Relato: d�a de campo de tres locas Autor: Renata Contreras
DIA DE CAMPO DE TRES LOCAS ADOLESCENTES
Fuimos a un d�a de campo, invitadas por una compa�era del primer a�o de educaci�n media. �ramos tres chicas traviesas, llenas de vida y deseos de salir de la rutina diaria. Cuando fuimos la vez anterior, hicimos cosas que no hubi�semos hecho solas. La anfitriona nos propon�a algo y, sin pensarlo mucho, si nos parec�a, lo hac�amos .As�, ya nos hab�amos ba�ado desinhibidamente desnudas en el estero cercano y permanecido as� aunque sab�amos que unos j�venes campesinos nos estaban observando, Sin ser lesbianas nos acarici�bamos �ntimamente en medio del bosque cercano y otras cosas pecaminosas m�s. Este a�o, en que ya ten�amos 15 y 16 a�os, quisimos repetir el ba�o porque nos hab�a producido mucha adrenalina el sabernos observadas. As� es que salimos esta vez acompa�adas por Duque, el perro de la casa, grandul�n, torpe y juguet�n que jugaba con nosotras en la casa, para meterlo al agua y entretenernos.
Nadie supo que salimos y que nos fuimos camino al estero. Llenas de risa nos desvestimos r�pidamente y nos tiramos al agua, Duque nos sigui� y as� estuvimos largo rato nadando, tir�ndonos agua, subi�ndonos al lomo del perro en las partes bajas y con el ojo puesto para detectar si los campesinos se deten�an a mirar. Afortunadamente, nada se ve�a.
Lorena, la anfitriona, entonces nos dijo si nos atrev�amos a ser pose�das por el perro, lo cual nos causo mucha risa, pero ella insisti� en que hab�a sabido que muchas mujeres lo hac�an y nos dimos cuenta que hablaba en serio. Se acallaron las risas, nos miramos y ri�ndonos otra vez dijimos que s�. �C�mo lo haremos? dijo Berta, la mayor, yo no tengo idea. Yo tampoco dije un poco asustada pero interesada. Lorena dijo entonces que lo har�amos por sorteo.
Tomo tres pedazos de ramas de sauce, se di� vuelta, las acomod� y present�ndonos los tres palitos perfectamente alineados por arriba, nos dijo que la que sacara el mas largo ser�a la primera y as� sucesivamente, que las dos que quedaran libres ten�an que ser las ayudantas para conseguir un buen resultado o sea penetraci�n real.
Yo estaba un poco asustada pero acept� las condiciones y procedimos a sacar el palito. Afortunadamente, Berta saco el m�s largo, y yo saqu� el m�s corto. Tenemos que actuar en conjunto nos dijo Lorena. Ponte una polera para que no te rasgu�e el perro le dijo a Berta, t� acerca el perro y acar�ciale el vientre para que se excite me orden�, yo voy a mirar que no haya nadie cerca. Llam� a Duque y comenc� a acariciar su pelaje del lomo y bajando poco a poco, con un poco de temor o verg�enza , no s�, y llegu� a su pene, le hice algunos movimientos en su funda y comenz� a aparecer su rojo glande, el perro lami� lo que hab�a asomado mientras yo segu�a excit�ndolo con �xito puesto que sal�a m�s y m�s el largo y rojizo pene de Duque, volvi� Lorena diciendo que no hab�a moros en la costa y orden� a Berta que se pusiera en cuatro patas, con las piernas separadas para dar la altura y que no le pisara las pantorrillas. Trae a Duque me dijo y lo hice, ella tom� las patas delanteras y las coloc� sobre el lomo de Berta, tom� luego el pene del perro y dijo que estaba duro y listo para meterlo en la vagina de Berta,.El perro no hizo nada para meterlo as� es que me pidi� que lo masturbara m�s fuerte para incitarlo mientras consegu�a que el perro abrazara fuertemente a Berta . Ahora s� el perro comenz� a buscar donde meterlo, yo ten�a entre mis manos su pene y sin vacilar, lo llev� a la entrada de la vagina. El glande encontr� la entrada, Lorena empuj� a Duque desde atr�s, mientras yo dirig�a la entrada. Comenz� el vaiv�n del perro, Ay, dec�a Berta mientras el perro se lo met�a hasta el fondo, me duele un poco. Se aceler� el perro y, finalmente se qued� quieto descarg�ndose dentro de Berta.
�Como estuvo? le pregunt� Lorena, ! S�!, como estuvo repliqu� yo,� fue rico, muy rico, pero me dio miedo de que me rompiera por dentro porque me empujaba con mucha fuerza dijo, y se ech� en el pasto para descansar mientras Duque le pasaba la lengua por su vagina sorbiendo los jugos que manaban del interior y se lam�a el relajado pene.
