Relato: Viaje a Medellin (2)
MI VIAJE A MEDELLIN II
Aquella noche llegamos tarde, aproximadamente eran las 2:30
PM cuando llegamos a la casa; en el camino no hac�amos mas que re�rnos de
nuestra alocada experiencia, hasta que punto hab�a llegado, solo por el hecho de
satisfacer mis deseos y mis fantas�as. Al estar ya acostados, me pase a la cama
de Juan Camilo, esa noche no la olvidare, no hubo sexo, solo quedamos los dos,
yo de espaldas a el, el me tenia con sus brazos agarrado de tal forma que me
pegaba a su cuerpo, me fund�a en el, como si solo fu�ramos uno, me susurraba al
o�do, su voz era muy varonil grave con su t�pico acento de sicario paisa �
parcero, de verdad que lo extra�aba guebon, jueputa no se en que horas se me
meti� en la cabeza- hubo un silencio corto- pero te digo una cosa, no se me va a
salir tan f�cil- otro silencio- hoy termine con Laura ( la novia), le dije que
termin�ramos y ni siquiera me di cuenta de lo que estaba haciendo, termine una
relaci�n de dos a�os, � y sabes que es lo peor? Que yo creo que es por vos- y al
terminar de decir esto me dio un tierno beso en el cuello; todo el tiempo yo
hab�a permanecido inm�vil, sus palabras no se porque calaban mas y mas hondo en
mi, simult�neamente el hablaba, yo iba sintiendo algo que me daba miedo aceptar,
esta no era la primera vez que dorm�a con un hombre, ya varios me hab�an dicho
cosas aun mejores y con todas las intenciones de realizarlas, hombres que de
verdad me amaron, pero yo soy de los que se enamoran poco, prefiero disfrutar el
placer que me pueden brindar mis a�os de juventud, no quiero compromisos; fue
por eso que pens� en pararme de esa cama, zafarme de esos brazos e irme a dormir
a mi colchoneta, pero no fui capaz, me rend� ante el calor que me estaba
brindando y ahora no se si ese fue mi error. Al d�a siguiente, cuando est�bamos
desayunando, est�bamos todos sentados en la mesa, me sent�a muy incomodo, al
lado derecho estaba mi primo, al frente mi t�o que me miraba descaradamente,
aunque mi primo ya se hab�a dado cuenta de que hab�a estado con alguien fuera de
el y de Felipe no sabia que era su mismo pap� y por el momento no se lo iba a
decir.
La verdad es que esta maricada de la afici�n por el riesgo es
como de familia, porque mi primito Juan es un hijueputa ocioso, est�bamos bien
desayunando cuando de pronto siento una mano que por debajo de la mesa me
aprieta el banano fuertemente, yo sorprendido pego un brinco que l�gicamente
atrae todas las miradas por lo cual el contacto de la mano desaparece, pero no
paso mucho cuando vuelvo a sentir la mano izquierda de mi primo intentando
meterse por entre el el�stico de la pantaloneta que llevaba y el slip que tenia
abajo, cuando lo logro empez� a manosear todo mi bulto mientras el segu�a
comiendo como si nada, pero la sorpresa fue mayor cuando introdujo su mano entre
mi slip, sent�a como su mano tocaba mis bolas y se enredaba en los pelos, luego
empieza a jalar de la capucha y con un movimiento de arriba hacia abajo, mi
verga no se demora mucho en reaccionar y empieza a crecer r�pidamente, el hecho
de estar pajeandome en frente de todos sin que nadie se lo imagine me excitaba
hart�simo, yo segu�a comiendo mientras sent�a como me apretaba la verga y su
mano empezaba a moverse mas r�pido, en tal forma que el movimiento empez� a ser
evidente y por supuesto mi t�o se dio cuenta y tosi� en forma simulada, a lo que
yo respond� obligando desgraciadamente a que esa mano invasora saliera de mi
ropa, pero que hijueputa calentada la que me hab�a dado mi primo, a lo cual me
toco buscarle soluci�n.
