�l s�lo hab�a ideado lo del barro y lo de la cagada de perro.
Yo le hab�a ayudado en lo de los escupitajos y los mocos, y hab�a fallado al no
conseguir que me hiciera tragar su semen. Me hab�a negado a ser puteado por
pisar barro o mierda, en una ciudad tan sucia y pod�a negarme a serlo por
hacerme una paja en un wc. Adem�s si K se mostraba demasiado seguro le dir�a que
lo negar�a y ser�a su palabra contra la m�a y yo soy un se�or, respetado pero
sobre todo temido.

Mientras hilaba estos pensamientos lleg� K se me acerc� y me
pis�. Le pregunt� (muy amablemente) s� le apetec�a una cerveza, como si no
supiera la respuesta. Claro cerdi, y tabaco. Se los ped�, sin comentarios,
mientras �l empezaba a ahumarme. Me fije en el pie que me pisaba, llevaba las
zapas que hoy tendr�a que cambiar por unas de 105 euros (dar�a diez veces m�s
sin dudarlo por esas zapas).

Como de costumbre no paraba de mover esa gloriosa zapa encima
de mi bota, a todos nos gusta estando de pie apoyar una de las piernas un poco
m�s alto, pero lo de K no era comodidad era por chuler�a. Muchas veces me sent�a
como un oso cazado por K que es pisado cuando el vencedor se fotograf�a al lado
de su presa. La comparaci�n me excitaba, pues disfrutaba horrores siendo
sometido por ese ni�ato. Sin que �l se diera cuenta hab�a encargado a un
detective que lo siguiera por las ma�anas y que sacara fotos y anotara datos de
sus actividades. Para tener una tapadera en la agencia dije que una primita m�a
se hab�a enamorado de �l y que yo quer�a protegerla de un mal tipo.

Gracias a eso ten�a una buena colecci�n de fotos de K que
hab�a hecho ampliar y me estimulaban durante mis juegos de manos (bueno de manos
y de zapas)nocturnos. Tambi�n hab�a averiguado cosas interesantes. Me hab�an
proporcionado fotos de K robando en un coche, otras fotos lo mostraban comprando
y fumando porros (cannabis). Todos estos datos los ten�a presentes para
utilizarlos a mi antojo. K me manejaba cuando yo quer�a que lo hiciera pero si
quer�a hacerle da�o pod�a hacerle mucho. K segu�a en su incansable proceso de
ahumarme y hacerme vibrar la pierna, y con ella mi polla y mis huevos que
estaban a tope desde antes de que apareciera. K me dijo: ya abri� la tienda,
vamos a por las Etnies. Yo asent� en silencio como resignado, K sonre�a, la
tienda estaba cerca e �bamos caminando, se le notaba una chuler�a inmensa al
andar. Iba a conseguir unos playeros que casi nadie ten�a y a cambio me iba a
hacer quedar con las zapas que yo hab�a calificado de gitano. En el escaparate
me dijo cuales quer�a y me empalme al m�ximo. Eran a�n m�s chulas que las del
otro chico. Estaban totalmente atadas y deseaba que me pisaran, pero cuando las
aflojara K seg�n moda de la chavalada, ser�an chul�simas. Val�an 40 euros m�s
que las del chico de ayer, pero a K no le importaba el precio.

Por parecer humilde y amable le dije son las m�s chulas que
he visto nunca, tienes mucho gusto pillando ropa. K sonri� y me dijo tambi�n yo
soy lo m�s chulo que veras nunca. Mis piropos le sonaban a dominio ,a control a
poder. Me notaba muy colaborador y eso favorec�a los planes que hab�a
discurrido. Escogi� las zapas y s� las prob� mientras arreglaba los cordones y
la leng�eta a su manera. Le dije puestas son a�n m�s chulas que antes. Le ped� a
un dependiente unos calcetines sport de marca. K me pregunt� para que y le
contest� que no se pusiera esas zapas tan chulas y nuevas con unos calcetines
usados. Mi plan era llevarme no s�lo las zapas sino tambi�n los gastados y muy
usados calcetines de K. Se ve�an sucios y sudados deb�a llevar varios d�as
us�ndolos (lo que para m� era perfecto). Cuando se los quit� me lleg� un olor
fuerte y embriagador. Dios m�o, pens� si huelen as� a esta distancia voy a
alucinar cuando los bese. Ped� dos bolsas a una dependiente, en una met� las
zapas viejas dentro de la caja de las nuevas. En otra la abr� y le dije a K que
metiera los calcetines usados. Cuando ya iba a pagar se me ocurri� algo genial.
Le dije: K eres mi colega, �l sin dejar de aprovechar la oportunidad de
humillarme y recordarme quien mandaba contest�: Claro Cerdi. Yo me fing�
apesadumbrado pero aguante el insulto. Le dije, Mira una camiseta y una sudadera
que te molen, para ir a juego con esas zapas tan chulas

