Relato: Jugando con mi hermano



Relato: Jugando con mi hermano

Jugando con mi hermano


No soy una ninf�mana, aunque ustedes piensen lo contrario.
Simplemente me gusta disfrutar de mi cuerpo, fui hecha para el placer y educada
para ser libre. Y eso soy, ejerzo mi libertad sin causar da�o a nadie. Por eso
aqu� les cuento mis aventuras. A los 15 perd� mi virginidad pero me desat�
realmente a los 18.


Mi padre es diplom�tico y por esa raz�n nos hab�amos
trasladado a Espa�a. Terminamos el secundario en Madrid, pero tanto mi hermano
mellizo como yo extra��bamos mucho Argentina: nuestros amigos, la ciudad, los
olores, las costumbres.... estando afuera uno extra�a hasta a los
colectiveros.... es raro, pero es as�. Ten�amos casi un a�o de instalados en la
madre patria, pero no logr�bamos adaptarnos y apenas cumplimos los 18 les
planteamos a nuestros padres que quer�amos regresar. Pusieron el grito en el
cielo, pero ya ten�amos todos los flancos cubiertos: all� ten�amos casa, la vida
era mas barata que en Espa�a, toda nuestra familia estaba en Argentina, los
amigos, los olores, el club, los colectiveros, la cancha de Boca, los Chalchas
-la debilidad del viejo-, y el tango. S�, dimos golpes bajos. Madrid nos gustaba
mucho, nos hab�a recibido muy bien, pero la tierra tira. Finalmente, despu�s de
unos d�as, nos dieron el okey.


Llegamos unos d�as despu�s de celebrar el a�o nuevo en
Espa�a. Volvimos a la casa que hab�amos abandonado un a�o atr�s. Hab�an cambiado
algunas cosas, no muchas, pero todo estaba casi como lo dejamos. Los vecinos
eran los mismos, cogotudos y garcas, igualitos. Fulanito hab�a engordado y
menganita se hab�a rapado, uia. La vieja de la casa de la vuelta se hab�a muerto
finalmente. Detalles nom�s. Pero algo en nosotros hab�a cambiado. Por primera
vez �ramos libres completamente. Los papis estaban a a�os luz de distancia.
IUUUUUUJUUUUU!!!!


Era verano, hac�a un calor sofocante y nos pas�bamos en la
pileta de casa durante el d�a y a la noche sal�amos indefectiblemente. Yo sal�a
con mis amigas o con los de mi hermano o directamente con �l. Ah, mi hermano se
llama Andr�s, mucho gusto. Y yo Pamela. Je. La libre asociaci�n de ideas est�
permitida.... J


Casi todos nuestros amigos se hab�an ido de vacaciones a
Punta o a Pinamar. Nosotros nos quedamos en Buenos Aires. Ten�amos varios
asuntos que solucionar, entre ellos, problemas con los bancos: nuestro sustento
diario proveniente de Madrid no llegaba a nuestras manos. No nos quedaba otra
que quedarnos en casa con ese calor del infierno. Igual disfrut�bamos estar en
casita, c�modos y solitos.


El d�a en que empec� a desatarme me levant� al mediod�a, como
siempre, me tom� un juguito de naranja, me puse la bikini, y me tir� en la
pileta. Un placer. A las dos horas lleg� Andr�s.


�Dormiste bien, Piki?


Como un lir�n....


Hoy llam� mam�, y dijo que ya hab�a mandado la plata


Bueno, menos mal. Esto del escaseo de metal me hincha un poco
las bolas


Tendr�an que abrir un cuenta, poner la guita ah�, en vez de
depender de esto de que nos manden cada mes


Si, ya se lo dije, pero no la entiende.




Nos quedamos en silencio un rato. Despu�s empez� a
salpicarme.




Ah, quer�s guerra?


Que guerra pod�s dar vos, si sos mujer, tonta


Ahora vas a ver.


Me acerqu� y le manote� la pija como pude por sobre el short.
La solt� enseguida. No se por que hice eso. Me asombr� pero ya estaba hecho.


