentaba el agua y Roberto le
ofreci� un cigarrillo.




Ella dijo �dej� de fumar- Roberto
encendi� el cigarrillo de Pao y le dijo, este cigarrillo lo voy a usar para vos,
o lo fumas, o lo uso para quemarte, Pao agarro el cigarrillo y lo sosten�a con
sus manos atadas, Mat�as sirvi� el t� y Ricardo termino de ba�arse.

Mientras Paola fumaba, Mat�as se ba��
en el siguiente turno y por ultimo Roberto, era el turno de Pao entrar al ba�o




Le desataron las manos, le entregaron
jab�n, champ� y un toall�n, la dejaron entrar sola al ba�o y le dijeron -tenes
30 minutos para ba�arte, secarte y salir envuelta con el toallon-.




Una vez en el ba�o Pao vio que no hab�a
escapatoria posible, decidi� entrar a la ducha y relajarse bajo la ducha
caliente estuvo inm�vil llorando lo mas silenciosamente posible.




A los 31 minutos, le abrieron la
puerta, y Ricardo le dijo �te dimos 30 minutos, parece que te gusta sufrir- -si
es masoquista comentaron los otros 2-, -perd�nenme, no supe calcular el tiempo-,
-por mi parte estas perdonada, y por eso no te doy otro cachetazo, pero no creo
que Mat�as lo haga y vas a ver cuando le toque el turno- dijo Roberto.


Paola estaba a punto de agarrar la toalla para secarse a lo
que Mat�as le dijo �NO!!!, ya usaste tu tiempo, si te dejo secar no aprendes
mas-


Mojada, desnuda y muerta de fr�o vio que abrieron la puerta y
las ventanas de la caba�a como castigo a la desobediencia, temblando la
obligaron a subir la escalera, con una mano se tapaba el culo ya que Ricardo y
Mat�as estaban atr�s y con la otra la vagina para taparse de Roberto.


Cuando Paola vio la cama donde seria violada, reacciono
tratando de escapar hacia atr�s, a lo que fue capturada por Roberto pese a que
resbalaba por lo mojada que estaba, Mat�as aprovech� a darle un cachetazo, que
por suerte para Paola no fue muy fuerte debido a que se choco la mano con la
baranda de la escalera y coment� -mas tarde te voy a ense�ar con las pinzas- Pao
pidi� perd�n nuevamente.


-Muestra que est�s arrepentida de verdad y acu�state sobre la
cama- dijo Ricardo, Paola obedeci� acost�ndose boca arriba y tap�ndose los
pechos y su tesoro con sus manos.


-Dame tu pierna derecha dijo Ricardo- ella obedeci� pero
entreg� ambas piernas con el fin de mantenerlas cerradas y Mat�as se la at� a la
punta de la cama, luego repitieron la operaci�n con la otra pierna, para ella
fue horrible abrirlas, pero la peor sensaci�n era la de sentir la soga que se
deslizaba por los tobillos para luego ser ajustada.


Paola se ve�a perfecta, mojada y temblando de fr�o y de
miedo, atada en forma de "Y" tap�ndose sus pechos y su vagina con las manos,
respiraba fuerte y hondo y su coraz�n lat�a rapid�simo.


Luego Mat�as le pidi� la mano izquierda, cuyo brazo tapaba
sus tetas, que cuando las destapo parec�an mas paradas ya que estaba acostada
boca arriba, la at� muy despacio, alargando el tiempo de suspenso.


Antes de pedirle la otra mano se acordaron que ya estar�a el
resultado del an�lisis de sangre (que si bien recuerdan estaba en proceso)


Roberto ley� el resultado de la m�quina y subi� para
comentarlo, Paola ten�a la �ltima esperanza, con su mano cubriendo su �ltima
defensa. Roberto coment� en ese determinante momento el resultado del an�lisis:
�Paola puede ser violada las veces que queramos-


Paola sinti� desvanecerse, se le escapaba lo �ltimo que le
quedaba en el mundo, Mat�as le pidi� la otra mano y ella se destap� lo mas
importante que le quedaba dej�ndola expuesta, Mat�as le bes� la mano dulcemente
antes de at�rsela mientras Ricardo se desnudaba.


Mat�as y Roberto comenzaron a tocarle las tetas, mientras que
Ricardo empez� a acostarse sobre ella.




Sigui� a movi�ndose como bombeando,
apoyando su miembro (aun tenia el slip) contra su vagina y recomend� a sus
amigos -si se quedan aca viendo van a eyacular mas r�pido, les recomiendo bajar
y no ver lo que pasa-


-Solo quiero ver la primera penetraci�n- dijeron los dos al
mismo tiempo.


