Esta historia me la cont� un amigo que conoc� en un farra.
Nunca mas lo volv� a ver, pero trate de transcribir su relato lo mejor posible.
A si que dar� una peque�a introducci�n para resumir un poco todo lo narrada por
Javier y evitar aburrirlos con detalles.

Javier se caso cuando tenia 27 a�os con Yuriana � una hermosa
se�ora de 10 a�os mayor que el, aparte Yuriana tenia una bella hijita de 9
a�os-. A pesar de la diferencia de edades el matrimonio fue de maravilla y
debido al inmejorable estatus econ�mico de Yuriana los tres Vivian de lujo. La
peque�a hija de Yuriana de nombre Daniela (Dani de cari�o) siempre fue muy
precoz, esto derivado de la gran mentalidad abierta de su madre. Javier por su
parte siempre fue muy cari�oso con Dani a pesar de que no fuese su hija, tambi�n
siempre fue muy abierto con la ni�a. La hermosa familia viv�a de lo mejor, no
les faltaba nada y la pasi�n de entre Javier y Yuriana era la piedra angular de
su buen matrimonio. Ambos la pasaban teniendo sexo en cada oportunidad que
tuvieran, eran sin duda unos amantes completos.

(Hasta este punto continuare la narraci�n de las palabras del
mismo Javier).

Viv�amos una vida maravillosa, los negocios de Yuri iban de
viento en popa y los m�os tambi�n. De nuestro matrimonio ni se diga, �ramos los
amantes m�s cachondos del mundo y nos am�bamos de verdad. Mi relaci�n con Dani
era de mejores amigos, esto debido a que nunca me vio como su Padre y yo nunca
la vi como hija. Dani siempre fue muy linda, pero en su lindura tambi�n se
albergaba una precosida muy dulce.

Pero la felicidad duro muy poco, ya que a los dos a�os de
matrimonio mi amada Yuri falleci� en un tr�gico accidente. De un momento a otro
me encontr� una situaci�n muy dif�cil en vida, a mis 29 a�os ya estaba viudo y
con una peque�a que cuidar. De Dani ni se diga estaba desecha, su madre ya no
estr�a mas con ella. Tome fuerzas no s� d�nde y me propuse cuidar a Dani como el
mejor de los padres.

El primer a�o fue dif�cil, pero lo superamos. La relaci�n
entre Dani y yo se hizo mas estrecha. Los negocios tambi�n funcionaro, vend�
casi todo lo que Yuri dejo esto sumado a mi peque�a fortuna me daba la
oportunidad de vivir c�modamente sin preocuparme mucho de los negocios. Lo que
hice fue que compre una peque�a cadena de Cooffe�s los cuales administra mi
mejor amigo y yo solo recibo cuentas.

Dani ya tenia 12 a�os y se perfilaba a ser una hermosa mujer
como su madre, aunque sus pechos y caderas eran peque�os aun, dejaban ver una
hermosa silueta que a m� en especial me gustaba mucho. Alta, trigue�a, ojos
color miel y la boca mas sensual que te puedas imaginar. Obviamente yo no ve�a a
Dani como mujer, pero fue una noche que todo cambio para m�. Me encontraba en la
sala de la casa viendo TV cuando Dani apareci� de pronto en calzoncillos y
corpi�o como sol�a dormir, se sent� junto a m� y me dijo que no pod�a dormir, yo
la abrace y la recost� en mis piernas. Los minutos transcurrieron y ella poco a
poco se fue quedando dormida, yo comenc� a admirar su bello cuerpecito y de
repente tuve una erecci�n (para esto debo decir que desde la muerte de Yuri yo
no hab�a tenido relaciones, despu�s de ser muy activo pase a ser casi un
sacerdote), un sudor fr�o recorr�a mi cuerpo, una especie de excitaci�n
combinada con miedo. Para evitar tener malos pensamiento tome a Dani y la lleve
a su cuarto, la met� a la cama y ah� la deje no sin antes dar un ultimo repaso a
su cuerpo bello y fino. No sabia el porque de esa excitaci�n, pero la idea no
dejo de rondar mi cabeza por mucho tiempo.

