Retrocedamos un poco en el tiempo, al momento en que Blanca
estaba todav�a en el instituto, o sea que tendr�a 16 � 17 a�os. Que sea verdad o
mentira no lo se. Puede que sea fruto de su mente calenturienta, pero ella me
asegura que es verdad.
Una tarde qued� con una amiga y tres chicos para estudiar en
casa de uno de ellos, pero eso era la tapadera para lo que iban a hacer en
realidad, que era ver una peli porno. Sabeiss que a esa edad te excitas por el
mero hecho de pensar una cosa as�, y que adem�s las hormonas est�n en plena
ebullici�n.
Su amiga se llamaba Ana, tambi�n de 16 a�os, y los chicos no
se como se llamaban pero para que sea mas f�cil les pondremos nombre: Luis,
Alberto y Miguel, los tres algo mayores que ellas, quiz� 18 a�os.
Por aquel entonces Blanca ya no era virgen, pero Ana si, y
todo lo relacionado con hombres le causaba mucha curiosidad.
Pusieron la pel�cula y lo t�pico, pronto comenzaron todos a
excitarse mucho. Blanca dice que a ella se le nota mucho pues enseguida tiene
que empezar a mover las piernas para ir alivi�ndose un poco. Adem�s lubrica
mucho, y pone las bragas empapadas enseguida. El grado de excitaci�n era
patente, entre otras cosas porque ninguno de ellos hablaba, y a los chicos ya
empezaba a not�rseles el bulto de la polla en el pantal�n. Luis, el due�o de la
casa, se levant� para ir al ba�o, y al hacerlo todos se dieron cuenta de que
estaba muy empalmado. Alberto le dijo que si es que iba a hacerse una paja.
Todos se rieron y Luis dijo que no, que iba a mear. Blanca, muy ocurrente dijo
que si se iba a hacer una paja se la hiciera all� delante si ten�a huevos, que
por qu� ver una pel�cula pudiendo verlo en realidad. Luis le dijo que no, que el
lo hacia si ellas se desnudaban, que a cambio de nada no lo har�a.
A todo esto Ana no abr�a la boca. Estaba un poco asustada
pues todo era muy nuevo para ella. Blanca propuso que se masturbaran los 3 a la
vez, que as� no les dar�a verg�enza a ninguno. Miguel dijo que estar�a bien,
pero que lo hac�a si ellas tambi�n se masturbaban. A Ana no pareci� hacerle
mucha gracia y dijo que no, que terminasen de ver la pel�cula y luego ver�an,
pero en realidad se le notaba que estaba muy excitada.
Blanca cogi� entonces un vaso de la cristaler�a de la madre
de Luis y dijo que vale, que si se masturbaban y consegu�an llenar el vaso ellas
dos har�an lo que ellos quisieran, cosa que objetaron ellos inmediatamente, pues
dijeron que as� s�lo se corren los de las pel�culas y haciendo una marca en el
vaso dijeron que hasta ah� si que lo llenaban seguro.
Blanca accedi�, y con un rotulador hizo una marca por donde
ellos hab�an dicho. A cambio de llenarlo hasta ah� ellos dijeron que si lo
hac�an ellas se lo ten�an que beber. Ana sonri� y dijo que de eso nada, pero
Blanca afirm�, y dijo que lo har�an.
Tras dudar un poco, los chicos se bajaron los pantalones y
empezaron a mene�rsela. Por datos que tengo, que aunque te los cuento a mi no me
interesan para nada, uno de ello ten�a una verga bastante considerable, seg�n
Blanca de unos 23 o 24 cm, y los otros dos andaban por lo normal, unos 18 � 19
aproximadamente.
Ana y Blanca miraban expenctantes como los 3 se hac�an su
paja. Luis sentado en el sof� lo hac�a muy a conciencia, como intentando
correrse r�pido para cumplir su parte del cometido. Miguel, el de la polla
enorme, miraba a la tele donde segu�a puesta la pel�cula. Alberto se daba su
paja de pie, mas pendiente de Ana y de Blanca.
