Relato: mi hermana Lina mujer divina Mi nombre es Ernesto y tengo 20 a�os, pero la historia que les voy a contar ocurri� cuando yo ten�a 16. Lo que les voy a narrar es la forma c�mo seduje e hice m�as a las dos mujeres que m�s amo en el mundo: m� mam� y a mi hermana.
Eran tiempos dif�ciles en mi casa, mi padre hab�a muerto meses atr�s y a mi madre le toc� hacerse cargo de mi hermana Lina y yo. La ausencia de mi padre al que m�s afecto fue a m� y eso se vi� reflejado en mi desempe�o escolar y casi estuve a punto de ser expulsado del colegio al que iba. Ante esa situaci�n, mi madre y mi hermana comenzaron a estar m�s pendientes de m�, me ayudaban con mis tareas y se comportaban m�s cari�osas conmigo que de costumbre. Poco a poco la relaci�n entre los tres se hizo m�s cercana. La confianza que logramos me permit�a hablar de todo lo que me pasaba y con el tiempo supere el trauma de la muerte de mi padre y volv� a ser el de antes.
Al pasar tanto tiempo al lado de mi mam� y mi hermana, comenc� a sentir que algo hab�a cambiado en m�, ya no sent�a por ellas el cari�o y el afecto propios de un hijo o un hermano, sino que me comenzaron a interesar como mujeres. Pero no s�lo fue la ayuda que me brindaron la que cambi� la forma como las quer�a, su f�sico no estaba nada mal. Marcela, que en ese momento ten�a 39 a�os, conservaba a�n la belleza que tuvo en su juventud. Su cuerpo y, en especial, su cola se manten�a firme gracias a su rutina de gimnasio, pero lo que m�s resaltaba en su figura eran sus senos, esos hermosos par de pechos, que se hab�an puesto m�s grandes por las dos maternidades, sobresal�an desafiantes y erguidos, en sus 1.65 m de altura.
Por el lado de Lina que ten�a 18, la vista no era nada despreciable. Ella era m�s alta y delgada que mi mam�, pero ten�a los senos m�s peque�os, lo que no los hac�a menos deseables. Sobresal�a en ella su rostro, ella era capaz de acabar con cualquiera con una sola mirada de sus bellos ojos claros.
Continuando con mi relato, yo ya estaba consciente de que me hab�a enamorado de Marcela, mi madre, y de Lina y sent�a que cada d�a que pasaba ese amor era m�s grande. Ellas, por supuesto, no lo notaron pero yo me estaba muriendo de ganas de que ellas fueran m�as.
Decid� que para conquistarlas deb�a mostrar la pose de ni�o ingenuo, que no conoce nada en la en la vida. La ocasi�n de poner en pr�ctica mi plan se presentar�a unos d�as m�s tarde, cuando en una conversaci�n que tuvimos los tres, mi madre me pregunt� porqu� no me consegu�a una novia, que no le gustaba verme tan s�lo. Yo puse en marcha mi plan y le confes� que me sent�a intimidado por las mujeres de mi edad, era mentira, y que me daba pavor cuando trataba de conquistar a alguna. Ellas se rieron de mi problema y prometieron que me ayudar�an a que me convirtiera en todo un gal�n. Los d�as pasaron, y la promesa de mi mam� y mi hermana se tradujo en una serie de cambios que tuve que hacer para que, seg�n ellas, me resultara m�s f�cil conquistar a una chica. Los cambios fueron desde mejorar mi vocabulario hasta cambiar mi forma de vestir. No se imaginan lo dif�cil que para mi fingir que estaba de acuerdo con todo lo que ellas me propon�an, pero como esto hacia parte de mi plan tuve que hacerlo.
Decid� esperar un tiempo prudencial entre los consejos que me daban y los resultados que se supon�a que yo obtendr�a con las mujeres. Consider� que pasadas tres semanas eran tiempo suficiente para seguir adelante con mi plan. Es d�a ingrese al cuarto de m� hermana para hablar con ella, con el fin de hacerle creer que hab�a una chica en la escuela que gustaba mucho, pero que no me atrev�a a besarla.
