ANCHOTA
Este relato, lo escribo especialmente para que lo lea mi
marido ANCHOT y todos los que han le�do sus relatos, de ah� su titulo.
Los relatos de mi marido son una mezcla de realidades y de
las fantas�as er�ticas, que en muchas ocasiones nos hemos contado, sobre todo en
el periodo que transcurri� desde que empez� a convencerme de meter morbo a
nuestra ya de por si excelente vida sexual hasta que consigui� que jodiera con
otro hombre distinto por primera vez despu�s de casada.
Soy de temperamento ardiente, tambi�n soy muy cabezota, el
cree que me convenci� para que tuviera sexo con otras personas, poco a poco,
paso a paso, en realidad no hacia falta convencerme, lo estaba deseando desde
que empec� a verle las intenciones, ya antes de que empezara a hablar sobre
ello, pero quer�a estudiar sus reacciones a cada peque�o paso que d�bamos.
No es que lo tuviera pensado antes de casarnos, en realidad
quer�a serle fiel, pero la idea de llegar a hacerlo de com�n acuerdo me
convenci� desde el primer momento, pero siempre que no estuviera en juego
nuestro matrimonio y por tanto quer�a estar totalmente segura de que para �l no
era una fantas�a que puesta en practica le hiciera sentir mal.
Pues en mi, ten�a la completa seguridad de que no me iba a
afectar con respecto a �l, porque desde muy peque�a he sido observadora, muy
picara y me ha gustado mucho jugar con fuego con todo lo morboso.
El ser observadora hacia que, en m�s de una ocasi�n, pensara
que �l ten�a o estaba a punto de tener una aventura sexual, lo cual no me
afectaba en absoluto, estaba muy segura de mi misma y sabia que si se hab�a
producido o se produc�a ser�a pasajera, acaso de una o dos citas. No le conced�a
importancia.
En la picard�a era precoz, pues a los diez a�os ya me daba
cuenta de que hab�a hombres maduros que cuando las amiguitas est�bamos jugando,
tomaban posiciones y se acercaban a nosotras, mientras miraban embelesados
nuestras piernas de ni�as y no digamos como les notaba el efecto que les
produc�a el ver nuestras braguitas, tanto por delante como por detr�s.
Intu�a que no estaba bien, pero a pesar de las broncas que me
daba mi madre, a mi no me perd�an de vista, porque seguro que mas pronto o mas
tarde, me las ve�an bien vista, incluso en tres ocasiones me marche sola hacia
casa, me sigui� uno de ellos, y cuando estuvimos en una zona solitaria, me llam�
y cuando contraviniendo las instrucciones de mi madre, me dijo que me quer�a
ense�ar una cosa y yo le segu� a un lugar mas discreto, la primera vez me toc�,
por delante y por detr�s por encima de la ropa, mientras me preguntaba si me
gustaba y al decirle yo que s� me llev� la mano hasta su sexo y se lo toque por
encima del pantal�n.
Me dijo que el pr�ximo d�a que me marchara sola, que me
dejara adelantar por �l y que luego entrara en una casita abandonada que me
se�al� y me ense�ar�a otra cosa que me gustar�a mas, pero que no le tenia que
contar a nadie lo que hab�amos hecho, pues era nuestro secreto.
Al d�a siguiente procur� marcharme sola, pero no lo consegu�
y no fue hasta al otro d�a el que le siguiera a la casita, tenia su polla fuera
y se estaba masturbando, era la primera que ve�a una empalmada, pero no me
asust�, me pidi� que me acercara y me estuvo tocando por dentro de la braguita,
con las yemas de sus dedos, suavemente, no hizo falta que me pidiera que le
tocara a �l, ya sab�a que �l quer�a y lo hice. No estuvimos mucho rato pues en
cuanto lo empec� a tocar, pude ver por primera vez como se corr�a un hombre.
Al d�a siguiente le volv� a seguir, hicimos pr�cticamente lo
mismo que el d�a anterior, con la �nica diferencia de que con suavidad me
introdujo un poco el dedo en el culo y de que �l tardo mucho mas rato en
correrse, pas� mas de media hora hasta que se corri�, yo estaba muy a gusto con
lo que me hacia y no me di cuenta de la hora y cuando llegu� a casa fui
castigada sin salir.
No volvi� a suceder, me dejaba ver las braguitas, pero no me
marchaba sola, lo que �l me hacia me gustaba mucho, pero durante el castigo,
hab�a aprendido que acarici�ndome yo misma me produc�a el mismo o m�s placer.
