Hola, soy una chica de 23 a�os, hace un a�o en mi cumplea�os
mi novio me regalo una perrita Frensh Poodle, y me dijo, ella ser� tu compa�era
quien te cuidara y te har� feliz (si el supiera la felicidad que me da, se
encelar�a)

Pues ya que tenia yo a "PEKIS" as� se llama mi perrita, un
d�a mi mama preparo un pastel, y yo como una chiquilla agarre del merengue y
com� mi dedo lleno de merengue, PEKIS me ve�a comer y le di a comer a ella
tambi�n, al sentir su lengua en mi dedo lami�ndolo sabrosamente, me imagine la
lengua de mi novio en nuestros juegos er�ticos, sent� un escalofri� de placer.

Segu� haciendo mis cosas y olvide el detalle del la
sensaci�n, pues ya entrada la noche, no tenia nada de sue�o, PEKIS como es mi
mascota duerme conmigo en mi cuarto, me puse a jugar con ella, la hacia como
quer�a y ella se dejaba, y cuando ya no la jugaba yo ella quer�a seguir jugando,
a lo que ya con mi cansancio solo le pasaba mi mano por su hocico apret�ndoselo
y al solt�rselo ella me lam�a mis dedos.

Vino a mi como un chispazo, volv� a sentir excitaci�n.

No pod�a creerlo, tenia ya en mente cosas sucias con mi
PEKIS.

Lo pens� en repetidas ocasiones y me dec�a yo a mi
misma,"ANIMATE, SERA ALGO QUE ELLA NO REVELARA"

Pues qu� me animo y salt� de la cama, y bajo a la cocina y mi
PEKIS sigui�ndome fielmente, corte un trozo de pastel y lo sub�a a mi recamara,
y PEKIS sigui�ndome.

Tome merengue y lo lam�, y PEKIS esperando y contemplando
cada movimiento m�o.

Le doy mi dedo a PEKIS ya con muy poco merengue y ella lo
lame como desesperada.

Vuelvo a tomar yo mas merengue y ella sigue lamiendo.

Me dije: ES EL MOMENTO... "PEKIS NO DIRA NADA A NADIE"

Deje pastel al lado de mi cama y PEKIS solo mirando.

Desnude mi cuerpo con desesperaci�n maquinando lo que quer�a
vivir.

Al quitarme mi diminuta tanga ya h�meda por mi imaginaci�n y
mis planes, se la doy a oler a PEKIS, ella la olfatea y acomodo mi tanga entre
su hocico, como si quisiera que ella lo tragara, PEKIS solo me ve�a como
asombrada inclinando su rostro as�a un costado.

En eso ya no aguantando mas yo mi excitaci�n y mi deseo tomo
merengue y le lo meto en el hocico a PEKIS ella feliz lo lame, ya no fui de
ofrecerlo, sino que ahora te lo comes PEKIS, mi mascota feliz.

Tomando mas merengue lo embarro sobre toda mi vagina muy
mojada y de inmediato PEKIS lo lame, mientras mas com�a mas lam�a, creo que mi
perrita no se dio cuenta que yo ya no tenia merengue y que lo que ella segu�a
lamiendo era la miel de mi cuerpo.

Era ya tanta mi excitaci�n y cachondeo que decid� poner mas
merengue, pero ahora en mi culo, mismo merengue que lami� mi perrita con mas
rapidez, al mismo tiempo que sent�a como ol�a ella mi culo y lo lam�a una y otra
vez, as� terminamos el merengue por todas las partes de mi cuerpo, mis nalgas,
mi culo, mis pezones, mi vagina, y por ultimo en mi lengua sintiendo la lengua
de ella, que me volvi� a excitar.

No pod�a frenar mi calentura que saque mi consolador mientras
mi perrita segu�a lami�ndome por donde ella pod�a llegar a mi sexo con su
leng�ita rica.

Las mascotas no cuentan sus secretos, hazte INTIMO(A)
AMIGO(A) DE UNA MASCOTA FIEL