Relato: Esclavo de la Carne (01)





Relato: Esclavo de la Carne (01)

Esclavo de la Carne 01




Hola amigos, nuevamente les saluda Laura Ovalle de Estrada,
Garganta de Cuero. Quiero agradecerles por todos sus mensajes y el apoyo que le
han dado a mis relatos.



Como bien sabr�n, mi vida es rara, por no decirle extra�a. Muy
lejos de cualquier convencionalidad. Mi esposo es pr�cticamente una puta, y yo
no me quedo muy atr�s; mi hermana mayor, esa si es una puta profesional, junto
con su esposo, con quienes trabajan comerciando con sus cuerpos. Los padres de
el tambi�n son un par de degenerados a pesar de que ya pasan de los 60 c/u. Pero
aqu� no se termina la historia, pues mi hermano Juan Carlos, tambi�n tiene mucho
que contar.



Voy a dejarlos con el para que, de sus propia pluma, les
cuente los pormenores de su tambi�n extra�a e inusual vida sexual. Besos,
abrazos y que lo disfruten.




.....-....--...---..----.-----



Bueno, la verdad no s� por donde empezar, no soy un escritor.
De hecho, mi fuerte son las mates y los n�meros, las letras apenas si me
lograron entrar en el colegio. Debo decir que me sorprende que mi hermana Lala
tenga el valor de contar sus experiencias, ella siempre fue tan reservada con su
vida. De hecho, y ahora que ya he le�do la mayor parte de sus relatos, me
sorprende de ver como es en la intimidad. Supongo que la vida nos cambia,
aunque, la verdad, lo dudo. Uno va cambiando seg�n las decisiones que toma.



Es incre�ble, incre�ble, ellas, que sol�an ser tan remilgadas
y santurronas, ahora son una putas consumadas, hablo de mis hermanas. Aunque yo
mejor no digo nada, total, un burro no se va a burlar de las orejas largas de
sus colegas.



Mi nombre es Juan Carlos Ovalle, actualmente paso ya de los
45, ya no soy muy joven. Les voy a hacer un breve bosquejo de lo que fue mi vida
y de c�mo me convert� en un "Esclavo de la Carne". Que conste que el t�tulo lo
puso Lala, no yo. No me considero eso, la verdad�



Bueno, primero que nada empezar� por describir algo de lo que
fue mi vida en los momentos de que me inici� en el sexo (me perdonar�n, pero es
que soy una persona muy met�dica). Nac� y me cri� en un hogar sumamente
machista, liderado por pap� que ten�a potestad en todo, incluso en nuestras
vidas. Mam�, que era una mujer dulce y amorosa, una magn�fica madre, era de
hecho, una mujer sumisa y amedrentada por la terrible presencia de mi padre, que
le quitaba toda autoridad e importancia en el hogar.



Por lo mismo mis 4 hermanas crecieron bajo esa f�rrea
educaci�n, por eso me sorprende tanto verlas ahora tan cambiadas. Y como
comprender�n, yo como �nico hijo var�n, siempre ten�a prerrogativas y un trato
preferencial sobre ellas. Creo que ese fue uno de los motivos de que nos
llev�ramos tan mal. A mi me educaron para ser todo un "macho", y a ellas para
ser dominada por un "macho". Yo para mandar y ellas para obedecer, era clar�simo
que se iban a sentir menospreciadas y disminuidas por mi. Por eso yo no esperaba
buenos tratos de ellas, y ellas mucho menos de mi. Viv�amos como desconocidos en
nuestro propio hogar.



A los 10 a�os era un muchacho inteligente, aplicado en los
estudios y responsable� adem�s de consentido y algo caprichoso, pero bueno,
nadie es perfecto. Pap� me daba libertad y me prove�a de todas las cosas que un
ni�o puede necesitar. Pero solo a mi, a mis hermanas no. Yo soy el segundo de la
familia, mi hermana Luc�a es la mayor, en aquellos d�as ten�a 12; detr�s de mi
ven�a Mar�a Jos�, con 8. Laura y Ver�nica eran las menores con 6 y 4 a�os
respectivamente.



Mis mejores amigos eran David y Francisco, que ten�an mi
edad, siempre �bamos los 3 a todos lados, �ramos inseparables. Tal vez por eso
nos iniciamos casi juntos en el sexo. Los 3 viv�amos en el mismo barrio, David y
yo tambi�n estudi�bamos en el mismo colegio.



