Uno de mis primos del cual ya habl� en el relato
de "Do�a Toribia, la curandera", despu�s que se
la chup� en el bosque le gust� tanto que cada
vez que iba a la casa de mis abuelos me acosaba
para que volviese a hac�rselo, yo no quer�a
porque �l no quer�a chup�rmela a mi.

Algunas veces no pod�a escaparme, con solo
mostrarme la verga mi boca se derret�a porque
era muy linda, rosadita y sabrosa.

Despu�s de una Navidad en la cual me qued� en
la casa de mis abuelos por espacio de unos
quince d�as en los cuales las chupadas fueron
diarias y hasta m�s de una vez por d�a, �l me
puso boca abajo y comenz� a besarme las nalgas
hasta que termin� separ�ndolas con sus manos y
con unas r�pidas lamidas fue acercado su
lengua a mi ano.

Yo muy contento porque cre� que al fin me iba a
chupar la verga, intent� darme vuelta para que
lo hiciese pero no pude porque sus manos me
ten�aN fuertemente agarrado por las caderas lo cual
me impidi� lograr mi objetivo pero al mismo tiempo
eso que me estaba haciendo para mi era algo nuevo
y delicioso, casi me hizo eyacular sobre las
s�banas de tan lindo placer que con su lengua
estaba d�andome en mi abertura posterior.

-Ahora vas a ver que viene lo bueno!!!

Me dijo eso al mismo tiempo que pude sentir que sus
dedos me separaban los pliegues del ano, me asust�
mucho y como sus dedos estaban ocupados con mi
culo hab�a tenido que soltar mis caderas y as�
pude zafarme de su manos.

Se enoj� mucho diciendo que algo lindo sentir�a
cuando su verga me hubiese traspasado el culo que
me la meter�a y me la sacar�a hasta que acab�semos
los dos juntos.

No pudo lograr convencerme de que me diese vuelta
para lograr su deseo, entonces me oblig� a
chup�rsela hasta que se derram� dentro de mi boca
y como la ten�ia muy enterrada dentro de ella, me
tuve que tragar toda su leche.

Estuvimos todo ese verano con lo mismo �l me la
mostraba y yo se la chupaba, �l sab�a muy bien que
con solo mostr�rmela yo acceder�a a sus deseos.

Logr� su objetivo y me la meti� un d�a que me puso
boca abajo y yo cre� que me lo iba a chupar como
otras veces, pero �l se puso arriba m�o frotando
su verga entre mis piernas hasta que sin esperarlo
sent� que me comenzaba a entrar con mucha
resistencia por parte de mi esf�nter.

Esa vez no fue agradable, hasta que con preparaci�n
de mi ano fue agasaj�ndola hasta que me enoj�
porque jam�s quer�a chup�rmela y menos dej�rsela
meter a �l.

Por eso estuve dos largos a�os evitando encontrarme
a solas con �l.

Pero otra Navidad en la cual como siempre me quedaba
en la casa de mis abuelos sucedi� un nuevo encuentro
a solas con �l.

Ese d�a mis abuelos bab�an ido a comprar el asado
para Navidad y yo me qued� solo en la casa
arreglando unas cosas que mi abuela me hab�a
pedido que luego que las limpiase las ordenase en
los estantes correspondientes.

La familia todav�a no hab�a llegado porque era de
ma�ana y la fiesta ser�a a la noche, yo estaba
haciendo lo que mi abuela me hab�a pedido cuando
sent� que abr�an la puerta de la cocina, mir� y
lo vi a �l que entraba a donde estaba yo.

-Pobrecita la limpiadora... est� sola!!

Dijo eso en tono de burla, lo mir� con furia sin
contestarle nada, entonces agreg�:
-Ven� vamos a mi cuarto a buscar un disco as� lo
escuchamos porque esta casa est� muy silenciosa...

Me agarr� de la mano y a tirones me llev� hasta su
habitaci�n, donde en pocos segundos encontr� el
disco que quer�a escuchar y lo puso en un
tocadiscos que le hab�a comprado su padre como
regalo de cumplea�os.

-Ven� vamos a bailar.

Sin esperar mi respuesta me agarr� de la cintura
y apoyando su verga sobre la m�a nos pusimos a
bailar, inmediatamente pude sentir su mano que
apretaba mis nalgas por encima del pantal�n
buscando mi agujero para dejarlas un buen rato en
ese lugar.

Pod�a sentir mi verga dura apretada entre la tela
de mi pantal�n y del otro lado su pija en la misma
condici�n, estaban muy pegadas las dos.