-No seas bobito, si besar es lo m�s f�cil del mundo- dijo Lina cuando le cont�.
-Pero es que en serio me da miedo, me comienzan a temblar las piernas y me aterra pensar que la voy a embarrar con ella- le respond�
-No le pongas tanta atenci�n a eso, s�lo d�jate llevar y ya.
-para ti es f�cil decirlo porque ya los has hecho, pero yo, estaba mintiendo, nunca he besado a una chica
-�en serio no las hecho?- me pregunt� incr�dula.
-cr�eme, no lo he hecho
-bueno eso cambia las cosas, siempre es dif�cil la primera vez
-si vez, por eso es que necesito que me ayudes.
-�c�mo?
-pues, expl�came como tengo que besar a una mujer
-mira Ernesto, yo te lo explicar�a, pero es que no s� c�mo hacerlo. Besar es algo que s�lo se aprende practicando, no creo que exista una teor�a sobre como besar.
-entonces ens��ame a besar
-�qu�? �Quieres que te bese?
-si no hay otra forma
-ni se te ocurra, somos hermanos y eso estar�a mal
-pero Lina, t� prometiste que me ibas a ayudar.
-si pero una cosa es darte consejos y otra que te bese. Adem�s, mi mam� y yo creo que ya hemos hecho bastante.
La conversaci�n se me estaba saliendo de control as� que hice la cara m�s triste que pude y le dije:
-cre� que quer�as ayudarme
Y antes de que Lina me dijera algo sal� de ah� y me fui a m� habitaci�n.
M�s tarde, Lina llego a mi habitaci�n y me dijo:
-oye Ernesto, perd�name por lo ahora, pero es que enti�ndeme que lo que me estabas pidiendo no era cualquier cosa
- Lina enti�ndeme t� a m�, en serio necesito ayuda con eso. Es un problema que ya me est� comenzando a afectar mucho.
- ya lo s�, por eso es que vine.
-�a qu� te refieres? Pregunt�
-vamos a hacer una cosa
-dime
- yo te ense�o como tienes que besar
- en serio- le dije emocionado
- s�, pero me tienes que prometer que no le vas a contar a nadie, y a nadie es a nadie
-te lo juro
- eso espero
- bueno, lo primero es que no tienes que tener miedo de acercarte a una chica
- ahora ven aqu�
Me acerque y nuestras caras quedaron frente a frente, y en eso Lina tom� la iniciativa y me dijo que abriera un poco la boca y me dejara llevar. Al principio, s�lo juntamos nuestros labios.
-si ves, no tienes por qu� tener miedo � dijo cuando nos separamos
-ahora, te voy a ense�ar c�mo es un beso de verdad
Volvimos a juntar nuestros labios, pero est� vez Lina desliz� su lengua en mi boca y comenz� a darme el mejor beso que me han dado en toda mi vida. Yo s�lo correspond�a a su beso tratando, en lo posible, de que no se notara que ya sab�a besar.
-ahora te toca a ti besarme- dijo
En este tercer beso, mi lengua busc� su boca y nos fundimos en un apasionado beso que alcanz� a durar bastante. Yo alternaba movimientos suaves con algunos bruscos, para que ella quedara convencida de mi inexperiencia.
-bueno que te pareci�- le dije
-para ser la primera vez, no lo haces tan mal- me respondi�
- en serio, lo hice bien-
-s�, pero todav�a eres muy tosco. A las mujeres les gusta que las besen con suavidad
-pero es que es la primera vez que lo hago.
- por eso mismo, lo que tienes que hacer es seguir practicando y vas a ver como mejoras.
-�me vas a seguir ense�ando?- pregunte
-no se- dijo
- por favor, te juro que no le digo a nadie.
Se lo pens� un momento y me dijo:
-est� bien, pero s�lo una par de veces m�s listo.
-listo- le dije
-pero ahora no puedo porqu� me tengo que ir-
Se levant� y antes de que saliera de mi habitaci�n le dije:
-oye, gracias por lo que haces por m�.
- para que veas como cumple t� hermana sus promesas.