K me mir� con unos ojos de triunfo, gozaba al m�ximo me hab�a
obligado a comprarle unas Etnies y ahora en la tienda m�s cara de la ciudad le
ofrec�a voluntariamente comprar m�s cosas. Y eso despu�s de insultarme. Fue y
escogi� de lo m�s exclusivo que hab�a. Se acerc� a m� y me dijo te gustan estas
cerdita. Yo ignor� el insulto y le volv� a alabar su gusto. Para que me viera
totalmente humilde le insist� diciendo que pillase un pantal�n a juego.
Sonriendo por como suced�a todo escogi� uno muy ancho y largo de muchos
bolsillos y car�simo claro. Por fin lleve mi plan a su conclusi�n. Le dije
p�llate tambi�n unos slips de marca. As� cuando est�s con una chavala y te la
vayas a beneficiar no desentonaras.

K me dio la raz�n y escogi� unas tanguitas blancas de calvin
klein. Al verlas alucin� me imaginaba a K s�lo con sus zapas y ese slip, que
realzaba cualquier paquete. Y el de K ten�a motivos para pensar que no era
peque�o (una de las fotos que me hab�an proporcionado los detectives lo mostraba
meando en la calle, me la daban para mostrar sus impropias costumbres
barrriobajeras, yo la hab�a hecho ampliar y su polla en reposo era grande para
su edad). Le dije a K que fuera a cambiarse a un vestuario y que saliera todo de
estreno. La idea le encant� le di la bolsa de los calcetines para que guardara
all� toda la ropa vieja. Sali� totalmente cambiado y ped� la cuenta, las zapas
costaban 145 euros pero todo junto (camiseta, sudadera, pantalones, slip, todo
de marca) sumaba 409 euros. K me mir� asustado y dijo llevas tanto. Sin
contestar, sonre� a la cajera y saqu� mi tarjeta american express platinum (una
versi�n mas elitista y reservada que la oro) La cajera dijo que no la conoc�a y
llam� al due�o.

El due�o al verla casi me hizo una reverencia y le dijo a la
cajera, con esta tarjeta, el caballero puede comprar lo que quiera, incluso la
tienda. La cajera hizo la operaci�n mientras el due�o me preguntaba que me
parec�a la tienda. Por darle coba (y que K viera mi don de gentes) le dije que
ya era hora que un caballero se animara a montar una tienda donde podemos
comprar los se�ores. Asinti� muy agradecido y al salir complet� la reverencia. K
me dijo: cu�ntame lo de la tarjeta, le explique que las tarjetas no eran todas
iguales las tipo classic daban un cr�dito de 300 a 3000 euros, las oro de 3000 a
150000 euros y las platinum de ah� en adelante. K dijo y que vas a comprar de
m�s de 150000 euros. Sonriendo le dije mi Ferrari vali� 169000. Llevaba la bolsa
de la ropa sucia y yo se la cog�. Me dijo, que haces. Cogerla para tirarla a la
basura.

No que los pantalones me molan. Bueno le dije (por adularlo)
tienes raz�n los pantalones se los doy a mi criada y te los devuelvo limpios y
planchados, pero lo otro lo tiro. K asinti� era ropa vieja y gastada y ahora iba
completamente de estreno: calcetines, slip, zapas, camiseta, sudadera y
pantalones. Y todo de marca y por un valor de m�s de 400 euros. K le dije voy a
llevar estas bolsas a casa, darle tu pantal�n a la criada y tirar el resto
(ment�). �Las zapas tambi�n?, me dijo. No las zapas me han costado 400 euros y
las aprovechar� para mi chalet de fin de semana(un tremendo chalet en las
afueras de mi ciudad). K sonri� pues le hab�a recordado que fui obligado a
comprar unas zapas (que antes hab�a despreciado) por 100 euros y me hab�a
gastado cuatro veces m�s. Me acerqu� a K y le dije puedo pedirte un favor. K
contest� chulamente, puedes pedirlo y ya ver� si lo hago o no.

Era que no le digas a nadie que te he regalado estas cosas.
Me llevo bien con los chavales del bar y no quiero que anden de buitres
intentando que les compre sus zapas o que les regale rollos. Tranquila cerdita,
yo te proteger� de esos vampiros(s� me proteger�a para que nadie m�s se
aprovechase de m� y tenerme en exclusiva). Le dije diles que hiciste un
negociete y con las pelas que te sobraron pillaste un poco de ropa. Ya pero voy
tieso, p�same pelas, yo ya estaba preparado y en la billetera s�lo llevaba 2
billetes de 5 y uno de 10. Cog� los tres billetes y le entregu� 20 euros,
vaciando la billetera. No era la cantidad que �l desear�a (ayer me hab�a sacado
25) pero le daba todo lo que llevaba y eso demostraba que lo respetaba. K se fue
a presumir con sus amigos y yo a mi casa. En el ascensor rebusqu� entre la ropa
vieja y cog� el slip me lo acerqu� a la nariz y aspir� ese aroma.