Como era s�bado mi t�o no trabajaba y se quedaba todo el d�a
en casa, seguramente acostado viendo televisi�n en su cuarto, fue por eso que
aprovechando un descuido de toda la familia me le met� en la habitaci�n, ah�
estaba, acostado boca arriba viendo televisi�n, sin camisa, y con unos
pantalones de jeans cortos, se le marcaba el paquete, gordo, grande, apetecible,
apenas me vio entrar saco su risita maliciosa, yo de desconfiado cerr� con
llave, la verdad hab�an por lo menos siete personas en la casa y solo dos
televisores, seria muy probable que alguien entrara, y que tal vez pudiera ser
su esposa; pero eso a mi no me importo, y parece que a el tampoco, porque me le
lanc� a la cama y lo bese y el me respondi� metiendome la lengua hasta el fondo
de mi garganta . estaba yo encima de el, sent�a olor a sudor, todav�a no se
hab�a ba�ado y su barba segu�a igual que el d�a anterior, sucia y descuidada,
todo esto me pon�a mas caliente, empec� a besarle el cuello, baje mas y encontr�
sus tetillas, negras, peludas y erectas, las lam� con un gusto; segu� bajando y
me encontr� con su ombligo y su camino de pelos a su verga, a medida que lam�a
el iba desabroch�ndose el pantal�n y bajando el cierre, como si mi lengua fuera
la llave para abrir ese manjar, de nuevo estaba en frente de el mismo slip del
d�a anterior, ol�a semen tal vez por la follada que hab�amos tenido o talvez
porque se echo una paja pensando en su sobrino. Le quite el slip y la bermuda de
jeans, y me encontr� de nuevo con su verga, oscura, reluciente, totalmente
erecta, no dude mucho y me la met� en la boca de tacada, me la llevaba con unas
tragaderas profundas y a un ritmo enloquecedor, el se contorsionaba de placer,
en esos momentos y sin sacarme su m�stil de mi boca me empec� a quitar la ropa
hasta quedar desnudo, mi pija erecta al m�ximo, inmediatamente me coloque en
posici�n de 69, yo quedando arriba, lo empec� a follar por la boca, sent�a como
su lengua recorr�a todo mi tronco y como relam�a el glande, lo hacia muy bien,
seguro que ha de haberse chupado unas cuantas mas, este no es trabajo de un
novato, empec� a mamar esa verga a un ritmo mas r�pido, mi boca sub�a y bajaba
haciendo que su pija entrara y saliera r�pidamente, sumado a esto el empez� a
subir y bajar sus caderas como si me estuviera penetrando, poco aguanto y poco
despu�s empez� a soltar leche como si fuera vaca de orde�o, empap�ndome la cara
en semen, el cual r�pidamente relami� con su lengua dej�ndome la cara nuevamente
limpia, pero yo no estaba satisfecho y me ten�an que cumplir una promesa.
Bueno t�o, yo creo que llego la hora de que cumplas tu
promesa- le dije
Yo soy hombre de palabra sobrino, me decis no mas como me
coloco y me la entierras hasta el fondo, que desde hace rato que tengo ganas
de esa tranca, y me da envidia que Juan Camilo y sus amigos sean los �nicos
que se hayan tragado con el culo esta delicia.
Diciendo esto, le ped� que se colocara en cuatro, dej�ndome
expuesto ese culo peludo, de nuevo yo empec� a meterle lengua mientras meneaba
su verga que nuevamente empez� a tomar forma. Luego yo me acomodo detr�s de el y
coloco mi glande en todo su esf�nter, el cual se contrae ante la sola presencia
de mi m�stil en la entrada de su recto.
t�o, te va doler, y te va doler mucho, as� que si queres
gritar, marica te va tocar aguantarte, porque no podes hacer mucha bulla.-
le dije, mientras empujaba lentamente sin todav�a introducir nada en el.
Guebon, me la vas a meter o que, no me hagas esperar mas,
metemela hasta el fondo y me apagas la calentura- respondi�
Ay t�o, vos si estas muy rico, tenes el culo apretadito y
caliente- le dec�a mientras empujaba lentamente y sent�a como mi verga se
habr�a paso en su interior.
Segu� empujando hasta que sent� mis huevos tocar los de el,
mire hacia abajo y vi como mi verga hab�a entrado hasta el m�ximo y como se
enredaban los pelos de su culo en los de mis bolas y mi verga, espere un momento
para que se amoldara a la sensaci�n y empec� un bombeo sobre las nalgas de mi
t�o, mientras me com�a ese culo con cada embestida el empujaba su cadera hacia
mi, estuvimos as� como cinco minutos, sent� que no durar�a mucho y que me
correr�a, saque mi verga y se la ofrec�, inmediatamente el se la llevo a la
boca, la succiono hasta que me corr�, saque bastante leche, no se de donde, ya
hab�a descargado mucha en los d�as anteriores, se la trago toda pero de sus
comisuras se le sal�an unos cuantas gotas, baje y nos besamos compartiendo mi
semen, as� nos quedamos otros dos minutos, hasta que me vest� y sal� de la
habitaci�n con mucho sigilo sin que nadie me viera; dejando a mi t�o tirado en
la cama y al parecer todav�a caliente porque se quedo intentando meterse el
control del televisor, aunque dudo mucho que lo haya logrado (por experiencia
propia). El resto del d�a me la pase con Juan, estuvimos recorriendo el barrio,
saludando a antiguos amigos que hace rato que no ve�a, el descaradamente me
cog�a el culo por la calle o de repente me cog�a la mano como no se cogen los
primos, lo ve�a muy entusiasmado y eso no me gustaba. Ya por la noche llegamos a
la casa de una amiga y nos encontramos con Laura la exnovia de mi primo, por lo
cual tratamos de irnos pero no nos dejaron y nos invitaron a seguir. Yo a Laura
tambi�n la conoc�a desde hace rato y aunque no �ramos los mejores amigos si
hab�amos tenido una buena relaci�n; ella aprovechando que Juan Camilo deb�a ir
al ba�o, llego hasta donde me encontraba sentado y empez� a conversarme:
Vea pelao, yo se que usted es un gran amigo de Juan,
parce ay�deme- me dec�a mientras sus ojos empezaban a encharcarse- yo no se
que fue lo que paso, de repente el llego diciendo que tenia que terminar
conmigo, casi me muero cuando me lo dijo, yo a el lo adoro, vos sabes.