Mi siguiente experiencia diferente con otra persona fue, a
los 12 a�os, con la hermana de una amiga, ella se hab�a casado porque su novio
ten�a que estar un a�o en el extranjero y no estaba segura de estar embarazada,
as� es que tuvo un delicioso mes de vacaciones para conocer con detalle lo que
significa el sexo y de repente nada, abstinencia total, y encima su hermana y
unas cuantas amigas la atosig�bamos para que nos explicara cosas sobre el sexo.
Despu�s de cansarse de nosotras, nos dijo muy en serio que no
volvi�ramos a preguntarle nada m�s y cuando ya nos march�bamos todas,
desilusionadas pues aun quer�amos que nos contestara a muchas mas preguntas, me
sorprendi� dici�ndome, en un aparte, que si iba yo sola a mi si que me
contestar�a.
Aquello me hizo pensar en el viejo del parque, y claro al d�a
siguiente nada mas levantarme me presente all�. La saqu� de la cama, pero en
lugar de molestarse me hizo pasar, me di cuenta de que no iba vestida m�s que
con una fina bata de andar por casa.
Mientras desayunaba iba contestando a mi preguntas y cuando
vio que me quedaba satisfecha, me pregunt� si quer�a que me mostrara, en la
practica, lo que le hacia su marido.
Volv� a pensar en el viejo del parque, pero a pesar de ello,
asent� con la cabeza, me record� el acuerdo de estricto secreto que ten�amos con
ella todas las amigas a�adiendo que si segu�amos era m�s imprescindible todav�a,
volv� a asentir con la cabeza, tenia la boca tan seca y estaba tan expectante
que no pod�a ni hablar.
Ella sonri� complacida y empez� a desabrocharme el vestido,
mientras me acariciaba los pechos, que ya estaban bastante desarrollados, por
encima de la ropa y me dec�a, ves en cuanto nos quedamos solos, empieza a
quitarme la ropa y acariciarme as� los pechos, yo llevaba un vestido abotonado
por delante de arriba hasta abajo, empez� a desabrocharme por arriba, despacio,
sin prisas, viendo como reaccionaba yo.
Cuando le dije que si, pensaba en que me tocar�a un poco por
todas partes y con rapidez me explicar�a en un momento todo lo que su marido le
hacia, ahora me daba cuenta de que no iba a ser as�, que me lo iba a explicar
con detalle. A m�, el simple hecho de que me tocara por encima de la ropa
mientras me iba desabrochando el vestido me proporcionaba mucho mas placer que
el que yo me daba toc�ndome desnuda en mi cama. Cuando me hubo desabrochado el
vestido hasta la cintura, pas� a acariciarme los pechos directamente, metiendo
su mano bajo el sujetador.
Cada vez me gustaba m�s lo que me hacia, luego sin dejar de
acariciarme los pechos, empez� a desabrocharme desde abajo y acariciarme las
piernas con la otra mano, tambi�n muy despacio, recre�ndose en cada bot�n del
vestido y fue subiendo y subiendo hasta llegar a mi sexo que acaricio por encima
de la braguita, solo quedaba un bot�n por desabrochar del vestido, entonces me
pregunt� si me gustaba, si quer�a que siguiera explic�ndome pr�cticamente mas
cosas, con hilo de voz, le dije que s�, que por favor siguiera.
Est�bamos de pie, se puso detr�s de m� y dici�ndome que en la
habitaci�n estar�amos m�s c�modas, me fue llevando hacia su cama sin dejar de
tocarme los pechos y el sexo por encima de la braga, empezando al mismo tiempo a
darme peque�os besos que pr�cticamente eran roces de sus labios en mi nuca, que
me produc�an como una peque�a descarga el�ctrica por todo el cuerpo.
Andando muy despacio llegamos a su habitaci�n, all�
desabrocho el ultimo bot�n del vestido y me lo quit�, dej�ndome en bragas y
sujetador, mientras ellas se hab�a soltado la cinta de la bata quedando sus
pechos y su sexo a mi vista, me quit� el sujetador y empez� a besarme y a
mordisquearme los pechos, estuvimos un buen rato all� de pie, me tocaba el sexo
por encima de la braga y alternaba sus besos a mis pechos, a mi cuello y a mi
boca.
Luego me quit� las bragas y suavemente me empuj� hasta la
cama, ya acostada se quit� ella la bata y empez� a besarme y acariciarme
suavemente por todo el cuerpo, estaba a punto de llegar a mi sexo, cuando tuve
el primer orgasmo, que realmente pudiera llamarse as�, de mi vida.