�ramos bastante inocentes, aun no sab�amos nada sobre el sexo
y nuestras vida se iba entre partidos de f�tbol y juegos de ni�os. Pero cierto
d�a todo aquello cambi�, se le uni� un nuevo ingrediente, el sexo. Yo me top�
con el antes que mis 2 amigos (por lo menos antes que David). Les voy a contar
c�mo fue.



Como les dec�a, el m�o era un hogar machista al estilo m�s
cl�sico. Ya saben, el esposo llega de trabajar y la mujer le sirve el almuerzo,
el come primero en el asiento principal de la mesa, a veces con su hijo var�n si
este ya ten�a edad. Mientras tanto, la esposa y las hijas deb�an esperar a que
el terminara, la madre siempre metida en la cocina deb�a responder rauda y veloz
al menor requerimiento de su se�or.



As� era mi casa, pap� ten�a la voz y voto de todo, y la
patria potestad sobre nuestras vidas. Mam� tan solo pod�a limitarse a meter la
cola entre sus piernas y aceptar todo obedientemente, sin rechistar. Y eso era
en todo, incluyendo, obviamente, el sexo.



Entre las numerosas obligaciones de mi madre, estaba la de
satisfacer a su se�or esposo en cada una de sus necesidades, y el sexo era una
muy grande. Mam� no le pod�a negar nada, en la casa no hab�a nada de que "me
duele la cabeza mi amor" o que se sent�a mal, si pap� quer�a sexo, ella se lo
ten�a que dar.



Me di cuenta de eso cierto d�a, era un jueves por la noche.
Mis hermanas nos estaban andaban con mi t�a en su casa, ella acababa de tener su
4to hijo y ellas se fueron a ayudarla. Por "alguna extra�a raz�n" mam� no fue.
Estaba solo en la casa, por lo menos eso cre�a. Y mis padres a su vez, cre�an
estarlo.



Escuch� sonidos en su habitaci�n, eran gemidos fuertes, como
lamentos. Me asust�, pens� que algo malo le estaba pasando a mi mami y decid� ir
a ver. Les juro que, cuando entreabr� un poco la puerta, no comprend� totalmente
lo que all� dentro pasaba, pero igual sent� un extra�o cosquilleo en mi vientre.
All� estaban los 2, desnudos, el encima de ella.



El es moreno claro, corpulento (1.75) y redondo, pero no un
gordo bofo (por lo menos no lo era en esos d�as). De cabello negro crespo,
siempre lo llevaba impecablemente peinado con vaselina. De cara no era feo,
malencarado si, pero era guapo. Mam� era morena, de cabello liso largo, hasta la
cintura como estilaban las se�ora de esa �poca. Una menuda mujer frondosa, algo
pasada de peso, pero igual muy buena. Con seno pronunciados y turgentes, caderas
anchas y un trasero de lo m�s apetecible. Definitivamente de ella salieron mis
hermanas en lo que a cuerpo se refiere.



Ella estaba boca arriba, con las piernas abiertas alrededor
de la cintura de pap�, tom�ndolo de los hombros con las manos y poniendo gesto
de parturienta. Pap� la penetraba violentamente, sujet�ndola del cabello y de su
seno izquierdo, apret�ndolo como si se le fuera a escapar. Mug�a como un toro,
como una enardecida bestia salvaje y feroz. Ella ahogaba sus gemidos, trataba
por todos los medios de no dejarlos escapar, pero de vez en cuando se le sal�a
uno.



�Qu� mierda con vos mujer! �Las mujeres decentes no hacen
ruidos! � �zap, zap, zap!, golpe� a mam� con mucha fuerza - �Solo las rameras
gimen y gritan! ��Me cas� yo con una ramera?!


�No Juan, no! �Yo soy una mujer decente! � �zap, zap, zap!,
los golpes segu�an, a pesar de que ella le ped�a perd�n, con la voz quebrada y
l�nguida.


Est� bueno pues� �y quitame las piernas de la cintura, no
sos puta para hacer eso!


Perd�n Juan, perd�n�




Ya hab�a visto muchas veces antes a pap� maltratar a mam�,
tambi�n hab�a violencia marital en la casa. ya la hab�a visto a ella disculparse
por cosas que no eran su culpa tambi�n, pero jam�s los hab�a visto teniendo
relaciones sexuales, y eso si me impresion� demasiado, �era tan violento todo el
asunto!