Los d�as pasaron y esos malos pensamientos fueron
desapareciendo, llegue a la conclusi�n de eren producto de la falta de sexo por
mucho tiempo y que la soluci�n era ir con cualquier puta de bar y tener una
noche de cogedera y ya. Pero el destino es un cabr�n; una noche que no pod�a
dormir debido a que ese d�a me dio por fumar mucho, baje de mi habitaci�n hacia
la sala, note que la televisi�n estaba prendida me acerque silenciosamente a
unos 3 metros de distancia si hacer ruido y descubr� que Dani estaba acostada en
el sill�n, pero lo que vi me dejo fr�o: En el televisor pasaban una pel�cula
er�tica (no porno) y Dani acostada en el sill�n con los ojos cerrados, vestida
con su usual calzoncillo y corpi�o, la mano izquierda recorr�a su vagina por
encima del calzoncillo y con su mano derecha frotaba de menara no muy diestra
sus peque�os seno. La escena causo en mi una erecci�n inmediatamente, Dani se
estaba masturbando y yo vi�ndola. Regrese de inmediato a mi cuarto sin que lo
notara. Esto genero que volvieran los malos pensamientos.

Para mi desgracia cada d�a que pasaba Dani se pon�a mejor,
eran un gran martirio moral para mi. Despu�s de darle vueltas al asunto tome la
decisi�n de tomar lo que me correspond�a. A final de cuentas Dani no era de mi
sangre y aparte yo ya llevaba mucho sin coger. Y es que no era para menos, con
Yuri tenia sexo a montones, al grado de contratar otras mujeres para tener
tr�os, ya se imaginaran la gran vida sexual que llevaba, y de repente nada de
nada. Esto sumado a que Dani era una ni�a hermosa y coqueta, yo tenia sin duda
todas las atenuantes para hacer lo que quer�a hacer con Dani. El deseo me ceg�
por completo, lo mas f�cil era salir a buscar una mujer y saciar mi apetito,
pero Dani me tenia hechizado y no pod�a pensar en otra cosa mas que en ella.

�Pero como har�a para que Dani aceptara tener relaciones
conmigo sin obligarla?.

Pues frag�e un peque�o plan que tardar�a algunos meses, pero
que esperaba diera resultado.

Sacar�a provecho de la situaci�n de que Dani siempre fue una
ni�a precoz, inducir�a a la peque�a a que se interesara por el sexo. Lo primero
que hice fue proponerle a Dani que nos tom�ramos un a�o sab�tico en la casa que
ten�amos en la playa, obviamente ella acepto de lo mas gustosa. La segunda parte
del plan consist�a en crear un ambiente 100% sexual; desbloquee los canales
pornos de todas las TV�s de la casa, inserte direcciones de paginas porno en el
navegador de la compu, as� ella podr�a disfrutar en su cuarto de todas las
pel�culas porno que quisiera. Tambi�n sol�a sentarme con ella a ver pel�culas de
contenido er�tico en la sala y platicar de temas de sexo abiertamente con ella.
Sol�amos pasearnos en ropa demasiado ligera por la casa, ya que el calor en la
playa es insoportable, esto daba pie a que ambos pod�amos admirar nuestros
cuerpos de manera natural. Al cabo de unas semanas el ambiente de la casa se
torno mas sexual.

La tercera parte del plan consist�a en seducir a Dani. Como
el ambiente era de lo m�s acogedor, Dani y yo �ramos una verdadera pareja,
sol�amos salir juntos a todos lados, platicar, jugar y decirnos constantemente
lo mucho que nos quer�amos (sin pasar al plano de amantes) . Yo hacia una
verdadera labor de cortejo llenando a Dani con regalos y flores, recalc�ndole lo
hermosa que me parec�a y la belleza de su cuerpo; esto hacia que Dani se
sonrojara y estremeciera.

Todo el plan corr�a de maravilla, pero faltaba la ultima
parte, que consist�a en tomar a Dani como mi mujer y vivir el resto e mis d�as
con ella, ya que despu�s de tanto cortejo y convivencia diaria con ella, en mi
hab�a nacido un nuevo amor que nunca hab�a sentido.

Por fin llego su cumplea�os y es aqu� donde consumar�a mi
plan. Para el d�a del su cumplea�os ya lo tenia todo planeado, as� que por la
ma�ana despert� a Dani, la felicite y le di uno se sus primeros regalos:

Dani- que esto Javier?

Javier- pues que no ves preciosa, es tu nueva tarjeta de
cr�dito. De ahora en adelante podr�s comprar lo que tu quieras. Ya eres toda una
mujer y tienes gastos. Tambi�n abr� una cuenta bancaria a tu nombre con una
cantidad considerable de dinero para que por mucho tiempo no te preocupes por
nada.

D- pero Javier, por que haces esto por mi?.

J- espera, aun falta m�s peque�a.

