Relato: Los descubrimientos de Lucas (Relato completo)



Relato: Los descubrimientos de Lucas (Relato completo)


Cap�tulo 1




Les contar� un breve resumen de la historia anterior, para que
puedan comprender las historias.


Lucas, es un muchacho que viv�a en un pueblo, llamado Cuy�n, pero por
cuestiones de distancias, tuvo que irse a vivir a la ciudad de C�rdoba, (Arg),
en donde estudiar�a medicina.


Desde hace unos d�as sent�a sensaciones raras con respecto a sus amigos de la
facultad (Alejandro y Mat�as), pero no las entend�a demasiado. Sus amigos le
atra�an, pero como el se consideraba totalmente heterosexual no le hac�a caso a
sus pensamientos diferentes.


Despues de unos dias de vida solo comenz� a experimentar situaciones nuevas,
que lo hac�an poner al l�mite y pon�an en duda su vida sexual.


Durante sus d�as en la ciudad de C�rdoba, Lucas, Hizo amistad con el
encargado de la seguridad del edificio en donde el viv�a (un muchacho llamado
Joaqu�n, de unos 25 a�os, rubio, muy formado y con un rostro hermoso).


La amistad se hizo tan fuerte que despu�s de unos d�as, Joaqu�n, inici�
sexualmente a Lucas en su nueva vida gay.


Tuvieron sexo oral, muchas caricias, y una noche m�gica, que hizo pensar a
Lucas, en cambiarse de bando lo m�s r�pido posible.


Las nuevas sensaciones de Lucas no lo dejaban dormir y hasta se masturbaba
pensando en los cuerpos de sus amigos de la facultad.


Como Lucas, viv�a solo, en un departamento algo peque�o pero acojedor, no
ten�a problemas en que sus amigos vengan a dormir por las noches. Claro que
ellos no sab�an que Lucas los miraba de una manera diferente desde que Joaqu�n
le hizo conocer las delicias de la vida sexual de un homosexual.


Todo iba muy bien entre Lucas y sus amigos. Ellos no se enteraban de nada y
Lucas se deleitaba al verlos casi desnudos cuando se iban a dormir.


Un d�a, Alejandro, (muchacho de cabello negro, muy bien formado y con un
culito hermoso y paradito que lo hac�a enloquecer) le pedi� quedarse a dormir en
su departamento, ya que su hermano (Nacho de 21 a�os) quer�a quedarse a solas
con su novia y por eso, los hecho por esa noche y su hermana (Gloria) y a �l.


Seg�n Alejandro, Nacho, los ten�a amenazados. Ya que si no lo dejaban solo le
dir�a a sus padres unos secretos sobre ellos, que Alejandro no quiso decirle a
Lucas.


Esa misma noche, antes de irse a dormir, Alejandro le pregunt� a Lucas si
pod�a dormir desnudo y Lucas casi enloquece de calentura.


Nunca hab�a visto a Alejandro desnudo, y si llegaba a hacerlo no podr�a
resistirse a chuparle todo su cuerpo.


Fue en ese momento, que Lucas, comenz� a vivir de un modo m�s diferente a�n
que el de los d�as anteriores.


Aqu� comienzan las situaciones vividas por un chico de 18 a�os que descubre
poco a poco un mundo nuevo. Descubr� junto a �l sus m�s gloriosos momentos de
sexo y mucho amor.


Bienvenido al relato m�s tierno de la red.


Bienvenido a "Los descubrimientos de Lucas"





Cap�tulo 2




No pod�a dormirme pensando en el ejemplar de macho que ten�a a unos metros de
mi cama, adem�s de pensar que unas horas atr�s todo lo que me estaba pasando por
la cabeza era totalmente desconocido.


No entend�a nada. �Qu� fue lo que desencaden� estos pensamientos
homosexuales? �Por qu� me calentaban mis amigos y todo hombre lindo que viera
por la calle, o en la facultad o donde quiera que yo me encontrara? No lo sab�a.


Hasta hace unos d�as me enloquec�an las mujeres, sobretodo las tetonas o las
que ten�an un buen orto. Ahora no. Ahora solo pensaba en pijas y culos
masculinos. En mamadas, y en la tan temida culpada, la cual no me animaba a
experimentar todav�a.


Me cost� pensar en otra cosa antes de dormirme, entonces no tuve otra
soluci�n que una buena paja. Mi eyaculaci�n fue impresionante, y toda cay� sobre
mi abdomen.


En ese momento pens� en probar mi propia leche, pero un ruido me hizo
retroceder en mi idea y pensar en otra cosa.


Con un trapo limpi� mi abdomen y me puse una remera y el slip negro y fui
hacia la cocina (desde donde ven�a el ruido que escuch�).


Cuando prend� la luz lo vi a Alejandro parado a un lado de la heladera,
totalmente desnudo y en el piso una botella azul (la del jugo) totalmente vac�a
y su contenido derramado por el piso.



Perdon� si te despert�, es que me iba a servir y se me cay� la botella al
suelo
_ me dijo la voz de Alejandro.



No te preocupes, no es nada_ dije yo, pero sin decir que lo que
interrumpi� no fue mi sue�o sino una paja de lujo.



Ah! Tenes un trapo a mano!_me dijo Ale mirando el trapo que yo llevaba en
la mano (con el cual me hab�a limpiado mi abdomen de leche.


Antes de que yo diga algo me lo sac� de la mano y antes de que se lo sacar�
dijo:



Hace un calor tremendo, estoy todo transpirado y ten�a mucha sed_ dijo.


Y cuando termin� de hablar paso el trapo lleno de leche por su cara para
secar el sudor de su frente antes de limpiar el suelo de la cocina.


No sab�a que hacer, si sacarle el trapo de golpe o decirle toda la verdad y
que sea lo que Dios quiera.


Cuando el trapo toco su cara, Alejandro no dijo nada, pero unos segundos
despu�s habl�:



Lucas, �qu� tiene este trapo?. Tiene un olor raro.


No sab�a que decir, y mi rostro tomaba un color rojo furioso que me delataba.


De pronto el dijo:



Ah!!!Creo que se que es. No te disculpes, la culpa fue m�a por no
preguntar si se pod�a usar
_ dijo con cara de asco.



Perdoname_ le dije. No me di cuenta, and� al ba�o a lavarte la cara
que yo termino de limpiar
.


Para mi sorpresa no fue al ba�o, sino que se tiro al suelo y comenz� a
limpiarlo (pero con otro trapo).


No entend�a como no le daba asco tener la cara llena de leche de otra
persona.


Despu�s de que limpi� todo fue al ba�o y se lav� la cara. Como todav�a estaba
desnudo no pude tentarme y le observ� su culito.


Era perfecto, paradito (lo cual confirmaba que no era la bermuda apretada lo
que lo hac�a atractivo), casi sin pelitos y con una forma muy armoniosa.


La pija se me estaba volviendo a parar as� que fui r�pido a mi habitaci�n a
ponerme la bermuda y luego volv� a la cocina.


El estaba ya ah� y se hab�a puesto el boxer blanco. Estaba sentado en la
silla de la punta de la mesa.



No te preocupes por lo del jugo, y perdoname por lo del trapo, no me di
cuenta
_ le dije.



No te hagas problema, fue un error, adem�s yo lo agarr� sin pedirte permiso_
me dijo �l �y en quien pensabas?_ me dijo.


Me dej� helado. No sab�a que contestar. No pod�a decirle que estaba pensando
en �l y en Mat�as y en Joaqu�n.



En chicas en general_ atin� a decir sin pensarlo demasiado.



Que bien_ me dijo. Pero por favor la pr�xima vez se m�s discreto_
dijo y luego solt� una carcajada que me dej� m�s tranquilo.