Mam� ten�a una marcada expresi�n de dolor en su rostro,
estaba muy lejos de conseguir placer en todo eso, le dol�a. Pero aun as�
continuaba entreg�ndose, seguro porque "las mujeres decentes no deben gozar con
esas cosas, eso solo lo hacen las rameras", �pap� me enfermaba a veces!



Pude haberme ido, pero algo me reten�a, a pesa de que sab�a
que si el se daba cuenta, la que me esperaba� aun as� me qued�, el cosquilleo en
mi vientre era muy sabroso.



Las violentas penetraciones mec�an con fuerza la cama, la
cabecera se estrellaba contra la pared causando estr�pito y los golpes de cadera
sonaban como bofetadas. Y la cara desfigurada de mi mam� por el dolor terminaba
de pintar un cuadro de lo que bien pod�a ser considerado una violaci�n.



�Sos una puta! ��UNA PUTA COMO TODAS!! � le dijo el
deteni�ndose un rato e incorpor�ndose un poco sobre ella.




Se sali� de su interior y le dio vuelta por la fuerza, ella
abri� los ojos como platos adquiriendo un semblante de dolor que hasta a mi me
dej� fr�o.



�No Juan, por all� no!


��SOS UNA PERRA!! ��TODAS SON UNAS PERRAS, TODAS!! � pap�
actuaba como un demente, nunca lo hab�a visto as�.


�Por favor! �Te lo suplico, por all� me duele mucho!


���TE GUSTA, PORQUE SOS UNA PERRA, UNA PERRA COMO TODAS!!!




La verdad es que a pap� no le funcionaba algo en la cabeza.
La puso boca abajo, sujet�ndola de las mu�ecas con una sola de sus manos (ella
siempre fue d�bil) y con la otra peg�ndole en la cabeza hasta que se qued�
quieta, resignada al dolor que vendr�a de inmediato.



Le agarr�, se las separ�, meti� su verga entre ellas y atac�.
Un agudo y largo grito de dolor sali� del pecho de mam� cuando su marido la
empez� a sodomizar. Entonces ella, con los ojos mojados y la cara cubierta en
l�grimas, se volte� para suplicarle piedad por una �ltima vez, pero en vez de
eso, se top� con mi peque�a figura en su puerta. Se puso blanca, yo tambi�n,
pens� que le dir�a a pap�, pero no fue as�, tan solo me ve�a como suplic�ndome
que me fuera, que ya no viera. Aun me qued� cuando el le meti� su miembro por la
fuerza, ella tan solo cerr� los ojos con fuerza y chill� desesperadamente.
Entonces sal� corriendo y me fui directo a la calle� dej�ndola sola con pap�,
que la estar�a sodomizando como un animal.



Aquel es uno de los recuerdos m�s frescos que tengo de mi
ni�ez, y creo que me marc� muy profundamente por el resto de mi vida. mam� no
toc� el tema, no trat� de explicarme qu� fue lo que hab�a visto, nada, creo que
sent�a mucha verg�enza y en el fondo deseaba que yo no lo hubiese comprendido.
Yo tampoco le dije nada, por baboso�



Mi vida continu�, siempre pensaba en aquello siempre. M�s o
menos un mes despu�s, ocurri� otro suceso que me marc� de por vida tambi�n. Me
hallaba con mi amigo David haciendo tiros al arco cuando lanc� la pelota por una
hondonada.



Juanca, tra� la pelota. � me dijo David, que no entend�a
por qu� me hab�a metido entre los matorrales de repente, ese d�a Francisco no
hab�a ido a jugar con nosotros.




Le hice una se�a con un dedo para que se callara y se
acercara. A mi lado, nos pusimos a ver algo que jam�s me hubiera imaginado.
Metidos entre unas altas ca�as, 2 conocidos nuestros cog�an bajo el abrigo de
dichas plantas, tan solo nosotros, en el lugar donde est�bamos (m�s altos que
ellos) los pod�an observar. Guillermo el "Chucho", un compa�ero de partidos algo
mayor, ten�a a Francisco de espaldas e inclinado, sosteni�ndose con las manos de
una piedra grande.



