"En la oscuridad"

Regresando al auto, de nuevo me dieron ganas de vomitar, nos
alejamos entre los �rboles, mientras yo evacuaba lo que me quedaba en el
estomago Pamelita me tra�a agua... me enjuague bien, luego apoye mi espalda
contra un �rbol... a escasos metros la fiesta continuaba...

- Creo que mejor llamo a Pedro y Anita... dijo Pamela
asustada.

- Espera... ya se me pasa... le dije tom�ndola de un brazo.

Lance un profundo suspiro, llenando mis contaminados sentidos
de fresco aire, me sent� un poco mejor, as� que la atraje hacia mi, buscando
apoyarme, pase un brazo por su cuello, iba a reincorporarme, me aleje un poco
del �rbol en que se apoyaba mi espalda.

Me estaba reincorporando, pero trastabille y nuevamente mi
espalda dio contra el �rbol, solo que esta vez me deslice, casi me voy hasta el
suelo, por suerte Pamela reacciono r�pido, giro y me sostuvo de la cintura y con
su cuerpo casi contra el m�o ayudo a detener mi descenso... entonces tuve tiempo
de apoyar mejor mis pies... en este percance adoptamos una posici�n peculiar...

Yo, un poco agazapado por mi desliz, me encontraba casi a la
altura de ella, mi brazo izquierdo aun cubr�a su hombro, ella a escasos
cent�metros de mi, me sosten�a por la cintura... primero sonre�mos por lo que
hab�a pasado, que casi me caigo, luego la cosa se puso un poco tensa...

Nos miramos con otros ojos, la atraje mas hacia mi... mi
primera intenci�n fue intentar pararme de nuevo, pero teni�ndola tan cerca...
dude... ella me dejo actuar... se acerco a mi sin temor, con una cari�osa
mirada, aquel brillo de ansiedad, de inocente espera, volvi� a sus ojos...
sabi�ndome oculto, lejos de todo, y et�licamente envalentonado me deje llevar...

Mi mano derecha acaricio su cabello, alejo un poco aquellos
que cubr�an su dulce rostro, luego mis dedos se deslizaron por su mejilla, ella
agacho un poco el rostro en se�al de timidez, su mirada no quer�a delatar mas su
ansiedad... mi mano llego hasta su barbilla, mi pulgar se ubico en la comisura
debajo de sus labios, mi �ndice debajo de su ment�n, me acerque mas a ella y le
levante un poco el rostro...no fue necesario mayor aliciente, cuando mis dedos
empujaron suavemente su rostro hacia arriba, nuestro labios se encontraron casi
cerca, el ultimo impulso que faltaba lo dio ella... sellando aquel tierno y
prolongado cortejo con un inocente pero apasionado beso...

Mi boca se deslizaba suavemente entre sus carnosos y rojizos
labios, no dude en acercarla m�s a m� y abrazarla, ella a su vez se aferro a m�
con m�s fuerza, descargando en aquel beso toda la tensi�n y la desaz�n
producidos en los �ltimos d�as... no piensen mal, aquel beso no llego a ser
lujurioso, fue mas bien tierno y apasionado...

Despu�s de algunos minutos... mi conciencia despert� de su
et�lica somnolencia, y comenz� a torturarme: no le hagas esto a Pamelita, es una
buena chica, no es tan arrebatada como su hermana, no se merece esto... por
ultimo recuerda tu promesa... maldici�n!!!... puedes rebuznar todo lo que
quieras... pero no es correcto hacer esto...

Con mi propio pesar, la aleje un poco de mi... ella aun tenia
los ojos cerrados, sus dulces labios aun disfrutaban aquel beso... finalmente
abri� los ojos, como saliendo de un sue�o... t�midamente ella se sonrojo un poco
y bajo la mirada... vaya que es hermosa, me dije nuevamente...

- Lo...lo siento... me disculpe por mi accionar: ...no
quise... bueno, si quise... pero... en este punto ni yo mismo entend�a que
quer�a explicarle.