�Qu� haces loca?


Ten�a que encontrar una raz�n r�pidamente.


Bueno, dijiste que no pod�a darte guerra por ser mujer... Ah�
ten�s guerra.


No me refer�a a ese tipo de guerra, exactamente.




Ten�a raz�n, me remordi� la conciencia y le dije:
perdoname, lo hice sin pensar.




Se dio la media vuelta y se fue. Me qued� un rato largo en el
agua pensando en la cagada que me hab�a mandado. Pero mi mente volvi� al tema de
la guita que no llegaba. Me olvid� del asunto. Sal� de la pile, me sequ� con el
toall�n y sent� que alguien me miraba. Lo sent�a. Mir� para arriba y logr�
divisar a medias a mi hermano justo cuando se escond�a. Boludo.


Cuando estaba subiendo para ducharme, lo veo al final de la
escalera y me dice como si nada:


�qu� hacemos hoy?


�qu� quer�s hacer?


�y si vamos a cenar y despu�s nos vamos de marcha?


Y dale...


Me duch�, y vieja costumbre argentina, fui a pegarme una
siesta para estar fresquita. El sol y el agua me agotaban. Me despert� Andr�s:
dale loca, levantate y vestite r�pido que son las once y estoy cagado de hambre.


Comimos en un restoran de medio pelo, con vino y postre
incluido, que nos sali� bastante baratito. A eso de la una y media encaramos
para los boliches del r�o. Con el vino que hab�a tomado ya estaba alegre. No
acostumbraba tomar. Pero apenas entr� al boliche fui a la barra y me ped� un
vodka con naranja. Uy, loca, par� un poquito, dijo Andr�s. No le dije nada. El
se pidi� un destornillador. La gente fue llegando y despu�s de medio vodka yo ya
estaba realmente en pedo. La cabeza me giraba de a ratos, pero todav�a me sent�a
entera, consciente de mi y de lo que me rodeaba. Nos pusimos a bailar. Las luces
centelleantes, la m�sica al palo y el pedo me hac�an sentir como que flotaba.
Andr�s iba y ven�a de la barra. Tomaba r�pido. El sol�a tomar pero no tanto, ya
iba por el cuarto vaso.


Estas linda hoy, guachita


Gracias, Piki


Me hab�a puesto una remerita blanca y unos jeans bien
apretaditos. Me agarr� de las manos y bailamos as� un rato. Me dio vuelta y �l
bailaba detr�s de mi. No me tocaba, pero si yo bajaba, el bajaba, en un baile
muy sensual. Sub�a y bajaba y el me acompa�aba por detr�s, muy cerquita, siempre
sin tocarme, pero a�n agarrados de las manos. Intent� acercarme a �l, pero
disimuladamente retroced�a. Me di la vuelta e hicimos lo mismo, tomados de las
manos. Le clav� los ojos y desvi� la mirada. En alg�n momento, fue �l quien me
mir� a los ojos y luego me atrajo hacia si. Sent� su pija dura casi sobre mi
concha. Mis tetas se clavaron en su pecho y me la refreg� un poco mientras
bail�bamos. Me solt� y dijo: vamos. Lo segu�.


No puedo manejar, dejemos el auto ac� y lo venimos a buscar
ma�ana. Tomemos un taxi.


Llegamos a casa y yo no sab�a que hacer. Lo mejor ser�a
hacerme la boluda. El parece que pens� lo mismo porque fue a la cocina, tom�
agua y me dijo: me voy a dormir, hasta ma�ana.


Al otro d�a, repet� la rutina de siempre, solo que Andr�s ya
estaba en la pileta.


Buen d�a, chetito. �Qu� hac�s levantado antes que yo?




Me mir� nom�s.




Te comieron la lengua los ratones?




Nada.




Bueno, hoy jugaremos al oficio mudo entonces.