Lo que pasa es que yo tambi�n me sorprend� cuando me
cont� que te hab�a terminado- respond�
A mi me huele a que hay alguien mas, yo le ped�
explicaciones, le pregunte si hab�a otra vieja y se quedo callado- hubo un
corto silencio- � vea parce, yo se que usted sabe quien es, ay�deme por
favor, yo quiero saber quien es la perra?, porque de ser as� yo me vengo y
me acuesto con el primero que se me cruce.
No alcanc� a responder cuando Juan sal�a del ba�o y laura en
un arrebato de inmadurez me cogi� a la fuerza y me chanto un beso, no hice sino
que sorprenderme y salirme de ah�, abr� la puerta de la casa y me fui, y tras de
mi sali� Juan.
Ja, ja, ja, que tal la rid�cula, crey� que yo iba a caer
en semejante estupidez, si mas maricon que vos no ah� nadie- me dijo cuando
me alcanzo- pero besa bueno si o no?
Vea parce, a mi no me parece como muy gracioso lo que le
esta haciendo, luego yo me voy y volves con ella, Laura esta desesperada y
ni idea de que el novio le gusta que le metan tranca por el culo... a mi eso
me parece como jugar con ella �no lo ves as�?- le respond� con un tono ya
subidito.
Y a vos quien te dijo que yo voy a volver con ella, no,
ni loco. Es que lo que siento por vos esta fuerte, como que me estoy
enamorando- me dice mientras me mira directamente.
Al decirme esto me pare, lo agarre de los hombros y lo mire a
los ojos
Vea guebon, no se ilusione, yo no quiero nada serio, la
estamos pasando una chimba as� como estamos, yo solo quiero sexo, me quiero
coger a tantos manes como sea posible, no me quiero enamorar y no lo voy a
hacer, quiero que eso le quede claro.- le dije.
El se quedo callado y como que entendi� muy r�pido. �bamos
caminando cuando de repente nos encontramos con un amigo de Juan que yo no
conoc�a. El estaba en su carro y saludo efusivamente a Juan, por lo cual nos
acercamos; Juan me lo presento, se llamaba Diego y era un papazote, unos 23-25
a�os, moreno, acuerpado, cabello casta�o corto, una cara perfecta, ojos caf�s y
unos labios que se me antojaban. Al parecer hab�a sido compa�ero de Juan en el
ejercito y ahora estaba trabajando en el comercio, inmediatamente me percate de
su bulto, que se marcaba en el pantal�n que llevaba. Nos invito a que lo
acompa��ramos a su apartamento, que all� nos tom�bamos unos tragos, yo me monte
atr�s y Juan se fue en el asiento del copiloto. No pod�a dejar perder esta
oportunidad y empec� a actuar.
as� que se conoc�an desde el ejercito, no- Le dije
Si, manten�amos juntos para arriba y pa abajo, este
guebon casi me hace expulsar, me incitaba a la indisciplina- me respondi�
Diego
Ah, o sea que manten�an cogiendo a todas horas, la has de
haber pasado de lo lindo primito con este man- me aventure a decirles sin
ning�n miedo al rechazo. En la vida hay que ser lanzados o si no nunca
logras lo que quieres, pocas veces la monta�a va hacia ti, eso lo hab�a
aprendido desde hace rato.
Primo, por favor- me grito Juan Camilo, mientras Diego
segu�a con la mirada al frente como evitando la pregunta.
Pero que pasa, primo? Es que no te gusta este man, si
esta buen�simo- mientras le dec�a me le acercaba al o�do- si la podemos
pasar de lo lindo con este guebon, yo se que el nos hace el favor- se lo
dije pr�cticamente susurr�ndole al o�do.
