Dijo llamarse Mario y enseguida ambos me invitaron a beber
algo, acepte y nos pusimos a conversar con don Roberto de su estad�a en la
capital(�l es de norte del pa�s). Dijo que su amigo le hab�a invitado a pasar
unos d�as en su casa y este aprovechando la oportunidad me invito a su
departamento, para que nos tom�ramos unos tragos. Le dije que ser�a m�s tarde
porque deb�a hacer algunos tramites antes y enseguida me dio la direcci�n.

Por la noche fui al departamento y don Mario sale a
recibirme, alegr�ndose por mi llegada. Se hac�an acompa�ar por otra persona
llamado Miguel de unos 35 a�os, bien parecido y de un cuerpo estupendo.

Luego me dijo que era un sobrino de don Mario y que venia del
sur. Luego cenamos y nos fuimos a la sala para ponernos a charlar mientras
beb�amos unos tragos hasta que alrededor de la media noche dije que me retiraba
pero todos en coro me dijeron que me quedara, por lo que acepte ante tanta
insistencia. Luego los tragos fueron pasando uno tras otro hasta que terminamos
todos muy mareados. Luego don Mario, se levanto de su asiento y acerc�ndose a su
sobrino le dijo algo al o�do y este enseguida se levanto y dijo, por petici�n de
mi t�o les voy a bailar y coloco m�sica muy suave y comenz� a bailar por entre
nosotros a la vez que se quitaba la camisa. Pude apreciar que todos estabamos
atentos a lo que �l realizaba.

Luego le tiro la camisa en la cabeza a su t�o y nos mostr�
unos pectorales fabulosos, con abundantes vellos, luego se desabrocho el
pantal�n y lo dejo caer quedando en unos diminutos calzoncillos(zungas), luego
miro a don Roberto quien adivinando le ayuda quit�ndole los zapatos y el
pantal�n. Sus piernas gordas y velludas hicieron que tuviera una erecci�n casi
inmediata, mientras observaba que ambos viejos miraban como lobos a una oveja.
Finalmente Miguel se acerca a m� y dijo ���quiero que me los saques!!!.

Y tomando mi mano la puso sobre su paquete que note algo
duro. Intente baj�rselos pero, enseguida �l agarra mi mano y dijo ���con tu
boca!!!. Me puse nervioso ante tal petici�n pero, los dem�s me alentaron a
hacerlo. Lentamente �l se volte� dando la espalda y estiro su culo como
ofreci�ndolo. Me arrodille y tome con los dientes su calzoncillo y se los baje
mientras Miguel se mov�a suavemente. Finalmente termine mi tarea llegando hasta
los tobillos y �l se los saca y me los tiro en la cara.

Pude sentir su olor a macho, y luego quise compartir el
trofeo con los dem�s y veo que ambos viejos estaban completamente desnudos con
sus respectivas vergas en erecci�n. Miguel me mira y dice ���ahora te toca a
ti!!!.

Le mire y pude apreciar su tremendo garrote que deb�a medir
unos 22 cent�metros y muy grueso. Me tomo de la cabeza y me beso suavemente,
mientras me sacaba la camisa , hasta que finalmente me desnudo por completo
mientras los viejos se pajeaban suavemente. Luego don Mario se levanto mostrando
su verga como de unos 17 cent�metros y algo gorda y fue donde estaba yo y
arrodill�ndose se meti� enseguida mi verga en la boca, mientras Miguel se paro
delante de don Roberto y puso su verga frente a su boca. Este la tomo entre sus
manos y luego se la introdujo en la boca. Por un rato ambos viejos mamaron
nuestras vergas, hasta que don Mario se levanto y nos dijo que nos tir�ramos en
la alfombra e inmediatamente �l con don Roberto hicieron un 69, y con Miguel les
imitamos. El falo me Miguel era muy rico y sus gotas de excitaci�n ya se
asomaban por su cabeza rosada, las que aspiraba r�pidamente mientras �l me la
chupaba afanosamente.

Despu�s terminamos chup�ndonos entre todos las vergas. Luego
Miguel y yo quedamos acostados de espaldas en la alfombra y ambos viejos se
sentaron en nuestros penes, don Roberto en el de Miguel y don Mario poso su
tremendo culo en mi pico, ensart�ndoselo de una vez dando un tremendo gemido de
placer. Con Miguel nos mir�bamos mientras ambos viejos cabalgaban y a la vez se
masturbaban.

Despu�s de un rato ambos viejos se detuvieron y se levantaron
y don Mario se sienta en el garrote de Miguel y comienza a cabalgar mientras don
Roberto me comienza a mamar la verga por una rato hasta que don Mario le dice:
"d�jalo Roberto", este deja de mamar y me dice que le meta mi verga a Mario.

Este se tira hacia el pecho de Miguel mostrando su culo
ensartado y don Roberto comienza a mamar y le mete un dedo para dilatarle a�n
m�s el hoyo hasta que me mira y dice, "se lo tienes que meter", enseguida me
moje con salive e intente penetrarlo hasta que logre ponerle unos cent�metros
dentro, mientras don Mario se quejaba y dec�a que siguiera. Pod�a sentir la
verga de Miguel rozando con la m�a. Luego comenz� a cabalgar nuevamente
trag�ndose ambas vergas hasta que entre gritos y gemidos acabamos con Miguel
inundando el culo del viejo. Luego retire mi verga de su culo y este a su vez se
levanta chorreando el semen por entre sus piernas. Luego con Miguel les ayudamos
a los viejos a acabar masturb�ndolos a ambos.

Despu�s nos duchamos los cuatro juntos y terminamos culiando
nuevamente a ambos viejos y tambi�n se lo met� a Miguel, quien despu�s me dijo
que esa era la primera vez, me sent� orgulloso de ser el primero.

Despu�s de ese d�a tuve algunos encuentros con Miguel en mi
casa, y nos penetramos mutuamente. Pero �l finalmente tuvo que regresar a al
sur.

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