NENA DE PAP�



Para pap� siempre ser� su nena, no importa cu�ntos a�os tenga, el a�n me ve jugando con mis mu�ecas, me cuida y me protege contra los hombres malos que quieren poseerme. El pobre pretende que llegue virgen al matrimonio, pobre, me da tanta pena�
Mi mam� es un poco m�s confidente, pero la verdad es que ni se imagina quien es su nena, su inocente nena.
Es que sus ojos de padres no pod�an comprender que la nena hab�a crecido, que ya no era una peque�a de rostro sucio con caprichos de infancia.
Parec�an no comprender que mis facciones de mocosa hab�an cambiado a las de una mujer provocativa, que mi cabello desprolijo de anta�o ahora largo y enrulado enloquec�a al sexo opuesto, que mi cintura era peque�a, que mis caderas eran anchas, que mi cola era enorme y que ten�a pechos m�s que envidiables. Y si no pod�an asumir mis cambios f�sicos como podr�an entender mis deseos de mujer�

Reflexiono estas cosas mientras mi mam� abre la ventana de mi cuarto, es mediod�a, la luz que se cuela parece quemarme el rostro y mientras siento su voz que me recrimina por la hora, poni�ndose como siempre como escudo entre m� y mi papi.
Tengo la cabeza que parece estallar, retumba como un tambor producto de la noche de fiesta, el exceso de alcohol no es buen consejero, estoy dolorida, sin fuerzas, pero debo comenzar mi d�a, debo transformarme en la nena de papi y mami�
La voz de mi pap� llega a mis o�dos

- Viaja! vieja! tengo hambre� decile a Magali que se levante! mir� la hora que es!!!
- Ya va! Ya va viejo� ya te olvidaste cuando �ramos j�venes?

Mi madre se acerca a mi lado d�ndome un chirlo c�mplice en las nalgas, y me advierte en voz baja

- Dale nena, no hagas enojar a tu padre�
- Ya voy ma� solo un ratito m�s�

Y giro sobre mi cuerpo, solo un ratito m�s para recordar todo lo vivido�

Todo comenz� anoche, como todos los fines de semana, iba a ir a bailar con las chicas, con mis amigas, unas botitas con tacos medianos, una pollera larga casi a los tobillos, una camisa oscura, mi cartera y no mucho mas, salud� a pap� quien le�a el diario fumando su pipa, me mir� de arriba abajo por encima de sus lentes de aumento, como aprobando mi discreta vestimenta, luego mam�, me acomod� el cabello, me dio un beso en la mejilla y me pidi� que me cuidara.
- Tranqui ma, acaso no me conoces?

Unos minutos despu�s me juntaba con Julieta y Virginia, mis amigas de puter�os, y ah� empezar�a la transformaci�n, fuimos como de costumbre a un viejo bar a tomar unos tragos, y al ba�o de damas para que naciera la nueva Magali, la camisa fue a la cartera, mi piel quedaba expuesta, solo cubierta por un bandeaux blanco que apretaba mis grande tetas, incluso dejaba marcar mis pezones como dos botones, luego la pollera, tambi�n a la cartera, para quedarme con la minifalda que tra�a abajo, tambi�n blanca, tan corta que por un cent�metro no escapaba mi sexo, ajust� un ancho cintur�n que parec�a partirme al medio, pero hac�a destacar la peque�a cintura y las grandes caderas.
A batir un poco el pelo, a pintarme los ojos, los labios, grandes aros y a ganar la guerra! A lucir mis torneados muslos, a rebolear mi perfecto culo, a excitar con mis pechos!

Y esta era otra Magali, la loba, la perra, la que se excitaba por los silbidos de los muchachos, la guerrera�
Ya dentro del boliche la rutina de cada fin se semana, humo, calor, m�sica, locura, transpiraci�n, pasi�n, la sexualidad transpirando por los poros, con mis amigas empezamos como siempre, provocando a los muchachos, con cosas que a ellos los enloquecen, bailando las tres, como aisladas del resto, toc�ndonos, acarici�ndonos, bes�ndonos labios contra labios, riendo, apretando sus pechos, sus gl�teos, dejando que apretaran los m�os, acariciando piel contra piel, apret�ndonos, todo estaba permitido a la hora de la seducci�n�

Y los machos, tal cual lobos hambrientos no tardar�an en rodearnos, con alguna bebida en sus manos, invit�ndonos, seduci�ndonos�
Un rubio de pelo largo, camisa desabrochada, se centr� en m�, era alto, atractivo, me dijo algunas cosas al o�do, la m�sica estaba tan alta que casi no pod�a escucharlo, mi respuesta fue la acostumbrada:

- Si me pag�s un trago te chupo la pija!