De verdad que corr�a el riesgo de que el mancito reaccionara
y me mandara con la quijada rota para la casa, pero no, al parecer era de los
nuestros, ya que inmediatamente cogi� la mano de Juan y se la llevo al bulto,
mientras yo le met�a la mano por la camisa y le pellizcaba los pezones, recorr�a
todo su pecho como buscando algo y bajaba hasta introducir uno de mis dedos por
su pantal�n, su bulto hab�a crecido considerablemente y se ve�a que era una
bestia descomunal la que se guardaba. Al llegar a su apartamento no aguantamos
mas, lo tire encima de la cama quedando de espaldas y yo me tire encima de el,
lo cabalgaba r�tmicamente encima de el sin quitarnos la ropa, frotando su bulto
con mi culo, sent�a como esa masa de carne quemaba al contacto con mi pantal�n,
lo miraba directamente a los ojos se le ve�a un brillo de lujuria en su mirada,
lo intente besar pero se resisti� y volteo la cara. � d�jese guebon que le va a
gustar se lo aseguro- le dije, volv� a intentarlo, esta vez pude contactar con
sus labios pero no me dio paso a su boca, la manten�a cerrada, estaba haci�ndose
el dif�cil el muchacho, saque mi lengua y le lam� la barbilla, luego el cuello y
mord� su oreja, mientras segu�a con mi movimiento en su bulto, volv� a su boca,
y ante la insistencia abri� sus labios y por fin hice contacto con su lengua,
c�lida, h�meda, y le gust� porque empez� a besarme apasionadamente, ahora abr�a
su boca de par en par, me llenaba de gusto metiendole mi lengua hasta el fondo
de su garganta; mientras eso mi primo que hasta el momento solo hab�a estado
observando decidi� participar, empez� quit�ndole los zapatos a Diego, luego el
pantal�n y lo dejo en b�xer, tra�a unos azules largos pegaditos, ahora si ve�a
que de verdad tenia un bulto descomunal, estaba totalmente erecto y ya su tela
lucia unas peque�as gotas dadas por la excitaci�n previa, mi primo le bajo los
b�xer y ante el quedo una verga como de 23 cms, ancha, con venas a los lados un
poco torcida a la izquierda y de la cual ya brotaban jugos preseminales,
inmediatamente mi primo empez� a succionar, saque y entre la verga a la boca de
Juan mientras yo le daba un placentero beso que ya estaba durando bastantes
minutos, entonces mi primo empieza a tratar de bajarme el pantal�n, como no lo
consigue me paro de la cama, me lo quito al igual que el b�xer que tra�a puesto
y vuelvo a mi posici�n, ya ahora mi primo tenia una espectacular vista y se
intercambiaba entre la verga de Diego que se tragaba lo mas que pod�a y mi
peludo culo que empez� a ser devorado por la lengua de Juan; a cada lametazo que
me daba el primo, sent�a como una oleada de placer llegaba desde mi culo a la
cabeza, as� estuvimos unos minutos, y entonces yo ya no aguante mas y me sent�
encima de ese m�stil que me empez� a abrir en dos, sent�a gran dolor al paso de
esa bestia que lentamente entraba, pero mis ganas eran mas y segu� bajando, no
logro entrar toda pero si una buena parte, ya en eso empec� a cabalgarlo, sub�a
y bajaba mientras mis manos estaban apoyadas en su pecho, el gem�a como loco,
parec�a como si se la estuvieran metiendo a el, en eso Juan se le coloca en
frente a Diego y le ofrece su verga que ya estaba al m�ximo, esta vez Diego no
dudo y se meti� todo lo que pudo, inclinaba la cabeza para poder abarcar mas
verga y con sus manos agarraba las nalgas de Juan y le met�a un dedo por el
culo, Juan Camilo empez� a taladrarle la boca y sus manos agarraban la cabeza de
Diego para ayudarlo a levantar la cabeza, mientras se recostaba un poco y hacia
contacto con mi boca y mi lengua; de vez en cuando los dedos de Diego sal�an del
culo de Juan para acompa�ar a su verga en mi ano, los met�a de a dos y sent�a
como rozaban su dedos con la verga, yo ya hab�a cogido un ritmo fren�tico,
bajaba y sub�a con mucha fuerza haciendo que la cama rechinara, al mismo tiempo
gritaba como loco y empec� a venirme haciendo que mi leche cayera en la espalda
de Juan, al sentir los espasmos de mi recto apretando su verga Diego no aguanto
mucho y se vino hasta el fondo inund�ndome de leche por dentro, no me hab�a
salido cuando la leche que tenia dentro empez� a salirse y se escurr�a por todo
el tronco de su verga, recorr�a sus bolas y segu�a hacia abajo, yo como no pod�a
dejar el trabajo sin terminar empec� a limpiar todo su pito, luego segu� con sus
huevos y por ultimo le ped� que abriera los pies, me dejo al descubierto un culo
bien rico, con pocos pelos borde�ndolo y bien rosadito, empec� a com�rmele el
culo, mientras el segu�a con su labor mamatoria a Juan, ya despu�s de dejarlo
bien lubricadito y dilatado mi primo se le coloco entre las piernas, se subi�
estas a los hombros e introdujo hasta el fondo su pito en el culo de Diego, este
lanzo un grito de dolor que fue apaciguado con el bombeo que empez� Juan sobre
el culo de su amigo, las nalgas de Diego saltaban como buen jam�n, ahora si que
hab�a esc�ndalo, porque Juan era muy violento con su meneo y Diego solo hacia
mas que gritar y gemir, entretanto yo me la meneaba suavemente vi�ndolos a los
dos coger como perros, pero al mismo tiempo, mientras ve�a a Juan Camilo comerse
a su amigo no pod�a sac�rmelo de la cabeza, por mi mente pasaban mil im�genes de
Juan y yo haciendo toda clase de obscenidades, mi mirada estaba fijada en el, si
me iba a correr, esta vez seria una corrida por el, y entonces sent� celos,
celos de que se estuviera comiendo a su amigo, al que se deber�a estar cogiendo
soy yo-me dec�a a mi mismo, no lo quer�a aceptar pero ya estaba sucediendo. Juan
no se demoro mucho en correrse y lo hizo en el pecho de Diego, despu�s de esto
le cogi� la verga y empez� a menearlo mientras le besaba el culo y se tomaba
toda la leche que el mismo hab�a depositado ah�, al poco tiempo Diego se volvi�
a correr, dejando su mano llena de semen, yo tampoco dure mucho y me acerque a
Diego descarg�ndome en su cara. Decidimos quedarnos esa noche all�, y al rato
nos dormimos, en la madrugada repetimos la sesi�n de sexo, esta vez yo fui el
que le di por el culo a Diego, mientras este le clavaba hasta el fondo su m�stil
a Juan.
