Relato no. 2
Mi vecina Pilarica�
Hola amigos, este es mi segundo relato, y mi segunda vez
haciendo sexo, esta vez fue con mi vecina Pilar, desde ni�os habl�bamos de c�mo
nos est�bamos desarrollando, y ella un d�a cuando tendr�amos 12 a�os ella y yo
unos 13, atr�s de la casa de su perro de pronto de alzo la faldita y se hizo a
un lado el calzoncito y me ense�o sus primeros pelitos del pubis, se ve�an
chistosos un pelillo por aqu� y otro pos haya, pero bueno, lo m�s rico fue que
alcance a ver su rayita en la parte inferior, solo que no me dejo tocarla. En
ese tiempo ella era una ni�a delgada, m�s bien flaquilla pero de traserito
levantado y pechitos apenas asom�ndose, al fin eramos unos chiquillos.
Paso el tiempo y cuando ella cumpli� los 15, yo tenia 16,
sucedi� que un d�a jugando a las "luchitas" entre ella, su hermana Martha, mi
hermano y yo, de pronto mi mano fue a parar a su entrepierna, la verdad es que
seguido hac�amos ese jueguito y yo aprovechaba para tocarle las nalguitas o las
tetitas, por cierto peque�itas pero muy duritas, en fin, ese d�a ella tra�a
puesto un short bastante amplio y que de vez en vez nos dejaba ver su
pantaletita color azul cielo, y como dije mi mano de pronto se vio dentro del
short tocando "sin querer" su panochita, teniendo ella sus piernas bien
abiertas, vaya que sent� su boquita vaginal en mi mano, de pronto se quedo
quieta y me sonri�.
D�as despu�s, "jugando" al escondite, claro, ella y yo nos
escond�amos juntos iniciamos con besitos y toqueteos de teta y nalguita, de
pronto ella record� cuando me hab�a ense�ado sus primeros pelillos y me pregunt�
si quer�a saber como estaba ahora su pubis, desde luego que no me resist�, y lo
que vi me sorprendi�, una verdadera selva de pelos, canija chamaca ten�a un
triangulo bastante afelpado de pelos, esta vez si me dejo tocarlos, y no solo
eso me dejo tocarle la entradita de su vagina, estaba mojad�sima pero solo un
poquito y ella por supuesto ella hizo lo mismo, me bajo el cierre del pantal�n y
me saco el pene, lo tocaba y miraba como estudi�ndolo mientras solo tocaba su
mata de pelos, ya que no me dejaba ir mas all�, hasta que tuvimos que salir del
escondite. As� lo hicimos muchas veces, cada que ten�amos oportunidad, vaya que
dejaba mojados mis calzones con tanta manoseada.
Un d�a que est�bamos en su casa, su pap� se puso enfermo,
creo que era el ap�ndice y su mam� y sus hermanas se fueron con �l al hospital,
y la se�ora muy angustiada me dijo... "te encargo a mi hija, si?", y claro que
me encargue de ella, tan pronto se fueron, ella y yo comenzamos con el cl�sico
faje, s�lo que ese d�a fue especial, por que aunque le tocaba seguido su pepita
y la recorr�a con mi dedo de arriba abajo por encima del panty, nunca le hab�a
quitado el pantal�n o la falda, siempre lo haci�mos a escondidas y de prisa, as�
que cuando me di cuenta mientras la besaba, su pantal�n ya estaba en el suelo y
yo jalando su calzoncito que ya estaba a media pierna y yo con mi pene en su
manos, nos tiramos en la alfombra de su sala y yo presto le abr� la blusa y le
quite pantal�n y panty, vaya panorama el ver su panochita llena de pelos y bien
mojadita que hasta brillaba y all� la ten�a yo con las piernitas abiertas, y
esta vez si le toque a mi antojo su vaginita, desde luego record� mi primera y
�nica vez hasta ese momento, volvi� a invadirme la misma emoci�n y aplicando la
clase que hab�a aprendido baje mi cabeza y comenc� a chuparle su entradita dando
lenguetazos locos mientras ella se retorc�a y me jalaba del cabello � no me
dec�a nada-, desde luego que era diferente a la vez anterior en esta era carne
fresca y virgen, as� estuve un rato chupando su vagina y y besando sus tetitas,
chiquitas pero ricas con apenas un color rosadito en el pez�n, los cuales
tampoco habia visto, aunque si tocado en m�ltiples ocasiones.
Hasta que por fin me acomode en medio de sus piernas, y
pasaba mi pene de arriba abajo en su entradita, ella jadeaba sin decir nada y yo
temblaba no se si de miedo o emoci�n, - en charlas con mi amigos platic�bamos de
c�mo tratar a una virgen, aunque ninguno la hab�a tenido, hasta ese momento �
as� es que coloque mi punta y presione metiendo solo la cabecita, mmmm y meti
otro poco, y otro poquito, hasta que sent� como algo se mov�a dentro, supongo
que era su himen por la cara de dolor que hizo y la humedad que sent� en mi
palo, me quede quieto y ella despu�s de unos segundos me dijo, ya, sigue, esta
vez fui hasta adentro, y poco a poco tome vuelo, ese si que fue un palo
apretadito, no como con la maestra, de pronto sent� como se relajo ella y empec�
a sentir que ya me ven�a, saque mi pene y dispar� mi chorrito sobre su estomago,
en una mezcla de rosada de semen y sangre.
Luego estuvimos platicando y mortific�ndonos de lo que
vendr�a, ese d�a paso y lo volvimos a hacer nuevamente otras ocho o diez veces
en una de ellas le estrene su culito tambi�n en un paseo por el bosque, mientras
sus pap�s preparaban la comida y me com�a a su hija.
Pas� el tiempo yo me fui a estudiar a otra ciudad y dejamos
de vernos, ella se caso y yo hice lo mismo, de vez en vez nos cruzamos en la
calle y nos gui�amos un ojo (por cierto esta hecha un forro, ya no es la ni�a
flaquita que conoc�), desde luego no ha habido otra vez, pero ojal� y un d�a su
marido me la encargue como lo hizo ese d�a su mam�.
Bueno amigos, espero le haya gustado este relato, de mi
primera de dos v�rgenes. Hasta la pr�xima.