Luego nos fuimos a dormir.


Al otro d�a nos levantamos con la noticia que la facultad hab�a sido cerrada
temporalmente por paro de los docentes y dem�s trabajadores de la universidad
nacional.


Como Mat�as ya hab�a venido decidimos ir a tomar unas cervezas por el centro
de la ciudad.


Despu�s de tomar unas cinco cervezas nos fuimos para el departamento de
Alejandro donde el se despidi� y nos dejo solos a Mat�as y a mi.


Mat�as estaba vestido con una musculosa verde y unas bermudas negras y un par
de zapatillas sin medias.


Le propuse a Mat�as que no se quede a dormir en mi casa, pero me dijo que por
la noche ten�a clases de guitarra y que lo sent�a mucho. Pero quedamos en que el
viernes saldr�amos con Alejandro a bailar y ah� podr�a quedarse.


Luego de que Mat�as subi� al micro que lo llevar�a de vuelta yo me fui hacia
mi departamento.


Eran las siete de la tarde cuando escucho el portero el�ctrico sonar.



Quien es?_ pregunto.



Alejandro, Lucas, abrime por favor que necesito hablar con vos_ me dijo.



Sub�_ le dije.


Unos segundos despu�s toc� la puerta y pas�.



Que te pas�?_ le pregunt� viendo su cara de preocupado.



Ven�a a pedirte que vengas a dormir a mi casa esta noche si no ten�s problema_
me dijo.



Si no hay drama, pero �Por qu�?_ pregunt� algo sorprendido sabiendo la
relaci�n que Ale ten�a con su hermano Nacho.



Es que mi hermano est� insoportable desde hace unos d�as, como ya te dije y
mi hermana se fue unos d�as a lo de una amiga, y preferir�a no quedarme solo con
�l
_ me dijo ya un poco m�s relajado.



Ok_ dije.


Junt� algunas cosas y nos fuimos para su casa.


Al llegar subimos por el ascensor hasta el quinto piso y entramos a su
departamento.


Era humilde pero muy espacioso y muy limpio.


Despu�s de comer y mirar un poco de televisi�n est�bamos dispuestos a dormir,
cuando de repente suena el portero.



Quien es?_pregunt� Alejandro y luego apret� el bot�n para subir.



Es mi hermano Nacho_ dijo. Ahora vas a conocer al enfermo de la casa.




Cap�tulo 3



Cuando se abri� la puerta entr� un chico muy parecido a Alejandro solo que
con unos a�os m�s. Vestido con un jean, una camisa azul oscura y unos zapatos
negros.



Hola_ dije.



Hola que tal, mi nombre es Ignacio, pero si quer�s decime Nacho, ya sabr�s
soy el hermano de Alejandro
_ me dijo en tono muy simp�tico.



Lucas, vamos a dormir?_ me dijo Alejandro como queri�ndome alejar de su
hermano.



�Ya comieron?_ pregunt� Nacho.



Si contest�, ya nos �bamos dormir_ dije.



Qu�dense y tomamos unas cervezas en el balc�n, que te parece?_ me
pregunto.


Yo mirando a Alejandro note que no le hac�a mucha gracia esa idea, y entonces
contest�:



Perdon�, pero me muero de sue�o, otro d�a con mucho gusto.



Est� bien, ustedes se lo pierden_ dijo Nacho con su voz alegre, la cual
me parec�a extra�a luego de las palabras de Alejandro para con �l.


Nos dirig�amos a la habitaci�n de Alejandro, cuando su hermano lo llam�.


El iba a su encuentro mientras yo segu�a mi camino hacia la habitaci�n.


Unos minutos despu�s vino Ale y dijo:



Bueno, vos dorm�s ac� y yo en la pieza de mi hermana que est� desocupada, ok?


Bueno, no hay problema._dije.


Para sacarme una duda pregunt�:



Parece simp�tico tu hermano, porque no lo quer�s?



No lo conoces como yo, no es lo que parece, Lucas_ me contest�.


Despu�s de charlar un poco sobre nuestros planes para el viernes nos fuimos a
dormir.


No entend�a porque Ale odiaba tanto a Nacho. Nunca tuvo palabras buenas para
referirse a �l desde que nos conocemos.


Sin darle m�s importancia de la que tiene me dorm�.


Cerca de las tres de la ma�ana escuch� unos pasos en el pasillo que me
despertaron.


Como no pod�a dormirme fui a la cocina a tomar un vaso de agua.


Cuando volv� a la habitaci�n escuche en la habitaci�n de Nacho unos gemidos
muy fuertes.


Pensaba que era la novia de Nacho seguramente, que vino cuando nos fuimos a
dormir y que estar�a disfrutando de una sesi�n de sexo con su novio.


Cuando me acost� segu� escuchando los gemidos de la novia de Nacho, adem�s
del ruido de la cama que rechinaba a cada movimiento.


De repente los gritos frenaron por unos instantes, hasta que se volvieron a
hacer presente. Los dos gem�an de una forma colosal. Sus gemidos no se
distingu�an el uno del de el otro.


Parec�a que la estaban pasando muy bien en esa habitaci�n.


Para que Alejandro no se pierda este espect�culo de sonidos lo fui a
despertar.


Entr� a su habitaci�n y sin prender la luz me acerqu� a la cama.


Cuando quise tocarlo el no estaba. Seguramente hab�a ido al ba�o o quiz�s
(por lo mismo que yo) estaba cerca de la habitaci�n de su hermano escuchando los
gemidos de ambos.


Entonces me acerqu� a la habitaci�n de Nacho para buscarlo cuando vi algo que
me dej� totalmente descolocado.


La puerta de la habitaci�n estaba abierta y adentro (sobre la cama) estaban
Nacho y alguien que no era su novia precisamente. Era Alejandro.


Alejandro estaba chup�ndole la pija a su hermano!!! El cual gem�a sin parar y
frotaba sus dedos sobre la cabeza de su hermano.


No lo pod�a creer.


Segu� mirando y vi cuando Alejandro dej� de chuparle la verga a Nacho y este
�ltimo lo oblig� a ponerse en sentado con las piernas abiertas.


Nacho se arrodill� y comenz� a besar el culo de mi amigo y a introducir su
lengua dentro de su agujero.


Alejandro gem�a de placer y Nacho le pegaba palmadas en el abdomen para que
se callara un poco.


Cuando el culo de Alejandro estuvo bien lubricado, Nacho, trat� de meterle la
pija dentro de su agujero.


La verga de Nacho entr� en el primer empuj�n logrando que Alejandro gritara
de dolor.


Nacho tap� la boca de mi amigo con una de sus manos y con la otra empezaba a
masturbar la pija de su hermano.


Los dos gem�an sin percatarse que yo los estaba mirando.


Las manos de Nacho pasaban de la verga de su hermano hasta sus pezones, y
luego a su boca en la cual introdujo unos dedos, los cual Alejandro chupaba y
lam�a.


Despu�s de unos minutos de bombear en el culo de su hermano, Nacho, sac� su
vergota del agujero y se acost� en la cama y le dijo a su hermano:



Ven� pendejo sentate en el palo de tu hermano y disfrut�. Pero esta
vez grita menos que se va a despertar tu amiguito y nos va a arruinar la
fiestita y no vamos a tener otra opci�n que cogerlo a el tambi�n.
_ dijo con
voz lujuriosa.



A �l dejalo tranquilo que no te hizo nada. Ni se te ocurra jugar con �l
porque te mato
_ dijo Ale en un tono severo.



No te enojes tanto y ven� a sentarte en mi pija r�pido_ dijo el hermano.


Alejandro, entonces poco a poco se sent� en la pija de su hermano, el cual lo
agarr� de la cintura y lo ayudo a introducir bien ese verg�n.