Hay que destacar que la pieza que quer�an pillar los chicos
era a Ana, pues Blanca por aquel entonces luc�a una ortodoncia que le cort� mas
de un rollo, pero gracias a lo echada para adelante que era consegu�a sus
ligues.
El primero en correrse fue Alberto. Cogi� el vaso de las
manos de Blanca y encaram� su polla hacia el. Despu�s de varias embestidas
consigui� llenarlo con gran cantidad de lefa. Hab�a sido una buena corrida. Ana
se estremeci�, ya que era la primera vez que ve�a a un chico correrse. Sin darse
cuenta su mano se fue a su entrepierna y se acarici� un poco. Blanca le susurr�
al oido que le dol�an los pezones y era porque estaba muy excitada.
Los otros dos chicos aguantaron un poco mas. A los cinco
minutos fue Luis quien pidi� el vaso, y dijo a Ana que por favor se lo
mantuviera ella. La leche empez� a salir a chorros intermitentes, que iban
acompa�ados por ligeros gemidos salientes de la boca de Luis. Esta tambi�n fue
una gran corrida, y parte de ella salpic� a Ana en la mano. Blanca se ri� y se
dispon�a a limpiarsela con un Kleenex, pero Luis se la recogi� con el dedo y la
limpi� en el borde del vaso para que cayera dentro. Con las dos primeras
corridas ya casi se hab�a llenado el vaso hasta la marca. Por poco que escupiera
Miguel el objetivo estaba cumplido, y las chicas cruzaron una mirada como de
resignaci�n. Si Miguel cumpl�a las expectativas y se corr�a en proporci�n al
tama�o de su pene se iban a tener que tragar una gran cantidad de semen.
Lleg� el momento esperado, Miguel empez� a temblar. Ana fue
con el vaso y se lo acerc� al nabo. Miguel trat� de levantarse y justo cuando lo
hac�a empez� a eyacular saliendo la primera entrega disparada hacia la falda de
Ana. Esta se apart�, y Miguel le quit� el vaso de las manos y empez� a eyacular
dentro de �l. Prueba superada ! Aun con el lefarazo que llevaba Ana en el
pantal�n los chicos hab�an cubierto el objetivo. Con servilletas de papel
terminaro de limpiarse y se subieron los pantalones.
Hab�a llegado el momento de las chicas, ten�an que cumplir su
parte de la apuesta y de no hacerlo eso ellos estaban dispuestos a tomarse la
justicia por su mano.
Ana a�n segu�a limpi�ndose la falda, cosa que era imposible,
ah� ya ten�a almid�n para un tiempo, y Blanca cogi� el vaso en sus manos. All�
dentro hab�a semen de 3 tonalidades, desde muy blanco hasta algo rojizo, y el
olor que desped�a aquello era muy fuerte. Los chicos dijeron que venga, que se
lo bebieran ya que todav�a estaba caliente. Ana puso cara de asco y dijo que no
con la cabeza. Ellos pusieron mala cara para Blanca se arrim� el vaso a los
labios y empez� a beber. Primero lo sabore� un poco y frunci� algo el ce�o pero
despu�s di� otro trago y dijo que en realidad no estaba mal. Los 3 muchachos
miraban alucinados, y Ana se hab�a arrinconado un poco y ten�a la cabeza gacha,
como pensando en salir corriendo en cualquier momento. Blanca se lo ofreci� y le
dijo, toma tonta, no es nada. Pero ella no quiso. Miguel volv�a a exhibir una
notable erecci�n y Blanca al darse cuenta de ello le acarici� la polla por
encima del pantal�n, y en otros dos tragos termin� de beberse el contenido del
vaso. Dijo que ya estaba, que ya hab�an cumplido ellas tambi�n, pero Luis dijo
que no, que Ana no hab�a hecho nada en absoluto, que por lo menos les ense�ara
las tetas (que seg�n Blanca eran enormes para una ni�a de 16 a�os) o el chichi.
