Esto me sucedi� hace dos a�os, en los m�s intensos calores de
mi adolescencia.

Para iniciar mi relato de lo sucedido hace un a�o atr�s, y
debo remitirme a los primeros acontecimientos: todo comenz� con mi pubertad, yo
como todas las j�venes de mi edad empezaba, a explorar mi cuerpo y a descubrir
el sexo, �l tocarme por las noches o en el ba�o, poco a poco se convirti� en
algo habitual. Todo era nuevo y cada vez las cosquillas eran m�s intensas.

Me acuerdo que una vez mientras me tocaba en la soledad de mi
dormitorio not� que mi vagina se humedec�a cada vez m�s y mientras lo hacia la
sensaci�n de placer se agudiz�, mi temperatura se elevo al punto de que cre�a
tener fiebre, y lo peor es que no pod�a parar, hasta que en un momento sent� la
sensaci�n m�s hermosa que hab�a sentido en la vida, estaba teniendo un orgasmo,
los m�sculos de mi vagina se contra�an acompasadamente, como pidiendo que
siguiera. Fue una alegr�a tremenda para m�, y desde ese d�a no deje de
masturbarme.

Soy hija �nica, por lo tanto mis padres me sobreproteg�an, me
enviaban a un instituto privado para pupilas, en el que me las pasaba de las
8:00 de la ma�ana hasta las 16:00 hs. en donde practicaba danzas cl�sicas y
nataci�n.

A mis 16 a�os no hab�a tenido ni siquiera un novio, ya que
iba del colegio a la casa y de la casa al colegio, en un minib�s del la misma
instituci�n. Por las tardes quedaba sola en casa hasta las 20:00 hs. que
regresan mis padres del trabajo, ellos se quedan tranquilos porque frente a mi
casa ten�amos una garita (esas de chapa) donde estaba el guardia de seguridad
del barrio que era un viejo bot�n, que le contaba a mis padres hasta que ruidos
hac�a en la casa; el �nico acceso que hab�a pasaba por el frente de la cabina;
era un terreno inmenso, todo parquizado al que lo rodeaba un muro de 3 metros de
alto, con alambres de p�as, alarma infrarroja y dem�s.

Ese lunes a la tarde llegu� como siempre a las 16:15 hs., al
entrar tir� mis �tiles en el sof� y me dirig� a la cocina a prepararme la
merienda, y mientras com�a unas galletitas, pero al ingresar en la cocina
escuche ruidos en la parte de atr�s de la casa; sal� a mirar y no ve�a nada as�
que llame a "Capit�n" nuestro perro, pero no ven�a, cuando llegu� a unos
arbustos florales un shock visual me refresc� la memoria, vi a Capit�n copulando
con la Diana, entonces record� que el d�a anterior mi t�o trajo a Diana su perra
que estaba en celo para cruzarla con Capit�n, �l es un Gran Dan�s al igual que
ella, de buen pedigr�; a mi me impact� much�simo la escena, que a�n hoy la tengo
n�tida en mi memoria, Capit�n arremet�a con ganas mientras ella se quejaba, yo
me estaba humedeciendo toda como cuando me tocaba en la noche, mi curiosidad me
hizo acercarme m�s, ya que era la primera vez que ve�a una escena semejante;
jam�s se me pas� por la mente la imagen de mi perro como un animal macho que
necesita realizarse, as� que no lo dud�, me deje llevar por mi calentura como
muchas veces que por las tardes me masturbaba en la soledad de mi casa.

Ah� no mas levant� mi pollera escocesa del uniforme y met� mi
mano debajo de mi tanguita que estaba mojad�sima para este entonces, me comenc�
a masturbar sentada en el piso con un libidinoso espect�culo en vivo y en
directo, deslic� la tanguita hacia un costado dejando al aire mi dorados y
diminuto pelaje que resaltaban en la parte superior de mis rozados labios
humedecidos.

