SANDRA, MI PUTITA COLEGIALA
Este relato es de ficci�n y jam�s ocurri�. Agradezco a
.com que me hayan introducido en su amplia e imaginativa lista de
relatos. Espero que os guste el m�o.
Por unos momentos cre�a que la jornada laboral del Mi�rcoles
iba a durar todo el d�a. Se me hicieron las 8 horas largu�simas. Cuando me
march� de la oficina eran las 5 de la tarde y a esta hora sal�an las lindas
nenas del instituto que estaba al lado de mi lugar de trabajo. Era un instituto
donde las chicas vest�an con uniforme escolar: Su faldita de tablas azul marina,
blusa blanca, corbata, zapatos y panties blancos para proteger sus delicadas y
suaves piernas del fr�o. Estas chicas a m� particularmente me volv�an loco, por
lo que decid� aligerar el paso para intentar verlas. Cuando llegue me pare y me
sent� en un banco que se encontraba enfrente de la salida del instituto. Estaban
saliendo las colegialas que tuvieron la suerte de que el profesor las dejara
salir antes de tiempo. Al rato son� el timbre y numerosas chicas comenzaron a
salir. Algunas eran muy provocadoras, mov�an su culito de forma sugerente, otras
iban con la carpeta en la mano a la vez que con la otra mano se met�an en la
boca un bol�grafo y lo mord�an, otras llevaban la faldita bastante arriba,... Mi
polla se hab�a puesto dura al ver aquellas preciosidades y empec� a frot�rmela
un poco por encima del pantal�n. Cuando desfilaron todas las nenas decid�
marcharme a mi casa para hacerme una paja mientras pensaba en una de estas
lindas escolares.
Mientras iba andando a�n escuchaba a alguna chica gritar por
all� cerca. De repente oigo una voz detr�s de m�. Era la voz de una chica y me
hab�a dicho:
- �Perdona se�or!
Yo me gir� y vi una cara conocida. Era la hija de mi jefe:
Sandra. Estaba preciosa vestida de colegiala. Ten�a 15 a�os pero pese a su corta
edad mostraba por debajo de su blusa unos pechos medio formaditos, tal vez para
una 90. Tambi�n ten�a un culo bien puesto, unas piernas para deleitarse y un
rostro hermoso. Estaba algo maquillada y aparentaba mas edad de la que ten�a.
Quiz�s unos 17. Era rubia y de estatura normal. Una aut�ntica dulzura. Cuando me
volv� antes de mirarla le dije:
- Dime.
Creo que se asust� al ver quien era la persona a la que hab�a
llamado. Ella se alej� un poco de m�:
- Ohh, nada. D�jalo gracias.
De repente la mir� de arriba a abajo y vi detr�s de ella a
unos cuantos amigos que no eran de su instituto porque solo era de chicas. Eran
unos chicos que la hab�an estado esperando a la salida ya que me fij� en ellos
cuando vi salir a las chicas de clase. Me fij� en su mano. Llevaba algo.
- �Qu� haces con eso? �le pregunt� tras ver que llevaba
cigarrillos en la mano.
- �Yo? Nada. D�jeme en paz.
- �Nada? Dame eso. Sabes que si tu padre se enterara te
castigar�a de por vida.
Fue entonces cuando se acerc� un amigo de ella y le dijo a
ella:
- Sandra, �pasa algo? �Qui�n es este t�o?
-Soy su padre �le dije. Ella no desminti� a su amigo lo que
dije seguramente porque pens� que si lo hiciera su verdadero padre se terminar�a
enterando inevitablemente a trav�s de m�- Vamos a casa hija- Sandra fue a su
grupo de amigos para coger la mochila y decir adi�s a sus amigos.
Mientras �bamos camino de su casa me pidi� que no le contara
nada a su padre. De todas formas yo no estaba por la labor y menos a�n cuando le
quit� los cigarrillos y vi que uno era de tabaco solo y el otro mezclado con
marihuana. Sandra me cont� que pensaba pedirme fuego con el cigarro de tabaco
para luego poder encender con su grupo el de marihuana y que no esperaba que
casualmente fuera yo la persona a la que le pedir�a fuego.
- Eso no te quita ninguna culpa, guapa.
- Bueno, pero le prometo que no lo volver� a hacer nunca m�s.
- Claro y he de creerme eso.
- Se lo estoy prometiendo. �Por favor!
- Ya ver� ma�ana.
- Ser�s cabr�n. Har� que mi padre te despida.
- Mira chiquilla no empeores las cosas.