Saque de mi pantal�n unas llaves y se las di junto con unos
papeles. Ella se quedo un poco incierta.

D- y esto?

J- son las lleves y las escrituras de esta casa, ya que desde
que tu madre ya no esta con nosotros tu pasaste a ser la mujer de la casa y la
due�a total.

D- gracias Javier, te quiero mucho, mucho, mucho.

J- yo tambi�n mi amor, y recuerda que de hora en adelante
eres la due�a de esta casa, ya no eres una ni�ita, as� que tendr�s que
comportarte como toda una mujer, eh. Que te parece?

D- claro Javier, ya soy toda una mujer. Veras como ser� una
gran mujer.

J- bueno mi amor, d�chate y v�stete, por que nos falta un
largo d�a de sorpresas para ti. Te espero en el auto en 30 minutos.

D- ok.

Sal� de su habitaci�n y ella me despidi� con un besito
soplado. Ya en el auto, le dije a Dani que el itinerario del d�a:

J- primero iremos al centro comercial a desayunar e iremos a
que te compres una tonelada de ropa acorde a tu nueva condici�n de mujer.
Despu�s iremos a ver una pel�cula, la que tu escojas, iremos a comer,
regresaremos a la casa nos ducharemos y te mostrare otra gran sorpresa que te
prepare.

D- todo eso haremos?, creo que quedare muy cansada.

J- ya lo creo que quedaras cansada mi amor.

En la plaza comercial recorrimos un sin fin de tienda y
compramos una gran variedad de ropa. Suger� a Dani comprar ropa atractiva,
tangas, bikinis diminutos, a si como zapatos, cosmeticos y accesorios. Me mor�a
de la excitaci�n al solo imaginarla con esa ropita puesta. Ella estaba encantada
yo aun m�s. Despu�s de dejar la enorme cantidad de bolsa en el autos nos
dirigimos al cine en donde vimos una pel�cula un poco aburrida, pero lo mejor de
todo fue que no la pasamos abrazados toda la funci�n como si de dos novios se
tratara. Comimos en un Mc�donalds y fuimos rumbo a casa. Llegamos alrededor de
las 6 de la tarde.

J- bueno peque�a, como te la has pasado hasta ahora?

D- Bien Javier, es fenomenal todo esto, me siento como una
princesa.

J- como una reina... �mi reina!

D- y t� mi rey.

J- bueno mi reina hermosa, d�chate y ponte lo m�s sexy que te
hallas comprado, por que falta la cena que prepare para ti y la ultima sorpresa
que te tengo guardadita. Nos vemos a las 9 en el comedor. Y no bajes hasta esa
hora OK.

D- ok mi rey, nos vemos al ratito.

Dani me mando un besito soplado y se retiro a su habitaci�n,
con esa cadencia caracter�stica en ella cuando camina.

A estas alturas Dani ya estaba mas que rendida a mis pies, yo
notaba en su mirada como cada halago e insinuaci�n m�as ten�an una cierta
correspondencia de su parte.

Prepare todo, puse la mesa con velas, encargue comida
Italiana, saque de la cava una botellita de vino tinto, me duche y me arregle
con una camisa blanca, pantal�n de vestir tambi�n blanco y sandalias, un poco de
perfume y listo.

Dieron la 9 de la noche, yo esperaba impaciente en la entrada
del comedor, la puerta de la habitaci�n de Dani se abri� y ella apareci�
esplendorosa y radiante; vest�a con un pantal�n blanco a la cadera super
ajustado, que marcaba sus caderas y la tanguita que tra�a puesta, un top color
miel como de licra tambi�n super ajustado, que marcaba sus peque�os senos y
dejaba al descubierto su abdomen plano y firme. Me quede paralizado, estaba ante
mis ojos la mujer m�s hermosa que en mi vida halla visto. Cadenciosamente se
acerco a mi y la tome de la mano.

D- que tal me veo?

J- guau, te ves espectacular reina m�a.

D- Gracias, tu tambi�n te ves guap�simo mi rey.

J- gracias. Por que no vamos al comedor y cenamos?

D- Ok.

La cena estuvo perfecta, el vino tinto no le gusto del todo a
Dani, pero la comida la disfruto al m�ximo. Posterior a la cena nos retiramos a
la sala, puse algo de m�sica ligera y bailamos abrazados por un rato. Pegados
uno con el otro permanecimos varios minutos, yo sent�a su respiraci�n un poco
agitada y sus latidos tambi�n; yo pod�a sentir su cuerpo pegado al m�o, era una
sensaci�n sumamente excitante, no se como le hice pero pude contener la erecci�n
de m� pen�, Ella pegaba mas y m�s su cuerpo al m�o y yo frotaba su espalda
levemente. Pegados como est�bamos ella comenz� a hablarme al o�do.