No sabia como decirle que aquel beso me hab�a agradado
demasiado, m�s de lo que imagine, pero que no quer�a aprovecharme de ella, la
situaci�n con su hermana era por dem�s confusa y complicada... al parecer ella
entendi� perfectamente...

- No... no te preocupes... creo que mejor regresamos... me
dijo con una leve sonrisa.

- Tienes raz�n... vamos...

Cuando sal�amos de entre los �rboles, vi a Pedro y Anita
busc�ndonos, hasta que sus ojos nos encontraron, cierta mirada de recelo nublaba
los ojos de Anita, quiz�s por la forma que me apoyaba en su hermana, o como ella
me tomaba de la cintura... lo cierto es que el estomago se me revolvi� de nuevo,
me aleje de Pamela y volv� a perderme detr�s de los �rboles... ahora parec�a que
iba a arrojar mis intestinos...

Bueno, al menos esta imagen les dio a entender el porque de
nuestra demora, y seguramente apaciguo un poco el animo de Anita... que junto
con Pedro vinieron presurosos en mi ayuda... Pamelita desapareci� nuevamente en
busca de agua.

Nunca mas vuelvo a tomar!!!... vaya juramento para hip�crita,
reconoci� racionalmente mi conciencia... al menos no vuelvo a tomar de esa misma
porquer�a!!!... ah!!!, ahora si, esa si te la creo...

Me llevaron a arrastras a la camioneta... Pamelita parec�a mi
enfermera, mientras me sosten�a de Pedro y de Anita.... no recuerdo gran parte
del trayecto de regreso... solo algunos baches que hicieron saltar mi estomago y
revolvieron mi mareada cabeza.

Finalmente llegamos a la hacienda... me desped� de Pedro y
agradec� su ayuda... sostenido por Pamelita me dispon�a a entrar, pero de reojo
pude ver el amistoso beso en la mejilla que recib�a Anita de Pedro, cosa que me
enervo un poco... creo que hasta Pamela lo noto...

Entramos, ahora estaba flanqueado por mis dos primas...

- Creo que mejor te das un buen ba�o para que te quites un
poco ese malestar... y ese olor... dijo graciosamente Pamelita.

- Creo que si, adem�s quiero quitarme este terrible sabor de
boca... dije con mejor animo.

Sin embargo mis palabras cayeron como en doble sentido,
Pamelita me miro apesadumbrada entendiendo tal vez que me refer�a a su beso...
as� que me apure en agregar...

- Digo por la bebida... mejor me ba�o...dije r�pidamente
tratando de salir del asunto, al menos la mirada de Pamela se recompuso.

- Puedes solo... si quieres te ayudo???... dijo
hacendosamente Anita, pero record� aquel amistoso beso que le dio a Pedro y en
mi estado no ten�a humor para eso.

Adem�s note como la mirada de Pamelita se nublaba nuevamente,
as� que decid�, al menos en se�al de respeto por aquel dulce beso, no hacer
nada...

- No, no te preocupes... puedo yo solo... le dije.

- Como quieras... dijo Anita con cierta molestia, mientras
Pamelita intentaba disimular su sonrisa ante el desliz de su hermana, o quiz�s
se alegro de saber que despu�s del beso que nos dimos, yo no necesitaba m�s...

Tambaleante me dirig� a la ducha, me di un buen ba�o de agua
fr�a, que me repuso un poco... al menos pod�a pararme mejor... luego me lav�
bien la boca para quitarme aquel amargo sabor del alcohol...

Sal� vestido con una toalla en la cintura, y el torso
descubierto, solo usaba mi polo cubriendo mi espalda, mis primas esperaban
afuera, seguro preocupadas por m�, ya que en mi estado hubiera podido tener
alg�n accidente casero...

Vi sus diferentes reacciones ante mi semidesnuda presencia:
Por un lado Anita me com�a con la vista y con una sonrisa maliciosa... por otro
lado Pamelita, desviaba un poco la mirada haci�ndose la desentendida, quiz�s de
reojo lanzaba un que otra mirada, pero su cohibida reacci�n me robo una
sonrisa... luego Pamelita me ofreci� una taza de te... vaya que se hab�a
convertido en mi enfermera...