En ese justo momento de conversaci�n llegamos a su casa. Ella
abri� la puerta con llave y me ofreci� entrar en su casa. Me pregunt� que si
pod�a hacer algo para que no se lo contara a su padre. Me ofreci� incluso
dinero. Parec�a importante para ella que aquello no llegara a o�dos de su padre.
Seguramente porque el hijo de puta era una persona incre�blemente autoritaria y
Sandra tem�a el castigo que pod�an imponerle en casa. La verdad es que empez� a
darme algo de pena la pobre chica, as� que le dije:
- Bueno por esta vez te vas a salvar pero como te vuelva a
ver con tu grupito de amigos fumando marihuana te aseguro que no te va a salvar
ni tu �ngel de la guarda, guapa. Adi�s.
- �Le parezco guapa? �me lo ha dicho ya dos veces.
- Jajaja. Es algo que digo mucho.
- �Le dice guapa a todas las mujeres? Vaya, qu� contentas
deben estar con usted.
- Se hace lo que se puede.
- Hasta que se case y solo pueda contentar a su mujer �no?
- Anda ni�a d�jalo.
- No soy tan ni�a. �No le parece?
- No crees que no deber�as hablar as� en casa de tus padres.
Podr�an o�rte.
- Mis padres est�n de viaje pas�ndoselo muy bien. �Vaya con
mi jefe. �Conque estaba enfermo en cama con gripe?- Seguro que estar�n
haci�ndome un hermanito o hermanita.
Ya me hab�a puesto la cr�a la polla dura. Eran muy
alentadoras sus palabras. De repente se dirigi� a m� y me dijo al ver que
dudaba:
- �Que te pasa? �No tienes cojones? �Sandra me cogi� de los
huevos y me los manose� y me sonri�. Joder, menuda puta colegiala que ten�a
enfrente. De repente me baj� la cremallera y me sac� la verga.
- Que poll�n tienes cabr�n. �Justo ah� empez� a masturbarme
con la mano y mirarme con esa carita de ni�ita pero ahora en vez de inocente
parec�a una aut�ntica viciosa. Entonces, empez� a pasarme la lengua por mi
polla. Comenz� a chuparla a leng�etazos hasta que se la meti� toda en la boca. Y
empez� a agitarme el pene de arriba a abajo.
- Aghhh, sigue puta. Quiero correrme en tu cara. Zorra. Que
bien lo haces �ella mientras segu�a haciendo su trabajo- Ummm, me voy a correr
mi amor.
- C�rrete en mi cara. Ll�name de tu leche. Ll�name toda -en
ese momento sali� disparado el semen de mi polla que cay� en su boca y en su
blusa.
Cuando termin� me limpi� bien mi pene de cualquier resto de
semen. Qued� impresionado por como mamaba la muy puta. Era una aut�ntica
profesional.
- �Te ha gustado?
- Ummm si, peque�a. Eres maravillosa.
- Ahora te toca a ti. Yo tambi�n quiero disfrutar y sentir tu
lengua en mi conejito.
Sandra me cogi� de la mano y me llev� al cuarto de sus
padres. All� se tumb� en la cama, se quit� los zapatos y los panties, se abri�
de piernas y se baj� las braguitas ense��ndome as� una hermosa rajita casi sin
pelitos. Se ve�a tan linda. No sab�a muy bien si deb�a hacer aquello porque
estaba en casa de mi jefe y nadie pod�a asegurarme que no entrar�a en cualquier
momento, pero Sandra ten�a un co�o precioso y adem�s siempre hab�a so�ado con
tener relaciones sexuales con una colegiala sobre todo si lleva el uniforme
escolar.
- Venga cabr�n. M�mame el co�o. Y tragate todos mis juguitos
como yo he hecho contigo.
No dud� m�s. Me acerqu� a su joven chochito que ol�a a pura
hembra y empec� a chup�rselo sin parar. Jugaba mi lengua con su cl�toris y con
sus labios vaginales. De vez en cuando le met�a un dedo para estimularle el
punto G y ella se pon�a a gemir como nunca hab�a escuchado en una chica. O�rla
pegar esos grititos me pon�an a�n m�s de forma que intensificaba mi acci�n sobre
su vagina. Ella me cogi� de la cabeza y la apret� contra su sexo que cada vez
estaba mas rojo y mas mojado.
- Aggh, no pares por favor, c�memelo todo. Ahhh creo que me
voy a... a...
Sandra tuvo en ese momento el primer orgasmo de su vida seg�n
me cont� luego. Su co�o se puso chorreando y sali� de �l un l�quido que me
impregn� la cara y que seguidamente me tragu� para complacerla. Entonces la bes�
comprobando ella el gusto que ten�a su conejo ya que me pidi� que lo hiciera
para probarlo.
