Un d�a mi padre me llam� a para que le comprara unos
repuestos para su camioneta, me mando un giro, y me dirig� a la calle Diez de
Julio, donde se encuentran toda clase de repuestos. Al estar buscando los
repuestos, una mujer desde su auto, me llamo y me pregunto si pod�a conversar
conmigo. Me acerque a su auto. Era un auto bastante caro y ella, se notaba que
ten�a plata. Yo hab�a escuchado que en ese sector, las mujeres casadas van a
buscar jovencitos para tener sexo clandestino, pero nunca imagine que era
verdad.

Entramos a un local, ordenamos dos cervezas y continuamos
hablando. Era una mujer muy delgada, no como me gustan a mi, era rubia, unos 45
a�os aproximadamente, pero su estilo y su forma de ser me ten�an alusinado,
adem�s ambos sab�amos a donde iba la conversaci�n. Ped� la cuenta, y al momento
de pagar, ella me detuvo, me la arrebato y cancelo ella.

Mientras ella daba la vuelta para subirse a su auto, yo ya
sab�a de que se trataba, y la idea no me parec�a nada mal, incluso sin dinero de
por medio

Ella manejo directamente a un motel que estaba cerca, se
notaba que ya lo hab�a echo antes. Aparco el auto, entramos, sono el cit�fono y
ordeno dos cervezas mas ( eran las 3 de la tarde ). Nos sentamos en la cama,
bebimos las cervezas. Al terminar ella me la saca de la mano, se acerca y me
besa.

Seguimos bes�ndonos apasionadamente, sus manos me acariciaban
completamente, desabrocho mi camisa, beso mi cuello, mi pecho, yo siempre hab�a
querido estar con una mujer mayor y nunca fui t�mido, pero algo me detenia, algo
hac�a que ella llevara las riendas del encuentro. Deja de besarme, se para al
lado de la cama y lentamente desabrocha su blusa. Mi erecci�n en ese momento era
notable. Se saca la blusa quedando solo con un brasier blanco que ocultaban unos
peque�os pechos. Luego se saca sus pantalones, sin dejar de miararme. Una tanga
blanca, con encajes , me vuelve a besar y mientras lo hace, me saca la camisa y
luego los zapatos y pantalones. Mi bokcer apenas ocultaba la tremenda erecci�n.
Yo tendido de espaldas, ella mont�ndose lentamente sobre mi, besando mis
piernas, mi ombligo, acariciando mi verga con sus delgadas manos, acariciando su
cara contra mi dureza, suavemente mordiendo mi pija sobre la tela me hacia
estremecer. Lentamente me los fue sacando , encontr�ndose con mi verga a 100.

Ydiciendo esto, lentamente se fue tragando toda mi verga. La
chupaba muy suave para mi gusto, sin embargo la situaci�n de estar con una
completa desconocida y que mas encima me pagara por disfrutar con ella era
incre�ble. Mientras me la chupaba, le desabroche su brasier. La levante y la
bese, empec� a besar su cuello , sus pecho eran muy peque�os, sin embargo sus
pesones eran muy grandes, empece a besarlos fuertemente.

No me exitaba mucho besar sus pechos, pero a ella la volv�a
loca. La acomode entre mis piernas. Ella tomo mi verga y corriendo un poco su
tanga la dejo en la direcci�n correcta. Lentamente se la fui introduciendo, al
principio me costo, estaba muy estrecha aunque estaba muy mojada. La verdad
incluso me dolia un poco pero estaba muy rica. Notaba en su cara algo de dolor,
a si que no fui muy brusco. Poco a poco sus movimientos se fueron acelerando y
su concha se empez� a expandir. Mis manos la agarraban de la cintura ayud�ndola
a moverse a mi ritmo. A diferencia de mi novia, que era mas corpulenta, Myriam,
que asi se llamaba, se mov�a a mi antojo, no debe haber pesado mas de 48 kilos.
Me daba el lujo de levantarla con cada embestida que le daba. Su cara me
demostraba que estaba hozndo mucho. Yo la verdad tambien lo hac�a, pero no se
que me pasaba que no lograba exitarme por completo, aunque mi verga respondia al
100%. Mientras se la met�a, acerque mi boca a sus pechos y empec� a chuparlos
fuertemente. Era obvio que eso era lo que mas le exitaba. Le agarr� fuertemente
sus nalgas y aceler� mi ritmo sin dejar de besar sus pechos. Su respiraci�n
estaba al m�ximo...... gem�a de placer ... su orgasmo se acercaba. Me apret�
fuertemente y gritando de placer termino por acabar.

Yo no ten�a ganas de acabar aun, sin embargo, le hice creer
que tambien lo hac�a. Ella se recosto a mi lado boca abajo. Me mont� sobre ella
y nuevamente se la volv� a meter, pero esta vez montado sobre su espalda, y
mientras se la met�a, mis manos ayudaban a exitar su cl�toris. Ella solo
levantaba su culo, y mord�a la almohada mientras sus manos se agarraban a la
s�bana. La tome de la cintura y la hice ponerse en cuatro patas. Se la met�a
r�pidamente, mientras nos mir�bamos en el espejo.

Nuevamente finj� que hab�a acabado, pero ella no se daba
cuenta, estaba tan mojada, que no lo notaba..... segui asi un rato, luego dije
que quer�a frotarla entre sus pechos.

Ella se dio vuelta y montado sobre ella, empece a rozarle los
pesones con mi pene. Eso realmente la volv�a loca. Baje entre sus piernas, ella
me dec�a que no, pero no le hice caso y corriendo su tanga a un lado comence a
chuparle el co�o.

Nunca una mujer hab�a acabado en mi boca, fue una sensaci�n
extra�a, pero me exit� mucho, aguantando las ganas de acabr hasta que ella
terminara, me monte en su vientre y masturb�ndome entre sus peque�os pechos
termine moj�ndola entera. Ella con la boca cerrada gem�a de placer. Luego
recogiendo un poco con sus dedos, lo llevo a su boca y probo mi semen.

Salimos , ya hab�a obscurecido, eran como las 8 de la tarde,
me llev� a mi pensi�n y antes de bajarme, me pas� $ 70.000 .

Le entregue el numero de tel�fono de la pensi�n y se marcho.
Era incre�ble lo que hab�a vivido. Pense que nunca mas me llamar�a, pero luego
de una semana........ pero eso es otra historia.

alexander_