En los d�as que siguieron, Lina continu� ense��ndome como besar y creo que le comenz� a gustar besarme porqu� se supon�a que ser�an un par de veces, y esto comenzaba a volverse una costumbre. En una ocasi�n, mientras la besaba se me ocurri� abrazarla, puse mis manos en su espalda y la atraje hacia m�. Ella no opuso resistencia, as� que mis manos comenzaron a bajar de su cintura hacia su cola. La situaci�n estaba muy bien, yo besando a mi hermana y, adem�s, acariciando su hermoso trasero hasta que reaccion� y se apart� de m�.
-Que estamos haciendo Ernesto. Esto est� mal dijo tratando de recuperar el control de la situaci�n
-Pero si s�lo me est�s ense�ando a besar dije
-No, esto ya se pas� de la raya. Una cosa es ense�arte algunas cosas para que mejores besando y otra lo que estamos haciendo.
-Que quieres decir
-No ves, parecemos un par de novios por la manera como nos estamos besando y eso est� mal. Dijo muy seria
-No es para tanto, s�lo fue un beso dije tratando de quitarle importancia al asunto
-Es malo todo esto, somos hermanos y no deber�amos estarlo haciendo. Lo mejor es que dejemos las cosas as�.
-Pero Lina, solamente me est�s ayudando y no veo nada de malo en eso, s�lo eres una buena hermana conmigo. O es que ya no quieres ayudarme dije haci�ndome la victima
-Mira Ernesto, no es que yo no quiera ayudarte, lo que pasa es que� no olv�dalo
-Que es lo que pasa dime dije
-Que todo esto de estarnos besando me est� haciendo sentir cosas
-cosas? No entiendo
-S�, t� sabes que llevo rato sin tener novio y pues desde que comenzamos esto yo�
-T� qu�?
-No olv�dalo y se levant� para irse a su habitaci�n
-dime que es lo que te pasa y la agarr� del brazo para detenerla
-su�ltame Ernesto
-No hasta que me cuentes dije
-d�jame ir dijo tratando de soltarse y casi por llorar
-s�lo dime que es lo que sucede dije
-lo que pasa es me estas comenzando a gustar contento y comenz� a llorar
-Gustar? � dije sin saber que decir
-S�, no s� qu� me pasa, pero cada vez que nos besamos me siento rara y eso no puede estar pasando -dijo entre sollozos. La solt� y luego se fue a su habitaci�n.
La declaraci�n de mi hermana me puso muy feliz porque, al parecer, mi plan estaba funcionando de lo lindo. Ten�a entonces que idear algo m�s para profundizar mi relaci�n con mi hermana, �sea, tener acceso a su cuerpecito.
Las dos semanas siguientes fueron demasiado aburridas, Lina no hac�a m�s que evadirme y s�lo estaba cerca mientras mi mam� se encontraba en casa, de resto permanec�a encerrada en su habitaci�n o sal�a con sus amigos. Pero todo comenz� a mejorar cuando mam� nos comunic� que se ausentar�a por unos d�as de la casa, por un congreso al que hab�a sido invitada. El viaje no le tomar�a m�s de 4 d�as, pero era el tiempo suficiente que necesitaba para avanzar con Lina.
El viernes d�a del viaje de mi mam�, le hizo prometer a Lina que estar�a pendiente de m� y que entre los dos nos ocup�ramos de las comidas, como buenos hermanos.
Ese d�a, no pude hacer mucho Lina hab�a ido a la universidad y, luego, sali� con sus amigas y regreso algo tarde y se encerr� en su habitaci�n. Por lo que la diversi�n deb�a esperar.
A la ma�ana siguiente, me levante temprano y prepar� un delicioso desayuno para Lina y luego la llam� para que bajar� a desayunar.