Pero claro, dada esta situaci�n, yo quer�a m�s. Al ver como
hab�a disfrutado la colegialita ante mi comida de co�o, mi polla se puso
dur�sima de nuevo y yo deseaba foll�rmela a toda costa. Era mi sue�o, cogerme
una colegiala.
- �Has hecho alguna vez el amor?
- Nooo �me contest� con carita de ni�ita buena- Jam�s, s�lo
he chupado pollas aunque mas peque�as que la de usted.
- �Que te parece si te ense�o? Te va a encantar preciosa.
- Bueno, pero no me haga da�o por favor.
- �Tienes un preservativo por ah�?
- Pues... No. Mi padre si tiene pero no s� donde los guarda
�a mi eso me daba igual, quer�a foll�rmela de todas formas. Me arriesgar�a. De
todas formas decid� usar por si acaso el m�todo de la marcha atr�s y as� se lo
echar�a en su cara otra vez.
- No importa guapa. No pasa nada. Tu rel�jate �ella asinti� y
decidi� confiar en m� de forma que desnud� r�pidamente, le quit� la corbata y le
desabroch� la blusa. ���No llevaba sujetador!!! La muy puta iba a clase sin
sujetador y yo no hab�a reparado antes en ello. Mi pene iba a estallar al ver
semejantes pechos. Eran preciosos, perfectos, redonditos, con unos pezones
duritos y rositas. Sin pensarlo empec� a besarle el cuello. Suavemente para que
su rajita se mojara de nuevo. Ella se relaj� bastante y de vez en cuando lanzaba
gemidos en forma de susurro. Luego le chup� las orejas y se las mord�
suavemente. Y entonces fij� mi objetivo en sus pechos. Jug� mi lengua con los
pezones, haciendo c�rculos, se los mord�a, se los chupaba,... Y no s�lo los
pezones... Todas sus tetas eran m�as. No par� de analizar esas dos monta�itas
que me pon�an a 100. A la misma vez le empec� a meter dos dedos por debajo de su
falda y comenc� a masturbarla. Ah� su respiraci�n se agit�. Me llev� largo rato
as� y su co�o estaba una vez m�s chorreando. En ese momento la penetr�. Me
coloqu� encima de ella, le sub� la falda e introduje mi pene en su agujerito.
Entonces sent� como su himen se opon�a a que mi verga siguiera su camino. Poco a
poco fui meti�ndosela mientras ella me miraba con cara de esperar algo. Y ese
algo lleg�. Su himen cedi� y Sandra me dijo que le dol�a. Le dije que era
normal. Que ya no hab�a vuelta atr�s. Que ten�a que follarla ya. Ella me dijo
que se la sacara. Pero me dio igual. Aunque se resisti� ech� un polvazo
incre�ble. Al principio se podr�a decir que fue una aut�ntica violaci�n, pues no
se dejaba pero cuanto m�s se la met�a y se la sacaba menos resistencia opon�a.
Realmente estaba encantada con el polvo que est�bamos echando. Nos besamos.
Sent� una l�grima en uno de sus ojos provocada por el dolor anterior. Sus
pechos, que estaban a la vista a pesar de que llevaba la blusa blanca, se mov�an
de arriba a abajo. De vez en cuando se los tocaba. Ten�a cara de puta, con la
boca abierta chillando. R�pidamente cambiamos de posici�n. Sandra empez� a
cabalgarme y desde ah� observaba mejor el vaiv�n de sus pechos y su uniforme de
colegiala, del que s�lo quedaba su falda subida y su blusa manchada de mi semen.
Luego vino mi posici�n preferida: la de perrito. Se puso a cuatro patas y desde
ah� se la met� en lo m�s hondo de su co�o. Mi polla estaba algo llena de sangre
debido a la ruptura de su himen pero me daba igual. Segu� folland�mela como si
se tratara de una perrita en celo. Empec� a jugar con su culito y su ano.
Est�bamos los dos locos de placer:
- Ahhhmmm. Eso es. Sigue as�. Uhhhffff. Dame m�s. F�llame.
Soy tu puta. Me siento como una verdadera... Ammmm... Zorra...
- Toma Guarra. �Te gusta? Joder, pero que viciosa eres. �Esto
es lo que te ense�an en clase putita m�a?