Me solt� porque no quer�a decirle que s�, pero �l
sab�a y yo tambi�n que me estaba excitando
poni�ndome muy caliente y yo era capaz de hacer
cualqier cosa para aplacar esa calentura.

-Me vas a decir que ya no te gusta? Ven� vamos a
recordar viejos tiempos...

-S�, ya no quiero hacerlo m�s...

Se puso a gritarme insultos al mismo tiempo que
cerraba con llave la puerta de su habitaci�n y
al comp�s de la m�sica se empez� a desnudar
revoleando la camisa dej�ndome ver su pecho peludo
y sus tetillas muy marcadas, se baj� el zipper del
jean, luego se lo sac� quedando con un b�xer verde
botella a trav�s del cual se notaba que su verga
estaba muy dura.

-Que bueno que estaba!! Que apetecible!!!

Sus vellos parec�an haber aumentado desde la �ltima
vez que lo hab�a visto desnudo un par de a�os atr�s,
porque me pas� dos largos a�os esquiv�ndolo y
tratando de no quedarme a solas con �l porque como
se negaba a chup�rmela le hab�a dicho que no har�a
m�s nada con �l hasta que aceptase chup�rmela.

Yo me resist�a pero �l me agarr� la mano la puso
sobre el bulto que hac�a su verga y con su mano
la apret� sobre ella para que comenzase a
sob�rsela sin mediar palabras entre los dos.

Mi cuerpo fue invadido por escalofr�os de furia
porque mi primo no me dec�a que me la iba a chupar,
mi boca ya no resist�a m�s, necesitaba chupar esa
pija que por dos largos a�os hab�a rehu�do como
se�al de enojo porque su propietario no me
retribu�a de la mmisma forma a todas las atenciones
que yo le hab�a dado en el pasado.

Con todos los apretones que recibi� su miembro
se levant� totalmente y comenz� a asomar su glande
por la parte superior del b�xer, pod�a sentir su
calor en mi mano porque el algod�n del b�xer no
pod�a impedir que ese fuego llegase a mi mano,
pero al asomarse el glande algo de precum moj�
mi mano, lo mir� y me dije " Que bueno que est�!!

Se me hizo agua la boca, mi furia no quer�a, pero
mi boca quer�a chupar nuevamente esa verga a pesar
de que mi primo no dec�a en ningun momento que me
la chupar�a para hacer las paces.

Saqu� la mano y nuevamente le dije:
-Ya no quiero hacerlo m�s.. lo que hicimos ya pas�,
vos no me la quer�s chupar a mi, as� que olvidate,
abr� la puerta y d�jame salir.

No me contest� nada se dirigi� a su cama, se
acost� en ella, meti� la mano en el b�xer sacando
inmediatamente fuera de �ste toda su hermosa pija
brillosa por el precum que apenas le humedec�a
esa cabeza tantas veces saboreada por mi lengua.

Con su mano comenz� a hacer el recorrido desde
sus bolas hasta el glande mostr�ndome como el
precum se deslizaba entre sus dedos lleg�ndole
hasta su escroto.

-Ven� ch�pamela, quiero sentir tu c�lida boca
rodeando mi pija...

Lo mir� sin decir nada, estaba disfrutando de ver
como la ten�a dura, palpitante y goteando el
delicioso l�quido que manaba de all�.

El disco era un LP, por eso nunca hubo silencio
porque cuando terminaba una canci�n enseguida
empezaba otra, si entraba alguien a la casa no lo
notar�amos porque mi primo lo hab�a puesto con
mucho volumen para que no se oyesen los ruidos
de jadeos o discusiones que podr�amos producir
en su habitaci�n.

No pude soportar m�s, ver como se pajeaba, como
me la ofrec�a, como corr�a el precum, no pude
controlarme, perd� el control y me fui hasta
all� para chupar, chupar y chupar el miemnbro
que por tanto tiempo hab�a rechazado.

Lo sent� m�s delicioso que nunca, le lam� el
glande, segu� bajando por el tronco hasta llegar
a sus bolas las cuales lam� una por una, le
levant� las piernas le lam� el perineo buscando
su ano, todo lo consent�a, todo su cuerpo desde
el ombligo a su agujero posterior lo lam� de ida
y vuelta ante las contorsiones de mi primo que
ped�a y ped�a:
-Omar ch�pame m�s...! m��ass....!

Realmente fue emocionante volver a hac�rselo, me
olvid� por completo que lo ten�a castigado porque
�l no me la quer�a chupar, me excit� much�simo
cuando me agarr� la cabeza y empez� a empujarla
contra su verga para que me la tragase toda.

El sollozaba con cada chupada que yo le daba, y
me dec�a:
-Viste boludo lo que nos est�bamos perdiendo!