Alejandro gimi� muy fuerte y luego comenz� a cabalgar muy r�pido, mientras su
hermano agarraba su pija con ambas manos y le hac�a una paja de lujo.



Dale pendejo, segu� cabalgando un poquito m�s que me gusta_ dijo Nacho.



AhhAhAAAAA_ gritaba Alejandro que se ven�a a chorros sobre la cara de su
hermano.



No!!! Puto!!! Te voy a matar_ le dijo su hermano con cara de asco.



Perdoname, no pude aguantar_ dijo Alemientras segu�a cabalgando la verga
de su hermano.



Ahora te vas a tragar toda mi leche y si dejas caer una sola gota voy y le
cuento toda la verdad a tu amiguito y vas a ver como te qued�s solo
_ dijo
Nacho furioso.



No eso no!!!_dijo Alejandro.


No era necesario que nadie me cuente nada porque lo hab�a visto todo.


Mi palo estaba a mil, parado a m�s no poder. Ten�a ganas de hacerme una buena
paja, pero la situaci�n era muy delicada como para satisfacer mis fantas�as en
ese momento.



Dale puto tr�gate toda mi leche_ dijo Nacho mientras Alejandro le chupaba
la verga con todas sus ganas.



Dale acab� de una vez y dame tu leche!!!_ dijo para mi sorpresa
Alejandro, que parec�a gozar la situaci�n.



Putito, dale chupa y callate_ dijo. Ahaaaaaaaaa!!!


Nacho acab� en la boca de mi amigo, dejandole la cara totalmente lleno de
esperma.



Tr�gala como te dije, toda dale ni una gota en el piso_ dec�a Nacho.


Una vez que Alejandro se trag� toda la leche de su hermano, ambos se dieron
un beso de lengua impresionante y fue ah� cuando Nacho mir� hacia la puerta y
vio mi cara que rebozaba de asombro.




Cap�tulo 4



Con el miedo a cuestas me fui corriendo hacia mi cama, temeroso de que Nacho
le cuenta a Alejandro que yo hab�a visto todo.


No sab�a que hacer. Podr�a haberme escapado, pero no pod�a dejar a mi amigo
solo.


Me dorm�.


A la ma�ana siguiente me despert� y Nacho ya no estaba, se hab�a ido a
trabajar.



Buen d�a!!!_ me dijo sonriente mi amigo.



Buen d�a_ le dije dispuesto a contarle todo lo ocurrido y todo lo que vi.


Despu�s de escucharme durante unos minutos, Alejandro dijo:


_ Te molesta mucho que yo sea gay?_ me pregunt�.


_ No es eso, es que me molesta que no me lo hayas dicho_ le confes�.


_ Es que me daba miedo el rechazo tuyo y el de Mat�as, por eso no les cont�._
me dijo.


_ Pero me resulta raro con tu hermano, porque dejas que te haga eso_ pregunt�
curioso.


_ Se dio un d�a, el se enter� que yo era gay cuando me vio besarme con un
amigo de la secundar�a, y desde ah� amenaza con contarle a mis padres si no hago
lo que el quiere. Es por eso que tuve que ir a dormir ayer a tu casa._ dijo.


_ Pero no te da asco con tu hermano????_ dije.


_ Al principio si ,pero despu�s me acostumbre y goz� como si no lo fuera. Ya
se que es raro, pero me excita que sea mi hermano. Me calienta de una manera
impresionante. No lo entiendo ni yo, as� que no te pido que me entiendas_ me
dijo.


_ A tu hermano le gusta???_ pregunt�.


_ No se queja, lo �nico es que no me la chupa ni se deja coger, es activo,
pero le gustan m�s las mujeres_ dijo.


_Pero te trata mal!_ dije.


_ Si un poco, pero me hace gozar un mont�n_ dijo.


_ Est� bien como vos quieras, es decisi�n tuya no m�a_ le dije para terminar
la conversaci�n.


No sab�a si hacerlo o no, pero al final me decid� y le cont� todo lo que
hab�a vivido en los �ltimos cuatro d�as.


El qued� impactado, pero me dijo que lo hab�a sospechado, porque me ve�a un
poco m�s raro que como de costumbre.


_ Y te gust�?_ me pregunt�.


Yo, sinceramente, respond� que si y dejamos de hablar.


Antes de irme le dije:

_ Tom�, es una copia de la llave del departamento, cuando quieras anda, siempre
vas a ser bienvenido.


Cuando volv� a mi departamento mi cabeza no dejaba de funcionar. Pensaba
muchas cosas, pero lo que m�s me entreten�a era pensar en todas las cosas que
podr�amos hacer Alejandro y yo luego de que ambos sabemos la verdad del otro.




Cap�tulo 5



Ya era viernes y el paro en la facultad segu�a vigente. Hoy por la noche
saldr�amos con mis amigos de la facultad. Mat�as iba a venir a las ocho de la
noche y adem�s iba a quedarse a dormir.


No hab�a visto a Alejandro desde el d�a en que hablamos por lo que estaba
deseoso de volver a verlo.


Eran las nueve de la ma�ana y estaba a punto de estudiar cuando de repente
escucho el ruido de la puerta.


Cuando abr� lo vi a Joaqu�n que me hab�a venido a visitar.


_ Como hoy ten�a el d�a libre decid� venir a visitarte_ me dijo.


_ Que bueno, tengo un mont�n de cosas que contarte_ dije.


Despu�s de contarle todo lo sucedido en la casa de Alejandro nos prendimos un
cigarrillo y empezamos a tomar mate.


Mientras tom�bamos mate nuestras miradas se cruzaban y nuestras manos se
entrelazaron para terminar en un abrazo muy sentido por ambos.


_ �Me quer�s dar un beso?_ le dije.


Sin responder sus labios se acercaron a los m�os y nos dimos el mejor beso de
nuestras vidas. Nuestras lenguas se entrelazaron y nuestras manos segu�an
provocando un abrazo genial.


Nuestras manos segu�an acariciando la piel del otro y poco a poco nos fuimos
despojando de nuestra ropa.


Una vez que ambos est�bamos desnudos por completo comenzamos a franelearnos y
a besarnos con m�s intensidad.


Mis manos iban derecho a su culo y las suyas derecho mi verga.


Cuando mi verga estuvo bien parada se agach� y comenz� a besarle la punta y a
recorrer con su lengua cada rinc�n de mi pija.


Despu�s de humedecerla lo suficiente empez� a succionarla.


Yo mientras acariciaba su pelo y cog�a su boca de una manera fogoza.


_ Dale, Joaqu�n, chupala toda es toda tuya_ decia yo.


Despu�s de chuparmela unos minutos se paro y me dijo:


_ Sos un pendejo divino, mir� el culito que ten�s_ dijo mientras agarraba mi
culo con fuerza.


_ Gracias, y vos tenes un pecho incre�ble_ dije mientras emit�a un gemido
leve.


_ Chupamela un poquito hermoso_ me dijo.


_ Hagamos un 69 mejor_ dije.


_ Bueno pero antes dejame hacer algo importante_ dijo.


Con una mano agarr� mi culo y con la otra mi pija y me dio un beso de lengua
que me dejo perplejo.


Despu�s fuimos a mi cama y nos chupamos la pija hasta que me dijo:

_ Cojeme, quiero que me cojas todo el orto_ dijo Joaqu�n.


_ No se nunca cog� a un hombre Joaqu�n_ dije.


_ No importa yo te ense�o._ dijo.


_ No se si estoy preparado, me da algo de miedo_ dije.


_ No te hagas problema, vas a ver que es muy placentero, y la vas a pasar de
maravilla_ dijo para tranquilizarme un poco.


_ Bueno, est� bien, pero hag�moslo despacio._ dije decidido a probar esa
nueva sensaci�n.


