Por AMATEUR

Pr�logo: El CAMINO DE SANTIAGO
es la ruta de peregrinaci�n m�s conocida e importante del
mundo occidental, est� compuesta por 3 grandes rutas:

El camino Franc�s (es el
m�s importante) La ruta de la plata La ruta del mar

La peregrinaci�n a Santiago
de Compostela se remonta al a�o 950 con la llegada a Santiago del
Obispo Franc�s Godescalco de Puy considerado como el primer peregrino.

Mi presentaci�n: soy un chico
de 24 a�os, mi nombre es Carlos y natural de la ciudad de Burgos,
de complexi�n tirando a fuerte, estatura 1,69 metros y m�s
bien feo (seg�n dicen) pero realmente simp�tico (en cuanto
me conocen se prendan r�pidamente de m�) me gusta mucho el
deporte y sobre todo caminar, procedo de una familia tirando a pobre pero
que se permitieron el que yo estudiara la carrera de medicina la cual acabo
de terminar y con muy buenas notas. Para celebrarlo he decidido realizar
el CAMINO DE SANTIAGO l�gicamente por la RUTA FRANCESA.

Soy una persona que utiliz�
todas sus energ�as en estudiar, NO soy VIRGEN, pero al sexo mientras
duraron mis estudios siempre lo dej� en segundo plano pues mi objetivo
prioritario era finalizar la carrera lo antes posible, por lo cual, actualmente
tengo un hambre de sexo descomunal y cuando delante de m� pasa una
se�ora o se�orita (me da exactamente igual) s�lo veo
unas tetas y un co�o andante.

Antes de realizar el CAMINO DE SANTIAGO
me trac� un plan:

1� Portar�a solo una
muy peque�a cantidad de dinero por si se presentaba una emergencia
imposible de solventar. 2� Realizar la peregrinaci�n por etapas
y tratar de aprovechar todo lo que se me presentase por el camino, prestar
mis servicios como m�dico o cualquier otra cosa. 3� Con la
prestaci�n de mis servicios tratar de follarme a todas las que se
me pusieran a tiro y a ser posible sacar un dinerillo extra.

Trazado el plan, me vest�
con la ropa reglamentaria del t�pico peregrino, me coloqu�
la mochila a la espalda, cog� el bast�n y... a caminar. Era
el 2 de Julio de 1993. A�o Santo Compostelano.

ETAPA 1�: de Burgos a Fr�mista.

Este recorrido consta de 60 Km.
Y pasa por los pueblos de Tardajos, Hornillos, Castrogeriz e Itero del
Castillo, pues bien, hasta Hornillos camin� m�s solo que
la una pero a la salida del pueblo, me encontr� a dos chicas que
tambi�n estaban en peregrinaci�n, nos presentamos y ellas
son: Elena, rubia, de 34 a�os con un cuerpo macizo, muy buen culo
y unas tetas tremendas, muy simp�tica y dicharachera, me dio la
sensaci�n de que era un poco calentorra, unas horas m�s tarde
me lo demostrar�a. La segunda, Sonia de 27 a�os, muy morena
m�s bien bajita no ten�a el cuerpo espectacular de Elena
y a primera vista tampoco podr�a juzgarla pues en la forma que vest�a
no se pod�a apreciar absolutamente nada, muy seria y bastante distante,
era la contra moneda de su amiga. Ellas al conocer que yo era m�dico
y que tambi�n estaba haciendo el camino, quedaron gratamente sorprendidas
y me propusieron hacer algunos kil�metros juntos.

