Relato: Lanita (I)



Relato: Lanita (I)

Coger por dinero



Primera parte




�C�mo matar el tiempo hasta las seis y media?, meterme al
KeyMart, la soluci�n. Andaba yo preocupado por la falta de lana y con ese
pensamiento en mente me di a la tarea de recorrer los pasillos y mirar anaqueles
de madre y media. Entonces record� mis traves�as de hace a�os, cuando me met�a
al centro comercial de San Jer�nimo para tratar de ligar, y si era cierto, no
hay como una plaza comercial para conseguir nalga. Sonre� para mis adentros y
segu� caminando, encontr� un carrito vac�o y me lo llev�. Entonces ocurri�. La
vi de reojo. Una mujer de piel blanca y pelo lacio, casta�o, de facciones algo
burdas en el rostro, con un apretado pantal�n rosa que remarcaba su redondeado
nalgatorio y casi transparente se adivinaba la peque�a tanga que usaba, andar�a
ya por los 40`s. Fue un instante, pero lo suficiente como para entender que la
vieja esa andaba de cacer�a. La segu� de lejos, caminando despacio, ella se
meti� en el pasillo de los detergentes y se detuvo, pas� cerca de ella y me par�
a revisar precios de jabones de ba�o, volvi� a voltear y nuestras miradas se
cruzaron. Su rostro se sonroj�, segu� mi camino empujando el carrito y justo
antes de pasar al otro pasillo voltee hacia ella y ah� estaba mir�ndome tambi�n,
le hice un leve movimiento con la cabeza, como diciendo "�s�?", ella volvi� a
sonrojarse y con una ligera inclinaci�n de cabeza me devolvi� el "si", ya est�!,
me dije, veremos si cae.


Me dirig� a las cajas y me entretuve en un estante mirando
las revistas y de pronto ah� estaba ella, junto a mi. Tom� una revista y la
hoje�, se acerc� un poco m�s y dijo: "�cu�nto?".


De momento me confund�, pero reaccion� al instante,
"depende", le contest�.


--"�De qu� depende?...


--"De lo que quieras... --pensando r�pidamente las
respuestas--, puede ser r�pido o lento..., puedes querer muchas veces, o dos o
tres, normalito o cositas raras, depende del tipo de servicio...


Sonriendo un poco agreg�: "digamos que lo normal...".


--"Hummm, podr�amos estar una hora..., har�amos lo que tu
quisieras, tu pagas el hotel..., te cobr� 800...


--"Ay no!, cobras mucho...


--"El servicio est� garantizado...


--"Por el hotel no te preocupes, ir�amos a mi depa..., te doy
500...


--"Bueno..., que sean 600...


--"S�gueme, te espero afuera, vamos en mi carro, �traes
coche?, bueno, dejas tus cosas ah� y me alcanzas..., pero oye, una cosa..., no
trates de pasarte de listo..., no hace falta que compres condones, tengo algunos
en casa...


--"No te preocupes...


Pagu� las pocas cosas que llevaba en el carrito y la segu�,
ella iba adelante, moviendo acompasadamente sus nalgotas, apret�ndolas por
momentos, como mand�ndome se�ales... Fui hasta mi coche y guard� las cosas, eran
apenas las dos y media, tendr�a suficiente tiempo. La busqu� con la mirada,
tra�a una camioneta Windstar negra, casi nueva. Volte� a mirarme y se subi� al
auto. Llegu� hasta ah� y ya la puerta me esperaba abierta.


Nos dirigimos hacia los conjuntos residenciales de Coapa. Una
zona de casas bonitas y departamentos. Ya para llegar me dijo "trata de
esconderte para que no te vea el guardia, vivo en un segundo piso, al
estacionarnos tomas unas bolsas y me ayudas con ellas, para que si alguien te ve
sepa que vienes conmigo ayud�ndome con el mandado".