El se abri� de piernas y me dijo te moje mis dedos con saliva y que masajee
con dulzura su agujero.


Lo hice de la forma m�s suave que pude. Con la yema de mis dedos frotaba
suavemente el agujero de su culito redondito y parado, mientras mi pija
comenzaba a crecer de una manera inimaginable.


_ Ahora, trat� de meter un dedo_ me dijo.


Y lo hice, introduje un dedo, y luego otro y por �ltimo, un tercer dedo que
lo hizo gemir de placer.


Con mi mano hacia un entra y sale que disfrut�bamos tanto el como yo y de a
poco si culito se fue dilatando tanto que ya cre�amos conveniente introducir
algo mejor: mi verga.


Con mi verga a tope me dispuse a enterrarla en ese hermoso orto. El abri� las
piernas un poco m�s para que todo se haga con la mayor comodidad.


Muy despacio trate de introducir mi palo en su agujero. Primero entr� la
puntita y muy despacio met� el resto, procurando no hacerle da�o.


La sensaci�n era muy distinta a la que se tiene con una mujer, ya que todo
est� un poco m�s apretado. Era distinto, no se si mejor o peor, pero era
totalmente distinto en todos los aspectos.


Mientras el se tiraba hacia adelante y luego hacia atr�s, yo acariciaba sus
pectorales y con la otra mano agarraba su pija, la cual se iba parando muy de a
poco y daba la sensaci�n de que nunca dejar�a de crecer.


Con movimientos circulares y manoseo permanente el momento se hac�a muy
ameno.


_ Dale hermoso, cogeme con toda tu fuerza, quiero sentirte m�s adentro_ me
dec�a mientras se segu�a tirando para adelante y luego para atr�s.


_ Si goza, me gusta mucho como aprietas mi verga con tu culito, segu�
movi�ndote m�s. _dec�a yo.


_ Acab� dentro de mi culo, quiero sentir tu lechecita caliente en mi orto,
pendejo_ me dec�a.


Los gemidos de los dos eran uno solo y el placer era infinito.


Era la primera vez en mi vida que cog�a con un hombre y la verdad no me
disgustaba en lo m�s m�nimo.


Despu�s de bombear durante casi media hora me vine dentro de Joaqu�n, el cual
me lo agradeci� mucho, con un beso en la boca.


_ Ahora chupame la verga, hermoso, que quiero que te tomes tu lechita, ok?_
me dijo.


Yo ya estaba entregado y no puse resistencia y empec� a mamarle la verga con
todas mis ganas.


Despu�s de unos segundos, Joaqu�n se vino dentro de mi boca, y una cantidad
de leche muy grande sal�a por la comisura de mi boca.


Era la primera vez en mi vida que probaba esperma de otro y la verdad al
principio me dio un poco de asco, pero luego, la excitaci�n pudo m�s y tragu�
toda su leche sin dejar una sola gota.


Ambos nos abrazamos y nos fundimos en un beso apasionado y nos dijimos un
mutuo GRACIAS.





Cap�tulo 6




Despu�s de coger, y de abrazarnos y besarnos por un rato, nos acostamos
desnudos en la cama y fumamos un cigarrillo entre los dos.


Abrazados siempre, hablamos de todo.


Joaqu�n me cont� que era hu�rfano desde los 18 a�os, ya que sus padre
murieron en un accidente de tr�nsito, adem�s era hijo �nico.


Desde esa edad tuvo que trabajar y mantenerse el solo, porque no ten�a ni
parientes vivos por ning�n lugar del pa�s.


Adem�s me cont� que se dio cuenta que era homosexual a los 16 a�os, cuando
tuvo relaciones con un compa�ero del instituto al cual asist�a.


No tuvo pareja hasta los 20 a�os. A esa edad conoci� a Guillermo, un chico de
17 a�os que fue su pareja hasta hace cuatro meses. Dijo adem�s que se separaron
porque Guillermo le meti� los cuernos con un marinero sueco que vino unos d�as a
Argentina.


Guillermo ahora vive en Suecia con un amigo del marinero, que es su actual
pareja.


Desde que se separ� de Guille no hab�a tenido sexo con nadie hasta que me
conoci� a mi.


Despu�s de hablar un rato m�s yo me fui a tomar algo a la cocina y Joaqu�n se
fue a dar una ducha.


Mientras me serv�a agua en un vaso escucho que alguien pone una llave en la
cerradura.


Antes de que abra, trab� la puerta y pregunte quien era y una voz me
contest�: Alejandro, tu amigo.


No sab�a que hacer, pero antes de que me decida, Alejandro ya hab�a entrado a
la casa, pues mientras estaba apoyado en la puerta sin querer destrab� la misma.


Yo estaba desnudo pero antes de que el pase logr� saltar al sill�n y ponerme
el boxer de Joaqu�n.


_ Hola, molesto?_ pregunto Alejandro.


_ Ehh, no pas�!_ ment�.


_ Estaba dando unas vueltas por ac� y se me ocurri� pasar a saludar y como
ten�a la llave te quise dar una sorpresa_ dijo.


_ Si, me sorprendiste un poquito_ le dije.


Antes de que ninguno de los dos pueda decir nada, Joaqu�n sali� del ba�o,
totalmente mojado y totalmente desnudo.


_ No ten�s una toalla, porque..._ dijo e interrumpi� su frase.


Alejandro qued� con la boca abierta y yo me puse tan rojo como un tomate.
Joaqu�n tan r�pido como pudo se cubri� con su remera, las cual estaba tirada en
el sill�n.


_ Perdonen, no me di cuenta, ya me voy, perdonen_ repet�a Alejandro despu�s
de semejante imagen.


_ Por mi no te hagas drama, ya sabes toda la verdad, as� que no hay nada raro
en esto, adem�s que cosa peor puede pasar, todo lo vergonzoso ya pas�.


Ni bien acabe de decir eso, suena el portero el�ctrico. Mir� el reloj y vi
que eran las ocho de la noche.


Cuando pregunt� quien era nadie contestaba, pregunt� nuevamente y nada.


Despu�s de unos segundos alguien toca la puerta diciendo:


_ Abr� Lucas, soy Mat�as, el pibe de seguridad me abri� la puerta.




Cap�tulo 7



Esto se estaba poniendo muy vergonzoso.


Mientras yo le dec�a a Mat�as que no encontraba la llave, Joaqu�n se
terminaba de cambiar (se tuvo que poner un slip m�o porque su boxer lo llevaba
yo), y yo tambi�n trataba de vestirme.


Mientras Alejandro se revolcaba de la risa en el sill�n donde hace unos
minutos hab�a tenido mi primera cogida homosexual.


Despu�s de que todo estuvo acomodado le abr� la puerta a Mat�as.


_ Que pas�, �perdiste la llave?_ me pregunt�.


_ Si, la hab�a dejado en el dormitorio_ dije con la cara a�n sonrojada.


Antes de empezar a hablar le present� a Joaqu�n y le dije que era un amigo
m�o y que se iba a quedar a comer con nosotros e iba a salir a bailar tambi�n
con nosotros.


Joaqu�n me mir� sorprendido, pero comprendi� que era lo m�s sensato que pod�a
decir en un momento as�.


Se saludaron y luego empezamos a hablar de todo un poco, sin dejar de emitir
sonrisas p�caras en cuanto pod�amos entre Joaqu�n, Ale y yo. Mat�as ni siquiera
se daba cuenta de lo ocurrido.


Cerca de las doce de la noche cuando ya hab�amos terminado de comer y
hab�amos tomado m�s de diez cervezas empezamos a hablar cosas t�picas de
borrachos.


La idea de salir a bailar segu�a en pie hasta que a Alejandro se le ocurri�
un juego algo desubicado para la situaci�n que est�bamos viviendo.