Pensaba que aquello iba a terminar all�, no fue as�, sigui�
bes�ndome y acarici�ndome, suavemente con sus besos y caricias hizo que fuera
abriendo mis piernas, no tenia ninguna prisa, se recreaba en cada cent�metro de
mi cuerpo, cuando estaba llegando a mi sexo con su boca volv�a a subir a mi boca
y empezaba a bajar muy despacio otra vez, el sexo hacia tiempo que no me lo
acariciaba, estaba a punto de correrme otra vez, ella se dio cuenta y hundi� sus
labios en mi sexo bes�ndolo y lami�ndolo con su lengua que introduc�a en mi
co�o, mientras sus manos acariciaban y apretaban mi culo.
Ahora el orgasmo fue brutal, intenso y sobre todo largo,
larg�simo, no paraba de correrme y ella no cesaba de acariciarme el culo y de
lamerme el co�o, no se cuando tiempo pas� corri�ndome, si recuerdo que tuve que
pedirle que parara, porque no pod�a mas y estaba a punto de desmayarme, todo me
daba vueltas, pero �que bueno era aquello, que gusto tan grande!
Cuando me recuper�, la bese en la boca y le di las gracias,
si por mi hubiera sido, habr�amos empezado otra vez, pero ella me hizo levantar,
me ayudo a vestirme y me envi� a mi casa.
Al d�a siguiente la volv� a despertar, mir� por la mirilla y
cuando me abri� la puerta llevaba la bata desatada, me pregunto si quer�a mas
informaci�n, le dije que si, �te�rica o practica?, practica me gusta mas le
contest�, en ese caso tendr�s que demostrarme que vas aprendiendo, as� no tendr�
que utilizar esto que fue el ultimo regalo de mi marido antes de marcharse y me
ense�� un consolador de considerable tama�o.
Cogidas de la cintura, nos marchamos a su cama y empezamos a
besarnos y acariciarnos mutuamente, era la primera vez que acariciaba a una
mujer, aun as� logre que obtuviera dos orgasmos, para mi aunque no fue como el
d�a anterior, no por ello dej� de ser maravilloso y tuve al menos cinco
orgasmos.
Estuvimos vi�ndonos pr�cticamente todos los d�as, yo cada d�a
que pasaba se lo hacia pasar a ella mejor y las dos disfrut�bamos plenamente,
cuando faltaban quince d�as para que su marido volviera, la encontr� pensativa,
le pregunt� que le pasaba y me dijo que hab�a pensado en pedirme que no
volvi�ramos a vernos, pues quer�a que su marido la encontrara con hambre de
sexo, para que no sospechara que se hab�a visto con alg�n hombre, pero que
estaba pensando en iniciar a su hermana para que nosotras dos pudi�ramos
disfrutar, ella lo conseguir�a y pensaba que yo no.
Sigui� dici�ndome que esto lo ten�a que haber pensado antes,
pues empezando ahora, su marido no la iba a encontrar insatisfecha como ella
quer�a y si sospechaba como ella tem�a, tendr�a que contarle lo nuestro y lo de
su hermana para que no se enfadara. Ese d�a no hicimos nada, ella no estaba de
humor, al despedirnos me dijo que volviera al d�a siguiente, pero que no
har�amos nada tampoco pues solo quer�a decirme una cosa.
Al d�a siguiente, cuando fui, me inform� de que hab�a
iniciado a su hermana y que a ella le hab�a gustado tanto como a m�, aunque no
le hab�a dicho, ni le pensaba decir nada de lo nuestro, pero no era eso por lo
que me hab�a pedido que volviera, quer�a que supiera que con un hombre era
todav�a mejor, pero que exist�a el grand�simo riesgo del embarazo, por eso me
hab�a iniciado a mi para no caer en la tentaci�n de dejarse seducir por un
hombre.
Luego me pregunt�, si al venir a vivir a mi casa mi abuela,
dorm�a yo con mi hermano, le dije que si, y confidencialmente me dijo que ella
hab�a tenido relaciones sexuales con su hermano muy gratificantes y supon�a que
mi hermano lo intentar�a.
No me dec�a que las aceptara, pero que si las aceptaba
deber�a de conseguir que fueran por el culo, por all� no hab�a peligro de
embarazo, mi hermano disfrutar�a m�s al poder correrse dentro de m� y yo podr�a
hacerlo tranquila, sin ning�n tipo de miedo y sin perder la virginidad. Por
supuesto me explico detalladamente como hacerlo para que no me hiciera da�o.