Ol�a profundamente a sudor y orina era un olor acre, que me
recordaba al amon�aco. No sent�a ning�n reparo en realizar esas actividades en
el ascensor, porque ocupo todo el �tico del edificio y una vez que meto la llave
en el bot�n el ascensor no responde a ninguna llamada, siendo tan �ntimo como mi
propia casa. Llegu� a casa me desnud� y me tumb� sobre mi inmensa cama (2X2).
Segu� lamiendo el slip, por donde antes hab�a estado la polla los huevos y el
culo de K. No dej� ning�n trozo de tela sin chupetear, encontr� un par de pelos
de los cojones de K y los guard� en un sobre c�mo una reliquia. Fui sacando el
resto de mi bot�n. Los pantalones los lam� en la entrepierna y los puse en la
cesta de la ropa sucia. Luego la camiseta de K la lam� en la zona de los sobacos
y en la del ombligo. Varias veces, si hac�a calor, K se quitaba la camiseta y
mostraba unos abdominales marcados y unos pectorales coronados por unos pezones
perfectos.

Chupetee las zonas de la camiseta que hab�an rozado ese pecho
tan divino y la dej�. A�n me quedaba el plato m�s gustoso, cog� los calcetines y
aspir� era un aroma viril y fuerte, me embriagaba me pose�a era una droga y yo
era adicto a ella. No pude aguantar m�s y cog� las zapas empec� a olerlas,
besarlas, lamerlas, chupetearlas. Gozaba como nunca y lam� sus suelas hasta
notar la lengua dormida. Me pegu� con la suela de una en la polla, me doli� pero
al mismo tiempo me gust�. Me imaginaba que era K el que lo hac�a. Cog� los dos
calcetines y los puse sobre la almohada, me tumb� hacia abajo posando la nariz y
la boca sobre ellos y las dos zapas en mis manos sujetando mi polla. Inicie un
movimiento como si me pajeara entre las tetas de una puta, cosa que hab�a hecho
en varias ocasiones, pero esta vez entre las dos zapas mientras ol�a y besaba
los aromas del macho que me volv�a loco. Me corr� abundantemente y llen� la
suela de las dos zapas con mi semen. No quise parar ah�, cog� el slip y lo
chupetee completamente mientras volv�a a presionar mi polla contra esas zapas
acab� con una corrida inferior a la anterior, tambi�n sobre las suelas y la
colcha.

Las suelas de las zapas parec�an blancas de mi lechada. Me
qued� agotado hab�a sido una masturbaci�n fren�tica(�ltimamente hab�a empezado a
tomar varios productos que me hab�a recetado un amigo doctor y me corr�a de 2 a
3 veces diarias). Quit� la colcha para echarla en el cesto de la ropa sucia. Al
ir a limpiar, con la colcha, mi leche de la suela de las zapas quise probarla(me
interesaba tomar la de K, pero si me la echaba en un cubata no iba a saber su
sabor sola). El hecho de que estuviera sobre sus suelas(que ya hab�a lamido a
conciencia), le a�ad�a morbo. La prob� timidamente, pensando que bajaba cada vez
m�s por una pendiente(yo que hab�a obligado a tantas hembras a beberse mis
fluidos, ahora me beb�a los mios deseando que fueran los de un diecisietea�ero).
Era un sabor salado y segu� lamiendo, acab� por dejar las suelas listas para
inspecci�n.

Era como un yoghurt muy liquido y muy sensual. Me duch�, me
cambi� y fui al bar. Hab�a tardado casi dos horas en todas mis actividades. Al
llegar vi que K era el centro de atenci�n rodeado por casi diez chavales. S�lo
verlo me empalm� y descapull�, hac�a dias que alucinaba con lo atractivo que
era, pero all�, como un rey rodeado por su s�quito, vestido con sus mejores
galas era un espect�culo impresionante.

Me fij� en que todos ten�an cervezas y que K se alegraba
mucho de verme. Deb�a haber invitado m�s de los 20 euros que le hab�a dado y al
verme su falta de dinero quedaba solucionada. Desde su sitio en la barra llam�
al due�o y le pidi� un cubata para m� que hoy invitaba �l. Se lo agradec�, saqu�
3 billetes de 5 euros y los dobl� para tenerlos preparados. K se me acerc� y
dijo en voz audible. �Est� rico el cubata?. Si, los gratis saben mejor, alargu�
el brazo para chocarle la mano y al choc�rmela �l not� los billetes y me sonri�
encantado.