Se par� Berta y dijo que ahora le tocaba a Lorena, que no se hiciera la lesa. Sin decir nada, Lorena se puso una polera y esper� a que le prepar�ramos el perro. Yo creo que pens� que Duque no iba a ser capaz de hacerlo otra vez, pero, luego consegu� que se le pusiera duro de nuevo. �Ya Lore, te toca, ponte en cuatro!, le dije. Berta lo subi� sobre su cintura y lo fue acomodando.
Abre m�s las piernas le dije, porque quedaba muy alta, baja el culo un poquito m�s, Lorena ri�ndose lo hizo y Duque comenz� a buscar con movimientos r�pidos. Todav�a ten�a el pene entre mis manos, lo llev� a su vagina y el glande entr� sin dificultad, Berta empuj� a Duque hacia delante y entonces el pene entr� completamente. El perro empujaba y el nudo quer�a entrar pero no pod�a Berta empuj� con fuerza a Duque y, con un grito ahogado, Lorena dej� entrar ese nudo en su vagina, me cagaste Berta, dijo Lorena pero ya no ten�a vuelta, el perro dejo de moverse y se vaci� en su interior.
Luego se baj� quedando levemente abrochado y lami� su pene y la vagina de Lorena. Estaba cansado y se ech� sobre el pasto. Yo estaba caliente pero cre� que no me pasar�a nada despu�s de dos coitos de Duque. Lorena se meti� al agua para lavarse y se dirigi� a m�. Prep�rate me dijo que no te vas a salvar, si no es hoy ser� ma�ana pero no te salvar�s, ni te lo pienses. Me entr� un poco de miedo ya que yo no ten�a experiencia sexual alguna, aunque no estaba virgen a causa de un vibrador que en una ocasi�n hab�a usado. Tem�a ese nudo que deb�a causar gran tensi�n, dolorosa tensi�n al entrar. �Te doli� mucho la entrada del cototo ese? Le pregunt�, ella respondi�, �Un poco, pero no es dolor sino una sensaci�n extra�a que termina siendo placentera. Es rico sentirlo dentro�.
Bueno, a todo esto, Berta ya estaba trabajando al perro y, aunque cansado, reaccion� desplegando todo su aparato en las manos de Berta� Listo! gru��, Lorena, ponte como una perra en celo me dijo, �Ya Berta tr�elo! Yo estaba nerviosa pero quer�a que me pasara lo que ten�a que pasar. Abr� mis piernas y baj� la cabeza para mirar hacia atr�s para ver el pene antes de que entrara. El perro me mont� ayudado por Lorena. Sent� como me abrazaba con fuerza para que no fuera a separarme, ya estaba entrenado y sab�a que hacer. Comenz� a buscar la entrada y Berta lo condujo. De un empuj�n entr� hasta el nudo. Yo lo sent�, me pareci� que dol�a pero no, no era dolor era solo un empuj�n que pretend�a meter algo dentro de m�, me relaj�, afloj� todo y �ay, ay!, sent� como entraba de una vez.
Duque aceler�, yo sent�a mi vagina hinchada por ese pene duro y largo que parec�a que me empujaba el �tero, y tuve un largo orgasmo justo cuando el perro dej� de empujar y dejaba sus jugos en mi interior. Lo sent� rico, que quieren que les diga, me sent� llena y ahora estaba botando semen y mis jugos, todav�a en cuatro patas con el nudo dentro y yo apretando mis m�sculos para que no saliera todav�a. El perro se baj� y con un ruido extra�o, se despeg� de m�. Se lami� el pene y fue sobre m� con su lengua, me sent� y abr� las piernas para facilitar su mamada.
Vi a Lorena y Berta masturb�ndose de calientes que estaban. Mientras coment�bamos lo ocurrido y nos lav�bamos en el estero, unas risas contenidas entre los arbustos nos avisaron que el espect�culo hab�a tenido observadores lo cual tendr�a sus consecuencias m�s adelante. Es otra historia que alg�n d�a contar�. Nos secamos y vestimos r�pidamente, tratando de descubrir en qu� punto de los hechos comenzaron su observaci�n. La m�s complicada era yo por ser la �ltima pero eso lo �bamos a saber esa misma tarde cuando dos j�venes habitantes del lugar nos contactar�an.
Tal como pens�bamos, fotos en mano nos abordaron y hemos sido chantajeadas por ellos aunque las fotos son realmente malas.
La foto es de Lorena en otra ocasi�n, porque no hemos abandonado el vicio, dice que no le importa que la remita.porque no se ve nada. Es un gran perro, � no es cierto?
Autora: Renata Contreras
Si me remiten fotos o videos les enviar� otras de mis amigas y m�as donde no se me vea la cara.
Por favor vota el relato. Su autor estara encantado de recibir tu voto .
Número de votos: 18
Media de votos: 7.94
Relato: d�a de campo de tres locas
Leida: 26551veces
Tiempo de lectura: 8minuto/s
|