Me sent� un poco est�pido ante eso, yo, haci�ndole al
prostituto, pero ya estaba embarcado, ahora le ten�a que cumplir. La segu� por
las escaleras y llegamos a su departamento, por fortuna nadie nos vio. Al entrar
me dijo: "esp�rame en la sala, no toques nada, ahorita vuelvo".


Minutos despu�s regres� vestida con una coqueta bata de
dormir, un sugerente babydoll negro de cintas y holancitos que se abr�an por
delante. Se detuvo ante mi, que la esperaba sentado en el sof�, "desn�date", fue
su orden, ahora era ella quien me esper� sentada, siguiendo con mirada atenta
cada movimiento m�o hasta que qued� s�lo con la trusa.


Al verme ya casi desnudo ella se quit� la batita, dejando al
descubierto sus rotundas carnes blancas, sonriendo p�caramente y arrodill�ndose
en el sof� me par� la cola diciendo: "primero lo quiero de perrito..., no
olvides ponerte el cond�n...".


--"Ahora ver�s pinche vieja...", pens�. No me precipit�,
inici� mi tratamiento especial, acariciando su espalda, bes�ndola, recorriendo
con mi lengua desde su nuca hasta el nacimiento de las duras nalgas blancas. Al
momento ella se estremeci�, segu� lamiendo su espalda y acariciando su culo. Mis
manos se met�an entre los globos carnosos hasta tocar la raja de su pucha, ya
estaba mojada y caliente, ella se dej� hacer, gimiendo quedito. Segu� con mis
caricias, ahora le lam�a las nalgas, d�ndole delicadas mordiditas, abriendo los
globos de carne para ver su culo. Lo ten�a sumamente requemado, color rojizo y
con algunos pelos alrededor, alz� m�s las nalgas y se repleg� a mi cuando mi
lengua recorri� la deliciosa l�nea que separaba sus gl�teos, un "hummmmm
chiquito, que rico lo haces..., chupa ah�, en la colita..., hummmm, as�, con tu
lengua, titila con tu rica lengua chiquito, m�s..., m�s".


Le segu� mamando el culito por un buen rato acariciando la
raja abierta de su panocha casta�a, que luc�a la perfecta depilaci�n de la zona
del bikini. Hasta que not� que estaba chorreando y pr�xima al orgasmo, entonces
se detuvo, "no, ya, espera, quiero tu verga, anda ya ap�rate, me quiero venir
con tu palo en la pucha, anda ponte el cond�n papacito lindo...".


Raudo cubr� mi verga con el cond�n, me situ� detr�s de ella y
le apunt� el carajo entre los labios chorreantes de la pucha y entonces sin
dejar notar mis intenciones se la sepult� de un s�lo empuj�n, un "ahhhhhh"
seguido de un profundo suspiro salieron de su boca cuando sinti� la inesperada
penetraci�n.


Me agarr� a sus nalgotas e inici� el metisaca, despacio,
refreg�ndole toda la verga, removi�ndola hacia las paredes de la vagina, sacando
todo el pito para sepultarlo de un s�lo envi�n, aceler�, aument� la fuerza hasta
hacer que ella brincara con cada arrempuj�n, "as�, as�, fuerte, m�telo fuerte,
m�s r�pido, huyyy chiquito eres magnifico..., ay, m�s, m�s, todo, pica fuerte,
ya, ya me viene, ay papacito que me vengo, por todos los cielos me estoy
viniendo!...".


En esa posici�n le saqu� tres orgasmos, ella estaba
maravillada y gozosa, quer�a m�s. Cambi� de posici�n, de patitas arriba, se las
puse en mis hombros y taladr� y mam� sus tetotas hasta que tuvo otros dos
orgasmos. Pidi� tregua:


--"Espera, espera un poco, ya me cans� de esta posici�n...,
oye tu no quieres venirte?"...


--"Si tu quieres...


--"Si, quiero tu leche, pero al ratito, antes quiero que me
culees, ponte otro cond�n.