Poco antes de llegar a Castrogeriz
pasa un riachuelo llamado Garbanzuelo y a sus orillas est�n las
ruinas del convento de San Ant�n las cuales son impresionantes.
Sonia dijo que quer�a hacer una inspecci�n de las ruinas
pues ella es arquitecto, mientras Elena y yo nos fuimos al riachuelo, al
recorrer unos metros encontramos un peque�o ensanche el cual permit�a
darse un ba�o, todo el entorno estaba absolutamente desierto por
lo que Elena sin pensarlo dos veces se puso en pelotas y �zas! De
cabeza al riachuelo. A pesar de estar a mediados de Julio y con un calor
de justicia resulta que el agua estaba tremendamente fr�a y al ratito
sali� tiritando de fri� y me pidi� le diera un masaje.
A m� me cogi� de sorpresa debido a que no me hab�a
enterado que se metiera al agua y menos en pelotas pues me hab�a
tumbado en la hierba y casi estaba dormido. Al ver aquellas tremendas tetas
delante de mi nariz, mi polla se puso a mil, ella se tumb� en la
hierba y me pidi� le masajeara la espalda, yo sol�cito me
coloqu� sobre ella y comenc� una fricci�n profunda
sobre sus hombros y omoplatos bajando muy despacio a lo largo de su espalda
hasta el comienzo de las nalgas, luego fui subiendo lentamente por los
costados con la idea evidente de tocar disimuladamente sus tetas, en cuanto
llegu� a ellas se las friccion� ligeramente por los lados
muy prudentemente por si ella dec�a algo o se opon�a, pero
para mi sorpresa, ella se apoy� en los codos elevando el busto por
lo que dej� sus tetas a mi disposici�n, sin pensarlo pas�
mis manos hasta sus pezones los cuales ten�a duros como piedras,
no s� si por lo fr�a que el agua estaba o por el masaje que
le estaba propinando, al poco rato comenz� a emitir peque�os
gemidos lo que me anim� a quitarme el pantaloncito que ten�a
puesto y quedarme en pelotas al igual que ella. Ella se gir� y me
ofreci� lo mejor de su humanidad. Sus tetas eran para volver loco
a cualquiera, los pezones med�an m�s de 2 cent�metros
de largo y casi otro tanto de di�metro con una aureola perfectamente
proporcionada de un color marr�n oscuro, su cintura de avispa, vientre
totalmente plano, unas caderas rotundas y... en medio �Qu�
monte de Venus! Igualito a un bosque muy bien poblado, su pelo rizadito
y de un color ni rubio ni negro, no sabr�a definirlo, sus labios
vaginales estaban ligeramente abiertos e hinchados y en la comisura superior
asomaba la punta de su cl�toris, por la abertura de su rajita se
empezaba a ver el brillo del flujo vaginal. Despu�s de esta contemplaci�n
puse mi boca sobre sus tetas y me dediqu� a chupar como s�
fuese un bebe, los pezones me volv�an loco los rodeaba con mi lengua
y le daba peque�os mordisquitos, ella oprim�a mi cabeza sobre
sus tetas y se retorc�a de placer, dej� sus tetas e inici�
un largo paseo hacia el objetivo final, pas� mi lengua despacito
por todo su vientre y se la met� en su ombligo que lo ten�a
como una peque�a almejita, luego lleg� el plato fuerte, cundo
mis labios entraron en contacto con su co�ito, �ste estaba
totalmente empapado, el olor que desprend�a era sublime, fuerte
y penetrante, los labios estaban totalmente abiertos y el cl�toris
rojito y tieso como mi polla. Se lo cog� con mis labios y empec�
a chup�rselo suavemente, con mi lengua le daba peque�os toquecitos,
mientras introduc�a en su interior dos de mis dedos los cuales entraban
y sal�an muy suavemente, ella comenz� a gritar y a convulsionarse
al punto que tuvo un orgasmo que la dejo medio desmayada yo segu�
acarici�ndola con mi lengua y dedos dulcemente y en cuanto reaccion�
cogi� mi polla y se la meti� en su boca, me hizo una mamada
ligerita (s�lo para tomarle el sabor) pues me dijo que no aguantaba
m�s y la quer�a toda dentro de su chocho, yo como buen chico
obedec� y aunque mi polla es m�s bien peque�a su co�o
se adapt� a ella al igual que un guante, me es imposible describir
el mecanismo de sus m�sculos vaginales, me produc�an una
especie de succi�n hacia su interior y simult�neamente estos
apretaban sobre ella en c�rculos, ahora arriba, ahora abajo, parec�an
coger la cabeza de mi polla y tirar de ella hacia su interior a tal punto
que no pude m�s y en unos segundos emit� un grito fenomenal.
Me corr� como un semental, le met� m�s semen en su
interior que agua llevaba el riachuelo pero mi pollita a pesar de todo
sigui� tiesa como un poste de tel�fono, ella al verla se
asombr� e inmediatamente gir� sobre s� misma, se puso
a cuatro y me pidi� se la metiese por el culo, met� dos dedos
en su co�o y a continuaci�n se los fui metiendo poco a poco
en su culo el cual se dilat� de inmediato, entonces apoy�
la cabeza de mi polla en la entrada de su agujero y de un peque�o
empuj�n de mis caderas le entr� hasta los cojones, iniciamos
un mete saca desenfrenado mientras mis dedos de la mano derecha masajeaban
su cl�toris con la izquierda amasaba sus hermosas tetas. De unos
matorrales cercanos me lleg� un gemido apagado, era Sonia, estaba
espatarrada en el suelo con dos dedos metidos dentro de su co�o
y corri�ndose como una loca, yo al verla me excit� tanto
que de inmediato empec� a correrme de nuevo y Elena al sentir mi
semen caliente en su recto empez� a correrse de una forma tan prolongada
que moment�neamente perdi� el conocimiento. La recost�
suavemente sobre la hierba, dulcemente la bes� en sus labios y ojos,
ella los abri� y me bes�, su sonrisa era encantadora y me
dijo...

Cre�a que los hombres ten�an
que tener una gran polla para hacer feliz a una mujer y que equivocada
estaba, las hay peque�as, que pueden hacer maravillas, sabiendo
utilizarlas. Hoy me has hecho totalmente feliz.

Y Sonia, le dije �La viste?

S�, estaba entre los arbustos
y se hizo una paja monumental.

�Ella es lesbiana?