Baj� con mi mano hasta encontrar mi vulva, la que acarici�
exteriormente para luego detenerme en mi botoncito del placer y frotarlo con las
yemas de mis dedos, hasta el hartazgo; con la mano izquierda pellizcaba mi
pezones, erectos por la masturbada que me estaba pegando, tuve dos orgasmos
espl�ndidos; ve�a como Capit�n se agitaba cada vez m�s, los dos sacaban la
lengua a metros, en un momento �l comenz� a pegar como peque�os aullidos y hacia
fuerza como queriendo adentrarse m�s, la perra aullaba por el dolor creer�a, y
de repente Capit�n levant� una pata trasera y cruz�ndola por encima, qued� cola
con cola con Diana; las dos bestias estaban excitad�simos; me acerque y vi como
estaban unidos por un tubo color rojo sangre, evidentemente era el pene de
Capit�n, a los pocos minutos Capit�n empez� hacer fuerza para adelante y ante
cada intento la perra aullaba, as� estuvieron por un instante, hasta que en un
momento la perra tambi�n comenz� a tironear y luego de veinte minutos se
despegaron, otra vez me asust� al ver su falo colgar de sus piernas, era
much�simo m�s largo de lo que se ve�a habitualmente, y en el medio ten�a como
una bola como si fuera una mandarina formando un ocho, �l se lami� el pene hasta
que se escondi� en su funda, mientras a Diana le chorreaba un liquido blancuzco
de la concha, yo no tarde en tener otro orgasmo.

Luego exhausta me fui a ba�ar ya que estaba toda mojada de
mis jugos. Por la noche en la suavidad de mis s�banas, el calor se apoder� de mi
interior, la escena daba vueltas en mi cabeza, la excitaci�n me desvelaba, era
una hoguera, me tuve que masturbar dos veces para poder dormirme.

Al tarde siguiente esperaba ansiosa que el minib�s llegara
hasta mi casa, por nada en el mundo me perder�a de ver la uni�n de esas bestias.
Al entrar me dirig� directamente al fondo de la casa; ellos estaban echados, yo
me acerqu� a Capit�n, el se levant� moviendo su peque�o rabo (lo tiene cortado)
y yo lo gui� hasta la perra lo ayud� a trepar, pero �l se bajaba pero al cavo de
varios intentos, �l entendi� el mensaje y comenz� a embestir contra la perra,
con la mala suerte de no embocar el orificio, yo lo solt� para masturbarme, la
imagen de Capit�n todo blanco lleno de manchas negras y Diana completamente
negra, dos gigantescas bestias en celo total, y yo como en la primera fila de un
cine Monumental.

Luego de mi primer orgasmo y al ver que no lo lograba hacer
diana (valga la redundancia), con un poco de asco que le ten�a hasta ese
entonces, y en un momento de locura, tom� su pene con mi mano para guiarlo a su
destino final; la sensaci�n al tenerlo, temblaba de la emoci�n, se sent�a
h�medo, caliente y muy duro, cuando la ubiqu� en el orificio ansiado de un solo
empuj�n se la perdi� en el interior de la perra, la que comenz� a pegar unos
aullidos de dolor, y empezaron su frega, yo me ol� la mano, al sentir el olor a
del sexo del animal, arremet� contra mi conchita durante todo el tiempo que dur�
el acto sexual de los animales; luego me fui a ba�ar.

Por la noche en mi cuarto me masturb� pero lo mismo no pod�a
dormirme, as� que en silencio de la noche me anim� a salir, salt� mi ventana
hasta llegar donde se encontraban los dos; all� otra vez lo sub� a Capit�n
encima de Diana y se repet�a todo pero esta vez la perra no quer�a y se corr�a,
pero yo segu�a insistiendo hasta que en una de las escapadas de la perra Capit�n
sigui� movi�ndose en mi mano, ya que yo le sujetaba su pene, el estaba cogiendo
mi suave mano, a mi me excit� mucho as� que segu� haci�ndolo, lo que luego me
enter� que era una paja; yo me sent� al lado de �l para poder tocarme con la
otra mano, su falo comenz� a crecer y mientras yo ten�a un orgasmo espectacular,
�l se empez� a mover como desquiciado al punto de que apenas pod�a sujetar su
bestial miembro, cuando sin darme cuenta ten�a ubicado su miembro en mi
direcci�n, �l lanz� un chorro de semen que impact� en mi rostro entrando parte
del mismo en mi boca, yo solo atin� a cerrar los ojos cuando un segundo chorro
me volvi� a impactar yo escup� el l�quido, pero algo me qued� en la boca, al
tragarlo me di cuenta de lo que hacia y como no ten�a un sabor desagradable, me
excit� a�n m�s , as� que el resto que chorreaba en mi rostro lo trague
intencionalmente mientras llegaba mi segundo orgasmo.