Ella se puso de ladito acostada en el sof�, mostrando sus
nalgas y abri�ndolas con la mano: "despacito papy, no me lastimes, hace tanto
tiempo que no lo hago por ah�...".


Ya con el nuevo cond�n, me hinqu� frente a sus protuberantes
pompis y con la punta de la verga embarr� los jugos de la pucha en su ojete,
abri� m�s las nalgas y apunt� el glande en el conjunto de pliegues, presion� un
poco, la cabeza resbal�, correg� el rumbo y tomando el lomo de la verga con la
mano apunt� bien en el culo, volv� a presionar, entonces el culo se abri� y la
mujer se quej�: "ay, espera, ay..., despacito, me destrozas con tu vergota
papito, ay..., despacito..., poco a poco...", si, poco a poco la verga fue
entrando, ten�a un culo muy apretado la mujerona esa, hasta que por fin llegu�
al fondo, todo el pito estaba dentro del intestino de la vieja, esper� un poco a
que se aflojara el culo, entonces se la empec� a meter y sacar, una y otra vez.


Luego de las primeras metidas ya mi verga iba y ven�a con
facilidad, el hoyo estaba distendido, abierto, ella gem�a de placer. Mientras
aceleraba las metidas con mis dedos jugaba en su pucha, metiendo dos de ellos en
el canal, sintiendo en la vagina como mi verga entraba y sal�a de su culo. La
cogida se aceler�, ella ya casi gritaba "m�s, dame m�s, la quiero toda, m�s, m�s
fuerte, c�geme fuerte, d�melo todo, ay me sacas el orgasmo, me vengooooo!"..
Sent� palpitaciones, apretoncitos ricos sobre mi verga, la vieja se estaba
viniendo, la pucha chorreaba ya sus jugos, estaba a punto de venirme, pero se lo
pregunt�:


--"�Quieres que me venga en tu cola?".


--"Si, pero no te quites el cond�n, quiero tus moquitos...".


Volv� a acelerar el metisaca, hasta que cuando ella se ven�a
de nuevo le dej� ir todo el garrote y mi verga eyacul� su semen dentro del
cond�n. Hab�amos terminado, ambos sud�bamos, le fui sacando la verga del culo, y
para sorpresa el culo permaneci� abierto, convertido ahora en un desmesurado
agujero abierto, lentamente el ano se fue cerrando, como gui��ndome un ojo.


Ya con la verga fuera de ella, la mujer se apresur� a
quitarme con cuidado el cond�n, su objeto era evidente, quer�a los mocos.
Exprimi� el cond�n y en la palma de la mano coloc� el semen, acto seguido se los
embarr� en la cara diciendo: "son magn�ficos como mascarilla". Sentado en sill�n
esper� a que la vieja terminara de aplicarse su mascarilla de mocos.


Luego se levant�, me ofreci� un cigarro y se fue a otra
habitaci�n, regres� con el dinero en la mano cuando ya estaba yo vestido:


--"Ten tu dinero, te lo ganaste bien, dame tu tel�fono, por
si requiero de tus servicios, adem�s tengo algunas amiguitas a las que tal vez
les interese contratarte. Lo sabes hacer muy bien!, me dejaste bien llena y
satisfecha, ya me andaba por una verga, desde hace tres meses ando en ayunas...,
gracias chiquito, por cierto �c�mo te llamas?...


--"Ll�mame Jos�", le contest� anot�ndole en un papelito mi
n�mero de tel�fono, "por cierto, no hay bronca si me ve salir el guardia?".


--"No te preocupes, yo le aviso que vas de salida que eres un
primo m�o que me ayud� con el mandado, bueno amorcito hasta la pr�xima, por
cierto ll�mame Magda".


--"Adi�s Magda", le dije antes de cerrar la puerta y
encaminarme a la salida de aquel conjunto habitacional.