No hizo falta que lo repitiera, me tom� del brazo para llevarme a la barra, ped� algo que ten�a cognac, vodka, red bull y granadina, fuimos a un lugar oscuro y apartado, nos besamos, nos tocamos, el trago era muy fuerte pero guau! me iba soltando y predisponiendo, las manos del rubio eran como un pulpo, me apretaba las tetas, me tocaba el culo y hasta acariciaba mi concha, me atacaba por todos lados, no pod�a defenderme, la gente a mi alrededor parec�a no notar nada, cuando tragu� la �ltima gota deb�a pagar mi parte�

El afloj� su bragueta y baj� la cremallera, se tir� hacia atr�s en el sill�n, relajado, esperando que yo hiciera lo m�o, fui sobre el llevando mi rostro contra su bulto, al fin lo que quer�a! El trago era solo una excusa para llegar a su pija, busqu� bajo su b�xer, la saqu�, dura y amenazante, por Dios! qu� maravilla! Ten�a una verga sumamente gorda y gruesa, apoy� mis labios contra ella, se la pel� toda y comenc� a masajearlo r�tmicamente, cerca de la base, tomando sus test�culos, sent� la suavidad y la delicadeza de la piel rosada de su glande, se notaba hinchado y esponjoso, lo envolv� con mi lengua, por un lado, por otro, me encantaba chupar vergas, era una especialista, busqu� de introducirla lo m�s adentro posible, hasta que golpeara en mi garganta, sent�a mis pezones duros y mi concha toda mojada por la excitaci�n�

Mi mano lo acariciaba y mi boca lo saboreaba, su mano acariciaba mi cabello, ten�a el control, hab�a demasiada gente pero parec�a que est�bamos solos, el rubio comenz� a tener espasmos, cerr� mis ojos y aceler� el ritmo, esperando el final, su leche comenz� a llenar mi boca, mas y mas, y m�s� el exquisito sabor a hombre, quer�a retenerlo, saborearlo, disfrutarlo�
Esper� hasta que ya no saliera nada, me sent�, mantuve mis ojos cerrados, pasando su semen por toda mi boca, tratando de detener el tiempo en ese instante, al final tragu� todo�
El trat� de seguir, de quedarse conmigo, pero para m� el objetivo estaba cumplido, ya era descartable, ya no ten�a inter�s.
Me acomod� la ropa y fui al ba�o de damas a alinearme nuevamente�

Luego de unas vueltas encontr� a Virginia, no sab�a d�nde estaba Julieta, seguramente cogiendo por alg�n rinc�n, seguimos divirti�ndonos, pronto un moreno calvo de impresionantes m�sculos se interes� en m�, una remera celeste ajustada que impactaba a la vista.
Otra vez la misma rutina, un trago por una mamada, y al poco tiempo ya estaba chup�ndole la verga, otra exquisita verga para mi colecci�n, esa era mi vida, esa era mi diversi�n, chup� y chup�, esta vez me tom� desprevenida y su eyaculaci�n llego directo a mi garganta, como un b�lsamo recorri� mi interior, la sent� bajar por mi es�fago, segu� imperturbable hasta lamer todo, dej�ndola limpita como al principio.

A esta altura del relato notar�n que soy una chupa pijas profesional, a medida que pasaba el tiempo el alcohol me iba destrozando, haci�ndome caer mas y mas bajo, mas alcohol, mas locura, mas desenfreno, regalada como una puta, as� lleg� mi tercer intercambio, mi tercer lamida, mi tercer chupada�
Ya hab�a perdido la noci�n, la cordura, los tragos me hac�an doler la cabeza y no sab�a el destino de mis amigas, eructaba con sabor a leche, pero iba por m�s, no tengo l�mites�
Sal�a nuevamente del ba�o, confundida por la locura, un tipo me sigue y comienza a hablarme bailamos un rato, apenas unos minutos, es mi cuarta v�ctima, un trago por una mamada, ya no se que pedir, el lo hace por m�, es muy fuerte, demasiado fuerte, pero se r�e y me apura para que lo tome, vamos a un lugar apartado.