-Qu� es todo esto Ernesto? �dijo sorprendida por el desayuno
-No es nada quer�a que hici�ramos las paces y que mejor que lo que m�s te gusta- dije
-No ten�as que hacerlo, yo no estoy molesta contigo es s�lo que he tratado de evitarte para que no sigan pasando cosas entre nosotros- dijo sent�ndose a comer
-Y si pasaran �cu�l ser�a el problema?- dije mir�ndola fijamente
-Como que si pasaran, Ernesto somos hermanos es indebido s�lo pensar en ello-dijo
-Pero Lina yo te quiero mucho y tu sabes que soy t�mido con las mujeres, pero contigo me siento bien y no me gustar�a que esto acabara- dije
-No me hagas esto, yo tambi�n te quiero pero debemos seguir siendo s�lo hermanos-dijo
Termin� de desayunar y se levant�. Otro intento fallido con Lina, pero bien saben que no est� vencido quien pelea y yo estaba decidido a todo con mi hermana y no ten�a mucho tiempo, mi mam� regresar�a en dos d�as y pod�a echarlo todo a perder.
Afortunadamente, el medio d�a de ese s�bado result� ser excesivamente caluroso, por lo que era cuesti�n de tiempo para que Lina tomara una ducha para refrescarse. Me asegur� de conseguir la llave del ba�o y s�lo me restar�a esperar. No tengo que contarles la tremenda erecci�n que ten�a.
Al fin el momento se di�, la escuch� cerrar la puerta del ba�o y luego abrir la llave de la ducha. Me desnud� y me dirig� al ba�o, mi coraz�n lat�a por la excitaci�n y el susto de lo que estaba por pasar. Introduje la llave y abr� la puerta procurando hacer el menor ruido. Entre y la vi por fin, de espaldas, en todo su esplendor. El agua recorriendo su espalda y perdi�ndose en su culito fue lo mejor. Entre en la ducha y la sorprend� por atr�s.
R�pidamente, la sujet� sin dejarle tiempo a reaccionar.
- QUE HACES ERNESTO DEJAME!! -grit� tratando de zafarse. Pero yo no estaba dispuesto a que eso pasara por lo que la agarr� m�s fuerte. Era obvio que la superaba en fuerza.
-SUELTAME!! Continu� gritando
-te amo Lina- le susurr� al o�do
-NO SIGAS CON ESTO, EST� MAL!! Sigui� gritando pero menos fuerte
Comenc� a acariciarle sus senos con mis manos mientras nuestros cuerpos segu�an muy pegados, ella mostraba cada vez menos ganas de zafarse. Acerqu� mi cara a su cuello para seguirle susurrando que la quer�a y luego para besarlo descaradamente. Manten�a mi erecci�n y Lina se dio cuenta de ello por el continuo roce.
Continu� haciendo lo mismo por unos segundos y decid� ir m�s all� al ver que la resistencia de Lina se esfumaba. Baje una de mis manos y fui en busca de su cuevita h�meda por la ducha. La primera sensaci�n fue que ten�a el vello crecidito, seguro era el d�a en que se lo depilaba. Al final llegu� a su lindo agujero y le introduje un dedo y pego un salto pero no se enoj�, ni intent� evitar que lo hiciera.
-Para Ernesto no quiero hacerlo as�- dijo mientras le besaba el cuello, le acariciaba una teta y ten�a dos deditos en su co�ito. Esas palabras ya no sonaban como suplicas para qu� la dejara en paz, sino aceptaci�n de lo sucedido. La solt� y la dej� que se volteara, me mir� y dijo:
-no debiste meterte as� en el ba�o pero est� visto que esto que sentimos ya nos supera- dijo acerc�ndose y d�ndome un beso en la boca.
-Lina yo no quer�a hacerlo, pero era la �nica manera de acercarme a ti- dije
-No importa ya- dijo y continu� bes�ndome
La situaci�n por fin hab�a llegado a donde quer�a. Ten�a toda la aprobaci�n de Lina para hacer lo que yo quisiera. Luego de un par de besos debajo de la ducha me inclin� para besar sus pechos, ese par que tanto delirio me hab�an causado. Estaban erguidos y con los pezones duritos por el agua caliente que no cesaba de caer y por la excitaci�n del momento. Mientras los chupaba, Lina puso sus brazos alrededor de mi cuello y comenz� a gemir y a apretarme contra sus pechos. Como pude mir� hacia arriba para ver la cara de Lina�. sus ojos estaban cerrados y su cabeza echada hacia atr�s� estaba pas�ndoselo bien.