Quien lo dijera, hac�a dos horas no tra�a casi un s�lo clavo,
ahora ten�a 600 lacas y adem�s hab�a descargado a plenitud la verga, vaya,
�qui�n lo dijera?



II



Pasaron algunos d�as, ya casi me hab�a olvidado del incidente
del KeyMart cuando una noche recib� una llamada:


--"Hola!, �eres Jos�?, habla Magna, me recuerdas...


--"Si claro, c�mo est�s, qu� me cuentas...


--"Yo bien, ya sabes. Mira hay una amiguita interesada en ya
sabes qu�, le dije que cobras mil. �Puedes ma�ana?, como a las diez, vamos a
estar tomando caf� en el Tonks de ya sabes d�nde, t� llegas y te sientas en la
barra, si ella se decide yo te hago la se�a y que te siga al estacionamiento.


--"Bueno pues, ma�ana, diez horas, Tonks, caf� en la barra y
�qu� tal con la amiga?...


--"Buena onda, es muy miedosa, pero ya anda ardiendo la
pobre, como que no se decide, tiene lana, si se hace el trabajo procura tratarla
con cuidado, tenle paciencia a la chiquilla.


Al d�a siguiente ah� estaba yo en el caf�, de inmediato vi a
Magda con otra mujer, pero qu� mujer. Buen�sima, mucho m�s joven que Magda y muy
bien vestida, �a �sta me la cojo hasta sin cobrarle�. Ambas voltearon a verme al
instante, la chica aquella avergonzada bajo la vista de inmediato. Ped� caf� y
esper�, entonces Magda se levant� para ir al ba�o y al pasar me dej� un
papelito: "este es el n�mero del celular de Jenny, ll�male desde el tel�fono
p�blico de aqu� mismo, yo voy a hacer tiempo en el ba�o, espero que se pongan de
acuerdo".


Segu� sus instrucciones, marqu� y Jenny contest�:


--"�Si... diga?


--"Soy Jos�, hola Jenny c�mo est�s, ya lo pensaste?...


--"No lo s�, tengo algo de temor..., pero dice Magda que eres
su amigo..., y que no hay problema..., pero no s�...


--"Bueno si quieres podr�amos platicar en persona en otro
lugar, la cosa es que te sientas bien, segura y que me conozcas un poquito
m�s...


--"La cosa es que no dispongo de mucho tiempo, si no es hoy,
ser�a hasta el mes que entra, salgo del pa�s a visitar a mis padres en
Madrid..., ay no s�..., �t� qu� me recomiendas?...


--"Que te decidas..., te aseguro que no te vas a arrepentir,
puedo ser como t� quieras que sea, haremos s�lo lo que tu pidas, nada m�s ni
nada menos...


--"Hummm, mira esp�rame en el estacionamiento, traes tu
coche?, bueno d�jalo aqu� y te vas en el m�o, ya de camino me decido �s�?...


--"Bueno...


Esper� unos minutos en mi carro, la vi salir, nerviosa,
mirando a todos lados como tratando de ver si alguien la hab�a descubierto, se
subi� en un BMW blanco, vaya!, tiene lana..., me hizo una se�a y a paso r�pido
llegu� a su carro, me sub� y ya estaba decidida:


--"Bueno si, vamos, pero que sea en un lugar lejos de por
ac�, tu me dices...


--"Toma la carretera libre a Cuernavaca, por ah� hay sitios
adecuados y muy escondidos...


Iba manejando r�pido, muy nerviosa. "Calma chiquita, calma",
le dije acariciando su mano. Ella volte� sonriente:


--"Es que nunca he hecho esto..., espero que me entiendas...


Ya para llegar a la zona de moteles ten�a un buen plan: a
Jenny hab�a que tratarla como novia primeriza, con paciencia, con cari�o, con
ternura. Entramos en el motel y ella me dio dinero para pagar, casi corriendo se
meti� en el cuarto y cuando entr� la mir� sentada en el sill�n hecha un manojo
de nervios.