Blanca los tranquiliz� y se acerc� a Ana y le dijo al oido que tranquila, que
ella controlaba, y le quit� a Ana la camiseta. Ana se qued� en sujetador, que
ella misma se quit� y quedaron al aire dos hermosas tetas que apuntaban hacia
arriba, con unos pezonez hinchados y duros y algo morados de la excitaci�n
acumulada. Alberto se acerc� y le pellizc� un poco el pez�n, ella di� un
suspiro, hasta que lleg� Miguel y le sob� los dos pechos. Luis hizo lo mismo,
pero en realidad los 3 muchachos parec�an algo asustados ante el espect�culo.
Ana dijo que ya era suficiente, pero Blanca se le acerc� por
detr�s y empez� a subirle despacio la falda, hasta que los chicos pudieron ver
sus bragas completamente mojadas. Blanca la mir�, le sonri� y empez� a soltarle
los poyetes de la falda que cay� al suelo por su propio peso. Ahora Ana estaba
desnuda s�lo con las braguitas y unas sandalias. Los 3 chicos volv�an a estar
empalmados, la tele segu�a emitiendo gemidos, Ana estaba cada vez menos asustada
y mas excitada y Blanca se re�a, ense�ando al hacerlo su aparato de los dientes.
Blanca se agach� un poco y separ� las braguitas de Ana hacia
un lado. Primero se vi� pelo, y despu�s salieron los labios vaginales de Ana que
ten�an un fuerte color y estaban totalmente h�medos y brillantes debido a la
gran cantidad de lubricante que encharcaba co�o y muslos.
Blanca empez� a acariciarle las rodillas, fue subiendo hasta
la parte interior del muslo y pronto le estaba frotando el cl�toris con la yema
de sus dedos. El olor a hembra se mezcl� con el fuerte olor a macho en aquel
comedor y Blanca se volvi� y dijo que qui�n se quer�a follar a Ana. Los 3 chicos
estaban algo asustados. Por sus rostros Blanca descubri� que Alberto y Luis eran
unos gallinas, que al final se hab�an acojonado, y entonces mir� a Miguel con la
esperanza de que este dijera que s�. Pero como tampoco se mostr� muy lanzado,
Blanca se levant�, cogi� una figurilla de encima del mueble, y empez� a
acariciar con ella el co�o de Ana. Ana hab�a perdido el habla, pero los 3
machitos tambi�n y Blanca iba jugando con el co�o de su amiga y poco a poco iba
introduciendo la figura. En un primer momento Ana intent� sujetarle la mu�eca a
Blanca para que no se pasara, pero pronto ces� y se extendi� en el sof� abriendo
las piernas. Blanca fue metiendo suavemente la figura hasta que encontr� un
tope. En ese punto se dedic� a meterla y sacarla mientras que Ana profer�a sus
primeros gemidos y con su mano derecha se buscaba el cl�toris para darse mas
placer. Ana sac� fuerzas para decirle a Blanca que no pasase de ah�, pero
entonces Blanquita poseida por un instinto animal la introdujo del todo y empez�
a presionar fuerte la base. Ana di� un grito de dolor y empez� a salir sangre de
su co�o, pero no cambi� la posici�n y Blanca empez� a meter y sacar fuerte la
figura hasta que consigui� que Ana se corriera. Al sacar la figura Miguel se
acerc� con �nimos de follarse a Ana ahora, pero Blanca no le dej�. Les dijo a
los 3 que eran unos mierdas. Se fueron las dos al ba�o, se vistieron y Ana le
pregunt� si a partir de ahora eran lesbianas. Blanca les dijo que no, que
simplemente hab�a seguido un instinto. Cuando salieron los 3 chicos estaban
masturb�ndose de nuevo.
Se despidieron de ellos y ya en el ascensor Ana le pregunt� a
Blanca que por qu� ella no hab�a gozado. Blanca le dijo que tranquila, que ten�a
la suficiente informaci�n en su cabeza como para darse un buen auto-homenaje esa
misma noche. Y supongo que as� fue.