No, no, al contrario estoy segura
que la har�s muy feliz pues ella tiene p�nico a los t�os
con pollas grandes, la paja que se hizo fue a la salud de tu polla y a
partir de ahora buscar� la forma de follarte ella a ti.

Acordamos pasar la noche en las
ruinas del Convento por lo cual preparamos el campamento y ellas prepararon
la cena para los tres, mientras cen�bamos yo miraba descaradamente
a Sonia y ella se sonre�a, estaba desconocida cambi� de antip�tica
a jovial y dicharachera, hablaba por los codos y por cualquier tonter�a
se part�a de risa. Se levant� a buscar no s� qu�
y Elena se me acerc� y me dijo...

�C�mo te encuentras?
�Estas preparado para soportar otra funci�n? Nunca vi a Sonia
en el estado actual puedo asegurarte que esta salida.

No te preocupes, puedo sorprenderos
a ambas.

Lleg� Sonia y me dijo...

Oye Carlos �Podr�as
acompa�arme al r�o? Quer�a lavarme un poco y tengo
miedo yo sola.

Ning�n problema le dije.

Elena me gui�� un
ojo muy p�caramente y se sonri� maliciosamente, a m�
me dio la risa y segu� a Sonia. En cuanto llegamos al r�o,
Sonia muy parsimoniosamente comenz� a desnudarse (a pesar de ser
de noche la temperatura era tremendamente agradable, la t�pica noche
del mes de julio) cuando se qued� en bragas y sujetador yo alucinaba,
ella era bajita, pero su cuerpo ten�a unas curvas que mareaba s�lo
verlo. Era un cuerpo divino, totalmente proporcionado, sus tetas ni grandes
ni peque�as �Justitas! La cintura de avispa y el culo resping�n
dentro de unas caderas como la panza de un �nfora. Cuando se sac�
el sujetador y las braguitas alucin� de todo, los pezones los ten�a
totalmente erectos, preciosos, casi negros en el centro del redondel de
sus tetitas con el tama�o justito para mamar hasta el infinito y
su co�o un verdadero matorral de madreselva totalmente negro en
una proporci�n envidiable. Me acerqu�, la atraje hacia m�
y la bes� en sus labios ella me devolvi� el beso abri�
su boca e introdujo su lengua en la m�a, nos la chupamos mutuamente,
la recost� suavemente sobre la hierba de la orilla del r�o
y segu�amos bes�ndonos, mis manos acariciaban todo su cuerpo,
que gusto pasarlas sobre su culito resping�n, qu� gusto acariciar
sus caderas de �nfora, pero qu� gusto nos dio a ambos cuando
con mi boca cog� uno de sus pezones, mis manos paseaban todo su
cuerpo, acarici� dulcemente la parte interna de sus muslos (eran
de terciopelo) ella suspiraba y gem�a, cuando llegu� a su
chochito lo ten�a totalmente encharcado, ella se gir�, me
quit� el pantal�n y los calzoncillos y con su boca cogi�
mi polla, se la engull� de un bocado totalmente, al mismo tiempo
yo met� su rejita en mi boca, mi lengua trataba de introducirse
todo lo posible en su agujerito, chup� su cl�toris con devoci�n
y simult�neamente nos corrimos los dos, ella con sus muslos me apret�
la cabeza al punto que cre� ahogarme, al mismo tiempo ella se ahogaba
con mi semen. Dulcemente segu� acariciado su chochito y ella daba
peque�as lamidas a mi pene que segu�a igual de tieso (ese
era mi secreto, pod�a correrme tres o cuatro veces sin que el animalito
se bajase) entonces dio un salto se puso a cuatro y me dijo...

En el culo al igual que Elena.

No me hice de rogar se la enfil�
y de un golpe certero toda adentro, iniciamos un mete saca delicioso, cuando
estaba m�s calentita se la saqu� y con otro golpe certero
toda dentro de su chochito, entonces inici� un intercambio de agujeros,
un poco arriba, otro poco abajo, otra vez arriba y abajo hasta que ella
empez� a jadear y a soplar, entonces me grit�...

Por Dios c�rrete, c�rrete,
en mi culo ya �Te lo suplico!

Nos corrimos los dos simult�neamente,
los dos grit�bamos como condenados y ca�mos desmadejados.
El polvo con Elena hab�a sido formidable pero con Sonia fue superado
con creces.

Sonaron unos aplausos, era Elena...

En mi vida vi un polvazo semejante.

Quieres unirte a nosotros, dice
Sonia

Por qu� no, estoy m�s
caliente que una burra salida �Aguantaras un poco m�s Carlos?

No imagin�is hasta donde
yo puedo aguantar.

Total que pasamos los tres follando
toda la noche y no s� cu�ndo, me qued� dormido. Me
despert� por el calor del Sol era casi medio d�a y estaba
solo, en principio pens� si todo lo que hab�a pasado pudiera
haber sido un sue�o, m�s cuando cog� mi mochila de
uno de sus bolsillos sobresal�an dos billetes de 10.000 pesetas
cada uno y una notita que dec�a: Te estamos agradecid�simas
las dos y como los tres buscamos aventuras, alg�n d�a nos
encontraremos. Chao Carlitos. Muchos besitos de Elena y Sonia.