- Gracias... le dije sonriendo quiz�s mas amistosamente de lo
normal, ella me sonri� t�midamente, y para disimular un poco ya que Anita estaba
al lado... agregue:

- Bueno, si me disculpan... creo que me voy a dormir...
buenas noches...

- Buenas noches... me respondieron ellas en coro.

Me aleje unos pasos hacia mi cuarto, y empez� la pelea...

- Yo me ba�o primero... dijo Pamelita.

- No, me toca a m�... respondi� Anita.

- T� siempre te ba�as primero.... protesto Pamelita.

- Respeta a tus mayores... adem�s tu te demoras mas...
replico Anita.

Y yo que pens� que solo estaban preocupadas por mi... bueno
si, en parte... pero tambi�n quer�an usar la ducha!!!... y cual ni�as se
peleaban por su turno... me dio risa...

Al final cre� entender que la pelea la gano Pamelita, seguro
Anita le cedi� el puesto, despu�s de tantos favores y silencios que le deb�a a
Pamelita, era de esperarse...

Sent�a el cuerpo caliente, as� que solo me puso un polo
delgado y un short, luego me recost� intentando a dormir, pero la cabeza aun me
daba vueltas... no solo por la bebida, aun tenia presente la imagen de mis
"ecol�gicos" y calenturientos padres... pero esta se fue disolviendo dando lugar
a los labios de Pamelita, su dulce contacto... uhmmm... Maldici�n!!!...

Termine de beber aquel te que ella diligentemente me
ofreci�... diablos!!!... piensa en otra cosa... me decid�, y obligue, a recordar
lo excitante de aquella faena del d�a anterior con Anita, o la que tuvimos
hoy... como me hubiera gustado tener relaciones mas tiernamente... de alguna
forma mi morbo creci�... se me ocurri� una traviesa idea, estando aun bajo
efectos del alcohol decid� ponerla en practica...

Ya que no iba a poder dormir, y que Pamela se iba a demorar
en la ducha, quiz�s tendr�amos tiempo para un nuevo encuentro, de alguna forma
me ayudar�a a exorcizar el recuerdo de mis padres y de Pamela, as� como a tener
aquel tierno encuentro que deseaba con Anita...

Adem�s deb�a aprovechar que no estaban mis viejos ni mis t�os
y de alguna forma tener relaciones en su propio cuarto me despertaba mas mi
excitaci�n...

No lo pens� mas, me pare, aun mi vista distorsionaba un poco
la realidad, se�al de que el alcohol aun no bajaba... me dirig� por el pasillo
hacia su cuarto, pose�do por aquel deseo de una nueva aventura...

La puerta estaba semiabierta, la luz estaba apagada...
ingrese a ese claustro hasta ahora prohibido para mi... la vi estaba frente a la
ventana, d�ndome la espalda, aun llevaba puesto su vestido azul, y peinaba su
cabello en la escasa claridad que irradiaba la luna por la ventana, seguro
estaba en espera de que su hermana saliera de la ducha...

Me acerque a ella por detr�s... ella sinti� mi presencia y
volteo r�pidamente, no pude ver bien su rostro en la oscuridad, quiso decir
algo... no quise llenar el momento con discusiones, de porque se despidi� as� de
Pedro, o por que la rechace al entrar a la ducha... solo le puse mis dedos
delante de sus labios...

- No digas nada... susurre cari�osamente, sent� como sonre�a.

La tome de la cintura, la acerque hacia m� y la bese con
pasi�n, ella solt� el peine y sus brazos rodearon mi cuello, mientras sus labios
devolv�an mi beso... sus manos acariciaban mi cabeza, sus dedos se perd�an en
mis cabellos, mientras mis manos acariciaban su espalda, y mis dedos descubr�an
el cierre de su vestido... lo baje, me aleje un poco de ella mientras,
suavemente iba despoj�ndola de su vestido, este se deslizo hasta caer en el
piso, dej�ndola solo con su ropa interior...