Me met� al agua. Se acerc� y me salpic�. Yo no hice ni dije
nada. Volvi� a salpicarme. Segu� igual. Otra vez. Entonces reaccion�. Le agarr�
la pija pero ya no hab�a ning�n short de por medio. No me hab�a dado cuenta que
estaba en bolas. Solt� mas r�pido que el d�a anterior. Me agarr� la mano y la
puso en su pija:


Termin� lo que empezaste ayer


No


Volv� a sacar la mano. El volvi� a pon�rsela en la pija que
ya estaba parada. Esta vez no me solt�. Empez� a pajearse usando mi mano.
Intent� sacarla, hasta le apret� la pija, pero me mir� fiero. Sigui� paj�andose.
Ve�a su cara de satisfacci�n. Le gustaba el masajeo que mi mano le estaba dando.
Poco a poco afloj� la presi�n de su mano y me solt�. Y yo segu� paje�ndolo.
Jadeaba con los ojos cerrados. Se apoy� contra la pared y abri� los brazos. El
empujaba con sus caderas como si el hueco de mi mano fuera mi concha. Dese� que
estuviera pensando eso. Le acarici� el pecho y abri� los ojos. Me mir� fija y
profundamente. Yo hab�a incrementado el masajeo para hacerlo acabar mientras
segu�a acarici�ndolo. Ahora era yo la que deseaba un masajito. Le agarr� la mano
y la puse en mi concha. Corri� desesperadamente la tanga y me acarici� la concha
mientras yo no dejaba de pajearlo. Termin� ah� mismo. Me miro con una mezcla de
miedo y placer, sac� su mano de entre mi concha palpitante y sali� desnudo de la
pileta. Sorprendida lo mir� alejarse. Sal� yo tambi�n de la pileta. Sub� las
escaleras apurad�sima y fui a su habitaci�n. Se estaba poniendo el calzoncillo.
Me vio parada en la puerta.


Esto no est� bien, loca, me voy.


A donde vas?


A buscar el auto de donde lo dejamos ayer.


Un poco tarde te diste cuenta que esto no est� bien.


No te hagas la boluda.


No me hago la boluda. Solo que me parece que las cosas vienen
as� y bueno....... son as�.


Se puso de espaldas mientras se pon�a la camisa y me saqu� el
corpi�o del bikini. Yo segu�a caliente y quer�a mi parte. Este histeriqueo me
calentaba mas. Comprend�a que lo que hab�amos hecho no estaba del todo bien.
Pero a �l le hab�a importado a medias. El mismo argumento pod�a dar yo. Se dio
vuelta y vio mis tetas al aire. Me las mir� sin asco. Se acerc� despacio, con la
respiraci�n entrecortada.


Basta Pamela.


No te gustan?


Basta.


Me le colgu� al cuello, le refregu� las tetas en el pecho
desnudo y le dije: decime ahora que no te gustan, dale. Me mir� asombrado pero
no pudo evitar besarme el cuello. Me lami� las orejas y luego pas� a lamerme las
tetas. Las mordi� despacito mientras me agarraba el culo con las dos manos. Yo
ya estaba mojada, recontracaliente. Me acerc� a la cama y me empuj� sobre ella.
Cuando ca� sobre las s�banas, lo vi irse de la habitaci�n. Le grit� que volviera
mientras escuchaba como bajaba la escalera de dos en dos.


Mi hermano estaba volvi�ndome loca. El guacho me hab�a dejado
caliente, recaliente. No quer�a pajearme yo, quer�a que �l me pajeara. Pero
sab�a que si no me sacaba la calentura de encima iba a explotar. Volv� a la
pile. Me saqu� la tanga y empec� a acariciar mis tetas, las apret� y pellizque
los pezones con bronca. Me llev� la mano a la concha y ataque mi cl�toris con
movimientos circulares mientras pensaba que con esa misma mano hab�a pajeado a
mi mellizo. Eso me calent� mas, apret� el pez�n con mucha mas fuerza hasta
sentir un poco de dolor y aceler� el ritmo en el cl�toris. Explot� r�pido.