���Pues no fue
un sue�o!!!

Se pude decir que la primera etapa
de mi peregrinaci�n fue maravillosa �Qu� pasar�
en las siguientes?

ETAPA 2�: de Fr�mista
a Sahag�n.

Este recorrido es de 55 Km.: Pasa
por los pueblos de Carri�n de los Condes, San Zoilo, Lodigos y Sah�n.
Sal� de Fromista bastante temprano, solo pero muy contento, en principio
todo parec�a marchar bien, m�s dinerillo en la mochila y
el cuerpo m�s que satisfecho. A las 19 horas ya hab�a rebasado
el pueblo de Lodigos y me encontraba muy cansado, bajo un grupo de �rboles
me tumb� a descansar y me qued� dormido, de pronto me despert�
debido a que alguien me estaba zarandeando y me dec�a algo. Abr�
los ojos y vi a una se�ora de edad indefinida (parec�a mayor)
me dec�a que aquello era una propiedad privada y que all�
no pod�a estar, luego de explicarle que yo era un peregrino haciendo
el Camino de Santiago, buena persona y de profesi�n m�dico,
la se�ora pareci� meditar un rato y me pregunt� si
lo de medico podr�a demostr�rselo, yo no tuve inconveniente
alguno, le mostr� mis papales y la se�ora muy satisfecha
me pidi� la acompa�ase a su casa que estaba justo al otro
lado de los �rboles. Me dijo que era viuda desde hac�a 5
a�os y ten�a una hija de 17, la cual se encontraba un poquito
indispuesta y si le pod�a echar un vistazo ya que me encontraba
all�, por supuesto que no puse el menor inconveniente y adem�s
estar�a encantado de ayudarlas. La casa era de construcci�n
r�stica pero bastante moderna se notaba que quienes all�
viv�an no eran ricos pero tampoco tendr�an demasiados problemas
con el dinero.

Llegamos a casa y me condujo a la
habitaci�n de su hija la cual estaba en cama y parec�a dormida,
no hizo el m�s m�nimo movimiento.

�Qu� tiene su hija
se�ora?

Pues desde hace algunos d�as
se marea y tiene fuertes sofocos, tambi�n algunos v�mitos.

Sufri� alg�n desmayo.

Pues no.

Que car�cter tiene �Es
dulce? �Hura�a? �C�mo es ella normalmente?
(Esto me interesaba a m� especialmente)

Ella es una ni�a normal,
de car�cter alegre y muy bulliciosa.

�Tiene novio o sale con alg�n
chico?

Pues no, los hombres que hay por
estos alrededores son todos bastante mayores.

Bien, dej�mosla dormir y
ma�ana con calma la veremos �Le parece se�ora?

S� desde luego �Quiere
usted algo de cena?

Le estar�a tremendamente
agradecido, tengo un hambre feroz.

Bien cenar� usted conmigo
y luego le mostrar� la habitaci�n que podr� ocupar
hasta ma�ana �Le parece bien?

Muy bien se�ora. Mi nombre
es Carlos.

Ll�meme Adela.

Adela prepar� una cena ligera
pero muy buena y abundante, luego de cenar me mostr� una habitaci�n
que casualmente estaba situada 2 metros m�s adelante de la de ella
y en el lado contrario del pasillo, me acost� y dorm� como
un le�o hasta que ella me despert� sobre las 9,30 horas.
La habitaci�n ten�a un peque�o ba�o incorporado,
despu�s de asearme, me acerqu� hasta la cocina para saludarla
y desayunar.

Mi sorpresa fue may�scula
al ver a Laura, su hija, alta, tendr�a una estatura aproximada de
1,74 metros, muy morena con un pelo color caoba en una cara con unos ojos
intensamente azules, vest�a una camisa bastante ajustada donde resaltaban
altaneros unos pechos impresionantes apuntando hacia delante como dos obuses,
una cinturita estrecha y unas caderas y un culo cubiertos en ese momento
por un pantal�n vaquero ajustad�simo, que lo hac�a
resaltar de una forma impresionante, por la forma en que el pantal�n
marcaba las piernas estas tendr�an que ser como dos columnas griegas
pero lo que m�s me llam� la atenci�n era c�mo
el dichoso pantal�n se le introduc�a en su rajita, la verdad
es que tuve verdadera envidia del pantaloncito. Ella se dio cuenta del
examen al que en un momento la somet� y se sonre�a con cierta
malicia. Adela nos present� y cuando su mama le dijo que yo era
m�dico a ella le dio la risa y dijo que no pod�a ser, que
no hab�a m�dicos tan feos y peque�ajos, yo con mucha
sorna y muy serio le dije que los m�dicos feos y peque�ajos
se hab�an creado para las pacientes impertinentes. Por primera vez
vi una ligera sonrisa en el rostro de Adela. Por cierto que no describ�
a la Adela, como he dicho antes, parec�a una se�ora mayor,
pues bien, aparentaba unos 45 o 48 a�os (en realidad ten�a
37) por la forma de vestir y lo muy quemada del sol que tenia la cara,
aunque esta mostraba unas facciones muy agradables y sus ojos tambi�n
intensamente azules, de una estatura igual o superior a la de su hija (yo
al lado de ellas me sent�a un poco enano) su ropa no dec�a
nada en absoluto de su cuerpo, vest�a una camisa muy holgada y larga
sobre unas faldas tambi�n muy holgadas y largas casi hasta los pies,
todo el conjunto de color negro, en principio de ella no se podr�a
decir nada m�s.