Ya por la ma�ana salimos muy temprano, ya que deb�amos
alcanzar a la familia ya que nos ir�amos de paseo a una finca en una poblaci�n
cercana a Medell�n. Ya estando en la finca, me puse a pensar en todo lo que
hab�a pasado y en la maricada que me estaba dando por el Juan, me preocupe
bastante porque las cosas se estaban saliendo de mis manos, siempre le he tenido
miedo al amor, porque me puede cortar las alas y la mayor�a de veces sales
dolido. El tiempo paso y el aburrimiento reino, para matar un poco el tiempo
decid� ir de paseo por entre los pastizales y los cultivos, solo, sin Juan,
necesitaba pensar; cual fue mi sorpresa cuando al poco tiempo de estar caminando
distingo una figura ya conocida detr�s de unos arbustos loma abajo, desde el
sitio en que me encontraba pod�a verlo claramente, mas el no pod�a verme a mi;
era mi t�o, que se encontraba recostado sobre una piedra, con el torso desnudo,
la bragueta abierta, la mirada perdida, y con una de sus manos manoseando al
pajarito, que hasta ese momento se encontraba dormido, este empez� a tomar
forma, se lograba distinguir como iba creciendo y tomando tama�o, de nuevo su
tranca reluci� imponente, grandota, liquido lubricante ya emanaba de su ojete,
su mano peluda se perd�a en la selva de su vello pubico, se frotaba con fuerza,
se la agarraba desde la base hasta que llegaba a la cabeza y la estiraba un
poco, su mano izquierda recorr�a su pecho velludo, se deten�a en sus tetillas y
las acariciaba por un momento para luego seguir su camino mas abajo, por los
vellos de su panza, recorr�a de nuevo el camino y despu�s su mano se perd�a por
su espalda, llegaba mas abajo y se introduc�a por su pantal�n, donde seguro
encontraba un orificio donde introducirse, mientras, su mano derecha segu�a con
el masaje por todo el tronco de su verga, que segu�a escurriendo liquido, y
tomaba mas y mas ritmo; su rostro, denotaba el placer tan inmenso por el que
estaba pasando, ese guebon la estaba pasando de maravilla, los ojos los tenia
cerrado y se mord�a el labio inferior como aguantando los gemidos; la mano que
tenia en su culo tambi�n empez� a aumentar de velocidad; yo ya me estaba
calentando, mi verga ya empezaba a distinguirse por debajo del pantal�n cuando
veo que del ojete de la verga de mi t�o salen disparados chorros de leche que
van a parar a la vegetaci�n circundante, exhausto mi t�o abre los ojos y se da
cuenta de mi presencia.
Vea pues, hasta mir�n me sali� el pelao- me dijo a la
distancia, mientras yo bajaba la loma que nos separaba.
Que pajota la que te has hechado t�o- le dije
� Te gusto?- me pregunta
Claro t�o, me has dejado supercaliente, pero como as� de
ven�rsela a menear solo, si para eso tiene sobrino que le tiene ganas,
parcero eso no se hace, si somos familia guebon- le respond� mientras me
agachaba a limpiarle restos de semen que hab�an quedado en su prepucio y
alrededor de sus vellos- Eh t�o, desaprovechar toda esta lechita si aqu�
tenias esta boquita que te la recib�a. M�nimo que se la hizo pensando en mi,
no?
Pues medio medio, porque no solo en vos, tambi�n en mi
pelao, es que desde estas aqu� yo no se lo que me pasa con el, me tiene
recalentado. Vos me vas a hacer un favor- me dijo
Como que t�o?- le respond� sin suspender mis labores
limpiadoras.
Necesito que me ayudes con el, quiero pegarme una
folladita con el, solo una vez, pero que vaya a quedar para los tres y
guardemos el secreto- me dijo, y yo me levante y lo mire como desconcertado.
No t�o, yo no lo ayudo a eso, eso es incesto, es pecao
guebon- le dije como sac�ndome una excusa.