Se meti� la mano en el bolsillo y fue hasta donde sus colegas
pidi� pagar. Sub�a de 30 euros pag� y recogi� la vuelta. Se me acerc� a m� con
su cerveza y me dio las gracias por el detalle del apret�n con pelas. A m� me
molest�, no quer�a que K fuera mi amigo, deseaba que fuera mi due�o.

Que me puteara y me vejara, que me humillara y me sacara
cervezas, tabaco, dinero, ropa lo que quisiese. Para hacerlo volver a su
comportamiento habitual (y tener realidades para revivir en mis pajas, decid�
provocarlo). Le dije, est�s chul�simo y no con la ropa de gitano que llevabas.
Al coger tu pantal�n de la bolsa de la ropa sucia me lleg� un olor nauseabundo
de tus calcetines y slip, debiste usarlos varios d�as seguidos. Eres un guarro.

Su gesto cambi� de completa felicidad a odio. Me pis�(la
primera vez, yo esperaba de muchas, que me pisaban esas zapas) me pas� el brazo
por el cuello y como ayer me acerc� la rodilla a mi paquete(para recordarme la
paja) me presion� fuerte la rodilla contra la polla y los huevos mientras me
dec�a. Aqu� la �nica cerdita que hay eres t�, Putita(todo lo hab�a dicho en voz
baja pero esto �ltimo me roz� la oreja con sus labios y lo dijo m�s fuerte).

No olvides quien es el hombre y quien la putita, a�adi�(el
efecto conjunto de sus palabras, sus labios en mi oreja, su zapa en mi bota, su
mano fuertemente asida a mi nuca y la rodilla contra mi polla fue demoledor,
casi me corro). Yo baje la cabeza como consintiendo y le dije perdona no quer�a
molestarte, somos colegas. S�, pero t� eres mi putita(no abandonaba esa palabra
que me hac�a estremecer de pasi�n) y tienes que ser una cerdita obediente y no
hablarle mal a tu Amo. Por primera vez se defin�a como yo deseaba que fuera.
Ojal� quisiera ejercer de amo total y completamente.

Obligarme a cumplir su voluntad en todo momento y ordenarme
todas las perrer�as que se le ocurrieran(que me hab�a demostrado que no ser�an
pocas). Hab�amos acabado las bebidas y le dije(lo m�s d�cilmente posible), te
apetece una cerveza. Sonri�, hab�a recuperado el control. Interiormente debi�
pensar que no pod�a tratarme bien que me desmandaba. Deb�a someterme claramente
para que yo le obedeciera.

Claro las cervezas invitadas saben mejor, dijo, p�llate un
cubata que vamos a brindar por dos colegas que saben lo que son. Se me acerc� y
me dijo yo s� que soy el Amo y t�. Yo call� asintiendo pero K quer�a una derrota
completa, una sumisi�n total. Y repiti�: Y t�. Yo tambi�n lo s� le dije
humildemente. No CERDITA, quiero que me digas que sabes lo que eres. Me apret�
m�s el cuello y volvi� a presionar su rodilla contra mi paquete (yo estaba en
las nubes, esa presi�n sobre una polla totalmente descapullada era
deliciosamente insoportable). Como no contestaba sigui� frotando la rodilla
contra mi entrepierna, �l pensar�a que era una situaci�n humillante para m�,
ignoraba lo que sent�a. S� ,le dije, soy un cerdo.

No, PUTITA(lo dijo rozando sus labios contra mi oreja y en
voz m�s alta) me froto insistentemente la polla con la rodilla (lo hac�a con la
rodilla izda. Mientras cargaba todo su peso sobre la zapa que descansaba en mi
bota izda. La combinaci�n de sensaciones fue inaguantable me corr� (normalmente
despu�s de dos pajas seguidas tardo en hacerlo pero no ten�a ning�n control
sobre lo que me hac�a sentir). Soy una cerdita, le dije. Me solt� sonriendo y me
dijo dale dinero a tu amo. Abr� la billetera (pero estaba preparado) s�lo hab�a
1 de 5 y 1 de 10. Los cogi� y sonri�.

Me desped� diciendo que era tarde y ma�ana ten�a mucho
trabajo y �l sin desaprovechar la oportunidad me dijo: Vete a ganar dinero que
las putitas tienen que ganar mucho para sus chulos. Baj� la cabeza y me march�
sin replicar. Al llegar a casa me desnud�, cog� su slip y frot� el m�o que ten�a
mi leche, sobre donde horas antes, hab�a descansado la polla de K. Despu�s
proced� a lamer mi leche del slip de K deseando que fuera la suya.