Segu� al pie de la letra mi plan, entre besitos castos la fu�
encuerando, poco a poco, calent�ndola, sin abalanzarme, ella se dej� guiar pero
con algo de pena. Pese a ello su mirada se fij� en mi cuando me quit� la ropa y
mi verga apareci� erecta, lista para el di�logo.


--"Ay la tienes enorme!, nunca me cabr�!...


--"Con calma chiquita, ver�s que todo sale bien.


Media hora despu�s Jenny estaba con las patas apuntando el
techo del cuarto recibiendo en su hermosa y apretada puchita la estaca.
Suspiraba, gem�a, remov�a su cuerpo, yo aceler� las metidas, con fuerza, pero a
la vez con ternura, mam�ndole sus firmes tetas de enormes aureolas y pezones
color caf�. Le vino el primer orgasmo. Amoroso la dej� terminar. Dej� que bajara
las patitas pero sin sacarle la verga, me la empec� a coger despacito, metido
entre sus piernas, chup�ndole los pezones con delicadeza, con suavidad, empez� a
gemir de nuevo, su pelvis iba a mi encuentro, siguiendo mi ritmo, su respiraci�n
se agit� y separando con ansia mi cara de sus tetas me pidi�: "b�same papacito,
hazme sentir tu mujer, tu esposa", me ofreci� su boca abierta y me abraz� con
pasi�n, nos unimos en un intenso y ensalivado beso, mientras mi verga segu�a en
su traj�n.


Con las bocas pegadas Jenny se vino, tumultuosamente,
brincando sobre la cama, rodeando con sus piernas mi cintura, los "ahhhh, ahhhh,
hummmjummmm", sal�an de su boca, el placer amain� poco a poco.


Jenny separ� su boca para decir "ahora quiero hacerlo yo
arriba, me dejas papa�to?". Cambiamos de posici�n y entonces ella not� que no
ten�a cond�n:


--"Oye ponte el cond�n!, capaz que me embarazas...


Pero antes de dejarme colocar el dispositivo se agarr� de la
verga y con gesto amoroso se fue acercando a ella, la empez� a mamar
deliciosamente, succionando la cabeza, sumergi�ndola toda hasta su garganta, por
momentos la sac� para decir: "la tienes enorme cari�o, pero sabe tan rico!, y ya
comprob� que si me cabe, toda, toda tu enorme polla", volvi� a la mamada hasta
que se decidi� a montarme, pero antes coloc� ella misma el cond�n. A horcadas
sobre mi fue acercando su pucha de pelos cortitos y depilados al hiniesto
garrote, su mano dirigi� la verga y cuando se empez� a empalar un hondo suspiro
anunci� su placer:


--"Ay cari�ito eres riqu�simo, la tienes de oro papa�to
lindo".


Dej� que ella impusiera el ritmo, acelerando mis envites
cuando ella lo demandaba, chup�ndole las perfectas y duras tetas, mordiendo los
pezones, afianz�ndola de las nalgas para clavarla sobre la estaca cuando ella
iba de bajada. Sac�ndole casi toda la verga cuando iba hacia arriba. Por fin
entre gemidos se vino, aceler� los empujones, sigui� vini�ndose, no la solt�,
ella brincaba sobre mi encaj�ndose en el garrote, le segu� dando fuerte una y
otra vez, sigui� vini�ndose, una, dos y tres veces gimi�, grit� apenitas con
murmullos apagados y contenidos, hasta que cay� sobre mi pecho desfallecida pero
a�n con mi verga alojada en su cueva chorreante de jugos penetrantes.


Bes� su rostro para reanimarla, ella dijo: "�qu� b�rbaro!,
�qu� forma tienes de coger!, me vine tres veces as�, montada, eres perfecto,
ahora vente tu papy, te voy a sacar los moquitos con mi puchita".