Yo continu� un rato jugando con sus pezones y deleit�ndome con la dureza de los mismos. Mis labios se cerraban sobre ellos, los succionaban para luego dejarlos escapar con un chasquido, pronto me di cuenta de que la presi�n sobre los pezones de mi hermana hac�a que ella se retorciera y suspirase�. mord� suavemente su pez�n derecho.
- Mhhhhhh � dijo Lina contone�ndose -
Mis manos hab�an bajado hasta su cola y yo manten�a sus prietos gl�teos presion�ndolos hacia m� sin dejar de mamar aquellas hermosas tetas.
Decid� bajar un poco m�s y pronto su vagina estuvo al alcance de mi boca. Not� el contacto h�medo y caliente sobre mis labios� empec� a besar aquella raja olorosa� mi cara empez� a mojarse por el agua combinada con los fluidos de mi hermana. Nuevamente mir� hacia arriba y entre su vello p�bico en primer plano pude ver a mi hermana sob�ndose con desenfreno las tetas�..
- Aaaaaahhhhhhh��.. aaaaahhhhhh� vamoooos!��. sigue!��mhhhhhhh
Abr� mi boca y frot� mis labios entreabiertos contra su co�o� sus flujos resbalaron por mi boca y los chup� �vidamente� le separ� el co�ito con mi lengua y me entretuve en hacer dibujos con ella sobre su cl�toris duro y resping�n� eso pareci� volverla loca!
- Aaaahhhhhhh�� s�iiiiiiii�� no paraba de decirlo Lina
Aaaahhhh�.. siiiiii�. siiiiii�.mhhhhhh � dijo ella arqueando su espalda y elevando su co�ito por encima de mi cabeza. Era claro que la hab�a hecho venirse.
Me levant�, la abrac� y luego cerr� la llave de la ducha. Le di un besito en los labios y le dije que sali�ramos del ba�o y fu�ramos a mi cuarto, lugar donde tanta veces hab�a fantaseado con ese momento. Tome una toalla, la ayud� a secarse y la dej� secarme. Me acarici� la verga varias veces en el proceso.
Salimos desnudos y cogidos de la mano rumbo a mi habitaci�n. Lina ya era m�a, cualquiera cosa que yo quisiera hacer me estaba totalmente permitido.
Entre a mi cuarto, me sent� en la cama y lleve su mano a mi pene semierecto, no tard� mucho en entender lo que quer�a. Comenz� a acariciarlo tiernamente con su mano y luego se coloc� de rodillas ante m�. Lina se apart� de un manotazo su larga cabellera negra de la cara y hundi� su cabeza entre mis piernas y all� estaba yo a punto de recibir mi primera mamada de labios de mi hermana. Su boca se recre� primeramente en cerrarse suavemente alrededor de mi glande� mi pene reaccion� al momento y la oleada de placer que me invadi� di� lugar a que �ste se hinchase nuevamente.
Lina despu�s de recorrer varias veces toda la longitud de mi rabo arriba y abajo hicon su lengua, de una sola vez la introdujo completamente en su boca. Empez� a succionarme y al mismo tiempo me masturbaba ligeramente con su mano. Yo estaba en el s�ptimo cielo, notaba sus movimientos sobre mi pene que crec�a y crec�a con cada una de sus succiones. Estaba comenzando a sentir aquella maravillosa sensaci�n que vaticinaba una corrida.
Yo pensaba que iba a morirme!
Me levante, la tome por la cabeza y comenc� a follarla en su boca. Clav� furiosamente mi polla contra su boca mientras en varias acometidas me pegu� la m�s salvaje de las corridas de mi vida. Mi hermana qued� quieta durante un momento y luego empez� a retorcerse como una v�bora intentando quitarse de encima aquel pene que le aprisionaba cort�ndole la respiraci�n mientras le inundaba su garganta con un torrente de ardiente leche.