Luego satisfecha fui a dormir, pero con mis manitos en la
vulva. Recuerdo que esa noche so�� que capit�n me hablaba, me dec�a que �l solo
lo hac�a con Diana porque mi padre se lo pidi� pero si yo quer�a pod�a ser su
perrita, me despert� asustada, su vos era como la de una peli de terror que
hab�a visto en esos d�as.

Ese mi�rcoles por la tarde parec�a matem�tico lleg� la hora
de salir del colegio y yo ya me empec� a turbar, al llegar a casa, ya con mas
cancha me fui a mi cuarto a cambiarme porque el d�a anterior se me ensuci� la
ropa del cole por no sac�rmela, una vez cambiada, ya con lo que ser�a mi ropa de
fajina en adelante (minifalda de lona verde, remera vieja y n�uticas) sin ropa
interior para facilitar el trabajo, me dirig� hasta donde estaban Diana y
Capit�n, ellos salieron a recibirme y yo me sent� al costado de Capit�n a
masturbarlo porque quer�a que me acabara en la boca como el d�a anterior, luego
de unos minutos su verga se agrand� tanto que cre� que se correr�a as� que
acerqu� mi boca a la punta de su miembro mientras segu�a masturb�ndolo, cuando
sus movimientos se tornaron m�s fren�ticos y yo al ubicar mi boca abierta tan
cerca de su miembro, en un envi�n se adentr� en mi boca, yo en mi ardor la
comenc� a chupar, luego la fu� metiendo de a poco m�s adentro en mi boca; sin
pensarlo la empec� a mamar como una cachorrita hambrienta, fue incre�ble como
goc� haci�ndolo, nunca imagin� que se gozara al practicarlo, a los pocos minutos
se vino un r�o de esperma en mi boca y pese a que lo quer�a tragar todo, los
movimientos de Capit�n hac�a que cada chorro que lanzaba su pija llegaba a mi
garganta y lo tragaba directamente.

Luego de descansar por un rato, yo segu� lamiendo el pene del
perro, hasta que se escondi�, pero luego de un rato el se repuso y volvi� a
sacarla del forro, yo lo ubique encima de la perra y el solo por instinto
penetro a Diana, luego de una brutal paja me fui a ducharme. Por la noche llovi�
as� que no pude salir pero mientras pensaba en las travesuras que hab�a hecho,
me hice tres pajas, me excitaba el hecho de toc�rsela, como que era la cosa que
m�s deseaba, el gusto indefinido de su esperma entre picante, �cido y dulz�n,
as� qued� exhausta dormida.

El jueves por la ma�ana mis ojeras parec�an las de una
drogadicta, ten�a sue�o, durante las clases pero, llegar a mi casa era lo mejor
de la vida, esta vez continuando con mis descubrimientos y progreso me dirig�
directamente al falo, el que me puse a mamarlo a Capit�n, el loco de alegr�a me
suministr� leche reci�n orde�ada, la que tragu� toda, mientras me repon�a se
acerc� Diana metiendo la cabeza por debajo de mi minifalda, olfateo mi sexo,
luego en un acto seguido su lengua se apoder� de mi sexo, no pod�a creer el
placer que me provocaba, me hizo ver las estrellas, ella me estaba haciendo
acabar una y otra vez mientras yo no soltaba la pija de Capit�n as� estuvimos
hasta que luego de mas de una hora de sexo oral los tres quedamos echados en el
verde c�sped ingles.