Ah, ahora te me vas a poner de monjita rega�ona, no seas
guebon si vos sos mas sucio que nadie- me dijo, en eso tenia toda la raz�n.
Y si Juan no quiere, o se enoja?- le pregunte
Por Juan, yo no creo que vaya a ver problema, ese marica
me carga ganas, si ya hemos tenido nuestros roces por ah�, pero nunca
ninguno de los dos ha tenido valor de arriesgarnos.- finalizo
As� que quedamos en un plan para poder cumplir la fantas�a de
mi t�o, la verdad es que a mi tambi�n me daba algo de morbo la idea, tan solo de
imaginarme a esos dos sementales cogiendose mutuamente me paraba la verga
inmediatamente, y as� dure todo el almuerzo, con la verga parada a mas no dar,
tanto que despu�s del almuerzo Juan se dio cuento y me pregunto si quer�a bajar
un poquito esa calentura- Si Juan, pero tengo una idea mejor, y tu me vas
ayudar- le respond�. Despu�s de eso entramos a la casa de la finca, era una casa
grande, no muy vieja, de dos pisos y al parecer en el de arriba no viv�a nadie,
ya por la ma�ana hab�a estado all�, y estaba llena de cojines, sabanas y dem�s
cachivaches, seria perfecta para nuestro plan.
Aprovechando que la mayor�a de la familia estaba tomando una
siesta en hamacas fuera de la casa y otros tantos estaban excursionando en el
monte, decidimos que esa seria la mejor hora para actuar; le ped� a Juan que se
colocara una cinta alrededor de los ojos con el objetivo de que no viera nada.
Ya con ella puesta comprob� que no viera nada, era fundamental que todo
mantuviera en la oscuridad para el, le ped� que confiara en mi, lo cog� de la
mano y lo fui guiando por la casa, hasta subir al segundo piso y encaminarme
hacia el ultimo cuarto del pasillo.
Ojo pues parcero, que no vaya a ser una de sus
maricadas-me dec�a, mientras me agarraba fuertemente de la mano
Cuando llegamos al ultimo cuarto, lo gui� a entrar y despu�s
de el, entre yo y cerr� la puerta de la habitaci�n; ya all� se encontraba mi
t�o, totalmente desnudo y con la verga apuntando el techo, de verdad que mi t�o
es un verdadero oso, que man tan peludo. En mucho silencio y procurando de que
Juan no se diera cuenta de la otra presencia, empec� a desvestirlo, cuando
estuvo desnudo me di cuenta de que la situaci�n de misterio tambi�n excitaba a
mi querido familiar porque su pito ya estaba al palo, suavemente empec� a
manosearlo, pasando mis dedos por mi boca para humedecer un poco ese glande,
mientras lo hacia, mi t�o se coloco detr�s de mi haciendo que su verga se
incrustara en medio de mis piernas, y me mete la mano por dentro del pantal�n y
el b�xer y empieza a pajearme suavemente, poco despu�s, el pap� se coloca en
medio de las piernas de su hijo sin que hagan contacto, se tira sobre la cama y
con una de sus manos agarra la verga de su hijo que ya esta emanando liquido
preseminal, mi t�o me mira y me hace un gesto malicioso que por poco hace que me
riera fuertemente y se da�ara todo, mi t�o miro esa verga por todos los �ngulos
y empez� a lamer la cabeza, sin metersela toda, lam�a todo el tronco y llegaba a
las bolas, las cuales lam�a como si fueran una paleta dejando empapados los
pocos pelos de mi primo, luego decidi� dejar de jugar y meterse todo el m�stil a
la boca, y de verdad que se lo comi� literalmente, porque se la introdujo toda
quedando su nariz pegada al vello de Juan y la sacaba lentamente apretando
fuertemente los labios contra ese vergajo haciendo que de mi primo salieran unos
gemidos de placer y se contorsionara, con este mete y saque mi t�o sigui� por
unos minutos, cuando de pronto Juan intent� agarrar de los cabellos a su padre
para poder establecer un ritmo, pero este sostuvo sus manos antes de que lo
lograra, se habr�a dado cuenta, mi t�o tiene el cabello corto pero no tanto como
yo; mientras yo, ya me hab�a quitado mi ropa y estaba igualmente desnudo como
ellos, me cog�a el pito y me lo meneaba viendo la imagen, varias veces tuve que
parar y aguantarme para evitar una corrida prematura, la situaci�n me pon�a a
mil, ver como el padre le mamaba la verga al hijo ya todo un hombre hecho y
derecho era indescriptible, de repente mi t�o agarro las piernas de Juan y las
abri� de par en par, Juan ni chisto, pensando que el que le hacia todo lo que
sent�a era yo, ante el quedo ese manjar que yo ya hab�a probado en anteriores
ocasiones, nuevamente el gesto de mi t�o, y nuevamente la lengua que recorr�a el
esf�nter de Juan, la boca de mi t�o se pegaba al culo de su hijo, yo ya no pod�a
mas, y no se en que momento pero de repente me siento sobre el pecho de Juan y
le introduzco toda mi verga en su boca a la fuerza, no paso un segundo y yo ya
estaba llenando de leche la boca de mi primo, este inmediatamente se incorporo y
sorprendido intento quitarse el lazo de los ojos, yo reaccione r�pidamente y lo
detuve.