Adela, luego de desayunar, me pidi�
que reconociese a su hija, ten�a que ir al pueblo y de paso podr�a
traer alguna medicina que pudiese necesitar. Nos fuimos a la salita y ped�
a Laura se recostara en el sof� que all� hab�a. En
mi mochila portaba lo imprescindible de cualquier m�dico un estetoscopio
y algunas cosas m�s. Me coloqu� el estetoscopio y proced�
a tomarle la tensi�n la cual estaba bastante alta, delante de su
madre le orden� se sacara la camisa para poder realizar una exploraci�n
superficial (verle las tetas pues no ten�a puesto el sujetador)
ella muy roja de verg�enza no se atrev�a, su madre la anim�
dici�ndole que yo no era m�s que el m�dico por lo
que no deber�a sentir verg�enza, ella se quit� la camisa
y yo tuve que hacer verdaderos esfuerzos y ejercicio mental para no descubrir
que desde hac�a mucho rato conoc�a la enfermedad de la ni�a,
�sta andaba m�s salida que una burra, delante de m�
quedaron dos tremendas tetas apunt�ndome con sus pezones totalmente
erectos. Delicadamente puse mi estetoscopio sobre el derecho luego sobre
el izquierdo y dando gracias a Dios porque, entre la dimensi�n de
mi polla y los pantalones que ten�a puestos no se notaba demasiado
que estaba a mil, no obstante me dio la sensaci�n de que Adela s�
lo not�. Le orden� darse la vuelta con la disculpa de explorar
su espalda, (m�s bien era para tratar de calmarme) Le pregunt�
en un punto determinado si le dol�a al presionar (yo sab�a
que al presionar en ese punto concretamente s� dol�a, produce
como un pinchazo) ella se retorci� de dolor lo cual preocup�
a su mama y me pregunt� si era grave a lo que contest� que
no, s�lo era un punto de fr�o que hab�a cogido, claro
dijo...

Adela estos d�as anda tan
ligerita de ropa que no me extra�a.

Le recet� una crema y unas
pastillas (que no ten�an contraindicaci�n de ning�n
tipo) dici�ndole que las pastillas eran para hacer bajar la tensi�n
y la crema para su espalda.

Adela muy satisfecha me dijo...

�Doctor tiene Ud. Prisa?
�Quiere quedarse con nosotras un par de d�as, si no le es
demasiado molesto? De esa forma podr� descansar un poco m�s
y ego�stamente me vigila a la ni�a.

Con una condici�n Adela que
dejes de tratarme de Ud. Y que la ni�a no se burle de m�.

Adela acepto encantada y la ni�a
parti�ndose de risa me dice...

Ah, doctorcito eres feote y peque�ajo
pero encantador y simp�tico, te prometo que me portar� bien
contigo y sin enterarse su madre, me gui�� un ojo pasando
la lengua por los labios, de una forma tremendamente sensual.

Adela se march� al pueblo
y nos quedamos solos Laurita y yo, ella me propuso dar un paseo por la
finca que pose�an, esta era enorme, en cuanto llegamos al grupo
de �rboles del d�a anterior ella se sent�, dijo para
descansar un rato, al sentarnos me dijo...

Si yo estuviese sola me quitar�a
el pantal�n, no sabes cu�nto me molesta.

Por m� te lo puedes quitar,
recuerda que soy m�dico y no me va importar en absoluto.

Pero ahora no me estas examinando.

Un m�dico lo hace siempre
(sobre todo yo, ya lo creo que s�)