Esa noche al escapar por la ventana tuvimos sexo oral por
casi media hora, pero esta ocasi�n quise que la penetrara cosa que se me
dificult� ya que ella se zafaba, y en uno de los intentos cre� que no le entraba
la pija, para confirmarlo met� un dedo en la concha de la perra que estaba muy
hinchada, ella caliente como estaba lo acogi� con placer movi�ndose
r�tmicamente, yo solt� a Capit�n y me dediqu� a provocarle placer a ella,
primero uno luego dos y por �ltimo un tercer dedo entr� en su concha, yo sin
interrupci�n segu�a masturb�ndome ella se comenz� a mojar como yo y me dio
curiosidad el sabor de sus jugos as� que le met� la lengua en su concha lo mas
que pude, luego descubr� su cl�toris y mientras jugaba con el ella acab�, su
olor era �cido y muy fuerte, tanto que me dio asco, as� que me fui a lavar al
quincho y luego me fui a dormir, eran ya las 3:00 de la ma�ana.

Por fin viernes dije, al llegar del cole tendr�a todo el fin
de semana pero al entrara a mi casa recib� un llamado de mi pap� que quer�a que
lo ayudase con unos papeles en el negocio, as� que tuve que salir. Por la noche
solo tuve �nimo para que me chupara la conchita Diana y chap�rsela a Capit�n.
Dej� para el otro d�a lo dem�s.

Por la ma�ana me despert� tarde, mi mam� se hab�a quedado en
casa as� que se posterg� mi plan, todo el d�a nos pasamos arreglando la casa
junto con la empleada que trabaja de ma�ana en mi casa, a la noche mi pap� en
forma de pago por el trabajo que le ayud� hacer me llev� junto a mi mam� a cenar
afuera, luego dimos unas vueltas, y como a las 5:00 de la ma�ana regresamos,
otra vez ser� pens�, pero sin evitar masturbarme esa madrugada ya que no pod�a
salir al patio porque era de d�a y la ventana de mi pap� da al patio.

Luego del almuerzo lleg� mi t�o, ven�a a buscar a Diana, a mi
me produjo un baj�n tremendo, se me llenaron de lagrimas los ojos. A la noche me
escap� estaba re-caliente de llegada se la mam� pero antes de que el llegara a
eyectar su liquido seminal, escuch� un ruido en la cocina as� que lo solt� y
qued� expectante en cuatro patas cuando el me mont� yo sent� que me mor�a
hinc�ndome con su falo en las nalgas, en ese momento pens� en lo mucho que
deseaba ser yo la perra a qui�n el penetrara, pese al tama�o de su pene y de mi
virginidad me acomod� mejor y bajando el pijama deje mi conchita al aire, lo
deseaba dentro m�o, mi sexo lat�a y yo me estremec�a, cuando su pene gigantesco
embest�a sin suerte alejado de la entrada a mi vagina, yo retroced� y tome su
falo para guiarlo cuando el terror se apoder� de mi, se encendi� la luz del
patio, yo pegu� un salto y mientras me levantaba el pijama corr� a mi
habitaci�n. Con el susto mire el reloj eran ya las 6:de la ma�ana el horario en
que se levantan mis padres.

En el cole no dejaba de pensar en Capit�n, en que me esperaba
a mi regreso, esto me excito tanto que en la hora siguiente me sent� en el
�ltimo banco del aula aludiendo dolores de estomago, y mientras el profesor
explicaba trigonometr�a yo sin desenfado met� la mano debajo del banco para
tocarme pensando en que iba ser penetrada por un cojudo animal, en vez de
cualquier joven muchacho que se morir�a por hacerlo, que al ver mis dorados
cabellos y mi piel bronceada con el contaste de los ojos celestes y mi cuerpo de
adolescente de 1,70 m. y figura de bailarina cl�sica, no lo podr�a creer. Tuve
un maravilloso orgasmo en clase, hasta me di el lujo de gemir ya que todos
pensaba que era de dolor.

Por fin en el minib�s; a mi me agarr� como un p�nico esc�nico
temblaba toda, la temperatura corporal hab�a subido al punto de fiebre, estaba
como cuando una se engripa con escalofr�os imaginando la gran pija de Capit�n
penetr�ndome, hasta hacer tope en esa bola de carne, cuando por fin llegamos a
mi casa, al entrar fui a mi dormitorio y me desnud� completamente, poni�ndome
solo una salida de ba�o, luego sal� al patio y lo vi a Capit�n que me mov�a la
cola, como sabiendo que me entregar�a a �l en un atroz acto zoof�lico, una
jovencita de 16 a�os que dejar�a su virginidad preciada en manos de un animal
que solo conoce el instinto salvaje.