Pasaron los d�as, las relaciones con mi amiga no cambiaron,
pero la ve�a cada d�a mas unida a otra de las amigas con la que siempre hab�a
tenido mas confianza, supuse que disfrutaba con ella, pens� en hablarle de su
hermana, pero desist�, esperaba que mi hermano intentara algo pues todas las
noches adivinaba como se pajeaba, despu�s de desnudarme y acostarme yo.
Fui yo la que ataqu�, le hice venir a mi cama una vez
acostados un s�bado que como habitualmente hac�an, mis padres se hab�an marchado
con sus amigos y le pregunt� si el tambi�n se hacia pajas, se qued� cortado,
pero me dijo al fin que s� y entonces le dije si no disfrutar�amos mas, si yo se
la hacia a �l y �l me la hacia a mi.
Acept� encantado y mientras nos acarici�bamos y paje�bamos le
pregunt� con quien pensaba cuando se hacia la paja, me dijo que principalmente
conmigo, aunque a veces era nuestra madre la que ocupaba mi lugar y
ocasionalmente alguna desconocida a la que le hubiera visto mucho y estuviera
muy buena.
El no era ning�n experto, as� es que procur� y consegu�
correrme yo, antes de hacerle correr a �l. Una vez desahogados fuimos a
lavarnos, primero el, luego yo, cuando volv�, me sent� en su cama y le hice
prometer que si alguna vez me penetraba lo har�a por el culo, para evitar la
posibilidad de embarazo, resultado al rato se vino a mi cama y empez� a
acariciarme de nuevo.
Yo hab�a previsto que as� iba a ser y aunque habitualmente
dorm�a con las bragas puestas, hoy no las llevaba. No perdimos mucho tiempo con
caricias, los dos est�bamos calientes y con ganas de probar, tardamos en
conseguirlo, pero fui penetrada por primera vez, �l a pesar de acabar de
correrse, no aguant� demasiado y yo apenas llegu� a correrme.
Al d�a siguiente quiso repetir, pero yo me mantuve firme y no
lo dej�, solo los s�bados cuando estemos solos le dije, el resto de d�as, si te
hace falta, te pajeas tu, pero ahora no hace falta que te escondas de mi. Hasta
que me cas�, todos los s�bados disfrut�bamos de nuestros cuerpos, especialmente
de mi culo. Como es l�gico intent� penetrarme por delante pero yo no se lo
permit� y le amenace con no dejarle hacer nada, as� es que desisti�.
No tenia bastante, me tenia que hacer pajas, y m�s cuando
conoc� a mi marido, el era muy precavido y avanzaba, para mi desesperaci�n, muy
lentamente, como no ten�amos el lugar adecuado, no me penetr� ni por delante, ni
por detr�s, yo lo deseaba en muchas ocasiones y me hubiera gustado que hubiera
encontrado la forma de poder hacerlo, pero no fue as�.
Sin embargo no llegu� virgen al matrimonio, estuve durante
una semana trabajando en una exposici�n como azafata, el ultimo d�a un chico que
me gustaba, como se hizo tarde se ofreci� a llevarme a casa, acept� encantada,
en el camino me di cuenta como me miraba las piernas, not� que me deseaba y la
verdad es que yo tambi�n deseaba que intentara seducirme. No pensaba en que me
penetrara, simplemente quer�a que me besara y que me metiera mano.
Nos acerc�bamos a casa y no intentaba nada, al llegar a una
zona oscura ya muy cerca de casa en la que aparcaban muchos camiones, le dije
que iba a llegar mucho m�s pronto que los otros d�as, �l vio un hueco entre dos
camiones y aparc� la furgoneta all�.
Me dijo que estaba muy a gusto hablando conmigo y que hab�a
parado all� para poder continuar conversando un rato m�s ya que era pronto y
ten�amos tiempo. Le dije que conversar con �l tambi�n me gustaba a mi, pero all�
parados tan cerca de mi casa no me hacia gracia estar, pues pod�a pasar alg�n
conocido y dec�rselo a mis padres o a mi novio.
Me hizo bajar de la furgoneta y abriendo la puerta de atr�s
me invito a subir, dici�ndome que as� no nos podr�a ver nadie, sub� sin poner
objeciones, desde luego el no era como mi novio, en cuanto cerr� la puerta
intent� besarme, en principio me negu�, pero no por mucho tiempo.