Fui a mi habitaci�n, me puse una remerita y la tanga mas
chiquita que encontr�. Baj�, prend� la tele, me sent� en el sill�n y comenc�
otra vez a tocarme. Por mas que hubiera acabado cinco minutos antes segu�a
estando excitada. Solo pod�a pensar en la pajeada a mi hermano y en su lengua
sobre mis tetas. Frente al televisor volv� a acabar y me qued� dormida. Me
despert� la puerta de entrada que se cerraba. Era Andr�s. Me levant� y me mir�
de reojo. Hasta ma�ana, dijo. Carajo mierda, ahora directamente me estaba
ignorando. Su juego est�pido mas que excitarme me hac�a hervir de bronca. Ya me
las iba a pagar.


Eran cerca de las 12 de la noche cuando me fui a dormir.
Bueno, intentaba dormir. Estaba obsesionada con lo que hab�amos hecho y muy
caliente, mucho. A las 3 mas o menos me levant� y fui a su habitaci�n. Roncaba,
no se como pod�a dormir.... Boca arriba. Dorm�a desnudo, siempre lo hac�a y mas
en verano. Pero entornaba la puerta. Esta vez la hab�a dejado totalmente
abierta. Me estaba provocando y no lograba entender su juego. Me acerqu� a la
cama, vi su pija fl�cida. La agarr� y apenas apoy� mis labios en ella. Luego la
punta de mi lengua en su agujerito. Me concentr� ah�, suavecito, suavecito, sin
parar. Se despert�. Me mir� y sonri�. Su sonrisa me desconcert� pero segu�
suavecito. El bultito fl�cido se estaba endureciendo. Aument� el ritmo
concentr�ndome en la cabeza, pasando la lengua por todo ella. Gimi� de placer.
Met� la cabeza en mi boca y la apret� con los labios mientras le daba latigazos
con la lengua con mucha rapidez. Esto pareci� volverlo loco y se le puso r�gida
como una piedra. Lo estaba pajeando otra vez, pero esta vez me di cuenta lo
grande que era su poronga. Era muy gruesa, no muy larga y un tanto combada hacia
arriba. Me pareci� desproporcionada para el cuerpo poco musculoso de Andr�s. La
mir� impresionada y volv� a llev�rmela a la boca. Me la met� entera, casi hasta
la garganta, llen�ndola de saliva, recorriendo sus pliegues, presionando con la
lengua en la cabeza. Me puso la mano es los huevos y acarici�. Me la sac� de la
boca r�pido y mientras con mi mano sub�a y bajaba su tersa piel con mucha
rapidez acab� entre mis tetas. Me desilusion� y pens� que me mandar�a a volar
como ya lo hab�a hecho antes, pero no. Me puso de espalda y me empez� a lamer.
Abri� mis brazos, sujet�ndolos. Apoy� todo su cuerpo en mi espalda, mov�a su
pindonga contra la raya mi culo y pod�a sentir como iba poni�ndose gorda otra
vez. Segu�a movi�ndose y ahora me mord�a. Sus mordisquitos apenas dolorosos,
seguidos de un lenguetazo me excitaban much�simo. Hizo que nos pusi�ramos de
costado, apoyando su pija en mi culo, mientras que con un mano empez� a tocarme
las tetas. Con la otra me acariciaba la concha. Atac� mi cl�toris con decisi�n y
me vine casi en el instante en que lo hacia �l... Sentir su leche chorre�ndome
por el culo, mojando la poca tela de la tanguita que llevaba me hizo desearlo
a�n mas.


Dame mas.


Por hoy es suficiente, herma....


Dale..... no seas malito.


Andate a dormir, ahora estamos a mano, no?


Si, pero....


Si pero nada. A dormir.


Al otro d�a me levant� en llamas. Hab�a so�ado toda la noche
que cog�a con �l y estaba completamente mojada. Fui al ba�o, hice pis y apenas
hab�a terminado de levantarme la tanguita, lo vi entrar como una tromba. Me
empuj� contra la pared y me meti� la lengua en la boca, mientras refregaba su
pija en mi est�mago y me agarraba el culo.