D- Gracias por todo Javier.

J- no tienes nada que agradecer mi amor, te mereces esto y
mas.

D- me siento como cenicienta con su pr�ncipe azul.

J- gracias por lo de pr�ncipe, pero d�jame decirte que t�
eres la princesa m�s hermosa de este mundo.

D- te quiero mucho Javier, como no tienes idea.

J- yo te quiero mucho mas mi vida, tanto que creo que te amo.

D- yo siento lo mismo, j�rame por favor que siempre vas a
estar conmigo.

J- Si tu me juras lo mismo, yo estar� contigo toda la vida.
Eres mi reina hermosa y te cuidare siempre.

D- te amo Javier.

J- yo tambi�n mi reina hermosa.

Coloqu� a Dani en el sof� y fui al refri por unas cervezas.
Ya estaba echo, no hab�a mas que esperar, Dani hab�a ca�do redondita a mis
cortejos, solo faltaba el ultimo movimiento y seria toda m�a. Bebimos la primera
cerveza sin cruzar palabra, solo nos mir�bamos uno al otro.

Era hora del movimiento final, tome a Dani de la mano, la
mire fijamente a los ojos y comenc�:

J- estas segura de quieres estar siempre conmigo?

D- Claro que si. Por que lo preguntas?

J- bueno peque�a. Lo que sucede es que no contemplamos
algunas cosas.

D- no se a que te refieres.

J- Mira Dani, yo ya soy un adulto y tu toda una mujer. Sabes
lo que implica eso?

D- creo que no entiendo bien.

J- Mira, yo quiero saber a que te refieres cuando me dices
que me amas.

D- pues que te amo, por que siempre me has cuidado, ahora
heces todo esto por mi y estoy segura que tu eh... bueno... es que no se como
dec�rtelo.

J- solo dilo.

D- es que tu eres una persona muy especial para mi, nunca he
conocido otros hombre, pero estoy segura que nadie har�a por mi lo que tu haces,
ni me har�a sentir o que tu me haces sentir. Cuando estoy contigo me siento
feliz, me siento libre y protegida. A parte tu eres un hombre guapo y fuerte, yo
he notado como las chicas se te quedan mirando y esto a mi me da muchos celos.

J- me estas diciendo que te gusto? (fingiendo ingenuidad)

D- si Javier, y no quiero que ninguna lagartona se te ande
resbalando.

J- Dani tu eres una mujer hermosa y debo confesar que tambi�n
me gustas mucho, pero soy un hombre y tengo necesidades, tu me entiendes no?.

D- si entiendo, pero yo ya no soy una mocosa y estoy
dispuesta a todo por con tal de no perderte.

J- a todo?

D- si, a todo?

Entonces lleve mi mano al bolsillo del pantal�n y saque una
cajita, la abr� y ante sus ojos aparecio un anillo de diemantes y le dije:

J- pues si estas dispuesta todo, � c�sate conmigo!

Dani que boquiabierta. Por un segundo llegue a pensar que me
mandar�a al carajo. Pero no fue asi.

J- dime algo, no te quedes callada por favor. Aceptas o no?

D- claro que si Javier, acepto.

Nos miramos fijamente a los ojos y si esperar un segundo nos
besamos, primero fue un beso lento y rom�ntico; ella no besaba con mucha
destreza pero poco a poco fue agarrando el ritmo y el beso subi� un poco de
tono. Nuestras bocas se separaron, nos comenzamos a mirar nuevamente. Despu�s de
unos minutos nos volvimos a besar una y otra vez. Yo recorr�a cuidadosamente con
mis manos su cuerpo. Primero sus piernas, despu�s su espalda, me decid� y
tambi�n acerque t�midamente mi mano a su trasero, ella no dijo nada as� que
continu� con sus senos. Nos separemos, me levante el sill�n, y la cargue con mis
brazos:

J- bueno mi amor, que te parece si subimos a la habitaci�n y
pasamos nuestra primera noche juntos, como buenos esposos que ahora somos.

D- ok.

No dijo mas, en su mirada pod�a ver una mezcla de miedo y
cachondes. Ella sabia lo que suceder�a y yo sabia que al fin tomar�a ese cuerpo
que por muchos meses hab�a deseado.