_ El juego es as�_ dijo. Nos sentamos los cuatro en circulo y ponemos una
botella en el medio de este. Despu�s hacemos girar la botella y al que apunte el
pico de esta tiene que cumplir con una prenda, si no la cumple tiene que sacarse
una prenda de ropa. La prenda a cumplir ser� elaborada por los otros tres.


Si alguno llega a quedar desnudo por completo deber� cumplir la prueba final
la cual ser� dictada por la persona a la que apunte el pico de la botella en una
nueva tirada. Entendieron???.


Aunque me parec�a un juego muy interesante dije:

_ No!!! Es un juego horrible, mira si nos vamos a poner en bolas. Dej� de
joder!!!.


Sin embargo Mat�as estaba encantado por la idea, no se si porque le gustaba o
por la borrachera que llevaba a cuestas.


Nos pusimos en c�rculo y el juego comenz�.


La primera vez el pico lo se�al� a Joaqu�n, as� como las cuatro siguientes.


Como las prendas a cumplir eran por dem�s de atrevidas, ninguno quiso
cumplirlas y por lo tanto todos prefer�an sacarse algo de ropa (opci�n que por
el calor que hac�a no era tan descabellada).


Despu�s de muchas tiradas las cosas estaban as�: Joaqu�n solo ten�a puesto un
slip (el m�o) y una media. Mat�as ten�a, la remera, el boxer y las dos medias.
Alejandro solo quedaba con su slip rojo y yo llevaba el slip y mi remera.


La pr�xima tirada, la botella apunt� a Mat�as, as� como las dos siguientes,
por lo que se qued� solo en slip.


La tirada siguiente a esa apunt� a Joaqu�n, el cual tambi�n qued� solo en
slip.


La tirada siguiente me toc� a mi, por lo que los cuatro quedamos solo en ropa
interior.


La pr�xima tirada iba a ser la definitiva y alguien tendr�a que cumplir con
la prueba final.


La botella comenz� a girar. Giraba, y giraba sin parar.


De repente comenz� a disminuir su velocidad se detuvo entre Mat�as y yo.
Justo en el medio.


Los dos tendr�amos que cumplir con la prueba final.




Cap�tulo 8



No sab�a lo que pod�a ocurrir. Joaqu�n y Alejandro estaban tan borrachos que
pod�an hacer que la prueba final sea totalmente picante y caliente.


Mat�as tambi�n estaba borracho y yo no me quedaba atr�s.


Joaqu�n y Ale estaban hablando en voz muy baja, como tramando la forma m�s
humillante de hacernos cumplir esa bendita prueba final.


Mientras Mat�as fue al ba�o les hable a Ale y Joaqu�n.


_ No se pasen con la prueba porque Mat�as no sabe nada de nuestro secreto_
les dije en voz baja.


_ Lo lamento mucho Lucas, es la excusa perfecta para que Mat�as haga lo que
queremos_ me dijo Alejandro tambi�n en voz muy baja.


_ Adem�s que te molesta hermoso, si dijiste que te re calentaba tu amiguito!_
me dijo Joaqu�n con voz algo lujuriosa.


_ �Eso no lo sab�a! �As� est� todo mucho mejor!_ dijo Alejandro sin disimulo.


_ No se hagan los p�caros porque sino terminar� todo mal_ dije.



Pero el efecto del alcohol no los dejaba pensar con lucidez y por eso me
esperaba que decidieran cualquier cosa y que todo terminara mal.


Despu�s de unos minutos m�s, Mat�as sali� del ba�o y mis otros dos amigos se
decidieron a hablar.


_ Bueno, hemos decidido que lo m�s justo es..._dijo Alejandro antes de
interrumpir la frase poni�ndole algo de suspenso.


Esperaba lo peor hasta que termin� de hablar.


_ Repito, hemos decidido que lo m�s justo ser�a que cada uno cumpla una
prueba diferente, la cual ser� distada por mi una de ellas y por Joaqu�n la
restante_ dijo Ale.


_ Por lo tanto, Mat�as se quedar� en la cocina conmigo y Lucas ir� a la
habitaci�n con Alejandro._ dijo Joaqu�n con tono serio.


_ Me parece perfecto_ dijo Mati.


Yo no pod�a quejarme, era lo m�s justo, adem�s Joaqu�n no se atrever�a a
propasarse con Mat�as, ya que no lo conoc�a.


_ Vamos Lucas???_ me dijo Ale.


_ Vamos_ le dije. Y juntos nos fuimos a mi habitaci�n a cumplir la prueba,
mientras Joaqu�n y Mat�as quedaron totalmente solo en el living.


No me imaginaba que era lo que me esperaba y realmente no sab�a si quer�a
saberlo tan pronto.


_ Bueno_ dijo Ale_ no va a haber prenda ni prueba ni nada en particular, solo
que voy a pedir un favor y solo eso.


_ Gracias,_ le dije_, me dejas m�s tranquilo, eso quiere decir que Mat�as no
va saber nada?.


_ Eso no lo aseguro, Joaqu�n va a hacer lo que �l quiera con Mati. Quedamos
en hacer lo que cada uno quiera_ me dijo.


_ Pero entonces... No entiendo nada_ le dije.


_ Bueno, cuando salgamos de la habitaci�n nos enteraremos que es lo que le
depar� el destino a nuestro amigo._ dijo Alejandro con un tono de duda.


_ Y cual es el favor que tengo que hacerte?_ le pregunte, para acabar de una
vez por todas con este circo.


_ Es f�cil, Luquitas. No te asustes. Lo que vamos a hacer es lo siguiente: Yo
voy a decir cinco acciones, las cuales vas a tener que realizar sin oponer
resistencia. Nos es tan dif�cil. No?_ me dijo.


La idea buena y mala, seg�n el lado de donde se mire, ya que depend�a mucho
del tipo de acciones que tenga yo que realizar.


Como no ten�a otra opci�n acept� y cruc� los dedos.


_ Dale, comencemos_ le dije apurado.


_ Bueno, empecemos con la primera acci�n_ dijo_. Lo primero que tenes que
hacer es sacarte el slip y quedarte desnudo.


No era tan dif�cil, solo un poco vergonzoso, ya que sab�a que me mirar�a de
arriba abajo sin perderse detalle de mi cuerpo.


Sin demasiadas vueltas me quit� el slip y qued� completamente desnudo. Mi
verga no estaba parada debido a los nervios que me provocaba esa situaci�n.


_ Bueno, lo segundo es que des una vueltita y dejes tu culito a la vista._
dijo.


No era demasiado problema y lo hice si chistar. Igualmente me sent�a muy
observado, lo cual comenzaba a excitarme.


_ La tercera acci�n, ser� un poco m�s dif�cil para vos_ dijo con voz
borracha._ Tendr�s que sacarme mi slip y dejarme desnudito a mi. �Qu� te parece,
Luquitas?.


_ Me parece que nos estamos yendo un poco al carajo._ dije.


_ Hacelo o si no habr� problemas.


Sin pensarlo lo hice y el cuerpo de mi amigo qued� totalmente desnudo.


A pesar que ya lo hab�a visto antes desnudo, nunca lo hab�a visto con la pija
parada.


Mi amigo estaba a full, y a decir verdad estaba muy bien dotado por la
naturaleza.


_ Muy bien!!!_dijo. _Ahora estamos a mano.


_ Dale, sigamos y terminemos con esto de una vez_ dije enojado por fuera pero
deseoso de conocer la pr�xima acci�n por dentro.


_ Lo pr�ximo a realizar es muy lindo para los dos. Nos vamos a abrazar y a
darnos un besito de lengua, mientras ambos nos apretamos el culito, el uno al
otro._ dijo.