Hoy vamos a llegar hasta el final, dijo susurr�ndome al o�do


Sigui� refreg�ndose contra mi, me sac� la tanga y la remerita
y empez� a chuparme la concha mientras me apretaba las tetas con las dos manos.
Sent�a su lengua entre mi pelos, rode�ndome el cl�toris y por momentos entrando
por mi vagina. Yo presionaba su cabeza para que siguiera ah�, chupando todos mis
jugos. Rozaba sus dientes contra mi cl�toris mientras luego lo suavizaba con la
lengua. El roce me hizo acabar. Supo que hab�a acabado porque gem� fuerte y mi
pubis se mov�a despidiendo los jugos, pero sigui� chupando.


Tu concha es la mas rica que prob� en mi vida. Me va a ser
dif�cil dejarla. Vamos a mi habitaci�n.




Ten�a el pedazo gordo y empinad�simo. Intent� agarrarlo
pero no me dej�. Me sent� encima de �l




y me la meti� con fuerza. Lo cabalgu� con violencia, yo me
echaba hacia atr�s, y el me apretaba las tetas..... SIIIIIIIGUEEEEE,
SIIIIIIGUEEEEEE, nooooooooo paresssssssss...... HHHHHhhhhhuuuu uuumm mmmmmmm,
voy a aaaacabaaaar DENNNNNTROO DE VVVVVOSSSSSS. En un serie de espasmos r�pidos
sent� su leche caliente llenando mi agujero. Segu� cabalg�ndolo para que se le
parara otra vez. Quer�a mas. Mientras me mov�a de atr�s para adelante le
pellizcaba las tetillas, el mov�a la cabeza rubia de un lado a otro.... pod�a
sentir dentro de mi como su hinchaz�n aumentaba. Hizo que dejara de cabalgar, me
puso de costado, el detr�s, me levant� una de las piernas y volvi� a arremeter
en mi concha. Me hizo doler y gozar como nunca antes. Sent�a sus huevos golpear
en mi culo, y la profundidad de la penetraci�n me llev� a terminar en varios
orgasmos.... Con su pija enorme lubricada con mis jugos, me penetr� el culo con
cierta dificultad, mientras me apretaba y retorc�a los pezones. La penetraci�n
me hizo saltar, grit� de dolor, a la vez que lo o� quejarse a �l tambi�n. Me
estaba haciendo doler, pero me gustaba tanto que ped�a mas. Nunca hab�a
experimentado el placer que me estaba dando mi hermano: MMMMMaaaAAAsssssss, que
meeeeeee partttttttt�iiiiiiiis y me gusssssssta........ masssssssss.....Bombe�
con tanta fuerza que �ramos los dos un solo grito de goce. Sigui� serruch�ndome
con violencia un tiempo, acompa�ando el traqueteo con gritos desesperados de
ardor, dolor y placer y casi acabamos al mismo tiempo.


Sudados y exhaustos nos quedamos dormidos. Al otro d�a, nos
despertamos y nos quedamos en la cama, cogiendo y cogiendo y cogiendo. As�
durante semanas. Solo sal�amos a hacer compras. Se volvi� una obsesi�n. Hasta
que se me ocurri� que ser�a bueno encontrar un segundo hombre para hacer un
terceto. Quer�a ver que se sent�a ser cogida por delante y por detr�s a la
vez....


HHHUUUUUUMMMMM, el haberles contado mi experiencia hizo que
me calentara. Ahora misma estoy toda mojada. Andr�s me est� masajeando las tetas
y no puedo resistirme. Me voy chupar toda su leche. En la pr�xima, y sin esta
calentura que tengo ahora, les contar� la experiencia fabulosa del terceto. Un
beso en la puntita. Pamela.




Por favor vota el relato. Su autor estara encantado de recibir tu voto .



