Fui acercando mi pene al orificio vaginal y cuando estaba
para entrar me dijo ah� es, m�telo, me empec� a dejar caer encima poco a poco y
cuando su agujerito empez� a abrirse con mi pene, comenz� a gritar que le dol�a,
pero que siguiera y lo metiera todo, teniendo la cabecita del pene adentro y
ella sintiendo menos dolor, empuj� con fuerza mi cadera para penetrarla, sent�
como topaba con algo y lo quit� del camino al penetrarla, de inmediato me abraz�
fuerte, al mismo tiempo que grit� cerca de mi o�do con m�s fuerza que la �ltima
vez y brotando de sus ojos unas l�grimas; permanec� inm�vil al igual que ella al
ver que estaba llorando, creyendo que le hab�a arrancado el himen, llor� un poco
sin moverse y me dijo sollozando, me duele mucho, te levantas despacio para que
no me lastimes, me levant� poquito a la vez que mi pene iba saliendo, cuando
sali� tenia sangre; ella baj� las piernas separadas hasta tenerlas estiradas en
la cama, segu�a llorando, con su ropa le cubr� sus tetas y panochita, yo me puse
el pantal�n

Sentado a un lado de ella le limpiaba sus l�grimas, le
acariciaba su cabeza y me acercaba a besarla en sus labios, mejillas y frente,
le tom� su mano y as� estuvimos hasta que le pas� un poco el dolor, ya tranquila
la ayud� a levantarse, se puso de pie, tom� papel y se limpi� su panochita, me
ense�� y tenia sangre, me dijo ahora s� me sangraste, me desfloraste, me sonri�
cuando me dijo ya no soy virgen, te entregu� mi virginidad, que suerte tienes,
no pens� que contigo iba a dejar ser se�orita

Tom� su tanguita y le ayud� a coloc�rsela, hizo con el papel
un colchoncito, lo puso en la tanguita cubriendo su panochita; nos sentamos en
la cama tom�ndonos de las manos, se qued� pensativa y me dijo se me v� que
llor�, le dije poquito, se levant� se mir� al espejo y dijo voy a tener que irme
porque se va dar cuenta tu mam� y la m�a, me duele mucho cuando camino, lo hacia
separando un poco las piernas; como pudo fue a donde mi mam� y se despidi�, a
solas me dijo te espero en mi casa ma�ana en la tarde, no dejes de ir; me bes�
en la boca y la acompa�� hasta la esquina de la cuadra, caminaba un poco
despacio, cruz� la calle y la perd� de vista, me regres� a la casa y en el ba�o
con agua y jab�n me lav� mis genitales y la trusa por la sangre que tenia

Las horas pasaron pensando en mi t�a, en sus tetitas y lo
bonito que sent� al hacerle el amor y penetrarla aunque no disfrutamos como
otras veces. En la tarde del d�a siguiente le dije a mi mam� que iba con mi
abuelita; llegu� a la casa de mi t�a y su mam� no estaba, me lo dijo en cuanto
llegu�, andaba en bata, nos pasamos a la rec�mara de ella y al cerrar la puerta
se quit� la bata quedando desnuda, pronto se me par� el pene y me dijo qu�tate
la ropa, ella se acost� en la cama boca arriba con las piernas separadas;
desnudo me sub� y sin que ella dijera nada empec� a excitarla como le gusta,
bes� sus labios y con las manos acariciaba sus tetitas y panochita, baj� besando
su cuello, tetas y chupando sus pezones con mordiditas por un buen rato, baj� a
su vientre y le daba mordiditas que la excitaban y erizaban su piel; llegu� a su
conchita bes�ndola, mis manos acariciaban su cadera y piernas; presionaba mi
barbilla de arriba-abajo contra su panochita, hasta estimularla lo m�s que pude,
cuando separ� sus labios mayores estaban mojados y el l�quido era m�s espeso,
como babosito y su panochita no tenia olor, era como si su partecita estuviera
limpia; le bes� un poco en el �rea del cl�toris para aprovechar que estaba
lubricando y hacerle el amor lo m�s pronto posible

Me acost� encima de ella con el pene parado entremeti�ndolo
en sus labios mayores tocando su vulva, el cl�toris y hacia abajo, empec� a
mover mi cadera como si la estuviera penetrando, el frote del pene con su
cl�toris y alrededor la empezaron a estremecer, estaba gimiendo y entre peque�os
gritos sus respiraciones eran entrecortadas, mov�a su cuerpo hacia los lados
para que mi pene frotara donde m�s la excitaba.