De mi boca, pas� a tocar mis pechos por encima de la ropa,
nueva negativa, el parec�a renunciar pero insist�a, mis fingidas negativas eran
cada vez mas d�biles y cuando deje de negarme quiso acariciarme el sexo, por
encima de la falda, eso si, ya casi ni me negu�, al segundo intento dej� que su
mano siguiera all�.
R�pidamente intent� tocar carne, a estas alturas tanto para
�l como para m� estaba claro que le iba a dejar, yo no quer�a parecer tan f�cil
y me hice de rogar, le cost� bastante acariciar mis pechos desnudos, pero una
vez conseguido ya no tuvo grandes dificultades en separar mi braga para tocarme
el sexo.
Cuando introdujo su dedo dentro de el, a pesar de lo caliente
que estaba, pens� en que como no lo detuviera, iba a penetrarme, no quer�a,
quer�a que fuera mi novio quien me penetrara por primera vez, pero estaba tan
caliente que no lo rechac� de plano como tenia que haber hecho.
Emple� la misma t�ctica que la hermana de mi amiga y despu�s
de que yo obtuviera un buen orgasmo se sac� su miembro, me cre� en la obligaci�n
de aliviarme y le hice una paja, el se corri� casi de inmediato, pero no por eso
dej� de besarme y acariciarme, mis desnudeces eran cada vez mas grandes, los
pechos estaban al aire totalmente, la falda totalmente subida dejaba ver todas
mis piernas y como las bragas hab�an sido bajadas un poco para facilitarle los
tocamientos.
Estaba a punto de alcanzar el cl�max otra vez, pens� en
decirle que ya estaba bien que me llevara a casa, pero mi cuerpo se neg�, el
empez� a quitarme las bragas, yo aunque d�bilmente me resist�a, no quer�a pero
al mismo tiempo lo estaba deseando.
Extendi� una especie de colchoneta en el suelo de la
furgoneta, mientras lo hacia pens� en que no era la primera vez que �l se
acostaba con una mujer all�, que estaba bien preparado, tambi�n pens� que hacia
dos d�as que hab�a terminado con la regla y que si me penetraba, hab�a pocas
posibilidades de quedarme embarazada.
Sabia lo que �l quer�a yo no lo tenia nada claro, quiso que
me tendiera en la colchoneta, pens� en negarme, pero me tend�, ya sobre la
colchoneta los dos continuo bes�ndome y acarici�ndome toda, mientras me besaba
con maestr�a el sexo introduci�ndome la lengua, supe que no hab�a marcha atr�s,
ni la deseaba.
Las bragas me las quito sin dejar de comerme el sexo y sin
que yo opusiera ninguna resistencia y cuando se coloc� entre mis piernas estas
se abrieron ellas solas, no las abrimos ninguno de los dos, se abrieron solas
como si tuvieran vida propia.
No me hizo ning�n da�o al desvirgarme, debi� de pensar que
aunque no lo habr�a hecho muchas veces, no era la primera vez que lo hacia,
disfrut� much�simo, aunque luego con mi marido he disfrutado m�s, es l�gico.
Como es l�gico, llegu� tarde a casa, tuve que aguantar la
bronca de mis padres, porque aun entendiendo que era el �ltimo d�a y lo
celebr�ramos deb�a de haber avisado por tel�fono y mas sabiendo que mi novio
estaba all�.
Me disculp� diciendo que como yo no quer�a quedarme, hab�a
estado intentando marcharme y al final se hab�a hecho demasiado tarde. Aguante
la bronca notando como se me manchaban las piernas de lo que sal�a de mi sexo
escurri�ndose por los bordes de las bragas y en cuanto pude fui al ba�o a
lavarme.
Estuve muy nerviosa hasta que me lleg� la regla otra vez y
una vez me vino empec� a pensar en la forma de casarme lo mas r�pidamente
posible para gozar de aquello tan bueno con tranquilidad.
Veo que me he extendido demasiado, creo que os hab�is hecho
una idea de c�mo era yo antes de casarme, lo voy a incluir en el apartado
intercambios porque voy a escribir a continuaci�n el relato de c�mo fue
realmente mi iniciaci�n en el intercambio y pienso que este y el siguiente o
siguientes relatos deben figurar junto con los de mi marido. Aunque en este no
hay nada de fantas�a y en los de �l si.
Me hace ilusi�n leer comentarios, por favor escribirlos,
adem�s me ayudaran a escribir mejor vuestras criticas. Besos.