Luego de unos diez minutos disfrutando de esa
mamada su pija comenz� a latir desaforadamente,
estaba pronta para largar toda su leche en mi
boca, pero no sucedi� nada de eso porque
repentinamente me la sac� de la boca para
quitarse el b�xer que le hab�a quedado enredado
entre sus tobillos.

Yo segu�a vestido porque con el deseo por chupar
su verga ni me hab�a sacado la ropa, mi primo no
hizo nada por sac�rmela, me tir� sobre la cama
acerc� su pija a mi boca, comenz� a pajearse muy
cerca de ella, mostr�ndome todo su cuerpo desnudo.

-Estoy pronto! Date la vuelta que te la voy
a meter como nunca te la metieron!

Era tanta la excitaci�n que ten�a que en unos
inaudibles sonidos parecidos a palabras le dije:
-Ten�s condones?

-Para que mierda!, quer�s condones?

En ese tiempo no exist�a el SIDA pero se hablaba
de s�filis y otras enfermedades que contagiaban
las mujeres y como mi primo andaba con muchas de
sus novias yo ten�a miedo y le dije eso.

De alguna manera como pude le expliqu� eso y �l
me traquiliz� dici�ndome"
-Con vos no tengo necesidad de usar condones,
con mis novias si uso porque no s� como estar�n.

pero yo se que a vos te cojo yo solo.

Por supuesto que no le dije nada de mis otras
aventuras, �l se habr� cre�do que en los dos a�os
en que no lo dej� acercarse yo hab�a permanecido
esper�ndolo casto y puro!!!

Me mor�a de ganas de sentir nuevamente su verga
dentro m�o y de darle libertad a la mia que ya me
dol�a por estar muy apretada dentro de mi pantal�on.

Me saqu� el pantal�n y como �l no pod�a esperar
m�s me arranc� el slip el cual se deshizo entre
sus manos, me orden� que me pusiese boca abajo con
una almohada bajo el vientre.

Con sus manos me separ� las nalgas y a toda
velocidad se puso a lamerlo.

-AHhhhhhhhhhhhhhhhh......! Segu� me gustaaaaaaaa
ch�pamelo mas adentroooooooo!!!

No hubo necesidad de repetir nada sent� como con
sus dedos separaba los pliegues meti�ndolos
dentro para darle elasticidad y una vez que lo
hubo distendido se acomd� sobre mi y la fue
acercando hasta que pude sentir su cabeza
abri�ndose paso en mi aguejro.

-AYYYYYyyyyyyyyy! me dueleeee, par����...

Al principio me doli�, �l no hizo caso de mis
quejas y sigui� metiendo hasta que repentinamente
se fren� la penetraci�n, estaba toda dentro!

Se hab�a frenado porque no hab�an m�s cent�metros
de verga que quisiesen entrar en mi agitado recto.

A pesar de que mi primo antes de penetrarme estaba
listo para eyacular algo lo contuvo ya que estuvo
como 15 minutos meti�ndomela, sac�ndomela,
movi�nndola dentro de mi recto al mismo tiempo que
me clavaba los dientes en la epalda.

Sent� un dolor muy intenso en la espalda porque su
mordida me hab�a lastimado al mismo tiempo que su
leche me inundaba por dentro de una forma totalmente
deliciosa dej�ndome agotado.

Sent� algo que corr�a por mi espalda y mojaba mi
cuerpo llegando hasta mis brazos, mi primo me dijo
que estaba sangrando por la mordida que me hab�a
hecho con sus dientes en el momento del m�ximo
placer que recibi� su cuerpo a trav�s de su verga
depositada en mi interior.

Mi verga segu� dura como al principio, me tuve
que pajear porque �l se neg� como otras veces a
hacer algo para que expulsase la leche y como
castigo se la largu� toda en el pecho moj�ndole
esos vellos que tantas veces hab�a chupado y
mordido.

Se fue a ba�ar muy contrariado porque al echarle
mi leche sobre su pecho le hab�a arruinado el rato
tan placentero que hab�a pasado.

Aunque �l me cur� la mordida, yo me tuve que
encargar de lavar la s�bana manchada de sangre
para que mi abuela no preguntase que hab�a pasado.

Despu�s de la cena se fue a la casa de una de su
novias y al otro d�a me cont� que la hab�a cojido
cerca de un arroyo que hay por los campos donde
viv�a ella.

Pero en la noche de Fin de A�o volvi� a la carga
conmigo, despu�s de la cena me busc� otra vez,
pero como sigui� con su negativa de hacerme una
mamada lo mand� al diablo y no lo dej� entrar a
mi pieza.

OMAR

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