Ricardo se sac� el calzoncillo, apoy� un enorme miembro en la
cueva luego de sacarse el l�quido preseminal, de forma de hacerlo mas secamente
y empuj�, no pudo enterrarla ni medio cent�metro de lo seca y cerrada que
estaba.




Retroced�a y avanzaba, sus amigos gritaban emocionados -dale dale que le
gusta!!!- comentarios que la hicieron
sentir mas humillada todav�a, sumado al dolor de los 5 cm que reci�n le hab�a
colocado, y faltaban otros 14!.


La sac� dejando solo 1 cm adentro y arremeti� entrando 10,
Paola mostr� cara de dolor y tratando de no gritar dijo -AAAAh!!!!, hacelo
despacio-


La volvi� a sacar dejando 1 cm adentro y le dijo como
enojado, -as� que me quieres ense�ar como debo hacerlo-, -no, no, no, solo
quer�a pedirte un favor, lo �nico que pido es que lo hagas un poco mas despacio-
terminada la petici�n le enterr� los 19cm de un solo golpe, haci�ndola gritar
�AAAAh!!! AAAh!!!-


Roberto se retir� felicitando al amigo por su espect�culo y
baj� las escaleras, mientras dec�a �cuando termines me toca a m� por atr�s-


Mat�as hizo lo mismo, pero coment� que lo haria por ambos
lados castig�ndola por los intentos de escape, por los llantos y por los gritos.


-No hab�as dicho nada de los gritos!- coment� Paola
entrecortada por las embestidas que le arrancaban expresiones de dolor intenso.
-Ahora lo sabes, te recomiendo no gritar, o te va a doler mas-




Ricardo sigui� bombeando una y otra
vez, por momentos se deten�a, la sacaba y esperaba un par de minutos a que la
cueva se cierre un poco y as� arremeterla otra vez.


Ricardo meti� una vez m�s todo su pene y volvi� a bombear
acompasadamente, le ped�a nuevamente a la presa que se calmara, que no la iba a
matar ni a mutilar, que despu�s de unos a�os iban a volver a repetir la
experiencia, y de no poder que le gustar�a follarse a otra mujer sabiendo que
a�n ella los estaba esperando temiendo los momentos que estar�a sola.




Las palabras no calmaron a Paola que
ten�a esperanza de que la mataran despu�s de la experiencia que dol�a cada vez
mas, pero su rostro cada vez era mas inexpresivo.


El llevo sus manos a la cara, a acariciarla como si fuese su
novia, luego empez� a besarla su boca. Pao ya no hac�a mas nada, solo esperaba.




Luego bajo sus manos, hacia sus tetas y
comenz� a amasarlas.




Pao miraba alrededor, esperando ver
algo que la rescate, cuando Ricardo comenzaba los primeros jadeos fuertes al
tiempo que le chuponeaba el cuello dej�ndole marcas, Pao estaba siendo un poco
lubricada por el l�quido preseminal, pero esto no era suficiente y se sentia mas
irritada.


Los bombeos eran mas intensos como as� tambi�n los jadeos de
placer mezclados con los quejidos de dolor, tratando de reprimir los gritos.


Ricardo apur� la marcha golpeando las pelvis en forma mas y
mas salvaje, entonces ella sinti� el pene latir dentro de ella, Ricardo jadeaba
mas fuerte y ella empez� a sentirse mas y mas humeda debido a que era llenada de
semen. Ricardo segu�a movi�ndose jadeando cada vez mas despacio y mas tranquilo,
Paola suspiraba confiando que al menos tendr�a un descanso, pero se equivocaba,
Ricardo segu�a por el segundo.


Ella se larg� a llorar gritando �NOOO!!!, por favor- el
violador se levanto sobre sus brazos para contemplar a la v�ctima mientras
golpeaban las pelvis mientras le dec�a tiernamente �eres hermosa, me gustas
mucho-


Mat�as escuchaba de abajo sabiendo que ten�a v�a libre para
torturarla cuando le llegara el turno debido a que ella no obedeci� la orden de
no gritar ni llorar.


Los gritos de Paola fueron interrumpidos por un cachetazo, el
violador volvi� a descargar una segunda vez jadeando en forma euf�rica
dici�ndole que era hermosa una y otra vez, luego doblo los brazos reposando
sobre el cuerpo de su victima quien hab�a dejado de llorar.


-Ahora le toca a Roberto que te va a hacer sufrir mas que yo,
y eso no ser� lo peor, lo peor ser� con Mat�as, para entonces, espero estar
descansado y repetiremos la ronda las veces que podamos-


-Rober es tuya!!!, vale la pena-


Cuando los pasos de Roberto sonaron en la escalera Pao grit�
nuevamente NOOOO!!!!!, NOOOOOOOOOO!!!!!!!!


Continuara!!!


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Relato: La Gu�a
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