Estando ya muy mojada, le levant� las piernas, pegando sus
rodillas a su pecho y ella se las sujet�, me sub� y con su mano me puso el pene
en la vagina que estaba demasiado mojada, penetr� r�pido suspirando los dos y
dando un gemido de placer, ella se quej� un poco por el dolor que sinti�, por lo
que hab�amos hecho el d�a anterior, y se estremeci�, estando el pene lo m�s
adentro que pude me empec� a mover sacando y meti�ndolo, tuve contracciones en
mi pene arrojando chorritos de lubricante caliente y mi t�a los sent�a porque en
ese momento me apretaba contra su cuerpo, como se�al de excitaci�n, mi t�a
empez� a gemir y a jadear respirando r�pido, le empec� a chupar sus pezones y de
rato sus gritos y jadeos eran m�s fuertes, as� nos seguimos hasta que dijo me
voy a venir, una contracci�n en su vagina me indic� que hab�a tenido un orgasmo,
una lubricaci�n caliente sali� de adentro de su vagina empapando mi pene, que
continuaba con contracciones; se detuvo un instante y dijo otro m�s, segu�
movi�ndome y de rato, entre gemidos y respiraciones r�pidas dijo me vengo, su
cuerpo de estremeci� y otro chorro caliente sent� escurriendo saliendo por la
vagina mojando sus nalguitas y mis test�culos; hizo un descanso jadeando fuerte
como queriendo agarrar aire; con los labios secos y fr�os, casi sin saliva en su
boca, dijo casi cansada, aguanto otro m�s, mu�vete, me segu� moviendo
penetr�ndola lo m�s r�pido que pod�a, mi pene segu�a arrojando l�quido, mis
test�culos estaban tan contra�dos y pegados a mi cuerpo, que parec�a que se iban
a meter; mi t�a con menos fuerza estaba jadeando o pujando y gritando, me dijo
me voy a venir, me mov� m�s r�pido, con varios gemidos y contorciones suaves de
su cuerpo dijo ya, su cuerpecito se eriz� mucho y un chorro de lubricante volvi�
a mojar mi pene y aunque ella yo no se movi� yo estuve penetr�ndola hasta que
sent� placer saliendo lubricante, le dije ya termin�.

Baj� las piernas, yo estaba arriba de ella, y los dos
empapados de los genitales nos quedamos as� casi una hora descansando, en
momentos le besaba y chupaba sus tetas acarici�ndole partes de su cuerpo donde
yo sent�a tierno hacerlo; ella estaba cansada, su coraz�n se lo escuch� latir
aprisa, con la boca seca y casi sin fuerzas; yo tambi�n casi estaba en las
mismas, pero ella tuvo m�s desgaste f�sico utilizando mucha energ�a para tratar
de sentir r�pido los orgasmos uno tras otro y gozarlos profundamente en lo
posible. Teniendo mi pene peque�ito y la cabecita m�s roja o irritada que el
resto del pene y ella descansando con los ojos cerrados, me baj� de encima y me
acost� a su lado

Viendo que mi t�a m�s relajada o casi adormecida, yo pensando
en que ya hab�amos terminado de hacer el amor y que en cualquier momento se
levantar�a para ir al ba�o y vestirse, quise aprovechar los �ltimos momentos
haci�ndole cosas en su cuerpo que a m� me satisfac�an, me sent� a un lado, le
bes� sus labios correspondi�ndome sacando su lengua un poco para chuparla con
mis labios, luego mirando muy detenidamente sus tetitas con los pezones parados,
le acariciaba lentamente toda su teta, me inclin� tomando con mis labios su
pez�n y areola chap�ndolos tiernamente y al estar apunto de que se me soltara la
tetita, le succionaba estir�ndosela hasta que se me escapaba de mis labios, est�
estimulaci�n la hice por mucho tiempo, alternando una y otra teta para que no se
sintieran menos ni una ni otra recibiendo estimulaci�n las dos en la misma
proporci�n, eriz�ndose su cuerpecito. Me baj� hasta su panochita le separ� las
piernas, la cama estaba mojada al igual que sus nalguitas, le separ� los labios
mayores, tenia empapada la vulva, le toqu� y estaba muy resbaladizo o babosito,
el agujero de la vagina lo tenia abierto mucho m�s de c�mo lo tenia cuando era
virgen, tenia sangre en la estrada y muy rojo, bes� sus piernas, me regres� a
sus senos los bes� y mi t�a me tom� de la cabeza, me acerc� a sus labios y nos
besamos; dijo m�s dormida que despierta, hay que vestirnos por si llega mi mam�,
nos limpiamos con papel, nos vestimos y nos pusimos a ver televisi�n

Acostados en la cama abraz�ndola por detr�s ella se qued�
dormida m�s de una hora, casi para anochecer lleg� la mam� y le dije ya me voy,
me acerqu�, nos besamos, se qued� acostada, me desped� encamin�ndome a la
puerta, llegu� a mi casa y antes de dormir record� lo que hab�amos hecho. Las
semanas pasaron, de vez en cuando me masturbaba pensando en mi t�a, un d�a fu� a
mi casa, nos cachondeamos el tiempo que pudimos con besos y caricias por todo el
cuerpo, pero sin poder hacer el amor; ella me dijo que me deseaba demasiado y
que cuando se acordaba de mi pene y como hac�amos el amor no pod�a conciliar el
sue�o y a veces se masturbaba, pero que no sent�a lo mismo ni con la misma
intensidad que cuando lo hizo conmigo. Pasaron los meses y nuestros encuentros
eran m�s distanciados sin mucha pasi�n como antes, hasta que lleg� el d�a en el
que fui con mis pap�s al municipio de Calvillo en Aguascalientes donde conoc� a
mi prima Estela de quince a�os de edad igual que yo, donde tuve mi primera
sacada de leche.