Luego de esa tremenda mamada que me dio mi hermana nos recostamos en mi cama, tratando de recuperar fuerzas. Ah� desnudos y abrazados como una pareja cualquiera, Lina me confes� que desde hacia tiempo se hab�a estado imaginando esto pero que no se atrev�a a hacerlo por los condicionamientos morales que exist�an. Seguimos acostados acarici�ndonos tiernamente a la espera de que yo tuviera otra erecci�n. No tuvimos que esperar por mucho, con una mujer como mi hermana no creo que ning�n hombre tenga que hacerlo.
Comenc� nuevamente a besarla y a acariciarla en forma hasta que estuvi�ramos otra vez en un clima de excitaci�n total. Luego saque los preservativos, quer�a que Lina fuera m�a muchas veces por lo que ten�a muchos en la mesa de noche aguardando por este momento. Lina se ri� al verlos y dijo en un tono my p�caro que nos iba a tomar mucho tiempo utilizarlos todos. Despu�s de colocarme el cond�n, la bese y me coloque sobre ella. Ella poco a poco fue abriendo su piernas sin dejar de besarme y acomodando m� verga a la entrada de su sexo fui lentamente ejerciendo presi�n siguiendo las instrucciones de ella que con los ojos cerrados me dec�a que me moviera, que me quedase quieto o que se la metiera un poco m�s. Sent�a como mi verga, envuelta en ese pl�stico iba abri�ndose camino al pasar por esa estrecha abertura. Poco a poco fui penetr�ndola hasta que sent� como se abr�a su sexo aloj�ndome perfectamente mi verga. Ella se quejaba un poco, pero igual me dec�a que le gustaba. AL rato ya el dolor de ella se transformo en placer y comenzamos a hacer el amor por primera vez. Era tan placentero para m� verla, ella lo estaba disfrutando mucho, gem�a suavemente y me mord�a la oreja pidiendo que no parara. Mi verga funcionaba al 100% una y otra vez fui penetrando el cuerpo de mi hermana, cada vez con m�s fuerza, metiendo mis manos descaradamente bajo su cuerpo, apretando sus nalgas, sintiendo sus pechos desnudos en mi pecho, bes�ndonos a ratos, solo separados por lo gemidos incontrolables de ella.
-AAAAAAAAAhhhhhh��ahhhhhhhh�.ah�..a�� siguee�.siggg�. atinaba a decir mi hermana
Sus gritos me animaron m�s a�n y mi polla entr� de nuevo salvajemente en su co�ito. Lina estaba totalmente abandonada al placer.
-Ummmmmm sssiiiiii, sobame las tetas, ac�rcate hermanito.
Me acerque y le di un beso, y comenc� que a chuparle las tetas.
-Ahora hazlo m�s r�pido.
As� que empec� a darle m�s fuerte, se me sal�a la verga de la fuerza con que lo hac�a. As� estuve por un rato, hasta que todo aquello pudo m�s que yo�. la sensaci�n de placer era sublime pero no pod�a contenerme m�s, mir� hacia abajo para ver c�mo mi polla se hund�a sin compasi�n en el ardiente cuerpo de mi hermana. Ella gritaba como una loca mientras yo me corr�a otra vez, pero esta vez en su co�o, dentro de su lindo co�o!!!!jo
- Ahhhhhhhhhhhh�� � exclam� -
- AAAAAAAAAAAAHHHHHH�� siiiiiiiiii�..siiiiiiiii��. maaaaaaaaaaaas � chillaba ella mientras se pegaba la corrida m�s intensa de sus dieciocho reci�n cumplidos a�os -
Permanecimos as� un momento mientras mi respiraci�n se sincronizaba con la de Lina. Los dos jade�bamos intensamente, est�bamos sudorosos y felices por lo que hab�amos hecho.
Luego de esa vez, Lina y yo no hemos vuelto amantes, aprovechamos cualquier oportunidad para tener sexo incluso con mi mam� en casa y con ella tambi�n �ltimamente, pero eso es tema para otra d�a.
Espero haberlo podido contar y expresar bien lo que pas� y que mi historia les haya agradado. Un abrazo a la distancia y un beso, gracias por leer
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Relato: mi hermana Lina mujer divina
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