Número de votos: 2
Media de votos: 10.00


Relato: Jugando con mi hermano
Leida: 21561veces
Tiempo de lectura: 11minuto/s





Participa en la web








Contacto
Categorias
- Amor filial
- Autosatisfacci�n
- Bisexuales
- Confesiones
- Control Mental
- Dominaci�n
- Entrevistas / Info
- Erotismo y Amor
- Fantas�as Er�ticas
- Fetichismo
- Gays
- Grandes Relatos
- Grandes Series
- Hetero: General
- Hetero: Infidelidad
- Hetero: Primera vez
- Intercambios
- Interracial
- L�sbicos
- MicroRelatos
- No Consentido
- Org�as
- Parodias
- Poes�a Er�tica
- Sadomaso
- Sexo Anal
- Sexo con maduras
- Sexo con maduros
- Sexo Oral
- Sexo Virtual
- Textos de risa
- Transexuales
- Trios
- Voyerismo
- Zoofilia


Afiliados





























Mi sirvienta vien golosa relatosRelato Pornos De Dominacion A Chicos TodoRelatorelatos deincetos con mi abuelarelatos eroticos colegialas relatos eroticos violarelatos eroticos bdlol.ru casarelatos er�ticos de me cogi a mi suegra por equivocaci�nrelato porno:incesto padre ehijael culito de mi primita. de diez años relatos eróticosRelatos eroticos gratis incesto sobrina de 13 añitos primera vezmi hijita de 9 añitos relatoMi pequeña sobrina relatos xxxrelatos eroticos lesvicos de sirvientasRelatoseroticospelirrojarelatos gay habladospapi me folla relato pornoRelatos eróticos hombres que han desvirgado culitos gaysrelatos el cunado sexo sin tabuesrelatos porno real mi hija pequeña se le nota una vulva labios gruesorelato de mi primera vez haci�ndolos con el vecino relatos eroticos de prostituta y su hijita de 8Relatos porno gay me folle a mi doctorrelatos pornos las tetas hermosas de mi tiarelatos eroticos hijo cogeme por favorMi hija embarazada relatos eróticosrelato porno mi hija de 11 capitulosRelatosporno mi vecina yo tenia 17relato erotico de gay afeminado con un jovencito heterosexualrelatos eroticos enamorada de mi profesorrelatos porno de la primariami sobrina y yo relatos se la arrimeRelatos cojiendo con mamá en el ranchoLos mejores relatos sexo inocentes no consentido la hija de mi vecinahistorias porno mi primo y yo hicimos el amor quedandome embarazadarelatos pornos mi hijo y yoIncesto con la abuela relatadosalquilando a mi hija relato eroticarelato hice a mi mama mi amante 4porno d madurasrelato erotico cojiendo a mi cunada xxxIncesto con la abuela relatadosMisrelatosporno.com gay maduroRelatos porno una nietica lindados hermosuras virgenes relatos eroticosrelato incesto primasrelatos eroticos esposa consentida trio www nvideos.comrelatos de sexo anal con maduras/relato43905_MI-HIJA-DE-11-PARA-2---X.htmlRelato erotico sadismo a colegialarelato papi me follaRelato Pornos De Dominacion A Chicos TodoRelatola primeravez que hagoel amorconmisuegraermana y ermano Foyan en el mismo baño biniendo de claseme folle a mi madre relatos eroticosrelatos eroticos de incesto Por el culito con mi sobrinita virgen relatos Relato Pornos De Dominacion A Chicos TodoRelatorelato erotico de suegras con fotorelatos porno mi papi me convirtió en su putita y me coge rico y durohistorias eroticas de nenas de 11 gratistatiana desvirgadas en barcelonaespiando a mamarelato erotico travesti camionerorelatos pornos orgia familiar hijo madre tia y hermanarelatos eróticos gay mi tio me coje duro amis 9 añitos y me arde asta me cagoincesto puro nora relatorelatos eroticos verdesrelatos abuelo gayrelato con nieta d 9 erocticoRelatos erotikos transportmi hijita de 9 añitos relatorelatos pornos mi llerno me cojio por el culo youtubela hijita se mi amiga relatos eroticosMi sobrina religiosa relatoRelatos cojiendo con mama en el ranchoanalbrutalmonjasrelatos eroticos mi madre me espiarelatos de sexo telefonicorelatos mi hijo me toca porn perro