Nos quedamos alucinados, ambos ten�an sus pantalonetas en los
tobillos y jadeaban tratando de hacer poco ruido. No comprend�amos lo que
hac�an, pero alg�n instinto en nuestro interior si, porque sentimos de inmediato
un agradable cosquilleo en nuestros vientres, como el que sent� cuando vi a mam�
y a pap�, ese recuerdo me vino a la mente de inmediato. Por el ano de Francisco
entraba y sal�a el pene de Chucho, el que parec�a gozar mucho con aquella
acci�n. Chucho era m�s grande que nosotros, ten�a 13 a�os y estaba mucho m�s
desarrollado tambi�n. Era bastante guapo para su edad, piel blanca, cabello
casta�o oscuro rizado y cara de ni�o bueno, delgado, ten�a muy buen futuro.



Francisco jadeaba y se quejaba, le ped�a que no se la metiera
tan duro, que le dol�a, y sin embargo el mismo empujaba con las caderas hacia
atr�s.



�Me duele Chucho, me duele!� ��AAAGGGHH!!� �Mas suave
porfa, m�s suave!


�Pero lo est�s gozando, como siempre! �Vamos Francisquito,
ya voy a terminar!


��SIII!!� pero todav�a me duele� �AY! �AY!� dale m�s suave
Chucho, m�s suave�




Poco a poco la velocidad de las metidas se fue haciendo m�s
r�pida, la cara de Francisco se tensaba un poco m�s cada vez, pero cada vez
protestaba menos, era como si le gustara m�s, entre m�s duro le dieran. De
Chucho ni hablar, ese cerote estaba gozando como un loco.



��FRANCISCO!! ��FRANCISCO!!� ��YA CASI MANO, YA CASI!!


���AY!!! ���AY!!!� ��NO TAN DUROOOOOO!!


����OOOOOGGGHHHHHH!!!!� ����QU� CULO M�S
RICOOOOOOOHHHHGGGG!!!!




Chucho lo agarr� de las caderas y lo apret� contra su cuerpo
mientras gesticulaba como si le estuviera pegando o haciendo alg�n da�o. Para mi
es ahora obvio que estaba eyaculando dentro del culito de nuestro amigo.



Se quedaron inm�viles por un momento, jadeantes, sudorosos.
Subieron los ojos y nos vieron, su primera reacci�n fue ponerse blancos y ver
con horros nuestras miradas de tontos calientes. Luego, mientras Francisco
segu�a entre blanco y verde, Chucho tom� algo de aplomo y nos llam� con un
adem�n, sin quitarse de donde estaba, sin vestirse� ni siquiera sali�ndose del
culo del otro.



�Qu� tanto vieron much�?


Pueeesssss� � David se encogi� de hombros, en realidad no
sab�amos ni qu� hab�amos visto.


�Qu� le estabas haciendo a Francisco? � pregunt�, siempre
fui m�s desenvuelto.


Me lo estaba cogiendo�


�Qu�?


�C�mo? � David y yo nos quedamos con cara de interrogaci�n,
seg�n sab�amos eso solo se hac�a con una mujer.


�Qu� eso no se hace con mujeres? � pregunt�, se los dije.


Pero tambi�n con hombres que parezcan mujeres� como el
"Piojo", el parece ni�a. � Piojo le dec�amos a nuestro amigo � Piojo, �verdad
que te gust�? � aun muy chiviado y rojo como un tomate, nos contest� que si �
�Ustedes 2 no quieren probar?�


�Nosotros no parecemos ni�as!


Todos los de su edad parecen ni�as� nosotros, los m�s
grandes, as� los vemos y los podemos usar de esa manera. Miren, ustedes no se
preocupen, les va a gustar mucho. Adem�s, yo no voy a decir nada� si ustedes
no dicen nada tampoco, claro. �Qu� dicen?


Mmmmm� vaya, pero solo si gozamos como goz� el Piojo.


Mejor no, � dijo David, quien siempre era el m�s prudente �
no s� a mi no me gusta la idea.


Metete mano, solo una vez, y si no te gusta, no lo volv�s a
hacer y ya.




Total, el Chucho termin� convenciendo a David de hacerlo.
Quedamos para el d�a siguiente en su casa, por la tarde, cuando no hubiera
nadie. Y, claro, no le pod�amos decir a nadie de eso, ni hablar de lo que
acab�bamos de ver. Pero eso se los cuento m�s adelante.