Cumpli� su palabra la Jenny. Montada sobre mi se empez� a
mover apretando su gatita, d�ndome apretoncitos ricos, me dej� ir, y me pegu� a
sus tetas mientras bombeaba mi verga que eyaculaba dentro del cond�n, ella tuvo
un orgasmo m�s, pero delicado, de a poquito, de menos a m�s. La dej� descansar y
le pregunt�: "�quieres m�s?".


--"�M�s!, �ay chiquito si me dejaste muerta!, ya no papacito,
ya tuve suficiente...".


Luego ambos nos metimos a la regadera y mientras nos
vest�amos me entreg� un rollo de billetes: "aqu� tienes, te voy a dar algo
m�s... dig�mos como propina..., dame tu tel�fono, yo te llamo cuando regrese de
mi viaje, quiero volverte a ver, quisiera que fueras solo m�o...".


--"No lo s�..., ya veremos..., �c�mo te sientes?...".


--"�Super!, muy feliz y sobre todo satisfecha, eres
incre�ble..., nunca me hab�a venido tantas veces!..., ay tengo hambre, tanto
coger me sac� apetito, si quieres vamos a comer algo, yo invito y ah� platicamos
un poco, �quieres?".


Ya en un restaurante de Perisur supe m�s de ella. Se hab�a
casado hac�a tres a�os, pero el matrimonio no dur� nada, descubri� que su esposo
era "pu�al" --homosexual, de ida y vuelta, pues-- y que s�lo se hab�a casado con
ella para aparentar. Lo descubri� cogiendo en su propia cama con un adolescente
y le arm� tal esc�ndalo que el tipo termin� por aceptar el divorcio a cambio de
dejarle buen dinero, mucho al decir de ella. Desde entonces hab�a andado a puro
"dedo".


Conoci� a Magda en un curso de decoraci�n y se hicieron
amigas, se contaban todo, hasta sus necesidades afectivas, luego ambas fueron a
una tienda de art�culos sexuales y compraron consoladores de todos tipos que a
veces utilizaban cuando Jenny iba a visitar a Magda a su casa.


Ya a la hora del caf� me pregunt�: "Oye y c�mo es que te
dedicas a �sto?".


--"�La verdad?, pues ver�s..., Magda fue mi primer
cliente...".


--"�Qu�?".


--"Si, te lo aseguro. Esa vez andaba yo haciendo tiempo en
una tienda. Nos vimos. Me le lanc� y solita cay�. Yo ni siquiera pensaba en
cobrarle..., ella sin querer lo propuso. Pero la verdad andaba yo muy mal de
lana...".


--"O sea que..., ay mi madre..., no me digas!...".


--"Pues si, pero por favor no le cuentes nada, como sea me
hizo un gran favor...".


--"Madre m�a!..., y yo que pensaba que eras profesional, ella
me lo dijo: `coge como experto`, �y ya lo comprob�!..., �ay qu� cosas haces!...,
me dejas toda confundida!..., ahora quisiera saber m�s de ti...".


--"No, calma. As� estamos bien, pero promete que no le dir�s
nada de �sto a Magda..., y sobre todo te agradezco que me hayas ayudado con
dinero...".


-"Eso no importa..., pero..., ay no sabes..., se me ocurren
tantas ideas..., ahora me siento mejor..., como que lo que hiciste conmigo fue
m�s aut�ntico...".


--"Si, as� es...".


--"Ahora ni siquiera quisiera irme de viaje, desear�a tanto
que sigui�ramos juntos..., que me siguieras haciendo esas cosas!..., ay no s� ni
lo que digo, �t� que piensas?...".


--"Mira lo mejor es que hagas lo que tienes que hacer..., ya
despu�s veremos..., no s�..., tal vez cuando regreses podamos vernos, estar
juntos. Haz tu viaje, divi�rtete, conoce gente, amigos..., no s�, a lo mejor
all� conoces un mejor amante...".