Ella ni corta ni perezosa va y se
lo quita qued�ndose en braguitas aunque semi tapadas por la camisa.
Desde luego con sus piernas no me hab�a equivocado, las ten�a
preciosas y muy morenas me dijo que como normalmente no hab�a nadie
por los alrededores acostumbraba a pasear en bragas por el campo, ella
se recost� hacia atr�s y cerr� los ojos, yo sin pensarlo
y sin poder resistir la tentaci�n voy y le doy un ligero beso en
la comisura de sus labios, ella no reaccion� entonces la bes�
un poco m�s intensamente y ella dando un suspiro ech� sus
brazos a mi cuello, abri� la boca y por poco se come mi lengua por
el chup�n que en ella me propin�, nuestras lenguas se engancharon
entre ellas y mi mano derecha ya no sab�a a qui�n atender
si a sus tetas o a su co�o sobre las braguitas, le quit�
la camisa, cog� sus pezones con mi boca y alternativamente pasaba
de uno al otro sin transici�n, baj� con mi lengua por su
plano vientre y le saqu� las braguitas �Qu� co�o
m�s delicioso! Un monte de venus con un pelo negro y ensortijado,
muy fino, los labios vaginales gordezuelos y semi abiertos ya muy mojados,
pas� dulcemente mi lengua sobre ellos, ella, al sentirla dio un
respingo, levant� las piernas y con sus manos me cogi� por
los pelos de la cabeza y se puede decir que me la incrust� totalmente
en su co�o ardiente casi me deja sin respiraci�n, me solt�
un poco no sin esfuerzo y comenc� a pasar mi lengua dulcemente por
toda su rajita, ella mug�a de placer pero en cuanto cog�
su ardoroso y excitado cl�toris entonces fue la hecatombe, empez�
a dar rugidos y a correrse, pens� se morir�a de placer, qued�
medio desmayada y yo segu� acariciando con mucho mimo su chuchita,
ella abri� los ojos y me dijo...

Ven desn�date (yo estaba
todav�a vestido, no hab�a tenido tiempo de quitarme nada)
No me dio tiempo a desnudarme por m� mismo, se levant� como
una flecha y desesperada me rompi� la camisa, al pantal�n
poco le falt� me baj� el calzoncillo y de entrada la not�
un poco decepcionada (el tama�o claro, 13 cent�metros aunque
m�s bien gordito) pero de inmediato y sin pens�rselo se lo
trag� totalmente, yo estaba de pie y ella de rodillas delante de
m� estaba alucinado viendo a que velocidad mi pene entraba y sal�a
de su boca de vez en cuando paraba y daba unos lametones a mi glande que
me pon�a la piel de gallina, me entr� un escalofr�o
a lo largo de mi espalda y de improviso le largu� una descarga que
le lleg� directamente al est�mago, como era la primera vez
solt� mi polla a toda pastilla pero como las descargas continuaban
entre arcadas de ella y la risa que a m� me dio le puse la cara
perdida toda llena de chorretones no le qued� nada sin crema, la
frente, pelo, orejas, ojos, todo. Con mi camisa rota la limpi� cuidadosamente
llen�ndola al mismo tiempo de tiernos besitos fui con mi boca glotona
otra vez a su conejito y ella se fij� que mi pene segu�a
exactamente igual de empinado entonces me pidi� que se la metiera,
me puse sobre ella, coloqu� mi glande entre sus labios vaginales
e inici� la penetraci�n y ���Oh, sorpresa!!!
Me encontr� una especie de tope ���Era mi primer
virgo!!! ���No me lo pod�a creer!!! Me la qued�
mirando a los ojos, ella los cerr�, cruz� de repente sus
piernas sobre mi espalda dio una especie de relincho y de un empuj�n
de sus caderas se la incrust� de un golpe, se qued� quietecita
un rato y yo inici� un suave movimiento de mete y saca, al ratito
empez� a gemir, inici� un movimiento r�pido con sus
caderas, con sus pies apretaba mi culo de una forma tremenda yo casi no
pod�a moverme s�lo se mov�a ella en una especie de
rotaci�n de su cintura, mi polla no creci� m�s pero
creo que su di�metro aument� un par de cent�metros,
afloj� sus pies un poco y me pidi� que la bombease fuerte,
lo hice con desenfreno, los dos empezamos a gemir, ella lloraba de alegr�a
y gusto, volvi� a emitir el relincho y los dos nos corrimos, no
fue una corrida fue la apoteosis de todos los orgasmos, a pesar de haberme
corrido hac�a un rato llene su co�o de semen tanto que le
sal�a a borbotones fuera de su co�o, los dos quedamos desmadejados
el uno sobre el otro me retir� de ella y la limpi� con cuidado
todo el co�ito y los muslos la bes� por todos lados, ella
dec�a estar so�ando...

Cari�o esto no puede terminar
as� por unos d�as voy a estar malita y necesito que me cuides
�Lo har�s amor?

La ruta se puede hacer en uno, dos
o tres meses, no te preocupes, te cuidar� y lo har� con mucho
cari�o y esmero.

Nos vestimos a toda prisa pues su
madre estar�a a punto de regresar, por supuesto yo no pod�a
ponerme la camisa, llegamos a casa y Adela no hab�a regresado todav�a,
Laura lav� a toda prisa mi camisa y la puso a secar. Regres�
Adela y se fij� en el roto de mi camisa pregunt�ndole a Laura
que le hab�a pasado, le dijo que me hab�a enganchado en una
rama y al romperse aprovech� para lavarla y luego coserla, Adela
no dijo nada pero me di cuenta que en adelante no hac�a m�s
que mirarnos a ambos. Laurita se tom� una pastilla para la tensi�n
aunque seguro que a esas alturas la tendr�a normalita y su mama
le extendi� una generosa capa de crema por la espalda (que tampoco
le dol�a, pero ella se quejaba mucho).