Ella se iba a venir, no s�lo porque lo dijo a gritos, tambi�n
porque se notaba su co�o muy mojado y a mi tambi�n me faltaba poco. Poco despu�s
en uno de los gemidos de Sandra se corri�:
- Ahhh, dame m�s fuerte hijo de puta. Me corro, dame m�s.
Ahhh, siiii, ummmmmmmm...
Yo ante tal escena no pude aguantar m�s. A los pocos segundos
me corr�... Y no la saqu� de su co�o. Estaba tan excitado que no quer�a sacarla
de ah� y me pon�a mucho m�s en el correrme en el interior de una peque�uela
colegiala de 15 a�os y que adem�s era la hija de mi jefe. As� que termin� dentro
de su concha y ella sinti� como mi leche caliente entraba en ella.
Ella me limpi� la polla de nuevo con su boca y vio como su
co�o estaba a�n echando un poco de sangre. Le expliqu� el porqu� y pareci�
despreocuparse ya que inmediatamente cambi� de tema y me dijo que le hab�a
gustado mucho que le fuera tocando el culo:
- �Cabr� tu polla en mi culo?
- Claro que s� pero eso es m�s doloroso, te doler� mucho. Yo
nunca se lo he hecho a ninguna mujer por detr�s porque dicen que duele mucho. Tu
s�lo tienes 15 a�os, preciosa.
- Me da igual. Quiero sentirlo. Me da igual ya lo que duela.
Quiero que me jodas por el culo. Que lo he visto en pel�culas porno. Quiero que
me rompas el culo.
La verdad es que yo estaba deseando. ���Por el culo a una
nenita de 15 a�os!!! Esto era ya demasiado. Mis sue�os ya se hab�an cumplido con
foll�rmela por el co�o y ahora ella quer�a por detr�s.
- Est� bien mi vida. Te romper� el culo. No vas a poder
sentarte en un mes �Mi polla ya estaba erecta. Se me puso as� al o�r que Sandra
quer�a recibir por el culo. Generalmente con dos corridas termino muy cansado,
pero hoy estaba muy excitado con la cr�a y no hubiera dejado de correrme dentro
de ella todo el d�a.
Ella se puso otra vez en la posici�n de perrito.
- Venga. Atravi�samelo.
Lentamente empec� a introduc�rsela. Primero la cabeza de mi
pene.
- �A qu� esperas? M�temela de una vez entera.
�Dios! Esta chica era una puta aut�ntica. Yo pens� hacer caso
omiso de lo que me hab�a dicho porque le iba a doler mucho, pero ya que quer�a
sentirse una buena zorra decid� complacerla y le met� en un empujoncito toda mi
polla en su traserito.
- Aggghhhhh. Aayyy. Cabr�n �mi polla se encontraba totalmente
aprisionada en su ano y Sandra gritaba con fuerza por el dolor que aquello le
supon�a- Ahhh, dame fuerte. Ay, j�deme.
Parec�a que le importaba poco el dolor de forma que empec� a
joderla despacio. A los minutos ya no se quejaba. S�lo me dec�a que le diera m�s
fuerte. Empec� a foll�rmela de forma m�s violenta y poco despu�s le introduje
dos dedos en su co�o mientras ella se frotaba el cl�toris con la mano izquierda.
- Ahhh, que gustazo. Como me gusta. Me siento como una perra.
Ummmm, que polla tienes.
Me llev� bastante tiempo foll�ndomela por detr�s. Era
maravilloso ver como la penetraba por el ano y como se mov�a Sandrita. Y adem�s
escuchando sus gemidos suaves, agudos,... Me estaba excitando sobremanera, y
avis� que iba a correrme. Ella me dijo casi sin aliento que estaba a punto de
tener un nuevo orgasmo tambi�n. Le estaba dando fort�simo. Ahora le doler�a al
estar sentada en clase. Pobre colegiala. Parec�a estar a punto de correrse y no
me equivoqu�:
- Me corro. Ahhhmmm. M�s fuerte. Destr�zame el culo. No dejes
de tocarme el co�o. Ahh, me viene... Ohh si. Aaaaaaaaahhhhhhhhhh, uhmmm,
siiiiii...
Justamente ah� termin� Sandra mientras yo segu�a d�ndole por
el trasero. Ten�a ya pensado donde iba correrme en esta ocasi�n. Evidentemente
ser�a en su culo. Siempre hab�a deseado llenarle el culo a una chica de mi
semen. Y ahora que ten�a la oportunidad no iba a desaprovecharla. As� que cuando
acab�, que no tard� mucho desde que ella hiciera lo mismo, vert� toda mi corrida
en su ano.