--"�Eso no!, los espa�oles son insoportables, bueno en
fin..., no s�..., al menos promete que te cuidar�s..., que pensar�s un poquito
en mi..., que si te coges a Magda..., que sea s�lo eso, una cogida y ya!, ni se
te ocurra enamorarte de ella...".


--"Eso no, puedes estar segura. Pero como sea t� y yo no nos
conocemos..., pero lo que hicimos fue bueno para ambos..., al menos quisiera que
pensaras que no actu� con mala intensi�n...".


--"�Ya lo s� tonto!, �eres aut�ntico!, yo lo s� y ya te
quiero por eso, perdona que te diga esto..., pero hac�a tanto tiempo que no
sent�a aquello..., tanto placer..., eres maravilloso chiquito lindo!, y ahora
tengo que irme y dejarte ante una bola de viejas ansiosas de miembro!, Magda es
cabrona y sus amigas m�s, as� que tienes que tener cuidado, mucho cuidado...,
ser�a capaz..., de no s�...".


--"Ya no hables..., d�jalo al tiempo..., somos apenas un par
de amantes casuales, eso es todo..., me gustar�a volver a verte, como no!, pero
bueno..., al tiempo...".


Aquella noche ya en mi casa recib� una llamada de Magda: �Oye
canijo pues que le hiciste a la Jenny?, anda toda apendejada por ti...,
condenado!, mira antes de irse pas� a mi casa y me dej� algunas cosas para ti,
un celular activado para que le llames y un paquetito con un regalo, se me hace
que es un reloj..., no la hayas hecho que se enamorara de ti!, malvado...�".


--"No, f�jate que no..., todo estuvo bien, ya se le pasar�.
En cuanto pueda le hablo por tel�fono para calmarla, no ten�a por qu� dejarme
regalos..., eso estuvo mal...".


--"�Pues ac�ptalos tonto!, nom�s no te pases con ella..., no
lastimes sus sentimientos, habla claro con Jenny, oye �podr�amos vernos ma�ana
s�bado?, como a medio d�a, pasas por tus cosas y estamos un rato juntos...".


--"H�jole!, se me complica un poco el s�bado, tengo algunos
compromisos, pero podr�a ser como a las 2 de la tarde...".


--"�Orale!, donde mismo, en el estacionamiento del Tonks,
�sabes?, tengo una fantas�a..., hacerlo ah�, en el estacionamiento, dentro de mi
camioneta...


--"Hummm, veremos que se puede hacer...".



III



Aquel s�bado le hice tal faena a la Magda mam�ndole la pucha
durante m�s de una hora, para ella fue algo memorable hacerlo ah�, dentro de su
camioneta, sobre los asientos reclinados de atr�s, ella montada sobre mi cara a
horcadas, yo d�ndole lengua y dedos por todos sus agujeros. Se vino seis o siete
veces hasta quedar exhausta, pero cuando ella insisti�: "ahora d�jame mamarte y
te vienes en mi cara...", me negu� --ese d�a ten�a cita con mi novia. Ella
acept� un poco malhumorada, pero ya cuando platic�bamos en el Tonks comiendo,
sonriente me entreg� un sobrecito con mi lana, "son 500 eh papy?, los otros cien
son mi comisi�n por lo de Jenny", los acept� pensando "ah jija del maiz ahora me
vas a regentear!".


Luego le platiqu� que hab�a hablado con Jenny, estaba en
Barcelona, muy ansiosa pero que trat� de calmarla, podr�a seguir cogiendo con
ella pero no quer�a compromisos, le dije. "Haces bien, pero que todo quede claro
entre ustedes, para evitar malos entendidos", me dijo Magda. Luego pasamos a los
negocios:


--"Mira tengo amigas, te puedo conseguir algunas clientas...,
�c�mo ves?..., yo te las contacto..., pero ya sabes..., el 30 por ciento de lo
que ganes y una cogida gratis a la semana...".