Me dej� helado aunque me ven�a ver algo por el estilo.


Nos acercamos un poco y nos agarramos de la mano. Despu�s de mirarnos unos
segundos a los ojos nos fundimos en un abrazo sin medidas que hizo que nuestros
cuerpos desnudos se unieran sin dejar espacio de luz que traspase el centro del
abrazo.


�l agarr� con sus dos manos mi orto y comenz� a manosearlo con todas sus
ganas, mientras yo no me quedaba atr�s y le agarr� el suyo.


Ten�a un culito muy armonioso, redondito, parado y bien durito. Con muy pocos
bellos y una frescura que daba ganas de besarlo.


Con mis manos redondeaba sus gl�teos sin dejar de pensar que todav�a nos
deb�amos un beso de lengua.


Nuestros cuerpo estaban pegados por primera vez desde el d�a que nos
conocimos.


Pensaba que unos d�as atr�s esta escena hubiese sido totalmente detestada e
imposible.


Cuando pasaron cinco minutos del abraz� (los cuales pasaron muy r�pido),
Alejandro me mir� a los ojos y luego sac� una de sus manos de mi culo para
pasarla a mi rostro, el cual estaba empapado de sudor.


Luego de agarrarme muy fuerte apoyo su boca en la m�a y ambos las abrimos
para terminar todo eso en un beso apasionado.


La sensaci�n de besar a mi amigo era espectacularmente hermosa.


Me di cuenta que todo este tiempo hab�a esperado esto, pero que reci�n ahora
me hab�a dado cuenta de mis deseos reprimidos.


La sensaci�n de tener su rostro pegado al m�o me hac�an vibrar de calentura.
Su lengua se un�a a la m�a y sus manos se me acariciaban mi culo como si fuera
un tesoro.


Despu�s de unos minutos de puros besos, nos separamos.


Nos miramos a los ojos y sin decir nada volvimos a besarnos por un instante
m�s.


_ Siempre me imagine este momento_ me dijo Ale con voz cari�osa.


_ Yo tambi�n, solo que no lo sab�a_ me sincer� yo.


_ Igualmente falta la �ltima acci�n por cumplir_ me dijo serio.


_ Si no hay otra posibilidad, hagamos lo que hay que hacer_ dije sonriente.


Me imaginaba cualquier cosa despu�s de vivir ese beso y ese abrazo.


Imaginaba que me dir�a que nos chupemos la verga o que cogi�ramos un rato o
que lo penetre como lo hac�a su hermano o no se. Pero no. Solo dijo:

_ La quinta acci�n a cumplir es simb�lica. Solo te pedir� que guardes mi secreto
y que siempre seas mi amigo. Te necesito mucho y te quiero de una manera muy
especial. Nunca antes me hab�a pasado algo as� con alguien. No se que es
realmente, pero creo que estoy enamorado de vos.


Es por eso que no te pedir� coger o algo por el estilo, porque quiero que ese
momento sea especial y que estemos solos.


No se si vos sent�s lo mismo, pero sea como sea espero que me entiendas.


Me dej� helado y confundido.


Yo no sab�a si estaba enamorado de �l, pero si estaba seguro que no lo ve�a
solo como un amigo.


Este momento era muy raro y desconocido para m�.


Igual, entend�a lo que me quiso decir con respecto a tener sexo en ese
momento, pues para mi tambi�n deber�a ser especial.


Nos quedamos acostados en la cama, desnudos, sin hablar ni hacer nada, hasta
que de repente golpean la puerta de la habitaci�n.


_ Hey, nosotros ya terminamos con la prueba!!!. A ustedes les falta mucho?_
dijo la voz de Joaqu�n.


_ Si, ya casi estamos listos._ grit� Alejandro.


Antes de salir afuera, Ale, me pidi� que no nombrara este episodio ante
Joaqu�n y mucho menos frente a Mat�as. Yo le dije que se quedara tranquilo.


Cuando salimos de la habitaci�n encontramos a Mat�as desnudo y a Joaqu�n con
su pantal�n puesto ( sin su remera).


Antes que nada me quise sacar la duda y pregunt�:

_ Cual fue la prenda que tuviste que cumplir Mati??_ dije.


_ Una estupidez. Solo tuve que salir desnudo al balc�n y hacer 100 flexiones
de brazos, y vos?_ me pregunt� Mat�as.


Yo no sab�a que contestar y dije lo primero que se me ocurri�.


_ Casi lo mismo, con la diferencia que yo tuve que hacer las flexiones con
Alejandro sentado sobre mi espalda.


_ Huy, que feo!!!_ me dijo Joaqu�n con una mirada c�mplice.


_ Es que no se me ocurri� m�s nada_ dijo Alejandro con la misma intenci�n de
despistar a Mat�as.


Una vez que el juego acab� salimos al balc�n (ya vestidos) y nos fumamos unos
cigarrillos. Hasta que amaneci� y cada uno se fue a su casa. Todos menos
Joaqu�n, que se qued� en el edificio porque dentro de unos minutos tendr�a que
entrar a trabajar.


Esa noche fue inolvidable. No solo porque Alejandro me declar� su amor, sino
porque me di cuenta que pod�a confiar en Joaqu�n, ya que no se propas� con
Mat�as, lo cual hubiese significado poner en riesgo a nuestro secreto
compartido.





Cap�tulo 9



Despu�s de que Ale y Mati se despidieron de nosotros fui al ba�o a mear, ya
que la bebida hab�a hecho ya su efecto en mi vejiga.


Una vez que volv� a la cocina en donde se encontraba Joaqu�n me puse a hablar
con �l.


_ Muchas gracias_ le dije.


_ �Por qu�?_ pregunt� sorprendido.


_ Por comportarte como un verdadero caballero y un buen amigo y no contar
nada a Mat�as sobre nuestro secreto_ le dije para aclarar toda la situaci�n.


_ No es nada, har�a eso por cualquiera de mis amigos. Es una cuesti�n de
principios._ dijo.


_ Igual te lo agradezco mucho.


_ Tengo que confesarte algo sobre anoche_ dijo despu�s de unos segundos de
profundo silencio.


_ �Qu�?


_ Me sent� muy a gusto con vos y tus amigos. Nunca antes me hab�a sentido as�
en un grupo de personas. No se ser� que me excluyo tanto de la sociedad, que
nunca me di cuenta que tener amigos puede ser maravilloso._ dijo con un tono
melanc�lico.


_ Igual te pido disculpas por lo de ayer a la tarde, porque no me hab�a
acordado que le hab�a dado una llave a Ale. No sab�a que nos iba a interrumpir.


_ No hay problema. Eso le agreg� una cuota de suspenso y adrenalina a la
tarde_ dijo Joaqu�n.


A las seis de la ma�ana, Joaqu�n, se fue hacia abajo para comenzar su jornada
de trabajo.


Yo, como estaba muy cansado me fui a acostar un rato y a pensar en todo lo
que hab�a vivido anoche.


Pensaba en Joaqu�n y su actitud, en Mat�as y su tan preciada ingenuidad, pero
sin dudas en lo que m�s pensaba era en Alejandro y sus palabras.


Alejandro me hab�a dicho que estaba enamorado de mi y que le encantar�a que
yo sintiera lo mismo.


Yo estaba confundido. No sab�a cual era mi sentimiento verdadero, lo �nico
que sab�a era que lo quer�a m�s que a un amigo, pero no sab�a si tanto como para
decir que estaba enamorado de �l.


Pensaba en su cara, en sus labios (que esa noche me besaron a m�s no poder),
en su cuerpo desnudo (especialmente en la suavidad de su culito y en sus manos
que me abrazaron y acariciaron durante toda nuestra estad�a en la habitaci�n),
pensaba en sus ojos, en su sonrisa y especialmente en su forma de ser y en su
historia familiar.