Que es esta maricada primo, quien hijueputa esta aqu�. Si
ves que vos salis con unas sorpresas de mierda- me grito con tono de rabia.
Yo trate de tranquilizarlo, lo abrac� sin dejar que se
quitara la cinta y lo bese tiernamente y le susurre mientras mis labios
contactaban los de el.
Pero porque te pones as�, venga mi ni�o, yo se que a vos
te va a gustar, confia en mi, si, aqu� hay alguien mas, el cuento es que no
te dieras cuenta y fuera sorpresa, pero la cague con mi calentura, yo se que
vos queres, no te me hagas el dif�cil- le digo- � te gusto mi lechita?- le
pregunto con cierto tono mimado. De nuevo sent� que me embargaba el
sentimiento que empezaba a crecer por mi primo.
Si estaba rica- me responde ya mucho mas tranquilo.
Por lo cual empezamos nuevamente acostando a mi primo en la
cama, esta vez el contacto era por parte de mi t�o y por parte m�a, a ninguno se
nos hab�a bajado la calentura en el peque�o lapsos, todos la ten�amos muy bien
levantada, incluso yo que ya me hab�a venido, retomamos nuestras labores con
aquel cuerpo bien formado, pero esta vez cambiamos de papeles, yo empec� a
mamarle el culo a mi primito, mientras mi t�o se pon�a en forma tal que la
cabeza de Juan quedaba entre sus piernas, sus bolas en la nariz de Juan y
mirando a la verga de mi primo, la cual volvi� a succionar sin pensarlo dos
veces, mejor dicho hicieron el 69 para dejarnos de tantas maricadas, Juan estaba
en el cielo, un hombre del que al parecer se hab�a enamorado chupandole el culo,
otro hombre de quien no tenia la remota idea de que fuera su pap� chupandole la
verga y con el pito de este mismo hombre en su boca, follandolo como si fuera
una vagina, porque eso si, debo decir que mi t�o no desaprovecho semejante
oportunidad porque mov�a sus caderas violentamente contra la garganta de su
hijo, por mi parte abandone mi orificio preferido para poder chantarle un beso a
mi t�o y de ah� pegarle una probada a la cabezona verga de mi primo que emanaba
bastante liquido, coloque las piernas de mi primo en mis hombros y fui
introduciendo lentamente mi polla por ese culito apretado, sent�a como se
contra�a y me hacia delirar de placer, as� en esta posici�n aproveche para
cogerle la cabeza a mi t�o y empujarlo hacia la verga de Juan, que se la tragara
toda, en eso Juan saca el pene de su padre de su boca y balbucea:
Este guebon es que es sordomudo o que?, no ha dicho ni
una hijueputa palabra, ni un gemido, no me ha dicho si le esta gustando la
mamada que le estoy haciendo porque la que el me esta haciendo esta a punto
de hacerme estallar.- dice Juan refiri�ndose a mi t�o que hasta el momento
hab�a estado en silencio.
Si parcero, es sordomudo, no te puede o�r, pero le estoy
viendo la cara y de verdad que se la estas haciendo bien- le respond� en
medio de mis bombeos con tono sarc�stico.
Y es que de verdad que mi t�o hab�a hecho un silencio
abrumador, solo se o�an los gemidos de Juan y m�os. Saque mi instrumento de ese
culito y empec� a meterme dedos en mi culo, porque estaba dispuesto a disfrutar
una vez mas de la tranca de Juan. Cuando ya estaba listo me sent� en Juan y
empec� a cabalgarlo y la boca de mi t�o se ocupaba en succionar mi verga, de
repente lo agarraba del rostro y lo sub�a hasta mis labios para que nos di�ramos
un beso, el d�a era caluroso, y la habitaci�n cerrada y poco aireada por lo cual
la temperatura era bastante fuerte, el sudor nos escurr�a a los tres, yo si que
estaba empapado en sudor, no iba a aguantar mucho mas, era incre�ble todo lo que
hab�an durado mi primo y mi t�o, no se hab�an venido ni una vez, yo no estaba
dispuesto venirme sin ver como se clavaban el nabo entre ellos, por lo que me
sal� de Juan, quedando en mi como una especie de vac�o; esta vez mi t�o saco su
verga de la boca de Juan el cual inmediatamente reclamo, pero pronto tuvo que
callarse porque mi t�o le mando de una semejante verga por el culo y empiezo a
bombearlo sin descanso, yo mientras me dedicaba a besar los labios de mi primo,
lo besaba en una forma que a pocos hombres les hab�a hecho, muy tiernamente,
separaba mis labios de los suyos y volv�a a besarlo, introduciendo mi lengua
solo por un instante, sal�a y lam�a delicadamente sus labios, luego mord�a a
estos y nuevamente abr�amos nuestras bocas para sumerjerme en la pasi�n, no
quer�a dejar de besarlo, ni quer�a que esto terminara, mientras, sent� como mi
t�o estaba llegando al cl�max con unas embestidas brutales que empujaban la cama
contra la pared y por fin sali� de su silencio con unos gritos que se han de
haber escuchando en toda la casa, termino dentro de su hijo e inmediatamente
saco su vergajo del culo de Juan, este al reconocer de quien proven�an los
gritos, se quito la venda y al ver que era su padre empez� a re�rse.