Sal� al patio trasero hasta donde estaba �l tirado en el
c�sped, me agache y empec� a mamarcela cuando la tuvo toda afuera, y comenzaba
los movimientos coitales, me saque la salida de ba�o y me ubiqu� en cuatro
patas, Capit�n de un salto se me trep�, el mundo no existia para mi, era todo
excitaci�n, miedo, ansias, desesperaci�n. Yo temblaba como un papel, mis
movimientos eran torpes por la gran excitaci�n, no har�a falta lubricantes ya
que mi conchita era un una fuente de donde flu�an mis jugos, cuando el en una
sola estocada se perdi� m�s de la mitad de su pene en mi estrecha conchita, el
cielo y el infierno se mezclaron en un desgarrador grito de amor y despecho:
AAAAAAAAAHHHHHHHHHHHGGGGGG... AAAAAHHHHH....AAH...AAH...AHH...AHHH...AHH..
AAAAAAAHHHGG... AYHH DESPAAAHHHHGGG... CITOOOOHHGGG... AHHH... Papito
dessssshhhh� .

Mientras se me aflojaban los brazos, el sigui� metiendo en
cada estocada, m�s adentro su enorme pene, lleg� un momento en que arrodillada
con la cola hacia arriba y con mi rostro pegado al piso, quedando unida solo por
su falo, como empalado de la edad media, estaba entregada a la maquina de coger,
que entrando y saliendo tan r�pido, sent�a como me desgarraba la vagina, el
dolor era intenso, pero me gustaba tanto eso, que por nada del mundo no quer�a
que se detuviera, ante cada embestida, me hac�a fondo en mi interior.

Los suspiros se me escapaban: UUHH... UUUHH... UGGSS...
UUUHH... Mis jugos brotaban, el sudor de mi cuerpo hacia que se pegasen los
pelos de su cuerpo por el m�o, pero que acariciaban mis suaves nalgas ante su
salvaje follada, un orgasmo tras otro me cortaban la respiraci�n, pero luego de
qui�n sabe cuanto tiempo, mientras su pija tomaba un tama�o descomunal, yo me
derret�a en un tercer orgasmo que me sacudi� todo el cuerpo, su pene lat�a en mi
conchita que en ese momento se estir� como nunca lo hab�a hecho, la piel en mi
interior parec�a partirse, �l no tard� en llenarme de su semen que parec�a
hervir en mi interior, luego Capit�n cruz� una pierna por encima m�o quedando
cola con cola y unidos por su gigantesca tranca; yo quietecita en el piso
deslic� una mano hasta mi cosita y me di cuenta lo sucedido, me hab�a quedado
abotonada por Capit�n, quise salirme pero un dolor intenso me hizo notar que su
bulbo estaba dentro m�o y que no saldr�a, me qued� muy quietecita pero en los
peque�os movimientos que el hac�a me llevaron a buscar mi cl�toris para comenzar
a masturbarme imaginando como me entr� semejante perno en mi conchita, una serie
de dos orgasmos m�s me quitaron el poco aire que me quedaba, hasta que en un
momento el pene se achic�, y Capit�n tir� hacia delante sali�ndose de m�, hizo
un ruido como si destapara una ca�er�a floooacccc y una cantidad de semen sali�
de mi interior mezclado de sangre, que chorre� hasta el piso, la conchita me
lat�a y el dolor se hac�a sentir, Capit�n mientras tanto se limpiaba la verga,
yo lo miraba no pudiendo creer lo que me hab�a introducido, me levant� y me
dirig� hasta el ba�o, llen� la ba�era con agua tibia y me zambull�; All� me
sangr� un poco m�s el interior de mi vagina, pero luego de unos minutos qued�
dormida como en un cuento de hadas.

Esa noche me dol�a tanto que no me anim� a salir por la
ventana, pero al d�a siguiente no lo pude evitar volver a copular como una
perrita. Todos los d�as de ese entonces lo sigo haciendo, qued�ndome como mal
recuerdo �nicamente, cuando lo intent� hacer por la cola.

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