Despu�s de que inund� mi cerebro de pensamientos sobre Alejandro me di cuenta
que lo quer�a mucho, y que realmente estaba enamorado de �l.


Pero a la vez pensaba en Joaqu�n. A �l lo quer�a mucho, pero no estaba ni
cerca de amarlo. Solo me interesaba el sexo con �l (sensaci�n que con Alejandro
nunca experiment�).


Tambi�n estaba Mat�as, que no sab�a nada de lo ocurrido en los d�as
anteriores a esa noche y por lo tanto ni se imaginaba lo que pasaba por mi
cabeza en el momento de la prueba final.


Y por �ltimo estaba el hermano de Alejandro, que le hac�a la vida imposible y
lo obligaba a tener sexo con �l durante las noches en que su hermana se iba a
dormir de alguna amiga.


De tanto pensar mi cabeza se cans� y me qued� dormido sin siquiera darme
cuenta de ello.



Por la ma�ana siguiente a la noche de la fiesta la facultad segu�a de paro y
eso indicaba que si la situaci�n segu�a as� durante mucho tiempo m�s tendr�a que
volver a mi pueblo para no ocasionar m�s gastos a mi familia.


Apenas me levant� mi di una ducha fresca para calmar el calor de esa ma�ana.
Cuando estaba sec�ndome suena el portero el�ctrico.


_ �Qui�n es?_ pregunt�.


_ Alejandro, abrime._ dijo.


_ Si sub�_ contest� yo.


A los pocos segundos golpean la puerta. Era �l.


Lo primero que iba a preguntarle era porque no abri� con su llave, pero
despu�s de ver su cara p�lida prefer� que hable �l.


_ Tengo que hacer r�pido. Mi hermano est� abajo, esper�ndome. Solo vine a
decirte que est� noche vengo a dormir ac�, si no ten�s problema.


_ No tengo ning�n problema. Pero �por qu� ten�s esa cara p�lida Ale?_ dije.


_ Porque mi hermana se va a unos d�as a mi pueblo y nos deja solos. Tengo
mucho miedo que quiera cogerme de nuevo y por eso te lo pido.


_ No hay drama. Ven� a la hora que quieras, pero vas a tener que dormir en el
living porque tengo solo una cama en la habitaci�n.


_ Si, no pasa nada._ dije.


_ Ah! Y no abr� con mi llave porque no quiero que Nacho se entere que puedo
entrar ac� cuando quiera. OK?_ dijo justific�ndose.


_ Dale, baja que sino va a subir �l._ le dije.


_ Si, mejor, pero antes dame alg�n apunte de la facultad porque le dije que
paraba ac� para pedirte eso. Si no, no me dejaba subir.


Despu�s de que yo le d� los �nicos apuntes que ten�a, o sea los de la primera
clase de anatom�a, el baj�.


A las nueve de la noche se escucha la puerta y luego alguien entra.


_ Hola_ me dijo Alejandro.


_ Hola_ le dije yo con voz seca.


_ Traje comida y una gaseosa para que comamos ahora_ dijo.


_ �Que bueno! Espera que prendo el horno._ dije.


Despu�s de que comimos fuimos al balc�n a fumar un cigarrillo y de paso
hablamos sobre lo ocurrido la noche anterior.


_ No quise incomodarte con mis palabras_ me dijo Ale.


_ No me incomodaste, solo me dejaste descolocado con semejante declaraci�n.
Adem�s, me gust� much�simo que me dijeras eso.


_ �En serio?


_ Si, me gust� y me gust� mucho tu abrazo, tus besos y tus caricias_ le dije
sincero.


_ A mi tambi�n me gustaron tus besos y tus caricias y me gustar�a que alguna
otra vez tengamos que cumplir una prenda para que suceda lo mismo que anoche.


No se si era porque me sent�a muy c�modo con �l o porque simplemente me
atra�a su cuerpo o quiz�s porque estaba enamorado de �l, pero dije:


_ No hace falta que haya que cumplir una prenda para repetirlo. Cuando vos
quieras y yo quiera podemos hacer eso y un poquito m�s. �No te parece?_ le dije.


_ Yo quiero.


_ Y yo tambi�n Alejandro_ dije.


Sin decir nada se acerc� a mi y me susurr� al o�do que me sacara la ropa
despacito, que quer�a verme hacerlo. Yo le dije que el haga lo mismo.


Muy de a poco nos desvestimos hasta quedar totalmente desnudos y mientras no
hac�amos nos mir�bamos con ganas de comernos a besos.


Luego nos acercamos m�s, para acariciarnos mutuamente y para darnos los
mejores besos de nuestras vidas.


Despu�s de besarnos sin pausa y sin calma me dijo:




_ Quiero chuparte la verga Luque, �me dejas?.


_ Seguro que te dejo. Ven� y sacame toda la leche que puedas_ le dije
lujurioso.


Mientras me tiraba en el suelo, �l me besaba todo el cuerpo, sin dejar rinc�n
sin recorrer por su saliva.


Despu�s comenz� a besarme toda mi pija y a pasarme sus manos sobre mi pecho.


Se arrodill� un poco m�s y comenz� a succionar todo mi pedazo hasta que la
punta de mi chota llegaba hasta su profunda garganta.


No paraba de chupar ni un solo segundo. Me lam�a las bolas y me las tocaba de
una manera muy dulce. Se notaba que ten�a un poco m�s de experiencia que yo, ya
que el placer que me hac�a sentir era indescriptible.


Cuando not� que me estaba por venir apart� su cabeza y acab� sobre el piso,
ya que no sab�a si le gustaba tragar o simplemente tener contacto con la leche
de otro.


Despu�s de acabar el comenz� a hacerse una paja delante de m�, pero yo no
quer�a que haga eso teni�ndome a mi a su lado y entonces fue cuando le dije:


_ �Quer�s que te la chupe un poquito?


_ Lo har�as?_ me dijo.


_ Por vos seguro lo har�a, adem�s ya lo hice otra vez con Joaqu�n_ le dije.


_ Bueno, chup�mela toda, amigo_ me dijo riendo.


Lo hice acostar en el sill�n y comenc� a masajearle la verga hasta que se le
par� nuevamente.


La pija de Alejandro era hermosa. De unos 18 cm. de largo y unos 3 cm. de
ancho. Suave y caliente.


Muy de a poco se la fui besando y acariciando. Despu�s con mi lengua le lam�a
los huevos y sub�a por su tronco hasta llegar a su cabeza, la cual era rosita.


Despu�s de humedecer bien su pija se la empec� a chupar con todas mis ganas.


A Alejandro nunca se la hab�an chupado y por eso yo era el primero en
hacerlo.


Alejandro gem�a y se retorc�a de placer al recibir mi espectacular mamada.


Despu�s de chup�rsela durante unos minutos se vino dentro de mi boca. Como no
era la primera vez que me tragaba la leche de otro no me dio asco sino que me la
tragu� con gusto.


Tragu� hasta la �ltima gota y luego de eso le di un beso en la boca.


_ �Te gust�?_ le pregunt�.


_ Si, me encant�. Nunca me la hab�an mamado y fue genial, lo juro._ me dijo
contento.


Despu�s de estar tirados en la cama un buen rato, nos fuimos al balc�n a
fumar un cigarrillo.


Estando en el balc�n (a�n desnudos) vimos que por la calle se acercaba un
hombre vestido de negro y azul y que ven�a directo a mi edificio.


El rostro de Alejandro se volvi� blanco de miedo al ver que ese hombre no era
otro que su hermano, Nacho.




Cap�tulo 10



Los dos nos miramos r�pidamente a los ojos y nos preguntamos mutuamente que
es lo que har�amos si �l viene hasta aqu�.