Maricones hijueputas, yo sabia que deb�a ser una vaina
bien preparada, me lo imaginaba que me iban a salir con esta- dijo en medio
de sus risas- ya pensaba que eras vos pap�, el olor a verga te delataba, �
te gusto mi culo pap�?-continuo
Ay mi pelao, ya veo que te hice muy bien hecho- le
respondi� mi t�o mientras segu�a acariciando el pecho y las nalgas de Juan-
Ahora quiero que tu pruebes del m�o
Diciendo esto mi t�o se coloco en cuatro, mi primo se
incorporo y meti� uno de sus dedos en el culo de su padre y empez� a meterlo y
sacarlo, para luego meter dos y luego tres, su padre tambi�n empez� a moverse de
forma tal que se le estaba dilatando el ojete del culo en una forma brutal.
Ya veo de donde saque ese gusto por culiar, si es que
ante mi tengo una maquina culiadora- le dijo a su padre mientras al mismo
tiempo cambiaba sus dedos por su verga que ya reventaba de dureza y
longitud.
Y as� fue introduciendo su nabo en el culo de su padre, para
empezar a bombearlo- te va a gustar mi leche papito, ahora te voy a pre�ar, te
voy a dar un nieto parcero- le dec�a a mi t�o en medio de sus embestidas, yo no
desaproveche y de nuevo enterr� mi nabo en el culo de Juan el cual entro sin
problemas debido a la lubricaci�n de la leche de mi t�o, el ritmo que cogimos no
aguanto mucho y de repente siento como el culo de Juan aprieta mi verga, al
mismo tiempo que gem�a desesperadamente, yo no aguante mas y me vine inundando
de nuevo el culo de Juan � el que se va a pre�ar es otro- le dije al o�do a Juan
quien sudoroso y jadeando quedo recostado en mi; as� tirados en la cama quedamos
un rato hasta que mi t�o se viste y decide marcharse para no levantar mas
sospechas.
Yo me quedo con Juan, el esta recostado en mi pecho, nos
quedamos as� no se cuanto tiempo sin decir una sola palabra, sentimos que las
palabras estorbaban, pero al final ten�amos que afrontar una realidad, ambos nos
hab�amos enamorado el uno del otro, y yo no pod�a ni queria aceptarlo, viv�a
cientos de Kms de distancia y no quer�a nada serio, por lo que empezamos a
discutir, no se en que momento le dije que de verdad no sent�a nada importante
por el, que solo lo ve�a como un primo que estaba muy bueno y con el cual lo
�nico que quer�a tener era sexo, de nuevo le ment� y me ment� a mi mismo, no fui
capaz de decirle que ese gran amor que me estaba promulgando era correspondido,
fui cobarde. El sali� de la habitaci�n sin mediar palabras, estaba de verdad
dolido, lo note porque tenia encharcados los ojos y empez� a lagrimear.
Esa noche no nos hablamos, yo dorm� y el durmi�, sin mediar
una palabra, por la ma�ana me levante y ya no estaba, no se si era para no tener
que despedirse de mi, en fin, nos fuimos ese Lunes, el no apareci�, mi t�o se
despidi� de mi, me dijo que cuando quisiera volver que estaban las puertas de su
casa abiertas, siempre con esa sonrisita maliciosa. Yo promet� volver aunque
todav�a no se si sea capaz de volver, aunque me muera de ganas de ver a mi
primo. De eso hace ya un par de a�os, mi primo volvi� a llamarme en varias
ocasiones con tal suerte de que nunca me encontr� en casa o me le negu�, en una
ocasi�n pens� venir hasta aqu�, pero para evitarlo me invente un viaje a la
costa antes de que llegara. Ya han sido varios los viajes que me he perdido. No
tengo ni idea si mi t�o y su hijo han tenido mas encuentros. No se parce si esta
leyendo esto pero si lo esta haciendo, disc�lpeme pero me da miedo enamorarme,
es mi peor defecto y le prometo una cosa: ese fue mi mas reciente viaje a
Medell�n pero no ser� el ultimo.
Si te gusto mi historia y quieres contactarme escr�beme a
POR CUESTIONES DE PRIVACIDAD ESTE EMAIL FUE REMOVIDO.Si nuevos
sucesos ocurren, les contare con el nombre de viaje a Medell�n III