- Ummm, que rico. Que Calentito �dec�a ella mientras los
l�quidos brotaban de mi pene. Despu�s saqu� mi polla y la pas� por sus pechos de
forma que los llen� de los restos de mi semen. Cuando estaba ya m�s o menos
limpia se la met� en la boca para que terminar� de sacarle brillo.
Nos quedamos en la cama durante unos minutos sin decir nada.
Ella se levant� y se fue de la habitaci�n. Le pregunt� que ad�nde iba y me dijo
que ahora volv�a. Al minuto volvi�. Llevaba una cinta de v�deo en la mano. La
introdujo en el v�deo que ten�a en su cuarto y que estaba debajo de la
televisi�n. La rebobin� y me dijo
- �Sabes qu� es? Una pel�cula porno. Esta a�n no la he visto.
Seguro que est� bien �cuando la pel�cula empez� ella se tumb� otra vez en la
cama- �Sabes? �me dijo mirando al techo- Por las noches cojo una porno de mi
padre y �l y mi madre creen que duermo. Estas pel�culas me encantan porque se me
moja mucho mi conchita y a veces me toco un poco, pero jam�s tuve un orgasmo.
Gracias por ense�arme cositas nuevas profe �en ese momento me dio un beso en la
boca y juntos vimos la pel�cula.
Durante la pel�cula al principio estuvimos callados pero ella
comenz� a tocarse por debajo de su falda ya que seg�n me dijo no aguantaba m�s.
Yo tambi�n empec� a masturbarme. De vez en cuando nos mir�bamos y nos bes�bamos.
Ella tuvo dos orgasmos m�s y yo s�lo uno. Me cost� lo m�o. Era ya el cuarto.
Cuando me corr� puse mi pene sobre su faldita de colegiala y se la llen� toda de
semen. Ella no dijo nada. Solo sonri� conmigo.
Cuando termin� la porno mir� la hora. ���Eran las nueve y
cuarto!!! Entonces le dije a Sandra que me iba. Mientras me vest�a ella me dijo:
- �Sigo pareci�ndole una ni�a?
- No guapa. Eres toda una mujer. Pero no creas que me he
olvidado de que pill� con un cigarro de marihuana. No he cambiado mi opini�n
pese a la tarde maravillosa que me has hecho pasar.
- Bueno, vale. Ya le promet� que no lo volver�a a hacer.
- Eso espero guapa. No estropees tu vida que tienes mucha por
delante. Bueno me voy ya. Ah, una cosa antes. �Har�s una cosa que me pone mucho
ma�ana?
- �El que?
- Que vayas ma�ana al instituto como est�s ahora. Con la
blusa y la falda manchadas de mi semen, sin sujetador y sin braguitas.
- Vale. Pero los panties son obligatorios y los profesores
ver�n que no los llevo, as� que si los llevar� �vale?
- Bueno los panties s�. Ma�ana vas a ir al instituto como una
aut�ntica puta.
- S�. Y tambi�n ir� llenita de su semen. En mis pechos, mi
culo y mi conejito.
Tras esta conversaci�n me desped� de ella con un beso
apasionado y me fui de all�. Llegu� a mi casa a las diez menos veinte. Por
suerte vivo solo y nadie me preguntar�a que habr�a hecho hasta esas horas. Cen�,
vi un poco la televisi�n, me acord� de Sandra y me dorm� pensando ya en el duro
d�a de trabajo que me esperaba al d�a siguiente en la oficina.
Al d�a siguiente fui a recoger a Sandra a su instituto y me
cont� en la cama de sus padres (Era Jueves y sus padres llegaban el Domingo) que
uno de sus profesores se dio cuenta que no llevaba braguitas por lo que la llam�
antes de que saliera de clase para quedarse hablando con ella de esa cuesti�n.
El profesor le rega�� y ella le bes� la boca para terminar follando con �l. Pero
que puta. El profesor seguro que disfrut� como nunca. Con el morbo que daba
cogerse a Sandrita. S�lo con ver esa preciosa carita de ni�ita buena, inocente y
t�mida uno s�lo deseaba darle por todos sus agujeritos... Y yo lo consegu�,...
Vaya si lo consegu�...
Y a�n sigo foll�ndome a esta preciosa chiquita cada vez que
quiero en mi casa, sin que nadie lo sepa, salvo algunas de sus amigas de clases
que por lo que Sandra me dice est�n deseando de ser desvirgadas y sentirse tan
puta como ella se sinti� aquel d�a. Tal vez me decida a contarles nuevas
experiencias con Sandra y sus amigas si es que vienen alg�n d�a...
AUTOR: Ra�l P. R.