Aguantando las ganas de mandarla a la chingada le dije: "que
sea el 20 y una cogida cada quince d�as..., eso dependiendo del n�mero de
servicios que haga, si es uno o dos a la semana, no me conviene...".


--"�Ay condenado!, pues cuanto puedes coger!...".


--"Hago hasta tres servicios al d�a, dependiendo...", le dije
mintiendo.


--"Tres al d�a... , �yo ni con el mejor de mis novios!, no
pues as� no, no podr�a conseguirte tantas citas..., pero haciendo cuentas...,
podr�as hacer tres o cuatro servicios a la semana y si les cobramos mil o mil
doscientos por cada uno..., ya es una lana..., �o no?".


--"Pues si, pero eso tiene sus inconvenientes..., antes que
nada me debes avisar con tiempo para organizar mis citas, tu te encargas de las
broncas..., tienes que saber con quien me recomiendas..., antes que nada mujeres
sanas..., sin broncas o enfermitas de ya sabes... �he?, nada de maridos celosos
o novios broncudos..., te garantizo limpieza y seguridad, nada de malas ondas,
robos o chantajes, yo cojo y ya, siempre con cond�n, de los buenos..., si hay
regalos o propinas, son para mi. Tu las pones, te llevas una lana y una
cogidita..., si se te hace poco ten en cuenta que yo tengo que cuidarme, ya
sabes, alimentarme bien, andar m�s o menos bien vestido... �qu� dices?...".


--"Ser�a cosa de pensar en todo..., podr�amos utilizar mi
depa..., por seguridad...", dijo Magda.


--"Eso no, desc�rtalo, podremos usarlo algunas veces, pero no
siempre, uno nunca sabe, siempre hay vecinos curiosos y al rato ya tienes encima
a la poli..., mejor moteles. La mejor hora es a medio d�a en centros comerciales
o caf�s, entre semana --viernes y s�bados es m�s dif�cil--, ah� hacemos
contacto, se hace la onda y ya".


--"Ay pinche Jos� piensas en todo, oye y dime nom�s te
dedicas a �sto...".


--"No para nada, yo tengo mi trabajo, soy divorciado, vivo
solo, no preguntes de eso. Pero hace tiempo aprend� que coger bien tiene sus
beneficios..., as� que... ya sabes...".


--"Mira se me ocurre, yo les cuento de ti, cualquier cosa,
antes me aseguro que no hay bronca, si tienen inter�s van a regresar, �yo lo
s�!, si hacemos alguna cita a lo mejor no siempre podr� ir, pero cuando yo pueda
te las pongo, haces el trabajo y cobras, luego hacemos cuentas. Por supuesto que
me aseguro que est�n contentas y que no cuenten nada a nadie, porque de lo
contrario tu podr�as hacer tus bisnes por tu cuenta y eso no me conviene...".


--"No hay bronca con eso..., �a poco crees qu� con lo que tu
me pongas completar�a la semana?..., para nada..., yo hago mis negocios por otro
lado..., no te preocupes...".


--"�Qu�?, a poco no te llenas...".


--"Esto es s�lo negocio, recu�rdalo. T� y yo podremos ser
buenos amigos, pero si hay pedo..., yo ni te conozco. T� tambi�n, si truena el
pedo..., ya sabes, si te vi..., ni me acuerdo...".


--"Eso es bueno saberlo. En cuanto a m�, pues mira conmigo no
hay bronca, vivo sola desde hace tiempo, soy maestra, gano m�s o menos, con eso
pago el depa..., antes de conocerte anduve de cacer�a, ya sabes, de vez en
cuando. Pero me cuido, ahora estoy tan de nalgas por ti que hasta me dan celos
de compartirte con mis amigas...".


--"Nada de nada..., entre t� y yo..., s�lo negocios...".


As� quedamos.



(fin de la primera parte)



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Relato: Lanita (I)
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