Se sienta, otra vez el ritual solo que me sorprende con el tama�o de su pija, no terminaba de crecer, era tan larga como puedan imaginar, estaba cansada de tanto chupar, no solo cansada, estaba recaliente! Ten�a la concha toda chorreada, y fui por todo, apenas levant� la pollera, apenas corr� la tanga, me sent� sobre el d�ndole la espalda, como un sable se introdujo en mi agujero, no terminaba mas de entrar! Exquisito y placentero, hermoso, perfecto, era tan largo que me causaba dolor, la excitaci�n de coger en p�blico era indescriptible, el tipo me tomaba de los gl�teos jal�ndome hacia abajo, haciendo que se enterrara m�s all� de lo conveniente, me mov�a, gem�a, llev� mi mano a mi cl�toris, innumerables orgasmos brotaban de mi ser uno tras otro.
Me molestaba la tanga que se interpon�a en el camino, dificultando la penetraci�n, el tipo no tuvo mejor idea que romp�rmela! Me gust�, pero fue de bastardos lo que hizo�
Mis movimientos hacia arriba y hacia abajo hicieron que el bandeaux fuera cediendo y mis tetas se escaparan, el tipo las tom� con fuerza, masaje�ndolas, apretando con locura mis pezones hasta hacerme doler, nadie parec�a notar lo que pasaba, nadie excepto el rubio, aquel que le hab�a chupado la pija al principio, a un lado, sobre una columna observaba discretamente el cuadro.

Esta situaci�n termin� por enloquecerme, cerr� los ojos, me mov� con furia, lo sent� venir, su leche caliente llen� mi concha, si! si! si! siiiiiiiii!!!!!!!
Me ahogu� en un mar de placer, de orgasmos, de locura�
Al volver en mi y recobrar la cordura, not� que el rubio ya no estaba, volv� a acomodarme la ropa como pude, ya sin tanga, con la leche que empezaba a rodar por mis piernas�
Estaba ebria, sucia, desprolija, entregada� ya no quer�a mas�
Me incorpor� para volver al lugar donde todos bailaban, alguien me tom� del cabello por la espalda impidi�ndome seguir, giro, el rubio, con un trago en la mano�

- Te estuve observando, tengo otro trago para vos�
- No, basta por favor, vasta de alcohol�

Pero el me fue tirando del cabello haci�ndome recular, llev�ndome nuevamente a la oscuridad, como un cazador arrastra su presa�
El rubio tendr�a una maldita suerte esa noche, jam�s lo hubiera imaginado, no quise el trago, mi est�mago en una mezcla de alcohol y semen ya no resist�a nada, tampoco quise chup�rsela nuevamente y mi concha estaba muy dolorida por la pija que se hab�a comido, sent�a dolerme el �tero, as� que le lo mir� ya entregada y le dije:

- Haceme la culo, quer�s?

Nos pusimos en cucharita, uno detr�s del otro, de costado sobre el sill�n. Levant� otra vez mi pollera, unt� mis dedos en saliva para preparar mi esf�nter, hab�a leche de la relaci�n anterior, as� que ayud�, pronto el me apoy� su verga y ante una d�bil resistencia su pija se introdujo en mi culo, a pesar de ser sumamente gruesa, la verdad es que no hab�a nada suficientemente grueso para mi joven y estirado ano.
El muchacho me la dio con esmero, me encanta entregarle el culo a extra�os, me hace sentir puta, sucia, ramera�
No me importaba nada, liber� nuevamente mis tetas para acarici�rmelas, para toc�rmelas, para excitarme a mi misma mientras su verga entraba y sal�a de mi cr�ter, me hac�a gemir, me hac�a gritar, no quer�a que pare, al final lo sent� eyacular en mi interior, toda su leche caliente.
Sac� su sexo de mi cuerpo, satisfecho, recuper�ndose a mi lado, mi culo estaba tan abierto que no pod�a evitar que escapara la leche de mi interior�
Tiempo despu�s sal�a con mis amigas, las tres borrachas, las tres cogidas como putas, me costaba mantener el equilibrio y la cordura, vomit� tras un �rbol, empezaba a aclarar, fuimos tomar un caf� para reacomodarnos, nuestra imagen de perras contrastaban con la de personas mayores que empezaban ya su jornada de trabajo.
Llegando a casa, volv� a ponerme la camisa y la pollera larga, por debajo quedaba la minifalda y mi intimidad desnuda llena de leche. Entr� sigilosamente, directo al cuarto, escond� los restos sucios, me puse mi pijama con payasitos verdes y rojos y a dormir�

Mi papi vuelve a insistir para que me levante, me hago la remolona, mami viene y me hace cosquillas en la cintura, la nena inocente, pura y casta debe empezar un nuevo d�a, tratar� de disimular mi jaqueca, mi dolor de ovarios, contener mi esf�nter y mi sabor a leche, vamos a almorzar en familia, para que papi y mami sigan orgullosos de su nena



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