_ �Vos le dijiste que estar�as en mi departamento?_ le pregunt� a Alejandro.


_ No_ me dijo_ le dije que me ir�a a casa de Mat�as. Como �l vive muy lejos,
no cre�a que mi hermano fuera hasta all�, pero creo que se dio cuenta de mi
mentira.


_ Hay que hacer algo_ dije.


Mientras discut�amos la manera m�s convincente de mentirle a Nacho, este ya
hab�a tocado el portero el�ctrico.


Se me ocurri� algo_ le dije_ vos esc�ndete en el ropero y espera a que yo te
lo ordene para salir. Voy a tratar de convencerlo de que est�s de Mat�as, OK?


_ Espero que funcione, porque si no estoy muerto_ me dijo Alejandro
preocupado.


Atend� el portero y como era sabido era Nacho. Lo hice subir.


Antes de abrir la puerta me cercior� de que Alejandro estuviera bien
escondido en mi armario.


_ Hola Lucas, perd�name por molestarte a esta hora._ me dijo con voz
inocente_ Solo quer�a saber si mi hermano estaba ac� con vos.


_ No, creo que se iba a dormir de Mat�as_ ment�_ Si quer�s lo llamo por
tel�fono para ver si est� all�.


_ No, eso no importa_ dijo_ lo que quiero es hablar con vos sin que �l est�
presente.


_ �De que quer�s hablar conmigo?_ pregunt� extra�ado.


_ Sobre lo que viste la otra noche en mi casa_ dijo preocupado.


_ No vi nada en tu casa_ ment� nuevamente.


_ No mientas, viste cuando est�bamos teniendo sexo con mi hermano.


_ Yo nunca vi semejante cosa Nacho. Creo que est�s un poco confundido.


_ No me tomes por idiota!_ dijo algo furioso_ Yo mismo te vi cuando estabas
mirando por la puerta entreabierta. Igualmente es l�gico que no quieras
admitirlo. Es algo un poco chocante ver a dos hermanos coger, no?


_ A decir verdad si_ dije.


_ Entonces admit�s que nos viste_ dijo sonriendo.


_ Si, los vi, pero prometo que no voy a decir nada a nadie_ dije.


_ Eso es precisamente lo que quiero pedirte. Tanto mi hermano como yo no
queremos que nadie se entere de todo esto. Lo que hacemos es porque nos queremos
mucho y nada m�s.


_ Eso no es cierto_ dije enojado_ Vos lo obligas a todo. Yo mismo lo escuche
la otra noche.


_ Entendiste mal. Todo lo que digamos tanto mi hermano como yo en ese momento
es solo llegar m�s f�cil a la excitaci�n.


_ No te creo nada_ le dije.


_ Eso est� en vos. No depende de mi que me creas a mi o a �l, porque me
imagino que �l te dio su versi�n de la historia, la cual debe ser totalmente
distinta a la m�a, no?_ dijo Nacho.


_ As� es.


_ No te equivoques Lucas. Alejandro nunca admitir�a que le gusta que se lo
coja el propio hermano, lo cual le fascina y mucho menos te dir�a otros secretos
que se guarda en su cabeza._ dijo.


_ �El no tiene secretos conmigo. Somos muy amigos y nos contamos todo._ dije
ya enojado por completo.


_ Si no me crees preg�ntale que le pas� el verano pasado en la casa de mis
tios. Si son tan amigos te contar� que es lo que pas�.


_ No me interesa saber nada que el no quiera contarme_ le dije, aunque las
palabras de Nacho sonaban convincentes.


_ Entiendo que lo quieras mucho, y no dudo que el te quiera tambi�n. Es m�s,
�l te ama con toda sus ganas. Pero tanto te quiere que a veces podr�an mentirte
y lastimarte.


Alejandro no es una mala persona. Es un ser maravilloso, al que quiero mucho
m�s de lo que te imaginas y por eso vengo a decirte esto, para que puedas
entender si alguna comete alg�n error en busca de tu amor.



Yo estaba callado, escuchando las palabras de Nacho que, aunque Alejandro lo
negaba, sonaban muy convincentes y respetuosas.


Nacho sigui� hablando maravillas de Alejandro aunque recalcaba que era capaz
de hacer muchas idioteces con tal de ganarse el cari�o de alguien.


Yo, sin embargo no entend�a nada lo que estaba sucediendo.


No se porque pero cre�a profundamente las palabras de Nacho y por eso decid�
hacer algo muy arriesgado.


_ Nacho, esp�rame ac� un momento, ya vuelvo_ le dije.


_ Si, no hay problema Lucas, si quer�s me voy y te dejo hacer lo que estabas
haciendo. No quise molestarte_ me dijo.


_ No, espera ac� que ya vengo.


Me dirig� a la habitaci�n y abr� el ropero.


Alejandro estaba en ropa interior y no paraba de llorar desconsoladamente.


En ese momento cre� entender un poco m�s cual era la verdadera historia.


_ Sal� un segundo y ven� a la cocina_ le dije a Ale.


_ No, no quiero pasar m�s verg�enza_ me dijo llorando.


_ No vas a pasar nada que no quieras. Solo quiero aclarar unos detalles.
Ven�._ le dije para que se quedara tranquilo.


Despu�s de unos minutos, Alejandro (a�n en ropa interior, ya que su
vestimenta se encontraba tirada en el living), apareci� en la cocina, donde nos
encontr�bamos charlando Nacho y yo.


_ �Qu� haces ac�?_ dijo Nacho sorprendido.


_ Vine a dormir ac�. Te ment�._ dijo Ale.


_ Ves lo que te digo!!! Vive mintiendo_ dijo Nacho algo enfadado.


_ Esper� un segundo Nacho, dejemos que el hable_ dije_ Ale, cu�ntanos la
verdadera historia por favor.


_ Bueno, est� bien. Todo lo que dijo Nacho es verdad, pero quiero que
entiendas porque no te lo dije. Para mi es muy dif�cil aceptar el hecho de que
disfruto teniendo sexo con mi propio hermano y por lo tanto ten�a mucho miedo de
que no me entendiera y me dejaras solo.


_ Sab�s que no te iba de dejar solo Alejandro.


_ Entonces todo se termin� ac�?_ pregunt�.


_ �Qu� se termin�?_ pregunto Nacho sorprendido._ No me digan que
ustedes...Que vos Lucas sos...


_ Si, soy gay y tuve sexo con tu hermano hace unas horas._ le dije.


_ Se termin� todo?_ repiti� Alejandro.


_ No, no se termin� nada. Pero lo �nico que quiero es que aclaremos algunas
cosas. �Te gusta tener sexo con tu hermano? �Si o no?.


_ Si, me gusta._ dijo.


_ Mucho o poco?_ pregunt�.


_ Mucho_ dijo sonrojado.


_ Bueno, todo aclarado, si a vos te gusta yo no tengo el m�s m�nimo problema.
Pero te pido por favor que nunca m�s me mientas. Ah! Otra cosa. �Lo que me
dijiste todos estos d�as sobre nosotros es verdad?


_ Todo fue verdad. Nunca te ment� con respecto a nosotros_ me dijo con voz
suave.


_ Perdonen pero no entiendo nada de nada_ dijo Nacho totalmente p�lido y
sorprendido.



Despu�s de aclararle a Nacho toda la historia, Alejandro, se fue al ba�o, por
lo cual Nacho y yo quedamos solos y pudimos hablar un instante m�s.


_ Te puedo preguntar algo Nacho?_ dije.


_ Si, creo que ya no hay m�s secreto entre nosotros, no?_ dijo.


_ �A



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Relato: Los descubrimientos de Lucas (Relato completo)
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