Ella se acerco lentamente a mi, pisando su propio vestido, y
comenz� a levantarme el polo, yo me deshice de el con su ayuda, nuevamente nos
juntamos en un beso. Mientras mis manos en la oscuridad tentaban buscando el
broche en su espalda, cuando lo halle proced� a desatarlo, logrando liberar sus
senos de su prisi�n, ella misma se despojo de esta prenda.

Yo acaricie sus senos, con ternura mi tacto se deslizo por
ellos... Mis labios recorrieron su cuello y bajaron mas hasta sus senos, le di
un beso a uno de ellos, cosa que la estremeci�... luego segu� besando sus
generosos labios, que ahora un poco mas excitados aprisionaban los m�os con mas
pasi�n...

Mis dedos siguieron explorando su cuerpo, hasta llegar a su
estrecha cintura, fui bajando, casi jaloneando su calz�n... ella entendi� y me
ayudo, sin dejar de besarme, se despojo del calz�n por entre su piernas... luego
me toco a mi, me despoje del short, a estas alturas mi miembro viril se
encontraba casi totalmente desplegado...

Lentamente la fui acercando a una de las camas, ella sumisa,
me dejaba llevarla... la notaba un poco nerviosa... quiz�s un poco temerosa de
experimentar algo fuera de lo habitual...

La recost�, ella lentamente se fue acomodando mientras yo me
ubicaba sobre ella, no dej�bamos de besarnos y prodigarnos caricias... luego
ella fue abriendo lentamente las piernas, para darme espacio a m� entre ellas y
permitirme accionar...

Casi instintivamente mi pene se ubico entre sus muy
humedecidos labios vaginales... ella aguardaba el impacto con algo de
nerviosismo e impaciencia... le fui insertando mi verga lentamente... un peque�o
gemido de excitaci�n y dolor impregno mis o�dos, ella ladeo un poco la cabeza,
soportando y disfrutando aquella incursi�n, mientras mi pene segu�a avanzando en
su interior...

- Uhmmm.... la escuche musitar complacida.

Me tomo de la nuca y me dirigi� hacia su rostro, la bese.
Ella ahogaba algunos gemidos y jadeos con nuestros besos, mientras yo iniciaba
r�tmicamente las penetraciones...

Cuando su ser, excitado, no aguantaba mas, se separaba de mis
labios y su rostro se perd�a entre mi rostro y mi hombro, emitiendo placenteros
gru�idos cerca de mi o�do, y sus manos se aferraban a mi espalda soportando mis
pausadas embestidas...

Por primera vez sent� que le estaba haciendo el amor y era
fant�stico, antes todos nuestros encuentros hab�an sido b�sicamente carnales,
excitantes, en ciertas ocasiones salvajes, tal vez rayando en la locura... pero
esta vez era diferente...

No la escuchaba exclamar voz en cuello, ni pedir como m�s
como fiera en celo... cosa que si me excitaba, pero que en esta ocasi�n no
necesitaba... me eran mas que suficientes sus dulces gemidos, sus complacientes
labios... la tibia estrechez de sus labios vaginales... pero no quer�a seguir
pensando en mas cosas, solo me deje llevar...

Sintiendo mis sentidos empapados por todas estas
gratificantes emociones, fui llegando al cl�max... y en una �ltima descarga me
vine... un temblor recorri� su cuerpo, luego se contrajo, se aferro a mi, sus
pechos se hundieron en mi t�rax, sus manos se contrajeron en mi espalda, al
menos no me clavo las u�as, solt� un placentero gemido...

Despu�s se relajo completamente, se dejo descansar entre las
sabanas, mientras sus pechos pausadamente se recobraban de aquella placentera
excitaci�n...

Completamente satisfecho por aquella placentera muestra de
amor, mis labios buscaron los suyos en la oscuridad... los suyos agradecidos me
devolvieron el favor bes�ndome tiernamente...

Hasta que...

Encendieron la luz...

Continuara...

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