Mientras pueden mandarme sus comentarios al correo
electr�nico de mi hermana, ella insiste en que los quiere leer tambi�n. Supongo
que ya lo tienen, si no, aqu� se los pongo:
POR CUESTIONES DE PRIVACIDAD ESTE EMAIL FUE REMOVIDO.



Continuar�



Garganta de Cuero.


Por favor vota el relato. Su autor estara encantado de recibir tu voto .


Número de votos: 1
Media de votos: 1.00


Si te gusta la web pulsa +1 y me gusta






Relato: Esclavo de la Carne (01)
Leida: 633veces
Tiempo de lectura: 10minuto/s





Participa en la web
Envia tu relato







Contacto
Categorias
- Amor filial
- Autosatisfacci�n
- Bisexuales
- Confesiones
- Control Mental
- Dominaci�n
- Entrevistas / Info
- Erotismo y Amor
- Fantas�as Er�ticas
- Fetichismo
- Gays
- Grandes Relatos
- Grandes Series
- Hetero: General
- Hetero: Infidelidad
- Hetero: Primera vez
- Intercambios
- Interracial
- L�sbicos
- MicroRelatos
- No Consentido
- Org�as
- Parodias
- Poes�a Er�tica
- Sadomaso
- Sexo Anal
- Sexo con maduras
- Sexo con maduros
- Sexo Oral
- Sexo Virtual
- Textos de risa
- Transexuales
- Trios
- Voyerismo
- Zoofilia


Encuestas

Afiliados



























- Entra ya !!


y




relatos sexo anal con suegrasRelato sexo madre hija lesbirelatos eroticos mi primera corridavideos porno relatos mi fantasia coger a mi primaLas nalgotas de mi sobrina relatos realescapataz historias xxx gayporno relatos chantaje gangbang esposarelato follando mi nietamisrelatosporno.com los amigos de papami hijo me rompio el culo su vergon relatossexo fuerte pornomamapornogratiencontre al sobrino que era todo un putito relato gayrelato el esposo de mi tiaRelatos clitoris lesbicos grandesrelatos amor filial xxxrelatos eroticos mi mujer en mini y tanguitarelatos eroticos de insestopsiho-logik.ru el taxista pervertidomi hijita de 9 añitos relatorelatos el y yo en baby dollRelatos de sexo no consentido con misioneras americanasRelato porno con la cuñadarelatos eroticos mi hija y yorrelato de como mi mama follandoIncesto con la abuela relatadosrelatos porno mi nieta de 5relatos erotocod de gay ranchero en el camporelato erotico sexoel culito de mama bdlol.ru/relatoRelatos gays toda una hembritaMisrelatosporno nietarelatos porno gay curas y monaguillosrelato erotico con mi nietaIncesto con la abuela relatadoscarnaval brasil pornorelatos heroticos con pantississy relato leche macho prenarRelatos gays pepe el culohistorias eroticas lesbianas monjasrelatos sexuales de mis hijas y mi esposarelatos de amor filial mi hijita me toca la verga cuando me duermoRelato desvirgue a mi hermana menorrelatos porno madura vecinarelatos xxx mis hijas y el sexo 1 2 3 4Relatos de incesto follando a mí hijarelatos porno me coji a mi hijatrio esposa amigorelatos eroticos bdlol.ru familia nudistahistorias sexo conserje sexole rompi el culito a un nene de 9 añitos relatos gayIncesto con la abuela relatadosincestorelatosrelatos hot tia gordisrelatoporno solo con mis hijastracogiendo a mí relatosmiinaudita vida insestuosa 13 xxxwww.de relatos de sexo,incesto y amorfilialLa.ciega.puta.relatolos amigos de papa relatosporno relatos hija adoptiva chinahistorias porno gratisprelatos porno 9Relato Pornos De Dominacion A Chicos TodoRelatorelatos de esposas q aceptaron hacer un trio hmhvideo relato eroticovenezuela pornsexo porno travestisRelatos eroticos gay entre hermanosRelatos eroticos de incestopapi chúpame caramelo relatoRelatos porno peque�a de 7Los amigos de mi esposo me encularon relatospor una apuesta relato eroticorelatos me follaron por todos mis agujerosRelatos taboo mi papá me da su lechitafollando con papa y mama relato