La sub� a mi habitaci�n entre mis brazos y la recost� en la
cama; ella me miraba t�midamente, me acerque a ella y la bese, nuestras lenguas
jugueteaban gozosamente dentro de nuestras bocas.

J- qu�tate tu ropita mi amor. No la necesitaras.

Ella obedientemente comenz� a bajarse el pantal�n, luego
sigui� con el top, sus peque�os senos brotaron de la prisi�n en que estaban. Yo
por mi parte me despoje de toda mi ropa, mi miembro salto de inmediato de la
enorme presi�n en que estaba, ella quedo mir�ndolo por unos segundo, me acerque
a ella la bese apasionadamente, la recost� en la cama y comenc� besar todo su
cuerpecito, desde su cuello, baje por sus dos pechitos, los lam� suavemente
mordiendo levemente sus pezones, ella solo cerro los ojos y gem�a t�midamente.
Luego baje hasta su vientre para admirar esa diminuta tanguita que llevaba
puesta, poco a poco se la fui bajando hasta que apareci� ante mi su hermosa
conchita, acerque mi cara y pude por un segundo oler su fragancia, sin esperar
mas acerque mi lengua a su rajita y comenc� a chaparla, ella comenz� a gemir con
mas fuerza, yo abr�a sus labios vaginales y destapaba su cl�toris para poder
lamerlo en todo su grandiosidad, ella se estremec�a mas y mas, su humedad
aumento junto con sus gemidos, as� estuve por unos minutos hasta que ella quedo
lo suficientemente mojada y lista para recibir mi miembro.

Sub� hasta su cara y la bese:

J- te esta gustando mi amor?

D- si, much�simo.

J- ahora viene lo mejor princesita.

D- tengo miedo, no crees que me dula mucho.

J- tal vez duela mi amor, pero tu solo rel�jate y d�jamelo
todo a mi, te juro que no te lastimare.

D- ok.

Puse un peque�o coj�n bajo su espalda, abr� sus piernas y
acerque mi pene a su tierna vagina, muy pero muy despacio lo fui introduciendo,
ella solo se mord�a sus labios y gem�a (no se si de placer o dolor), la humedad
de su concha ayudo a que mi miembro se hundiera con mayor facilidad, ya faltaba
poco, as� que me deje caer sobre ella y de un solo empuj�n se lo introduje hasta
el fondo, ella solt� un grito (mezcla de dolor y placer), a si que poco a poco
empec� mis movimiento de mete y saca, con cada embestida ella enterraba mas y
mas sus u�as en mi espalda, pero yo continuaba en mi labor sin preocuparme por
nada, el placer fue aumentando para ambos, obviamente ella segu�a sintiendo
dolor, yo sub� de ritmo mis mi movimientos, el sudor de nuestros cuerpos se
fund�a en una sola gota, sus gemidos me daban �nimos de seguir con mas potencia;
me sent�a volar ,de un momento a otro llegar�a al �xtasis, sub� aun mas la
velocidad, ella gem�a mas y mas:

J- te gusta mi amor.

D- sssi. mme gggusta muchoooo.

J- me encantas princesa, me encantas.

Oh oh me vengo.

Mi pene se hincho anunciando la llegada del �xtasis, pude
sentir como un chorro tras otro sal�a de mi miembro hinchado, inunde toda su
vagina de mi semen, nos convulsion�bamos al mismo tiempo. Despu�s de la gran
tempestad llego la calma, nos quedamos en la misma posici�n, yo me resist�a
sacar mi pene de su conchita, pero mi miembro comenz� su descanso despu�s de tan
arduo trabajo. Nos miramos y besamos, yo note como unas lagrimas hab�an manchado
su rostro (posiblemente del dolor), pero ella me sonri� y yo a ella, nos
volvimos a besar por mucho rato.

J- fue genial mi amor. Realmente lo disfrute.

D- yo tambi�n amor. Te amo. Ser� tu mujer por siempre verdad.

J- claro mi vida, veras como pasaremos noches enteras de amor
y sexo como buenos esposos que somos, �no?.

D- si, soy toda tuya mi amor, quiero hacer el amor contigo
toda la vida.

Fue una noche genial, seguimos platicando y planeando nuestra
nueva vida como matrimonio. Por obvias razones era imposible casarnos, pero
cuando ella cumpliera la mayor�a de edad, consumar�amos el acuerdo. Mientras yo
seguir�a disfrutando de ese cuerpecito hermoso por mucho tiempo.

CONTINUARA...