Pas� el d�a sin novedad
y cuando me dispon�a a acostarme o� como algo raro, entreabr�
un poquito la puerta de mi habitaci�n y al mirar hacia la habitaci�n
de Adela me qued� paralizado, ella estaba en medio de su habitaci�n
totalmente en pelotas �Qu� cuerpo! Era descomunal, unas piernas
y un culo que s�lo verlo mareaba, la cintura sin ser de ninfa no
era exagerada y cuando m�s embebido estaba contemplando su culo
se gir� y a poco me muero de la impresi�n, su cuerpo visto
de frente era realmente impresionante. Los muslos los ten�a gorditos
y se ve�a que la piel estaba totalmente tersa, a la altura de su
co�o los muslos eran ligeramente peludos y la mata de pelo se notaba
que rodeaba toda su raja y ascend�a imparable formando su monte
de Venus que de monte ten�a muy poco pues era una verdadera selva
y luego un hilito de pelo llegaba a su ombligo, el vientre lo ten�a
ligeramente abombado muy poquito para y a continuaci�n llegar a
unas tetas que pod�an dar de cabezadas a un santo, erguidas, majestuosas,
grandes �Enormes! Con unos pezones casi negros, preciosos, los ten�a
erectos y eran como la falange de un dedo me�ique, tama�o
ideal para morir chupando de ellos. Me dio la impresi�n que estuvo
en esa posici�n el tiempo justo para que yo la contemplara a placer,
se gir�, cerr� la puerta de golpe y... hasta ma�ana.

A las 8,30 me despert� me
di una ducha y me dirig� a la cocina, al llegar escuch� como
Adela dec�a a su hija que era necesario ir a la ciudad de Burgos
para arreglar no s� qu� papeles, si se daba prisa a las 19,30
m�s o menos podr�a estar de vuelta en casa, ella desconsolada,
dec�a a su madre si no podr�a ser otro d�a, Adela
en un alarde de autoridad le orden� que era imperativo solucionar
ese problema que ten�an pendiente, Laurita resignada desayun�
y parti� hacia Burgos, en cuanto sali� Adela se dirigi�
hacia m�...

Carlos, tengo que realizar un trabajo
en el campo que para m� sola es un poco pesado �Tendr�as
t� inconveniente en echarme una mano?

Por supuesto que no Adela, yo estoy
totalmente a vuestra disposici�n, os est�is portando maravillosamente
bien conmigo y es lo m�nimo que debo hacer por vosotras.

Hacemos lo que debemos Carlitos,
pues el que s� esta portando bien y sin pedir nada a cambio ese
eres t�.

La mirada que me dirigi�
al pronunciar esas palabras eran para derretir a un santo, pero vest�a
como siempre y con un pa�uelo sobre la cabeza que la hac�a
parecer aun m�s vieja, no le di mayor importancia. Nos dirigimos
al campo y el trabajo a realizar yo no podr�a definirlo (de trabajos
campestres yo no conoc�a absolutamente nada) pero s� que
era muy pesado, como a las tres horas el calor era infernal yo sudaba a
mares pero ella segu�a, de pronto se par� y me dijo...

Ay Carlos me encuentro muy mal,
me estoy mareando, creo que voy a desmayar.

Se cay� al suelo al igual
que un saco de patatas, me fui hacia ella corriendo y en efecto estaba
bastante p�lida y sin conocimiento, la cog� bajo sus brazos
y la fui arrastrando hasta unos �rboles cercanos y frondosos que
produc�an una muy buena sombra, la estir� sobre la fresca
hierba y comprob� su pulso me llam� la atenci�n el
que el ritmo card�aco era excelente, sin pensarlo y como m�dico
solt� los botones superiores de su blusa para auscultarle directamente
sobre el coraz�n y su ritmo cardiaco segu�a siendo excelente,
en todo caso su respiraci�n un poquito m�s agitada, de pronto
me di cuenta que sus espl�ndidas tetas estaban al descubierto y
sus m�s que espl�ndidos pezones me apuntaban directamente
hacia mi boca mir� su cara y segu�a inconsciente y a mi cabeza
llegaron las im�genes de la noche anterior, de repente la vi toda
desnuda, mi polla empez� a crecer y sin poder remediarlo comenc�
a tirar suavemente de su falda hacia arriba, seg�n ve�a sus
piernas blanquitas y torneadas mi cabeza echaba humo segu� subiendo
su falda sus muslos eran divinos �Qui�n lo dir�a?
Pas� suavemente mis manos sobre ellos, tersos, la piel muy fina,
un poquito velludos �Eso s�! Pero muy agradables al tacto...
���La apoteosis!!! ���No s�
hab�a puesto bragas!!! ��Qu� co�o!!! Aquello
era el Olimpo de los dioses, todo peludo, todo rizadito sus labios vaginales
abultados y semi tapados por su espl�ndida cabellera. Qued�
absorto mirando su espl�ndido co�o y de repente me sobresalt�
cuando ella me dice...

�Es que no vas hacer nada
m�s?

Me inclin� sobre �l...
parsimoniosamente separ� los pelos de su rajita, con dos dedos separ�
sus labios vaginales y a continuaci�n introduje de golpe mi lengua
en el interior de su agujero todo lo que pude, ella dio un respingo, elev�
sus piernas sobre mi espalda y cre� que meter�a toda mi cabeza
en su vagina, afortunadamente sab�a lo que se hac�a su presi�n
era la justa pas� mi lengua suavemente por toda la rajita, su cl�toris
era poco desarrollado y lo ten�a dur�simo, era como una bola,
comenc� a darle de lametones, ella se retorc�a al igual que
una lagarta, mis manos amasaban sus tetas y mis dedos oprim�an dulcemente
sus pezones. En un momento ella se solt� y d�ndome un gran
beso empez� a desnudarme y al igual que su hija en cuanto lleg�
a mi picha se qued� un poco parada �Por qu� todas
piensan que las grandes son las mejores? Pasado el momento abri�
la boca y se la engull� totalmente, sub�a y bajaba su cabeza
a una velocidad desenfrenada, con sus dedos amasaba suavemente mis cojones
y yo me ve�a venir, pasados unos segundos sin poder soportar m�s
empec� a correrme, al igual que su hija para ella tambi�n
era la primera vez y empezaron a darle arcadas (cre� que vomitar�a)
mi picha segu�a largando semen y le puse la cara perdida, ella se
repuso y al final el sabor pareci� gustarle pues empez� a
relamerse los labios, no obstante me insult� por no haberla avisado,
yo cari�osamente empec� a limpiarle la cara mientras la llenaba
de besos pero la notaba como un poco decepcionada, en eso ella se fij�
en mi picha y vio maravillada que segu�a igual de dura que antes,
la toc� con su mano como para comprobar que era cierto, se recort�
hacia atr�s y exclam�...

Cari�o, m�teme eso
que tienes, aunque no es muy grande seguro que me va a satisfacer.

Seguro que s� querida, estoy
seguro que incluso ni te acordar�s de su tama�o.

Me coloqu� sobre ella y en
el primer empoll�n se la trag� totalmente ( y m�s
que hubiera) ella cruz� sus piernas sobre m� espalda (qu�
agilidad ten�a) pero yo me qued� quietecito esperando acontecimientos,
ella un poco desconcertada comenz� a girar suavemente sus caderas
pero simult�neamente sus m�sculos vaginales que estaban muy
distendidos por la excitaci�n comenzaron a acariciar mi pene, empez�
aquello a ser como un guante, sus m�sculos se acoplaron perfectamente
a mi pene y entonces yo comenc� una follada que siempre digo �La
mejor de mi vida! �l mete y saca era muy acompasado yo abajo, ella
arriba y as� durante mucho rato los dos est�bamos disfrutando
al cien por cien, a m� porque me gustaba, ella hac�a 5 a�os
que lo a�oraba, en un momento dado ella comenz� a acelerar
sus movimientos, la presi�n de sus piernas sobre mi culo era convulsiva,
aceler� �l mete saca y por mi espina dorsal corr�a
un verdadero hormiguero, de repente ambos y al un�sono...

��QU� CORRIDA!!
Con mi semen y los flujos de ella pod�amos regar el campo. �AH!
Pero mi polla segu�a igual de dura, el culo de ella lo ten�a
grabado en mi retina desde el d�a anterior, gentilmente, bes�ndola
y haci�ndole caranto�as le di la vuelta la coloqu�
a cuatro patas y venga adentro, como quien no quiere la cosa (son las ventajas
de una polla peque�a) se la met� en todo el culo ella peg�
un respingo de campeonato pues era la primera vez que por ese agujero se
la met�an, no obstante le cogi� el gustirrin�n r�pidamente,
acompas� sus movimientos a los m�os, mis manos acariciaban
sus tetas y su co�o y todo lo que pod�an pues no daban hecho,
mi picha entraba y sal�a a toda velocidad, ella comenz� a
hacer contracciones y a convulsionarse y... �La gloria bendita! Para
qu� contarles... M�s tarde ella se abraz� a m�
y me dijo...

Carlos, por favor dime con sinceridad
�Te gust� follarme? �No me viste vieja?

Pero �qu� dices Adela?
Mira... eres preciosa y tienes un cuerpo divino.

Entonces... �Qui�n
te gust� mas, yo o mi hija?

Me qued� de piedra... �C�mo
sab�a ella que me hab�a follado a Laura? Entonces ella dijo...

Mira Carlitos ayer por las prisas
Laurita lav� mal tu camisa y en ella vi las manchas de tu semen,
despu�s de 5 a�os sin hacer el amor yo estaba desesperada
y la calentura que me entr� fue enorme, tanto que tuve que urdir
esta treta para poder satisfacerme y es incre�ble pero con tu polla
medianilla realmente haces maravillas �C�mo te apa�as
para tenerla siempre tiesa?

Compensaci�n de la naturaleza,
pienso yo...

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